El auge de la expansión europea, tuvo un papel destacado los avances científicos tecnológicos.
En el 1453 por los turcos, se produjo paralelamente con la aparición de grandes inventos
científicos que produjeron las bases técnicas para los viajes marítimos.
Con el invento de la brújula y el astrolabio, antiguo instrumento para observar los astros; los
marineros podían navegar lejos de la costa sin temor a extraviarse pero además fueron
construidos nuevos topos de barcos, fundamentalmente embarcaciones a velas, más livianas y
fe fácil manipulación, llamadas carabelas.
La utilización de la pólvora, fue otro invento tecnológico que contribuyo notablemente a las
expediciones ultramarinas de los europeos. Su utilización en armas de fuego, fue sumamente
favorable para los expedicionarios europeos.
Las expediciones marítimas de Europa en los siglos XIV y XV, estuvieron monopolizados por
España y Portugal, las cuales estaban en condiciones de lanzarse a una política de expansión
colonialista y de preparar grandes expediciones ultramarinas.
A partir de la toma de Constantinopla por los turcos en el 1453, los portugueses profundizaron
sus esfuerzos para llegar al oriente, bordeando las costas africanas.
Continuando la ruta de Bartolomé Díaz, otro gran marinero vasco de gama llego al cabo de
Buena Esperanza cruzo el océano Índico y arribo a la Costa de la India, en el 1498. En esas
regiones africanas los portugueses iniciaron la colonización y el saqueo de sus riquezas,
desalojando a los comerciantes árabes.
Los españoles también tenían experiencia de colonización en las islas Canarias. La verdad es que
los reinos de la península ibérica, a finales del siglo XV poseían un fuerte afán de expansión
colonialista, impulsado por la triunfante guerra de reconquista, librada contra los moros que
condujo a finales del año 1492.