novimiente cionada argieron ina,” movi jeres, a partir adre y ama de ca Eas cl ferninismo latinoamericano Re riales y culturales no tensionadas habian Ba cin preferencial de la pertenencia genérica ce { y 55 no pertenecian al contexto feminista. Argu i entar | feminismo no debiera diluirse entre movi s mientos sociales ~generalmente de liderazgo masculino- que a a. pesar de cor = mayoritariamente por mujeres no reflejaban me demandas especificamente genéricas. Segiin esta Perspechils el tena 4 vninismo deberfa ocuparse de la creacién de una cultura fement «, alternativa, desde una propuesta de relaciones genéri as iguali worl tarias sustentada en el reconocimiento de las diferencias y descan: paces serene sindose politicamente en demandas que coneret amente se dirijan oe » ala problemdtica de género femenino: demandas como el dere Tho a decidir sobre el uso del propio cuerpo en termines TT paren n juctives y sexuales, la problemitica de le violene doméstica y re Ja erradicacién de las enumerables instancias de desigualdad nanan tetwepetase sexual (Saporta Sternbach, ef.l.:1994 99 en Ledn) fs uoncamerianas de nquarda de la Sin embargo, otras tendencias feministas reconocieron la de mujeres en si, Sora, o Quads en lt memoria cOmprender su relacién con la problematica de género y aportar Sasha al desarrollo de una conciencia para s{ como mulese En tal es sentido, Ledn (1994:20) afirma: "Una parte del reto feminista ee ‘ido transformar procesos de conciencia de las mufX% desde las diferentes subjetividades, en concienci® de género." Durante la segunda mitad de la década de los afios ochenta, @ través del traba- jo de las integrantes de organismos n° gubernamentales (ONG) ‘ce deo que setoa importancia de acercarse a los movimientoscon las pocas dirigentes femeninas de lag asociad : establecieron talleres, cursillos, espa feministas y Wes de discusién, seminarios, congreso! foros y proyectos es. secializados de capacitacionien dichas organizaciones. Se en. ean a mmunes de exploracién personal ¢ contraron 4 istas de derechos humanos, interc ambio, las fe ag ee politicas formales y las amas de las mujeres de ini een comunital 1 particular, del movi es So aem popular. De tal forma,(la mezcla de las necesida aa a pdasde género, clase, dete 10s humanos y democracia y demmaiblica remolded cl feminsimo inicial acoplindose a vealidades latinoamericanas] En este sentido, comparto n Ledn) cuando sefala que sreciacion de Varga wimientos en sf y para si de mujeres también de notorias y dolorosas el encuentro entre los m sroceso de confluencias, per proce s— ha sido el apor cano més sustan latinoame contradiccion la autonomia ¢ interrela incias para y en s{~de organizacin and no cioso al feminis' cidén de estas mule nina, han servido de materia p ategoria misma de género y de la ima para la reconceptualiza femer nericana de la c ue de ella se desprende, problematizando cién latin perspectiva de andlisis q la posibilidad de transformacién genérica desde los roles y con lios tradicionales del sujeto femenino en América Latina, y Ja construccién de un proyecto t marcando como el reto ala par con el género, inc 1994:22). n significativa de otras posicio: nd mayor ; “a apes politico que, Juya las revindicaciones de clase, raza y etnia” (Leén De esta manera, la incidencia tan lentidad de género, la paulatina concien- nes-de-sujeto sobre la idi tigacién de las mujeres latinoamericanas sobre su condicién sexual, por lo general no se ha realizad minismo clésico, el feminismo emanado de la pertenencia pref rencial genérica. En este sentido, resalta la relacion entre la parti- cipacién femenina en movimientos sociales no relacionados directamente con la problematica de género y conflictos género- relacionados con otros miembros de la familia, a causa de la propia participacién sociopolitica de la mujer. Lo sugerente del vinculo entre la participacién femenina en organizaciones no género-especificas y conflictos familiares relacionados con género ~particularmente conflictos de pareja—, se encuentra en la disrup- cién del funcionamiento de la rutina hogarefia y en la consiguien- te sacudida alas tradicionales relaciones genéricas. De tal manera, i fess. pitiless y politicos en razon de su papel tradicio- 10 -implicito en la participacién en las organizaciones Jo dentro de los referentes del fe- 70tentificacién ur ‘ mening Sél ndo el cimulo de experiencia orpg ti encial de las mujeres latinoamericanas ford 4 cone) \ fea A. b soataia len geet ner u co te influencia en el p 0 onsiderarse desd: perspectiva de génerd, Y como lo he me do largo de este wabajo, desde dict . tsp le desaparecidos abren multiples posi bilidades d f ion, posibilidades que en el presente texto mita lematizacién de las siguientes Areas: 1) la ntida tr relacién con la categorfa de géneto; 2) I ansformaciones histéricas del personaje materno =vigt, de los mito: ‘om 1edio de analisis de los contenido: ‘quetipicos de la figura de la madre; 3) el significado del actuar niblico y politico de las madres de desaparecidos(as) en cuanto a la resignificacién de la identidad materna en América Latina 4) la viabilidad de la interpretacién del actuar colectivo de la Madre del Desaparecido como la constitucién de un nuevo mito naterno en América | 1 Para mf lo m lo de los tiltimos afios ha sido mantener ni familia unida en torno a la lucha, porque todas luchan en la medida de sus posibilidades. Y gracias a esa unidad de lucha en la familia se ha podido mantener el comité unido a pesar de todos los malos intentos del gobierno por dividirlo, Afortunada nente estos lazos hermosos que han nacido entre todas las madres del comité han impedido que se puedan dar esos designios ne gros. Lo importante de todo es que hemos tenido logros,hemos encontrado en una década 148 desaparecidos y eso, les guste 0 no les guste, es un factor de unidad) Eso ha sido de las mejores osas de esta lucha y{la amnistia de 1978, donde salieron casi dos | presos politicos, donde cesaron miles de ordenes de aprehen sion, el regreso de 57 exiliados. Pero sobre todo, lo bello de ha ber sembrado en la conciencia del pueblo mexicano la semilla de saber que podemos hacer lo que queramos, el dia que to nemos conciencia de nuestro valor, de lo que significamos unidos en torno a nuestros derechos," (Presidenta del Comité Eureka, 70 afios, viuda, un hijo desaparecido en 1975)