Estos restos en descomposición, que luego van a formar el carbón mineral, empiezan a ser
cubiertos por depósitos arcillosos y de esta manera el proceso anaeróbico se potenciará.
Estas capas arcillosas y con restos vegetales se cubren por otras rocas sedimentarias y comienza
un proceso denominado carbonización. Los movimientos de las placas tectónicas, la presión de
las rocas sedimentarias y el aumento de la temperatura comienzan a provocar transformaciones
físicas y químicas de estos restos vegetales.
Los mantos son de gran extensión y llegan a alcanzar profundidades de hasta 1,200 metros. Sus
espesores son muy variables y pueden ir desde unos cuantos centímetros hasta 100 metros. En
México llegan a tener un espesor máximo de 3 metros.
PRINCIPALES TIPOS DE CARBÓN
Carbón lignítico: de color pardo, con poco poder calórico.
La turba es material orgánico. Su color es amarillento pardo o negro. Se puede decir que la turba
es la primera parte de la transformación de los vegetales en carbón y la presencia de carbono
es escasa, no supera el 60%. Es un combustible de baja calidad y de poco efecto calórico.
Luego de la turba, le sigue el lignito. Algo más rico en carbono, pero con una alta presencia de
agua, lo que lo convierte en un mal combustible. Es de color negro o pardo muy oscuro y de
consistencia leñosa. A pesar de su baja combustibilidad, el lignito es utilizado aún en algunas
centrales térmicas.
La hulla es una de las clasificaciones que recibe el carbón mineral de mayor capacidad de
combustión. Esto se debe a la mayor presencia de carbono que va desde un 75% a un 90%. El
resto de los elementos volátiles constituyen un 20%, aproximadamente, con una importante
presencia de azufre que lo convierte en un combustible contaminante. Fue muy utilizado en la
industria siderúrgica, pero fue paulatinamente reemplazado por el petróleo y el gas natural. Se
utiliza actualmente en algunas centrales térmicas.
Por último, tenemos la antracita, el carbón de mejor calidad, poco contaminante debido a su
alta presencia de carbono y bajo porcentual de cenizas y material volátil. Es de color negro
brillante y extrema dureza.
APLICACIONES Y USOS DEL CARBÓN
En la actualidad, el carbón representa el 25% de la energía que se consume en el mundo. Este
porcentaje es superado sólo por el petróleo.
La generación eléctrica es el principal uso que recibe el carbón mineral. Para ello se utiliza el
pulverizado, aunque debido a las emanaciones de gases contaminante, está siendo reemplazado
por otros combustibles.
El coque es un producto que se deriva de la pirolisis del carbón. Se lo utiliza como combustible
y reductor en distintas industrias. Su uso en los altos hornos siderúrgicos da como resultado que
los 2/3 del acero mundial que se produce, utilice coque de carbón.
Su mezcla con hierro da como resultado una mezcla en la que el hierro resulta enriquecido por
el carbón, obteniendo mayor elasticidad y resistencia. El acero es un hierro enriquecido con un
1,2% de carbón.
La producción mundial de carbón tiene a China como su principal actor. Con un 49% de la
producción mundial, el país asiático lidera el mercado, seguido por los Estados Unidos con el
14%. Casi 8 mil millones de toneladas de carbón son producidas anualmente y se calcula que
existen reservas para unos 110 años
EMÉTODOS PARA LA EXPLOTACIÓN DEL CARBÓN
Los más utilizados son:
Tajos: este tipo de minado se utiliza en México para recuperar el combustible hasta una
profundidad máxima de 50 metros. Consiste en retirar el material estéril para recuperar el
carbón.
Minas subterráneas: son utilizadas para recuperar el carbón a profundidades de hasta 300
metros. En el proceso, se emplean rampas que van desde la superficie hasta llegar al manto.
Una vez cortado el carbón es trasladado al exterior a través de bandas. Los desarrollos mineros
sobre el manto de carbón, llegan alcanzar varios kilómetros de longitud.
Pozos: sistema rudimentario que consiste en un pozo vertical de aproximadamente dos metros
de diámetro y profundidades de 30 hasta 70 metros.