Al ser una celebración de carácter universal, el Carnaval jamás pudo ser erradicado
de la ciudad, pero sí terminó desvirtuado en varios sentidos, descritos más adelante.
Cabe destacar, eso sí, la similitud existente entre las expresiones artísticas y
tradiciones locales del Carnaval en el sur del Perú, el oeste de Bolivia, el noroeste de
la Argentina y el Norte Grande de Chile.
Consolidado ya como el evento más importante y llamativo del verano ariqueño, cada
año el Carnaval Andino congrega a un público que ya supera los 100.000
espectadores y sigue en aumento con los años, posicionando a Arica como cuadro
titular de la agenda turística nacional e internacional.
Al evento le dan vida un número creciente de fraternidades (59 al año 2014), las
cuales con facilidad superan los 100 bailarines cada una, las cuales le dan expresión
a diversos ritmos andinos que se han expandido desde Bolivia, ritmos locales
presentados por las comunidades del interior de la Región de Arica y Parinacota,
ritmos afroamericanos a cargo de sus comunidades descendientes y algunos ritmos
invitados que han escapado del espectro andino, pero que han aportado con la
diversidad a la fiesta. Cada fraternidad elige a una Ñusta, cuya denominación
proviene de la palabra quechua con la que se designaba a las princesas en los
tiempos del Inca.
Morenada: Esta danza tiene su origen en la época de la colonia, cuando los negros
eran utilizados como esclavos en las arduas tareas de las minas. Es la representación
que satiriza los bailes de las cortes virreinales y, además, reedita la esclavitud de los
negros bajo el dominio español, donde el caporal representa a los capataces negros
que vigilaban a los esclavos en un sistema de explotación inhumana y el compás
marcado con sus matracas nos recuerda sus cadenas y grilletes.
Tinku: En la macrozona andina Tinku es sinónimo de “el lugar donde todas las
diferencias son un encuentro”. El Tinku define la tradicional danza de ambientes
guerreros que se realiza en el norte de Potosí y sur de Oruro, siendo una danza
reciente y tradicional, que como baile significa indígenas frente a frente comparando
fuerzas.
Tumba: Danza propia de los afrodescendientes que habitan el valle de Azapa, traídos
hace 400 años por los españoles para trabajar como esclavos.
Saya: Baile propio de los Afro bolivianos, del sector de Los Yungas, antiguamente
marginalizado y que solo se podía bailar con los permisos de los patrones en el
interior de sus tierras, hoy se ha convertido en un gran suceso social, en un gran
fenómeno que convoca a muchos y muchas.
Zampoñada: A simple vista, hombres que van tocando la zampoña, cuyo significado
va mucho más allá de lo que pareciera. Cada uno toca una melodía diferente y de
esta forma se van complementando. Siempre de a dos, reflejando la verdadera
esencia de lo que es la Cosmovisión Andina, complementariedad, dualidad, diversidad
y armonía, concepto difícil de dar a entender teniendo simplemente como concepto
este conjunto de palabras.
Waca Wacas: Danza que posee su origen en la época Colonial que se caracteriza por
que los bailarines ubican en su cintura una reproducción de un toro, a veces una vaca,
acompañado de otro danzante que sería el torero y acompañando esto muchas
mujeres vestidas con grandes polleras. En este baile resulta irónica la muerte del
torero finalmente, quizás resulta ser uno de los momentos más irónicos de este baile.
Suri Sicuris: Se identifica con el avestruz, por lo que se denomina “suri”, voz aymara
del mismo significado. Representa esencialmente al hombre altiplánico que ejecuta la
música con un instrumento típico de nombre Sicu, que a través de la danza muestra
aspectos referidos al carácter étnico y folclórico. Al ritmo de huaynos, con
desplazamientos de danza de ballet este baile estiliza los movimientos propios de la
danza autóctona.
Año a año el número agrupaciones participantes en el Carnaval con la Fuerza del Sol
va en aumento. Si bien los bailes mencionados anteriormente han permanecido en el
tiempo también se han presentado agrupaciones que muestran las Llameradas, Suri
Sikuris, Pujllay, Kullaguadas y Moceñadas, además de Danzas Invitadas y Propias de
localidades altiplánicas de Bolivia, y otras zonas de Chile.
Arica: Esta ciudad está situada a 2.062 km de Santiago, capital de Chile. Es la ciudad
de entrada al país en su frontera norte. Presenta el encuentro de tres países hasta el
río Loa, el más largo de Chile. Limita con Perú y Bolivia. Para acceder a Arica desde
la capital chilena, hay buses y aerolíneas que tienen viajes diarios en diversos
horarios. Su carretera está en excelente estado. La ciudad está presidida por un
imponente cabo, el Morro de Arica, que fue importante escenario durante la Guerra
del Pacífico. La ciudad posee espléndidas playas y un agradable clima templado. Su
comercio ofrece de todo al turista. Hay muchos paseos que se pueden realizar por el
día, destacando entre ellos la ida al valle de Azapa, que ofrece frutas exóticas y las
mejores aceitunas, dado a su excelente microclima, de cuyas bondades da cuenta su
variada y exquisita producción agrícola.