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ECOTURISMO.

El ecoturismo, según algunos analistas, ha sido relacionado frecuentemente con el turismo de


aventura, el cual, en la mayoría de los casos ha sido utilizado para designar actividades de índole
ecológica, que en ocasiones han permitido llamar la atención de las personas que aspiran a
practicar una verdadera actividad ecoturística. Esta situación hace del ecoturismo una forma más
del turismo masivo corriente, desvirtuando su esencia, así como los objetivos y beneficios que
ofrece a las comunidades, in situ, o aledañas a las áreas protegidas y a los turistas, al igual que a
la conservación de los recursos naturales y a la protección ambiental.
Por esta razón, a manera de ilustración, se presentan los aspectos que el ecólogo norteamericano
George Wallace (1992), consideró como fundamentales para identificar y rubricar lo que es, en
sí, el ecoturismo:
1. Lograr que las áreas naturales sean percibidas tanto como “un hogar para todos nosotros”, en
un sentido planetario y “un hogar para los residentes locales en su significado específico”.
2. Permitir minimizar los impactos negativos tanto en el medio ambiente natural como en los
habitantes locales.
3. Contribuir a la gestión de las áreas protegidas y a mejorar los vínculos entre las comunidades
locales y los administradores de dichas áreas protegidas.
4. Propiciar beneficios económicos y de otra índole para los habitantes del lugar y maximizar su
participación en el proceso decisorio que determina el tipo y la cantidad de turismo que debe
ocurrir.
5. Promover una auténtica interacción entre visitantes y anfitriones, así como un interés genuino
en el desarrollo sostenible y la protección de áreas naturales tanto en el país que se visita como
en el país de origen del turista.
6. Suplementar o complementar prácticas tradicionales como agricultura, ganadería, pesca,
sistemas sociales y otras (alternativa de trabajo y complemento de dichas actividades), sin
marginarlas o intentar reemplazarlas, fortaleciendo de esta manera la economía local al hacerla
menos susceptible a cambios bruscos internos y externos.
7. Ofrecer oportunidades especiales para que los habitantes locales y los empleados de agencias
turísticas, también utilicen de manera sostenible las áreas naturales y aprender más sobre los
atractivos ecoturísticos que ofrecen a los visitantes.
Examinada la situación del ecoturismo respecto de las diferentes interpretaciones y aplicaciones
que de él se viene haciendo, algunas erróneas, quizá por falta de conocimiento sobre el tema, o
por conveniencia; y haber presentado los aspectos que complementan y corroboran desde la
ecología los postulados del ecoturismo, se hará en este capítulo una aproximación al Ecoturismo
general y comunitario como elemento de análisis de la propuesta alternativa de trabajo para las
comunidades rurales y suburbanas, enfatizando en las distintas formas como estas comunidades
pueden participar en los proyectos ecoturísticos desarrollados en las áreas naturales oficiales,
mixtas o privadas de sus localidades y/o regiones.
ECOTURISMO, ORIGEN Y DEFINICIONES
El término “ecoturismo” fue definido inicialmente en la Conferencia de las Naciones Unidas
para el Medio Ambiente Humano celebrada en Estocolmo en 1972, allí Maurice Strong presentó
a la luz pública el término Eco-desarrollo. Pero fue el arquitecto mexicano Héctor Ceballos
Lascuráin quien en 1983 creó el término y los conceptos básicos del Ecoturismo, los cuales han
sido reconocidos por las autoridades del turismo mundial (OMT), las Naciones Unidas (ONU), la
Unión Mundial para la Naturaleza (UICN), el Congreso de Expertos de la Naturaleza (AJEST),
así como por diferentes escritores.
El ecoturismo debe tener una planificación, una gestión y una promoción integral, de modo que
las actividades económicas y recreativas tengan como objetivo la búsqueda de la conservación de
los valores naturales, culturales y el desarrollo sostenible de las comunidades rurales y
suburbanas. Para identificar el ecoturismo es necesario tener en cuenta que tiene unos atractivos
concretos (focales, complementarios y de apoyo), basados en la naturaleza silvestre no
disturbada o poco disturbada y las culturas del pasado y/o del presente; unos turistas
generalmente de clase media y alta que se han interesado por el conocimiento de la naturaleza y
las culturas rurales y suburbanas como una forma de alteridad a los espacios del turismo masivo
y hallazgo de tranquilidad respecto de la agitada vida citadina, que reciben información e
ilustración previa respecto de las áreas naturales que desean visitar y, por otra parte la diferencia
de intereses relacionados con el objetivo del desplazamiento turístico (Garay, 2005).
Ecoturismo comunitario
El Ecoturismo Comunitario tiene como postulado fundamental, la conservación de la
biodiversidad para el beneficio de las comunidades y pueblos locales. Ha sido definido por las
comunidades de Villa Amboró, Volcanes e Isama (Bolivia) como una actividad responsable y
organizada que permite dar a conocer a todas la s personas (guías, turistas, habitantes de la
comunidad, etc.) la biodiversidad del medio ambiente que les rodea, conservarlo y beneficiarse
de él. Según WWF, el ecoturismo comunitario es un tipo de ecoturismo en el que la comunidad
local tiene un control sustancial sobre las actividades turísticas que se generan participando en su
desarrollo y manejo. Una importante proporción de los beneficios se quedan en la comunidad
(WWF, 2001). Para el Arq. Jorge Antonio Gutiérrez, el ecoturismo comunitario es una actividad
cuya planificación y gestión económica, social y física se realiza con y para las comunidades
locales contribuyendo a la conservación de los recursos naturales y a la integridad de la cultura
de las mismas, promoviendo en los residentes y visitantes el respeto del patrimonio cultural,
aumentando continuamente la sensibilización política, económica y ambiental de los beneficios y
ventajas de la preservación y sostenibilidad de los recursos turísticos. El término Ecoturismo
Comunitario tiene una dimensión social según la WWF. Es un tipo de ecoturismo que se ha
venido desarrollando desde principios de la década de los noventa en países como Costa Rica,
México, Chile, Argentina, Bolivia, Ecuador, Colombia entre otros. En esta clase de turismo la
comunidad local hace presencia directa controlando la gestión, el desarrollo y manejo de las
actividades ecoturísticas a través de organizaciones comunales tradicionales y modernas como
las Cooperativas Agrícolas y autogestionarias, que al actuar con visión empresarial, responsable
y competitiva, permiten que sea rentable para la comunidad.
Además, presenta los requisitos previos para hacer ecoturismo comunitario así:
a) Paisaje o vida silvestre que tengan un atractivo inherente o un grado de interés suficiente para
atraer tanto a especialistas como a visitantes en general.
b) Ecosistemas que sean capaces de absorber un número manejable de visitantes sin sufrir daño.
c) Una comunidad local que esté consciente de las oportunidades, los retos y los cambios
potenciales envueltos y que esté interesada en recibir visitantes.
d) Estructuras existentes o potenciales para que la comunidad pueda efectivamente tomar
decisiones.
e) Inexistencia de peligros evidentes para la cultura y las tradiciones indígenas.
f) Evaluación inicial de mercado que determine la existencia de una demanda potencial y un
medio eficaz de acceder a ella, y la inexistencia de una oferta excesiva de turistas en el área.

VENTAJAS DEL ECOTURISMO


Entre estas ventajas están:
a) Se puede realizar todo el año en aquellos países de estaciones y servir para mitigar las bajas
del turismo masivo en las estaciones difíciles como el invierno.
b) En los países intertropicales, donde existen los pisos térmicos, se puede practicar todo el año
de manera continua.
c) No necesita de grandes infraestructuras para el alojamiento de los ecoturistas.
d) Es factible de desarrollar a bajos costos, mediante la aplicación de factores asociados como
son los clusters, microclusters y las cadenas productivas que permiten elaborar programas de
ecoturismo de calidad aprovechando las ventajas comparativas de la economía de escala.
e) Puede ser practicado por personas de todas las edades, salvo casos especiales como el de
aquellas personas de edades muy avanzadas o enfermedades crónicas.
f) La ubicuidad, dado que el ecoturismo se basa en los recursos naturales y culturales del pasado
y del presente, utilizando atractivos que a la vez que lo identifican lo diferencia de las demás
tipologías del turismo.
ATRACTIVOS ECOTURÍSTICOS Y SU CLASIFICACIÓN
Los atractivos ecoturísticos de un área natural se clasifican en tres categorías básicas: focales,
complementarios y de apoyo. Los dos primeros pueden ser existentes o potenciales y los terceros
siempre serán reales
Atractivos focales
Estos atractivos siempre se referirán a los elementos distintivos de patrimonio natural y/o
cultural que se encuentren en un área o región determinada. Son aquellos rasgos intrínsecos de
singularidad que mejor caracterizan a dichas áreas o regiones y el motivo fundamental por el
cual los ecoturistas se interesan en visitarlas. En algunos casos se pueden encontrar
simultáneamente atractivos focales tanto naturales como culturales; por ejemplo en la Sierra
Nevada de Santa Marta, que presenta la riqueza natural y también las ruinas arqueológicas de
Ciudad Perdida o Buritaca 200.
Atractivos complementarios
Igualmente se refieren a elementos del patrimonio naturales y/o culturales que se encuentran en
un área determinada, pero que no poseen el grado de importancia o singularidad en cuanto a
atracción turística de los atractivos focales. Por sí solos no ejercerían suficiente atractivo para
motivar a un ecoturista a desplazarse a esa área, pero si son utilizados como motivo de interés
adicional y valor agregado para los visitantes, pueden constituirse en una experiencia ecoturística
de mayor riqueza y diversidad e inducir a los turistas a permanecer mayor tiempo en el área
motivo de visita, al ofrecerle la posibilidad de actividades adicionales.
Atractivos de apoyo
Los constituyen los elementos artificiales (instalaciones y servicios) que proporcionan al
visitante diferentes satisfactores. Comprende alojamientos, restaurantes, centros de
interpretación, senderos y miradores, servicios de paseo a caballo o en lancha, etc. Estos
atractivos siempre se agregan al final para dar soporte a los atractivos focales y complementarios
que ya existen por la naturaleza del lugar y son siempre reales, es decir, existen de manera
tangible. Los atractivos ecoturísticos deben ser inventariados. Todo inventario debe ser tan
completo y detallado como sea posible y deberá realizarse de manera sistemática y categorizada.
El inventario ecoturístico debe entenderse como una descripción ordenada y calificada de
aquellos elementos que constituyen las principales atracciones y objetos de interés para los
ecoturistas, como son: nombre y categoría del área, localización geográfica incluyendo un
croquis con sus coordenadas geográficas, superficie del área en hectáreas, medios de acceso a los
puntos de entrada, circulación interna, el paisaje, climatología, índices de confort, atractivos
ecoturísticos naturales, atractivos ecoturísticos culturales y atractivos ecoturísticos de apoyo
(Ceballos.1996) . Teniendo en cuenta que el formato para el inventario presentado por Ceballos,
obedece a países de zonas templadas y altas del planeta, para los países intertropicales han sido
agregados unos ítems correspondientes a los fenómenos geográficos, como son los pisos
térmicos o bioclimáticos y todo lo que de éstos se deriva.
1. El ecoturismo se caracteriza por ser un proceso multisectorial y transdisciplinario.
2. Se desarrolla en zonas rurales y suburbanas en espacios protegidos oficiales, mixtos y
privados.
4. Ayuda al desarrollo de las precarias economías rurales especialmente en zonas deprimidas.
5. Produce un bajo impacto ambiental, porque cuida la naturaleza y la población local.
6. Es una alternativa de trabajo y complemento a las actividades económicas tradicionales de las
comunidades rurales y suburbanas, in situ o aledañas a las áreas protegidas.
OBJETIVOS GENERALES DEL ECOTURISMO
1. Proporcionar recursos financieros a las comunidades rurales y suburbanas, que contribuya a la
solución de sus necesidades tanto materiales como culturales.
2. Propiciar el encuentro de culturas, para establecer un diálogo de saberes que conduzca a la
elaboración de un programa de educación ambiental mancomunadamente concebido, pertinente a
la región y/o país y que logre interesar a las comunidades a participar efectivamente en el
desarrollo del ecoturismo.
3. Ofrecer nuevas y diversas actividades alternativas a las tradicionales en las comunidades (sin
sustituirlas), sino que las refuerce, las cuantifique y las cualifique continuamente.
4. Facilitar la movilidad social, económica, cultural y política de las comunidades rurales y
suburbanas, con base en el flujo y reflujo de los miembros de dichas comunidades, entre las
actividades del ecoturismo y las tradicionales, para así lograr el desarrollo sostenible tanto de
estas comunidades como del ecoturismo.
5. Establecer compromisos y responsabilidades entre autoridades gubernamentales, nacionales,
regionales y locales; autoridades del turismo, empresas de viajes promotoras del ecoturismo,
comunidades rurales y suburbanas, turistas de la naturaleza, ONGS y en general todas las
empresas y personas involucradas en las actividades del ecoturismo.
6. Propender porque las actividades ecoturísticas desarrolladas en áreas protegidas, pequeñas,
medianas o grandes propiedades, sean ambientalmente responsables y no excedan el límite de
cambio aceptable (LCA).
BENEFICIOS DEL ECOTURISMO
1. Permitir la conservación del medio ambiente, los recursos naturales y culturales del pasado y
del presente.
2. Mejorar las condiciones de vida de las poblaciones rurales y suburbanas.
3. Promover el desarrollo humano, económico sostenible o sustentable.
4. Generar empleo y conservar las tradiciones culturales.
5. Descubrir, por parte de anfitriones y visitantes, la realidad tanto natural como cultural de la
región.
6. Permitir el diseño y la organización de los equipamientos ecoturísticos acorde con las
condiciones ambientales, socioeconómicas y culturales de la región.
EL SISTEMA DE PARQUES NATURALES
El sistema de áreas protegidas se originó en los Estados Unidos de Norte América hacia
mediados del siglo XIX, cuando la fiebre del oro en el oeste del país estaba arrasando con los
recursos naturales que los buscadores del precioso metal encontraban a su paso, razón por la cual
el gobierno de este país decidió proteger aquellas áreas naturales que encerraban elementos
geológicos excepcionales, flora, fauna y poblaciones aborígenes con sus culturas, creando el
primer parque natural del mundo el “Yellow Stone“, en el Estado de Wyoming. Posterior a la
Segunda Guerra Mundial, debido a la utilización indiscriminada de los recursos naturales en la
industria, fue necesario continuar su protección mediante el establecimiento de sistemas de
reservas, que las Naciones Unidas ha avalado, a tal punto que en la actualidad existen en el
planeta alrededor de 100.000 áreas protegidas, de las cuales muy pocas benefician a las
comunidades que las habitan. Según el Banco Mundial sólo 25% de las áreas protegidas de los
parques nacionales del mundo reciben un manejo adecuado.
En la actualidad los ecosistemas marinos y terrestres de gran importancia biológica por la
presencia de diversidad de especies y hábitat han sido incluidos en la categoría de parques
nacionales, paisajes, reservas o monumentos naturales consagrados particularmente a la
protección del patrimonio biológico.
El concepto de “Área protegida”, también ha cambiado, pues según la Comisión Mundial de
Áreas Protegidas (V Congreso Mundial de Parques, en Durban Los parques nacionales y otras
áreas protegidas han representado uno de los mecanismos más importantes de conservación de la
biodiversidad a escala mundial; siendo el instrumento más utilizado para asegurar la
conservación del patrimonio biológico y ecológico en los países del mundo (Segundo Congreso
Latinoamericano de Parques Nacionales y Áreas Protegidas, 2007).
Las áreas naturales protegidas oficiales, mixtas o privadas, en que se desarrolla el ecoturismo
actualmente, o las que posteriormente sean habilitadas por los gobiernos, conformarán la primera
fase del desarrollo sistémico ecoturístico regional (fase dinamizadora), o, centros gravitacionales
naturales, que irradiarán el ecoturismo, hacia las demás fases del modelo mediante la
conformación de nodos representados en aldeas, poblaciones y pequeñas ciudades ordenadas en
factores asociados, donde debe llegar la influencia de la experiencia ecoturística de dichos
sistemas. Sudáfrica, 2007), “un área protegida, es aquella cuyos territorios son considerados
como reservas de uso sostenible y áreas naturales silvestres

ECOTURISMO EN COLOMBIA.
Ecoturismo y normatividad
En Colombia la práctica del ecoturismo es nueva, se considera que apareció a mediados de los 80
cuando el presidente Belisario Betancur, a través del hoy desaparecido Instituto Nacional de
Recursos Naturales Nacionales no Renovables (Inderena), hizo entrega simbólicamente de los
Parques Nacionales Naturales a los colombianos. El proceso de desarrollo inició su
consolidación en el gobierno del presidente Virgilio Barco, en el cual se construyeron los
primeros centros de visitantes. El ecoturismo en Colombia hoy se rige por la Ley general del
turismo (300 de 1996, en sus artículos 26, 27, 28, 29 y 30, que a la vez se ocupa del etnoturismo,
agroturismo, acuaturismo, y turismo metropolitano.
El artículo 26 define los subtipos de turismo y concibe al ecoturismo como “aquella forma de
turismo especializado y dirigido que se desarrolla en áreas con un atractivo natural especial y se
enmarca dentro de los parámetros del desarrollo humano sostenible”. El cual busca la recreación,
esparcimiento y educación del visitante a través de la observación, el estudio de los valores
naturales y de los aspectos culturales relacionados con ellos”. Es considerada como una actividad
controlada y dirigida que produce un mínimo impacto sobre los ecosistemas naturales, respeta el
patrimonio cultural, educa y sensibiliza a los actores involucrados acerca de la importancia de
conservar la naturaleza; presupone que las actividades ecoturísticas deben generar ingresos
destinados al apoyo y fomento de la conservación de las áreas naturales, culturales y de las
comunidades tanto in situ, como aledañas. Define la capacidad de carga como el nivel de
aprovechamiento turístico (número de personas), que una zona puede soportar asegurando una
máxima satisfacción a los visitantes y una mínima repercusión sobre los recursos naturales y
culturales
. El artículo 27 trata sobre jurisdicción y competencia, para lo cual le asigna al Ministerio del
Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial, en coordinación con el Ministerio de Desarrollo
Económico, administrar las áreas que integran el sistema de parques nacionales naturales, velar
por su protección, conservación, reglamentación uso y funcionamiento; al igual que, definir
conjuntamente con las autoridades del turismo, las regulaciones, los servicios, las reglas,
convenios y concesiones en cada caso, de acuerdo con la conveniencia y compatibilidad de
aquellas áreas naturales de reserva o de manejo especial, distintas al sistema de parques
nacionales naturales que puedan tener utilización turística.
El artículo 28 se ocupa de los procedimientos de planeación, señalados por la Ley, para el
desarrollo de proyectos ecoturísticos en las áreas del sistema de parques nacionales naturales, los
cuales deberán considerar su desarrollo únicamente en las zonas previstas como las zonas de alta
intensidad de uso y zona de recreación general al exterior, de acuerdo con el plan de manejo de
las áreas con vocación ecoturística.
El artículo 29 establece que la promoción del ecoturismo y su desarrollo lo promoverá el Estado,
mediante el plan sectorial de turismo, el cual debe contener directrices y programas de apoyo
específicos para estas modalidades, incluidos programas de divulgación de la oferta.
El artículo 30 hace referencia a la coordinación institucional para la inclusión del ecoturismo en
los planes sectoriales de desarrollo turístico, coordinados con las Corporaciones Autónomas
regionales de desarrollo sostenible; la promoción para la constitución de comités a nivel nacional
y regional; la búsqueda de una adecuada coordinación institucional y trans-sectorial que permita
adelantar convenios de cooperación técnica, educativa, financiera y de capacitación relacionadas
con el tema del ecoturismo; promover la sensibilización entre las instancias de toma de
decisiones sobre la problemática del sistema de parques nacionales naturales y otras áreas de
manejo especial y zonas de reserva forestal a fin de favorecer programas de protección y
conservación.
Ecoturismo en el sistema de parques nacionales naturales
Colombia posee en la actualidad 54 áreas protegidas, aproximadamente el 11% del territorio
nacional, de las cuales 31 áreas (63%) cuentan con infraestructura para ecoturismo, poseen una
capacidad instalada de 1.770 visitantes al día, infraestructura que se encuentra subutilizada, dada
las circunstancias por las que está pasando el país. Estas áreas están clasificadas en: 39 parques
nacionales naturales, 11 santuarios de fauna y flora, dos reservas naturales, un vía parque y un
área única. Para el sistema de parques nacionales naturales de Colombia, el ecoturismo es una
actividad importante para fortalecer el sistema generando recursos financieros a través de las
concesiones, la venta de servicios y tarifas, que permitan su redistribución en áreas del sistema.
Este sistema junto con el Departamento Nacional de Planeación y el Ministerio de Ambiente,
Vivienda y desarrollo Territorial, formularon y concertaron el documento CONPES (Consejo
Nacional de Política Económica y Social) 3296, que define los lineamientos y motivaciones para
la participación privada en la prestación de servicios ecoturísticos en los Parques nacionales
naturales, como una de las formas de auto financiamiento del ecoturismo y contribución a la
conservación ambiental.

Jiménez, H. (2013). Ecoturismo: Oferta y desarrollo regional (2nd ed.). Bogotá, Colombia:
Ecoe Ediciones.

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