Carnap considera la diferencia entre el lenguaje protocolar que son las oraciones
primitivas del sujeto o las pertenecientes al modo material del lenguaje, y el
lenguaje de sistema que es como están formuladas las proposiciones de la
ciencia. Sin embargo el lenguaje de sistema depende del lenguaje protocolar, en
el sentido en que una proposición de sistema tiene contenido en la medida en que
puede ser verificada por un sujeto S de proposiciones de su propio lenguaje
protocolar. De esto se constituye el contenido de una proposición, si una
proposición no cuenta con deducciones carece de sentido; si de dos proposiciones
se hacen las mismas deducciones, estas cuentan con idéntico contenido, dicen lo
mismo y pueden traducirse la una a la otra.
Hay que tomar en cuenta que Carnap parte de una corriente de la psicología
conocida como conductismo, movimiento que tuvo sus inicios en la segunda
década del siglo XX y que considera que el único objeto de estudio de la
psicología es la conducta. Se afirmaba que si la psicología pretende ser científica,
ésta tiene que dedicarse al estudio de los procesos, actividades y reacciones
abiertas de los sujetos que sean públicamente observables y en medibles de esta
manera no habría problema en que sean traducidas a un lenguaje fisicalista.
Dentro de las distintas objeciones a esta tesis podemos encontrar varias, una de
ellas es la que se hace por el paralelismo esta supone que ‘‘la firmeza solo existe
cuando exista una estructura física con esas características’’ de este modo ‘‘la
reacción que se presenta es una expresión de la firmeza’’ debido a que ‘‘la firmeza
es una propiedad oculta que por sí sola es incognoscible’’; de igual forma para la
proposición psicológica ‘‘la excitación solo existe cuando aparecen dichas
características’’ de este modo ‘‘la reacción es una expresión de la excitación’’
debido a que ‘‘la excitación es una propiedad oculta que hay detrás del cuerpo,
pero sin el resulta incognoscible’’. Para el fisicalismo esto incurre en
hipostatización, ya que produce una extraña duplicación a lado de las cosas que
empíricamente son demostrables (estructura de madera, cuerpo) a estas le
agregan la existencia de otra entidad paralela cuya existencia no determinable. La
comprobación intuitiva se da por medio de la proposición protocolar acerca de la
firmeza del soporte o la excitación de A.
Una de las tesis del fisicalismo sostiene que una proposición psicológica singular,
referente a la mente de otros, tiene siempre el mismo contenido que alguna
específica proposición física en la medida en que un proceso físico de
determinada índole se realiza en el cuerpo de la persona en cuestión. Una de las
objeciones parte de que la fisiología y en especial el conocimiento que tenemos
del sistema nervioso, no nos permite saber a qué situaciones físicas corresponde
lo que se conocemos como excitación, felicidad, etc. El fisicalismo responde
diciendo que la proposición ‘‘A esta excitado’’ no puede aun ser traducida a una
proposición física; pero aun así se puede traducir a otra acerca del estado físico
del cuerpo, ya que cuando yo percibo el cuerpo de A se produce en mi la
proposición protocolar