Debo precisar que el recurso de casación tiene como fines esenciales la correcta
aplicación e interpretación del derecho objetivo y la unificación de la
jurisprudencia nacional de la Corte Suprema de Justicia, conforme se señala en
el artículo 384 del Código Procesal Civil. Respecto a la causal de infracción
normativa, según De Pina “El recurso de casación ha de fundarse en motivos
previamente señalados en la ley. Puede interponerse por infracción de ley o por
quebrantamiento de forma. Los motivos de casación por infracción de ley se
refieren a la violación en el fallo de leyes que debieran aplicarse al caso, a la
falta de congruencia de la resolución judicial con las pretensiones deducidas por
las partes, a la falta de competencia, etcétera; los motivos de la casación por
quebrantamiento de forma afectan (…) a infracciones en el procedimiento”. En
ese sentido, se entiende que la causal de infracción normativa supone una
violación a la ley, la que puede presentarse en la forma o en el fondo.
Por otro lado el Procurador Público a cargo de los asuntos judiciales del
Ministerio de Economía y Finanzas sustenta su recurso de casación en la
supuesta existencia de una motivación aparente en la decisión impugnada, por
cuanto en los considerandos noveno al décimo cuarto no se toma en
consideración los artículos 60 y 61 del Código Tributario en lo que concierne a la
determinación de la obligación tributaria, precisando que dicha determinación se
inició con la Declaración Jurada Rectificatoria presentada por la actora con fecha
quince de setiembre de dos mil cuatro; sin perjuicio de ello, agrega que dicha
declaración está sujeta a fiscalización o verificación por la SUNAT.
Por lo que como menciona el artículo 61 del Código Tributario, la SUNAT tuvo la
oportunidad de fiscalizar o verificar el importe de la obligación tributaria
determinada por la demandante, sin embargo, no ejerció dicha facultad en su
oportunidad, la cual ha prescrito al cabo de cuatro años, conforme lo establece
el artículo 43 del mismo cuerpo legal tributario.
Por lo que una vez revisada la sentencia de vista materia del recurso de
casación, se aprecia que no se presenta el supuesto de motivación aparente,
pues la Sala Superior cumple con la justificación interna y externa de la decisión
recurrida, la cual está debidamente sustentada en los respectivos medios
probatorios aportados por las partes procesales; más aún, en los considerandos
noveno, décimo primero y décimo tercero apartado a) de la resolución recurrida,
el Colegiado Superior en sus fundamentos fácticos y jurídicos analiza las
consecuencias para el caso materia de autos, de la aplicación del artículo 61 del
Código Tributario, referido a la verificación de la obligación tributaria efectuada
por el propio deudor tributario, para concluir que la Administración Tributaria no
ejerció su facultad de fiscalizar o verificar la obligación tributaria autodeterminada
por la empresa deudora.
El Procurador Público de la Superintendencia Nacional de Administración
Tributaria alega que la sentencia de vista adolece de incongruencia procesal
externa, pues omite pronunciarse respecto a la determinación de la obligación
tributaria en los términos expuestos en el recurso de apelación, esto es, si
pueden existir o no paralelamente dos actos de determinación de la obligación
tributaria realizada por la SUNAT; también agrega que la sentencia de vista
adolece de vicios de incongruencia procesal interna, pues no se ha pronunciado
sobre un argumento central de su recurso de apelación, presentando
incoherencias en los fundamentos de su parte expositiva, al señalar que la
Administración Tributaria puede modificar la determinación de la obligación
tributaria efectuada por el deudor tributario si detecta la omisión o la inexactitud
de lo declarado.