Los profesionales que trabajan con infantes y muchos de los recursos utilizados para
apoyar la ciencia en los años tempranos hacen énfasis en la importancia de la
actividad práctica. Sin embargo, se reconoce, cada vez más, que hay distintos
propósitos para la actividad práctica en la ciencia y esto da distintos énfasis a las áreas
del desarrollo en la ciencia, tal como se señaló al inicio de este capítulo (véase Feasey,
1994). Las categorías más comunes de actividad incluyen:
Habilidades básicas. Éstas son actividades diseñadas para desarrollar
habilidades importantes de investigación científica, tales como usar lentes de
aumento, usar equipo de medición o hacer y usar una tabla para el registro de
resultados. Desarrollar tales habilidades será importante si los niños las aplican
en sus investigaciones posteriores; por ejemplo, permitir a los niños explorar
cómo responde un termómetro en diferentes ambientes, aprender a usar una
cuchara de medición o dibujar un mapa.
Tareas de observación. Impulsan a los niños a observar científicamente,
observar y clasificar objetos y eventos de diferentes maneras, a comenzar a
enfocarse en aspectos científicos relevantes y a usar su conocimiento y su
comprensión actual. Por ejemplo, los niños podrían clasificar materiales de
diferentes maneras –de acuerdo con características observables–: áspero/liso,
duro/suave, y de manera creciente ir tomando en cuenta otras propiedades:
flota/se hunde, permeable/impermeable, se disuelve/no se disuelve. Las
observaciones frecuentemente llevan a preguntas y a investigaciones. Estas
observaciones pueden llevar a investigar en el área de juegos acuáticos cuá-
les son los mejores materiales para construir un barco.
Demostraciones. En estas actividades, a los niños se les dan instrucciones
acerca de lo que tienen que hacer. El propósito es ilustrar un concepto particular
o presentar una habilidad específica. Por ejemplo, con el fin de explicar el
concepto de dilución, los educadores en un centro infantil pusieron una serie
de botellas con agua y pidieron a los niños que añadieran una cucharada de
diferentes sustancias, tales como arena, harina, sal o azúcar en cada uno de
ellos, mezclaran y observaran qué pasaba. Los resultados se registraron en un
simple mapa pictográfico diseñado por los encargados. Esta actividad se utilizó
para explicar y reforzar un vocabulario adecuado: disolver, flotar, hundir.
Exploraciones. Proporcionan oportunidades a los niños para interactuar con
objetos y materiales, observar lo que ocurre u obtener una percepción del
fenómeno. En este proceso las ideas pueden cambiar o desarrollarse. Las
exploraciones frecuentemente se aplican a otras investigaciones más
específicas. En los ejemplos dados, la investigación de Sofía para construir su
barco se pudo haber extendido hacia una investigación que cambiara uno por
uno los elementos de su barco. Por ejemplo: la altura de los lados o la forma o
área de la base.
PENSAMIENTO LÓGICO -MATEMÁTICO
El pensamiento lógico es un proceso mental aprendido en el que utiliza un
razonamiento coherente para llegar a una conclusión. Los niños pueden empezar a
aprender los procesos secuenciales del pensamiento crítico antes de que comiencen
la escuela. Los juegos que estimulan el pensamiento lógico ayudan a los niños con
la resolución de problemas y el crecimiento intelectual.
En este sentido, es importante estimular los juegos, especialmente de mesa, que
colaboren al reconocimiento de patrones y desarrollen la capacidad mental para ver
el orden en un ambiente caótico.
Además se colabora con la definición del razonamiento deductivo como una forma de
ordenar los conceptos generales en algo específico sobre la base de causa y efecto.
Los juegos de memoria para niños en edad preescolar ayudan con simples
habilidades de razonamiento deductivo. El niño debe recordar la ubicación de la
imagen correspondiente, mientras que descarta otras tarjetas donde la imagen
deseada no existe.
La batalla naval es otro juego estratégico clásico que utiliza el razonamiento
deductivo para localizar los buques de los oponentes. Las habilidades mentales del
pensamiento lógico culminarán desarrollando el pensamiento estratégico para la
evolución de la situación.
El dominó es un juego de estrategia bueno para los niños en edad preescolar y
mayores que fomenta el razonamiento relacional.
PENSAMIENTO REFLEXIVO
Desde el inicio de la cultura humana ha existido la preocupación por aquello que nos
hace diferentes a las demás especies. Entre estas diferencias es sustancialmente
notoria la capacidad de pensar, es decir, de pensar ordenadamente, con propósitos
específicos y con metodologías que permiten hacer nuestro pensamiento más
efectivo. Considerando que el niño ya piensa, lo que se quiere no es enseñarles a
pensar, sino ayudarles a pensar mejor. ¿Y qué significa eso? Pensar mejor a nivel
lógico, estético y ético para que pase a un desarrollo de la capacidad crítica, creativa
y cuidadosa. La mejor imagen para comprender esa perspectiva es la de una red con
distintos nudos, conexiones, caminos, hilos y vacíos. Cuando se toca en uno de los
nudos de la red toda ella se mueve porque todo está conectado. De la misma manera
ocurre con el pensamiento, cuando se estimula una de sus habilidades, el
pensamiento como un todo es estimulado. Es por esto que se debe tener claro que a
la hora de crear estrategias metodológicas teniendo como base dicha red esta debe
lograr estimular el pensamiento de manera reflexiva y para tanto se propone una
metodología basada en el diálogo y en el ejercicio de la reflexión con los demás, en
comunidad, brindando la opción de contar con un sinfín de posibilidades de acción.
Así que el método utilizado podrá abrir a las posibilidades de los cuestionamientos y
de la elaboración reflexiva en compañía de otros. La idea es que cada uno desarrolla
su propia capacidad de pensar mientras piensa en compañía de los demás.
En mucha ocasiones olvidamos que los niños se manifiestan o comunican a través de
su cuerpo. Por medio de este perciben la realidad, experimentan, aprenden,
descubren su entorno, se expresan, perciben distintas sensaciones, bailan, cantan y
establecen relaciones con los demás. Esta actividad motriz se puede manifestar en
todas sus actividades cotidianas; es por esto que se pretende por medio de las
actividades propuestas en la práctica pedagógica ayudar en la formación de la
personalidad, que le permitan relacionarse con le mundo y con los demás y que le
sirvan para enriquecerse tanto intelectual como afectiva y moralmente.
El ser humano como ser integral inmerso en una cultura debe conocerse y conocer el
mundo en el cual circunde, para que de esta manera pueda apropiarse y al mismo
tiempo transformar la realidad en pro de su bienestar y su desarrollo, en una primera
instancia este no lo hace solo puesto que necesita un guía que acompañe y dirija sus
movimientos, que partiendo del conocimiento de las etapas evolutivas del hombre
trabaje junto a el procurando su prosperidad y mejor desarrollo.