REVIEW DE HEMICORDADOS

Presentado por: Huarachi Ito José Luis

Los hemichordata es un phylum que comprende un grupo de animales marinos vermiformes (que
recuerdan a un gusano) o sacciforme (en forma de un saco pequeño) con un pequeño de tentáculos
distintivos. Generalmente habitan los fondos de los ecosistemas acuáticos, en aguas de poca
profundidad. La mayoría de los integrantes son sésiles o sedentarios.

En el cuerpo de los hemicordados podemos distinguir tres regiones: el prosoma, el mesosoma, y el

metosoma. Estas tres zonas corresponden a la condición trimérica del celoma, En términos de la
longitud del cuerpo, varían desde 2.5 centimétros, hasta 2.5 metros. Generalmente viven
enterrados y presentan coloraciones llamativas. (Tassia, 2016)

Características generales de Los hemicordados son animales triploblásticos, con simetría bilateral y
algunos de vida libre, que viven en ambientes marinos, tienen epidermis ciliada.

Existen dos clases de hemicordados, cada uno con su morfología y sus hábitos ecológicos bien
marcados. Los integrantes de la clase Enteropneusta se caracterizan por ser vermiformes y por vivir
enterrados en el suelo del ecosistema marino.

La clase Pterobranchia, por su parte, comprende a individuos sésiles y coloniales que viven en tubos
secretados. (Cameron, 2005)

Otros rasgos importantes es que el primer segmento intestinal es conocido como intestino
branquial y está vinculado con el entorno. Su aparato cardiovascular resulta claramente primitivo.
Porque, posee apenas un par de vías sanguíneas reales que se ubican en el mesosoma y prosoma.

Su corazón también destaca por su simpleza. Esta es fácil de apreciar por el único vaso sanguíneo
con capacidad de contraerse y bombear la sangre. Como resultado, la sangre viaja en una sola
dirección.

La segregación de líquidos se hace por medio de la dermis. Asimismo, los hemicordados cuentan
con un aparato membranoso que filtra constantemente la sangre que segrega el cuerpo. A este se
le bautizó como glomérulo.

La clasificación actual divide al phylum en dos clases: Enteropneusta y Pterobranchia.

Clase Enteropneusta Comprenden al grupo de gusanos bellota. Casi el 83% de las especies de
hemicordados pertenecen a esta clase. Comprende cuatro familias monofiléticas: Harrimaniidae,
Spengelidae, Ptychoderidae y Torquaratoridae. Últimamente se ha propuesto incluir a
Torquaratoridae dentro de Ptychoderidae.

Viven bajo la tierra, enterrados en la arena o en el barro. Los géneros más comunes de esta clase
son Balanoglossus y Saccoglossus.
Su cuerpo está cubierto de una sustancia mucosa y se divide en tres segmentos: la probóscide, el
collar y un largo tronco.

El segmento inicial o probóscide, es la parte activa del animal. La probóscide es usada para excavar
y el movimiento de los cilios que posee ayuda al movimiento de las partículas de arena. La boca se
localiza entre el collar y la probóscide, ventralmente.

El sistema de branquias está formado por poros localizados dorsolateralmente en cada lada del
trunco. (Tassia, M. G., Cannon, J. T., Konikoff, C. E., Shenkar, N., Halanych, K. M., y Swalla, B. J. 2016)

Anatomía interna de la clase Enteroneustos su probóscide es la parte activa del animal, con ella
mueve el fango y analiza el medio que lo rodea, recoge alimento por medio de tiras de moco que
secreta en superficie. El alimento es transportado por cilios al borde anterior del collar donde está
la boca ventral, es ingerido. Los que viven en galerías la probóscide es excavadora, el fango es
desplazado hacia atrás por cilios y el moco. Las galerías están revestidas de moco y tienen forma de
U, generalmente con dos aberturas; la probóscide puede salir por la una apertura anterior y los
restos de alimento son expulsados por la abertura del tubo posterior. El divertículo bucal
(estomatocorda) se localiza en la parte posterior de la probóscide, en forma de saco ciego que por
algunos autores fue considerada como notocorda y razón por la cual Hemichordata era considerado
como un subphylum dentro de Chordata.

Tienen collar con un par de cavidades celómicas que se comunican al exterior mediante poros; estos
se turgen, facilitando la excavación de las galerías. Con contracciones musculares del cuerpo para
expulsar el exceso de agua, a través de la hendiduras faríngeas, permitiendo el desplazamiento del
animal.

Clase Pterobranchia similares a los enteropneustos se ajusta bien a los individuos pterobranquios.
No obstante, poseen diferencias marcadas, típicas de un estilo de vida sedentario.

Anteriormente, los pterobranquios eran confundidos con hidroides y con briozoos, por la similitud
morfológica de estos grupos.

Estos animales pueden vivir juntos en tubos de colágeno. En estos sistemas, los zooides no están
conectados y viven de manera independiente en sus tubos. Los tubos poseen aberturas, por los
cuales se extiende una corona de tentáculos del animal. (Tassia, M. G., Cannon, J. T., Konikoff, C. E.,
Shenkar, N., Halanych, K. M., y Swalla, B. J. 2016)

Por otro lado, según el libro de paleolontologia de invertebrados 2009 Los hemicordados fueron
divididos en tres clases: enteropneustos, pterobranquios y graptolitos, siendo la tercera
exclusivamente fósil. Algunos autores unificaron las dos últimas en una sola clase Graptolithoidea,
suma de las subclases Pterobranchia + Graptolithina.

Los graptolitoideos (subfilo Pterobranchia) son hemicordados primitivos de dimensiones

milimétricas, que viven en tubos secretados por ellos mismos. Éstos se organizan bien en grupos
(como pseudocolonias bentónicas) o bien forman auténticas colonias (bentónicas a planctónicas),
con todos los zooides interconectados, cuyo tamaño puede ascender a varios decímetros.
Sus representantes actuales, algunos carentes de esqueleto, son animales raros y reúnen escasas
especies agrupadas en tres géneros y cuatro subgéneros. Dos de ellos, Cephalodiscus y
Rhabdopleura, son claros “fósiles vivientes”, dado que la apariencia externa y la microestructura de
sus tubos es prácticamente la misma que la de las especies cámbricas, Los graptolitos son
hemicordados coloniales, exclusivamente paleozoicos, cuyo nombre alude al aspecto más habitual
que presentan sus fósiles (del gr. graptós= escrito, y lithos= piedra). (Gutiérrez-, 2009)

La Filogenia de los hemicordados representa un problema, ya que comparten características con los
cordados y los equinodermos. Con los primeros tienen en común las hendiduras faríngeas utilizadas
en la filtración y en la respiración, como ocurre en algunos cefalocordados. Además el corto y grueso
cordón nervioso dorsal del collar puede ser homólogo al tubo nervioso de los cordados. El
divertículo bucal de hemicordados por mucho tiempo fue considerado como homólogo de la
notocorda; actualmente se considera una sinapomorfía propia de los hemicordados. Por otra parte
las primeras fases de la embriogénesis son parecidas a las de los equinodermos y la larva tornaria
es parecida a la bipinnaria de los asterideos. Sin embargo las relaciones 38 hipotéticas que sitúan a
los lofoforados como el grupo hermano de hemicordados y cordados, como resultado de
sinapomorfismo. (Moncayo, 2005)

(Harrison y Rupert, 1997) la, consideran los phyla Chaetognata, Hemichordata y los Chordata
invertebrados, junto con los equinodermata, constituyen los Deuterostomados; en una sistemática
tradicional dentro de metazoarios. En avances recientes, según (Nielsen, 1995), los phylo Phoronida
y Brachiopoda son Deuterostomados y las clases Enteropneusta y Pterobranchia, de los
Hemichordata podrían alcanzar el estatus de phylum; el mismo autor cambia a los Quetognatos de
los Deuterostomados a los Protostomados; y también cuestiona el origen monofilético de los
pterobranquios y Enteropneustos.

Cabe señalar que a pesar de lo anterior (Brusca y Brusca, 1990) proponen una filogenia para los
Deuterostomados, donde incluso, se incluyen a todos los lofoforados, osea a Braquiópodos, Briozoa
y Phoronida, Por otro lado (Cameron et al., 2000), consideran que Deuterostomados sólo incluyen
a los equinodermos, hemicordados y cordados. Chordata está conformado por tres, subphyla;
Vertebrata, Cefalochordata (Branchiostoma) o comúnmente llamado Anfioxus) y Urochordata
(tunicados).

Alimentación los hemicordados se alimentan por un sistema de moco y cilios. Las partículas
nutritivas suspendidas en el océano son capturadas gracias a la presencia del moco en la probóscide
y el collar.

Los cilios se encargan de mover la comida hacia la parte ventral de la faringe y el esófago.
Finalmente, las partículas alcanzan el intestino, donde ocurre el fenómeno de absorción.
El Sistema reproductor los hemicordados tienen sexos separados, que apenas se pueden distinguir
por su apariencia externa. De los huevos fertilizados se desarrollan larvas ciliadas, que se parecen a
las larvas de los equinodermos y a partir de las cuales se desarrollan los animales adultos. Antes de
la metamorfosis, pasan una parte de su ciclo vital entre el plancton, donde se alimentan de finas
partículas en suspensión, que quedan atrapadas en los cilios de las larvas y que son transportadas
desde allí a la boca. En esta etapa, se los puede describir como planctótrofos. En algunas especies,
el desarrollo es directo, es decir, no existe una etapa larvaria intermedia.

Además de la reproducción sexual, también presentan una forma de reproducción asexual: en un

proceso llamado gemación, una cría se separa de su progenitor; ambos son genéticamente
idénticos. También puede pasar que un individuo quede cortado en dos partes, y que después cada
una de ellas continúe independientemente de la otra. (Valenzuela, 2003)

Hábitat y diversidad Los hemicordados habitan exclusivamente ecosistemas marinos. Viven en

aguas tanto cálidas como templadas. Se distribuyen desde la zona de mareas hasta lugares más
profundos.

Evolución Históricamente, los hemicordados han sido el foco de investigaciones relacionadas con la
evolución y el desarrollo de los deuterostomados, particularmente en el contexto del origen de los
cordados.

La evidencia molecular y del desarrollo, sugiere que el ancestro de los cordados fue un organismo
similar a un gusano, muy parecido a un integrante actual de la clase Enteropneusta.

La filogenia de los hemicordados ha sido difícil de resolver, ya que el grupo posee características
compartidas tanto con los equinodermos como con los cordados. La hipótesis Ambulacraria expone
que los hemicordados son el taxón hermano de los equinodermos. (Satoh, N., Tagawa, K., Lowe, C.
J., Yu, J. K., Kawashima, T., Takahashi, H., y Gerhart, J. 2014)

Este Phylum prácticamente no ha sido estudiado, desde el punto de vista de su taxonomía y

distribución. Sin embargo, por observaciones en las muestras de plancton, se ha notado la presencia
de la larva Tornaria, específicamente en las provenientes de la Bahía de Mochima. 5 Es un grupo
que requiere mayor atención, no sólo por la poca información que sobre él se tiene sino por las
relaciones filogenéticas entre los hemicordados, equinodermos y cordados. La embriogénesis y la
larva Tornaria temprana son sumamente parecidas a las de los equinodermos, en especial en la
Bipinaria de los asteroideos. 6 Este grupo se ha encontrado en el país y es bien conocida la presencia
del mismo, tanto en frecuencia como abundancia, especialmente Balanoglossus, en el Cayo Dos
Mosquises del Parque Nacional Archipiélago de Los Roques. Lamentablemente, no se conocen otros
aspectos de su biología y sería importante realizar estudios que permitan conocer más
profundamente este importante grupo faunístico del bentos. ( Roa, 2003)
Bibliografía

Moreno, A. (s.f.). Hemicordados 1, Apuntes de Zoología. madrid.

Roa, E. Z. (2003). Hemicordados, Cordados y Quetognatos. caracas.

Gutiérrez-, M. (2009). paleontologia de invertebrados. madrid.

Valenzuela, N. (2003). zoología, clase 9 Hemicordados. san francisco.

Brusca, G. y Brusca, R. C. (1990) Invertebrates, Ed., Suderland, Senawer Associates. Inc.;

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Cameron, C. B. (2005). Una filogenia de los hemicordados basada en caracteres morfológicos.

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Harrison, F. W. y Rupert, E. E. ( 1997) Microscopio Anatomy of Invertebrates (Hemichordata,

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Neslin, L. P. and Yuhin, V.V.(2004) Structure of the system in the tornaria larva of Balanoglossus
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Parker, T. J., & Haswell, W. A. (1987). Zoología. Cordados (Vol. 2). Reverté.

Satoh, N., Tagawa, K., Lowe, C. J., Yu, J. K., Kawashima, T., Takahashi, H., y Gerhart, J. (2014). Sobre
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Tassia, M. G., Cannon, J. T., Konikoff, C. E., Shenkar, N., Halanych, K. M., y Swalla, B. J. (2016). La
diversidad global de hemichordata. PloS one, 11 (10), e0162564.