Como sabemos han aumentado las cifras sobre la violencia contra la mujer. Cada
vez vemos más noticias sobre este tema, algunas más desgarradoras que las
otras, pero todas con un solo resultado una mujer agredida sean cuales sean las
razones. Y esto no solo sucede desde ahora esto ya viene desde años atrás, y
aunque muchos hemos querido cambiar esa forma de pensar aún sigue radicando
fuertemente la idea del machismo, se puede ver en diferentes casos.
Como por ejemplo; en la antigüedad la mujer no tenía los mismos derechos que
un hombre y solo era considerada para los quehaceres del hogar, entre otras
cosas que ellas no podían hacer.
Es por ello que en muchos lugares del mundo se han realizado un sinfín de
marchas para proteger los derechos de la mujer. Aquí, en el Perú también se
unieron para hacer oír su voz en forma de marcha, una muy impactante fue la
marcha nombrada “Ni una menos” que cuentan con el apoyo de muchas imágenes
públicas que se unen en esa causa, para por fin exterminar la idea del machismo y
darle fin a la violencia contra la mujer.
Ya han salido muchos casos a la luz en donde madres de familia son brutalmente
agredidas y ellas prefieren no denunciar y se esconden detrás de la escusa; “Lo
hago por mis hijos” y pensándolo bien al evitar denunciar y acabar con esas
agresiones, la madre le causa un daño al pequeño que presencia ese
comportamiento violento y creen que es normal, eso afecta sus relaciones con sus
compañeros y hasta puede tener la idea que golpear está bien.
Pero ¿Cómo podemos solucionar ese problema? Sabemos que la violencia física
y sexual contra la mujer involucra a diferentes factores para poder terminar por fin
con esta pesadilla, en mi opinión una muy buena iniciativa es trabajar en conjunto
con el ministerio de educación para que cree programas en donde se pueda
ayudar a los pequeños a tener una mejor visión y razonamiento sobre este tema,
como todos son consiente de que en los colegios de la región no le dan mucha
importancia a este y alguno ni siquiera cumplen con un psicólogo que pueda
ayudar a las niñas (os), adolescentes, que viven estos problemas, ellos se centran
más en enseñar las asignatura y seguir el protocolo. Pero esta iniciativa podría ser
muy beneficiosa ya que como no podemos hacer nada ahora para erradicar este
problema porque no tenemos la autoridad firme que permita hacer cumplir la
condena merecida a los agresores. Esta iniciativa podría ser que un futuro, los
niños ya educados y brindándoles la ayuda especializada tendrían otro idea de ver
estos problemas así se disminuiría las cifras que presenciamos ahora.
Pero solo estamos tocando el tema de agresión física aún nos falta la agresión
sexual que va de la mano con lo antes hablado, muchas veces las víctimas de
este tipo de agresión son las menores que sin pensarlo su agresor puede ser las
personas más cercanas a ellas, como el papá, tío, hermano, u otro tipo de familiar,
también en el colegio o hasta en el centro laboral; que muchas veces es de
hombre a mujeres.
Como lo comente una muy buena opción es sobre la creación de programas que
sería muy beneficioso para los menores, y por fin terminaríamos con este infierno
que viven niñas y mujeres día a día, también que puedan oír nuestra voz de
protesta para que puedan ayudarnos a superar el trauma que vivimos.