VICENTE ROCAFUERTE
DE GUAYAQUIL
SEMINARIO DE VENTAS
MATERIAL DE APOYO
Trabajos escritos
Análisis de información
Coherencia y lógica en la argumentación.
Presentaciones Orales
Argumentación y análisis claros
Dicción
Organización de la información
Investigaciones
Análisis de información
Criterios y argumentos
Organización de la información
El plagio de trabajos, tareas o lecciones será sancionado con la pérdida total de la calificación para el
autor del plagio y del 50% de la nota para el estudiante que facilitó el material.
De la entrega de trabajos
Los trabajos e investigaciones entregados en la fecha establecida se evaluarán bajo el 100%.
Los trabajos entregados una fecha posterior a la establecida serán puntuados con el 40% menos de la
nota.
Examen
No se aceptan ni tachones ni enmendaduras, se anula el tema
Prohibido el uso del celular, ni de auriculares
Esferográfica color negro
UNIDAD Nº 1
INTRODUCCIÓN A LAS VENTAS
Para algunos, la venta es un especie de arte basado en la persuasión. Para otros es más una
ciencia, basada en un enfoque metodológico, en el cual se siguen una serie de pasos hasta
lograr que el cliente potencial se convenza de que el producto o servicio que se le ofrece le
llevará a lograr sus objetivos en una forma económica.
Ventas directas: involucran contacto directo entre comprador y vendedor (ventas al detalle,
ventas puerta a puerta, venta social).
Ventas industriales: ventas de una empresa a otra.
Ventas indirectas: ocurre un contacto, pero no en persona (telemercadeo, correo).
Ventas electrónicas: vía Internet (B2B, B2C, C2C).
Ventas intermediadas: por medio de corredores.
El marketing, aunque no hay consenso en torno a una definición, se refiere a un proceso muy
amplio que incluye todo lo necesario para atraer y persuadir a un cliente potencial. Las
ventas, por otro lado, se refieren a lo que necesita hacer para cerrar el negocio, y firmar el
contrato o acuerdo. Son dos disciplinas separadas, pero ambas son necesarias para el éxito
de una organización, y si trabajan en conjunto, mucho mejor.
Vendedor profesional es aquel que se entrega a sus labores al 100% sin dejar nada a la mitad
porque, dejar las cosas a la mitad es de mediocres.
Los valores del vendedor profesional lo llevan a triunfar por encima de aquellos que son
irresponsables, deshonestos, arrogantes y vanidosos.
El vendedor profesional, satisface las necesidades de su cliente al 100%, aplica sus objetivos
de ventas y se da tiempo para aprender de sus errores, porque también es un ser humano y
tiene defectos como cualquiera y es hombre porque los reconoce y además se compromete
a no volver a cometerlos.
El consultor es básicamente un especialista en asesoramiento, que cobra por dar tal servicio.
No defraudarlo.
Lograr la fidelidad del cliente, lo cual no solo lo lleva a comprarnos cada vez que tiene
necesidad, sino que además se convierte en un referente (es decir, alguien que nos
recomienda).
Este comportamiento del vendedor como consultor que acabamos de exponer no convierte
al hombre de ventas en un mero buen anfitrión: el comportamiento de vendedor consultor
se sustenta a estrictamente en un criterio comercial y es el que nos brinda la oportunidad de
obtener rentabilidad para nuestro negocio.
1.2.2 Tipos de vendedor
Conocer cuáles son los diferentes tipos de vendedores es muy útil tanto para directivos y
gerentes del área comercial como para los mismos vendedores, pues, les permite conocer (a
los primeros) qué tipo de vendedores necesitan contratar para cada situación en particular, y
a los segundos, qué tipo de puesto de ventas ocupar de acuerdo a sus características
personales y profesionales.
En ese sentido, cabe señalar que en la actualidad existe una amplia variedad de vendedores,
los cuales, se pueden clasificar según el tipo de cliente al que prestan sus servicios o según el
tipo de actividad que realizan, tal y como se podrá ver a continuación:
o Vendedores Repartidores: Según Stanton, Etzel y Walker, en este trabajo, los vendedores
entregan el producto —por ejemplo, refrescos o gasolina— y dan servicio al cliente. Sus
responsabilidades acerca de la toma de pedidos son secundarias, aunque la mayoría de
estos vendedores están autorizados y son recompensados por encontrar oportunidades
de aumentar las ventas a las cuentas actuales. Por lo general, el único requisito
indispensable para que éstos vendedores conserven su mercado es el de mantener un
buen servicio y un trato agradable.
o Vendedores Internos o de Mostrador: Este tipo de vendedores se localizan en las oficinas
o salas de exhibición de los establecimientos de ventas o locales comerciales. Su
actividad consiste en atender a los clientes, tomar sus pedidos y ayudarlos durante su
permanencia en el local comercial. Según Fischer y Espejo, estos vendedores rara vez
ayudan a incrementar las ventas; sin embargo, pueden sugerir y enaltecer el producto.
o Vendedores Creativos o Consejeros: Este tipo de vendedores, según Laura Fischer y Jorge
Espejo, son los llamados "obtenedores de pedidos". Existen dos clases de éstos: 1) Los
que buscan nuevas ventas con clientes actuales y 2) los que buscan ventas con nuevos
clientes. Algunos los llaman vendedores "cazadores", y por lo regular las personas
idóneas para este trabajo son los vendedores maduros, ya que es un trabajo duro y
valioso.
o Vendedores Online o por Internet: Este tipo de vendedores utiliza los medios disponibles
en la red (sitios web propios y/o de terceros y el correo electrónico) para ofrecer y
vender sus productos o servicios. Sin embargo, para lograr ventas, debe primero generar
una imagen de confianza en su público, por ejemplo, incluyendo en sus cartas de venta
testimonios de otros compradores, brindando asesoramiento gratuito o proporcionando
información mediante un boletín electrónico.
La razón de ésta función es: mantenerte ocupado buscando nuevos horizontes en el universo
de clientes posibles (prospectos), esto consiste, en incrementar tu campo de acción para
mantener tu cartera de clientes estable y renovada, con la cual podrás adquirir nuevas y
mayores responsabilidades, pues al incrementar los clientes tendrás que realizar más visitas.
No es malo que visites a tus clientes de vez en cuando, aunque sepas que tu cliente en estos
momentos no pueda o no necesite adquirir lo que tú vendes, recuerda, es puro
mantenimiento.
Retener a tus clientes significa renegociar incluso si tu cliente por x causa está pensando no
más tratos contigo, es posible que estés fallando en el mantenimiento, entonces vuelve a
despertarle el interés y sus deseos por tu producto, recuérdale las ventajas y beneficios y
obséquiale un excelente servicio.
Me sorprende que aún en estos tiempos existan vendedores que no conozcan las
características de sus productos. Hace unos días mi abuela compró un auto. El día que se lo
entregaron, me dedique a husmear, y al llegar a los cristales que son eléctricos le pregunte al
vendedor que si contaban con el sistema de protección de niños, (es cuando el cristal sube y
si por descuido el niño mete la mano, el cristal automáticamente retrocede para no
lastimarlo) El vendedor al escucharme no supo que decir, le dije que hiciéramos la prueba y
él se rehusó, yo interesado y con dudas puse mi mano y descubrí que efectivamente si
cuenta con este sistema, el vendedor al verlo se quedo con la cara de ¿qué es eso? y no tubo
más remedio que decir que no lo sabía y se apenó al darse cuenta que no conoce el producto
que está vendiendo. ¿Qué te parece? ¡Ah! déjame decirte que este amigo vende varios
carros al mes, pero considero que si conociera su producto vendería más.
Si te has dado cuenta, con anterioridad te he venido mencionando que tan importante es
conocer las características de tus productos, porque puedes utilizarlas como una herramienta
más para lograr una venta, así que recuérdalas y tradúcelas a beneficios.
Al prospectarlo habrás notado en que parte de la ciudad vive, esto viene siendo más para mis
amigos que comercializan productos de consumo, porque sus clientes a través de ellos se
surten para después venderlos a terceras personas, vamos a decir que vendemos refrescos,
si en la colonia en donde se localiza tu cliente es de nivel socioeconómico medio-alto y
además es una zona en donde hay salones de fiesta, sería conveniente que le vendieras agua
mineral tanto en presentación de dos litros como de 12 onzas. ¿Sabes por qué? por lo
regular a este tipo de personas les gusta acompañar sus bebidas con agua mineral y en las
fiestas nunca falta que se terminen.
Así es como debes de reconocer el mercado de tus clientes, para formar un negocio
productivo tanto para ellos como para ti.
La clave está en conocer tus objetivos e identificar en qué momento los alcanzas, como
vendedor profesional debes aplicarlos siempre. Así que organiza, planifica y ejecuta tus
objetivos según tus clientes.
Esta función es de vital importancia. Toma cursos referentes a tus productos, lee manuales o
libros de ventas, pues siempre es necesario que te mantengas activo e investigando la mejor
manera de vender. Esto te llevará a brindar servicio de calidad y por lógica a tener mayores
ingresos en tus ventas.
Por lo general definimos como productos tangibles aquellos bienes que deben ser
manufacturados, despachados y entregados, es decir, aquellos que se pueden ver, tocar,
ensayar o probar, pueden ser inspeccionados, necesitan espacio, se pueden estropear,
deben ser inventariados y distribuidos. Los productos intangibles son aquellos que
consideramos servicios y su valor es difícil de apreciar, ya que no se recibe un producto físico.
Algunas personas piensan que es mucho más fácil vender los productos tangibles, ya que
nuestros sentidos nos ayudan a escoger lo que deseamos, pero nadie puede saber realmente
si le gusta la comida de un restaurante hasta que no la compra y la come, o que tan fina
puede ser una prenda hasta que no la lava, o que tan bueno un aparato eléctrico hasta que
no lo usa.
Igual ocurre con los intangibles o servicios, no puedes saber si un curso es excelente hasta
que no te inscribes y lo recibes, si el servicio de televisión por cable es bueno hasta que no
lo instalas o si un medico te satisface, hasta que no vas a una consulta.
La venta es una actividad que debe planearse con cuidado y ejecutarse con destreza, sin
importar el tipo de producto es tangible o intangible. Todas las empresas venden
características, beneficios y ventajas que logren satisfacer a los clientes. Cuando estos están
satisfechos entonces comprarán de nuevo y comunicarán a otros sus experiencias haciendo
una publicidad gratuita para la empresa. Recuerde el dicho: “Un cliente satisfecho trae otros
clientes”.
Muchos creen que una buena estrategia para vencer la competencia es vender a un precio
más bajo, pero esto no es así, pues la mayoría de las veces se debe sacrificar la calidad del
producto y/o servicio para poder ofrecer dichos precios, lo que puede en un comienzo dar
resultados, pero en el tiempo se perderán los clientes. Es recomendable mantener por sobre
todo la calidad de los productos y servicios y enfocarse en buscar fortalezas que difícilmente
se puedan derrumbar, como por ejemplo brindar un excelente servicio al cliente.
Analice las ventajas y beneficios de su negocio, todos tenemos algo significativo que la
competencia no tiene y que debemos explotar, es decir, busque aquellas cualidades que
puede ofrecer, que son únicas y que te diferencian sobre la competencia. Algunos tienen
estacionamiento gratis, entregas a domicilio, reclama sin costo el producto si no te entregan
la factura, un detalle adicional por la compra realizada etc. A esto lo llamamos valor
agregado; si no lo tiene, analice su negocio y créelo, pues es necesario para el avance de su
empresa y es clave para sus negociaciones.
Los productos que venden los vendedores directos son tan diversos como la gente misma e
incluyen: cosméticos y productos de cuidado del cutis; artículos de tocador y de lavandería;
aspiradoras y enseres domésticos; especialidades para el hogar; productos de limpieza para
el hogar; productos alimentarios y de nutrición; juguetes, libros y productos educacionales,
así como ropa, joyería y accesorios de moda, por mencionar algunos.
La venta directa proporciona importantes ventajas a los individuos que desean una
oportunidad de obtener ingresos y desarrollar un negocio propio; los consumidores que
disfrutan de una alternativa a los centros comerciales, los almacenes departamentales o
similares, y; al mercado de productos de consumo. Ofrece una alternativa al empleo
tradicional para quienes desean una oportunidad de ganancias de ingreso flexibles para
complementar el ingreso de su hogar, o cuyas responsabilidades o circunstancias no les
permiten un empleo normal a tiempo parcial o completo. En muchos casos, las
oportunidades de venta directa se desarrollan en una carrera satisfactoria para quienes
logran éxito y deciden proseguir con su negocio de venta directa independiente a tiempo
completo.
La venta directa no debe confundirse con términos como comercialización directa o ventas a
distancia que se pueden describir como un sistema interactivo de comercialización que
utiliza uno o más medios de publicidad para efectuar una respuesta considerable
y/transacciones en cualquier lugar, con sus actividades almacenadas en una base de datos.
Algunos tipos comunes de técnicas de comercialización directa y ventas a distancia son el
telemercadeo, correo directo y respuesta directa.
Es una modalidad de distribución de productos y servicios en la cual las empresas trabajan con firmas
autorizadas que trabajan con el material de las primeras. Por ejemplo, los puntos de venta de
celulares, hay unas empresas que tienen el producto, las líneas, etc. y hay otras que se encargan de
distribuir estos productos que posee la primera.
Un rápido recorrido por el mundo empresarial nos muestra lo variado de las estrategias comerciales.
Por ejemplo, algunas empresas eligen vender directamente a los consumidores mientras que otras lo
hacen a través de una red de distribución.
Pero, ¿cuál es la racionalidad que debe guiar la elección? ¿Cuándo conviene cada estrategia?
En general, la estrategia directa ofrece una atención al cliente más dedicada y, principalmente, una
mayor facilidad para hacer negocios "taylor made", es decir, adaptados a las necesidades del cliente.
No obstante, esta estrategia también implica una mayor utilización de recursos. La estructura
comercial de la empresa debe incluir un plantel de vendedores, servicio de atención al cliente y
personal de administración, finanzas y logística.
Así, una gran desventaja de esta estrategia radica en una mayor cantidad de costos directos asociados
al proceso de venta.
Ahora bien, esta desventaja se agrava en mercados de productos masivos consumidos por una gran
cantidad de clientes en un amplio rango geográfico.
En principio, podemos distinguir entre dos casos extremos: el modelo "dealers" (donde existe una
menor relación entre fabricante y distribuidor) y el de franquicia (donde existe una fuerte
dependencia del franquiciado respecto del fabricante).
En el modelo dealers, del que nos ocuparemos en este artículo, el vendedor tiene un compromiso de
compra y obtiene descuentos en función de los volúmenes adquiridos.
En el libro "Canales de Distribución", Hugo Rodolfo Paz nos presenta las ventajas de este modelo:
Ahora bien, para capitalizar las ventajas del modelo indirecto, es necesario que la empresa desarrolle
una sólida relación con sus distribuidores.
Todas las ventajas del modelo pueden echarse a perder si los distribuidores carecen de la capacidad o
profesionalismo para vender adecuadamente los productos de la empresa.
El comportamiento del consumidor suele ser demasiado complejo como para explicarlo con
una o dos características, se deben tomar en cuenta varias dimensiones, partiendo de las
necesidades de los consumidores. Se recomienda pues, presentar ofertas de mercado
flexibles al segmento de mercado.
La oferta de demanda flexible consiste en: Una solución que conste de elementos del
producto y servicio que todos los miembros del segmento valoran y opciones que solo unos
cuantos valoren, cada opción implica un cargo adicional.
Una buena segmentación debe tener como resultado subgrupos o segmentos de mercado
con las siguientes características:
Por lo general, las empresas u organizaciones que ya tienen cierto tiempo en el mercado
suelen tener una amplia variedad de clientes, por ejemplo, de compra frecuente, de compra
ocasional, de altos volúmenes de compra, etc.; quienes —esperan— servicios, precios
especiales, tratos preferenciales u otros que estén adaptados a sus particularidades.
Esta situación, plantea un gran reto a los mercadólogos porque está en juego no solo la
satisfacción del cliente y/o su lealtad, sino también, la adecuada orientación de los esfuerzos
y recursos de la empresa u organización.
Por ello, es fundamental que los mercadólogos conozcan a profundidad cuáles son los
diferentes tipos de clientes que tiene la empresa u organización y el cómo clasificarlos de la
forma más adecuada, para que luego, puedan proponer alternativas que permitan adaptar la
oferta de la empresa a las particularidades de cada tipo de cliente.
En ese sentido, en el presente artículo se revelan diversos tipos de clientes que están
clasificados según su relación actual o futura con la empresa. Todo lo cual, puede ser
utilizado por el mercadólogo como base o modelo para clasificar a sus clientes.
En primer lugar, y en un sentido general, una empresa u organización tiene dos tipos de
clientes:
En este punto, cabe señalar que cada objetivo necesitará diferentes niveles de esfuerzo y
distintas cantidades de recursos. Por tanto, y aunque parezca una clasificación demasiado
obvia, se la puede considerar como decisiva para el éxito de una empresa u organización,
especialmente, cuando ésta se encuentra en mercados de alta competencia.
En segundo lugar, cada uno de éstos dos tipos de clientes (actuales y potenciales) se dividen
y ordenan de acuerdo a la siguiente clasificación (la cual, permite una mayor
personalización):
1. Clientes Activos e Inactivos: Los clientes activos son aquellos que en la actualidad están
realizando compras o que lo hicieron dentro de un periodo corto de tiempo. En cambio,
los clientes inactivos son aquellos que realizaron su última compra hace bastante tiempo
atrás, por tanto, se puede deducir que se pasaron a la competencia, que están
insatisfechos con el producto o servicio que recibieron o que ya no necesitan el producto.
Esta clasificación es muy útil por dos razones: 1) Porque permite identificar a los clientes
que en la actualidad están realizando compras y que requieren una atención especial
para retenerlos, ya que son los que en la actualidad le generan ingresos económicos a la
empresa, y 2) para identificar aquellos clientes que por alguna razón ya no le compran a
la empresa, y que por tanto, requieren de actividades especiales que permitan identificar
las causas de su alejamiento para luego intentar recuperarlos.
2. Clientes de compra frecuente, promedio y ocasional: Una vez que se han identificado a
los clientes activos, se los puede clasificar según su frecuencia de compra, en:
Clientes de Compra Frecuente: Son aquellos que realizan compras repetidas a menudo o
cuyo intervalo de tiempo entre una compra y otra es más corta que el realizado por el
grueso de clientes. Este tipo de clientes, por lo general, está complacido con la empresa,
sus productos y servicios. Por tanto, es fundamental no descuidar las relaciones con ellos
y darles continuamente un servicio personalizado que los haga sentir "importantes" y
"valiosos" para la empresa.
Clientes de Compra Habitual: Son aquellos que realizan compras con cierta regularidad
porque están satisfechos con la empresa, el producto y el servicio. Por tanto, es
aconsejable brindarles una atención esmerada para incrementar su nivel de satisfacción,
y de esa manera, tratar de incrementar su frecuencia de compra.
Clientes de Compra Ocasional: Son aquellos que realizan compras de vez en cuando o por
única vez. Para determinar el porqué de esa situación es aconsejable que cada vez que un
nuevo cliente realice su primera compra se le solicite algunos datos que permitan
contactarlo en el futuro, de esa manera, se podrá investigar (en el caso de que no vuelva
a realizar otra compra) el porqué de su alejamiento y el cómo se puede remediar o
cambiar ésa situación.
3. Clientes de alto, promedio y bajo volumen de compras: Luego de identificar a los clientes
activos y su frecuencia de compra, se puede realizar la siguiente clasificación (según el
volumen de compras):
Clientes con Alto Volumen de Compras: Son aquellos (por lo general, "unos cuantos
clientes") que realizan compras en mayor cantidad que el grueso de clientes, a tal punto,
que su participación en las ventas totales puede alcanzar entre el 50 y el 80%. Por lo
general, estos clientes están complacidos con la empresa, el producto y el servicio; por
tanto, es fundamental retenerlos planificando e implementando un conjunto de
actividades que tengan un alto grado de personalización, de tal manera, que se haga
sentir a cada cliente como muy importante y valioso para la empresa.
Clientes con Promedio Volumen de Compras: Son aquellos que realizan compras en un
volumen que está dentro del promedio general. Por lo general, son clientes que están
satisfechos con la empresa, el producto y el servicio; por ello, realizan compras
habituales.
Para determinar si vale la pena o no, el cultivarlos para que se conviertan en Clientes con
Alto Volumen de Compras, se debe investigar su capacidad de compra y de pago.
Clientes con Bajo Volumen de Compras: Son aquellos cuyo volumen de compras está por
debajo del promedio, por lo general, a este tipo de clientes pertenecen los de compra
ocasional.
Clientes Altamente Influyentes: Este tipo de clientes se caracteriza por producir una
percepción positiva o negativa en un grupo grande de personas hacia un producto o
servicio. Por ejemplo, estrellas de cine, deportistas famosos, empresarios de renombre y
personalidades que han logrado algún tipo de reconocimiento especial.
Lograr que estas personas sean clientes de la empresa es muy conveniente por la
cantidad de clientes que pueden derivar como consecuencia de su recomendación o por
usar el producto en público. Sin embargo, para lograr ese "favor" se debe conseguir un
alto nivel de satisfacción (complacencia) en ellos o pagarles por usar el producto y hacer
recomendaciones (lo cual, suele tener un costo muy elevado).
Clientes de Regular Influencia: Son aquellos que ejercen una determinada influencia en
grupos más reducidos, por ejemplo, médicos que son considerados líderes de opinión en
su sociedad científica o de especialistas.
Por lo general, lograr que éstos clientes recomienden el producto o servicio es menos
complicado y costoso que los Clientes Altamente Influyentes. Por ello, basta con
preocuparse por generar un nivel de complacencia en ellos aunque esto no sea rentable,
porque lo que se pretende con este tipo de clientes es influir en su entorno social.
Clientes de Influencia a Nivel Familiar: Son aquellos que tienen un grado de influencia en
su entorno de familiares y amigos, por ejemplo, la ama de casa que es considerada como
una excelente cocinera por sus familiares y amistades, por lo que sus recomendaciones
sobre ese tema son escuchadas con atención.
Para lograr su recomendación, basta con tenerlos satisfechos con el producto o servicio que
se les brinda.
2) Clientes Potenciales Según su Posible Volumen de Compras: Esta es otra clasificación que
se realiza mediante una previa investigación de mercados que permite identificar sus
posibles volúmenes de compras en el caso de que se conviertan en clientes actuales; por
ello, se los divide de manera similar en:
http://www.degerencia.com/tema/ventas
http://www.conocimientosweb.net/zip/article1472.html
http://www.buenastareas.com/temas/comportamiento-vendedor/0
http://www.promonegocios.net/venta/tipos-vendedores.html
http://www.monografias.com/trabajos13/segmenty/segmenty.shtml
http://www.promonegocios.net/clientes/tipos-clientes.html