Las características económicas más resaltantes del periodo de la República
Aristocrática son las siguientes: la agro-exportación (azúcar y algodón), la
extracción de caucho, la minería (cobre) y la extracción de petróleo. El azúcar era el principal producto de exportación en la costa norte, sobre todo en el primer boom azucarero en 1890. Sin embargo, en 1902 esta industria experimentó una crisis y su precio bajo en el mercado internacional. Esto causo la quiebra de los pequeños y medianos propietarios que tuvieron que vender sus haciendas. Estas terminaron siendo absorbidas por las grandes plantaciones azucareras que se mejoraron con maquinaria moderna. Al llegar el segundo boom en 1914, la industria azucarera norteña se encontraba en buenas condiciones para afrontar esta gran demanda originada por la 1ra Guerra Mundial. Esta fue la época de oro de los barones del azúcar que lograron acumular cerca de 10 millones de dólares. El algodón fue el segundo producto de exportación después del azúcar. Se producía principalmente en Ica y los valles del norte de Lima. En 1905, el cultivo de algodón cubría cerca de 20 mil hectáreas, brindaba trabajo a 16 mil personas y tenía un alto rendimiento anual. Lamentablemente estos cultivos casi siempre estaban expuestos a la enfermedad de Wilt (marchitamiento) pero en 1908 gracias a los esfuerzos Fermín Tangüis se halló una planta resistente a esta enfermedad. De esta forma el algodón “Tangüis” les brindo excelentes beneficios a los agricultores colocando a Perú como el productor del mejor algodón del mundo. Antes de la 1ra Guerra Mundial, el volumen de exportación había aumentado considerablemente por lo que en esta parte del país el algodón fue desplazando al azúcar. La extracción de caucho impulso el desarrollo de la economía en la selva debido a que en 1880, Europa y Estados Unidos tenían mucha demanda de este producto. En ese entonces, Perú y Brasil se convierten en principales exportadores de caucho, el cual proviene de la recolección en los arboles de goma. Esta actividad lo realizaban indios nativos esclavizados a trabajar, lo que provocó un escándalo internacional por parte de estas compañías. En 1912, estas exportaciones alcanzan el 30% de las exportaciones totales del país. Finalmente, los precios del caucho disminuyen en el mercado internacional en 1915 y en 1920 termina definitivamente el boom del caucho. La minería resurgió después de la Guerra del Pacífico gracias al impulso de la explotación de plata en Casapalca y Morococha. Pero 1892, con la caída internacional del precio de la plata y la suspensión de la acuñación de monedas de plata, hizo que las ganancias de los empresarios mineros disminuyeran. Sin embargo en esa misma época se inicia el boom internacional del cobre por lo que este recurso se empieza a explotar. La culminación del tren de La Oroya en 1893 permite que las inversiones norteamericanas ingresen y compren la mayoría de las minas. El ingreso de estos capitales expande la minería gracias al uso de nueva tecnología, pero las utilidades de estos negocios se iban a los Estados Unidos. A pesar de eso, queda dinero suficiente para que los empresarios locales puedan generar producción y comercio. La extracción de petróleo se encontraba en manos de empresas extranjeras ubicadas en Piura y Tumbes. La explotación de este recurso aumenta por el incremento de la demanda nacional e internacional en 1904. Antes de la 1ra Guerra Mundial, el complejo petrolífero La Brea y Pariñas que estaba en manos de los británicos es comprado por la empresa norteamericana International Petroleum Company. Esta empresa obtenía grandes ganancias y pagaban impuestos ridículamente bajos a causa de su influencia política.