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6.2.5. Subsidencia.

La subsidencia en geología describe el progresivo hundimiento de una superficie,


generalmente de la litosfera, bien sea por el movimiento relativo de las placas tectónicas
que incluyen tanto la convergencia de las mismas como su divergencia o, en una escala
menor, por el asentamiento del terreno en las cuencas sedimentarias (a menudo
acelerado por la acción humana, como es el caso de las cuencas petroleras) o por el cese
de la actividad volcánica en áreas reducidas en torno a los volcanes propiamente dichos,
como sucede en el caso de los atolones.

6.4. EVALUACION GEOTECNICA

6.4.1. Análisis de estabilidad de taludes.


Por talud se entiende una porción de vertiente natural cuyo perfil original ha sido
modificado con intervenciones artificiales relevantes con respecto a la estabilidad.

Para resolver un problema de estabilidad es necesario tener en cuenta las ecuaciones de


campo y los vínculos constitutivos. Las primeras tienen que ver con el equilibrio, mientras
que los vínculos describen el comportamiento del terreno. Tales ecuaciones son
particularmente complejas ya que los terrenos son sistemas multifase, que se pueden
convertir en sistemas monofase solo en condiciones de terreno seco, o de análisis en
condiciones drenadas.

En la mayor parte de los casos nos encontramos con suelos que además de saturados,
son también bifase, lo que vuelve notoriamente complicado el análisis de las ecuaciones
de equilibrio. Además, es prácticamente imposible definir una ley constitutiva de validez
general, ya que los terrenos presentan un comportamiento no-lineal y aún en caso de
pequeñas deformaciones, son anisótropos y su comportamiento depende no solo del
esfuerzo desviador, sino también del normal. Para enfrentar estas dificultades se
introducen hipótesis que ayuden a simplificar:

Se usan leyes constitutivas simplificadas: modelo rígido perfectamente plástico. Se


asume que la resistencia del suelo se expresa únicamente con los parámetros
cohesión (c) y ángulo de rozamiento (φ), constantes para el terreno y característicos del
estado plástico. Por tanto, se considera válido el criterio de rotura de Mohr-Coulomb.

En algunos casos se satisfacen solo en parte las ecuaciones de equilibrio.

Método del equilibrio límite (LEM)

El método del equilibrio límite consiste en estudiar el equilibrio de un cuerpo rígido,


constituido por el talud y por una superficie de deslizamiento de cualquier forma (línea
recta, arco circular, espiral logarítmica). Con tal equilibrio se calculan las tensiones de
corte (𝜏) y se comparan con la resistencia disponible (𝜏𝑓), calculada según el criterio de
rotura de Coulomb: De tal comparación deriva la primera indicación de estabilidad, con el
coeficiente de seguridad:
𝑭 = 𝝉𝒇 /𝝉

Entre los métodos del equilibrio último hay algunos que consideran el equilibrio global del
cuerpo rígido (Culman) mientras que otros, por falta de homogeneidad, dividen el cuerpo
en rebanadas y consideran el equilibrio de cada una (Fellenius, Bishop, Janbu, etc.).

6.4.2. Falla sísmica inducida.


En general, la sismicidad inducida se refiere a los eventos sísmicos que resultan
de la actividad humana. Hay diferentes maneras en las que la actividad humana
pueden causar sismicidad inducida, incluyendo operaciones geotérmicas,
represamiento de embalses (agua detrás de represas), inyecciones de residuos
de agua y operaciones de petróleo y gas tales como la fracturación hidráulica.

Es importante usar las herramientas adecuadas para monitorear la sismicidad


inducida para observar con precisión el número de eventos sísmicos asociados
(Fallas, deslizamientos, etc) con la inyección y lo más importante, su ubicación y
magnitud. En particular, es importante registrar eventos de alta magnitud que se
ubican cerca de la zona de inyección o aquellos asociados con una falla conocida
en el área de interés. Muchas empresas adoptan un sistema de semáforos donde
los eventos sísmicos se clasifican por una serie de umbrales de magnitud. Los
eventos de luz verde son eventos más pequeños que se ubican en su zona
esperada y no son motivo de preocupación; las operaciones pueden continuar
como de costumbre. Los eventos de luz amarilla son eventos de mayor magnitud
y/o grupos de eventos que están saliendo de la zona esperada; las operaciones
pueden continuar, pero las condiciones deberán observarse cuidadosamente y los
operadores deben de estar listos para dejar de operar si las condiciones cambian.
Finalmente, los eventos de luz roja exceden los umbrales predeterminados y
requieren que se cesen las operaciones de inyección inmediatamente.

6.4.3. Hidroconsolidación.
Hidroconsolidación es esencialmente lo contrario de la hinchazón de suelos. En
las zonas secas con una mezcla de arena, limo y arcilla, partículas de arcilla o
limo seco actúan como una especie de cemento, la celebración de las partículas
de arena en una matriz abierta con espacios de aire en el medio. Esta estructura
del suelo abierto es vulnerable a la infiltración de agua en forma de remojo lluvia,
irrigación o tuberías rotas. El flujo repentino de agua disuelve el limo y arcilla,
haciendo que los espacios de aire entre los artículos de arena al colapso y la
zona afectada a hundirse, a menudo de manera espectacular.

6.4.4. Suelos expansivos


Se conocen como suelos expansivos aquellos que presentan expansiones o
contracciones, ósea cambios de volumen cuando varía su humedad o contenido de agua.
Los materiales de arcilla, tienen la capacidad de absorber una gran cantidad de agua y
retenerla debido a su estructura, el agua produce el incremento del volumen en el material
mencionado anteriormente y también una drástica reducción del volumen cuando el agua
que retenía se seca.

Los suelos expansivos resultan ser un gran problema para la construcción, porque los
incrementos del volumen no se presentan de una manera uniforme, sino todo lo contrario
al producirse incrementos en distintas zonas y al momento de contraerse generan
asentamientos, que pueden dañar severamente las estructuras.

El contenido de humedad es la cantidad de agua o humedad que se presenta en un suelo,


varía en un límite muy amplio, dependiendo de cada zona geográfica. Se expresa como
un porcentaje. El contenido de humedad es un factor muy importante cuando se habla de
la expansión de suelos ya que nos puede indicar donde se podrían presentar expansión
si tienen materiales arcillosos.

Además, la humedad es el elemento que hace posible el fenómeno de la expansión, ya


que, si no hay variación en el contenido de humedad del suelo, por más montmorillonita
que contenga una arcilla, no se presentará un cambio en los valores volumétricos.

No es necesario que el suelo se sature de agua completamente para que se presente


expansión del mismo.

Una de las causas por las que se presentan los suelos expansivos son las condiciones
climáticas, que influyen de manera directa al comportamiento de estos suelos. Una
expansión se genera debido al agua, por lo que es más propenso a encontrar suelos
expansivos en áreas donde las lluvias sean moderadas y frecuentes. Otro factor
importante es la presencia de aguas subterráneas que se filtran de la superficie.
Formas de identificar suelos expansivos.

Los suelos expansivos se pueden identificar visualmente por varias características, tienen
alta plasticidad, si observamos el terreno encontraremos grietas o rajaduras, esto se debe
a la expansión y contracción constante que sufre la superficie de estos suelos cuando hay
variación de la humedad.

La identificación mineralógica es uno de las principales formas usadas para ubicar suelos
expansivos, los métodos más recomendados para la identificación mineralógica son:
difracción de rayos x, análisis térmico diferencial, análisis químico, absorción de tinte y la
microscopía electrónica. Consisten en detectar la presencia de minerales arcillosos, que
pueden resultar ser expansivos. Sin embargo, esta forma de identificación no es muy útil
para la práctica de ingeniería ya que pueden llegar a ser muy costosos y requiere un
amplio conocimiento.

Otra forma es la determinación de propiedades básicas del suelo. Las propiedades que
se busca obtener son: límite líquido y plástico, límite de contracción, contenido de coloides,
expansión libre del suelo.

Los suelos, según la naturaleza, cantidad de agua, presentan propiedades para ser
incluidos en el estado sólido, semisólido, plástico o semilíquido. La cantidad de agua de
un suelo, así como el límite al que se produce el cambio de estado varía de un suelo a
otro. Los contenidos de agua o humedad con los cuales se producen los cambios de
estados, son llamados límites de Atterberg.

Límite líquido: “es el límite entre los estados semi líquido y plástico”, según Atterberg.

Límite plástico: “es el límite entre los estados plástico y semisólido”, según Atterberg.

Límite de contracción: “humedad máxima de un suelo para la cual una reducción de la


humedad no causa una variación del volumen del suelo”, según Atterberg.

Métodos

Identificación por métodos indirectos que consisten en identificar el potencial expansivo


del suelo de forma cualitativa, la desventaja de este usar este tipo de métodos es que
obtenemos datos muy variables, que dependen del tipo de suelo que es analizado.

Métodos directos para la identificación de suelos expansivos, consisten en saturar el suelo


en diferentes condiciones de carga para poder medir la expansión que presente y graficar
las variaciones de hinchazón.

Se reconocen dos parámetros que definen el Potencial de Hinchamiento, los cuales son:

Presión de hinchamiento (PS). Es la presión aplicada en laboratorio sobre una muestra de


suelo expansivo, se añaden cargas para no permitir el hinchamiento, la presión máxima
que hay que añadir para que no haya hinchamiento, es decir se mantenga su volumen
inicial es conocida como presión de hinchamiento.
Hinchamiento libre (Hc). Se expresa como el porcentaje de la elevación máxima, cuando
hay presión nula en relación a la longitud inicial.

Para lograr medir estos parámetros se realizan pruebas de odómetro o basadas en


técnicas de succión, tratando de simular los factores que pudieran ser relevantes al
momento de presentarse este fenómeno de manera natural. Para lograr dicho objetivo se
han propuesto diversos métodos experimentales. Resultando las diferentes predicciones
precisas al utilizar estos métodos, también existen algunas variables tales como: tamaño
y forma de la muestra, forma de simular las condiciones reales en el edómetro, entre otras,
las cuales hacen que se obtengan diferencias en los resultados obtenidos y se creen
discrepancias al momento de tratar de predecir el comportamiento de los suelos.

Ante la presencia de suelos expansivos, las acciones más adecuadas son:

Reducir o eliminar la expansión del suelo y actuar sobre la estructura y mediante la


selección de un diseño adecuado de cimentación.

Existen diferentes formas para reducir o eliminar la expansión del suelo, una de ellas es
inundar el suelo antes de realizar una construcción, dicha práctica es llamada
“prehumectación del suelo”, en teoría al inundar el suelo y saturarlo permitiéndole que se
expanda hasta su máximo potencial, manteniendo la humedad posteriormente, se deben
evitar los cambios volumétricos, por lo que no se tendrían daños en la estructura después
de construir. Se ha logrado determinar que la humedad de las áreas cubiertas por losa,
pavimento, etc., rara vez decrece.

Sin embargo, existen muchas desventajas para este método, es muy difícil que se obtenga
una variación uniforme en la humedad del suelo. Además, los suelos arcillosos que
resultan ser los potencialmente expansivos son muy difíciles de pre humectar, ya que el
agua puede penetrar por diferentes lados y obtener una humectación dispareja.

Otra forma más efectiva es sustituir el material expansivo, esta alternativa consiste en
reemplazar el material expansivo por otro que no lo sea. Los materiales que se pueden
usar de relleno principalmente, no deben ser expansivos, deben tener una cierta
permeabilidad para evitar que el agua llegue a los materiales arcillosos y expansivos
subyacentes.

Con la tecnología actual, la sustitución de suelos puede ser considerada como una de las
mejores opciones para eliminar el problema de suelos expansivos.

Las desventajas de esta alternativa son que para llevarlo a cabo se necesita maquinaria
pesada para poder remover el material expansivo y del mismo modo para rellenar de
material que no lo sea, lo cual podría resultar muy costoso.
Otra forma de reducir o eliminar totalmente distinta los suelos expansivos es actuando
sobre la estructura y el sistema de cimentación.

Estos son algunos de los métodos principales para lograr que la cimentación se adapte a
las deformaciones que puedan resultar debido a los suelos expansivos, esto se hace
dando la rigidez o flexibilidad adecuada a la estructura.

Fundaciones superficiales en suelos expansivos: este tipo de cimentación también


llamadas zapatas, pueden ser usadas en subsuelos conformados por materiales
expansivos.

Zapatas corridas
Zapatas aisladas.

Bibliografía
Adrián Oscar Macías Loor, L. S. (2018). Mecánica de Suelos-Tomo II. Madrid: Área de
innovación y desarrollo S.L.

Augusto Pérez Alberti, Juan López Bedoya. (2006). Geomorfología y territorio. Madrid: Rella
S.L.

Fernández, M. B. (2014). Geología. Madrid: Carmen Lara Carmona.

Piera, J. V. (1908). Manual de Geología Aplicada. Madrid: Imprenta Nacional.

Ramos, E. L. (2009). Geologia general de México. México.

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