Se estudian ciertas zonas donde la alteración presentó cambios y sus etapas constan en:
6– es de considerar que el 95% de la corteza terrestre está formada por silicatos y las
arcillas son, pues, una rama de los silicatos y su formación obedecieron a tres mecanismos
1) por herencia, 2) por neoformación y 3) por transformación. El primer mecanismo indica
que el material arcilloso fue derivado directamente de una roca madre y es este tipo de
arcillas el que predomina en los sedimentos de lagos y mares. Los otros dos mecanismos
implicaron una reacción química entre varios componentes a partir de la arcilla original,
requiriendo de mayor energía y de ciertas condiciones hidrotérmicas. Estos mecanismos
están relacionados con la latitud en el planeta, de modo que encontramos que el primer
mecanismo fue más común en las regiones árticas, mientras que la neoformación y la
transformación resultaron dominantes en los trópicos húmedos. A las arcillas que se
presentan como una pasta suave se les llama lodos, mientras que aquellas que tienen la
apariencia de un sólido blancuzco se les denomina piedra lodosa o roca laminada.
7 -Los suelos de las zonas tropicales son suelos que están altamente influenciados por
factores tales como el clima, la temperatura, en ello hay materiales amorfos que pueden
reestructurasen conllevando a la formación de materiales secundarios es decir arcillas
gracias a la coprecipitacion de elementos como el Si, Mg y así la formación de algunas
arcillas como por ejemplo montmorillonita.
La vegetación, energía, descomposición, tiempo entre otros factores favorecen el proceso
de meteorización y formación de minerales secundarios.
En las zonas tropicales y subtropicales donde la superficie de la tierra está cubierta por una
vegetación densa que facilita la infiltración del agua, por aumento de los tiempos de
retención del agua y a su vez son sujetas a lluvias fuertes. En climas secos o áridos la
meteorización química es subsuperficial, lenta y predominan los fenómenos de
meteorización de tipo mecánico, igualmente esto ocurre en zonas tropicales montañosas,
con poca vegetación, donde las pendientes altas del terreno no facilitan la infiltración del
agua lluvia
La descomposición puede ser ocasionada por procesos químicos o biológicos. Los procesos
principales de meteorización química dependen de los procesos del agua y en algunos
casos de la disponibilidad de agua para mantener la química requerida en el proceso, Con
una disponibilidad alta de agua, las soluciones son más diluidas y pueden atacar más
fácilmente los minerales. Cuando la disponibilidad de agua es muy baja, las soluciones se
saturan con los productos de las reacciones.
Algunos minerales sufren procesos de hidratación o deshidratación, lo cual genera
cambios de volumen. Estos cambios de volumen son los responsables de la rotura o
desintegración que se observa en las rocas que contienen minerales de arcilla.
8- La superficie de estas zonas presenta mayormente suelos con aragonito, yeso, calcita,
magnesita entre otros, para el caso de la calcita y la aragonito están formadas por CaCO3
que es producto de la precipitación y la alteración de la materia orgánica, además tanto la
calcita como la aragonita están reaccionando con el Fe y Mg.
Para el caso del yeso que es propenso en zonas áridas, asociado a depósitos calcáreos,
oxidación de materia orgánica y donde los elementos SO4Ca influyen en la presencia de
calcio.
La magnesita MgCO3 es un mineral menos común por que requiere un PH mayor 8.5, esto
sucede porque el magnesio puede estar en solución a valores de PH que el calcio no.
Estos hechos, sumado al de la altitud sobre el nivel del mar, ha contribuido a formar un
ambiente agradable y unos suelos los cuales permiten el desarrollo de la gran fertilidad.
Las arcillas son las protagonistas en la formación de los suelos agrícolas y sus propiedades
son determinantes para el crecimiento de los vegetales. Por otra parte, la mineralogía del
suelo es resultado de diversos factores, el clima y el intemperismo, así tenemos que en las
regiones tropicales predominan los caolines mezclados con óxidos minerales (oxisoles) y
los suelos negros formados por esmectitas expandibles (vertisoles) combinadas.