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UNIVERSIDAD DE PANAMÁ

Centro Regional Universitario De San Miguelito

FACULTAD DE ADMINISTRACIÓN PÚBLICA

Licenciatura En Administración Pública

PSICOLOGÍA

LOS CUATRO ACUERDOS

PRESENTADO POR:

Zenaida Peñaloza

GRUPO

AP-1-2

PROFESOR

Dalila Herrera

AÑO

2018
INTRODUCCIÓN

El presente resumen pertenece al libro los cuatro acuerdos, un libro escrito por
Miguel Ruiz proveniente de México quien cuenta que un día recibió la iluminación
y eso le permitió ver aspectos que son importantes para ser más felices.

En su libro habla sobre cuatro acuerdos fundamentales para alcanzar de manera


más concreta dicha felicidad.

El primer acuerdo trata sobre el poder de las palabras, tus palabras pueden hacer
mucho bien o mucho mal, pueden hacer surgir o destruir si así lo deseas.

El segundo acuerdo es no tomarse nada personalmente ya que lo que diga una


persona de ti, es su criterio que puede estar plagado de egoísmo y que no vale la
pena sufrir por opiniones ajenas.

El tercer acuerdo es no hacer suposiciones, hacer suposiciones no es bueno


porque no es la verdad y la verdad se consigue comunicándonos para clarificar las
situaciones que se presentan a lo largo de nuestra vida.

Y el último acuerdo nos dice que debemos hacer nuestro máximo esfuerzo en
cada cosa realizada, da todo de ti, no por recompensa, sino por amor.
LOS CUATRO ACUERDOS

Resumen

PRIMER ACUERDO
“SÉ IMPECABLE CON TUS PALABRAS”

¿Por qué tus palabras? Porque constituyen el poder que tienes para crear.
En la Biblia, el Evangelio según San Juan: “En el principio existía el Verbo y el
Verbo estaba con Dios, y el Verbo era Dios”. Mediante la palabra se expresa el
poder creativo.
Lo que sueñas, lo que sientes y lo que realmente eres, lo muestras por medio de
las palabras.
Pueden crear el sueño más bello o destruir todo lo que te rodea.
Las palabras te liberaran o te esclavizarán más de lo que imaginas.
La mente humana es un campo fértil en el que constantemente se están plantando
semillas, ideas, conceptos. Tú plantas una semilla y ésta crece. Debemos
comprender cuál es el poder que emana de Ti.
Las palabras captan nuestra atención, entran en nuestra mente y cambian por
entero, para bien o para mal, nuestras creencias.
Cuando eres impecable asumes la responsabilidad de tus actos, pero sin juzgarte
ni culparte.
Con las palabras podemos hechizar a alguien o liberarlo de un hechizo.
Impecabilidad significa sin pecado y pecado es hacer algo que va en contra de ti
mismo. Cuando eres impecable, asumes la responsabilidad de tus actos, sin
culparte ni juzgarte.
Ser impecable con las palabras implica no utilizarlas en contra de uno mismo.
Hemos aprendido a hacer de la mentira un hábito al comunicarnos con los demás,
y aún más importante, al hablar con nosotros mismos. No somos implacables con
nuestras palabras.
Contar chismes se ha convertido en la principal forma de comunicación en la
sociedad. Es la manera que utilizamos para sentirnos cerca de otras personas,
porque ver que alguien se siente tan mal como nosotros, nos hace sentir mejor.
Un pequeño virus informático es capaz de generar un lio de este tipo. Una mínima
información errónea puede estropear la comunicación entre las personas e
infectara a todos aquellos que toca, que a su vez contagian a más gente.
Imagínate que cuando otras personas te cuenten chismes, introducen virus
informáticos en tu mente que hacen que pienses cada vez con menos claridad.
Después imagina que, en un esfuerzo por aclarar tu propia confusión y para
aliviarte del veneno, tú también chismorreas y contagias estos virus a otras
personas.
Es necesario que empecemos a comprender lo que son las palabras y lo que
hacen. Si entiendes el primer acuerdo (Sé impecable con tus palabras), verás
cuántos Cambios ocurren en tu vida.
SEGUNDO ACUERDO

“NO TE TOMES NADA PERSONALMENTE”


La importancia personal, esto es, o el tomarse todas las cosas personalmente, es
la expresión máxima del egoísmo, porque consideramos que todo gira a nuestro
alrededor.
Todos vivimos en nuestro propio sueño, en nuestra propia mente; los demás están
en un mundo completamente distinto de aquel que vive cada uno de nosotros.
Lo que esa persona lo que hace y las opiniones responden a los acuerdos que ha
establecido en su propia mente.
Si alguien te da su opinión y te dice: ¡Oye estás muy gordo!, no te lo tomes
personalmente, porque la verdad es que se refiere a sus propios sentimientos,
creencias y opiniones. Si evitamos tomarnos personalmente las opiniones ajenas
nos hacemos inmunes a ese veneno.
Cuando te tomas las cosas personalmente, te sientes ofendido y reaccionas
defendiendo tus creencias y creando conflictos.
Lo que pienses de mí no es importante para mí y no me lo tomo personalmente.
Si nos enfadamos con otros en realidad nos estamos enfadando con nosotros
mismos ya que el enojo obedece a una reacción que proviene de nuestro propio
sistema de creencias.
No te tomes nada personalmente porque si lo haces, te expones a sufrir por nada.
Cuando no tomarte nada personalmente se convierte en un hábito firme y sólido,
te evitarás, muchos disgustos en la vida.
TERCER ACUERDO
“NO HAGAS SUPOSICIONES”
Tendemos a hacer suposiciones sobre todo. El problema es que, al hacerlo,
creemos que lo que suponen es cierto. Hacemos suposiciones sobre lo que los
demás hacen o piensan.
Por lo general, empezamos a chismorrear a partir de nuestras suposiciones.
Tenemos miedo de pedir una aclaración, hacemos suposiciones y creemos que
son ciertos. Siempre es mejor preguntar que hacer una suposición, porque las
suposiciones crean sufrimiento.
Sólo vemos lo que queremos ver y oímos lo que queremos. No percibimos las
cosas tal como son.
Hacer suposiciones en nuestras relaciones significa buscarse problemas. A
menudo suponemos que nuestra pareja sabe lo que pensamos y que no es
necesario que digamos lo que queremos.
Necesitamos justificarlo, explicarlo y comprenderlo todo para sentirnos seguro.
Tenemos millones de preguntas que precisa respuesta porque hay muchas cosas
que la mente racional es incapaz de explicar.
Hacemos esto porque realizamos acuerdos internos para actuar de esa manera.
Suponemos que todo el mundo ve la vida del mismo modo que nosotros.
Suponemos que los demás piensan, sienten, juzgan y maltratan como nosotros lo
hacemos.
El Amor verdadero es aceptar a los demás tal como son sin tratar de cambiarlos.
Encuentra a alguien a quien no tengas que cambiar, eso significa que, en realidad,
no te aman tal como eres.
La Manera de evitar las suposiciones es preguntar. Asegúrate de que las cosas te
queden claras. Si no comprendes alguna, ten el valor de preguntar hasta
clarificarlo todo lo posible, e incluso entonces, no supongas que lo sabes todo
sobre cada situación en particular.
CUARTO ACUERDO

“HAZ SIEMPRE TU MÁXIMO ESFUERZO”


Este es el acuerdo que permite que los otros tres se conviertan en hábitos
profundamente arraigados, haz siempre tu mejor esfuerzo.
Bajo cualquier circunstancia, haz siempre tu máximo esfuerzo, ni más ni menos.
Independientemente del resultado, sigue haciendo siempre tu máximo esfuerzo, ni
más ni menos. Si intentas esforzarte demasiado para hacer más de lo que puedas,
gastarás más energía de la necesaria, y al final tu rendimiento no será suficiente.
Cuando te excedes, agotas tu cuerpo y vas contra ti, y por consiguiente te resulta
más fácil alcanzar tus objetivos. Por otro lado, si haces menos de lo que puedes
hacer, te sometes a ti mismo a frustraciones, juicios, culpas y reproches.
Limítate a hacer tu máximo esfuerzo, en cualquier circunstancia de tu vida.
Si haces tú máximo esfuerzo, vivirás con gran intensidad. Serás productivo, y
serás bueno contigo mismo porque te entregarás a tu familia, a tu comunidad, a
todo. Pero la acción es lo que te hará sentir inmensamente feliz.
Si emprendes la acción por el puro placer de hacerlo, sin esperar una recompensa
descubrirás aquello que disfrutas de que cosa que llevas a cabo. Si no esperas
una recompensa, es incluso posible que llegues a conseguir más de lo que
hubieses imaginado.
Hacer el máximo esfuerzo implica actuar por amor, no por recompensa.
La mayoría de la gente actúa por la recompensa que espera recibir, por eso no
hacen el máximo esfuerzo.
Si emprendemos una acción por obligación, no haremos el máximo esfuerzo.
La acción es vivir con plenitud, la inacción es una forma de negar la vida.
CONCLUSIONES

 En conclusión el libro nos presentó cuatro acuerdos que son buenos para
ser aplicados y que en definitiva harán que nuestro paso por la tierra sea
mejor.
 Como Conclusión también puedo decir que éste libro me permitió ver la
mentalidad de un tolteca y cómo es su pensamiento, aunque bien es cierto
que la verdad que es para él, no es una verdad para mí ya que difiero en
varios aspectos de la lectura.
 Sin duda alguna el acuerdo más importante es hacer nuestro máximo
esfuerzo, para todo ser humano la vida está cargada de situaciones en la
que debe esforzarse y sin esfuerzo no podrá lograr ninguno de los acuerdos
anteriores.
 Más allá de nuestra religión o creencia, todos buscamos ser felices.

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