Eduardo Guerrero
PALABRAS PRELIMINARES
refiriéndose al montaje de La negra Ester, dice teatral chileno de las primeras décadas del
que "nuestro teatro se podría escribir antes y siglo 20 no difiere sustancialmente del visuali
fecha"
después de esa (1). Indudablemente, a zado en el siglo anterior.
militar de 1973. En función de lo anterior, sector de la sociedad chilena (la clase media),
concluiremos esta ponencia con una mirada con una visión iluminadora del "hombre
crítica a la última temporada teatral, la de nuevo". El tercero, elevado a la categoría de
trágica-costum-
1990, con el objeto de revelar el estado actual clásico por su ya mítica obra
de Apablaza.
1. ALGO DE HISTORIA
2. CREA CION DE LOS TEA TROS
Haciendo un poco de historia, hacia me UNIVERSITARIOS
diados del siglo 19 surge el movimiento cos
tumbrista en la literatura chilena que, con sus Una serie de antecedentes se conjugan en
deseo, en un primer momento, de dar cuenta ellos, no podemos dejar de mencionar la asun
del desarrollo de la incipiente sociedad chile ción al del Frente Popular, en 1938,
poder
na, con sus vicios y virtudes, para proyectar con Pedro Aguirre Cerda a la cabeza. Su polf-
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tica cultural daba un gran respaldo a una clase desmedro muchas veces de la propia calidad
media sobre todo a nivel universi artística.Como señala con cierta exageración
ascendente,
el profesor e investigador Grínor
tario. Además, junto a ello, la presencia de la Rojo, "en
actriz catalana Margarita Xirgú por nuestros vísperas del golpe fascista la riqueza y varie
escenarios le dio no sólo un relieve especial a dad del teatro chileno eran no sólo las más
la temporada artística sino por un lado, grandes de su historia sino que también esta
que,
dio a conocer al dramaturgo español Federico ban entre las más grandes de la historia de
Latina"
los postulados programáticos de estos teatros democrático, con todos los matices pertinen
fue acentuar la teatralidad de los montajes, tes, sino que este acontecimiento llevó consigo
que la década
en de los 60, el aporte de por tanto, que durante los primeros años de la
nada,
los teatros universitarios fue fundamental en dictadura militar llenaran nuestra escena obras
ración de dramaturgos de los teatros universi mentalmente del dramaturgo español Alfonso
tarios", y que comienza a dar fruto en los Paso (a su vez, un paladín de la época fran
años 60, en el aporte de autores como Jorge quista). Por otra parte, los otrora "vanguardis
Díaz, Egon Wolff, Sergio Vodanovic, Isidora
tas"
Sieveking, por nombrar los de mayor trascen por sus propias crisis institucionales. Es así
dencia. Incluso más, en la reciente temporada como su repertorio está constituido, casi en su
teatral de 1988 se segu ía estrenando a muchos totalidad, por un teatro clásico, lo cual "no
de estos autores, aunque la mayoría de las sería censurable si no fuera por el tratamiento
obras eran reestrenos (salvo Oscuro vuelo acartonado y castrante que sobre todo el
ejemplo, tanto en los llamados "trenes de la ficamente con obras de carácter colectivo que
cultura"
como en la infinita cantidad de gru tuvieron como leitmotiv esencial el tema del
pos aficionados a lo largo del país) y, por de la
trabajo. Por lo tanto, la reafirmación
otro, la proyección social de un teatro que llamada "'creación colectiva", una modalidad
buscaba a todas luces la contingencia, en escénica y dramatúrgica que, a fin de cuentas,
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se constituyó en la
de relevo de los
generación representación de otros sectores económicos
y
autores vinculados a los teatros universitarios, sociales marginados.
tiene un día? (de Ictus y Sergio Vodanovic), oportunidad para trabajar en lo que ellos
Tres Marías y una Rosa (del TIT), El último saben hacer. Son los protagonistas de una
tren (del grupo Imagen y Gustavo Meza). historia que tiene la finalidad de mostrarnos
Aparte de la mencionada motivación al desnudo y sin máscaras un tema de por sí
temática,
son obras donde se manifiesta una marcada doloroso y cuya lacra se ha extendido como
tendencia teatral antes que literaria, es decir, un mal endémico social; ellos, como tales
se articulan los lenguajes escénicos con el protagonistas, se enfrentan a un antagonista
objeto de reemplazar la literalidad del lenguaje cuya ausencia hace más relevante el sinsentido
hablado y, así, decir lo que en estricto rigor de esta inútil espera. De alguna manera, José,
no se puede decir, produciéndose una "elo Jorge y Manuel deben llenar el tiempo, deben
del individualidades
silencio"
escritor español Juan Goytisolo, "autocensu escépticas y pesimistas ante un vacío que los
ra", del elipse, exposición indirecta de los
arte acorrala, sino como individuos que "descu
bren"
hechos, alusiones, medias palabras —creando que la solidaridad y la unión son una
así, paralelamente, un público lector ducho en buena forma de concentrar fuerzas dispersas.
el arte de leer entre líneas y captor las inten En última instancia, Los payasos de la
ciones ocultas de un texto aparentemente esperanza es una obra nostálgica, humanita
inocuo"
inofensivo e (6). Quisiéramos hacer ria, con una buena dosis de humor, contin
referencia a cada una de estas creaciones, pero gente y testimonial.
por problemas de espacio y tiempo sólo sinte
esperanza, sintetiza con propiedad la historia a artística y cultural en nuestro país, en reem
representar: tres payasos cesantes —José, Jor plazo del predominio de los teatros universi
ge y
Manuel— se reúnen en una
pieza-oficina, tarios en los 60. Grupos como el Ictus, Imagen,
lugar muy distinto al que debe habitual
ser su Taller de Investigación Teatral (TIT), La
espacio de trabajo, a esperar la concreción de Feria, conscientes del difícil momento histó
rar a la señorita Sonia". Pero ella no llega va, buscaron válidas alternativas artísticas para
resante, desde un punto de vista teatral, es nal en la década recién pasada, podemos vis
cómo el espacio en el cual tiene lugar esta lumbrar tres características predominantes:
mismo, no son unos payasos cualesquiera: son imperante en Chile. Así, nombres como los
los payasos "de la esperanza", portadores de de Juan Radrigán, Marco Antonio de la Parra
la creencia en la justicia divina, tal vez en y Ramón Gríffero pasan a constituirse en una
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trilogía de relieve y de relevo. de Juan Radrigán es el interesante tratamiento
personales, como es el caso del propio Gríffe sociales; Es como si una situación límite (la
ro, de Alfredo Castro, de Willy Semler, de locura) involucrara a otra situación límite (la
Andrés Pérez,de Juan Edmundo González. enfermedad del SIDA).
Por esto mismo, no compartimos las opiniones Dentro del contexto general de la drama
del crítico teatral Wilfredo Mayorga, cuando turgia de Radrigán, es una obra que apela a un
afirma que "los intentos de "renovación tea lenguaje poético (la poética de la marginali
tral'
rios son aún indefinidos, un tanto débiles, no metaforizar el mundo dramático; además,
muestran claridad estética y su presencia continúa líneas indagatorias de obras anterio
(7). Al respecto, Juan res, fundamentalmente en lo que concierne a
ambigua"
escénica es
mericano más que por el propio teatro euro por Lo crudo, lo cocido, lo podrido, La
peo y norteamericano, a causa de los parale secreta obscenidad de cada día, El deseo de
lismos temáticos (críticas a las respectivas toda ciudadana, hasta Infieles, estrenada en
nivel espectacular sea prioritario. propia las mutilaciones, de todo tipo, impues
tas por el régimen/ autoritario. En ella nos
Brevemente, nos queremos referir a estos encontramos con un lenguaje descarnado (el
tres dramaturgos (fundamentalmente a su últi
entre-
lenguaje como mecanismo liberador),
mo estreno nacional) y al espectáculo de La cruzamiento de planos, espacio simbólico,
negra Ester. motivos como los del exilio interno, el dolor/
desilusión, el talento castrado, la sociedad
Juan Radrigán: hostil a todo lo que es arte, la violencia, el
Es conocido por obras en que el tratamiento tros mismos sueños nos hicieron pedazos".
de la marginalidad es una de las temáticas Tal vez, el soñar en imposibles sea la causa de
esenciales. tanta pesadilla. El Teatro de la Pasión Inex
Su última obra es Piedra de escándalo, tinguible —colectivo que puso en escena la
escrita ainstancias del Centro de Educación y obra—
da no por
una respuesta lúcida, pero
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manera, ver una representación de El avaro, La concepción teatral de Ramón Griffero
a lo Griffero, hoy, en el contexto
chileno, es se inserta, en un plano continental, dentro de
un verdadero deleite: nos sirve para reírnos de los espectáculos basados en el predominio de
los demás, reírnos de nosotros mismos y, de la imagen sobre la palabra (o, a lo más, en un
paso, estar al día con la última de Griffero. funcional equilibrio). Por esto mismo, apela a
Desde que Ramón Griffero irrumpió en posibles lecturas, le estará dando las reales
zos de siglo, ya que, por ejemplo, los discursos comunicarse con un tipo de público distinto
estéticos del expresionismo, surrealismo, sim al tradicional y se expresaban a través de
bolismo, ayudan a configurar una nueva múltiples lenguajes escénicos que tenían tanta
"mirada"
ante el objeto artístico. o más fuerza que el lenguaje de la palabra.
Una primera sensación que deja esta pues Si a esto predisposición de acercamiento
sólo a una motivación interna por ocupar un da ternura, lleno de poesía, vital, cautivante,
espacio, con su propio significante, sino que
sugerente, sutilmente simple en su historia,
en sí es portador de múltiples significados. pero a su vez de una gran complejidad por los
Paralelamente, la elegancia del vestuario, la múltiples planos proyectados. Porque cada
luminosidad del espacio escénico, la reluciente una de las actuaciones es una creación singu
gama de colores (con un color rojo de fondo lar, cada uno de los sonidos aporta gran canti
que le da un realce mayor a los celos del Rey), dad de significados, unido todo esto a un
y la escenografía que tiene la virtud de recrear vestuario, unos maquillajes, unos desplaza
una historia
y, a su vez, de acentuar nuestro mientos, unos gestos que generan nuevas
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veces avizorada en nuestros escenarios. obra de Shakespeare). .
clave para el restablecimiento de la democra situaciones vividas por los personajes. Junto a
cia en Chile: triunfa en las urnas el candidato ello, el trabajo de las actrices es bastante
de la Concertación, el demócratacristiano sobrio; a su vez, dentro de su carácter experi
Patricio Aylwin, terminando con ello un mental, de búsqueda, la dirección de Claudia
período de 16 años de dictadura militar. De Echenlque se ajusta a los requerimientos de un
esto manera, la temporada teatral de 1990 se teatro de estas características: indaga el espa
inicia con nuevos bríos, quedando en el olvido cio, provoca quiebres en el ritmo de la obra,
las listas negras, tas amenazas a los actores, los permite que las actrices manifiesten su propia
ponden a obras extranjeras y sólo uno a obras de "se nos siembra para ser
chilenas. título original es Nosotros, Theo y Vicente
En este queremos dejar
breve recuento, Van Gogh). En todo caso, el nivel textual no
testimonio tanto de los principales montajes es ni mucho menos el más significativo en el
de ese año como del desarrollo de los grupos contexto del montaje, ya que el lenguaje vi
dad de Chile, el mal llamado Teatro Nacional Ramón Núñez y Héctor Noguera, pues privile
fue de gia el histrionismo sobre la base de la gestuali
Chileno, no capaz estrenar ninguna
obra (sus eternos problemas presupuestarlos), dad, de la kinésica y del control rítmico de las
salvodos piezas infantiles. sensaciones. Lo anterior se complementa por
movida, aunque dispar. De las cinco produc graduar la intensidad de los momentos exter
ciones, deseamos detenemos en la valoración nos e internos, y por una música que apoya
de dos de ellas {Cariño malo y Theoy Vicente nuestra vivenciade esta "vida en común".
segados por el sol), por su trascendencia e Cuando a fines de 1989 el Teatro de la
importancia. Las tres restantes corresponden a Universidad Católica bautizó la Sala 2 como
(homenaje a los 10
Dittborn"
Ocúpate de Amella (G. Feydeau), En busca de Sala "Eugenio
Pedro Gynt (E. Ibsen, en adaptación de Clau años de 4a muerte de este destacado hombre
dio Pueller) y Hamlet (versión de la inmortal de teatro), se mencionó que uno de los
propo-
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sitos de dicho espacio era crear en él una ins poesía del gesto que posibilitan el juego escé
tancia de experimentación, para así ser fiel a nico y le dan sentido al carácter
ritual, cere
uno de los principios rectores de la creación monial, de esta marginalidad a flor de piel.
del Teatro de Ensayo. De esta manera, las Todo lo anterior apoyado por una música que
experiencias de Cariño malo y de 777eo y produce los quiebres necesarios para mostrar
Vicente segados por el sol vienen a confirmar más en vivo las distintos variaciones de un
esta política, para beneficio del propio teatro sonido que viene del alma; por un vestuario
Poblete es de primera línea), a pesar de que la argentinos (Agustonl, Discépolo, Gene), una
dirección de Meza busca en el despojamiento peruana (Vargas Llosa), una colombiana (Gar
la manera más correcta de acentuar situacio cía Márquez) y una mexicana (Carballido).
nes
melodramáticas, creemos que una novela Realizaremos una breve mención de tres de
como Este domingo admite interpretaciones ellas.
nacidas al interior de su misma condición La Compañía de Investigación Teatral de
textual. En otras palabras, la confirmación de Valparaíso, bajo la dirección de Juan Edmun
que ella es, a mi entender, una muy buena do González, presentó a mediados del año
novela. 1989, en el teatro Mauri de esa ciudad, !a
obra Un extraño ser con alas, adaptación tea
aun, por el de la sociedad. Es una obra intimis- temática, a través de la proyección de encon
ta, plena de emoción, humana, con un equili tradas emociones de carácter universal. A este
brado melodramatismo. mérito inherente a su textualidad hay que
La premisa básica del montaje pareciera sumar, además, el montaje propiamente tal, en
estar en el aspecto poético: una poesía en el que se aunan logros actorales (prioritaria
movimiento, una poesía del espacio, una mente, las actuaciones de Tomás Vidiella y
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Silvia Piñeíro) con una dirección (Jaime Lo expuesto en el párrafo precedente
Vadell) que ha sabido explotar al máximo las surge merced a la motivación que produce una
diversas relaciones entre los personajes. Tam obra como Plnocchlo (Cario Collodi), en la
bién, los otros lenguajes que conforman el versión teatral del grupo La Troppa, donde el
nivel espectacular (vestuario, escenografía, mencionado colectivo hace gala de una esplén
la literatura lati
pretaciones de los tres integrantes de la
la novela original pertenece a
compañía (Laura Pízarro, Jaime Lorca, Juan
noamericana contemporánea. De esto manera,
Carlos Zagal), hay que agregar la interesante
si en su oportunidad celebramos la puesta en
propuesta escénica, donde el trabajo de la
escena de Crónica de una muerte anunciada,
imagen se prioriza sobre el propio texto, en un
ahora lamentamos, por un lado, la adaptación
cado en la proyección de esta modalidad escé destacar las instancias más significativas de
este desarrollo; de esta forma, a través de los
nica. Frente a lo anterior, creemos que la
palabra "creatividad", desde una doble pers
diversos hitos señalados, se va configurando
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NOTAS
1. Marco Antonio DE LA PARRA. "La negra Ester o la redención del teatro chileno", en
8, Juan Andrés PINA. "Modos y temas del teatro chileno: la voz de los 80". Revista
Apuntes, Santiago de Chile, 101 (primavera 90-verano 91), p, 85.
9. Eduardo GUERRERO. "La peligrosa aventura de un montaje como el de Griffero'',
Revisto Apuntes, Santiago de Chile, 96 (otoño 1988), p. 21.
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