Capitulo Vill
jidad profesional
Dafios derivados dela ac
|—Las responsablidades profesionales en la itima década
delsiglo XX ya prospectvaparael slo XXI
—$66—
LLARBSPONSABILIDAD PROFESIONAL EN GENERAL
Quizés un buen punto de partida para la presente exposicion sea
elde comenzar diciendo que la responsabilidad civil de los profesio-
nales no constituye mas que un capitulo dentro del vasto espectro de
Ja responsabilidad civil en general!
Bs la responsabilidad en la que pueden incurrir quienes ejercen
tuna determinada profesién, al faltar a los deberes especificos que
ella les impone; o sea que tal responsabilidad deriva de una infrac-
cin tipica de ciertos deberes propios deesa determinada actividad?,
+ Trabajo labored porel doctor Feu ALEERTO"TRIG0 REPRPSAS.
1 Andorno, “La responsabilidad de os abogados”, en Derecho de davis, Primera
parte, bomenaje al profesor doctor Jorge Masse turrase, ps. 478,n°1,y479,n°35-1V
‘Somnadas Sanjosnines de Derecho Civ", 1989, Comision 18, panto de lege ata (et
[derecho privado en la Argentina, Conclusiones de Congresosy Jornadas de lest
mos reinta aos, p92)
Fpiterini~Ameal-Lapea Cabana, Cursed obligaiones 4*ed, 1992.1, p. 490,
1° 1842, Mazeaud, HeL,- Tune Tatado eoriceyprictice de la responsabilidad ceil
Aelictualy contractual, Sed. vol- lps 146, a"462,y 163,n° 507; Cém. 2° Civ. Com
Mines, Pasy TribatarioMendoas, 2/09, "Benasayag e.Carriao'.JA, 1978-11178322 Félix Alberto Trigo Represas
ya que es obvio que todo individuo que practique una profesién debe
poseer los conocimientos teéricos y practieas propios de la misma, y
obrar con la diligencia y previsién necesarias con ajuste a las reglas
xymétodos que correspondan®. Ergo, en lo primordial, nada hay en la
responsabilidad profesional que difiera de los prineipios esenciales
de la responsabilidad civil en general‘, sin perjuicio de las particula-
ridades propiaso matices diferenciales que en cada concreta respon-
sabilidad profesional puedan presentar aquellos principios genera-
les, tal como lodestacara Chironi al expresar que: “ni para la imperi-
cia, ni para los errores profesionales, se deben establecer teorias es-
peciales.... no son modos especiales de culpa, sino que entran en los
conceptos fijados en materia de comportamienta ilicito"®,
Te
CoNCRPTO DE PROFBSION LIBERAL
Nos ocuparemos del concepto de “profesin” (el cual es “equivoco”,
al decir de Alterini y Lépez Cabana, “seguramente porque ha sido
traido alaley desde el lenguaje nojurfdico”®)y mas precisamente de
la nocién de *profesién liberal’, que exige algunas otras precisiones.
3 CNGiv, Sala, 21/7, Malas’, LL, 1978-4585 y BD, 81-719, sums. 56y
58.61, Tih. Buca Farese, 1789,°1, WA EL, 1964-8314 14, 19861175, 6,
102-400; den, 51582, "D J.C, BD, 102-463
cut Anzorena, esponsabildad del procuradory del abogado por dejar pei
‘mira instance Jus, 2°, 5358; de, “Responsable dl proarader yl bo.
do por dejar perimirainstacia’,en Bstudine sobre ln responsabilidad ct, p20
“Anvdoen, “La responsabilidad de as abogedo” en Derecho de dae. Primera pare,
homenajoal prfear door arg Mosst trrspe, 9489 y ote 39; Despacha del Te
sa 3, “sponsaiidades profesional, punta 1 cn asl Jomadas Provincial de
Dero Civil de Meresdes, 1981 en Revista Judea dl Colegiode Abogados de De
prtamento Judicial de Mercedes, 195, aol, p.305y en Elderechopriadoenia Ar
ontna. Conlutonesde Congress Jornadas de los itimae teint, p. 127
Chir, Laculpaen el derecho ct! moderna. Culpa exracntaca, ps
149, 9°48 164, 54; Aa Anzoren,“Responsbilidd de procsradory dl aopa>
tor dejar perimilainstanca, en Btudis sobre la responsabilidad ce, p. 209; Buse
tamantedlsina, Tia genera dela responsabilidad cts, ed 1985p 4921365
CNC, Salad, 27777 “edna. linia Banter”, Li, 18T7-D-92 ED, 14-504
1 lterni-Lipee Cabana, Dereko dedaros, px 251° ,y200, 02, concede
Cattaneo, a responsi dal professions, p.3
Los nuevos datios 328,
Recuerda asi Yzquierdo Tolsada, que desde que en Roma las ope-
rae libres, predominantemente intelectuales, estaban reservadas a
los ciudadanos libres, ylas/abores, esencialmente manuales, corres-
pondian al esclavo, se ha encontrado semejanza entre profesion libe-
ral y profesin intelectual, pese a que “no toda profesin intelectual
es profesidn liberal, ni toda actividad que se desemperia de modo i-
bre yautnomoes propiamente intelectual”’; dentrodeesta tenden-
cia, durante bastante tiempo, buena parte de la doctrina considers
queenelejerciciodelas profesiones iberales se configuraba una ver-
dadera“locacin de servicios”, aunque con a particularidad de que el
trabajo que se brindaba era de orden intelectual y no manual’.
Parecidamente, en la propia formulaciin del distingo entre obli-
«gaciones “de medios” y “de resultado”, Demogue discriminaba entre
“métier u oficio” dentro de cuya categoria inclufa al profesional de
laarquitectura—, el quede ordinario comporta una obligacién de re-
sultado, y profession libérale, como la del abogado o el médico, que
exige independencia en la ejecucién y habitualmente no trae apare-
jado para el profesional mas que un deber de medios?,
Finalmente, también se ha sostenido que existe una “relacién so-
cial” entre los profesionales liberales y sus clientes, de forma tal que
ahora corresponde calificar como sociales “a las profesiones que an-
tes se denominaron liberales™”,
"Tampoco ha existido coincidencia en cuanto ala delimitacién, res-
tringida o amplia, del eoncepto de profesional, el que nosotros hace
xyaalgiin tiempo limitabamos a quienes habian obtenido en formare-
7 Yaquirdo Tlsada, La responsabilidad civi del profesional liberal, ed, 1998p.
6
5 Colin-Capitant, Curso elemental de derecho civil. 1V p. 845 yss; Hue, Com
‘mentiretheoriqueot pratique du Code Civil Xp.525,0° 981; Laurent, Prinepiosde
Aderechocivl, XX, p, 5, 484;1 XXVII, ps. 9962403, ros, 993.87; Massé- Ver
6, adiciones a Zachariae, Le droit ci frangais, 1, p. 400, nota 2; Planiol- Ripert,
‘Tratado prietco de derecho civil francis, tXl,p.20,1" 776; Machado, Bxposiciin yeo
‘mentarioe al Cidigo Civil argentino, t. Vp. 183 88, nota 1869; Salvat-Acuia Anzo-
ona, Tretadodederechociol argentino. Fuente delacobigaciones, 2c, 1954, [Ml
p.Dlyss, 0° 17492
®"Demmogue, Tait des obligations en général, p.544, 0° 123%.
10 Mosel Iturtaspe Responsobilidad profesianal de os martillerosycorredores,
JA, 1976-169, nota 6 Savatier, La profession ibérae, p34.Be di Alber Doig Reena,
gular el correspondiente diploma habilitante",y que ahora se ha ido
extendiendo al martillero y al corredor™, al periodista™ al banque-
10, al corredor de bolsa, al agente de viajes! eteétera;a tal puntoque
puede sostenerse que “la nocién de actividad profesional no queda
confinada a la que realiza quien posee un titulo universitario, y asi
abarea ala delos no diplomados”®,
Ello ha permitido afirmar, también, que el “cardcter a menudo
fluctuante e incierto dela califieacién” conduce asimismo a que “no
pueda ser fijada de manera definitiva mas que por intervencién del
legislador™®.
Coneluyendo este introito, no podemos dejar de senalar que entre
nosotros, en sendos encuentros juridicos —Ias “I Jornadas Provin-
ciales de Derecho Civil” de Mercedes, provincia de Buenos Aires, de
agosto 1981 y el “II Encuentro de Abogados Civilistas” de Santa Fe,
de julio 1968—, se establecié una serie de notas distintivas caracte-
rizantes del profesional, que serian las siguientes: habitualidad en
su ejercicio; actividad reglamentada; necesidad de previa habilita-
‘idn; presuncién de onerosidad (arts. 5°, 8° y 218, in. 6°, Céd. de Co-
mercio; 1627, Céd. Civil); autonomia técnica; sujecién a colegiacién;
sumisién a principios éticos; y sometimientoa potestades disciplina-
rias, por via dela colegiacién o aun sin ella!”
31 ‘TyigoRepresa, Responsabilidad civil detosprofesionales,ps.21, n°, 153 2°
v.
18 Mosse Kurrasp, Responsabilidad profesional de los martilerosy corredores,
JA, 191641369, nota 6; Cimara, Observaiones al proyecto de estatuto profesional del
‘nartilleoo matador, JA, 1970-234, see. doctr; Richard, El martllerfrenta las
Sovedadesy casas de remats JA, 1972-299, sere. doer; idem, Empresas sociedades
de remate(decrLey 20266179), JA, 1975-23, sce doce setedtera.
1s alterini - Lopes Cabana, Derecho de datos, p.261,n°4, 11 not 1
2M Vines, Les obligations. La responsabilité: conditions’, en Trité de drt ivi,
(sous a direction desacques Ghestin,t 1, p. 684, 0°85
1 “Alterni- Liner Cabana, Derecho de dos (otras estudios), p. 292, 2°7.
1 Viney, Les obligations. La responssbilit: conditions" en Traité de droit civil
(sous a direction de Jacques Ghesin,t 1V,p. 665, n°555, in fine; Alterini- Lex Co
bana, Derecho de dans, ps. 252, I, 268, 24
IT Ge El derecho privadoen la Argentina, Conclusines de Congresosy Jomnadas
Aelosltimostreinta aos, ps. 2Ty sy 200; Alterini- Lier Cabana, Derecho de da
hos, p. 282y58,.0°5
|
'
Los nuevos datos 325
—§68—
LA RESPONSABILIDAD CIVIL PROFESIONAL,
EN LAPRIMERA MITAD DBL SIGLO XX
La responsabilidad civil de los prestadores de servicios profesio-
nales, que no est expresamente contemplada en nuestro Codigo Ci-
vil que data del ano 1871, merecié en la primera mitad del siglo XX,
‘a inspiracién especialmente de la doctrina y a jurisprudencia fran-
cesas, un tratamiento queen grandes lineas puede sintetizarse como
sigue:
) Enun primer momento dicha responsabilidad fue tenida como
“extracontractual’, a invocacién del art, 1109 de nuestro Céd.
Civil, similar al art. 1982 del Cod, Napoleén'®, en razén, muy
‘especialmente, de evitar que ellos pudiesen ser tenidos siem-
pre como responsables en caso de no obtener éxito en su ges
tin; esto se lograba al amparo de aquellas preceptivas que sé-
lo hacen responsables a quienes “por su culpa o negligencia”
‘casionan un dafio a otro, imponiendo al damnifieado la carga
delaprueba de aculpa” del profesional, como un requisito pa-
rala procedencia dela accién indemnizatoria, Bsta tendencia,
sin embargo, quedé superada a partir de un fallodela Corte de
Casacién francesa’? en el cual se resolvi6, siguiéndose un cri-
terio que ya venia siendo propiciado con anterioridad por la
doctrina®?, que“entre el médieo y su clientese forma un verda~
18 Halperin, La responsabilidad civil de los médicos por faltascometidas ene de
_sempeiiode su profes, LL, 1-219 s.,conrelacin a la jursprudoncia francesa; e>-
{relosfallesnacionales; CCi.2* ap. 17/1080, Calvoc. Felines” JA, 34-468, CCi. 1°
Cap, 2495, "Scianoe. Bachem", LL, 1-217.
Ti Certede Casacion francesa, Cémars Civil, 204/96, ‘Doctor Nien, Espasos
‘Mercieren*Dallor Périodique”, 1996, parte, p86, Sirey, 1937, parte, p.321;pe-
doverselambicn en Mazeaud, HL, Leviones dederecho ivi, Partesegunda, 11,
18Ty siguientes.
PED zen f-1. Tune, Tntadoterey ric delaresponsaiided ld
tietualycontractua, voli p.207 y 882° 148; Savatiey,Tritéde a responsobilité
clue dri frangaiiel, administra, professionnel, procidural,2 ed t-ILp- 306
{yss,2"V7by ss; Plaial-Ripert, Tatado prctco de deeoko evil francés. Vip 687
$50,492; Hue, Commentare théorique et pratique du Cade Gui. VII p. 88985,
1449, Lalu, Trot pratique dea responcabiité iis, p. 296 ys, 422