el mal estado de la salud pública en américa latina es uno de los problemas en
la actualidad con mayor relevancia debido principalmente a la contaminación ambiental, entre los cuales se destaca la contaminación de los cuerpos de agua debido a que los vertimientos que salen con altos grado de contaminantes tanto orgánicos como inorgánicos, estos efluentes también se usan para regar cultivos para el consumo humano sin control alguno, solo un porcentaje muy bajo del total de agua residual es tratada teniendo como bases los LMP, LMA, en caso del Perú y otras directrices internacionales que se mencionan en otros países, que nos garanticen que estas aguas no contendrán altos grados de contaminantes, los cuales están dados para cada tipo de industria según sea el caso minimizando el grado de enfermedades entéricas e infecciosas.
Si las redes de tubería de desagües fueran captadas para un tratamiento
adecuado en su mayoría con un control y monitoreo adecuado, no solo se reusarían en el riego de cultivos y parques sino se aprovecharía la cantidad de residuos como el fosforo, nitrógeno y otros que suelen ser provechados como fertilizantes en la agricultura ante esta situación la OPS y el IDRC de Canadá ejecutaron el Proyecto Regional “Sistemas Integrados de Tratamiento y Uso de Aguas Residuales en América Latina: Realidad y Potencial”, realizado en 18 ciudades de 15 países latinoamericanos. Este proyecto permitió desarrollar un modelo de gestión para integrar el tratamiento al uso de estas aguas. El cual plantea el uso de lagunas de estabilización dadas a empresas privadas los cuales brindan este servicio con tecnologías apropiadas demostrando ser viable y sostenible además prioriza la protección de la salud y el ambiente, así como la generación de empleo y alimentos de calidad.
Como segundo proyecto se plantea definir estrategias y lineamientos que
permitan orientar el manejo del agua residual doméstica hacia la implementación y desarrollo de estos sistemas en los cuales se destacan temas legales para su control adecuado, el costo de operación de las partes interesadas, la responsabilidad social y ambiental sobre el vertimiento de estas aguas residuales a los cuerpos de agua. Ante esto se viene generando hoy en día en la ciudad de Lima plantas de tratamiento de aguas residuales con empresas privadas, municipales y Sedapal, los cuales vierten agua para el riego de áreas verdes y agrícolas siendo rentables y ahorrando un buen porcentaje en el tratamiento de estas, también se plantea el uso de estas aguas en zonas áridas y semiáridas en las costeras donde hay áreas abandonadas que puedan producir un margen de ganancia aceptable.
Por último, la Organización Mundial de la Salud (OMS) viene desarrollado un
proyecto de Manual para los Planes de Seguridad en Saneamiento (PSS) para casos de uso de aguas residuales, a fin de facilitar la aplicación de las Directrices, todo esto ya viene pasando por periodos de pruebas los cuales garanticen el uso de estas aguas sin afectar a la salud pública.