Configuraciones de género en el patrimonio

alimentario: relatos desde los territorios

rurales y su diversidad biocultural
PAULA FUENTEALBA URZÚA
ANTROPÓLOGA – MA. DE I NVESTIGACIÓN EN ESTUDIOS SOCIOAMBIENTALES
ONG CETSUR

Seminario “Patrimonio Cultural: experiencias y desafíos” – septiembre 2018

 Patrimonio Alimentario y memoria biocultural

Alimentos como expresiones culturales de un

territorio y sus habitantes

Lo biocultural son los saberes-haceres,

prácticas, paisajes, cosmovisiones que
construyen un territorio determinado (Toledo
y Barrera, 2008)

Relevancia de las/os cultores/as maestras/os

de oficio, guardianas/es de semillas,
productoras/es de alimentos en la conexión de
los alimentos con sus procesos productivos,
ecosistemas y saberes
Agroculturas: expresiones de diversidad
biocultural
Agroculturas como el arte de construir lugares
desde la expresión de conocimientos locales en
diálogo con la naturaleza y se manifiestan en los
lugares-espacios habitados
Las huertas son micro-territorios y elemento vivo,
expresión visible de la gracia interior y espiritual de
un proceso lleno de belleza, sensibilidad y ritmo
(Celis, 2003)
Agroculturas son fuente de agrobiodiversidad
 Roles de género en los territorios rurales

Las relaciones entre seres humanos y naturaleza se

encuentran cruzadas por los sistemas de género,
abarcando cuerpos humanos y paisajes (Paulson,
2009).

Implicancias culturales que inciden en cómo hombres

y mujeres conciben los lugares y el ambiente físico.

Hombres vinculados a la agricultura a gran escala /

mujeres en el autoconsumo familiar
 Rol de los territorios rurales en la
mantención de la agrobiodiversidad
Lo rural como espacio de reproducción de la
vida, donde ocurren los procesos de
diversificación genética de plantas y animales
para favorecer a la especie humana

Adaptación de semillas, plantas y animales a

condiciones ecológicas específicas

¿Quiénes realizan este trabajo?

 Mujeres y agrobiodiversidad:
conversaciones con el territorio
Huertas, chacras, fogones, cocinas son espacios de diálogo entre
humanos y no-humanos, expresiones de conocimiento vivo (Célis, 2003),
donde las mujeres son centrales como portadoras y transmisoras de
saberes.
La memoria desde lo culinario: lo que comemos y cómo se prepara
cuenta quiénes somos y cómo hemos vivido
 “Hoy en día las grandes industrias y grandes empresas que acumulan semillas
están trabajando para que las semillas no sean lo que siempre hemos conocido
(…) Las familias y los campesinos tienen que crear conciencia en sus hijos y en los
jóvenes (…) el crearles conciencia en ellos es como sembrarles una semillita en la
mente para que ellos puedan valorizar eso y también interesarse en el trabajo
que las mamás y los papás hacen en el campo y así generar conciencia de que
uno tiene que proteger el medio ambiente, que tiene que cuidar su tierra para
que podamos tener un futuro mejor…”
(Eris Magdalena Coronado Pinilla, comunidad Juan Quepan, Temuco)
Diversidad biocultural de los territorios
rurales en amenaza
Agroculturas en amenaza por el deterioro de los espacios de vida, como consecuencia de la
implementación de los modelos de desarrollo extractivistas que han degradado paisajes y tejido
social

“El arte de hacer crecer las plantas y de hacerlas conversar con otras fuerzas
vitales, involucra tanto acciones en el terreno del arte propiamente tal, así como
acciones de ese arte hacia la sociedad; por ejemplo, acciones de difusión y de
educación al público, tal como lo hace cualquier curador de arte” (Célis y Thomet,
2013)

Restauración de ecosistemas y medios de vida para vivir bien: ¿cómo contribuimos?

 “¿Quienes serán los próximos criadores, agricultores, artesanos
productores de alimentos, recolectores, silvicultores que mantendrán el
territorio y recuperarán el patrimonio que éste portaba?

¿Quienes repararán los cursos de agua, protegerán bosques, recuperarán

gredas, lanas, metales, semillas, plantas, fibras vegetales, animales, aves,
insectos que poblaron anteriormente el territorio que hoy se ha
recuperado físicamente pero que requiere de un enorme y sostenido
esfuerzo para recuperarlo ecológica y culturalmente?”

MARÍA ANGÉLICA CÉLIS

CARTA A LOS MAESTROS DE OFICIOS, TEMUCO, 2006.