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ANDAR EN GRATITUD

Efesios 5:4b
 La humanidad necesita reconocer la bondad y misericordia de Dios.
 Nuestra tendencia es olvidamos rápidamente lo que Dios ha hecho por
nosotros.
 La obra del diablo, desde el principio, ha sido desconocer y desmentir
la obra de Dios, haciéndonos creer que muchas cosas son producto de
la casualidad o pueden suceder sin la intervención de Dios,
alejándonos poco apoco del Creador.
 Así muchos, en su necio empeño de desconocer a Dios y su obra,
atribuyen hoy sus aciertos o desventuras a la suerte, el destino, la
naturaleza o cualquier otra figura impersonal.
 Dios, buscando evitar que caigamos en semejante insensatez, desde el
principio ha insistido en que expresemos nuestra gratitud.
 Adán y Eva trataron de enseñar este principio a sus hijos.
 También vemos esta actitud en los patriarcas.
 A Moisés Dios le guió a celebrar algunas fiestas que perpetuamente le
recordarían al pueblo de Israel lo que Jehová había hecho por ellos.
Las Fiestas:

1. La gratitud a Dios es el reconocimiento de lo que Él hace a


nuestro favor.
 2 Crónicas 16:9 nos dice que el Señor contempla toda la tierra y
muestra su poder a favor nuestro.
 En el Salmo 103:1-5, David insta a su propia alma a no olvidarse de
los beneficios de Dios…
 El es quien perdona todas tus iniquidades.
 El que sana todas tus dolencias
 El que rescata del hoyo tu vida
 El que te corona de favores y misericordias
 El que sacia de bien tu boca.
 El que te rejuvenezcas como el águila.

II. La gratitud no debe ser una actividad, sino una actitud


permanente de la vida.
 Jesús vivió en actitud de gratitud todo el tiempo de su vida terrenal.
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 El apóstol Pablo sabía la importancia de este principio para su vida
y ministerio.
 Un ejemplo de esto lo encontramos en Filipenses 3:3, donde da
gracias a Dios por los hermanos de la iglesia de Filipos en todas sus
oraciones y enseña a los creyentes a vivir en esta actitud y según
este principio.

III. Las enseñanzas de Pablo acerca de la gratitud:


 Enseñanza a la iglesia de Éfeso: (Efesios 5:20)
 Enseñanza a la iglesia de Filipos: (Filipenses 4:6)
 Enseñanza a la iglesia de Colosas: (Colosenses 3:17)
 Enseñanza a la iglesia de Tesalónica: (1 Tesalonicenses 5:18)
 Enseñanza a su discípulo Timoteo: (1 Timoteo 2:1)

IV Maneras en que puede ser expresada la gratitud:


 A través de una ofrenda (Juan 12:1-8)
 A través de un canto (1 Samuel2:l-11)
 A través de una oración (Colosenses 4:2).
 A través del servicio (Josué 24:15)
 A través de compartir nuestro testimonio al mundo (Lucas 8:39)

V. La gratitud debe ser expresada a otraspersonas:


 El Señor nos manda a ser agradecidos en Colosenses 3:15
- Ser agradecidos con nuestros padres (Efesios 6:2)
- Ser agradecidos con nuestros pastores (Hebreos 13:7)
- Ser agradecidos con quienes nos han ayudado (2 Samuel 9:1; 2
Reyes 4: 13)

 Muchos reciben el favor de Dios, pero son pocos los que


reconocen, su obra y viven en una actitud de permanente
agradecimiento.
 En el libro de Lucas 17:11-19 se nos cuenta la historia de diez
leprosos sanados y solo uno regresó glorificando a Dios y dando
gracias.
 Este cuadro refleja la triste historia que se vive aun dentro de
nuestras iglesias.

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EL PODER DE LA GRATITUD
¡Padre, te damos gracias por la vida y por cada una de las
bendiciones que recibimos de Tu amor!
Nuestro Padre nos enseña a ser agradecidos.
En la Biblia leemos sobre el pueblo de Israel que después de ser
liberado por Dios a través de Gedeón no supieron ser agradecidos con
los descendientes de ese hombre que tanto los benefició1.

1 Jueces 8: 33-35 dice: Pero aconteció que cuando murió Gedeón, los
hijos de Israel volvieron a prostituirse yendo tras los baales, y
escogieron por dios a Baal-berit. Y no se acordaron los hijos de Israel
de Jehová su Dios, que los había librado de todos sus enemigos en
derredor; ni se mostraron agradecidos con la casa de Jerobaal, el cual
es Gedeón, conforme a todo el bien que él había hecho a Israel.

Recordemos que Gedeón fue quien le creyó al Señor que con solo 300
hombres iba a vencer a los madianitas.
Pero años más tarde, los israelitas se olvidaron de ello y no fueron
bondadosos, agradecidos con la familia de Gedeón.
¿Tú eres agradecido?
¿Recuerdas de dónde te ha sacado Dios?
No te olvides que Él fue quien te levantó, no pierdas el
agradecimiento, especialmente hacia quienes Él usó para darte
trabajo, protegerte y bendecirte.
En Colosenses vemos que es un mandato ser agradecidos.
Además el apóstol relaciona el agradecimiento con la abundancia de
Palabra que podemos recibir.
Así que al ser agradecidos tendremos seguridad de que Su mensaje y
sabiduría morará en nosotros y nos enseñaremos unos a otros2.
Colosenses 3:15-17 comparte: Y la paz de Dios gobierne en vuestros
corazones, a la que asimismo fuisteis llamados en un solo cuerpo; y sed
agradecidos. La palabra de Cristo more en abundancia en vosotros,
enseñándoos y exhortándoos unos a otros en toda sabiduría, cantando
con gracia en vuestros corazones al Señor con salmos e himnos y
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cánticos espirituales. Y todo lo que hacéis, sea de palabra o de hecho,
hacedlo todo en el nombre del Señor Jesús, dando gracias a Dios Padre
por medio de él.

No podemos vivir aislados


Debemos unirnos y exhortarnos mutuamente para salir adelante en
Cristo Jesús.
Si algún día pecas al extremo de caer, no te aísles, busca a tus
hermanos.
Necesitamos estar juntos para animarnos en los momentos de
dificultad.
Debemos alabar a nuestro Señor con cánticos de alegría.
A veces, en la iglesia nos da pena saltar y levantar las manos para
darle gloria a Dios porque no queremos que se asusten las personas
que llegan por primera vez, pero la Biblia nos enseña a adorar con
júbilo, por lo tanto, nuestro deber es enseñar a hacerlo, no evitarlo
porque algunos se sientan incómodos.
Hay que cantarle a nuestro Dios con gracia, con alegría, no como
sacrificio, sino con emoción y pasión.
Algunos dicen que no lo alaban “porque no están bien con Él”, pero
recordemos que lo alabamos y adoramos porque Él es Dios y lo
merece.
Todo lo que digas y hagas debe ser hecho para el Señor como
acción de gracias.
No importa si vas en auto o en bus, hay que dar gracias en todo
momento.
Incluso en los deportes; si juegas fútbol debes dar gracias porque
tienes piernas para jugar, y ¡para que te las pateen! Así es la vida.
Cuando Jesús sanó a diez leprosos, solo uno regresó a dar gracias y
lo hizo sin vergüenza, a gran voz y postrado en tierra, tal como debe
ser.

Ser agradecido le valió la salvación, así que obtuvo doble beneficio:


¡sanidad para el cuerpo y salvación para su alma!
Lucas 17:11-19 relata: Yendo Jesús a Jerusalén, pasaba entre
Samaria y Galilea. Y al entrar en una aldea, le salieron al encuentro
diez hombres leprosos, los cuales se pararon de lejos y alzaron la voz,
diciendo: !!Jesús, Maestro, ten misericordia de nosotros! Cuando él
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los vio, les dijo: Id, mostraos a los sacerdotes. Y aconteció que
mientras iban, fueron limpiados. Entonces uno de ellos, viendo que
había sido sanado, volvió, glorificando a Dios a gran voz, y se postró
rostro en tierra a sus pies, dándole gracias; y éste era samaritano.
Respondiendo Jesús, dijo: ¿No son diez los que fueron limpiados? Y
los nueve, ¿dónde están? ¿No hubo quien volviese y diese gloria a
Dios sino este extranjero? Y le dijo: Levántate, vete; tu fe te ha
salvado.

Si quieres que Dios te siga bendiciendo,


Si quieres que te dé docena de catorce y ese milagro extra, demuestra
que eres agradecido.
El Señor derrama favor más allá de lo que podamos imaginar
cuando demostramos gratitud.
Dile: “Señor te doy gracias por todo lo que has hecho y harás en mi
vida!
 En el libro de Esdras vemos que la gratitud se expresa con todo el
corazón.
Estos hombres de los que se habla en ese libro clamaban con júbilo,
llenos de gratitud.
En el original, clamar es “gritar con fuerza”, por lo tanto, nosotros
también debemos clamar con gratitud.
Esdras 3:11-13 comparte: Y cantaban, alabando y dando gracias a
Jehová, y diciendo: Porque él es bueno, porque para siempre es su
misericordia sobre Israel. Y todo el pueblo aclamaba con gran júbilo,
alabando a Jehová porque se echaban los cimientos de la casa de
Jehová. Y muchos de los sacerdotes, de los levitas y de los jefes de casas
paternas, ancianos que habían visto la casa primera, viendo echar los
cimientos de esta casa, lloraban en alta voz, mientras muchos otros
daban grandes gritos de alegría. Y no podía distinguir el pueblo el
clamor de los gritos de alegría, de la voz del lloro; porque clamaba el
pueblo con gran júbilo, y se oía el ruido hasta de lejos.

Debemos demostrar que estamos alegres y bendecimos Su nombre


con júbilo en el corazón porque nos has bendecido.
Que tu voz y tu corazón no se cansen de alabarle en agradecimiento
por todas Sus bondades.
Yo le doy gracias al Padre porque nos ha permitido servirle.
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 Demuestra tu agradecimiento al Señor sirviéndole en todo lo que
puedas.
A veces somos demasiado delicados en la iglesia y nos alejamos por
alguna incomodidad, pero si nos aguantamos en el trabajo porque
recibimos un sueldo
¿no es justo también ser perseverantes en el servicio a Dios?
¡Claro que sí!
Sirvamos al Señor con alegría, con entusiasmo, con acción de gracias.
¡Gózate cuando le sirvas!

La alabanza en parte fundamental de la gratitud, porque un


corazón agradecido no puede estar triste, sino alegre y jubiloso.

Salmo 100:1-5 exclama: Cantad alegres a Dios, habitantes de toda la


tierra. Servid a Jehová con alegría?; Venid ante su presencia con
regocijo. Reconoced que Jehová es Dios?; El nos hizo, y no nosotros a
nosotros mismos?; Pueblo suyo somos, y ovejas de su prado. Entrad por
sus puertas con acción de gracias?, Por sus atrios con
alabanza?;Alabadle, bendecid su nombre. Porque Jehová es bueno;
para siempre es su misericordia?, Y su verdad por todas las
generaciones.
 Yo estoy eternamente agradecido con Dios por Su gran misericordia
en mi vida.
 Además le doy gracias al Señor por la congregación El Resplandor de
Cristo donde se le ama y honra .

1 Corintios 1:4-9 dice: Gracias doy a mi Dios siempre por vosotros, por
la gracia de Dios que os fue dada en Cristo Jesús; porque en todas las
cosas fuisteis enriquecidos en él, en toda palabra y en toda ciencia; así
como el testimonio acerca de Cristo ha sido confirmado en vosotros, de
tal manera que nada os falta en ningún don, esperando la manifestación
de nuestro Señor Jesucristo; el cual también os confirmará hasta el fin,
para que seáis irreprensibles en el día de nuestro Señor Jesucristo. Fiel
es Dios, por el cual fuisteis llamados a la comunión con su Hijo
Jesucristo nuestro Señor.

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También doy gracias a cada una de las personas que sirve en el
ministerio
 Desde los que colaboran en los parqueos
 Hasta los que amablemente me ofrecen un vaso de agua cuando
predico.

Te aseguro que si fuéramos más agradecidos veríamos menos


problemas.
El agradecimiento llena de gozo el corazón y nos alegra a todos.
Sabemos que sembrar produce cosecha, por lo que debemos dar
acción de gracias a Dios 7.
2 Corintios 9:6-11 enseña: Pero esto digo: El que siembra escasamente,
también segará escasamente; y el que siembra generosamente,
generosamente también segará. Cada uno dé como propuso en su
corazón: no con tristeza, ni por necesidad, porque Dios ama al dador
alegre. Y poderoso es Dios para hacer que abunde en vosotros toda
gracia, a fin de que, teniendo siempre en todas las cosas todo lo
suficiente, abundéis para toda buena obra; como está escrito:?repartió,
dio a los pobres;?su justicia permanece para siempre. Y el que da
semilla al que siembra, y pan al que come, proveerá y multiplicará
vuestra sementera, y aumentará los frutos de vuestra justicia, para que
estéis enriquecidos en todo para toda liberalidad, la cual produce por
medio de nosotros acción de gracias a Dios.

Alábale por cuanto te ha dado, edifica en Su reino y te aseguro que


recibirás doble porción de abundancia.
Deseo con todo mi corazón que el Señor te levante, te sustente y
prospere lo que emprendas en Su nombre y para Su gloria.
Hoy y siempre, alaba a tu Padre y llena tu boca de palabras de
agradecimiento hacia Él y hacia quienes te benefician.

ANDAR EN SANTIDAD
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Efesios 5:2…. l Pedro l:3
 Es importante saber que Dios nos ha llamado no para que seamos
“cristianos”, “evangélicos” ni otro calificativo que el mundo nos dé;
sino que el llamado de Dios es a ser santos. Levítico 20:26.

1. Ser santo significa que Dios nos ha apartado para que vivamos en
una intima y exclusiva relación con él.
Marcos 3:14.
 Nuestra prioridad debe ser nuestra relación con Dios.
 Si vivimos para él, El vivirá para nosotros
 Si vivimos para nosotros mismos, Dios se mantiene al margen de
nuestra vida.
 Daniel entendió que más importante que el trabajo que realizaba en
Babilonia eran sus tres períodos de oración: nada le haría sustituir
este tiempo tan especial con Dios (Daniel 6: 10).
 Otro ejemplo que puede ayudamos a entender que Dios nos ha
escogido para El, fue cuando Jesús fue a visitar la casa de Lázaro.
 María se sentó a sus pies a oír sus palabras, mientras Marta estaba
afanada e inquieta por los quehaceres de la casa.
 Jesús le dijo a Marta que “María ha escogido “ (Lucas 10:42)
 La relación personal que tenemos con Jesús, el tiempo que
dedicamos a estar a solas con Dios.
 Dios no acepta competencia.
 Si Adán y Eva hubieran entendido esto, no habrían conversado
con la serpiente ni le habrían dado más importancia a sus
palabras que a la palabra del Creador
 Aislando su relación con Dios a un último lugar; el pecado no
hubiera entrado a sus corazones y contaminado la raza humana.
 Eso es precisamente lo que Dios quiere evitamos.
 El sabe que tendemos a inclinar nuestro corazón a otras cosas, otras
relaciones y otras palabras antes que El.
 La santidad precisamente significa lo contrario.
 Nuestra vida, nuestro corazón debe ser para El.

¿Cuántas bendiciones nos promete Dios cuando confiamos en El


antes que otras cosas? Salmo 9 1:14-16

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Esa exclusividad la confirmó Jesús, al ser tentado por Satanás, cuando
respondió:
“Al Señor tu Dios adorarás y solo a él servirás” (Lucas 4:8).

2. Andar en santidad es el requisito indispensable para vivir en


compañerismo con Dios.
 Es por eso que luego de haber pecado, Adán y Eva se escondieron
de Dios llenos de vergüenza.
 El pecado había afectado sus pensamientos, sus sentimientos y su
voluntad: así sucede con todos.
 Cuando el profeta Isaías tuvo una visión de la santidad de Dios,
quedó tan abrumado que esperaba morir; sabía que no podía estar
en la presencia de Dios porque era un hombre “inmundo de
labios” (Isaías 6:1-8).
 Así sucedía con el sumo sacerdote cuando entraba al lugar
santísimo: sino no estaba limpio de pecado, no salía con vida de ese
lugar. Debernos entender que si realmente querernos vivir en la
presencia de Dios en este mundo, y tener entrada en la gloria eterna,
debemos despojarnos “del viejo hombre, que esta corrompido por
los deseos engañosos” (Efesios 4:22).

3. Ser santos significa ser renacidos por el Espíritu Santo


 Los renacidos (l Pedro l:3)
 Son cambiados y transformados por la palabra de Dios (1 Pedro
l:23).
 Pues, la vida santa debe ser vivida según el Espíritu Santo y la
biblia.

4. El llamado a andar en santidad se extiende a todas las áreas de


nuestra vida.
 Algunos piensan que deben ser santos en la iglesia o en presencia
de otros cristianos; otros, al convertirse en miembros de una iglesia;
pero la mayoría no piensan que deben ser santos como padres,
esposos, hijos, humanos, novios, estudiantes, empleados y más.
 El llamado comprender:
 Toda vuestra manera de vivir 1 Pedro 1:15.
 Nuestros pensamientos. Filipenses 4:8.
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 Nuestros sentimientos deben ser puros y nuestras motivaciones
basadas en el amor de Cristo.
 Pablo, al señalar cómo debía vivir Timoteo (1 Ti 4:12).

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OBEDIENCIA
Efesios 5:6
¿Qué es la obediencia?
 Es hacer lo que nos ha ordenado hacer y
 no hacer lo que se nos ha prohibido.
 La obediencia es un principio de Dios.

 Es importante tomar en cuenta que debemos obedecer al


llamamiento de Dios de dejar el pecado para seguirle a El, vivir
una vida santa y servirle con integridad, verdad y fidelidad (Josué
24:14).

 En el principio Dios les dijo a Adán y Eva lo que debían hacer y


también lo que no debían hacer (Génesis 1:18-30).

 La caída de la humanidad se originó en la falta de obediencia.

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 Eva obedeció la palabra de una serpiente en lugar de hacer lo que
Dios le había ordenado.
 A Abram, Dios le dijo:
- “Vete de tu tierra, de tu parentela” (Génesis 12:1),
- “Anda delante de mi y sé perfecto” (Génesis 17:1).
- Él siguió Su llamado al servicio.
 A Moisés Dios lo llamó a dejar Egipto (Hebreos 11:27) y
 luego a regresar a Egipto a liberar a Su pueblo (Éxodo 3:7-10).
En el Nuevo Testamento
 Pedro y su hermano Andrés fueron llamados a dejar las redes, a
seguir a Jesús y ser pescadores de almas (Marcos 1:17-18).
 Pablo fue llamado a dejar de perseguir a los cristianos y a dar
testimonio a los gentiles (Hechos 9:15).

La obediencia es la manifestación de nuestro amor a Dios:


 Por la obediencia una persona expresa como es su relación de
amor con Dios (Juan 14:15-21).
 A Abraham le fue mandado sacrificar a su hijo Isaac (Génesis 22:1-
2).
 Lo que Abraham más quería en el mundo era Isaac.
 Su muerte sería el sufrimiento más difícil de soportar, pero si Dios
lo pedía, él estaba dispuesto a hacerlo.
 Quizás no entendió por qué Dios ordenara tal sacrificio pero
Abraham le obedeció (Génesis 22:3).

 Quizás esperaba que algún día, fuera en esta vida o en la eternidad,


Dios le daría a entender el por qué de esta petición.

 Así, salió a la montaña a recoger la leña para el sacrificio,


haciéndose acompañar por su hijo.
 Pienso que los momentos más difíciles eran cuando su hijo le
preguntaba: “Papá, ¿dónde está el cordero?” No puedo imaginarme
el rostro de Abraham, cómo contenía sus lágrimas para no declarar
aun a su hijo lo que pretendía hacer.

 Cuando la leña estaba preparada sobre su altar su hijo insistía:


“Papá, ¿dónde está el cordero para el holocausto?” Y Abraham
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sabiamente respondía: “Dios proveerá el cordero” (Génesis 22:7-
8).
 Aún así tomó a Isaac y lo ató de pies y manos, quizás sin poder dar
respuesta a su hijo del por qué lo hacía.
 Sacó su espada para degollarle y al instante, antes que fuera
demasiado tarde, en el momento perfecto escuchó la voz de Dios
que le dijo: ¡ Abraham detente! (Génesis 22:11-12).
 ¿Hasta donde llegó la obediencia de Abraham?
 ¿No es cierto que nuestra obediencia tiene demasiados límites y
condiciones?
 Estamos dispuestos a obedecer solamente aquello que nos resulta
agradable.
 La fe produce la obediencia.
 Por obediencia andamos en el camino de Dios y vivimos por la
voluntad de Dios.

El ejemplo de la obediencia de Jesús:
- La obediencia se aprende (Isaías 1:11-20; Hebreos 5:8).
- Haciéndose obediente hasta la muerte (Filipenses 2:8).

El ejemplo de los discípulos:


 Debemos obedecer a Dios antes que a los demás.
 A los discípulos se les prohibió terminantemente que siguieran
predicando el nombre de Jesús.
 Recibieron muchas amenazas de los principales sacerdotes y
ancianos del pueblo, pero su respuesta a estos atropellos fue
contundente. Dijeron: “Juzgad si es justo delante de Dios obedecer
a vosotros antes que a Dios, porque no podemos dejar de decir lo
que hemos visto y oído” (Hechos 4:19- 20).
 Nada ni nadie debe privarnos de nuestra obediencia a Dios.

¿A quién obedecer?

La obediencia no se limita a Dios. Hay que obedecer a todo el que


requiera obediencia.
1. A Dios primeramente (Filipenses 2:1-8);
2. A nuestros padres (Efesios 6:1-2);
3. A nuestros pastores (Hebreos 13:17);
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4. A nuestros jefes (Colosenses 3:22); y
5. Obedecer unos a otros (1 Pedro 5:5b).

Lo que produce la obediencia:

1. La complacencia de Dios.
 La Biblia nos dice que obedecer es mejor que los sacrificios y que
Dios se complace en la obediencia de sus hijos (1 Samuel 15:22;
Mateo 3:17); pero también nos dice que la ira de Dios está sobre los
hijos de desobediencia (Efesios 5:6).
 Si obedecemos, somos aceptados delante de Dios, pero si
desobedecemos seremos desechados como el Rey Saúl (2 Samuel
7:15).
2. La recompensa de Dios.
 En la Biblia, Jesús nos promete: “Todo lo que pidáis en oración,
creyendo, lo recibiréis” (Mateo 21:22), así que debemos obedecer
en el Señor siempre (Filipenses 2:12).

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