Es una etapa de crecimiento más lento y estable, en la que los niños ganan una media de
2 kilos de peso, y de 5 a 6 cm. de talla, al año.
En esta etapa los niños desarrollan una gran actividad física, por la que su gasto
energético aumentará considerablemente, y por lo que deberá adaptar su consumo
de calorías, a la nueva realidad.
El gasto metabólico basal es elevado en comparación con el del adulto. Por eso, debe
preocuparse de que el niño crezca sano.
Desde el punto de vista del desarrollo psicomotor, el niño ha alcanzado un nivel que le
permite una correcta manipulación de los utensilios empleados durante las comidas,
siendo capaz de usarlos para llevar los alimentos a la boca.
Una de las características específicas de esa edad es el rechazo a los alimentos nuevos,
por el temor a lo desconocido.
El niño preescolar puede reconocer y elegir los alimentos al igual que el adulto.
Normalmente, el niño tiende a comer lo que ve comer a sus padres y a otras personas
que le acompañan.
Normalmente, un niño de esa etapa debe consumir, en media, 1.600 calorías, siendo
50% de carbohidratos, 31% de lípidos y un 18% de proteínas. En el cuadro abajo,
presentamos tres ejemplos de dieta para niños preescolares:
Menú para niños de entre 3 y 6 años:
200 ml. de leche con 30 gr. de Puré de verduras 30 gr. de pan Sopa de fideos
Cola Cao galletas
Albóndigas 40 gr. de queso Pollo con
40 gr. de cereales 1 quesito (20 fresco almendras
Yogur
gr.)
200 ml. de zumo Un vaso de
leche
Un yogur 200 ml. de Espaguetis con 250 ml. de leche Sopa de pan
zumo tomate
30 gr. de galletas 30 gr. de Buñuelos de
de naranja 100 gr. de bizcochos bacalao
Zumo de frutas
lenguado
con ensalada
a la romana
Un vaso de
Fruta leche
Principios generales.
Alimentación saludable.
El niño necesita una alimentación variada que le permita crecer, desarrollar las
actividades físicas propias de la edad y estar sano. Además de las 3 comidas principales
(desayuno, almuerzo y comida) puede añadir 2 meriendas adicionales, una a media
mañana y otra a media tarde al regresar del círculo infantil o del preescolar y una cena
en la noche.
En el segundo año puede comer alrededor de 200-300 mL de una sola vez por lo tanto
para obtener la cantidad necesaria de energía y nutrientes es necesario que tenga una
alta densidad energética y de nutrientes, lo que se logra al dar 6 frecuencias de
alimentación. Al tercer año es capaz de comer la mitad de un adulto por lo que se
recomienda que coma solo y a su propia velocidad las porciones que le corresponden,
de preferencia con el resto de la familia y siempre bajo su supervisión, de manera tal
que se garantice que come lo que le corresponde según edad, sexo y estado fisiológico o
patológico.
Se recomienda:
A los 2 y 3 años el niño se afana por hacer muchas cosas de forma independiente. Son
frecuentes los atracones y los alimentos rechazados de un día para otro y de una semana
a otra. Los padres refieren un elevado nivel de insatisfacción con el apetito y el interés
mostrado por la comida.
El niño de 4 a 5 años suele mostrarse más interesado por el juego que por su
alimentación, por lo que puede quedar rezagado durante las comidas. El niño es un gran
imitador, capaz de seguir rápidamente el ejemplo de los padres o algún hermano o
hermana mayor. Estos cambios se consideran normales y esperados a esta edad. Por
consiguiente es preciso que los padres empleen tiempo y paciencia durante las comidas.
La anorexia que suele presentarse en esta etapa es debido a la disminución de la
velocidad de crecimiento, sin embargo no debe insistirse en forzar al niño a comer más
de lo que él desea y/o necesita porque esto puede crear un conflicto a la hora de la
comida entre el niño y sus familiares.
Es probable que los hábitos y actitudes frente al alimento aprendidos durante la infancia
se prolonguen durante toda la vida.
Es preciso establecer horarios regulares para las comidas., importancia del desayuno y
de las frutas y vegetales en las meriendas.
Los alimentos nuevos deben darse al empezar a comer cuando el niño tiene más
hambre y de forma gradual y en presentaciones fáciles.
Los siguientes son consejos útiles a la hora de la comida para los niños en edad
preescolar.
Correr o jugar mientras se come puede causar que un niño se atragante. Haga
que su hijo se siente cuando esté comiendo.
Haga la hora de la comida lo más placentera posible. No ponga presión para que
su hijo coma, ni fuerce a su hijo a que "limpie" su plato. Esto podría causar que
coma en exceso lo que puede ocasionar que su hijo gane demasiado peso. Los niños
tendrán hambre a la hora de la comida si se han limitado los bocadillos durante el
día.
Proporcione ejemplos de hábitos saludables de comida. Los niños en edad
preescolar imitan lo que ven hacer a sus padres. Si tiene hábitos de comida no
saludable, su hijo no aprenderá a comer en forma saludable.
Resultados Obtenidos: