• LA CONSCIENCIA COMO
AROUSAL, CONOCIMIENTO, ATENCIÓN Y ORIENTACIÓN
Consciencia
Neurofisiológico: referido al estudio de los órganos que sustentan su actividad
Psicológico: referido a los procesos implicados en el funcionamiento que permiten el procesamiento de la
información adquirida
Filosófico.moral: referido a sus relaciones con la dimensión de libertad.
Proceso psicológico neuronal mediante el cual nos percatamos del yo y su entorno en el dominio de tiempo
y espacio
Es la suma del todo lo que uno puede descubrir acerca de una experiencia propia de un miento dado
En cuanto al aspecto funcional de la consciencia, se divide en 3 aspectos:
1) la vigilancia o estado de alerta (arousal), que es premisa y condición necesaria para disponer de
2) claridad de consciencia, en tanto que por ella se pueden experimentar como tales los objetos que se
muestran en el entorno, filtrados y modulados a su vez por los procesos de percepción y cognición.
3) la consciencia de sí mismo, en virtud de la cual nos sabemos y conocemos a nosotros mismos como
seres vivientes y activos, biográficamente coherentes en un todo unitario. Este sector es el que se ha
denominado autoconsciencia
Permite la introspección, reconoce el propio cuerpo y orienta en el espacio y el tiempo, todo ello en una
solución de síntesis o integración1.
De todo esto se desprenden dos situaciones básicas:
1. Una estaría caracterizada por el conocimiento de sí mismo, siendo la
intencionalidad o voluntariedad, el factor determinante.
2. Otra sería la asimilación por parte del individuo del continuo flujo perceptivo sin que se procese toda la
información conscientemente. Ésta es una situación que puede conducir tanto a la anterior como a la
inconsciencia
Y para que todo ello sea posible, es condición indispensable disponer de un
substrato neurofisiológico que proporcione un óptimo nivel de vigilancia o alerta, lo cual se sustenta en la
interrelación de la formación reticular (SRAA), el tálamo (al que se ha considerado el órgano de la
atención), el hipotálamo, la circunvolución temporal superior y el córtex pre-frontal medial.
Por fin, los factores humorales-endocrinos (como la adrenalina), de la neurotransmisión (principalmente
colinérgica), vegetativos (simpáticos y parasimpáticos), vasculares (riego sanguíneo) y sensoriales
(afluencia de estímulos) completan dicha actividad para que exista un funcionamiento eficaz de la
consciencia a nivel neurofisiológico.
Existen íntimas relaciones con la regulación central de la respiración, con los movimientos oculares y con
la motórica en general.
Pero el estado de vigilia o alerta no es uniforme. Dichas oscilaciones permiten distinguir diversos grados
o niveles de consciencia que::
1. Se reflejan en la actividad eléctrica cerebral.
2. Pueden medirse objetivamente mediante el electroencefalograma (EEG).
3. Son regulados por el propio organismo en cuanto autorregulación del ritmo nictameral (sueño-vigilia) y
de la actividad básica del individuo.
4. Dependen del modo de la salud o del estado de ánimo. El miedo, la alegría, el dolor o el ruido, activan y
mantienen a la persona vigilante. La monotonía, la escasez de estímulos, el aburrimiento, disminuyen la
alerta y adormecen.