GENETICO
INTEGRANTES:
- TUEROS SOLARI, ZAIDA
- QUINTANILLA PEÑA, MARICARMEN
- JAYO COILA, MARILYN KAREN
- PUZA SOLIS, ESTEFANI
- GARCIA ALVAREZ, LUIS MANUEL
- MAMANI CASSA, MIGUEL ANGEL
INTRODUCCIÓN
Los notorios resultados prácticos alcanzados en los últimos años por la mejora
genética de plantas en la producción de especies cultivadas, superiores a las
existentes, han demostrado la importancia de esta ciencia, ya universalmente
reconocida y aceptada.
Otros de los factores que deben tomarse en cuenta para incrementar la producción
consiste en mejorar las practicas agrícolas, incluyendo entre éstas la buena
fertilización (abonado) de las tierras, una efectiva rotación de cultivos, mejores
metodologías para trabajar la tierra y una lucha más eficaz contra las malas hierbas,
enfermedades y plagas. También debe considerarse la utilización de maquinaria
agrícola adecuada a la producción, conservación, almacenamiento y transporte.
Variedades sintéticas
De esta manera ha evolucionado de ser una planta de hábito de crecimiento rastrero, con
frutos pequeños de pulpa dura de color blanco y con sabor amargo a ser una planta mas
compacta, tener fruta de mayor tamaño con semillas medianas y pulpa dulce de color rojo.
Aunque existen cultivares cuya pulpa es de color amarillo, anaranjado, e incluso hay
tonalidades de rojo desde el rojo pálido hasta un rojo profundo más atractivo a la vista. En los
últimos años (especialmente el siglo pasado y el que transcurre) se han logrado grandes
avances en el mejoramiento genético de sandía. Investigadores en el sector público y privado
alrededor del mundo han desarrollado variedades e híbridos con mejores características
agronómicas; pero también se ha dado importancia a la resistencia a enfermedades, mejor
contenido nutricional y a variados tamaños y formas del fruto, así como diversidad en color y
tonalidad de pulpa. La popularidad de la sandía se debe en gran medida a la introducción de
híbridos triploides -sin semilla-.
Taxonomía y Morfología
Una forma amarga del genero Citrullus parece ser el antecesor de la forma cultivada de sandía
que se conoce hoy día. Él genero Citrullus ha sido revisado y ahora incluye C.lanatus (sinonimo
C.vulgaris), C.ecirrhosus, C.colocynthis, y C.rehmii. Resultados de estudios morfológicos y
citogenéticos revelan que las cuatro especies son compatibles entre ellas y se pueden efectuar
cruzas exitosas que deriven progenie. Citrullus ecirrhosus está más cercanamente relacionado
a C.lanatus que alguno de estos dos lo están a C.colocynthis. Hay aún otras dos especies
relacionadas: Praecitrullus fistulosus de la India y Pakistán, y Acanthosicyos naudinianus del sur
de África.
La sandía (Citrullus lanatus) tiene 22 cromosomas (2n=22; x=11). Varios grupos de científicos
en el sector público y privado han construido mapas genéticos de sandía y por lo tanto ciertos
caracteres han sido asignados a cromosomas específicos. Se espera que en los próximos años
se logren mayores avances en esta área.
La planta de sandía tiene un hábito de crecimiento de guía rastrera. Los tallos son delgados
con vellosidades o tricomas, angulares y con hendiduras superficiales. Se pueden observar
zarcillos ramificados en cada nudo a lo largo del tallo. Los tallos son ramificados y la longitud
de los mismos puede alcanzar los 10 metros, aunque hay variedades de tipo enano (genes dw-
1 y dw-2) con guías de longitud reducida y ligeramente menos ramificados.
Las raíces son extensas pero no profundas, con una raíz pivotante principal y muchas raíces
laterales o secundarias. Las hojas son lobuladas con excepción del genotipo no-lobulado que es
gobernado por el gene 'nl'.
Las flores son pequeñas y menos vistosas que en otras cucurbitáceas. La floración comienza
en general a las ocho semanas después de la siembra. Aunque hay genotipos con floración
prematura como lo es la variedad "Companion" de Seminis Vegetable Seeds Inc, cuya floración
puede comenzar a la quinta o sexta semana después de siembra.
Las flores de sandía son estaminadas (macho), perfectas (hermafrodíticas), o pistiladas
(hembra). Las primeras flores en aparecer son las masculinas o estaminadas. La proporción de
flores fluctúa entre 7 a 14 flores estaminadas por una flor pistilada. En otras palabras, primero
aparecerán de 7 a 14 flores masculinas en el tallo y después vendrá la flor pistilada. En esto
también hay excepciones y existen genotipos que dan flores pistiladas antes que aparezcan
flores estaminadas; asi como también hay genotipos en los que la proporción antes
mencionada puede ser menor. La aparición temprana de flor femenina o pistilada es deseable
especialmente si la fertilidad en las mismas es alta ya que asegura un amarre temprano de
fruto. Las flores pistiladas tienen un ovario inferior cuyo tamaño y forma se correlaciona con el
tamaño y forma final del fruto. Los frutos en la sandía cultivada varían de la forma esférica a la
cilíndrica o elongada de hasta 60 cm de longitud y tienen una cáscara de 1 a 4 cm en grosor. En
los híbridos cultivados actualmente el tamaño varía entre los 4 a los 15 kilos. Las semillas
continúan su maduración al mismo tiempo que el fruto también alcanza su maduración
fisiológica y de consumo.
No existe dormancia en la semilla de sandía y en caso necesario éstas pueden ser sembradas
inmediatamente después de su extracción. Las semillas de sandía germinan entre los 2 y hasta
14 días después de sembradas dependiendo de la temperatura y humedad pero el contenido
cromosomal también influencia la germinación. La temperatura ideal de germinación es de 30-
35 o C; y las semillas no germinarán por debajo de los 15o C. En general las semillas de tipo
diploide (2 cromosomas por célula) germinarán más rápido; seguidas por las semillas de tipo
tetraploide (4 cromosomas por célula); y finalmente las semillas de tipo triploide (3
cromosomas por célula).
Genética y Fitomejoramiento
La forma en que se heredan los caracteres en sandía ha sido extensamente estudiado. Como
resultado genes únicos o de herencia simple que son de gran valor para los programas de
fitomejoramiento han sido identificados. Ejemplos de estos genes incluye "A" que determina
expresión sexual monóica y su contraparte "a" que determina flores andromonóicas. Otros
ejemplos incluye "Ar-1" y "Ar-2" para resistencia a Antracnosis razas 1 y 2; "C" para pulpa de
color amarillo canario; etc. Para mayor información se incluye una tabla con la lista de genes
en sandía. Existen numerosas fases en el desarrollo de cualquier planta con características
deseables y/o novedosas.
El objetivo es integrar en una sola línea una combinación de los caracteres deseables de las
líneas parentales que originaron la nueva línea o línea mejorada. Estos caracteres usualmente
incluyen alto rendimiento de semilla, resistencias a plagas y enfermedades, mejores plantas
con sistemas radiculares más fuertes y/o profundos, tallos resistentes, tolerancia a sequía,
tolerancia a bajas o altas temperaturas, mejor calidad de fruto, precocidad, mejor o más
uniforme germinación de la semilla. Todo ello en conjunto debe conseguir que el híbrido
creado se adapte a los climas para los que fue mejorado.
En la medida que mejor se adapte un híbrido a una gama de ambientes diversos ese será el
éxito y se traducirá en más superficie plantada con el mismo o un uso prolongado de este a
través de los años. La selección de los métodos de fitomejoramiento y los parámetros de
selección dependerán en el mecanismo de reproducción, la heredabilidad de los caracteres
incluidos en el programa de mejoramiento (por ejemplo alta vs. baja heredabilidad) y el tipo de
material a liberar comercialmente (por ejemplo híbrido F1, línea pura, variedad sintética, etc.).
Para caracteres con heredabilidad alta la selección de plantas individuales con
comportamiento superior en una sola localidad o en un sólo ciclo de cultivo será suficiente.
Mientras que para una característica de heredabilidad baja será mejor basar la selección a
nivel poblacional tomando en cuenta los valores promedio que se obtienen de repeticiones en
diferentes localidades (ambientes) o en diferentes años y en los que se incluyen los valores de
una muestra estadísticamente representativa de la población estudiada para dicho carácter.
Los métodos de selección convencionalmente utilizados incluyen Pedigree, Pedigree
Modificado, Selección Masal, Selección Masal Estratificada, Selección Recurrente, Retrocruza a
Línea Endogámica, entre otros.
Existen formulas sencillas que permiten determinar esta ganancia por selección y lo que
básicamente incluyen es la comparación de valores estándares (valores del cultivar común o
testigo) con valores obtenidos en líneas avanzadas después de efectuar selección direccional
hacia donde deseamos mover la población o el (los) individuo (s) seleccionado (s). En resumen,
se compara la población "original" con la población obtenida a través de mejoramiento. De
cada familia se deben seleccionar líneas avanzadas prometedoras y éstas deben ser evaluadas
meticulosamente y comparadas a los testigos de manera rigurosa en ambientes o localidades
que son representativas a las áreas donde se plantarán una vez liberadas.
Estos ensayos deben de transcurrir por lo mínimo en tres años consecutivos aunque más años
de validación resultarán en mejor información acerca de la adaptación de los genotipos a las
áreas destinadas. Una vez obtenida la información se contará con candidatos para ser
liberados como líneas puras o para su utilización en la producción de híbridos F1. Las líneas
que aún carecen de algún carácter deseable pueden ser re-usadas ("recicladas") en el
programa de mejoramiento, ya que con nuevas combinaciones pueden dar lugar a poblaciones
que se someterán a selección.
Estas etapas que conducen a la fase final de comercialización y distribución toman entre unos
10 a 12 años desde que se efectuó la cruza original o se desarrolló la población con los
objetivos específicos. Por lo tanto el desarrollo de nuevos cultivares híbridos es un proceso
lento que requiere de una planeación precisa en inicio y de cierta capacidad de previsión,
asimismo demanda una firme disciplina, un uso eficiente de los recursos disponibles y mínimos
cambios en dirección. Una vez que se ha iniciado la selección en cierta dirección es difícil
cambiar la ruta.
Es mejor iniciar con el desarrollo de otra (s) población (es), si es que los objetivos han
cambiado. Uno de los retos mas difíciles es la identificación de individuos que son
genéticamente superiores, ello se debe a que para la mayoría de las características el valor del
genotipo se confunde con otros caracteres en la planta o efectos del medio ambiente que
ocultan el real valor genético del individuo. Un método para identificar una planta con valor
superior es observar su desempeño relativo en comparación con material experimental
conocido y con cultivares usados de manera común y difundida. Si una sola observación no
conduce a conclusiones claras; entonces se requiere de observaciones a través de
experimentos con repeticiones en espacio y/o tiempo para ser capaz de determinar el "real
valor genético".
Sandías Triploides La producción de sandía sin semilla (también conocida como sandía triploide
o en ingles 'seedless watermelon') se logra a través de la manipulación del número de
cromosomas en uno de los parentales con los que se formará el híbrido. La sandía en su
'estado' natural es diploide y el número aploide de cromosomas = 11. Es decir cada una de las
celulas de una sandía (semilla, planta, tallo, flor, fruto) tienen 22 cromosomas
(diploide=2N=22). A través de un tratamiento químico se puede lograr que el número de
cromosomas se duplique. Por lo tanto cada célula de una sandía químicamente tratada tendrá
44 cromosomas. El producto químico más convencional es un alcaloide llamado colchicina
(C22H25O6N).
Una vez que se ha comprobado que las plantas que sobrevivieron el tratamiento con colchicina
son tetraploides se procede a autofecundarlas para incrementar la semilla tetraploide. En las
primeras generaciones de autofecundación el contenido de semilla por fruto suele ser muy
bajo debido al estrés que la planta esta teniendo (hay que recordar que se esta alterando su
estado natural de diploide). Después de varias generaciones (ciclos) de autofecundación se
logra estabilizar la línea para que se mantenga en fase tetraploide y que produzca buena
semilla.
El mantenimiento de las líneas tetraploides se hace por autofecundación, de igual manera que
se mantendría una línea diploide. Pero se debe de poner especial cuidado al momento de
producirla porque un porcentaje mínimo en la población tatraploide va a tener la tendencia de
regresar a su estado natural diploide. Estas plantas deberán removerse del lote de producción
para no tener problemas de contaminación en el futuro.
1. INTRODUCCIÓN
La cebolla es una especie que pertenece al género Allium, ella figura entre
las plantas que desde la antigüedad se consume por el hombre, tanto como
alimento como con fines curativos (Pérez, 1989).
A inicios del siglo anterior se comenzó a reunir más información sobre esta
especie y se realizaron estudios referentes a diversos aspectos del cultivo
como el control de enfermedades, la adaptación y mejoramiento de las
variedades, así como la conservación y la industrialización.
• Altos rendimientos
Según Henry et. al, (1963) y David (2006), el gen cc expresa el color
blanco y domina sobre todos los colores mientras que RR expresa color rojo
y domina sobre rC que manifiesta color amarillo. También existen genes
inhibidores del color I que es incompletamente dominante sobre i, II en
presencia o ausencia de C y R da siempre color blanco, por ejemplo:
IiCCrr- Bulbos color crema IICCrr- Bulbos color blanco iiCCRR- Bulbos color
rojo iiCCrr- Bulbos color crema
Para el quinto ciclo los bulbos elegidos por cada línea se plantan en parcelas
de 3-4 m de largo por el ancho de 2 surcos y se colocan los bulbos bien cerca
unos de otros y se encierran en jaulas de malla fina y al iniciarse la floración se
le colocan moscas o abejas para favorecer la fecundación cruzada y así
recuperar vigor.
Para el séptimo ciclo se siembran las líneas para observar los caracteres
deseados, seleccionando rigurosamente los bulbos obtenidos por polinización
abierta. En caso de que se mantengan en las líneas los objetivos perseguidos
en el mejoramiento, se confecciona un octavo año de trabajo.
En este octavo año siembro las variedades que he designado con las
características deseadas, muy similares entre sí de forma muy cercana para
favorecer el cruzamiento entre ellas y obtener así una variedad sintética. la cual
se mantiene mediante la producción de semilla prebásica por selección masal
y con el aislamiento correspondiente de aproximadamente 800 m de otro
cultivar.