Ibarra, miércoles 30 de mayo del 2018, las 16h30, continuando con el trámite de ley,
se convoca a los jueces que integran este Tribunal de Garantías Penales De
Imbabura con sede en el cantón Ibarra, así como a los sujetos procesales, a la
audiencia de juzgamiento que se desarrollara el día miércoles 13 de Junio del 2018
a las 08h30, para resolver la situación jurídica del ciudadano procesado QUILCA
ESPARZA BYRON CESAR y de PINTO PAEZ ALEX FERNANDO, contra quien el
Dr. CHAVEZ VACA DIEGO FERNANDO, juez del Tribunal de Garantías Penales
con Sede en el Cantón Ibarra. A dictado auto de llamamiento a juicio, como repunto
autor del delito tipificado y sancionado en el Articulo 186 del Código Orgánico
General de Procesos (COIP), la cual se llevará a efecto, en la sala de audiencia, No
1 de la Unidad Judicial de Ibarra, ubicadas en la calle García Moreno 4- 49, entre
Sucre y Rocafuerte, tercer piso, - en atención a la prueba anunciada en la etapa
respectiva, mediante el acta de evaluación y preparatoria de juicio, a petición del
fiscal de la causa Dr. Luis Haro, recepte el testimonios de 1.- GURRERO NARVAEZ
NARCIZO ERMEL quien se le notificara por medio de la casilla judicial y domicilio
judicial electrónico señalado para este efecto por la fiscalía dentro de la presente
causa conforme lo establece el artículo 611 Código Orgánico Integral Penal, se les
recuerda a los sujetos procesales traer a sus testigos a la audiencia de juzgamiento
recordándoles que en caso de inasistencia injustificada se les impondrá la multa de
dos salarios básicos, notificados del trabajador general, según el artículo 130
numeral 7 del código orgánico de la función judicial a demás tenerse en cuenta los
anuncios probatorios documentales que se han detallado, fiscal del caso, mismas
partes que deberán ofrecer y presentar todo lo necesario en el desarrollo de la
audiencia, y que se corra traslado a los otros sujetos procesales en virtud del
principio de contradicción.- CÚMPLASE Y NOTIFIQUESE.
SECRETARIO/A
ANDRADE NAVARROFERANDA PATRYCIA
ACTA RESUMEN
Nombre Judicatura
TRIBUNAL DE GARANTÍAS PENALES DE IMBABURA
B. JUEZ/JUEZA:
Nombre: Ponente:
VASQUEZ RIVADENEIRA CAESAR NO
GUILLERMO
SOLA IÑIGUEZ MIGUEL LEONARDO NO
10281201701327
8:30 10:30
F. PRESUNTA INFRACCIÓN:
Delitos/ Contravenciones
148 ESTAFA, INC 1
3. DESARROLLO DE LA AUDIENCIA
A. TIPO DE AUDIENCIA:
Nombre Audiencia
AUDIENCIA DE JUICIO.
C. PRUEBAS DOCUMENTALES:
Tipo Prueba. Detalle Parte Procesal que
solicita
ACUERDO PROBATORIO OFICIO N° 377-2017-UCA- fiscalía de patrimonio
SZ-10, DE FECHA 18 DE ciudadano 4
ENERO DEL
2017,SUSCRITO POR
JOSE LUIS RODRIGUEZ,
CAPITAN DE POLICIA,
JEFE DE LA UNIDAD
JUDICIAL DE SUBZONA
IMBABURA NO, 10,
ADJUTA INFORME
TECNICO PERICIAL DE
RECONOCIIENTO DEL
LUGAR NO.
UCIIT1700152-2017,
ELABORADO POR EL
SEÑOR CBOP. DE
POLICIA DAÑY SANOS
DE JESUS
ACUERDO PROBATORIO OFICIO S/N DE FECHA 5 fiscalía de patrimonio
DE ENERO DE 2018 ciudadano 4
SUSCRITO POR JOSE
ANTONIO CORREA
VASCONEZ, GERENTE
GENERAL UNACEM
ECUADOR S.A; Y, ABG
DIANA PINTO GUERRA
MAT. PROF. NO 17-2012-
173
ACUERDO PROBATORIO OFICIO S/N DE FECHA 9 fiscalía de patrimonio
DE AGOSTO DE 2017 ciudadano 4
SUSCRITO POR RINA
VELASTEGUI SEGOVIA,
APODERADO ESPECIAL
UNACEM ECUADOR S.A;
DAVID MONTENEGRO
ANDRADE, APODERADO
ESPECIAL UNACEM
ECUADOR S.A; Y, DRA
PATRICIA VILLAMARIN
ANDRADE, MAT. PROF.
NO 6774 CAP
706ACUERDO OFICIO DE FECHA 10 DE fiscalía de patrimonio
PROBATORIO NOVIEMBRE DEL 2017, ciudadano 4
SUSCRITO POR
JOHANNA REGALADO O.
JEFE RETENCIONES
JUDICIALES. BANCO DEL
PACIFICO S.; ADJUNTO
COPIAS CERTIFICADAS
DE MOVIMIENTOS
BANCARIOS
CORRESPONDIENYTES
AL MES DE MARZO DEL
ACUERDO PROBATORIO OFICIO NRO. CERT - fiscalía de patrimonio
06105-KPAR-2017, DE ciudadano 4
FECHA 10 DE ENERO
DEL 2018, SUSCRITO
POR JOHANNA
REGALADO O. JEFE
RETENCIONES
JUDICIALES. BANCO DEL
PACIFICO S.A; ADJUNTO
COPIAS CERTIFICADAS
DE LOS MICROFILMS DE
LAS PAPELESTAS DE
RETIRO N° 97067706 Y
N° 97067709,
REGITRADO EN LA
CUENTA DE AHORROS
N°1042912164,CUYO
TITULAR ES EL SEÑOR
QUICA ESPERANZA
BYRON CESAR.
ACUERDO PROBATORIO OFICIO NRO. DIGERCIC- fiscalía de patrimonio
CZ1-2017-0602-O, DE ciudadano 4
FECHA 16 DE
NOVIEMBRE DEL 2017,
SUSCRITO POR SRTA.
MARIA BELEN JAUREGUI
REALPE,
COORDINADORA ZONAL
1 ENCARGADA;
ADJUNTA TARJETA
INDICE PINTO PAEZ
ALEX FERNANDO
ACUERDO PROBATORIO OFICIO N° MAT -00629- fiscalía de patrimonio
IBARRA-2017, DE FECHA ciudadano 4
16 DE NOVIEMBRE DEL
2017, SUSCRITO POR
DAVID BENAVIDES,
ABOGADO DE
MATRICULACION,
MOVIDELNOR-EP;
ADJUTO CERTIFICADO
UNICO VEHICULAR N°
CUV-2017-00361707, DEL
VEHICULO DE PLACAS
IBC3471
ACUERDO PROBATORIO OFICIO N° CERT-001976- fiscalía de patrimonio
ELIG-2017, DE FECHA 08 ciudadano 4
DE DICIEMBRE DE 2017,
SUSCRITO POR
JOHANNA REGALADO O.
JEFE RETENCIONES
JUDICIALES. BANCO DEL
PACIFICO S.A; ADJUNTO
CERTIFICACION
SUSCRITA POR VICTOR
HUGO ALCIVAR A LAVA,
VICEPRESIDENTE
EJECUTICVO
d. Pruebas Testimoniales:
Nombre Testigo Detalle Parte Procesal que
solicita
GUERRERO NARVAEZ NACIONALIDAD Fiscalía de patrimonio
NARCIZO ERMEL ECUATORIANA, 60 AÑO ciudadano4
DE EDAD, ESTADO CIVIL
CASADO, INSTRUCCIÓN
PRIMARIA, PROFECION
JUVILADO, DOMICILIADO
EN EL CANTON IBARRA
PROVINCIA DE IMBARRA
C.C 04004760-3
E. PRUEBAS PERICIALES:
7. EXTRACTO DE LA RESOLUCIÓN:
EL TRIBUNAL SE REINSTALA PARA DAR A CONOCER LA DECISIÓN
JUDICIAL, TOMANDO EN CUENTA LAS ARGUMENTACIONES, PRUEBA
PRACTICADA Y ACUERDOS PROBATORIOS, ASÍ COMO, ALEGATO O
ACUSACIÓN FORMAL. ECUADOR SE ENCUENTRA DENTRO DE UN
ESTADO CONSTITUCIONAL DE DERECHOS Y JUSTICIA, IMPLICA EL
RESPETO DE PRINCIPIOS Y GARANTÍAS; DEFINICIÓN CLARA DE
ROLES, LO EXPRESA CLARAMENTE LA CORTE CONSTITUCIONAL, EN
SU SENTENCIA 004-10-ECCN-CC CASO 0025-09CN, EN EL MISMO
SENTIDO SE PRONUNCIA LA EX SALA DE LO PENAL DE LA CORTE
NACIONAL DE JUSTICIA, EN SU RESOLUCIÓN 1165- 2.012
CORRESPONDIENTE AL JUICIO PENAL 0711-2.011, ASÍ TAMBIÉN
NUESTRA ACTUAL SALA DE LO PENAL, PENAL POLICIAL MILITAR Y DE
TRANSITO DE LA CORTE TAMBIÉN EN LA CAUSA ASIGNADA CON EL N°.
2066-2014. AL NO EXISTIR ACUSACIÓN Y AL AMPARO DE
JURISPRUDENCIA CONSTITUCIONAL Y LEGAL DEL ECUADOR ASÍ
COMO TAMBIÉN EN LA NORMA ESTABLECIDA EN EL ARTÍCULO 609 DEL
COIP, AL NO EXISTIR ACUSACIÓN PUES SE TIENE QUE RECONOCER LA
GARANTÍA DEL CIUDADANO PROCESADO Y RATIFICAR SU ESTADO DE
INOCENCIA MOTIVO POR EL CUAL, EL TRIBUNAL RATIFICA EL ESTADO
DE INOCENCIA DEL CIUDADANO PROCESADO ALEX FERNANDO PINTO
PÁEZ, Y CONFORME LO ESTABLECE EL ARTÍCULO 619 NUMERAL 5 DEL
COIP ORDENA QUE SE LEVANTE TODAS LAS MEDIDAS CAUTELARES
DE CARÁCTER PERSONAL Y REAL QUE SE HAYAN DICTADO EN SU
CONTRA, CONOCIÉNDOSE QUE DICHA PERSONA SE ENCUENTRA
DETENIDA POR OTRA CAUSA, NO SE DISPONE GIRARSE NINGUNA
BOLETA CONSTITUCIONAL DE EXCARCELACIÓN POR CUANTO EN LA
PRESENTE CAUSA ÚNICAMENTE TENÍA LA MEDIDA CAUTELAR DE
PRESENTARSE ANTE LA AUTORIDAD LA CUAL EN ESTE MOMENTO
QUEDA SUSPENDIDA, CON ESTA DECISIÓN ORAL, EN LOS PRÓXIMOS
DÍAS SE LES HARÁ LLEGAR A SUS CASILLEROS JUDICIALES LA
RESOLUCIÓN ESCRITA, PARA DE CONSIDERARLO PERTINENTE
PRESENTEN LOS RECURSOS PERTINENETES
8. RAZÓN:
SECRETARIO/A
VASQUEZ RIVADENEIRA CESAR GUILLERMO
Ibarra, jueves 9 de agosto del 2018, las 16h51, VISTOS: Una vez resuelta
oralmente, por éste Tribunal, integrado por los jueces, Dr. Diego Fernando Chávez
Vaca (Ponente); Msc. Miguel Leonardo Solá Iñiguez y Dra. María Dolores
Echeverría Vásquez, la situación jurídica del procesado ISSAC JONÁS PAZUY
FLORES, en contra de quien el Dr. Edison Arturo Cisneros Peralta, Juez de la
Unidad Judicial Penal con sede en el cantón Ibarra de Imbabura, dictó auto
resolutivo de llamamiento a juicio, por considerarle presunto cómplice del delito de
homicidio en el grado de tentativa, tipificado en el artículo 144 del Código Orgánico
Integral Penal (COIP) y sancionado en el mismo artículo en concordancia con el
artículo 39 ibídem; encontrándose la causa, en estado de dictar sentencia por
escrito, motivando y fundamentando la resolución oral; conforme lo disponen los
artículos: 76 número 7 literal l) de la Constitución de la República del Ecuador; 130
número 4 del Código Orgánico de la Función Judicial; 621 y 622 del Código
Orgánico Integral Penal (COIP); para hacerlo se considera: I.- COMPETENCIA El
Código Orgánico de la Función Judicial, en su artículo 221 número 1, señala que
los Tribunales Penales son competentes para sustanciar la etapa de juicio y dictar
sentencia en todos los procesos de ejercicio público de la acción, cualquiera que
sea la pena prevista para el delito que se juzga, exceptuándose los casos de fuero
y aquellos que deban tramitarse por el procedimiento directo, o los que determine
la ley; además, concordante con esto, tenemos que, el Código Orgánico Integral
Penal (COIP), en su artículo 402, señala que la potestad jurisdiccional en materia
penal está dividida de acuerdo con las reglas de competencia establecidas en el
Código Orgánico de la Función Judicial; por lo tanto, este órgano jurisdiccional, es
competente, para conocer y resolver la presente causa penal. II.- JURISDICCIÓN
El Código Orgánico Integral Penal (COIP), en su artículo 398, señala que la
jurisdicción consiste en la potestad pública de juzgar y ejecutar lo juzgado, y que
únicamente las y los juzgadores, determinados en la Constitución, el Código
Orgánico de la Función Judicial y en este Código, ejercen jurisdicción en materia
penal para el juzgamiento de las infracciones penales cometidas en el territorio
nacional y en el extranjero en los casos que establecen los instrumentos
internacionales suscritos y ratificados por el Estado. Además, el COIP, en su artículo
400 número 1, claramente señala que, están sujetos a la jurisdicción penal del
Ecuador, las y los ecuatorianos o las y los extranjeros que cometen una infracción
en el territorio nacional; por lo que, siendo el procesado ISSAC Jonás Pazuy Flores,
ciudadano ecuatoriano, en contra de quien se ha propuesto cargos penales en esta
provincia de Imbabura, está sujeto a la jurisdicción penal de esta provincia, la misma
que recae en el presente Tribunal de Garantías Penales de Imbabura con sede en
el cantón Ibarra. III.- VALIDEZ PROCESAL En la tramitación de esta causa, se han
observado los principios constitucionales consagrados en los artículos: 75, 76, 77,
82, 168 y 169 de la Constitución de la República del Ecuador; 8 y 9 de la Convención
Interamericana sobre Derechos Humanos (Pacto de San José de Costa Rica); así
como, los principios generales contemplados en el artículo 5; los principios
procesales de la prueba y su valoración, establecidos en los artículos 454, y 457, y
finalmente, los principios y reglas correspondientes a la etapa de juicio, constantes
en el Código Orgánico Integral Penal (COIP); y, al no existir vicios de procedimiento,
ni omisión de solemnidades sustanciales, éste Tribunal declara la validez de todo lo
actuado. IV.- IDENTIDAD DEL PROCESADO El procesado en la audiencia, oral,
pública y contradictoria de juzgamiento, se identificó como Issac Jonás Pazuy
Flores, de nacionalidad ecuatoriana, de 24 años de edad, de estado civil soltero, de
instrucción primaria, de ocupación agricultor, domiciliado en el sector de Palo
Amarillo, parroquia rural de Lita, cantón Ibarra, provincia de Imbabura y portador de
la cédula de ciudadanía No. 100385199-3. V.- DEL JUICIO LLEVADO A EFECTO
EN CONTRA DEL PROCESADO Previo al inicio del juicio, el Tribunal procedió a
informar al procesado Issac Jonás Pazuy Flores, sobre el auto de llamamiento a
juicio dictado en su contra; así como la gravedad del mismo, y de las consecuencias
que se pueden derivar de ser encontrado culpable; se le volvió a recordar sus
derechos y garantías establecidas en la Constitución de la República del Ecuador e
Instrumentos Internacionales de Derechos Humanos; así como, el derecho que
tiene a guardar silencio, a no auto inculparse, salvo que conjuntamente con su
defensa técnica, esa sea su estrategia de defensa; y, además, a estar atento a todas
las exposiciones que realice el representante de la Fiscalía General del Estado. Así
también, se le informó que para que su testimonio pueda ser valorado como medio
de defensa y de prueba a su favor, debía permitir tanto el examen o interrogatorio
de su abogado defensor como el contraexamen o contrainterrogatorio del fiscal de
la causa. 5.1.- ALEGATO DE APERTURA POR PARTE DE LA FISCALÍA
GENERAL DEL ESTADO Dr. Edgar Pacheco, fiscal de Imbabura, expresó: Los
agentes de policía del móvil Lita, han recibido la disposición del ECU-911, para que
se trasladen al sector de Palo Amarillo, el 17 de diciembre del 2017, a las 06h00,
posteriormente, toman contacto con la señora Janeth Yépez Pozo, quien manifiesta
que a las 06h00, del día indicado anteriormente, su padre de nombres Francisco
Pio Yépez, de 70 años de edad, se ha presentado con cortes a la altura de su cuello,
por lo que, inmediatamente, ha sido trasladado al Subcentro de Salud de San Juan
de Lachas, y posteriormente al Hospital San Vicente de Paul. El ciudadano Pio
Yépez ha manifestado que ha sido víctima de un ciudadano de apellido Pazuy,
procediendo la hija del mencionado señor Francisco Pio Yépez, junto con la Policía
Nacional a la ubicación de esta persona. A las 11h30, aproximadamente, del 17 de
diciembre del 2017, en la parroquia de Lita, vía que conduce a la Comunidad del
Baboso, a dos cuadras de la Junta Parroquial de Lita, ha sido aprehendido el
ciudadano Pazuy Flores Issac Jonás, mismo que trataba de evadir la acción policial.
Una vez revisadas sus pertenecías, en una mochila o canguro encuentran una arma
blanca, tipo navaja, con mango de color amarillo y también un celular, debiendo
indicar que el señor Francisco Pio Yépez, ha sido proferido heridas cuando se
dirigían del sector de Palo Amarillo hasta el sector de Parambas, esto es, el 17 de
diciembre del 2017, aproximadamente, a las 04h30 a 05h00, el señor Francisco Pio
Yépez, ha estado realizando una carrera en una motocicleta al señor Pazuy Flores
Issac Jonás y al señor Minda Benalcazar Walter Marcelo, el primero de los citados,
se encontraba en la mitad de la motocicleta, quien le profirió estos tres cortes al
señor Francisco Pio Yépez, en un sitio donde se encuentran venas importantes, si
bien es cierto, el examen médico legal establece una incapacidad física del señor
Francisco Pio Yépez de 8 días, pero como dije anteriormente, éstas heridas se
encuentran en un sitio donde se encuentran venas importantes. Una vez causada
estas lesiones, los ciudadanos Pazuy Flores Issac Jonás y Minda Benalcazar Walter
Marcelo, le dejan abandonado en la vía Ibarra-San Lorenzo, en coordenadas
0814506-79353024 que pertenece al cantón Ibarra, le dejan abandonando y le
retiran la motocicleta de propiedad de Francisco Pio Yépez. En esta audiencia voy
a probar que el ciudadano Pazuy Flores Issac Jonás, es el autor directo del delito
de tentativa de homicidio, tipificado en el artículo 44 del Código Orgánico Integral
Penal, en concordancia con el artículo 39 de la misma disposición legal. 5.2.-
ALEGATO DE APERTURA POR PARTE DEL ABOGADO DEFENSOR DEL
PROCESADO Dr. Fernando Jaramillo, defensor privado, expresó: Con fecha 16 de
diciembre del 2017, en circunstancias que mi patrocinado se encontraba libando
con familiares, se acerca hasta Palo Amarillo, estando obviamente en la parroquia
de Lita, en donde se encuentra con el señor, en este caso de nombres Minda
Benalcazar Walter Marcelo, a quien no conocía, acercándose y tomándose unos
tragos con esta persona y otras personas que estaban ahí, procediendo a salir y
tomando en este caso la motocicleta del señor Pio Yépez para que les haga una
carrera, debiendo indicar que el señor Minda Walter Marcelo es amigo personal y
amigo íntimo del señor Pio Yépez, razón por la cual, él accede hacerles una carrera,
en el transcurso de dicha carrera, el señor Pio Yépez manifiesta que tienen que
cancelarle 5 dólares, a lo que el señor, quien se encontraba en avanzado estado
etílico, indica que no y se arma una discusión, en la cual mi patrocinado lo que hace
simplemente es defenderse. Esto lo probaré, con prueba documental y testimonial,
de que no se trata de un delito tipificado en el artículo 144, en concordancia con el
artículo 39, es decir una tentativa de homicidio, si no lo que se ha dado en este caso,
que no se niega la responsabilidad, es simplemente una agresión física, la misma
que se encuentra encuadrada dentro del artículo 152 inciso 1 del Código Orgánico
Integral Penal. 5.3.- ACUERDOS PROBATORIOS Al amparo de los principios de
celeridad, simplificación, uniformidad, eficacia, inmediación y economía procesal,
consagrados en los artículos 75 y 169 de la Constitución de la República del
Ecuador, respectivamente, en relación con los principios de buena fe y lealtad
procesal, contemplados en el artículo 26 del Código Orgánico de la Función Judicial,
en concordancia con el artículo 608 número 4 del Código Orgánico Integral Penal
(COIP); los sujetos procesales, han arribado a los siguientes acuerdos probatorios:
Informe técnico pericial de reconocimiento de evidencias No. 106-2018, de fecha 14
de enero del 2018, elaborado y suscrito por la perita acreditada al Consejo de la
Judicatura, Cabo de Policía Teresa Maza Luna, quien señala que el 12 de enero del
2018, se trasladó hasta el centro de acopio de evidencias de la Policía Judicial,
donde tomó contacto con el Cabo de Policía Marcelo Achina, bodeguero, quien le
presentó una funda plástica transparente, conteniendo una arma blanca tipo navaja
con mango sintético de color amarillo/café, que posee hoja metálica con punta y filo,
en el pliegue entre mango y la hoja observa residuos de una sustancia color café;
un canguro conteniendo un estuche de color verde con 24 espuelas, 5 fragmentos
de vela, una envoltura de taipe color blanco, un frasco pequeño de color blanco con
tapa color amarillo con una sustancia líquida de color amarillo, una fosforera con
logotipo BIC; un celular de color blanco marca Samsung IMEI: 352550/07/285324/3,
chip de la operadora movistar y una micro SD marca Kingston 16Gb. Adjunta
fotografías de las evidencias anteriormente detalladas. Informe técnico pericial de
luminol No. UCIIT1800358, de fecha 09 de febrero del 2018, elaborado y suscrito
por los peritos acreditados al Consejo de la Judicatura, Sargento de Policía Cristian
Galárraga Pupiales y Cabo de Policía Fernando Castro Vinueza, quienes en sus
conclusiones señalan que al aplicar el reactivo luminol sobre la superficie del
costado derecho e izquierdo de la evidencia, concerniente en el arma blanca tipo
navaja con hoja metálica color plateado en la que presenta un logotipo donde se
lee: Stainless y con mango de material sintético color amarillo con tomate y negro,
reaccionó de manera positiva, denotándose la luminiscencia, por lo que se procedió
a realizar la toma de hisopados, que fueron fijados embalados y etiquetados, para
posterior ser entregados en las bodegas de la Policía Judicial de Imbabura con su
respectiva cadena de custodia. Adjuntan fotografías de la pericia practicada. 5.4.-
MEDIOS PROBATORIOS DE LA FISCALÍA GENERAL DEL ESTADO A.-
TESTIMONIO DE LAS VÍCTIMAS INDIRECTAS Y DIRECTA Janeth Magdalena
Yépez Pozo, portadora de la cédula de ciudadanía No. 100371009-0, con juramento
al examen del fiscal, textualmente, respondió: “Si le conozco al señor Francisco Pio
Yépez, él es mi padre. Ese día viernes 17 de diciembre del 2017, mi papá ha hecho
una carrera, llegó a la casa cortado, por eso mis hermanos le llevaron al Subcentro,
cuando fui mi papá dijo que eran esos chicos llamados Pazuy, de ahí nosotros
fuimos en busca de rezago porque mi hermano no tenía gasolina para venir acá a
Ibarra, ya que me dieron el pase para el hospital de Ibarra, entonces nos
regresamos a Lita a cargar gasolina, en eso mi hermano que está de testigo igual,
él dice vamos en busca de la motor, porque en la moto se había ido hacer la carrera,
vamos a buscarla, más allá de lo sucedido ha estado la moto botada, ahí dice como
así está aquí la moto, ahí le cogimos y alzamos, pero mi hermano dice mejor
dejémosla aquí, nos fuimos Lita, ahí les encontramos a los policías, les dimos parte
y con ellos empezamos a investigar y miramos donde le han botado a mi papá,
porque él nos contó a nosotros que le han botado, que es un chico Pazuy y otro
chico, por eso fuimos vimos en ese lugar que estaba la gorra botada ahí, y como él
ha salido desesperado, los policías dijeron ahora toca ver si ustedes le conocen al
joven para detenerle, mi hermano dijo si le conozco, si le miré a él, nos fuimos a
Lita, los policías le detuvieron al joven (señala al procesado). Cuando llegó mi papá,
estaba en mi casa en San Pedro, él llegó a las 06h00. De mi casa al lugar de los
hechos deben ser unos veinte minutos en bus. Mi papá llegó en buseta, chorreando
sangre. Una vez que llegó mi papá a la casa, mis hermanos le llevaron al hospital,
ya cuando le dieron el traslado para acá a Ibarra, un hermano se vino para acá, y
yo con mi otro hermano fuimos a cargar la gasolina, por eso dijo que ahí nosotros
nos hicimos como detectives, a investigar. Al señor Pazuy lo detuvimos en Lita en
la plaza, él estaba tomando, ahí se corrió de los policías pero luego le cogieron. Mi
papá presentaba unas heridas de corte de cuello con un puñal. Mi papá dijo que él
se ha ido hacer una carrera, que le han dicho vos viejo ya no sirves y le han cortado
y le han botado en un abismo”. Al contraexamen de la defensa técnica del
procesado, textualmente, respondió: “Si dije que a mi padre lo mandaron al hospital
San Vicente de Paúl, no le acompañé a mi padre, pues como dije nosotros con mi
otro hermano fuimos a Lita, a mi papá le encontramos cuando ya le daban el alta.
No recuerdo a qué hora le ingresaron a mi papá al hospital. Vine acá tipo 16h00,
pero él debe haber ingresado al mediodía porque se vino en la ambulancia. No
puedo decir cuánto tiempo se demoró en el hospital. La hora no sé qué le dieron de
alta. Mi padre no llegó en la motocicleta, la misma fue encontrada más allá del
suceso. La motocicleta estaba caída, con un foco y las marchas dañadas. Nosotros
después de haber ubicado la moto, mi hermano la cargó en la camioneta, pero no
la llevamos a la casa, sino que la dejamos en Parambas, porque dijimos vayamos
a meternos en problemas con la ley. Al señor Pazuy, no le conozco, tampoco he
sabido que haya sido amigo de mi padre. Mi papá no dijo quiénes eran los que le
habían agredido, solo dijo que era un chico que se llamaba Pazuy. A ellos así se les
conoce a la mayoría por adentro como Pazuyes. No me supongo que le conocía,
allá a la mayoría de los jóvenes les dicen Pazuyes, porque son mestizos, son
cruzados, pero mi hermano si le ha visto a él. No le conozco al señor Walter Marcelo
Minda Benalcazar. Mi padre no refirió este nombre, solo dijo que era un negrito que
iba con él”. Sandro Horacio Yépez Pozo, portador de la cédula de ciudadanía No.
No. 100334876-6, con juramento al examen del fiscal, textualmente, respondió: “El
día 17 de diciembre del 2017, me encontraba en un billar. En horas de la madrugada
estaba yéndome a mi casa, le vi a mi papá que pasaba en una moto con el sujeto,
haciéndole una carrera, ahí ya me estaba yendo a mi casa a dormir, al otro día, mi
hermano llega avisar que le han cortado el cuello a mi papá, ese rato le fu a ver al
hospital, estaba el cuello cortado, como tenía una camioneta nos fuimos a Lita,
cerca de Cachaco fuimos a preguntar del señor (señala al procesado) donde se
encontraba, nos avisaron que por Lita andaba tomando, fuimos averiguar y le
solicitamos a los policías no ayuden a coger porque él había sido el que le cortó el
cuello. Mi papá salió con una carrera del billar en San Pedro, a eso de las 05h00,
hacia Palo Amarillo. Si estuve presente cuando se le detuvo al señor Pazuy Flores,
ya que él estaba tomando, y yo fui donde los policías y les dije que el señor iba con
mi papá y ellos le cogieron en Lita. La detención fue que los policías fueron donde
estaba él y ahí salió corriendo, por eso le corretearon unos cien metros y le cogieron.
No estaba ahí cuando le cogieron, por eso no pude escuchar que dijo él. Mi papá el
cuello estaba cortado.” Al contraexamen de la defensa técnica del procesado,
textualmente, respondió: “Si lo había visto anteriormente al señor Pazuy Flores. No
lo conocía mi padre al señor Pazuy porque mi papá solía hacer carreras y solo le ha
hecho la carrera. Fui al hospital a ver a mi padre y le pregunté quién fue el que le
cortó el cuello, y dijo al que le hacía la carrera al Pazuy y como yo le conocía a él.
Mi padre si le ha conocido el apellido de él. Al mediodía le deben haber ingresado
a mi padre. En el hospital San Vicente de Paúl le chequearon para ver si estaba
cortado alguna vena. Ahí determinaron que no estaba cortado ninguna vena. A la
media hora fue dado de alta, de ahí él fue junto con nosotros caminando a la
Fiscalía. Luego le llevamos a la casa y como estaba un poco mal, tocó llevarle
nuevamente al hospital. De lo que le han botado en un barranco, la motocicleta
estaba botada más allá en la cuneta. Sí en el lugar de los hechos”. Francisco Pio
Yépez Yépez, portador de la cédula de ciudadanía No. 00425277-7, con juramento
al examen del fiscal, textualmente, respondió: “Mi domicilio lo tengo en San Pedro
y me dedico a la agricultura. El 17 de diciembre del 2017, pasó que estaba en el
carretero conversando con unas personas de Buenos Aires y el señor (señala al
procesado) fue para que le haga una carrera, entre las 04h00, que lo lleve a Palo
Amarillo, de ahí lo dejé en Palo Amarillo, fui hacer el baño y luego me dijo que le
haga la carrera nuevamente a Parambas, en el camino, se montó él atrás y otro
moreno atrás, entonces me dijo andando, como el moreno ya estaba ahí, sentí que
me metió cuchillo aquí (señala parte baja de la espalda), perdí el equilibrio, y ya me
puso el cuchillo aquí (señala el cuello) me dijo aquí te voy a matar viejo hijueputa
porque no debes vivir, los viejos no deben vivir, llegué más acá y me metieron en
una zanja, de ahí me bajaron ambos, y ya me cortó el uno con el cuchillo, el otro
sacó la licencia, la matrícula y 15 dólares, y me botaron hacia un abismo pero antes
unas ramitas habido ahí, me atranqué y si no había esa ramita más allá habido un
vacío y al río Mira, como ya me atranqué y estaba sangrando, antes no fue a la vena
grande, sino ahí no más quedaba, de ahí salí gateando y fui a pedir auxilio a una
señora de allá, se levantó esa señora, le dije no tiene un teléfono para mandarles a
traer a mi hijos y contarles lo que me pasó, me dijo que no tiene saldo, entonces
salí a la Panamericana, pasó una buseta no me cargó, pasó otra esa si me llevó,
llegué a la casa a pedir a mi hijo que me ayude que me lleve al hospital, entonces
cogió la camioneta y fuimos al hospital, ahí me cosieron y me trajeron al hospital
San Vicente. Si dije que a las 04h00 estaba en el carretero del sector Palo Amarillo,
ya que ahí habían estado de fiesta por eso me llevaron para allá y me traen de
vuelta para acá. Una vez que me botaron la moto la prendieron y se la llevaron para
abajo, y a cien metros le han dejado a la moto botada. Me di cuenta del lugar donde
ha quedado la moto, porque ya fueron mis hijos y me indicaron donde había
quedado la moto. Del lugar que me botaron a San Pedro son unos 5 kilómetros,
luego de ahí me trasladaron a San Juan del Achas-Carchi, aquí me cosieron un
poco, cogieron la Ambulancia y me trajeron al hospital San Vicente. En el cuello tuve
dos piquetes y el otro así (señala como cortar). En el hospital ya me cosieron. A mis
hijos les dije fulano de tal fue, porque mi hijo ha visto lo que he pasado, entonces él
dijo este es, y pidió auxilio a Lita, ahí lo han detenido. En el hospital San Vicente de
Paúl estuve mediodía. Si dije que venía conduciendo la moto, atrás venía el señor
Pazuy y atrás otra persona. A mí me hirió el Pazuy (señala al procesado). Antes no
le conocía a este señor Pazuy. En el lugar estaba en la motocicleta conversando
con unos amigos de Buenos Aires, por eso llega a que le haga una carrera. Si
acostumbro hacer carreras por el sector, también sé andar vendiendo pollos. Si las
carreras las realizo en la motocicleta. Si comparecí a la audiencia y relaté los
mismos hechos, como lo estoy haciendo aquí”. Al contraexamen de la defensa
técnica del procesado, textualmente, respondió: “Si manifiesto que fui herido en mi
espalda, ya que ahí me estaba picando el lado derecho. Sentí ser picado, ahí dije
este me está picando con cuchillo, ahí le dije que me estas picando. No se hizo
ninguna lesión. Si me hice un examen médico legal. No le dije nada al médico legal
de esta situación porque como no me pico casi nada. Si dije que le había visto mi
hijo al señor Pazuy. Le ha visto a lo que le estaba haciendo la carrera, ahí le ha
reconocido, pero no le ha reconocido al otro sujeto. Sí ahí ya estaba con las dos
personas. No le conocía muy bien al otro moreno que se subió en mi motocicleta,
pero le sacamos el record policial de la computadora. Este moreno se llama Minda
Benalcazar Wilmer Marcelo, quien era medio conocido. Los padres de él no son
amigos de nosotros, ni tampoco iban a nuestra casa. Si me ratifico que al señor
Pazuy no le conocía, quien le identifica es un hijo mío porque él ha sabido ir a los
gallos y él también ha sabido ir, entonces le ha visto en la motocicleta. Si dije que
me botaron y quedé atrapado en las hierbas. Claro que rodee. (En este momento el
abogado defensor del procesado, pasa a demostrar contradicciones con la versión
de la víctima, quien en la parte pertinente, lee: Me botaron al abismo, al cual rodee
aproximadamente 8 metros y me quedé atascado en el borde). Continúa
respondiendo textualmente al contraexamen del abogado defensor del procesado:
“No me golpeé ya que me botaron y caí suavecito, entonces quede así (gesticula
como para gatear) y seguí saliendo por la ladera. Ambos me botaron, ya que el uno
me cogió de aquí (señala sus pies) y el otro de acá (señala su dorso). Si fui
ingresado al hospital San Vicente de Paúl. Se demoraron atendiéndome mediodía.
No recuerdo la hora que ingresé, el caso es que era mediodía a lo que estaba ahí.
Se demoraron cosiéndome una hora, luego fui caminando hasta la Fiscalía, a poner
la denuncia. B.- TESTIMONIALES Sargento II de Policía Diego Mauricio Tutillo
Tutillo, portador de la cédula de ciudadanía No. No. 100261303-0, con juramento al
examen de la fiscal, textualmente, respondió: “El 17 de diciembre del 2017,
encontrándome de servicio, fuimos alertados por el ECU 911 alrededor de las
11h30, que avancemos al sector de Palo Amarillo, donde se encontraba la persona
interesada, avanzamos al lugar donde pudimos tomar contacto con un familiar del
señor que había sufrido un asalto que había sido de su motocicleta y el señor ya se
encontraba en el hospital, acto seguido los mismos familiares habían brindado
información acerca del presunto agresor, por versiones de un hijo que le ha visto en
la mañana dirigirse en la moto conjuntamente con el señor Issac Pazuy, y lo tenían
ubicado al señor que se encontraba el en sector de Lita, igualmente a la altura de
las canchas. Antes la persona agredida había conversado con su hijo y le había
reconocido a la persona que había sido directamente, entonces ellos dan con la
ubicación de la persona que le había agredido, que había sido en el sector de Lita,
igualmente avanzamos con los compañeros, y conjuntamente con la persona
interesada a tratar de localizar al señor, al momento que localizamos al señor,
comienza a correr, en precipitada carrera, a dos cuadras de las canchas deportivas
de Lita, se logró neutralizar al señor, en ese rato se le hizo una requisa manual y se
le pudo encontrar una navaja que se encontraba en su poder, en un bolso,
igualmente, se reportó al ECU-911 de esta novedad y fue trasladado al hospital San
Vicente de Paúl para sacarle el certificado médico, así miso la persona herida pudo
identificarle directamente que era la misma persona que le había agredido en la
madrugada, se le sacó el certificado médico, se le hizo conocer sus derechos
constitucionales y fue trasladado hasta el Centro de Detención Provisional. Mi
persona le leyó los derechos constitucionales al señor Pazuy. Estaba laborando en
el sector de Lita, estaba acompañado del conductor Cabo Ortiz y el auxiliar Mogro
Cristian. La hija que nos comunicamos, ella indicó el lugar donde se había suscitado
el hecho. El lugar donde se produjeron los hechos es de la carretera a cinco metros.
Posterior que avanzamos al hospital San Vicente de Paúl, pudimos observar las
heridas que tenía el ofendido, que era un corte a la altura del cuello”. Al
contraexamen de la defensa técnica del procesado, textualmente, respondió: “Lo
que se le encontró en el bolso, fue un arma blanca tipo navaja pequeña, también
cinco fragmentos de vela, un frasco pequeño de color blanco con un líquido
amarillento, igual el celular personal que lo tenía, y el canguro en que se encontró
estos elementos, incluso tenía unas espuelas. En el momento en que el señor Pazuy
iba hacer aprehendido se encontraba en estado normal. En ese momento se
encontraba el señor observando lo que estaban jugando. No estaba tomando. No
pude apercibirle que estaba con aliento a licor, por eso el certificado médico se lo
sacó y no pudimos divisar que el señor estaba tomando. No pudimos darnos cuenta
que el señor estaba con aliento a licor. Si consta el certificado médico adjunto a
nuestro parte, donde si señala que está con aliento a licor. Siempre que hay una
persona detenida se saca el registro de antecedentes, en el presente caso no
registra antecedentes el señor Pazuy. Estos antecedentes no se refieren a carácter
judicial sino policial”. A la aclaración del juez acompañante, textualmente,
respondió: “Al momento de avanzar a sacar el certificado médico al señor Pazuy el
señor agredido aún se encontraba en la casa de salud siendo atendido, ingresó y
se encontraba en la parte de primeros auxilios entonces al momento de ingresar lo
pudo observar que era esa persona, lo identificó, solo dijo esa persona fue”. Cabo I
de Policía Fredy Eduardo Ortiz Uvidia, portador de la cédula de ciudadanía No. No.
100292229-0, con juramento al examen del fiscal, textualmente, respondió: “En el
parte informativo que se me pone a la vista si existe mi firma, y también lo suscribe
el Cabo Tutillo y el compañero policía Mogro. El día 17 de diciembre del año 2017,
nos encontrábamos de patrullaje, y por disposición del ECU-911, nos trasladamos
hasta la Comunidad de Palo Amarillo donde tomamos contacto con la señora Janeth
Yépez, ahí nos supo manifestar que su padre Julio Yépez había llegado a su
domicilio entre eso de la 06h00, el mismo que se encuentra ubicado en la
comunidad de San Pedro, llegó con heridas a la altura de su cuello, y con familiares
lo habían trasladado hasta el hospital San Juan de Lachas, y de ahí lo iban a
trasladar hasta Ibarra, al hospital San Vicente de Paúl, antes indicándoles que el
causante de esas heridas era un muchacho de apellido Pazuy, conjuntamente con
los familiares, van en busca de estos muchacho, lográndole ubicar en las canchas
de la parroquia de Lita, por lo que conjuntamente con los familiares avanzamos al
lugar, y con las descripciones dadas por los familiares de que vestía un jean azul,
una camiseta roja y que tenía pelo largo, procedimos acercarnos al ciudadano, el
momento que se percata de nuestra presencia el ciudadano sale en precipitada
carrera, lográndolo neutralizar a dos cuadras más o menos de las canchas de la
parroquia de Lita, en la vía que se dirige a la Comunidad El baboso, ahí se procedió
a la detención del muchacho, encontrándole entre sus pertenencias una navaja con
mango de color amarillo, un estuche de color verde, con 24 espuelas, 5 fragmentos
de vela, una envoltura de taipe color blanco, un fr5asco pequeño de color blanco,
una fosforera color blanca, un celular marca Samsung, un chip de la operadora
Movistar, una micro SD DE 16GB marca Kinston, los mismos que fueron ingresados
con cadena de custodia a las bodegas de la P.J., no sin antes hacerle leer sus
derechos constitucionales luego ser trasladado al hospital San Vicente de Paúl, para
su valoración médica y luego ser ingresado al CDP. Desconozco que estaría
haciendo el señor Pazuy en se momento en el sector de Lita, a nosotros ya nos
indicaron que estaba ahí, lo visualizamos, y nos acercamos, al percatarse el señor
de nuestra presencia salió corriendo. El ciudadano del parte es la misma persona
que está siendo juzgada aquí. Los hijos del ofendido indicaron que su padre les
había dicho que él es el causante de las heridas que tenía en el cuello. No pude
observar en ese momento las heridas del ofendido, porque ya lo habían trasladado
hasta Ibarra y nosotros estábamos con los familiares. Sí, posteriormente nos
trasladamos al hospital San Vicente de Paúl. Fuimos a sacarle el certificado médico
al ciudadano (señala al procesado) y vimos el estado del agredido. No le pudo
visualizar el herido al ciudadano Pazuy. El señor Pazuy si tenía aliento a licor,
parecía que estaba mareado, pero no podría decirle exactamente, lo que si tenía es
aliento a licor. Una vez aprehendido el señor Pazuy nos trasladamos hasta acá a
Ibarra a sacarle el certificado médico”. Al contraexamen de la defensa técnica del
procesado, textualmente, respondió: “No estuvimos presentes cuando fue atendido
el señor Pio Yépez, ya que anteriormente ya le habían trasladado. Si fui al hospital
San Vicente, lo miramos al señor, pero ya le estaban dando de alta. Desconozco
cuanto tiempo se demoró el señor Pio Yépez en el hospital San Vicente de Paúl, ya
que no estuve con el señor, sino con sus familiares. Nosotros llegamos cuando ya
decían que le iban a dar de alta. Este día fue el 17 de diciembre del 2017.
Desconozco a qué hora le iban a dar de alta. Si llegué al hospital San Vicente de
Paúl, en compañía de mis compañeros el Sgto. Tutillo, el Policía Mogro, y el señor
que está aquí (señala al procesado) y en este momento todavía se encontraba en
el hospital el señor Pio Yépez. Nosotros llegamos aproximadamente de 13h00 a
14h00. El señor Pazuy del hospital San Vicente de Paúl, salió aproximadamente
unos quince minutos a media hora de lo que llegamos, que fue tipo 14h00, ya que
Lita es distante, por eso creo que salió 14h15, pe4ro no salió con el señor Pio
Yépez”. Psicóloga Tania del Roció Benítez Vargas (Testigo de Fiscalía y de la
Defensa Técnica del procesado), portadora de la cédula de ciudadanía No.
100301525-0, con juramento al examen del fiscal, textualmente, respondió: “El
examen psicológico es una valoración que se realizó al señor Issac Pazuy de 24
años en aquel entonces, pericia que se solicitó por parte de Fiscalía, dentro de este
se realizó la entrevista psicológica como es el debido proceso dentro de la ley
psicológica, se realizó una observación clínica una aplicación de reactivos
psicológicos que son apoyo para recabar información y posterior a ello, teniendo
toda esta información se llega a las conclusiones que están indicadas dentro de este
informe. Dentro de las conclusiones está mencionado que el sujeto antes
mencionado dentro de lo que es su anamnesis o su historia de vida, en la niñez y
adolescencia tuvo un aspecto negativo, el cual influenció en su área afectivo
emocional, debido a que tuvo un abandono por parte de su figura materna situación
que provocó un grado de inestabilidad por el grado de dependencia que en ese
entonces él tenía con su progenitora. Además se mencionó que dentro de lo que es
la anamnesis en el área de la juventud, el señor Pazuy no tuvo inconvenientes
dentro de su estado emocional, se desarrollaba en el ámbito laboral como jornalero
y la mayor parte de tiempo pasaba solo sin tener una compañía o una pareja
sentimental, dentro de los que es su estado emocional se detectó que presenta una
inestabilidad emocional por el hecho antes mencionado por la dependencia
materna, quien se fue alejada por el abandono de su progenitora, presenta un
coeficiente intelectual normal y una personalidad cognitiva anancástica, esta
personalidad significa que quienes tienen esta personalidad, son personas que
tienen como aprendizaje todas las cosas que tienen en su vida o todo lo del entorno,
suelen aprender y absolver toda la información para posteriormente desarrollarme
de una manera normal y la personalidad anancástica es que este tipo de personas
les gusta cumplir órdenes, reglas, normas, pero también tienen una leve
inestabilidad, por el temor de quererlo cumplir de manera correcta. Dentro del literal
5.1, que es la entrevista al señor ISSAC Jonás, él dio a conocer que el día 16 de
diciembre del 2017, se encontraba en el sector de Parambas, donde se fue a una
fiesta, posterior a eso conoció a una persona que no identifica el nombre, le llevó a
otra fiesta que era ubicada cerca de su domicilio, al salir de eso mencionó que él se
encontraba en un estado etílico, lo cual casi no recuerda los hechos suscitados,
pero lo único que recordaba era que él se encontraba en una discusión, donde era
una discusión por una moto, no recuerda nada más y al día siguiente que era el 17
de diciembre del 2017, él se despertó en la casa de una tía paterna la señora Aurora
Pazuy donde él continuó ingiriendo bebidas alcohólicas y horas después llegó la
policía y había sido detenido para investigaciones. Estos olvidos involuntarios se
deberían al consumo excesivo de alcohol, sería el único motivo, porque dentro de
su estado emocional y dentro de su coeficiente intelectual, no tiene afectaciones
que provoque olvidos momentáneos. Él está dentro de los parámetros normales” Al
contraexamen de la defensa técnica del procesado, textualmente, respondió:
“Dentro de la investigación realizada el señor Pazuy no presenta rasgos agresivos,
no presenta rasgos sicópatas, presenta una estabilidad emocional y un coeficiente
intelectual normal. Lo que mencionaba es en cuanto a los rasgos de personalidad,
dentro de estos rasgos presenta la situación de que le gusta cumplir órdenes, etc.,
algunos de esos los puede ir cumpliendo, no a cabalidad todos pero el 50% si se
cumple”. Dr. David Francisco Delgado Alvear, portador de la cédula de ciudadanía
No. 130760267-0, con juramento al examen del fiscal, textualmente, respondió: “Si
realicé un examen médico legal en la persona de Pio Yépez. Con fecha 17 de
diciembre del 2017, aproximadamente a las 16h25, le realicé la valoración, el cual
había manifestado que ese día alrededor de las 06h00, había tomado al señor
Pazuy Flores para una carrera e ir en la moto, desde el sector de San Pedro hasta
más adelante donde este señor llegó a su destino y posteriormente se sube
nuevamente en la moto y le realiza heridas cortantes a nivel del cuello y posterior lo
tira a un barranco. En mi anamnesis pude evidenciar que tenía 3 heridas, una
anterior de aproximadamente 10cm, 12 puntos y dos al costado izquierdo del cuello,
una de 5cm y otra de 3cm, como conclusión determine una incapacidad de 8 días.
Si dije que en el cuello del señor Yépez se encontraron 3 heridas lo que significa
que se realizaron en 3 momentos diferentes. Las heridas son producidas por un
objeto cortante. Dentro del cuello tenemos varias estructuras vasculares y
nerviosas, entre las principales tenemos la vena carótida, la vena yugular y los
nervios frénicos, que son bastante importantes y una lesión a ese nivel podría
ocasionar un desangre. Las venas profundas se encuentran por debajo entre 1 a
1.5cm., incluso varía dependiendo del biotipo de las personas. En caso de afectar
la vena carótida estaría en riesgo la vida de una persona. En el caso de afectarse
carótida o yugular que van de la mano, a nivel de la parte del cuello lateral podría
desangrarse, produciendo un shock hipovolémico. En estas heridas del señor Pio
Yépez, no pude evidenciar la distancia ya que estaban suturadas las mismas, pero
aparentemente han sido superficiales porque no hubo compromiso en lo que es la
parte muscular. La edad del señor Pio Yépez es de 70 años. Las personas adultas
mayores son más susceptibles de tener cambios y shock hipovolémicos al igual que
los jóvenes” Al contraexamen de la defensa técnica del procesado, textualmente,
respondió: “Las heridas como ya estaban saturas no pude evidenciar si es que
tenían o no una profundidad determinada. Si acabé de mencionar que las heridas
eran superficiales y no comprometían ningún tipo de arteria. Sí para cortar la
carótida, yugular y demás nervios se debía utilizar mayor fuerza. No llegué a ver el
arma con la cual se hicieron estas heridas”. A la aclaración del juez acompañante,
textualmente, respondió: “El señor fue atacado a las 6h00 y llegó a las 16h25 a mi
consultorio, está claro que ya habían pasado varias horas. Con respecto a las
heridas, una superficial es la que simplemente compromete epidermis, dermis, sin
llegar a comprometer otras estructuras como vasos, como músculos y tejidos, que
son importantes, se suturan, las únicas heridas que no se suturan son las heridas
que se pueden cerrar por primera intención, las que son limpias y que no están en
ningún tipo de lugar, que tengan mayor o menor complejidad de compresión o
estiramiento o que sean muy utilizadas, y dado la extensión de este tipo de lesiones
que tenía el paciente en este caso el señor Yépez, era necesario la sutura.
Aproximadamente tenía 10cm la primera herida de tipo horizontal, en la parte
anterior del cuello, como lo había mencionado y las dos heridas horizontales del
cuello del lado izquierdo eran una de 5cm y otra de 3cm, por lo general en la parte
quirúrgica se trata de dejar un promedio entre 0.7cm a 1cm de puntos. Claro en este
caso no comprometió vasos, fue una herida superficial cortante que requirió ser
suturada por el riesgo de infecciones. Si comprometiera vasos podríamos decir que
es una herida superficial con compromiso vascular. Una herida profunda ya es
aquella que lesiona no solamente piel, no solamente vasos, sino que también
músculos, incluso podría llegar a estructura ósea, eso hablando en el cuello, en lo
que es otro órganos dependerá de su localización. Cabo I de Policía Diego
Fernando Flores Bolaños, portador de la cédula de ciudadanía No. 100289851-6,
con juramento al examen del fiscal, textualmente, respondió: “Si realicé la diligencia
de reconocimiento del lugar de los hechos. El día lunes 15 de enero del presente
año, me traslade conjuntamente con el señor Yépez para realizar el reconocimiento
del lugar de los hechos, esto fue en la parroquia de Lita, cantón Ibarra, al costado
que recorre la vía Ibarra-San Lorenzo, al costado derecho se observa un acceso de
tierra rodeado de vegetación mismo que nos conduce a un barranco de
aproximadamente 250mts. de profundidad, el mismo que llega al rio del sector. El
lugar de los hechos, según la indicación que me dio el señor Yépez, dijo que el lugar
que voy a explicar es el lugar de los hechos que se encuentra en la parroquia de
Lita. Si tomé fotografías del lugar y adjunté a mi informe. La primera fotografía es la
vía que conduce desde Ibarra a San Lorenzo. La segunda fotografías es al costado
derecho de la vía se observa el acceso que se encuentra rodeado a sus costados
de vegetación propia del lugar. La tercera fotografía se observa el acceso que es de
tierra y que nos conduce hacia el barranco. En la fotografía No. 4, observamos el
barranco que es muy pronunciado, de aproximadamente 250mts., donde al final se
observa el rio del sector. Si este lugar de los hechos se encuentra en el cantón
Ibarra”. Al contraexamen de la defensa técnica del procesado, textualmente,
respondió: “Al lugar de los hechos me dirigí con el señor Francisco Yépez. En esa
diligencia no estuvo el señor Pazuy, ni usted como su abogado, ni el fiscal. No fui a
la diligencia con la otra parte, ya que no se encontraba nadie al momento de la
diligencia, solo el interesado señor Yépez. El barranco es un aproximado de 250mts.
El abismo es casi vertical y existe vegetación. Depende del objeto sería su caída, s
es redondo obviamente va a caer el objeto al fondo, pero si estamos hablando de la
forma de una persona, ahí existe la vegetación, que él pudo haberse quedado o
sujetado”. Sargento II de Policía Miguel Rodrigo Pusda Chunga, portador de la
cédula de ciudadanía No. 040139674-2, con juramento al examen del fiscal,
textualmente, respondió: “Una vez que fui delegado como investigador de la Unidad
DINASED dentro de una supuesta tentativa de homicidio, para lo cual se procedió
solicitar ante la Autoridad competente unas diligencias que habían sido recolectados
unos indicios al momento de la detención del ciudadano Pazuy Issac, en el cual
constaba un arma tipo navaja, se solicitó la pericia de luminol, posterior se realizó
la versión de la víctima, en este caso el señor Yépez Francisco, el mismo que
manifestó que el día 16 de diciembre del 2017, como de costumbre había realizado
una carrera en su motocicleta a un ciudadano de nombres Pazuy Issac hasta el
sector de Palo Amarillo desde el sector San Pedro, para esto había acudido a un
domicilio, en el que había permanecido un momento, luego había retornado con otro
ciudadano, que en la comunidad le ha conocido que se llama Marcelo Minda, los
cuales se han subido en la motocicleta y le han indicado que les realice otra carrera
y les traslade hasta el sector de Parambas, pero a la altura del kilómetro 91 que es
de la vía Lita a Ibarra, en el sector El Pajonal indica el señor que la moto ha perdido
velocidad, pero estos señores querían que le siga acelerando más, para lo cual
había procedido a parar la marcha y el otro ciudadano Minda se había procedido a
subir a conducir la motocicleta, al continuar el camino en el sector de El Pajonal,
indica que antes de llegar a la curva el señor Pazuy había procedido a herirle por
dos ocasiones en el cuello a señor Francisco, y la motocicleta ha ingresado
conducida por el señor Minda hasta una entrada desolada, que conduce a un
barranco para posterior el señor Pazuy le ha procedido a causar otra herida en el
cuello al señor Francisco, con lo cual ha empezado a sangrar, posterior le baja de
la moto, le quitan los documentos, inclusive dice que el momento que le hiere dos
veces le ha manifestado este señor Pazuy, que los viejos no tiene que vivir, que le
iba a matar porque los que tienen que vivir son los jóvenes, le bajan de la motocicleta
y le proceden a botar en el barranco, él escucha que encienden la moto y se retiran
del lugar, posteriormente dice que pierde el conocimiento y en horas de la
madrugada, ya estaba aclarando el día, dice que se logra coger de la ramas y salir
de donde ha estado, para posterior pedir ayuda a sus familiares. De igual manera
en la versión del hijo, el señor Horacio Yépez manifiesta que al saber que su padre
se encontraba herido en el cuello había acudido a verificar en Guallupe sobre la
novedad, y le encuentra a su padre en el interior de una ambulancia, prestado los
primeros auxilios, siendo trasladado hasta acá al hospital San Vicente de Paúl, de
esta ciudad de Ibarra, lo que dice es que al indicarle las características y el nombre
del ciudadano a su hijo y a su hija Janeth, le empiezan a buscar al ciudadano Pazuy
por todo el sector del Limonal, de Lita y con la ayuda del personal policial, el
ciudadano Pazuy había sido detenido en el centro de Lita y al momento de realizarle
el registro le encuentran un canguro con varios indicios en el interior entre ellas la
navaja que le indiqué anteriormente. De igual manera se acudió al lugar donde
había sido botado el señor Francisco y efectivamente es un lugar desolado, no
existe iluminación pública y el precipicio de aproximadamente unos 250mts a
300mts de profundidad, porque llega a un rio que pasa por el fondo de la quebrada.
Se procedió a verificar los antecedentes del señor Francisco Yépez, quien no
registra antecedentes, ni detenciones anteriores, así como también el señor Issac
Pazuy, quien no registra ninguna detención anterior a este hecho. Para la
verificación del lugar donde se produjeron los hechos, antes de trasladarme a Lita
efectivamente, coordiné con las dos partes para acudir el lugar pero en este caso,
quien prestó más colaboración fue la víctima, que la otra parte. También realicé la
verificación en el SIPNNE como lo expresé anteriormente del lugar de los hechos,
y de sus dos hijos”. Al contraexamen de la defensa técnica del procesado,
textualmente, respondió: “Si me manifestó el señor Pio Yépez, que fue él quien les
avisó a sus hijos porque conocía el apellido de la persona. Si me comentó el señor
Yépez que le conocía y que sabía el apellido, y eso les dijo a su hijo e hija. Si me
mencionó que se encontraba otra persona ahí, en mi informe está constando los
nombres del señor Marcelo Minda. No me dijo que era amigo el señor Minda, solo
dijo que se subieron los dos. Conocía un nombre no más, incluso me dijo que era
del mismo sector. Si verifiqué el abismo. En mi fotografía No. 4 de la concurrencia
al lugar de los hechos, el abismo es de carácter vertical, pero hay ramas, lo que
corre la corriente hay como bordillos. Exactamente es de superficie irregular. Claro
que si una persona cae le puede producir lesiones por los bordillos que tiene. Es
irregular todo para abajo. Al decir irregular me refiero a que hay saliente de piedra,
vegetación. Si una persona rueda 8 metros debería presentar lesión siempre y
cuando haya contacto o golpe, pues como se observa hay vegetación, y la misma
le puede proteger. Es diferente observar la fotografía que el lugar de los hechos.
Tomé contacto vía telefónica con los familiares de la otra parte, no tomé contacto ni
con el procesado, ni con usted como su abogado defensor”. C.- DOCUMENTALES
Álbum fotográfico adjunto al informe técnico pericial de reconocimiento al lugar de
los hechos No. 195-2018, suscrito y sustentado oralmente en la audiencia de
juzgamiento por el perito de la Unidad de Criminalística de Imbabura, acreditado al
Consejo de la Judicatura, Cabo I de Policía Diego Flores Bolaños. Oficio No.
DIGERCIC-CZ1-2018-0011-O, de fecha 02 de enero de 2018, debidamente suscrito
por la Srta. María Belén Jáuregui Realpe, en su calidad de Coordinadora Zonal 1,
Encargada, al que adjunta copias debidamente certificadas por el Delegado de la
Dirección General del Registro Civil, Identificación y Cedulación, del certificado
biométricos CB-120-0043905-36, correspondiente al procesado Issac Jonás Pazuy
Flores, del que se desprende que es mayor de edad. Oficio No. DIGERCIC-CZ1-
2018-0013-O, de fecha 02 de enero de 2018, debidamente suscrito por la Srta.
María Belén Jáuregui Realpe, en su calidad de Coordinadora Zonal 1, Encargada,
al que adjunta copias debidamente certificadas por el Delegado de la Dirección
General del Registro Civil, Identificación y Cedulación, del certificado biométricos
CB-120-0043905-51, correspondiente a la víctima Francisco Pio Yépez Yépez, del
que se desprende que es adulto mayor. 5.5.- MEDIOS PROBATORIOS DE LA
DEFENSA TÉCNICA DEL PROCESADO A más de los medios probatorios actuados
conjuntamente con la Fiscalía General del Estado, actuó el siguiente: A.-
TESTIMONIO DEL PROCESADO ISSAC JONÁS PAZUY FLORES, al ser
consultado por el Tribunal con respecto a qué derecho constitucional ejercer, esto
es, el derecho constitucional a declarar, o el derecho constitucional a guardar
silencio, asesorándose con su defensa técnica, respondió querer declarar, por lo
que, al amparo del artículo 507 número 3 del COIP, sin juramento, al examen de su
defensa técnica, textualmente, respondió: “El sábado 16 de diciembre del 2017, salí
por la tarde a la parroquia de Lita; ahí me puse a tomar con un primo hasta las
19h00, luego de eso me dirigí hasta el sector de Parambas, ahí estuve tomando
hasta las 03h00, ahí mi primo ya no había, no sé para donde se fue, no sé nada,
después ya no me acuerdo porque estaba borracho, ya que siempre que tomo sé
perder el conocimiento, lo que algo recuerdo es que me fui en una moto,
supuestamente me estaba yendo a mi casa, pero no fue así, me quedé en un baile
que hubo más adelante que fue en Palo Amarillo, llegué ahí, nos hicimos amigos
así en tragos con la otra persona, aquí nos agarramos a beber trago fuerte, puntas,
cervezas, después ya me quería ir a descansar, el otro compañero dice no, yo te
voy a ir a dejar en una moto, salí me estaba yendo a pie, él me alcanzó y me dijo
que me regresara que él me iba a dejar en una moto, luego de eso, regresé vuelta
y de ahí poquito empecé a recordar, recuerdo que salimos y nos embarcamos en
una moto, de ahí nos fuimos, y como que recuerdo que hubo un problema más
adelante pero en la moto que teníamos una discusión, paramos la moto y no
recuerdo más nada. Si recuerdo que fui agredido porque hubo un problemita ahí,
me golpearon en el ojo izquierdo, de ahí ya no me acuerdo. De ahí no sé cómo
habría ido, pero ya me desperté en Lita en la casa de mi tía, me desperté por la
mañana, como todavía estaba en tragos, salí al centro de Lita y seguí bebiendo.
Aquí me di cuenta que estaba con el ojo golpeado. No recordaba nada, peor que
haya matado alguien, ya que si hubiera sido así, me hubiera huido, no recordaba
nada, seguía tomando, estaba tranquilo ahí, pero ya estaba recuperado un poquito.
Nací en Lita, tengo 24 años de edad. Nunca he tenido problemas antes, no soy
capaz de asesinar a nadie. Ese día no sé qué pasó, tal vez fue por lo que me
golpearon también reaccionaría de una manera así, pero no para matar a nadie sino
en defensa propia. De lo que recuerdo con la persona que me subí en la moto, es
un moreno y flaco, ya que él no ha sido mi amigo, solamente nos conocimos en
tragos ahí. Si él me dijo que me iba a llevar en la moto. No recuerdo nada, no sé si
el moreno con el señor Pio Yépez eran amigos. Sí cuando me aprehendieron me
encontraron una navaja, no la ando a llevar para asaltar a nadie, simplemente es
que me dedico a los gallos y justamente ese día había gallos en Lita, pero como no
llevé gallos, entonces bajé apostar en los gallos, porque eso es a lo que me dedico,
entonces la navaja se dedica para limpiar espuelas. La navaja es pequeña. Incluso
tenía piojas, espuelas, todo lo que necesitan para los gallos. No he salido de mi
domicilio con la idea de asesinar a nadie. Ese día salí a divertirme a un rato pero no
hacer daño a nadie porque nunca me he metido en problemas con nadie. Si tal como
me dormí, me levanté y en ningún momento me han encontrado entre las evidencias
la matricula, 15 dólares”. A contraexamen del fiscal, textualmente, respondió: “Muy
de repente bajo a Lita. Vivo con mi hermana de Cachaco más arriba. De lita a mi
lugar donde vivo en carro son 10 minutos. Muy de repente voy a Lita. Para
transportarme simplemente cuando me voy por ahí, se salir con mi cuñado o sino
cuando salgo solo salgo en el bus. Claro que de lo que salí de mi casa me fui en un
bus a Lita. En el baile de Palo Amarillo casi no recuerdo nada porque bajé bien
borracho de Parambas. Me fui solito con mi primo a Parambas, de ahí recuerdo que
salí madrugado, de ahí no sé, me embarqué en una moto y me he ido al sector de
Palo Amarillo, porque ahí supuestamente había un baile, aquí nos agarramos a
beber lo que se llama puntas que es un trago fuerte, el cual incluso me hace daño,
ya que se perder el conocimiento. Casi no me acuerdo que pasó aquel día, solo
partecitas ya que estaba bien borracho. La navaja la ando a cargar solo cuando
salgo a los gallos, de ahí cuando no voy a jugar gallos, ni nada de eso, no la levo
para nada, ya que ando vacío. Ese día si tenía la navaja porque me fui a los gallos.
Cuando vi la Policía me corrí, porque nunca me han cogido, pero me dijeron por ahí
que me andaban buscando pero no sabía porque, de ahí supuestamente me di
cuenta que tal vez sería por el problema, entonces me puse nervioso. En la moto
no sé porque se dio el problema, ya que comenzaron a discutir con el otro, incluso
conmigo, no recuerdo porque fue esa discusión. Si el señor es la persona de la moto
(señala a la víctima) que estaba ahí. No recuerdo en qué momento me hizo la
carrera, lo que si recuerdo algo es la madrugada, porque de lo que salí de Parambas
fue a las 03h00 del 17 de diciembre del 2017. B.- TESTIMONIALES Mario Javier
Ferigra Anangono, portador de la cédula de ciudadanía No. 100195467-4, con
juramento, al examen de la defensa del procesado, textualmente, respondió: “Si le
conozco al señor Pazuy unos 7 años. Le conozco por lo que Aníbal Carcelén es
amigo y él trabaja en su finca. Siete años viví por ahí, salí hace 2 años. Al señor
Pazuy siempre le he visto como una persona normal, sin problemas, Es una persona
trabajadora que dedicada a la agricultura. A su madre y hermana les conozco de
vista, más le conocía a él”. No hubo contraexamen de la fiscal de la causa. José
Calixto Guanga García, portador de la cédula de ciudadanía No. 040116274-8, con
juramento, al examen de la defensa del procesado, textualmente, respondió: “Si vivo
en Palo Amarillo. El día sábado 16 de diciembre del 2017, aproximadamente a la
medianoche, me encontraba en el sector de Palo Amarillo, en una invitación que me
realizaron para una fiesta por casamiento y bautizo. Si le conozco al señor Pazuy.
Él si llegó a esa fiesta, en ese momento llegó solo. Ahí estaba un poco tomado no
mucho, no estaba borracho. Aquí él estaba un poquito tomando unas 2 cervezas y
estaba bailando. Estuvo hasta las 03h00, hasta ahí estuvo acompañado, pero luego
ya no le pude ver porque ya me fui de la fiesta. Sí yo me fui primero. El señor Pazuy
ahí estaba con un joven moreno. En esa fiesta no estaban tomando puntas sino
cervezas, ya que puntas es un trago fuerte y cerveza es un trago más suave”. Al
contraexamen del fiscal, textualmente, respondió. “Si el señor Pazuy es la persona
que está aquí al frente mío y que estuvo en la fiesta del sector de Palo Amarillo. En
esta fiesta estuve hasta las 03h00, hasta ahí el señor Pazuy estaba tranquilo, no
estaba borracho, pero si estaba tomado un poco. El otro joven estaba tomado
también, pero no se puede decir que estaban bien borrachos, ya que estaban
tomando solo cervezas”. Jorge Aníbal Carcelén Borja, portador de la cédula de
ciudadanía No. 100336110-0, a pesar de haber sido inteligenciado de que no está
obligado a rendir su testimonio por mandato constitucional del artículo 77 número 8
de la Constitución de la República y mandato legal del artículo 502 número 4 del
COIP, por tratarse el procesado de su cuñado, sin embargo, libre, voluntariamente
y con juramento al examen del defensor técnico de la procesada, textualmente,
respondió: “A Issac Pazuy lo conozco aproximadamente unos 15 años, porque él
salió de la escuela en la que estudiaba y se fue a vivir conmigo, a motivo de eso, él
está formándose conmigo, tengo 2 niños, uno de 3 años y el otro de 9 años, hasta
donde le conozco es un muchacho en sus cinco cabales, porque incluso paso la
mayor parte del tiempo viajando o trabajando, él se queda al cuidado de mis hijos,
entonces si él fuera una persona violenta no le hubiese acogido como un integrante
más de mi familia, ya que incluso le hecho afiliar en el seguro, como que forma parte
de mi familia, él en el seguro encabeza como mi hijo, y si fuera una persona violenta
no le hubiese acogido sino le hubiese excluido de mi familia. No habido ningún
problema con el señor Pazuy, él pasó a ser mi mano derecha, incluso he dejado
dinero en la casa, muchas veces me he olvidado, cuando he llegado de noche, me
ha dicho sabes que, este dinero te has olvidado, eso es algo admirable en una
persona que viva con uno. Si le pago remuneración, tiene donde vivir, pienso que
no tiene ninguna necesidad de cometer ningún delito, por eso doy fe del muchacho
como se ha portado conmigo, por eso jamás podría decir que es una persona
violenta, ya que soy una persona bien formada, de principios y costumbres. Si es
verdad que el 16 de diciembre del 2017, me encontraba en un baile, en un sector
que se llama Palo Amarillo, pertenece al Pajón, fui invitado a un matrimonio,
entonces como él vive conmigo, y es parte de mi familia le digo, quieres
acompañarme a participar en esta boda, me dijo no me voy a quedar en la casa,
sorpresa que salimos a la parroquia de Lita y me encuentro con él, le digo como así
bajaste, dice bajé a conectarme un ratito con el Wi-Fi, ahí le digo, ojo porque
mañana toca trabajar, vamos a la fiesta, estamos hasta las 23h00, y nos retiramos,
porque no sé ni fumar, ni tomar, me dice, voy a estar hasta las 22h00 o 23h00 y
subo a la casa, me dijo dame 5 dólares para pagar una camioneta que me vaya a
dejar a la casa, le di los 5 dólares y le dije toma para que subas a la casa, oh,
sorpresa, estábamos en el baile, me parece eran las 00h00, mi esposa me dice
negrito vamos a la casa porque mañana toca trabajar, cuando en ese trayecto,
alguien me dice tu cuñado está por ahí, dije como así, me responde por ahí está
tomando, mi error no fue irle a ver, porque si le hubiese ido a ver, le hubiese llevado
y se evitaba este tipo de problemas. No le vi que estaba tomado, me dijeron que
estaba tomando”. Al contraexamen del fiscal, textualmente, respondió: “Si dije que
Issac Pazuy vive en mi domicilio. Cuando le ido a ver al guambra, incluso unas dos
veces le topé borracho, él ha estado dormido en la casa de la señora Victoria Muñoz,
en una banca, como toda la gente le conocía que él vive conmigo, entonces llamé
por teléfono a la casa, le dije Toya por si acaso mi cuñado está por ahí, sí me
respondió, cogí el carro, avancé hasta allá, le cargamos al carro, él no supo ni como
le hemos alzado, le subí a la casa, se puso a dormir, al otro día estuvo en sí, le dije
eso está mal, este tipo de cosas no me gusta, entonces el guambra se reservó, ya
era un tiempo que no tomaba, sorpresa que ese día se le ha dado por tomar. No
puedo precisar el tiempo que no tomaba pero si era bastante tiempo. Desconozco
en qué se trasladó hasta la fiesta del sector de Palo Amarillo, porque le dejé los 5
dólares para que él se movilizara a mi casa, a partir de ahí ya no conversamos más,
por eso no sé en qué se movilizaría hasta allá. A él le gustaba salir conmigo a los
gallos. En el canguro él llevaba las piojas, una navaja pequeña y el celular para
grabar las peleas, siempre y cuando iba a los gallos. Todos los domingos jugamos
gallos en la parroquia de Lita, pero sabe haber concurso los días sábados, en eso
no estoy al tanto de que hubo concurso ese sábado en Lita o pensaba quedarse
para el día domingo, porque incluso sabía salir con la maleta, dejaba encargando
donde la tía Erlita y se avanzaba hasta la casa, y al otro día bajamos en la tarde,
porque el día domingo nos tocaba cosechar limones. La fiesta fue el día 16 de
diciembre del 2017, el domingo fue 17 de diciembre del 2017. C.- DOCUMENTALES
Certificado de afiliación, obtenido de la página web del Instituto Ecuatoriano de
Seguridad Social (IESS), del que se desprende, que el procesado Issac Jonás
Pazuy Flores, se encuentra registrado como Dependiente a la fecha 2017-12, en la
Organización CACHACO con número de registro 4002161200000, en el Seguro
Campesino. Certificado de antecedes penales, obtenido de la página web del
Ministerio del Interior, del que se desprende, que el procesado Issac Jonás Pazuy
Flores, no registra antecedentes penales. 5.6.- EL DEBATE. ALEGATO FINAL POR
PARTE DE LA FISCALÍA GENERAL DEL ESTADO Dr. Edgar Pacheco, fiscal de
Imbabura, alegó: En esta audiencia de juzgamiento, con la prueba debidamente
actuada se ha podido establecer la existencia de la infracción y la responsabilidad
del ciudadano Pazuy Flores Issac Jonás. El médico legista manifiesta que realizó el
examen médico al señor Pio Fráncico Yépez Yépez, dichas lesiones son
provenientes de la acción traumática producida, que es la agresión física, con objeto
cortante, que le produce una incapacidad para labores cotidianas de 8 días a
contarse desde la fecha de su producción. Nos refiere que existen 3 heridas
cortantes, una de 10 centímetros, otra de 5 centímetros y una de 3 centímetros,
existe la sutura con 12 puntos en la herida de 10 centímetros. De igual manera,
existe la sutura en las dos heridas que se refirió el médico legista y que estas
lesiones o estas heridas se produjeron en diferente momento. También rinde sus
testimonios los agentes de Policía, quienes acudieron por pedido del ECU-911 y se
comunicaron con un familiar del agraviado, que es la señora Janeth Magdalena
Yépez Pozo, quien manifestó, que efectivamente, a las 06h00, su padre llegó con
las heridas en el cuello, también refiere el señor Francisco Pio Yépez Yépez, que
efectivamente, el señor Pazuy Flores Issac Jonás, le hizo una carrera en su
motocicleta, salieron a las 04h00 desde la carretera, luego llegaron a Palo Amarillo
y de ahí se dirigían a Parambas, los llevaba el señor Fráncico Pio Yépez, al señor
Pazuy Flores Issac Jonás en la mitad y en parte de atrás venía otro ciudadano
afrodescendiente, nos refiere que el señor Pazuy Flores Issac Jonás ya le picó en
la parte de atrás al señor Francisco Pio Yépez, indicándole que se aligere, hasta
que le produjo 3 cortes en el cuello y lanzado fuera de la carretera, para
posteriormente, encender la motocicleta y retirarse de este lugar. De la versión del
señor Pazuy Flores Issac Jonás, indica que no se acuerda nada, lo que se acuerda
es el problema con el señor de la moto y le identifica que el dueño de la moto es el
señor Francisco Pío Yépez. Lo manifestado por el señor Pazuy Flores Issac Jonás
nos hace pensar que cuando este ciudadano toma licor es un peligro, ya que no se
acuerda todos los actos o hechos que él realiza o simplemente es una táctica para
evadir una responsabilidad del hecho cometido por el mencionado ciudadano. Está
muy claro de que existieron estas lesiones que comprometieron y como lo dijo el
perito médico legista, que en este lugar existe las venas carótidas y otras venas de
importancia, de que si hubieran llegado a estos órganos, se encontraba en peligro
la vida del señor Fráncico Pio Yépez Yépez. En tal virtud, con todos los testimonios
del Cabo de Policía Diego Mauricio Tutillo Tutillo, Cabo de Policía Freddy Eduardo
Ortiz Ubidia, del Dr. David Francisco Delgado Alvear, del Cabo Primero de Policía
Rodrigo Pusda Chulde y de igual manera con los acuerdos probatorios de
reconocimiento del lugar de los hechos, se puede establecer claramente, que las
lesiones producidas por Pazuy Flores Issac Jonás, es con el objeto de atentar en
contra de la vida del señor Fráncico Pio Yépez Yépez, por eso es que le abandonan
en ese lugar. Por lo que solicito se dicte sentencia condenatoria en contra del
ciudadano Pazuy Flores Issac Jonás, por ser el autor directo del delito tipificado en
el artículo 144 del Código Orgánico Integral Penal, en concordancia con el artículo
39 de la misma norma legal. ALEGATO FINAL POR PARTE DEL ABOGADO
DEFENSOR DEL PROCESADO Dr. Fernando Jaramillo, defensor privado, alegó:
Cuando hablamos de delitos, estamos hablando no de otra cosa que de conductas,
al hablar de conductas necesariamente tenemos que ceñirnos y para tener una
relación en los alegatos que voy a terminar haciendo, quisiera hacer relación al iter
criminis, que no es otra cosa, que el camino del delito. Aquí se habla de una tentativa
de asesinato, que se tenga en cuenta, que definitivamente no pudo establecer los
actos preparatorios que pudieran hacer pensar de que en realidad hubo lo que en
la teoría del delito, se denomina como dolo o la intencionalidad de causar un daño.
Sale de forma casual de su casa, eso fue probado, sale a los gallos, eso se confirma
con la evidencia que se encuentra en sus pertenencias, en el canguro donde se
encuentra una navaja pequeña, aquí se indicó el porte de quien realizó el
reconocimiento de las evidencias. Se encontró y además tiene relación con lo que
estamos indicando, las espuelas que son justamente por la actividad o hobbie que
él realiza, es decir, en ningún momento él salió con la intención de cometer un daño,
más aun cuando se ha demostrado en esta audiencia, de que ni siquiera conocía al
señor Pazuy, aparentemente, según dijo él y se encuentra de forma casual,
posteriormente con él. Que ha injerido licor, es un hecho, esta defensa no trata de
decir que por el estado etílico como Fiscalía manifiesta, de que él al encontrarse en
estado etílico estaba perdida su conciencia y no tiene responsabilidad, más bien lo
contrario, me parece que por estar en el estado etílico en el que se encontraba y
por las circunstancias que él recuerda y refiere, dice que pasó un altercado y hubo
un problema, prácticamente, lo que hizo es tratar de defenderse y esto tiene
relación, ya que a foja 8 del certificado que se adjuntó como acuerdo probatorio, se
determina que el señor Pazuy Flores, no se entiende bien, pero es el tema del
parpado del ojo izquierdo, así como también un hematoma en el ojo izquierdo y
laceraciones en el codo izquierdo. Si bien es cierto, se me ha negado la opción de
que se suspenda la audiencia por una norma legal, considero que el derecho a la
defensa está por más allá de eso, en cuanto tiene que ver a que se realice una tutela
judicial efectiva, porque es necesario el testimonio del señor, porque él manifiesta y
claro no es una prueba pero tengo que nombrar, porque en algún momento cuando
él sea detenido se van a dar cuenta de la realidad, de que se arma un problema,
porque no le quieren pagar en ese momento al señor Pío Yépez, el dinero de la
carrera y el procede agredirle, él lo que hace es tratar de defenderse y el señor
Minda quien es amigo íntimo de él, ya se van a dar cuenta, porque cuando él llegue
a testificar, procede simplemente a separarles, entonces él lo que hace, en el estado
etílico que se encontraba, tratar de defenderse, y recuerdo lo que dice el médico
legal que es importantísimo, que las heridas son de carácter superficial y que
queriendo asesinarle deberían haber sido más profundas, son superficiales, tanto
así, de que él concluye que existen tres tipos de heridas, una superficial, una que
compromete vasos y una que compromete músculos y arterias, entonces esta es
de carácter superficial. Ni siquiera se provocó la intensidad o hubo el designio de
justamente acabar con la vida del señor Pio Yépez, hay que tomar en cuenta que
aquí lo único que existe es el testimonio del señor Pio Yépez, entonces no creo que
sea dable, el tratar de sentenciar en cuanto a la existencia material de la infracción,
no existe y esta defensa no va hacer ninguna refutación en cuanto a eso, ya que
existen las lesiones, pero son lesiones, esto está tipificado en el artículo 152, inciso
1, no se trata de una tentativa de homicidio, algo muy importante y rescatable que
hay que indicar en esta audiencia, es el examen psicológico que se le hace al
procesado, a mi defendido, que tiene estricta relación con el examen médico legal
que son pruebas de carácter científico, en donde de forma muy clara dice la
psicóloga que no presenta en este caso, de acuerdo a los rasgos de personalidad,
él es imposible que sea una persona agresiva y trate de cometer un asesinato, más
bien dice todo lo contrario, que es una persona demasiada cerrada en cuanto
obedecer órdenes y reglamentos, es decir que su vida se rige en una conducta en
la cual es una persona obediente. Así también corroboraron los testigos que se
presentaron en esta audiencia, quienes definitivamente manifestaron, vecinos del
lugar, que le conocen desde años, que inclusive desde que nació, que en la vida ha
tenido algún problema y esto es corroborado documentalmente, de que ni siquiera
tiene alguna detención, no tiene absolutamente nada. Entonces, simplemente a lo
que hacía referencia, es de que si hablamos de conductas no puede ser dable, que
una persona que nunca ha tenido ningún tipo de problema, que tal vez la podríamos
comparar con algunos de nosotros, de la noche a la mañana, sin existir ningún
móvil, comete un asesinato o trate de cometer un homicidio, se habló de que se le
ha robado dinero al señor, eso no se pudo probar, eso se quedó en el limbo. Se ha
dicho de que la motocicleta presuntamente se encendió y se le encontró más allá,
mentira, aquí estuvo el señor, su hija Sandra Yépez, y su hijo, quienes manifestaron
que la motocicleta se encontraba en el lugar de los hechos, ellos lo dijeron aquí, no
me estoy inventando, se encontró en la acera alado del lugar de los hechos. De tal
forma, considero de que definitivamente no se ha logrado justificar el dolo, en esta
audiencia en el grado de tentativa de homicidio, a diferencia de que sí, esta defensa
lo dice, son lesiones. Mi patrocino ha estado detenido por prácticamente 6 meses,
creo que es suficientemente la sanción y la pena, que creo que una de las
finalidades de la pena es justamente a igual infracción, de acuerdo al principio de
proporcionalidad igual pena. Entonces, definitivamente, creo que si se está
haciendo un uso excesivo del derecho penal en este caso, considerando que el
derecho penal es de ultima ratio, sobre todo al tratar de tipificar este delito por
tentativa de asesinato y definitivamente aquí lo que existe de alguna forma y podría
decir se ha probado de forma explícita o clara es de que no existe responsabilidad
en el grado de tentativa de homicidio, pero si existe la duda, porque no se ha logrado
romper justamente ese principio de presunción de inocencia. En tal sentido solicito
se confirme la inocencia de mi patrocinado y de ser posible también se tome en
cuenta las atenuantes contempladas en el artículo 42 del Código Orgánico Integral
Penal, para imponerle la pena si fuera del caso. 5.7.- LA RÉPLICA Dr. Edgar
Pacheco, fiscal de Imbabura, replicó: Los alegatos del abogado defensor del señor
Pazuy Flores Issac Jonás, dan la razón, porque están manifestado de que
aceptamos que hubo lesiones, lesiones producidas por el señor Pazuy Flores Issac
Jonás en la persona de Francisco Pio Yépez. En el examen médico legal va más
allá de lesiones, al manifestar que existen 3 heridas cortantes en el cuello, tres
heridas cortantes producidas en diferente momento, en un sitio donde existen
órganos importantes, se manifiesta de que como son superficiales y que no hay la
fuerza necesaria para llegar a los órganos vitales de una persona no es tentativa, si
así se hubiera producido el señor Francisco Pio Yépez, ya no estuviera aquí
rindiendo su testimonio. Por lo que considero de que existe y se ha comprobado
plenamente la materialidad y la responsabilidad del señor Pazuy Flores Issac Jonás
y solicito se dicte la sentencia condenatoria correspondiente. Dr. Fernando
Jaramillo, defensor privado, contrareplicó: En cuanto tiene que ver a las lesiones, el
alegato que hace Fiscalía es bastante subjetivo, porque en el examen médico legal
está muy claro, cuando en las conclusiones el Dr. David Delgado dice dichas
lesiones, se trata de lesiones. Ahora por el lugar que justamente me referí
anteriormente son de carácter superficial, ahora para ser honestos, si estaban dos
personas jóvenes, contra el mayor, si quisieron atentar contra la vida de él, hubieran
podido hacerlo y no lo hicieron, entonces realmente no existe tentativa de asesinato
mucho menos, cuando pruebo documentadamente que él tenía golpes en el rostro,
no se ha permitido suspender la audiencia para recibir el testimonio del señor Minda,
él lo único que hizo es defenderse, por tal motivo considero por lo anteriormente
expuesto por esta defensa, de que no existe tentativa de asesinato, es demasiado
desproporcionado por Fiscalía el proponer que se sentencia por esta figura y este
tipo penal. VI.- VALORACIÓN JURÍDICA PROBATORIA Previo a la valoración
jurídica probatoria, éste Tribunal de Garantías Penales de Imbabura con sede en el
cantón Ibarra, considera oportuno señalar que: En el Ecuador, ha entrado en plena
vigencia el Código Orgánico Integral Penal (COIP), a partir del 10 de agosto del
2014, que en respeto al principio de legalidad en materia penal, consagrado en el
artículo 76 número 3 de la Constitución de la República del Ecuador, debe
observarse para el trámite de los procesos penales iniciados posterior a su entrada
en vigencia, tal y como corresponde al presente caso. Este mismo Código en su
artículo 1 señala, que tiene como finalidad normar el poder punitivo del Estado,
tipificar las infracciones penales, establecer el procedimiento para el juzgamiento de
las personas con estricta observancia del debido proceso, promover la rehabilitación
social de las personas sentenciadas y la reparación integral de las víctimas. En lo
que corresponde al derecho penal adjetivo, garantiza la existencia de un sistema
adversarial, con fiscales que deben promover el ejercicio de la acción penal dentro
de los principios y fundamentos del sistema acusatorio; con defensoras y
defensores privados y públicos, que deben patrocinar técnicamente a las personas
acusadas de cometer una infracción, en protección de sus derechos; y, con juezas
y jueces que debemos dirigir el proceso, siendo garantes de las normas y los
derechos de los participantes procesales. Para comprender este nuevo rol de
nosotros los jueces como garantes de las normas y los derechos de las partes
intervinientes en un proceso judicial, cabe partir de que la Constitución de la
República del Ecuador del 2008, se adscribe a una evolución del
neoconstitucionalismo, donde la Constitución pasa de ser un discurso político a ser
norma suprema y jurídica, superándose la sumisión del Estado a la ley (legalismo),
hacia la Constitución como condición de unidad y validez del ordenamiento jurídico,
para limitar el poder y reconocer derechos (constitucionalismo); y, es por esta razón,
que el rol de nosotros los jueces, también pasa de ser una función de mera
aplicación de la ley, a constituirse en un poder de crítica del ordenamiento jurídico
y una aplicación vinculada por los derechos que nos encontramos llamados a
proteger (estricta legalidad) a la luz de la Constitución, instrumentos internacionales
de derechos humanos y la ley (juridicidad). Por estas razones, la Corte
Constitucional del Ecuador para el período de transición, en su sentencia No. 0001-
09-SCN-CC, caso No. 0002-08-CN, con respecto al derecho constitucional al debido
proceso consagrado en la Constitución de la República del Ecuador, en la parte
pertinente, textualmente, señala: “En sentido material, el debido proceso es el
adelantamiento de las etapas del proceso y el cumplimiento de las distintas
actuaciones judiciales, con sujeción a las garantías constitucionales y legales, como
límite de la función punitiva del Estado (noción formal más cumplimiento de los fines
y derecho constitucionales). Se refiere a la manera formal como ha de sustanciarse
cada acto: No se mira el acto procesal en sí como un objeto, sino su contenido
referido a los derechos constitucionales. Hay debido proceso, desde un punto de
vista material, si se respeta los fines superiores como la libertad, la dignidad
humana, la seguridad jurídica y los derechos constitucionales como la legalidad, la
controversia, la celeridad, la publicidad, la prohibición de la reforma in pejus y el
doble procesamiento por el mismo hecho etc. (…)”. (El énfasis corresponde al
Tribunal) También, la actual Corte Constitucional del Ecuador, sobre este derecho
constitucional antes señalado, en su sentencia No. 187-18-SEP-CC, caso No. 1410-
13-EP, en la parte pertinente, textualmente, señala: “El derecho al debido proceso
consagrado en el artículo 76 de la Constitución de la República, incluye un conjunto
de garantías básicas tendientes a tutelar un proceso justo y libre de arbitrariedades
en todas las instancias judiciales, indistintamente de la naturaleza de estas; en
consecuencia, el debido proceso es sin duda alguna un pilar fundamental para la
defensa de los derechos de las personas que intervienen dentro de un juicio,
permitiendo la articulación de varios principios y garantías básicas que permiten una
correcta administración de justicia. Para la Corte Constitucional, el debido proceso
se constituye en el: "axioma madre", el generador del cual se desprenden todos y
cada uno de los principios y garantías que el Estado ecuatoriano se encuentra
obligado a tutelar, por lo cual, los jueces como garantes del cumplimiento de la
Constitución y del ordenamiento jurídico, deben ejercer todas las acciones
necesarias para el cumplimiento y respeto de este derecho” (El énfasis corresponde
al Tribunal) Además, la Corte Constitucional del Ecuador, en su sentencia No. 055-
16-SEP-CC, caso No. 0435-12-EP, en la parte pertinente, textualmente, señala:
“Por tanto, la interpretación que los operadores jurídicos realicen en el ejercicio de
sus competencias de los preceptos legales no puede ser arbitraria, menos aún en
materia penal, en la cual los derechos esenciales de las personas pueden ser
afectados; de ahí que dicha interpretación siempre se debe realizar a la luz de los
derechos constitucionales y humanos (…)” (El énfasis corresponde al Tribunal) Así
también, la Corte Constitucional del Ecuador para el período de transición, sobre el
principio de presunción de inocencia, consagrado en el artículo 76 número 2 de la
Constitución de la República del Ecuador; en su sentencia No. 011-12-SCN-CC,
caso No. 0035-11-CN, en la parte pertinente, textualmente, señala: “(…) El principio
de presunción de inocencia constituye un principio constitucional y una de las
máximas garantías del imputado, en virtud del cual no se puede considerar como
culpable a una persona a quien se le atribuya un hecho punible, hasta que se dicte
sentencia firme que declare la culpabilidad. Este principio implica a su vez que la
carga probatoria respecto de la acusación de una infracción penal recae sobre
aquella persona que alega dichas acciones u omisiones. Esta garantía es propia del
Estado constitucional de derechos y justicia y forma parte del sistema acusatorio,
sistema dentro del cual la carga de la prueba recae sobre el Estado (en los delitos
de acción pública), ente que debe demostrar los hechos acusados, así como la
participación en los mismos por parte de los imputados, personas que no deben
demostrar su inocencia como ocurría en el sistema inquisitivo. (….) Lo expuesto por
la Corte Interamericana implica no solo que se presumirá la inocencia de una
persona hasta que se demuestre lo contrario, sino también que las pruebas que
desvirtúen dicha presunción deberán ser suficientes para proporcionar la certeza
respecto de la culpabilidad. Ello demuestra el carácter de dicho principio respecto a
la fuerza probatoria de los elementos que pretenden desvirtuar la pretensión (…)”.
(El énfasis corresponde al Tribunal). De igual forma la Corte Interamericana de
Derechos Humanos, en su sentencia Norin Catriman y otros vs Chile, en el párrafo
171, sobre el principio de presunción de inocencia, en la parte pertinente,
textualmente, señala: “(…) El principio de presunción de inocencia, que según ha
determinado la Corte constituye un fundamento de las garantías judiciales, implica
que los juzgadores no inicien el proceso con una idea preconcebida de que el
acusado ha cometido el delito que se le imputa, por lo que la carga de la prueba
está a cargo de quien acusa, y no del acusado, y cualquier duda debe ser usada en
beneficio del acusado (…)” (El énfasis corresponde al Tribunal). En este mismo
sentido se ha pronunciado la Corte Nacional de Justicia del Ecuador, en su
Resolución No. 916-2013, correspondiente al juicio No. 1234-2014, que en la parte
pertinente, textualmente, señala: “(…) El principio Onus Probandi, establece que
recae sobre el Estado la carga probatoria, tendiente a demostrar la existencia de la
infracción y la responsabilidad penal; el acusado no tiene la obligación de probar su
inocencia; dado que goza de una situación jurídica que no necesita ser construida,
sino todo lo contrario, el Estado debe presentar la prueba para que la presunción de
inocencia se desvanezca (…)”. (El énfasis corresponde al Tribunal). Con respecto
a la valoración de los medios de prueba testimoniales, la doctrina ha establecido
aspectos de utilidad para su valoración y argumentación, conforme lo señala el
tratadista colombiano, Carlos Cano Jaramillo, en su obra “Oralidad, Debate y
Argumentación”, en el capítulo VIII, “La Prueba de los Hechos”, que forma parte del
ensayo “La Valoración de la Prueba en el Proceso Penal y la Aplicación de la Teoría
del Caso”, Bogotá, Editorial Ibáñez, cuarta reimpresión, 2010, p. 214, que en la parte
pertinente, señala: “(…) Al apreciar el testimonio se tendrán en cuenta los siguientes
aspectos que son de utilidad para desarrollar una adecuada argumentación acerca
de este importante medio de prueba: la forma como hubiere declarado y las
singularidades que pudieron observarse en el testimonio, los principios técnico-
científicos sobre la percepción y la memoria y, especialmente, lo relativo a la
naturaleza del objeto percibido, el estado de sanidad del sentido o de los sentidos
por los cuales se tuvo la percepción, las circunstancias de tiempo y modo en que se
percibió, los procesos de rememoración, el comportamiento del testigo durante el
interrogatorio y el contrainterrogatorio, la forma de sus respuestas y personalidad
(…)”. (El énfasis corresponde al Tribunal) Adicionalmente, la Corte Constitucional
del Ecuador, sobre cómo deben ser las investigaciones en un proceso penal, en su
sentencia No. 114-14-SEP-CC, caso No. 1852-11-EP, en la parte pertinente,
textualmente, señala: “En efecto, la investigación, como parte del reconocimiento
del derecho a la verdad, se constituye en: " ...una obligación de medios y no de
resultado, que debe ser asumida por el Estado como un deber jurídico propio y no
como una simple formalidad condenada de antemano a ser infructuosa, o como una
mera gestión de intereses particulares, que dependa de la iniciativa procesal de las
víctimas, de sus familiares o de la aportación privada de elementos probatorios…
En efecto, "Así, en el caso de la investigación de los delitos, el Estado tiene la
obligación férrea de no desatender la investigación y de conducirla seriamente,
controlando, por una parte, que la actividad fiscal no vulnere derechos
constitucionales de ninguna de las partes intervinientes en el proceso, y que el
juzgador, en su calidad de tercero imparcial, verifique que dicha actividad sea
conducida constitucionalmente (...)" Es decir, las autoridades competentes se
encuentran en la obligación de llevar a cabo las investigaciones, observando
siempre las disposiciones constitucionales y legales determinadas en el
ordenamiento jurídico, especialmente aquellas vinculadas con el derecho al debido
proceso, así como el ejercicio de la tutela judicial efectiva, los mismos que, como se
puede inferir, se encuentran estrictamente relacionados con el derecho a la verdad
(…)” (El énfasis corresponde al Tribunal) La misma Corte Constitucional del
Ecuador, en una de sus últimas sentencias, signada con el No. 068-18-SEP-CC,
caso No. 1529-16-EP, explica sobre la seriedad de las investigaciones penales, ya
que en la parte pertinente, textualmente, señala: “(…) Así también, la Corte
Constitucional en la sentencia N° 214-12-SEP-CC, dictada en el caso Nº 1641-16-
EP, determinó lo siguiente: “...el Estado tiene la obligación de no desatender la
investigación y de conducirla seriamente; controlando, por una parte, que la
actividad fiscal no vulnere derechos constitucionales de ninguna de las partes
intervinientes en el proceso; y, que el juzgador, en su calidad de tercero imparcial,
verifique que dicha actividad sea conducida constitucionalmente”. En atención a lo
expuesto, se tiene que el derecho a la verdad en conexidad con la tutela judicial
efectiva, ante el cometimiento de hechos tipificados como infracción penal, impone,
prima facie, dos obligaciones principales al Estado, estas son investigar y sancionar.
Así pues, el procedimiento de investigación y sanción, debe ajustarse a las normas,
derechos y principios constitucionales; y a las disposiciones jurídicas de carácter
legal que consagran solemnidades, procedimientos y plazos para cada proceso
penal (…)” (El énfasis corresponde al Tribunal) En este mismo sentido, también
tenemos que se pronuncia la Corte Interamericana de Derechos Humanos, en su
sentencia correspondiente al caso Heliodoro Portugal vs Panamá, ya que en su
párrafo 144, claramente señala, que la investigación debe ser realizada por todos
los medios legales disponibles y orientada a la determinación de la verdad y a la
persecución, captura, enjuiciamiento y eventual castigo de todos los responsables
intelectuales y materiales de los hechos y que el deber de investigar, efectivamente,
es una obligación de medios y no de resultados, sin embargo, que debe ser asumida
por el Estado como un deber jurídico propio y no como una simple formalidad
condenada de antemano a ser infructuosa. Así también, la Corte Interamericana de
Derechos Humanos en su sentencia Fernández Ortega y otros vs México, en el
párrafo 53, claramente señala: que las declaraciones rendidas de las presuntas
víctimas no pueden ser valoradas aisladamente sino dentro del conjunto de las
pruebas del proceso. Con respecto al testimonio, el COIP en su artículo 501, señala
que es el medio a través del cual se conoce la declaración de la persona procesada,
la víctima y de otras personas que han presenciado el hecho o conocen sobre las
circunstancias del cometimiento de la infracción penal. Además, sobre su valoración
contiene la regla contemplada en su artículo 502 número 1, que claramente señala,
que el testimonio se valorará en el contexto de toda la declaración rendida y en
relación con las otras pruebas que sean presentadas. Por ello, el Código Orgánico
Integral Penal (COIP), en su artículo 455, establece que la prueba y los elementos
de prueba deberán tener un nexo causal entre la infracción y la persona procesada
y que el fundamento tendrá que basarse en hechos reales introducidos o que
puedan ser introducidos a través de un medio de prueba y nunca, en presunciones.
Por lo tanto, éste Tribunal de Garantías Penales de Imbabura con sede en el cantón
Ibarra, expresa que en la presente causa penal, la valoración jurídica probatoria, la
ha realizado conforme a las jurisprudencias, constitucional, convencional de
derechos humanos y legal antes citadas; así como, a los aspectos jurídicos y
doctrinarios también citados anteriormente, llegando a determinar del debate
probatorio, que en la presente causa penal, NO HA EXISTIDO UNA
INVESTIGACIÓN SERIA, conforme lo dispone tanto la Corte Interamericana de
Derechos Humanos, como nuestra Corte Constitucional, pasándose a demostrar
dicha deficiencia a continuación: Comparece la víctima Francisco Pio Yépez Yépez,
quien en su testimonio relata los hechos sucedidos la madrugada del 17 de
diciembre del año anterior, el mismo que en la parte pertinente, textualmente,
señala: “El 17 de diciembre del 2017, pasó que estaba en el carretero conversando
con unas personas de Buenos Aires y el señor (señala al procesado) fue para que
le haga una carrera, entre las 04h00, que lo lleve a Palo Amarillo, de ahí lo dejé en
Palo Amarillo, fui hacer el baño y luego me dijo que le haga la carrera nuevamente
a Parambas, en el camino, se montó él atrás y otro moreno atrás, entonces me dijo
andando, como el moreno ya estaba ahí, sentí que me metió cuchillo aquí (señala
parte baja de la espalda), perdí el equilibrio, y ya me puso el cuchillo aquí (señala el
cuello) me dijo aquí te voy a matar viejo hijueputa porque no debes vivir, los viejos
no deben vivir, llegué más acá y me metieron en una zanja, de ahí me bajaron
ambos, y ya me cortó el uno con el cuchillo, el otro sacó la licencia, la matrícula y
15 dólares, y me botaron hacia un abismo pero antes unas ramitas habido ahí, me
atranqué y si no había esa ramita más allá habido un vacío y al río Mira (…)”. Sin
embargo, también compareció el agente investigador Sargento II de Policía Miguel
Rodrigo Pusda Chunga, quien declaró haberle receptado la versión a la víctima
antes citada, quien sobre los hechos, le había referido en la parte pertinente,
textualmente, lo siguiente: “(…) luego había retornado con otro ciudadano, que en
la comunidad le ha conocido que se llama Marcelo Minda, los cuales se han subido
en la motocicleta y le han indicado que les realice otra carrera y les traslade hasta
el sector de Parambas, pero a la altura del kilómetro 91 que es de la vía Lita a Ibarra,
en el sector El Pajonal indica el señor que la moto ha perdido velocidad, pero estos
señores querían que le siga acelerando más, para lo cual había procedido a parar
la marcha y el otro ciudadano Minda se había procedido a subir a conducir la
motocicleta, al continuar el camino en el sector de El Pajonal, indica que antes de
llegar a la curva el señor Pazuy había procedido a herirle por dos ocasiones en el
cuello al señor Francisco, y la motocicleta ha ingresado conducida por el señor
Minda hasta una entrada desolada, que conduce a un barranco (…)”. Es decir, las
declaraciones que ha rendido la víctima Francisco Pio Yépez Yépez, en torno al
presente caso penal, desde el inicio no son coincidentes entre sí, sino más bien,
son contradictorias, ya que jamás, ante éste Tribunal de Garantías Penales de
Imbabura, mencionó el hecho narrado al agente investigador, con respecto a que el
otro procesado, identificado dentro de la presente causa penal, como Walter
Marcelo Minda, haya conducido su motocicleta y haya sido dicho coprocesado,
quien condujo hasta el lugar donde supuestamente le proceden asaltar, agredir y
botar a un barranco. Ahora bien, otra diferencia entre sus declaraciones, se
constituye el hecho de que al agente investigador Sargento II de Policía Miguel
Rodrigo Pusda Chunga, la supuesta víctima antes citada, en ningún momento le
expresa que le han quitado dinero, situación en cambio, que si lo declara ante éste
Tribunal de Garantías Penales de Imbabura, por cuanto manifestó que a más de la
licencia y la matrícula de su motocicleta le quitaron 15 dólares. Lo cual demuestra,
que dicha presunta víctima, cada vez busca empeorar la situación de las personas
procesadas dentro de esta causa penal y por ende, esta situación debió ser tomada
muy en cuenta por el fiscal de la causa, con el fin de realizar una correcta
investigación del caso. Así también, tenemos que la víctima Francisco Pio Yépez
Yépez, al declarar, cómo fueron producidas sus heridas, en el testimonio rendido
ante éste Tribunal, en la parte pertinente, textualmente, declaró: “(…) sentí que me
metió cuchillo aquí (señala parte baja de la espalda), perdí el equilibrio, y ya me
puso el cuchillo aquí (señala el cuello) me dijo aquí te voy a matar viejo hijueputa
porque no debes vivir, los viejos no deben vivir, llegué más acá y me metieron en
una zanja, de ahí me bajaron ambos, y ya me cortó el uno con el cuchillo, el otro
sacó la licencia, la matrícula y 15 dólares, y me botaron hacia un abismo (…)”. Sin
embargo, al agente investigador Sargento II de Policía Miguel Rodrigo Pusda
Chunga, sobre cómo fueron producidas sus heridas, textualmente, le ha expresado:
“(…) en el sector de El Pajonal, indica que antes de llegar a la curva el señor Pazuy
había procedido a herirle por dos ocasiones en el cuello al señor Francisco, y la
motocicleta ha ingresado conducida por el señor Minda hasta una entrada desolada,
que conduce a un barranco para posterior el señor Pazuy le ha procedido a causar
otra herida en el cuello al señor Francisco, con lo cual ha empezado a sangrar,
posterior le baja de la moto, le quitan los documentos, inclusive dice que el momento
que le hiere dos veces le ha manifestado este señor Pazuy, que los viejos no tiene
que vivir, que le iba a matar porque los que tienen que vivir son los jóvenes (…)”.
Es decir, la supuesta víctima en el Tribunal declara, que el procesado Issac Jonás
Pazuy Flores, primero le hiere supuestamente en la espalda, mientras que al agente
investigador antes citado, en ningún momento le refiere que ha sido herido en la
parte baja de su espalda como lo declaró ante éste Tribunal. Tampoco, la supuesta
víctima en las dos declaraciones coincide como fueron realizadas sus heridas del
cuello, ya que ante éste Tribunal declara, que una le fue producida cuando estaba
en la moto y las otras dos se entiende que las realiza el procesado antes citado,
cuando ya llegaron al sitio desolado y le bajaron de la moto. Sin embargo, al agente
investigador le indica, que dos heridas en el cuello, le produjo el procesado ISSAC
Jonás Pazuy Flores, cuando estaban en la moto, y una tercera herida le produce,
cuando ya se bajaron de la misma, para posterior ser botado por un barranco del
lugar. Entonces, tenemos que estas enormes contradicciones, generan duda o
incertidumbre en éste Tribunal de Garantías Penales de Imbabura, con respecto a
que los hechos declarados por la supuesta víctima Francisco Pio Yépez Yépez,
hayan ocurrido como él los declaró, puesto que, también compareció el perito que
realizó el reconocimiento al lugar de los hechos, Cabo I de Policía Diego Fernando
Flores Bolaños, quien en la parte pertinente, textualmente, declaró: “(…) si estamos
hablando de la forma de una persona, ahí existe la vegetación, que él pudo haberse
quedado o sujetado”. Sin embargo, la misma presunta víctima, conforme lo
evidenció el abogado defensor del procesado, haciéndole leer su versión, él habría
declarado en Fiscalía, que rodó aproximadamente 8 metros, de lo que lógicamente
se infiere, que así sea vegetación, debió haber presentado alguna huella o evidencia
de este rodamiento sea en su cuerpo o en sus vestimentas. Por ello, en este punto
resulta pertinente expresar lo declarado por el perito médico legal Dr. David
Francisco Delgado Alvear, puesto que, dicho perito médico legal no corrobora lo
dicho por la presunta víctima, ya que según su pericia médica legal no existe
evidencia alguna, de que la supuesta víctima antes citada haya sufrido alguna
herida en su espalda, así como tampoco, existe evidencia alguna, que demuestre,
que en efecto, rodó unos 8 metros por una vegetación como él lo declaró en su
testimonio al expresar que fue supuestamente lanzado a un barranco, ya que sobre
este particular, el perito antes citado, en la parte pertinente, textualmente, declaró:
“(…) En mi anamnesis pude evidenciar que tenía 3 heridas, una anterior de
aproximadamente 10cm, 12 puntos y dos al costado izquierdo del cuello, una de
5cm y otra de 3cm, como conclusión determine una incapacidad de 8 días. Si dije
que en el cuello del señor Yépez se encontraron 3 heridas lo que significa que se
realizaron en 3 momentos diferentes. Las heridas son producidas por un objeto
cortante (…)”. Es decir, tampoco científicamente se corrobora lo declarado por la
víctima antes citada. Por lo tanto, con estos antecedentes, mal podría éste Tribunal
de Garantías Penales de Imbabura con sede en el cantón Ibarra, concluir que lo
declarado por la supuesta víctima Francisco Pio Yépez Yépez, de haber sido objeto
de asalto o robo con tentativa de muerte, la madrugada del 17 de diciembre del
2017, ha sido unívoco y se ha corroborado con alguna prueba, cuando esto más
bien no ha acontecido, y se acrecienta aún más la duda o incertidumbre de éste
Tribunal de Garantías Penales de Imbabura, con respecto a que dicho asalto o robo
con tentativa de asesinarle, se haya producido en realidad; más aún todavía, cuando
los propios hijos de la supuesta víctima antes citada, que responden a los nombres
de Janeth Magdalena Yépez Pozo y Sandro Horacio Yépez Pozo, testificaron
claramente, que encontraron la motocicleta de su padre cerca al lugar donde se
habían producido los hechos. Lo cual justifica, que tampoco se podría concluir, por
parte de éste Tribunal de Garantías Penales de Imbabura, que el móvil del delito
era la sustracción de dicha motocicleta. Es así, que en este punto cabe recordar, lo
expresado por la Corte Interamericana de Derechos Humanos, en su sentencia
citada al inicio de esta valoración jurídica probatoria, donde claramente señala, que
cualquier duda debe ser usada en beneficio de la persona procesada. Por lo tanto,
al no existir prueba alguna que corrobore lo declarado por el ciudadano Francisco
Pio Yépez Yépez, con respecto haber sido víctima de robo con intención de
asesinarle, tomando en cuenta, que también la Convención Interamericana sobre
Derechos Humanos, en su artículo 8 número 3, consagra como garantía judicial,
que la confesión del inculpado solamente es válida si es hecha sin coacción de
ninguna naturaleza. Lo cual, guarda concordancia con lo que establece el Código
Orgánico Integral Penal (COIP), en su artículo 509, donde claramente señala, que
si la persona investigada o procesada, al rendir su versión o testimonio, se declara
autora de la infracción, no se quedará liberado de practicar los actos procesales de
prueba tendientes a demostrar la existencia del delito y la responsabilidad del
procesado; este Tribunal de Garantías Penales de Imbabura con sede en el cantón
Ibarra, ante la duda presentada y que debe ser usada en beneficio del procesado
Issac Jonás Pazuy Flores, desechando un presunto asalto y robo con intención de
asesinarle a la presunta víctima, botándole a un barranco, procede analizar, si las
heridas en el cuello, que libre, voluntariamente y sin coacción de ninguna
naturaleza, aceptado dicho procesado antes citado, haberle producido a la víctima
Francisco Pio Yépez Yépez, la madrugada del 17 de diciembre del 2017, por una
discusión y enfrentamiento entre ellos, se configura como un delito de tentativa de
asesinato o de lesiones, por lo que, cabe realizar el siguiente análisis jurídico:
Previamente, resulta importante conocer, que ha señalado nuestra Corte Nacional
de Justicia, con respecto a diferenciar entre la tentativa de homicidio y las lesiones.
Así tenemos, que en su resolución No. 1336-2013, correspondiente al juicio penal
No. 854-2013, en la parte pertinente, textualmente, señala: “G - Para ello, es
necesario diferenciar entre la tentativa de homicidio y el delito de lesiones, para
establecer en forma determinante, si de la prueba actuada en juicio, como lo señala
la sentencia que examinamos, está o no presente la intención de matar; ya que
desde el punto de vista externo y puramente objetivo, el delito de lesiones y el
homicidio tentado, son totalmente semejantes, teniéndose como única diferencia, el
ánimo del sujeto, pues en un caso tiene la intención de lesionar y en el otro la de
matar, siempre que concurran los elementos objetivos y subjetivos del tipo penal
(…)” (El énfasis corresponde al Tribunal) Además, nuestra Corte Nacional de
Justicia, en su resolución No. 313-2013, correspondiente al juicio penal No. 327-
2011, en la parte pertinente, textualmente, señala: “3) El homicidio se presume
doloso a menos que se demuestre lo contrario, este es un principio que se encuentra
recogido en el artículo 448 de nuestra ley sustantiva penal, es decir, se debe
demostrar conforme a derecho que la acción no tenía como intención, ya sea, por
las circunstancias del hecho, la calidad y localización de las lesiones o los
instrumentos que se emplearon para la perpetración del Ilícito (…)” (El énfasis
corresponde al Tribunal) En este sentido, tenemos que compareció el perito médico
legal Dr. David Francisco Delgado Alvear, quien en su testimonio, en la parte
pertinente, textualmente, declaró: “(…) En estas heridas del señor Pio Yépez, no
pude evidenciar la distancia ya que estaban suturadas las mismas, pero
aparentemente han sido superficiales porque no hubo compromiso en lo que es la
parte muscular (…) Si acabé de mencionar que las heridas eran superficiales y no
comprometían ningún tipo de arteria. Sí para cortar la carótida, yugular y demás
nervios se debía utilizar mayor fuerza (…) Claro en este caso no comprometió
vasos, fue una herida superficial cortante que requirió ser suturada por el riesgo de
infecciones (…)”. Entonces, tenemos que, a pesar de que las 3 heridas han sido
producidas en el cuello de la víctima Francisco Pio Yépez Yépez, por parte del
procesado Issac Jonás Pazuy Flores, sin embargo, al ser estas por su calidad
superficiales, así como, por no llevar mayor fuerza en su producción, para conseguir
revestir de gravedad las mismas y poner en probabilidad de muerte a dicha víctima
y adicionalmente, haberse utilizado una navaja pequeña, que ha sido probado, no
solo con el testimonio del ciudadano Jorge Aníbal Carcelén Borja, que el procesado
antes citado, la lleva consigo siempre que existen pelea de gallos en la parroquia
de Lita, sino también, esta situación se corrobora, con el acuerdo probatorio arribado
entre los sujetos procesales, concerniente en el informe técnico pericial de
reconocimiento de evidencias, en el cual, se ha hecho mención, que además existe
un canguro conteniendo un estuche de color verde con 24 espuelas, 5 fragmentos
de vela, una envoltura de taipe color blanco, un frasco pequeño de color blanco con
tapa color amarillo con una sustancia líquida de color amarillo y una fosforera con
logotipo BIC; implementos que se conoce, utilizan las personas dedicas a este
hobbie, resulta creíble para éste Tribunal de Garantías Penales de Imbabura con
sede en el cantón Ibarra, que el procesado varias veces citado, no tuvo la intención
de matar a la víctima Francisco Pio Yépez Yépez, sino simplemente su intención
fue dirigida a lesionarlo, en razón del enfrentamiento que tuvieron la madrugada del
17 de diciembre del 2017. En virtud de todas estas motivaciones anteriormente
descritas y tomando en cuenta, que el Código Orgánico Integral Penal (COIP), en
su artículo 415, señala que el ejercicio privado de la acción penal, procede en delitos
de Lesiones que generen incapacidad o enfermedad de hasta treinta días, como en
la presente causa penal, ya que el perito médico legal Dr. David Francisco Delgado
Alvear, declaró, que como conclusión, determinó una incapacidad de 8 días, y
tomando en cuenta, que el mismo Código Orgánico Integral Penal (COIP), en su
artículo 647 número 1, claramente señala, que quien acuse por un delito de ejercicio
privado de la acción penal, deberá proponer la querella por sí o mediante apoderada
o apoderado especial ante la o el juez garantías penales. Lo cual, guarda
concordancia con lo establecido en el artículo 225 del Código Orgánico de la
Función Judicial, que establece la competencia de las y los jueces de garantías
penales, entre las cuales, en su número 6, claramente, también señala, que deberán
sustanciar y resolver los procedimientos de ejercicio privado de la acción penal; éste
Tribunal de Garantías Penales de Imbabura con sede en el cantón Ibarra, al no ser
competente para sustanciar y resolver los procedimientos de ejercicio privado de la
acción penal, con fundamento en el principio de presunción de inocencia,
consagrado en el artículo 76 número 2 de la Constitución de la República del
Ecuador; artículo 11 número 1 de la Declaración Universal de los Derechos
Humanos; artículo 8 número 2 de la Convención Interamericana de Derechos
Humanos; en concordancia con lo expuesto en los artículos: 5 número 3, 621 y 622
del Código Orgánico Integral Penal (COIP); ADMINISTRANDO JUSTICIA EN
NOMBRE DEL PUEBLO SOBERANO DEL ECUADOR Y POR AUTORIDAD DE LA
CONSTITUCIÓN Y LAS LEYES DE LA REPÚBLICA, ratifica el estado de inocencia,
del ciudadano ecuatoriano ISSAC JONÁS PAZUY FLORES, cuyas generales de ley
son las que se encuentran consignadas en la presente sentencia, y al amparo del
artículo 77 numero 10 de la Constitución de la República del Ecuador, en
concordancia con los artículos: 12 número 15, y 619 número 5 del Código Orgánico
Integral Penal (COIP), que tratan sobre la libertad inmediata, ratifica el
pronunciamiento oral, mediante el cual, se dispuso girarse inmediatamente la boleta
constitucional de excarcelación del ciudadano antes referido, quien se encontraba
con prisión preventiva, una vez emitida la decisión oral por parte de esta Autoridad.-
Así también, se ordena la cesación de todas las medidas cautelares que se hayan
dictado en contra del ciudadano antes citados, en relación al presente proceso
penal; para cuyo efecto, el Actuario de esta Judicatura, remitirá los oficios
pertinentes a las diferentes autoridades administrativas y policiales, una vez que se
ejecutoríe la presente sentencia escrita.- No se califica la denuncia presentada por
la víctima Francisco Pio Yépez Yépez, como maliciosa o temeraria, en razón de que
en la presente causa penal, se ha concluido que existe duda con respecto al delito
de robo con tentativa de asesinato, sin embargo, el mismo procesado ha aceptado
haber realizado las lesiones a dicha víctima.- NOTIFÍQUESE Y CÚMPLASE.