El arte rupestre incluye conceptos como geoglifos, petroglifos, pintura rupestre y arte
mobiliar, que se diferencian por el soporte y técnica utilizados en la representación. En ese
sentido, entendemos petroglifos como figuras grabadas o trabajadas en roca mediante la
técnica del raspado o desgaste, es decir de manera incisa, quedando en bajo relieve.
Al igual que la cerámica, la arquitectura y la escultura entre otros, el arte rupestre es parte
de la cultura material dejada por las sociedades desaparecidas, en la cual se plasman ideas
y modos de vida de determinadas sociedades. Las figuras representadas son comprendidas
por el grupo que las realiza, e incluyen ideas, actividades agrícolas o económicas. En otras
palabras, el arte rupestre, al igual que los otros materiales arqueológicos, forma parte de
los componentes que se interrelacionan en una sociedad, permitiendo a través de su
estudio la reconstrucción de esta entidad.
A diferencia de los otros materiales que en su mayoría se encuentran bajo tierra, requiriendo
ser excavados, el arte rupestre se encuentra en la superficie. Sin embargo, esta
característica también afecta su conservación, estando expuesto a factores antrópicos y
naturales (básicamente la humedad), lo cual no permite una buena observación de las
figuras plasmadas, considerando además que algunas sólo se observan en determinadas
épocas del año o en distintas horas.
En el presente estudio hemos considerado el trabajo de Helena Horta (2001), en el cual
clasifica las figuras de acuerdo a los estilos que representan, es decir de formas naturalistas
o esquemáticas (estilizadas). Las variaciones en la forma, tamaño, técnica y composición
de los elementos nos permitirán aislar las imágenes para un posterior análisis.
Representación naturalista.- Es la representación natural de la escena respetando
proporciones de forma e imagen, como son detalles de patas, cabezas, colas, orejas y
otras extremidades, tratando de ser fidedignos con la imagen representada.
Hemos aislado los paneles existentes como unidad de análisis y considerado el contexto
de toda la representación, observando la recurrencia de las figuras. Como hemos
mencionado, las figuras representan una idea en particular y de manera articulada con las
otras muestran el contexto y significado de la representación (Manzi 2001).
Figuras en los Paneles
La descripción de los paneles se realiza de izquierda a derecha (Fig. 3):
Panel 1: De 16 centímetros de alto por 21 centímetros de ancho, compuesto de 1 figura;
un camélido.
Panel 2: De 29 centímetros de alto por 23 centímetros de ancho, compuesta de 3 figuras;
un camélido y dos figuras antropomorfas.
Panel 3: De 35 centímetros de alto por 28 centímetros de ancho, compuesta de 7 figuras,
cinco camélidos y dos figuras antropomorfas.
Panel 4: De 62 centímetros de alto por 50 centímetros de ancho, compuesta de 11
figuras, cinco camélidos y seis figuras antropomorfas.
Panel 5: De 65 centímetros de alto por 60 centímetros de ancho, compuesta de 8 figuras,
seis camélidos y dos figuras antropomorfas.
Panel 6: De 73 centímetros de alto por 36 centímetros de ancho, compuesta de 17
figuras, cuatro camélidos y trece figuras antropomorfas.
Panel 7: De 77 centímetros de alto por 40 centímetros de ancho, compuesta de 8 figuras,
cinco camélidos y tres figuras antropomorfas.