De Board La teoría general de los sistemas y la conducta humana
Uno de los fenómenos característicos del siglo XX ha sido la asociación e
integración cada vez mayor de disciplinas de estudio y ciencias que, en el pasado, se consideraban separadas por límites muy rígidos. El psicoanálisis, aunque básicamente preocupado por explicar la conducta del hombre en función de la psiquis individual, en el nivel intrapersonal siempre se ha interesado por las relaciones humanas en grupos y orgas. En consecuencia, cualquier otro enfoque de la conducta que abarque la relación de un grupo con su contexto podría, idealmente, complementar la teoría psicoanalítica. El autor quiere mostrar que la teoría general de los sistemas ha suministrado conceptos tales, y que estos han ampliado los conocimientos del psa sobre la conducta y el funcionamiento de los grupos y orgas. Un sistema es un todo compuesto por partes en una disposición ordenada; un conjunto de elementos conectados, interdependientes o asociadas de manera tal que forman una unidad compleja. La teoría general de los sistemas procura describir la índole de los sistemas en general, y ha alcanzado gran repercusión sobre casi todos los campos. En la física, la segunda ley de la termodinámica dice que la energía de cada sistema disminuye hasta que finalmente alcanza un estado permanente de homogeneidad máxima, en el que el sistema no puede realizar ningún trabajo (como una batería cuando se agota). Sin embargo Von Bertalanffy, uno de los máximos representantes de la teoría, ha señalado que estas leyes de la física no se aplican a los sistemas vivientes, que muestran en su desarrollo y en la evolución una transición hacia un orden más elevado, hacia la heterogeneidad y la organización. Resolvió el problema distinguiendo los sistemas cerrados de los sistemas abiertos: un sistema cerrado es independiente de su medio, y en él se llega al estado de estabilidad descrito en la ley de la termodinámica; pero el sistema abierto esta en contacto continuo con su medio, importa de él energía, la convierte y luego exporta nuevamente al medio la energía transformada. Los sistemas vivientes tienen este carácter abierto, y en ellos la estabilidad difiere de la de los sistemas cerrados, pues en virtud de su apertura se dan un cambio y una adaptación continuos y puede seguir efectuando trabajo. La eficacia está determinada por el mantenimiento del equilibrio entre el sistema y el medio, un equilibrio dinámico. Es muy importante el límite del sistema, porque es allí donde se realizan los intercambios con el medio que son lo que permite mantener ese equilibrio dinámico que hace que el sistema no muera. Otra diferencia significativa es que los sistemas abiertos pueden alcanzar el mismo estado final a partir de distintas condiciones iniciales (principio de equifinalidad). Tanto el individuo como la orga pueden verse como sistemas abiertos. Toda orga es un sistema complejo de departamentos, procesos y personas interrelacionados, y existe un claro límite entre lo que está dentro y lo que está afuera de la orga. Es un sistema abierto porque existe dentro de un medio dado y continuamente debe importar energía, materiales y gente de ese medio. Esas importaciones se utilizan dentro del sistema para crear todos aquellos bienes o servicios que luego son exportados al medio con valor agregado sobre las Descargado en http://www.Psi-Foros.com/
importaciones. Mantendrá un estado de estabilidad sólo en la medida en que
continuamente cambie y se adapte a las fuerzas del exterior. En la orga, esos intercambios de límite son responsabilidad de la administración, y la orga será eficaz en la medida en que la administración tenga conciencia de la realidad exterior a esa orga. De modo que en la actualidad la administración o manejo de una orga puede verse como el manejo de límites, y la delegación como una necesidad. Dentro de la orga, los distintos departamentos pueden ser vistos como subsistemas. La orga, por medio de la función de manejo, puede elegir el modo en que reaccionará ante las fuerzas externas de entre una serie de estrategias de mercado, y mediante una serie de estructuras y procedimientos internos. El enfoque de sistemas aplicado a las orgas revela que el cambio organizacional no es algo que se de vez en cuando y deba ser evitado, sino que configura parte esencial del proceso continuo por medio del cual la orga mantiene su eficacia. Actualmente es crucial reaccionar adecuadamente a un medio donde el cambio es tan rápido que genera turbulencias. Los estudios Trist fueron la primera aplicación del concepto de sistemas abiertos a una orga real (una mina), y revelaron que la nueva tecnología presente en esa orga había dado lugar a problemas sociales y psicológicos nuevos para los trabajadores, contrarios a sus tradiciones. Las conclusiones fueron simples: era necesario un cambio cualitativo de modo que pueda cobrar existencia un todo tecnológico y social. De modo que su aporte reside en el análisis de la interrelación entre las estructuras tecnológicas y sociales en una orga, y el modo en que cada una influye a la otra. A partir de esto se desarrolló el concepto de sistemas sociotécnicos. Los principales componentes en un sistema orga son los aspectos tecnológicos, el particular método de trabajo y los aspectos sociales que atañen a la relación interpersonal entre los empleados. Estos componentes se hallan entrelazados entre sí, de modo que los cambios en uno provocan cambios en los otros. Todo el sistema se percibe ahora como sociotécnico, y su eficacia total dependerá del equilibrio logrado entre los componentes sociales y tecnológicos. Esto es importante en relación al manejo del cambio y la innovación, pues los cambios frecuentemente traen aparejados nuevas tecnologías y procesos. El concepto de sistema sociotécnico implica que el nivel optimo de uso tecnológico es el que mantiene el equilibrio entre la tecnología y la gente que trabaja dentro del sistema. Los resultados del experimento Ahmedabad coinciden con los de Trist, aunque agregan algo más a las ideas de supervisión y manejo: el sistema tarea hombre es incompleto y requiere del manejo para controlar y coordinar el sistema en el límite. Otra conclusión es que la tecnología y el progreso tecnológico no tienen por qué ser el principal elemento determinante de las estructuras sociales de orga. Los estudios revelan un problema nunca resuelto satisfactoriamente en la mayoría de las orgas, y es el de crear y mantener una orga eficaz en la que el trabajo pueda realizarse satisfactoriamente, a la vez que el trabajador pueda exhibir y desarrollar su humanidad esencial. Desde el surgimiento de los método de producción masiva ha habido una lucha constante en ese sentido. Las actitudes sociales y las presiones económicas determinaron, en términos Descargado en http://www.Psi-Foros.com/
generales, que la tecnología se convirtiera en el factor dominante del trabajo. La
demanda de productos baratos y el anhelo de obtener puestos bien pagos dio por resultado la formación de orgas en que muchos trabajadores aplican sólo parte de su capacidad y apenas obtienen satisfacción allí. Ya no sufren la tiranía de administraciones severas, pero los sistemas mismos pueden tiranizar a quienes trabajan en ellos. Un empleo ya no puede ser entendido como la venta del propio trabajo por dinero, ya que el empleado es una persona total que no sólo aplica su capacidad al trabajo sino que también introduce en él sus necesidades emocionales y sus sentimientos. El trabajo debe tomar esto en cuenta para que el individuo pueda obtener algo más que una retribución económica. La discusión relativa al tema del hombre y el trabajo se basa en los supuestos adoptados sobre la naturaleza del hombre. Estos se basan en puntos de vista políticos o religiosos, aunque las más recientes están basadas en verdades psi objetivas sobre la naturaleza y conducta del hombre. Por ejemplo, la teoría de Maslow que sostiene que la conducta del hombre surge del modo en que constantemente trata de satisfacer sus necesidades. Cuando esta teoría se aplica a una orga, indica que las personas se ven motivadas para trabajar debido al trabajo real que se les encomienda y la situación en que ese trabajo se lleva a cabo. Si el trabajo brinda oportunidades para la satisfacción de NB personales, el individuo se siente motivado para trabajar. Maslow y Herzberg se basan en una concepción humanista de la naturaleza humana, y han contribuido a destacar que las orgas deben estar al servicio del hombre y no a la inversa.