Anda di halaman 1dari 6

ÉTICA BUDISTA

Las acciones tienen consecuencias, somos nuestros hábitos.


El propósito de la ética en el budismo es el de ofrecer un modelo de cómo actuaríamos si
estuviéramos constantemente en contacto con lo mejor de nosotros mismos. Se trata del
principio del no dañar a ningún ser vivo así como del cultivo del amor universal
indiscriminado. No son mandamientos, impuestos al hombre por una autoridad o poder
externo. No hay un juicio.
El criterio budista no es teológico sino psicológico. Según la tradición Budista las acciones
son correctas o incorrectas dependiendo del estado mental a partir del que se realizan.
Existen dos tipos de acciones: hábiles y torpes, así la ética budista es más una cuestión de
inteligencia.
Las acciones torpes se definen como aquellas que tienen su raíz en la avaricia o deseo
egoísta, en el odio y la aversión y en la confusión mental o ignorancia.
Las acciones hábiles están basadas en la amabilidad y claridad, son aquellas que se
encuentran libres de avaricia, odio e ignorancia, y que están motivadas por la generosidad,
por el amor y la comprensión. Se trata de actuar a partir de lo mejor que hay en nosotros,
desde nuestra más profunda comprensión e intuición. El Buda actuará inevitablemente de
cierta manera debido a que es parte de la naturaleza del ser iluminado.
Los preceptos no son una simple lista de normas. Nos sirven como puntos de referencia y
pautas de entrenamiento.
Ejemplo de tres personas que se abstienen de robar. Uno no lo hace por miedo a la policía.
La segunda la tentación está allí pero logra controlarla. La tercera persona ha eliminado el
deseo.
Hay tres tipos de acciones: del cuerpo, habla y mente. (ver también la comunicación no
violenta)
Los cinco preceptos son prácticamente universales en todas las escuelas del budismo y se
consideran la práctica de la ética mínima para un budista. Los Miembros de la Orden
Budista Occidental toman diez preceptos en el momento de recibir la ordenación. He aquí
la traducción de los preceptos al castellano.

LOS CINCO PRECEPTOS


Con acciones de amor y bondad, purifico mi cuerpo
Me comprometo a no tomar la vida de nadie.
Con generosidad sin limite, purifico mi cuerpo
Me comprometo a non tomar lo que no me pertenece.
Con tranquilidad, sencillez y contento, purifico mi cuerpo
Me comprometo a no tener una conducta sexual dañina.
Con comunicación veraz, purifico mi habla
Me comprometo a no decir mentiras.
Con conciencia clara y lúcida, purifico mi mente
Me comprometo a no consumir intoxicantes.
No son reglas. Adoptamos los preceptos con el fin de instruirnos;
hacemos todo lo posible para conseguir entender que el ir en contra de ellos conduce a la
infelicidad y al sufrimiento, tanto nuestro como de otros. Son para ayudarnos.

LOS DIEZ PRECEPTOS


Con acciones de amor y bondad purifico mi cuerpo
Me comprometo a seguir la senda que consiste en
abstenerme de matar a seres vivos.
Con generosidad sin limites purifico mi cuerpo
Me comprometo a seguir la senda que consiste en
abstenerme de tomar aquello que no me pertenece.
Con tranquilidad, sencillez y contento purifico mi cuerpo
Me comprometo a seguir la senda que consiste en
abstenerme de una conducta sexual incorrecta.
Con comunicación veraz purifico mi habla
Me comprometo a seguir la senda que consiste en
abstenerme de mentir.
Con comunicacion amable purifico mi habla
Me comprometo a seguir la senda que consiste en
abstenerme de hablar con rudeza.
Con comunicación útil purifico mi habla
Me comprometo a seguir la senda que consiste en
abstenerme de hablar de banalidades.
Con comunicación armoniosa purifico mi habla
Me comprometo a seguir la senda que consiste en
abstenerme de difamar.
Abandonando la avidez por la serenidad purifico mi mente.
Me comprometo a seguir la senda que consiste en
abstenerme de la codicia.
Cambiando el odio por la compasión purifico mi mente.
Me comprometo a seguir la senda que consiste en
abstenerme de odiar.
Transformando la ignorancia en sabiduría purifico mi mente.
Me comprometo a seguir la senda que consiste en
abstenerme de tener ideas erróneas.
Ética budista[editar]
Artículo principal: Ética budista
La ética budista se fundamenta en los principios de ahimsa (no ocasionar daño) y
el Camino medio (moderación; no reprimir ni tampoco aferrarse a nada). Según las
enseñanzas budistas, los principios éticos están determinados por el hecho de si una
acción cualquiera podría tener una consecuencia dañina o perjudicial para uno mismo o
para otros. En el budismo se utiliza la expresión de mente hábil, que es aquella que evita
todas las acciones propensas a causar sufrimiento o remordimiento. El esfuerzo y la
intención empleados determinará la carga kármica de la acción.
A diferencia de una regla impuesta por una autoridad, un precepto es una base o guía
ética personal. La ética budista se basa en Los cinco preceptos:65

 No tomar la vida de nadie.


 No tomar lo que no me pertenece.
 No tener una conducta sexual dañina.
 No decir mentiras.
 No consumir estupefacientes.
Los monjes y monjas budistas por su parte, siguen más de 200 normas de disciplina
descritas en detalle en el Vinaya pitaka; algunos monjes y monjas budistas zen no tienen
que seguir el voto de castidad ni pobreza (pueden casarse y trabajar).
Ética budista
Ir a la navegaciónIr a la búsqueda

El emperador Ashoka colocó varios pilares a lo largo de India con los preceptos éticos
budistas inscritos.
A diferencia de otras religiones, en el budismo los preceptos éticos existen no como
imposición sino como guías de práctica. Su importancia es fundamental pero a la vez deben
estar sometidos a la indagación personal. Por tanto, a nivel global existe siempre un debate
continuo en referencia a cuestiones siempre de actualidad y en donde no hay una postura
unilateral.
En estas materias la comunidad budista suele intentar dilucidar los episodios históricos que
narran situaciones similares sucedidos en la vida de Buda Gautama. También se recuperan
los comentarios de los más famosos maestros de las diferentes tradiciones. Por último, a
menudo en toda interpretación existe cierta acomodación tanto a las
circunstancias sociales y culturales, al momento histórico o ideológico que toca vivir. Un
comentarista muy referenciado en todas las tradiciones a la hora de discutir este tema es
el erudito indio Buddhaghosa(350 d. C.). Buddhaghosa es un autor importante por la
cantidad de tópicos que asume, aunque es muy discutido por sus posiciones en gran parte
herederas del brahmanismo hindú. Sin embargo, por su carácter más conservador en
algunos temas, es referenciado a menudo para prefigurar esa línea conservadora en
distintos debates. La obra principal de Buddhaghosa es el Vishuddhimagga.
La comunidad budista se divide entre monjes y laicos. Los monjes están obligados a seguir
más de 250 normas de disciplina,y en el caso de las monjas 348, cuyo quebrantamiento es
penado en diferentes grados que van desde la confesión pública hasta la expulsión de la
orden monástica. Este camino estricto de reglas se llama Vinaya y es una de las tres
grandes secciones del Canon Pali.
Los laicos observan por su parte solo cinco preceptos.
Hay que notar que las escuelas y maestros budistas a menudo observan la ética influidos
por su perspectiva cultural, su propia experiencia o su condición de monjes o laicos. Hay
maestros y trabajos con comentarios favorables y contrarios a la homosexualidad,
al aborto, eutanasia y otros temas de interés para el mundo actual.
También de manera general, en todas estas cuestiones lo que se intenta dilucidar siempre
es el establecimiento de la compasión. Siendo ésta la base moral de la ética budista, se
intenta siempre buscar los últimos fundamentos de cualquier acción, y esto no siempre es
tarea fácil. Estos ejemplos pueden dar una idea de que la moralidad en el budismo también
es algo que necesita de la investigación personal.
La amplitud de temas en donde la ética es importante para el budismo puede ser tan grande
como su propia doctrina. No se dispone de una lectura en profundidad de estos temas en
castellano, pero para una introducción detallada de los puntos abajo presentes y de algunos
más, se recomienda el libro An Introduction to Buddhist-Ethics de Peter Harvey, publicado
por Cambridge University Press.

Índice

 1Cinco Preceptos
o 1.1No quitaras ninguna vida
o 1.2No tomar lo que no ha sido dado
o 1.3No tener una mala conducta sexual
o 1.4No mentir
o 1.5No ingerir sustancias tóxicas que puedan nublar la mente
 2Sexualidad
o 2.1Homosexualidad
 2.1.1Tantrismo en el budismo
o 2.2Prostitución
 3Género
 4Matrimonio
 5Aborto
o 5.1Métodos anticonceptivos
 6Suicidio
 7Eutanasia
 8Pena de muerte
 9Animales
 10Bibliografía
 11Referencias
 12Véase también
 13Enlaces externos

Cinco Preceptos[editar]
A diferencia de una regla impuesta por una autoridad, un precepto se usa como base para
la ética personal. Buda reconoce que no todo el mundo podrá abandonar su vida cotidiana
para formar parte del Sangha. También aceptaba a los seguidores laicos (Upasaka) que
creían en sus enseñanzas pero no seguían estrictamente las reglas del Sangha. El buda
estimulaba a los laicos a seguir con una vida lo más perfecta posible. Como guía de
comportamiento de cada día, el Buda prescribió cinco preceptos o reglas:
No quitaras ninguna vida[editar]
Este se refiere a no quitarle la vida a seres sintientes, como seres humanos y animales. Se
excluye, por ejemplo, a las plantas y los microorganismos que, aunque se consideran
formas de vida para la ciencia, el budismo no los considera sintientes o conscientes por lo
cual alimentarse de vegetales y utilizar medicamentos contra agentes patógenos no implica
la ruptura de esta norma. También es en general admitido que es legítimo matar en defensa
propia o de los demás e incluso existe una parábola de la vida de Buda donde él mismo
mató a un remero que pretendía asesinar a todas las personas que transportaba1 salvando
así la vida de muchos, pero matando al remero en el proceso. Naturalmente estos son
casos extremos. La participación de los budistas en las guerras y su ejercicio
como militares está sujeto a debate con argumentos a favor y en contra, y ha sido un tema
muy complejo en los países budistas (todos los cuales tienen ejércitos) cuando estos han
tenido que lidiar con conflictos bélicos y autodefensa. Si bien el budismo rechaza la violencia
y aboga en todo momento porque sea la última opción, se han dado diversos casos de
participación de budistas en guerras incluyendo la revuelta de monjes Shao
Lín en China contra los mongoles(que ayudó en su expulsión del país), el fuerte vínculo
entre los guerreros samurai de Japóny el budismo, e incluso, según estudios de eruditos
budistas zen, el apoyo realizado por algunas escuelas de budismo zen a los esfuerzos
militares de Japón durante la guerra,2 aunque este es un caso aislado. No obstante muchos
budistas han sido objetores de conciencia y en otros casos han sido reconocidos como
líderes mundiales en favor de la paz. Varios budistas han sido galardonados con el Premio
Nobel de la Paz, como el XIV Dalái lama y la activista birmana Aung San Suu Kyi. Si bien
existe debate al respecto, se considera que el budismo admite la validez de matar por
defensa propia (lo que incluiría campañas militares de autodefensa) pero siempre como
último recurso, como generalmente abogan diferentes artes marciales, muchas de ellas de
filosofía budista.
No tomar lo que no ha sido dado[editar]
Este naturalmente se refiere a no cometer robos, fraudes, estafas ni cualquier otra acción
deshonesta que implique apropiarse indebidamente de lo que no es propio.
No tener una mala conducta sexual[editar]
Este se refiere a evitar cualquier conducta sexual que provoque daño a uno mismo o a
cualquier otra persona involucrada, como lo sería naturalmente la violación, la pedofilia,
el abuso sexual, la zoofilia y el adulterio. En general sostener relaciones sexuales con
alguien que no puede dar su consentimiento debido a sus límites mentales o intelectuales
(por ejemplo, un niño, una persona discapacitada o bajo los efectos de drogas o alcohol, un
paciente en coma, un animal, etc.) se considera incorrecto. Sobre este tema se extenderá
más adelante.
No mentir[editar]
Este se refiere a mentir, hablar con rudeza o con ostentación, cotillear, o mantener charlas
vanas.
No ingerir sustancias tóxicas que puedan nublar la mente[editar]
Este precepto se refiere a evitar consumir sustancias que puedan alterar la mente o
impliquen un riesgo que puedan romper con otros preceptos. Existe debate sobre el mismo
ya que algunos budistas consideran el consumo de todas las drogas tantos legales como
ilegales, incluyendo el alcohol y en algunos casos incluso el café, como algo que debe
evitarse. Por ejemplo, el partido budista de Sri Lanka tiene entre sus objetivos políticos
la prohibición del alcohol. Otros budistas más moderados consideran que la prohibición se
refiere al consumo de drogas que afecten la mente y el cuerpo de manera claramente
radical potenciando la ruptura de los otros preceptos como sería el caso de la mayoría
de drogas ilegales, pero no así el alcohol o la cafeína si se consumen con moderación.
Esta prohibición, naturalmente, no incluye los medicamentos ni las drogas que se
consuman por prescripción médica o como parte de un tratamiento, médico, psiquiátrico,
etc.
Adicionalmente a las arriba mencionadas, los monjes y monjas adoptan más de 200 normas
estrictas de disciplina que regulan sus acciones y su vida en un código llamado Vinaya.

Anda mungkin juga menyukai