27 / 03 / 2019

PROPUESTA DE
AUXILIAR DIDÁCTICO
 INTRODUCCIÓN

En la actualidad, el currículo y la enseñanza priorizan modelos basados en el

aprendizaje por recepción, por adquisición de grandes volúmenes de material de
estudio que comúnmente se le presentan al alumno. La meta es que no solo por
recepción el alumno adquiera el conocimiento, si no sea resolver problemas
académicos que estén estrechamente relacionados con los que se viven en la vida
diaria por medio del descubrimiento, y porque a veces lo que se aprende de este
modo conduce al descubrimiento planeado de propuestas y nociones conocidas.

Es cierto que el aprendizaje significativo es mas importante que el repetitivo, en lo

que se refiere a situaciones académicas, ya que el primero posibilita la ventaja de
grandes cuerpos formados de conocimientos con sentido y coherencia. Este tipo de
aprendizaje implica un procesamiento muy activo de la información por aprender,
cuando se aprende significativamente a partir de la información contenida en un
texto o actividad académica se realiza mínimamente lo siguiente:

✓ Se realiza un juicio pertinente para ver cuales de las ideas que ya existen en
la estructura cognitiva se relacionan con las nuevas.
✓ Se determinan las diferencias y similitudes entre las nuevas ideas y las ya
existentes,
✓ De acuerdo con lo anterior, los conocimientos que ya tenemos se reformulan
y así obtenemos la asimilación de un nuevo conocimiento para poder
aplicarlo.

Para que lo anterior se lleve a cabo se deben cumplir con dos condiciones: que la
nueva información se relacione de una manera no absurda y vaga con los
conocimientos previos que el alumno posee y que el alumno tenga la motivación
suficiente para querer asimilar las nuevas ideas, en este sentido obtendremos lo
que se conoce como aprendizaje significativo.

Pero todo conocimiento debe ser evaluado, y desde la perspectiva del

constructivismo, la evaluación deja de ser una herramienta para medir a los alumnos
como objetos, es decir, pasa de asignar números o estándares de calidad para
determinar quien es mejor y quien es peor, a ser un acto reflexivo para hacerla
participe de un proceso complejo. Es necesario que los profesores empiecen a
tomar conciencia sobre la importancia de la evaluación, pues debemos tomarla
como un medio y no como el fin del proceso enseñanza – aprendizaje.

En este sentido, debemos considerar que la evaluación estará en tres momentos

distintos para verificar el desarrollo cognitivo de los alumnos, al inicio llamada
evaluación diagnostica, durante el proceso, llamada evaluación formativa, y al final,
la que comúnmente conocemos y la que mas se aplica en la educación de nuestro
país, la evaluación sumativa. Es importante que conozcamos y sepamos aplicar
estos tipos de evaluación, puesto que su correcto funcionamiento nos permitirá
poder desarrollar en los alumnos un aprendizaje significativo. Definiremos a cada
una de ellas:

✓ Evaluación diagnostica: la evaluación diagnostica nos permite conocer los

saberes previos que posee el alumno al momento de iniciar un nuevo
contenido; a partir de ello, el profesor planifica y dosifica los objetivos a
alcanzar. Las principales herramientas para realizar esta evaluación son:
cuestionarios escritos y orales, examen, preguntas previas, lluvia de ideas,
etc.
✓ Evaluación formativa: la evaluación formativa, es un proceso continuo que
nos permite conocer el progreso del aprendizaje en los alumnos, para
fortalecer sus procesos de aprendizaje. Se caracteriza por ser un proceso
cualitativo, teniendo como principales herramientas las rubricas, listas de
cotejos, estudio de casos, cuadro de honor en valores, lecturas, resolución
de problemas, etc.
✓ Evaluación sumativa: la evaluación sumativa se caracteriza por ser un
proceso cuantitativo, permite emitir juicios numéricos para la validación,
promoción y certificación de los educandos. Las principales herramientas de
evaluación son: proyectos, escala de calificaciones, examen, rubricas, etc.

Tomando en cuenta lo antes descrito, como docente frente agrupo he decidido crear
una herramienta que me permita evaluar los conocimientos obtenidos por mis
alumnos en una determinada actividad en la asignatura de español, la cual será
desarrollada en el siguiente apartado, explicado a detalle cuál es su funcionamiento.
Es importante que como profesores salgamos de nuestra zona de confort y
comencemos a pensar mas en pro del desarrollo cognitivo de nuestros alumnos,
para que, de esta forma, logremos formar seres para la vida y la sociedad.

DESARROLLO DEL JUEGO

Los juegos son actividades que despiertan la atención de cualquier niño,

imaginemos como se ven esos rostros cuando corren detrás de un balón, lanzan un
dado o brincan una cuerda, y si nos vamos más a fondo, analicemos que interés se
le da al aprendizaje de las características reglas que definen a cada uno, pero ¿a
qué se debe esto? La respuesta es muy sencilla, con ellos los niños se siente libres,
felices, motivados y sobre todo no dejan de ser niños, no dejan de ser humanos.

Entonces, si un juego expulsa un desarrollo cognitivo en los niños, ¿por qué no

aplicarlo en la escuela? En este sentido, desarrollare una actividad lúdica con mis
alumnos, llamada tabla de habilidades, con la cual pretendo realizar una evaluación
formativa sobre un contenido de la asignatura de español. Específicamente
abordaremos el tema del teatro en la época del siglo de oro, del cuarto bloque.

La actividad en un primer momento consiste en la revisión y lectura de una obra

llamada “La vida es sueño” con la que analizaremos las diferentes figuras retoricas
empleadas en esa época, las características de los personajes mas utilizados y
porque eran así, y la forma de redactar los textos en el siglo XVI Y XVII.

El teatro es un arte escénico que tuvo origen en antiguos rituales mágicos, y que
fue evolucionando hasta tomar la forma y complejidad que tiene hoy en día. La
palabra teatro encuentra su origen en la palabra griega theatrón que significa
“espacio para la contemplación”. Esto me da la pauta para poder emplear mi
estrategia de evaluación puesto con ella, los alumnos, a partir de sus habilidades,
podrán reafirmar su conocimiento respecto a lo que ya conocen de este arte.
Para realizar la actividad necesitaremos los siguientes materiales:

➢ Tabla de habilidades

1 2 3 4

15 16 17 18 5

14 23 19 6

13 22 21 20 7

12 11 10 9 8

➢ Fichas de habilidades
 ➢ Dados
➢ Distintas semillas o algún otro objeto para marcar el lugar de cada jugador.
➢ Plumones
➢ Pizarrón

Como se juega.

El juego consiste en hacer el recorrido por la tabla de habilidades, cada integrante

del equipo tendrá un turno para lanzar el dado y el número obtenido será la cantidad
de paso que avanzará. La tabla de habilidades cuenta con distintas imágenes que
pondrán a prueba las destrezas de los alumnos:

• La mano dibujando: en esta casilla el alumno deberá definir el concepto con

un dibujo, el resto del equipo tendrá que adivinar de que se está hablando.
• Las caras: en esta casilla el alumno, con la ayuda de sus brazos y sus gestos
deberá definir el concepto, el resto del equipo tendrá que adivinar de que se
está hablando.
• Bla bla bla: en esta casilla el alumno, explicará con sus propias palabras el
concepto escrito en la ficha.
• Oh yea: al caer en esta casilla el alumno se salva de realizar una actividad.

La actividad se realizará en equipos de cinco personas, cada equipo contará con

una tabla de habilidades, un juego de fichas de habilidades un dado y plumones.
Detrás de las fichas de habilidades se encuentran escritas palabras que hacen
referencia las características del teatro en la época del siglo de oro, así como
distintas figuras retoricas empleadas en este arte. Con estos conceptos los alumnos
podrán dibujar, dialogar o representar con gestos para que sus compañeros
comprendan los contenidos tratados en la actividad anterior (análisis de obra y
figuras retoricas).

Hay que recalcar que la evaluación es individual por lo que el profesor debe estar
muy atento a las actividades que desempeñan cada uno de los alumnos.
Recordemos que el proceso no es solamente de los alumnos, también el profesor
debe integrarse para poder reforzar los conocimientos obtenidos con la actividad.
Considero que, con este juego, los alumnos se sentirán mas relajados y con un
mayor interés por seguir aprendiendo, pues siempre es necesario salir de esa rutina
de evaluar con lápiz y papel. Recordemos que son seres humanos y por ende
durante el proceso de evaluación influyen 0muchos factores que pueden beneficiar
o bien perjudicar al proceso y si tratamos a los alumnos bajo un mismo estándar
estamos cometiendo un grave delito, pues matamos los sueños y desmotivamos a
los estudiantes.

APLICACIÓN DE LA PROPUESTA

A continuación, anexare fotografías que sustentan la aplicación de la propuesta

del auxiliar didáctico con los alumnos del tercer grado, grupo B de la escuela
telesecundaria 656 “Emiliano Zapata Salazar”.

Alumnos iniciando el recorrido del tablero de habilidades.

Explicación de las características de un personaje de teatro utilizado en la época
del siglo de oro a través de caras y gestos.
Desarrollo de un dibujo para explicar las figuras retoricas.
 CONCLUSIONES

De acuerdo con Condemarín M y Medina A. (2000), citado por Rocío Torres, la

evaluación formativa es un proceso que realimenta el aprendizaje, posibilitando su
regulación por parte del estudiante. De esta manera, él junto con el educador,
pueden ajustar la progresión de los aprendizajes y adaptar las actividades de
aprendizaje de acuerdo con sus necesidades y posibilidades.

Lo anterior es posibles, ya que, este tipo de evaluación nos permite determinar de

manera individual o grupal el grado de logro de los objetivos que nos propusimos al
iniciar los contenidos, considerando los distintos procesos que como profesores
utilizamos para realizar la medición, y pudiéndolos adaptar a las necesidades para
que se obtenga un aprendizaje significativo.

Mi actividad fue realizada para evaluar un determinado contenido, con ello, hago
uso de la evaluación formativa la me permitió reconocer las deficiencias en mis
alumnos sobre el tema tratado, las cuales las reforzamos con un raposo más
analítico de los conceptos e implementando la elaboración de carteles.

Fue muy gratificante poder observar como una actividad, que tal vez no estamos a
realizar con frecuencia, puede dar grandes resultados, pero fuera de los logros
pedagógicos obtenidos, es mayor la satisfacción de ver a mis alumnos felices e
interesados en hacer las cosas por motivación propia y no por una imposición de su
profesor.

Las actividades que emprendamos en las distintas asignaturas deben ser para
cumplir con la función pedagógica de la evaluación mas que con la función social,
es decir, debemos, como profesores, dejar a un lado la idea de que solo se debe
evaluar para asignar un número en la escala del 5 al 10, de etiquetar a los alumnos
como buenos o malos por sus resultados, de cultivar la idea de que solo los “de 10”
podrán ingresar a una buena escuela o tener un buen empleo, esto es la función
social, poder obtener alumnos que encajen en una sociedad globalizada.

Como profesores, debemos tener la firme condición de centrarnos en el desarrollo

de aprendizajes en los alumnos, y que estos sepan utilizarlos en los problemas que
se le presenten en la vida, para poder vivir en sociedad, pero no bajo las ordenes
de los gobernantes sino como pensadores críticos y reflexivos, todo esto se puede
obtener realizando actividades lúdicas que nos permitan evaluar en los distintos
momentos y poder reforzar los conocimientos adquiridos.

Referencias
Arías, R. T. (2013). La evaluación formativa . Ministerio de Educación Publica .

Diaz Barriga, Frida y Hernades, Gerardo. (1997). Capitulo VII. Estrategias para el
aprendizaje significativo II: comprension y composicion de textos, en: Estrategias
docentes pra un aprendizaje significativo. Una interpretación constructivista. México:
Mc Graw Hill. .

Daiz Barriga, Frida y Hernandez, Gerardo. (1997). Capitulo VIII. Constructivismo y

evaluación educativa, en: Estrategias docentes para un aprendizaje significativo.
Una interpretación constructivista. México: Mc Graw Hill. .

Trenas, F. R. (2009). Aprendizaje significativo y constructivismo. Revistas digital para

profesionales de la enseñanza., 1-8.