Anda di halaman 1dari 3

Características demográficas, sociales, culturales y políticas de las comunidades indígenas de la

Provincia de Salta.

Situación demográfica1, socioeconómica y cultural

La Provincia de Salta se caracteriza por ser pluriétnica y multilingüe, como resultado de una permanente dinámica de
procesos sociales históricos y movilidad poblacional desde tiempos prehispánicos, lo que la convierte en una de las más notables
por su diversidad cultural. Diferentes etnias mantienen su identidad cultural y lenguas vernáculas como la wichí, guaraní, chorote,
tapiete, chané, toba y chulupí, mientras que otras como la kolla y la diaguita-calchaquí difieren por su situación lingüística de las
anteriores. En la zona andina sus lenguas vernáculas han sido asimiladas por el español hasta desaparecer o bien perdiendo
vitalidad hasta quedar un resabio como sustrato en el español regional.
En la constante interacción con las comunidades indígenas (lucha por sus derechos), el Estado Nacional construye un
proceso gradual de “visibilización” y para comprenderlo es fundamental reconocer que la multietnicidad trasciende las fronteras
políticas y administrativas actuales 2, como así también la profundidad temporal a la que alude el término “originario”.
Por ello es necesario referir a la distribución de los pueblos originarios tomando en cuenta unidades fitogeográficas o
ecorregionales para su ubicación en la provincia. A grandes rasgos se puede hablar de tierras altas (Puna, Valles Intermontanos y
Yungas) y tierras bajas (Chaco salteño y valles templados). El primer grupo de pueblos mencionados se concentra
mayoritariamente en tierras bajas y el segundo en tierras altoandinas presentando una dispersión variable y no homogénea debido
a procesos migratorios hacia los principales centros urbanos.
El siguiente cuadro presenta la distribución de grupos étnicos con sus correspondientes lenguas en uso siguiendo criterios
ambientales, político-administrativos.
Panorama etnolingüístico de la provincia de Salta3

Ecoregión Departamento Grupos Lengua Familia


Etnicos Lingüistíca4
Yungas Orán, Iruya, Santa Kolla Monolingües en español regionalizado
5
Victoria . (Quechua+español)

1
Población indígena en Salta según censo 2010 es de 79.204 habitantes. Total país 955.032 que se reconocen como descendientes
de pueblos originarios.
2
Al respecto, debemos señalar que tanto las fronteras provinciales como nacionales (y los Estados que se encargan de controlarlas)
son, en términos históricos, de “reciente antigüedad”, en comparación con las interacciones (y los vínculos) entre las comunidades
originarias. Por ejemplo, pensar en la relación del pueblo kolla de Iruya y Santa Victoria con las comunidades de la Quebrada y
Puna de Jujuy, por un lado; y con la región de las Yungas en el lado oriental de los departamentos Orán (Finca San Andrés), Iruya
(Isla de Cañas) y Santa Victoria (Los Toldos); o la relación de las comunidades Atacamas (o Kollas según como se
autodenominen) del departamento Los Andes y La Poma con el departamento de Susques, en Jujuy. O las Comunidades Diaguitas
Calchaquies y su constante intercambio (en términos organizativos) con sus hermanos de Tucumán (Amaicha del Valle, Tafí del
Valle, Colalao) y Catamarca (Santa María).
3
Este cuadro presenta una estimación de la concentración por pueblo. Es preciso observar que en el departamento capital se
encuentran migrantes de varios pueblos aunque predominan los de la etnia kolla y diaguita-calchaquí, como así también quechua y
aymara hablantes provenientes de la República de Bolivia.
4
Siguiendo a Beatriz Bixio (Lenguas indígenas del centro y norte de la República Argentina), tomamos la definición de Familia
Lingüistíca: Denominamos así al conjunto de dos o más lenguas relacionadas genéticamente. En tanto por Grupo lingüistíco:
Denominamos así al conjunto de dos o más lenguas o dialectos que acusan semejanzas, sin que sea posible diferenciar con
seguridad el estatuto de los términos que se relacionan –lenguas, dialectos- y la modalidad de la relación –contacto, origen común,
etc-.
5
La selva pedemontana de las Yungas está ubicada entre los 400 y 700 metros sobre el nivel del mar (ver Brown y Malizia 2004,
citado en Leake 2009). La zona de Yungas de los departamentos usualmente asociados a tierras altas como Iruya y Santa Victoria
son, para Iruya: Finca Santiago (Isla de Cañas, Río Cortaderas, Limoncito, Matancillas, Tres Morros y podría incluirse también a
Volcán Higueras, ubicado en una zona de selva de altura), Alizar del Porongal; en tanto de Santa Victoria la zona de Los Toldos
1
Selva de Gral. San Martín Guaraní, Guaraní, Chané y Tapiete Guaraní
6
Transición Chané y
Tapiete
(Tapy'y)
Chaco salteño Gral. San Martín, Wichí Wichí Mataco-Mataguaya
Rivadavia, Anta y Metán
Chaco salteño Rivadavia y Gral. San Chorote(Iyojw Chorote Mataco-Mataguaya
Martín aja)
Chaco salteño Rivadavia Nivaklés Nivaklé o Chulupi Mataco-Mataguaya
(Chulupies)
Chaco salteño Rivadavia y Gral. San Qom (toba) Toba (Nam Qom) Guaycurú
Martín
Los Andes, Rosario de Tastil y Monolingües en español (con
Puna y Prepuna Lerma Atacama préstamos del qunza+quechua)
(quebrada del Toro) (kollas
atacameños)

Valles Molinos, San Carlos, Diaguita- Monolingües en español con fuerte


intermontanos Angastaco, Cafayate, Calchaquí sustrato
(Valles Cachi (kakan+quechua, ya desaparecidos)
Calchaquíes)
Valles Capital (Finca Las Costas) Lules Monolingües en español (español
intermontanos regionalizado)
(Valle de Lerma)

Los grupos étnicos Guaraní, Wichí y Kollas son los pueblos mayoritarios en nuestra provincia.
Las comunidades Wichí se ubican entre los ríos Bermejo y Pilcomayo, al norte de la provincia de Salta, presentando una
ocupación contigua con las de Formosa y Chaco. Su forma de organización tradicional consistía en el agrupamiento de diferentes
familias que se movilizaban estacionalmente a través de circuitos por un vasto territorio para la apropiación de recursos mediante
la caza, pesca y recolección. En la actualidad, este modo de subsistencia se encuentra restringido a causa de limitaciones en el
acceso a los recursos por ocupación de sus tierras y la degradación del medioambiente.
En particular estos pueblos han visto modificarse profundamente sus bases productivas debido a un largo proceso
histórico que comienza con los efectos de las campañas militares, el proceso de evangelización, la instalación de la población
criolla con su economía ganadera de vacunos, la explotación forestal seguida de plantaciones de monocultivos además de la
industrialización paulatina de la zona (ingenios azucareros y empresas petroleras). En consecuencia se modificaron todos los
aspectos de la vida social hasta convertirse en el foco de programas asistenciales y planes sociales que complementan tanto su
economía informal (ej. producción artesanal, oficios de carpintería) como algunas actividades de subsistencia tradicionales en la
medida que pueden recurrir a ellas.
Los grupos de la etnia Guaraní que ocupan la zona de selva o yungas y sus ecotonos poseían una actividad tradicional
basada en una agricultura itinerante (de roza) que se complementaba con otras de caza, recolección y pesca. Junto a los grupos
Chané son de origen amazónico y se constata su presencia desde momentos prehispánicos. Sin embargo las migraciones más
importantes ocurrieron a partir del siglo XX debido a diversos factores como la Guerra del Chaco entre Paraguay y Bolivia

(donde se encuentra el Parque Nacional Baritú y la Reserva Nacional El Nogalar de Los Toldos, donde están las Comunidad
Aborigen El Lipeo y Baritú y Comunidad Indígena “Alta Cuenca del Río Lipeo”. Esta última a su vez es parte integrante del
Qullamarka – Coordinadora de Organizaciones Kollas Autónomas de la Provincia de Salta).
6
La zona de transición entre el Chaco y las Yungas constituye un ecotono, es decir que reúne elementos de ambos ecosistemas
(Leake 2009. Pueblos Indígenas Cazadores-Recolectores del Chaco Salteño: 12).
2
(década del ‘30) y el reclutamiento de mano de obra en los ingenios azucareros y obrajes de Salta y Jujuy. Se movilizaron por la
Ruta 34, acceso del norte argentino con Bolivia, en cuyas inmediaciones se encuentran hoy sus principales asentamientos o
7
misiones (muy relacionadas a las Misiones Franciscanas) y en la periferia de la ciudad de Tartagal.
Así, muchos grupos de familias Guaraníes trabajaron de manera estacional e intensiva en torno a la explotación forestal
durante cuatro décadas hasta fines de los ’80. El trabajo en los obrajes consistía en actividades como la tala de árboles monte
adentro, viviendo en campamentos precarios. Estos campamentos junto a los ingenios azucareros dieron lugar a una
reorganización y redistribución de familias, además de la conformación de nuevos grupos y comunidades. Cuando estas empresas
disminuyeron drásticamente la ocupación de mano de obra, muchas familias indígenas se asentaron definitivamente en la zona o
bien migraron nuevamente en busca de trabajo como jornaleros contratados en las fincas, modificando así una vez más su
estrategia de subsistencia.
En la actualidad los pueblos chaquenses son el producto de una reconfiguración permanente de su estructura social en
función de procesos de diversificación de su economía de subsistencia, relacionada históricamente al contexto socioeconómico y
político imperante del que participaron. Por esta razón cuentan con escasas oportunidades de ser integrados al mercado laboral en
el marco de una economía formal por no ser considerados como mano de obra calificada, principalmente para aquellos que
decidieron instalarse en medios rurales.
Por su parte las comunidades kollas ocupan las tierras altas de la Puna, los Valles Calchaquíes y parte de las Yungas. A
partir de migraciones permanentes iniciadas principalmente en tiempos de la ocupación Inca en el noroeste argentino (siglo XV),
reemplazaron a los antiguos grupos indígenas originarios de la zona andina (Atacamas, Omaguacas y Diaguitas). Hoy son grupos
aculturados y castellanizados que sin embargo mantienen muchas de sus prácticas culturales como la unidad de producción
familiar con autosuficiencia económica, la compleja red de parentesco, actividades de intercambio (trueque) y fiestas y rituales
comunitarios donde se produce un sincretismo con el culto católico. Practican principalmente actividades de pastoreo (cabras,
ovejas y llamas) y en segundo término la agricultura (papa, maíz, guisantes). Se encuentran muy articulados y adaptados a la
sociedad regional y nacional lo que les permite movilizarse e instalarse en centros urbanos y periurbanos con cierta facilidad
trabajando principalmente en actividades relacionadas al comercio informal y a la construcción. 8
Chorotes, Tobas, Tapietes, Chulupíes constituyen grupos chaquenses y bilingües considerados como minorías étnicas en
comparación con los descriptos anteriormente. La reconfiguración de nuevas organizaciones indígenas que se consideraban
mestizadas o asimiladas culturalmente como los pueblos Diaguita-calchaquí, Tastiles, Atacamas y Lules, reaparecen con una
identidad que se reconoce en el legado de sus antepasados.

Bibliografía
BIXIO Beatriz. 2001. Lenguas indígenas del centro y norte de la República Argentina. (Siglos XVII y XVIII) . En
Berberian, E.E. y Nielsen, A. (Edits.) Historia Argentina Prehispánica. Córdoba; p. 875 – 936
Modalidad EIB. Informe de Evaluación Social Salvaguarda de Pueblos Indígenas – Swap Salta. Año 2010.

7
Buliubasich y Rodriguez (2009).
8
Martínez Sarasola (2004).
3

Anda mungkin juga menyukai