UNIVERSIDAD NACIONAL DE ROSARIO

Facultad de Ciencias Exactas, Ingeniería

y Agrimensura

Escuela de Agrimensura

Organización de Tareas de Agrimensura

TRABAJO PRÁCTICO N° 4:

Charla del contador Edgardo Ferrer sobre

las obligaciones fiscales que tienen los
profesionales

Profesores de la Cátedra:
Beatriz JIMÉNEZ
Cristina CORREA

Alumna: Mora CASTELLANOS

Año 2015
 Trabajo Práctico N° 4:

“Charla del contador Edgardo Ferrer sobre las obligaciones fiscales que
tienen los profesionales”

1. PUNTO DE VISTA IMPOSITIVO

Desde el punto de vista impositivo el Agrimensor tiene obligaciones fiscales con la nación,
la provincia y eventualmente con la municipalidad.

1.1 OBLIGACIONES FISCALES CON LA NACIÓN

Hay dos caminos: Inscripción en el IVA y en el impuesto a las ganancias, o en el

monotributo.
Por lo general los profesionales, mientras pueden, se inscriben en el monotributo, porque
es un impuesto que simplifica las cuestiones impositivas. Pueden estar en el monotributo
los profesionales que facturan hasta $400.000 en el año. Si el profesional supera los
$400.000 tiene que inscribirse en el IVA (Impuesto al valor Agregado) y en el Impuesto a las
Ganancias. Es decir, el monotributo sustituye al IVA y al Impuesto a las Ganancias que son
mucho más complejos, simplificando el panorama impositivo.
La obligación básica del monotributista es pagar una cuota fija mensual.
Hay diferentes categorías y cada profesional es encasillado en una de ellas de acuerdo al
monto que facture anualmente y paga una cuota mensual según el tramo en el que se
encuentra.
Arranca en la categoría B desde $24.000 y va creciendo hasta la categoría más alta que es
hasta $400.000.
En las categorías más bajas hasta $144.000, la única obligación es pagar todos los menes.
En las categorías medias F y Q parece la obligación de presentar una declaración jurada
informativa cada 4 meses.
En las categorías altas el profesional tiene que hacer facturas electrónicas. Para ello cuenta
con un número de Cuit y una cave fiscal que le permiten hacer vía Internet toda clase de
trámites frente al Afip.
El monotributo además de obligar a: el pago de una cuota mensual
hacer una declaración jurada
realizar facturas electrónicas

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Obliga al profesional a revisar cada 4 meses el monto de su facturación para
recategorizarse, es decir, recalcular si está bien categorizado. Hay un procedimiento on-
line para cambiar de categoría.
El profesional emite facturas o recibos fiscales que para este tipo son de tipo C, normales
o electrónicas. Para disponer de comprobantes hay que entrar con cuit y clave fiscal al sitio
del Afip para pedir autorización para imprimir tantos comprobantes y e ir con eso al
imprentero (sirven por 120 días para los profesionales que recién se inician en la profesión).
En líneas generales conviene mucho más estar encuadrado dentro del monotributo y es
más económico.
Si no, el profesional tiene que inscribirse al IVA y en el Impuesto a las Ganancias. Si factura
más de $400.000 pesos en el año es obligatorio.
El IVA no impuesta mayormente al profesional si es monotributista, porque lo se lo cobra
al comitente y lo paga al Afip.
Si el profesional está inscripto al IVA, generalmente tiene gastos o compra servicios que
tienen IVA para el ejercicio de la profesión, eso se descuenta de lo que te paga el comitente
y la diferencia es lo que tiene que pagar al Afip todos los meses. Resumiendo, cuando
comprás algo que tiene IVA y sos monotributista lo absorbés, si estás inscripto en el IVA lo
descargás del IVA que facturas.
Sí trae problemas de tipo administrativo, requiere que el profesional conozca del tema, que
por lo general tiene que acudir a un contador o a alguien que lo auxilie en la materia.
Otro impuesto es el Impuesto a las Ganancias, mal llamado así porque no es sólo a las
ganancias, grava distintas clases de ingresos: rentas de propiedades, de negocios
financieros, del trabajo etc.
El problema de este impuesto es que es muy gravoso para el profesional independiente ya
que las deducciones legales que puede aplicar para pagar menos impuestos son mucho
menos que para el que está en relación de independencia.
Es un impuesto progresivo que en teoría es justo, cuanto más ganancias tenés mayor es la
tasa; pero como esa escala no se mueve, la mayoría de los profesionales está comprendido
en la tasa máxima y todos pagan mucho (porque el valor está congelado).
Impuesto sobre los Bienes Personales: Impuesto que grava los bienes que uno posee (no
todos: propiedades automóviles, cuenta corriente, bienes personales, bienes cuya
sumatoria de valores supere los $305.000). También es un impuesto progresivo, pero como
ocurre con el impuesto a las ganancias este valor también está congelado.

1.2 OBLIGACIONES CON EL FISCO PROVINCIA

Grava con ingresos brutos excepto si estás matriculado en el colegio profesional, que es
una entidad creada por el gobierno provincial que le delega el control profesional.

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Si el profesional está matriculado queda exento en ingresos brutos. Y mientras no ejerza la
profesión organizado como empresa.

1.3 OBLIGACIONES FISCALES MUNICIPALES

Derecho de registro de inspección sólo en el caso de que tengamos un local.

Es una tasa comunal que grava la existencia de locales, hay que inscribirse mandan un
inspector, te habilitan y cobran una tasa por eso.

2. CUESTIÓN DEL EJERCICIO PROFESIONAL

Se delega al colegio el control del ejercicio profesional (privado pero con función pública).
Una vez recibido, el profesional tiene el título de la universidad.
Para ejercer la profesión hay que habilitarlo matriculándose en los colegios profesionales:
te dan una identificación y vas a tener derechos y obligaciones (ej. participar de las
asambleas y en la elección de las autoridades).
La función del Colegio de Profesionales es de control: verificar que el ejercicio se haya
realizado de acuerdo a las normas y se hayan tributado los porcentajes correspondientes
al colegio y a las cajas de previsión social y jubilatoria.
En cuanto a los aportes: de acuerdo al trabajo realizado, el 25% del honorario se destina a
obligaciones fijas de las cuales el 7% va al Colegio de Profesionales de la Agrimensura, el
13% para los aportes jubilatorios y el 5% a la obra social asistencial (la cual es optativa
porque se puede contar con otra).
En función de la cantidad de aportes de trabajos que se ingresen por año se da una
categoría. Se promedian los últimos 30 años de aportes. La edad de jubilación es a los 65
años.

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 CONCLUSIÓN
Gracias a la charla del contador Edgardo Ferrer se conoce qué obligaciones tiene el Ing.
Agrimensor a nivel nacional, provincial y municipal y qué impuestos debe pagar.
Además se conoce cuáles son los pasos que debe seguir una vez recibido para poder ejercer
la profesión, cuáles son los aportes que debe realizar.

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