¿SOBREVIVIRÁ MI EMPLEO
A LA ERA DIGITAL?
DIEGO MOLANO: Hasta hace poco,
estudiar una carrera u oficio era
suficiente para entrar al mercado laboral
y permanecer en él hasta jubilar.
Incluso muchos de nuestros padres
tuvieron el mismo trabajo durante
décadas.
Sin embargo, hoy esa realidad se está
desvaneciendo de manera acelerada y,
con los avances en las tecnologías y la
entrada en la era digital, muchos nos
preguntamos: ¿sobrevivirá mi empleo en
la era digital?
*Cortinilla de presentación*
DIEGO MOLANO: En la década de los
90, Kodak tenía más de 145 mil
empleados, controlaba el 90% del
mercado de películas fotográficas en
Estados Unidos y era la fabricante del
85% de las cámaras que se vendían en
el país. Kodak -la empresa que
democratizó la fotografía, llevándola a
todas las personas-, declaró la
bancarrota en 2012 después de 124
años de vida.
Hoy, continúa intentando sobrevivir en el
mercado global de la imagen, pero solo
quedan 7 mil de los 145 mil trabajadores
que tenía hace 20 años.
¿Qué ocurrió con esos 138 mil
trabajadores que perdieron sus puestos
de trabajo?
“Nos estuvieron enseñando a poner uñas
y hacer peinados para que pudiéramos
poner un negocio. El objetivo es que
aprendiéramos a realizar otras cosas
que no sólo sean cámaras, porque ya no
se van a hacer en ningún lado”, dijo a El
Economista una de las últimas
trabajadoras en abandonar la planta de
Kodak en Jalisco, México.
Algunos estudios dicen que, en 20 años,
el 48% de los empleos serán
reemplazados por robots. ¿Son fiables
estas predicciones? ¿Se acabará el
empleo tal y como lo conocemos?
Conversamos con 3 expertos de la
región que tienen puntos de vista casi
diríamos opuestos. Veamos qué opinan
al respecto.
PACO RAGAGELES: Soy Paco
Ragageles, soy inventor y hace veinte
años inventé una cosa bastante
conocida que se llama Campus Party,
que es un evento de tecnología que
sucede en muchos países y que reúne a
la comunidad geek más grande del
planeta Tierra.
Paco Ragageles tiene una visión
pesimista sobre el futuro del empleo:
yo creo firmemente que en cuarenta o
cincuenta años no va a existir en el
planeta Tierra ni una sola cosa que una
máquina con software bueno pueda
hacer mejor que un ser humano, incluida
la creatividad. Por lo tanto, sí, se están
destruyendo empleos.
DIEGO MOLANO: …incluida la
creatividad… ¿se imaginan robots
capaces de escribir novelas?
Conozcamos a nuestra segunda
invitada:
JUANITA RODRIGUEZ-KATTAH: Yo
soy Juanita Rodríguez Kattah. Soy la
directora de Estándares de Arquitectura
TI del Ministerio TIC de Colombia.
DIEGO MOLANO: Juanita Rodriguez-
Kattah ve el futuro de forma muy
diferente a Paco:
JUANITA RODRIGUEZ-KATTAH: Pues
yo la verdad quisiera decirte que yo soy
muy optimista con este tema.
Evidentemente, la tecnología destruye
trabajos, pero en la misma medida, los
crea. Si nosotros hoy por hoy tenemos
una máquina que hace lo que hacen 50
personas, pues vamos a necesitar
también muchísimos programadores
para desarrollar el software que se
necesita para que esa máquina funcione.
Simplemente, hoy en día necesitamos
otro tipo de especialidades y tenemos
que prepararnos para eso.
DIEGO MOLANO: “La tecnología
destruye trabajos, pero en la misma
medida, los crea y tenemos que
prepararnos para esta realidad (…)”.
Veamos quién es y qué opina nuestro
tercer invitado, Raúl Katz.
RAUL KATZ: Yo trabajo en Columbia,
sobre todo en el área de investigación
con el Columbia Institute for Tele-
Information, que lidera el Innova, una
institución que hace investigación en dos
áreas económicas, política, jurídica,
sociales; sobre todas las tendencias que
están ocurriendo a nivel desde
telecomunicaciones a digitalización a la
nueva economía.
DIEGO MOLANO: Raul parece
encontrarse en el medio de las dos
visiones anteriores:
RAUL KATZ: Obviamente, hay ciertas
industrias, ciertos procesos que han sido
reemplazados por tecnología. El más
interesante, por ejemplo, la industria
automovilística, donde la densidad de
robots es muy alta con respecto al
número de empleados: alrededor, creo,
de 1.500 robots por 10.000 empleados
en la industria automovilística. Pero en
otras todavía eso no ha existido. O sea
que ahí estamos hablando de una
especulación sobre lo que puede llegar a
ocurrir.
DIEGO MOLANO: ¿Los empleos
dejarán de existir tal y como los
conocemos? ¿Se crearán nuevas
necesidades para crear la era digital o
todavía estamos especulando sobre el
futuro? Conozcamos un poco más sobre
las tres visiones de nuestros expertos.
Le preguntamos a Paco Ragageles si
piensa que fenómenos como el de Kodak
o más actuales, como Apple, que acabó
con el negocio tradicional de la música, o
de Uber, que está cambiando el
transporte en las ciudades; son
fenómenos puntuales o un común
denominador de la era digital:
PACO RAGAGELES: Yo creo que
estamos asistiendo a una revolución
distinta a las anteriores. Hasta ahora,
siempre, los avances de la tecnología -
cuando empezó la revolución industrial-
traían nuevas profesiones a las que los
humanos nos desplazábamos.
Dejábamos de estar en el campo,
arándolo, para ser conductor de tractor.
Lo que está sucediendo ahora es que sí,
la nueva tecnología está trayendo
nuevas profesiones; pero el avance de la
tecnología es tan rápido que es capaz de
llegar incluso a las profesiones más
avanzadas y que en los próximos años
vamos a ver que eso va a avanzar
todavía más, hasta llegar al punto en el
que yo creo firmemente que en cuarenta
o cincuenta años no va a existir en el
planeta Tierra ni una sola cosa que una
máquina con software bueno pueda
hacer mejor que un ser humano, incluida
la creatividad. Por lo tanto, sí, se están
destruyendo empleos. Lo que hay que
decir es que los nuevos que llegan
también van a poder ser hechos por
máquinas.
DIEGO MOLANO: Frente a este futuro
un tanto deshumanizado, Juanita
Rodriguez-Kattah piensa que las
revoluciones industriales anteriores
tienen algo que enseñarnos:
JUANITA RODRIGUEZ-KATTAH: Ya
en algún momento en la Revolución
Industrial, pues, había personas que
hacían los trabajos artesanales y los
empezó a reemplazar una máquina que
empezó a hacer la cosa de una manera,
digamos así, furriana, y se destruyeron
algunos empleos y empezamos a
generar otros.
DIEGO MOLANO: Es decir, según la
visión de Juanita, en esta Cuarta
Revolución Industrial se producirán
cambios similares a los ocurridos en las
revoluciones anteriores, donde se
destruía empleo, pero también se
creaban nuevos trabajos:
JUANITA RODRIGUEZ-KATTAH: Hoy
por hoy, yo creo que pasaría
exactamente lo mismo y estamos en el
momento en que si vamos a empezar a
pensar en que el tema de la robótica va
a ser lo más importante y todo lo van a
hacer robots, pues necesitamos
personas que sepan hacer robots, que
sepan programarlos, que sean, por
ejemplo, los ingenieros que tienen
perfectamente claro cómo hacer; y los
técnicos que sepan cómo mantener
también un robot.
DIEGO MOLANO: Pero no sabemos
cuáles van a ser esos nuevos empleos.
Entonces, ¿cómo vamos a preparar a la
gente, si tenemos incertidumbre total de
cuáles empleos van a ser? ¿Cómo
hacemos para preparar a esa mano de
obra para el futuro, para un futuro
totalmente incierto?
JUANITA RODRIGUEZ-KATTAH: Eso
puede ser un poco cierto, digamos que
ahora los cambios se dan de una manera
exponencial, es mucho más rápido; pero
es un hecho que la manera que yo
creería que toca hacerlo es estar cada
vez más cerca de la industria, entender
qué está pasando y tratar de estar a la
vanguardia del estado del arte en cada
uno de los temas. Por eso es que ahora
es tan importante tener unas
certificaciones, por ejemplo, de
desarrollo, y no especialmente las
carreras, o también ir cambiando, tener
un poco más de flexibilidad para ir
cambiando los syllabus de las carreras
tradicionales para que le peguen a la
necesidad de la industria. Aquí, es ver
totalmente claro que a mí no me sirve
para nada un ingeniero de cinco años de
carrera si el personaje sale y no está
realmente especializado en lo que está
necesitando la industria que puede ser a
veces algo que puede requerir con
solamente dos años de estudio.
DIEGO MOLANO: Al parecer, la clave
actual para adaptarnos a los cambios a
medio plazo está en la educación:
PACO RAGAGELES: A corto plazo,
tenemos que mandar a los niños a la
escuela a intentar aprender las
profesiones que más tarde van a
desaparecer. Hay algunas páginas web,
como, por ejemplo,
willrobotstakemyjob.com, que es muy
interesante. Otra de la BBC donde tú
pones el puesto de trabajo que quieres
tener y que te dice cuándo va a
desaparecer ese puesto de trabajo. Por
lo tanto, ir a estudiar cosas que tengan
sentido.
DIEGO MOLANO: Volvamos un poco
atrás para entender de mejor manera
desde dónde vienen estas
transformaciones. Escuchemos a Raul
Katz:
RAUL KATZ: Mi análisis, mi posición;
está un poco en la mitad, sobre todo
basado en lo que podemos presumir
hasta ahora sobre los avances que están
ocurriendo. En primer lugar, yo pienso
que cuando uno habla de nueva
economía o digitalización hay que
diferenciar lo que yo denomino “olas”:
porque no hay una ola única de
digitalización, sino que hay -a mi
entender- tres: la primera que se inicia
con la informática clásica, la banda
ancha, las telecomunicaciones móviles;
la segunda que comienza con el
desarrollo del Internet y,
fundamentalmente, computación en la
nube; y la tercera que tienen las
tecnologías a las que tú te refieres, como
pueden ser la robótica, la inteligencia
artificial, machine learning, Big data.
DIEGO MOLANO: Raul piensa que los
efectos sobre el empleo están recién
comenzando a aparecer en algunos
países desarrollados, pero que esos
efectos todavía no han tocado a América
Latina y el Caribe.
Pero, ¿qué dicen las investigaciones
respecto a la generación o pérdida de
empleo con la llegada de la tecnología?
RAUL KATZ: Nuestra investigación
muestra que por cada 1% de incremento
en el índice de digitalización, la tasa de
desempleo se reduce en 0,07%. O sea
que eso lo vemos en series históricas,
mirando hacia atrás. ¿Ha habido
destrucción de empleo en esa primera
ola? Sí, pero lo ha habido en industrias
que eran principalmente de mano de
obra intensiva; por ejemplo, la industria
del turismo, la industria de la
restauración, donde la tecnología tenía
un papel importante que jugar en el
aumento de la productividad. Pero, en
términos genéricos, cuando uno lo mira
de forma agregada, esa primera ola de
digitalización creó empleo.
DIEGO MOLANO: Eso pasó en la
primera ola de la que habla Raul, cuando
llegó la banda ancha y las
comunicaciones móviles. Pero, ¿ocurrió
lo mismo en la segunda y tercera ola?
RAUL KATZ: Ahí, la visión y la
investigación muestran que el impacto
ha sido menos importante en creación de
empleo que en la ola anterior, pero, aun
así, la creación de empleo ha existido.
¿En qué áreas lo vemos? En todo lo que
son las industrias digitales, en todo lo
que es el empleo indirecto en las
plataformas de Internet.
O sea que, desde un punto de vista de
creación de empleo, la segunda ola de
digitalización ha creado empleo. ¿Ha
habido destrucción de empleo? Seguro.
¿En dónde existe eso? Sobre todo,
digamos, en las categorías de
ocupaciones de menor calificación; es
decir, los empleos de menor categoría,
ocupaciones mucho más rutinarias, y
esto en general lo vemos en los países
industrializados.
DIEGO MOLANO: Un tema importante a
tener en cuenta es el empleo indirecto
que generan las industrias online:
RAUL KATZ: Para darles un ejemplo,
ustedes conocerán en América Latina
MercadoLibre como plataforma de
comercio electrónico que en sí tiene
2.100 empleados. Bueno, hay alrededor
de 150.000 individuos que dependen de
esa plataforma para ofrecer sus bienes.
Eso lo consideramos un impacto
indirecto del empleo.
DIEGO MOLANO: Resumiendo: la
primera y segunda ola crearon empleo
en términos absolutos. Pero, ¿qué va a
ocurrir en esta tercera ola? ¿Nos
reemplazarán los robots?
RAUL KATZ: Tanto la investigación en
países desarrollados como obviamente
lo que estamos viendo en América
Latina, estamos hablando de lo que yo
denomino forecasting; o sea,
investigación especulativa.
DIEGO MOLANO: Es decir,
básicamente no sabemos con certeza
qué es lo que va a ocurrir en el futuro
cercano.
RAUL KATZ: Ahí se plantea que hay dos
posiciones, que en realidad esas
visiones apocalípticas del 48% del
empleo desapareciendo quizás todavía
no están sustentadas por el análisis real
por lo que va a ocurrir.
DIEGO MOLANO: De acuerdo. Todavía
no tenemos información que nos permita
predecir con total seguridad el futuro.
Pero centrémonos en América Latina y el
Caribe:
RAUL KATZ: ¿Qué va a ocurrir en
América Latina? Es decir, ¿hasta qué
punto el impacto va a ocurrir y cuánto
tiempo va a requerir para que este
impacto ocurra? Y ahí, el tema es
bastante serio porque en realidad,
todavía -como yo estaba diciendo
anteriormente- tenemos un rezago en el
sector productivo latinoamericano en la
asimilación de tecnología; entonces,
cuando estamos hablando de la última
tecnología, las tecnologías avanzadas,
robótica, inteligencia artificial y demás,
puede haber un rezago aún mucho
mayor.
DIEGO MOLANO: Otro punto importante
a considerar es de dónde estamos
obteniendo información respecto a la
posición que tiene nuestra región
actualmente.
JUANITA RODRIGUEZ-KATTAH: Yo
muchas veces veo los datos con los que
nos estamos midiendo en Latinoamérica
y en el Caribe; y yo misma no entiendo
dónde están saliendo los datos que se
supone que nosotros mismos
deberíamos ser la fuente. Y cuando nos
damos cuenta que esos datos no están
bien formulados. Entonces yo creo que
en el tema de entender cómo está la
economía digital y de medirnos bien es
un esfuerzo grande, grande; que
tenemos que hacer.
DIEGO MOLANO: Juanita Rodriguez-
Kattah aboga por el desarrollo de
observatorios locales que den
información confiable sobre las
necesidades de nuestros países:
JUANITA RODRIGUEZ-KATTAH:
Nosotros acá tenemos perfectamente
claro que a 2018 tenemos una brecha de
talento TI de 53.000 profesionales
desarrolladores y estamos haciendo
todo un esfuerzo para lograr tener por lo
menos 25.000 de éstos para 2018.
DIEGO MOLANO: Entonces, cabe
preguntarse: ¿hay algo que sepamos
con certeza respecto a la posición de
América Latina y el Caribe frente a la
transformación digital? Nuevamente,
Raul Katz:
RAUL KATZ: Estamos rezagados en la
región en lo que respecta a, no a
adquisición de tecnología en empresas,
sino a cómo las empresas están
aplicando esa tecnología en los procesos
productivos: canales de
aprovisionamiento, canales de
distribución, industrias de manufactura.
Todavía no lo hemos asimilado. Y, por lo
tanto, los efectos que se han registrado
en países industrializados de
desaparición de empleo, no los vemos
todavía en América Latina, el reemplazo
de capital trabajo.
…el tema es bastante serio porque, en
realidad, todavía, como yo estaba
diciendo anteriormente, tenemos un
rezago en el sector productivo
latinoamericano en la asimilación de
tecnología; entonces, cuando estamos
hablando de la última tecnología, las
tecnologías avanzadas, robótica,
inteligencia artificial y demás, puede
haber un rezago aún mucho mayor.
DIEGO MOLANO: Es decir: si bien nos
faltan datos fiables que nos permitan
predecir con mayor certeza qué ocurrirá
en la región, sabemos que tenemos un
rezago importante en la adopción de las
nuevas tecnologías.
Volvamos a la visión pesimista sobre el
empleo. ¿Qué soluciones podrían
implementarse en un supuesto futuro
donde el empleo ya no exista?
PACO RAGAGELES: Si no somos
conscientes, va a llegar un punto… -y no
se hace nada por evitar lo que va a
pasar-, entraremos en un modo de
colapso social. Por lo tanto, una de
nuestras misiones desde Campus Party,
lo que estamos intentando ver, es alertar
de que hay que proceder a cambios
como, por ejemplo, la introducción del
salario universal. Es algo como la
medida inmediata imprescindible.
DIEGO MOLANO: El salario universal es
un proyecto que se está poniendo a
prueba en Finlandia y en Barcelona; y
consiste en entregar una cantidad fija
cada mes a una muestra de población.
Esa cantidad les permite pagar los
servicios, alojamiento y necesidades
básicas. Las pruebas están en plena
ejecución y todavía necesitaremos un
par de años para obtener resultados
confiables.
Pero, el salario mínimo hay que
financiarlo de alguna forma. Paco
Ragageles nuevamente:
PACO RAGAGELES: Hay que hacer
que las empresas que tienen extra-
beneficios paguen por ello y no hagan
ingeniería fiscal y no paguen impuestos.
PACO RAGAGELES: Hay que
conseguir que esas compañías que
están obteniendo extra-beneficios
gracias a que la tecnología les permite
tener un bajo coste salarial, ese extra-
beneficio de alguna manera debe ser
redistribuido entre las personas que
nunca más van a poder conseguir tener
un trabajo.
DIEGO MOLANO: Pero, ¿qué ocurre si
las empresas quieren localizarse en
países con bajos impuestos?
PACO RAGAGELES: Hay que
explicarles a esas compañías que el
modelo tiene que cambiar y tienen que
pagar impuestos felices y con una
sonrisa porque gracias a que pagan ese
impuesto, ese dinero se distribuye y
tienen clientes. Y vuelve a entrar el
dinero en la caja y la rueda sigue
girando.
DIEGO MOLANO: La introducción del
salario universal es una propuesta que
puede sonar radical y que tiene adeptos
y detractores. Juanita Rodriguez-Kattah
piensa lo siguiente:
JUANITA RODRIGUEZ-KATTAH: La
idea del salario es interesante, pero yo
creo que sería bueno pilotearlo un
poquito más, porque hay mucha gente,
como lo que están haciendo en
Finlandia… pilotearla, porque hay mucha
gente que, al contrario, dice: "Mire, esto
es volver a la gente un poco vaga. Si
tiene su salario garantizado, pues, ¿por
qué va a seguir creando valor en
realidad?". Hay otros que, al contrario,
dicen que ese tiempo libre adicional, lo
que va a crear es un nuevo filón de la
economía mucho más fuerte en temas
de ocio y en temas turísticos; por ejemplo
-y ahí va muy de la mano el tema ocio
con la necesidad de aún más
desarrolladores porque entramos en
todo el filón de industrias creativas con el
tema de los videojuegos- el tema de las
animaciones; entonces, podría ser, al
contrario: algo que fortalezca más la
industria.
DIEGO MOLANO: Desde luego tenemos
mucho que pensar respecto a lo que nos
espera en el futuro. Una de las ideas que
pasan por la mente es: “Si todo se ve tan
incierto, entonces quedémonos tal y
como estamos”. ¿Tenemos esa opción?
Raul Katz nos responde:
RAUL KATZ: La respuesta a esa
pregunta es que no; no nos lo podemos
permitir. El tema de competitividad a
nivel internacional es tal, que a nosotros,
si no empujamos este avance
tecnológico, si no incorporamos esta
tercera ola de digitalización en nuestros
procesos productivos y si no
completamos la digitalización en los
primeros procesos, tenemos el riesgo de,
obviamente, aumentar la falta de
competitividad a nivel internacional y, un
factor que me preocupa aún más, es que
si los países industrializados están
incrementando aún más su digitalización
en robótica, en inteligencia artificial, sus
costos de producción pueden llegar a ser
y van a llegar a ser mucho más bajos que
los que tenemos en América Latina con
nuestros costos de mano de obra y, por
tanto, muchas empresas van a comenzar
a repatriar su producción de los países
en vías de desarrollo, inclusive América
Latina, a los países desarrollados, y ahí
vamos a perder no solamente una
posición comparativa a nivel del
comercio internacional, sino que lo
vamos a perder en términos de creación
de empleo, radicación de industrias.
DIEGO MOLANO: No podemos
quedarnos atrás. Esta es,
probablemente, la única certeza con la
que contamos hoy. La transformación
digital no es una opción para América
Latina y el Caribe, como no lo es para
ninguna región del mundo. Pero,
entonces, ¿qué deberían hacer los
países de nuestra región para
aprovechar de mejor manera las nuevas
tecnologías y entrar con éxito en la era
digital? Escuchemos a Raul Katz:
RAUL KATZ: Crear más centros de
innovación. Toda la investigación
muestra que todas estas tecnologías que
usted está mencionando tienden a
desarrollarse en ciudades; porque los
costes de coordinación entre capital,
mano de obra e innovación existen en la
ciudad. Y en ese sentido, vamos a tener
que trabajar más en la creación y
desarrollo de polos de innovación
alrededor de las ciudades
latinoamericanas para crear una
capacidad de creación de nuevas
empresas, de nuevos emprendimientos
que puedan ser aplicados al sector
productivo más importante.
DIEGO MOLANO: Polos de innovación
para la creación de nuevas empresas.
¿Cómo podría llevarse a cabo esta
tarea? Juanita Rodriguez-Kattah piensa
lo siguiente:
JUANITA RODRIGUEZ-KATTAH: Yo
creo que los gobiernos definitivamente
deben estar un poco más cercanos de la
industria y a lo que está pasando.
Empezar a hablar más con el sector real
para entender cómo realmente hacer sus
políticas que vayan más acorde con esto.
Entonces, lo que tenemos que hacer
definitivamente es tener una política
pública que vaya de la mano de industria
y de academia. Una academia además
un poquito distinta. Una academia que
no esté pensando en una investigación,
digamos, básica, muy lejana, sino en
temas aplicados, pero siempre tratando
de estar en la frontera del conocimiento
DIEGO MOLANO: En resumen: los
gobiernos de América Latina y el Caribe
deben aceptar que la transformación
digital no es una opción, preparar a los
ciudadanos para los nuevos empleos en
el corto plazo y establecer un sistema de
comunicación mucho más eficiente con
la industria y la academia. Si no lo
hacemos, perderemos competitividad. Si
hacemos este esfuerzo y nos
comprometemos a ello, tal vez no
tengamos que vivir un fin de era y
nuestros empleos podrán sobrevivir a la
era digital.
Mil gracias por su escucharnos. Soy
Diego Molano y este ha sido el podcast
“Preparando la transformación digital”.