Conclusiones sobre la observación de los textos ejemplares

Estela Mattioli - Analía Demarchi

A partir del análisis sobre qué y cómo expresan los ejemplares de Química y Matemática los
contenidos disciplinares, podemos afirmar que cada uno propone un desarrollo informativo peculiar en
función de lo que sus autores deciden transmitir a través de ellos. Ambos responden a ciertas convenciones
de formato y pasan por alto otras, por diferentes razones que seguramente están justificadas en la cultura
expresiva de cada campo del conocimiento y en los resultados que en cada caso buscan obtener de su
audiencia.

Reconociendo esa flexibilidad evidenciada por estos ejemplares, que, por otro lado, es una
característica de la mayoría de los escritos académicos, cabe preguntarse
¿resulta útil conocer las formas canónicas del discurso de la ciencia?, ¿qué utilidad conlleva identificar la
forma concreta que cada texto adopta, en coincidencia o no con esas normas? En definitiva, ¿vale la pena
realizar contrastaciones entre las “convenciones escriturarias” y “la realidad textual” cada vez que los
docentes proponen que sus alumnos lean para aprender un determinado tema en la universidad?

La respuesta sin dudas es afirmativa, ya que los resultados obtenidos de esta tarea, aunque parezca
compleja, se hace indispensable para que el lector-estudiante pueda “pilotear” el proceso interpretativo e ir
tomando decisiones, como puede ser buscar información complementaria a través de otras fuentes,
agudizar el pensamiento crítico respeto de lo que el texto va planteando, en definitiva, adecuarse a la lógica
informativa que el autor nos propone, lo cual es factible de concretar si somos conscientes de los “deslices”
por los que muchas veces el experto transita, de manera más o menos intencional.