Ingredientes
Azúcar 1 taza
Glacé (opcional)
Preparación
Hervir la calabaza (lo hice con anticipación para usarla fría). Yo la cociné al microondas, cortando la
calabaza pelada en cubos, con un poquito de agua en una pyrex y la tapé con un plato: de esta forma se
conserva más el gusto de la calabaza no absorbiendo tanta agua. Una vez fría, tiré el agua usada y la
producida por condensación, e hice un puré con el pisapapas.
Encender el horno a 180°C. Elegir el molde que puede ser una budinera de aro, rectangular o lo que gustes
o la cacerola Essen. Aceitarla y enharinarla.
Mezclar en un bol la calabaza, el azúcar y el aceite hasta homogeneizar. Agregar la ralladura de naranja y el
jugo.De a poco ir agregando la harina, mezclando cada vez, hasta obtener una masa bastante consistente.
Volcar sobre el molde, acomodar bien con el revés de una cuchara y cocinar en el horno (o en la cacerola
essen) hasta que esté doradita y se desprenda del borde del molde.
Desmoldar y decorar en caliente opcionalmente con un glacé preparado con azúcar impalpable al que se le
va agregando el jugo de naranja de a gotitas hasta obtener la consistencia deseada, para echar sobre la
torta: le queda muy bien!
Preparación:
Colocar en un recipiente que pueda ir al fuego las zanahorias, el azúcar, el jugo de naranja y su cáscara
rallada.
Cocina hasta que se espese (que no se te pase para que no se caramelice) hasta una consistencia que
puedas tomar con una cucharita y te quede en la misma.
Dejar que baje la temperatura para que puedas moldearla en tus manos, formando una bolita o la forma
que quieras.
Colocar en pirotines de papel, envolverlos en celofán, o simplemente colocar en un frasco para conservar.
Ahora cogemos los huevos y los echamos a un bol grande en donde los batiremos manualmente e iremos
añadiendo los 200 gr de azúcar poco a poco mezclando bien y viendo como coge volumen y homogeneidad
la mezcla. Truco ahorra tiempo: pon ya el horno a precalentar a 180º-200º (o cuando te queden 5-10
minutos).
Turno de la harina y la levadura. A la anterior mezcla de huevos y azúcar le iremos añadiendo la harina
tamizándola (pasarla por un colador para evitar grumos) poco a poco mezclando bien con todo y añadiendo
también la levadura en polvo. Después de esto, añadir el aceite, la canela (si gusta) y si se quiere un pizca
de sal (para que se conserve más tiempo). Es normal si la mezcla es algo densa, con la calabaza se volverá
más maleable.
Te toca amiga calabaza: añadir ahora la calabaza rallada/triturada que hemos reservado. Mezclar todo muy
bien y voilá, ya tenemos nuestra mezcla. Ahora coger el molde (recomiendo este) que vayamos a usar (a mi
me encanta este por lo fácil de desmontar y limpiar) y úntalo con un poco de mantequilla si es metálico o
cúbrelo con papel de horno. A continuación vierte la mezcla.
Con el horno precalentado mete el molde con la mezcla 30 minutos a unos 180º mientras que te lees las
propiedades y trucos de abajo de esta receta jaja. Como no todos los hornos son iguales, ir echandole un
ojo al bizcocho cuando quede poco. Para saber si está clavar un palillo o cuchillo en el bizcocho y si sale
húmedo o con restos de masa le quede un poco (si sale limpio o seco está perfecto).
Ya tienes tu bizcocho de calabaza listo y delicioso para comer, aunque mejor esperar que se enfríe para
desmoldar y comer.
Ingredientes:
250 gramos de calabaza. Lo ideal usar calabaza asada al horno. 200 gramos de harina
200 gramos de azúcar moreno
Un sobrecito de levadura
3 huevos
La calabaza que vamos a usar en nuestro bizcocho tiene que estar previamente asada, también podemos
cortarla en trozos y hervirla, pero el sabor que le da el horno es mucho más intenso.
Mientras la calabaza se va haciendo (mejor si la teníamos hecha de antes) echamos en un bol la harina y el
sobre de levadura y lo mezclamos bien. Lo dejamos aparte por el momento.
En otro recipiente nos ponemos a batir los huevos y vamos a añadir en este orden el azúcar y el aceite,
mientras seguimos batiendo. Cuando la calabaza esté asada y haya dejado de estar muy caliente la
echamos junto al resto de los ingredientes.
Ahora es cuando añadimos el bol con la harina y la levadura y lo mezclamos todo bien hasta conseguir una
masa homogénea.
Volcamos el contenido en nuestro molde para bizcochos y agregamos el puñado de nueces, así evitamos
que se vayan todas hacia el fondo. Si algunas sobresalen por encima de la masa empújalas levemente para
que se hundan.
Por último, horneamos durante aproximadamente 35-40 minutos a 180º. Para comprobar que nuestro
bizcocho de calabaza y nueces está hecho solo tenemos que pincharlo con un palito de madera o un
cuchillo fino. Si cuando lo sacamos está limpio es que está a punto.
Recuerda que es muy importante que el horno guarde el calor para que nuestro bizcocho se cocine bien,
por lo que te aconsejo que no estés abriendo la puerta constantemente para comprobar si está hecho, es
más, durante la primera media hora no deberías ni tocarlo.
Ingredientes
250 gramos de calabaza cocida o asada (sustituir una parte de los gramos de calabaza si se quiere con
zanahoria)
2 huevos
1 naranja
También te puede interesar como hacer un rico, sano y diferente bizcocho de chocolate y calabaza
Si no usas un molde con forma como yo puedes adornarlo con una costra formada con:
Encendemos el horno a 170 grados para que se vaya calentando. En un bol vamos a poner la harina junto a
la levadura, las avellanas molidas y las cucharadas de canela y nuez moscada. Si vamos a usar jengibre lo
añadimos también en este momento. Lo filtramos todo con ayuda de un tamiz para que no queden grumos.
A continuación vamos a aprovechar al máximo la naranja, rallando su piel y sacándole todo el zumo. Con
unas varillas (mejor sin son eléctricas) batimos los huevos hasta que queden a punto de nieve. Añadimos el
azúcar, la naranja, la calabaza, el yogurt y el aceite y lo batimos todo hasta conseguir que no queden
grumos.
Incorporamos esta mezcla al recipiente donde teníamos la harina. Volvemos a remover. Ahora vamos a
coger la mitad de nuestra masa y a meterla en el horno 10 minutos. Cuando esté lista la sacamos y
extendemos sobre ella la mermelada de naranja con la ayuda de una cuchara. A continuación, ponemos el
resto de la masa cruda encima y le añadimos azúcar y canela espolvoreadas para que forme una costra.
Lo metemos en el horno y lo cocinamos durante 40 minutos, para que no nos quede crudo por dentro.
Pasado ese tiempo abrimos la puerta y lo pinchamos con un palito para comprobar que está en su punto.
Tiempo:
4 huevos medianos
Nota: si no vas a utilizar leche y anís, puedes bajar la cantidad de harina para que quede más húmedo. Si te
gusta dulce, usa 200gr de azúcar y no 100. Si lo quieres más esponjoso hecha 1-2 huevos más o usa 4 XL.
Como siempre, lo primero que tenemos que hacer es precalentar el horno. Así la temperatura estará a
punto para cuando terminemos las preparaciones.
Manos a la obra.
Tenemos que cocer la calabaza y las zanahorias. Para ello vamos a poner en el fuego una olla con un poco
de agua, cuando empiece a hervir añadimos estos ingredientes y los dejamos durante unos 10 o 15 minutos
a fuego medio hasta que estén blandos. Escurrimos bien la calabaza y la zanahoria y trituramos con la
ayuda de una batidora hasta que nos quede un puré.
El siguiente paso es añadir a nuestro puré la leche, lo huevos y el azúcar. Mientras hacemos esto no
dejamos de batir en ningún momento. Agregamos el anís y cuando la masa empiece a trabajarse bien
incorporamos la harina y la levadura. Sigue batiendo y pon especial atención a que no queden grumos.
Vamos a reservar nuestra mezcla. Mientras tanto comenzamos a preparar el molde, lo engrasamos con
mantequilla y lo espolvoreamos con harina, con esto conseguiremos que nuestro bizcocho de calabaza y
zanahoria no se quede pegado a la superficie.
Una vez colocada la masa en el molde lo introducimos en el horno a unos 180 grados durante un tiempo no
inferior a 30-35 minutos. Para comprobar si nuestro bizcocho está listo solo tenemos que pinchar su
interior con un palo, si sale limpio es que ya está hecho.
Ahora solo queda esperar a que se enfríe un poco ¡y a disfrutar! Esperamos que te haya gustado nuestra
receta de bizcocho de calabaza y zanahoria, sana, rica y fácil. ¡Compártela con quien más quieres!
Buñuelos de calabaza
En esta entrada te vamos a enseñar cómo se prepara uno de los postres más conocidos en todo el mundo.
Se trata de una deliciosa receta de buñuelos de calabaza que se deshacen en la boca, perfectos para
desayunos y meriendas acompañados de un vaso de leche o una taza de café. Y son tan fáciles y rápidos de
hacer que en poco tiempo se convertirán en una de tus recetas favoritas. ¿Te animas? ¡Pues vamos a la
cocina!
Ingredientes
Dos huevos.
125 gramos de harina. Si se quieren sin gluten, usar harina no de trigo (y un poco más de aceite de oliva
pues estas harinas son más secas)
Media cucharada pequeña de levadura química (o levadura sin gluten apta para celiacos si es el caso, como
levadura fresca)
25 gramos de azúcar.
Un pellizco de sal.
Aceite de oliva.
Comenzamos la preparación pelando la calabaza y quitándole las semillas. Recuerda que estas semillas
tienen un montón de propiedades beneficiosas, por lo que te aconsejamos que las guardes para otra
receta.
Una vez limpia, partimos la calabaza en trozos y la echamos en una olla con agua. Cocinamos durante unos
minutos hasta que esté blanda, la retiramos del fuego y escurrimos. No tires esta agua, ya que nos hará
falta más adelante.
En un vaso de licuadora o batidora echamos la calabaza cocida y trituramos durante unos segundos hasta
obtener una crema uniforme y sin grumos.
Separamos las yemas de las claras y las montamos a punto de nieve. Reservamos.
Tamizamos la harina para que quede más lisa y la echamos en un bol. Hacemos un pequeño volcán con las
manos y en el centro colocamos las yemas, el azúcar, la levadura y la piel de naranja que hemos rallado
previamente.
Ahora llega el turno de trabajar la masa para que nuestros buñuelos adquieran la textura perfecta. Para
facilitar la tarea, puedes añadir un chorrito del agua donde cocinamos la calabaza. El resultado debe ser
ligero pero con la suficiente consistencia.
Incorporamos el puré de calabaza a la masa y seguimos mezclando hasta que no queden tropezones, ya
que estropearían el resultado final. Este último paso se puede hacer con la batidora o directamente a
mano.
Finalmente, agregamos las claras a punto de nieve y con mucha suavidad la vamos incorporando al resto de
ingredientes.
La masa de los buñuelos ya está lista. Ahora hay que freírlos. Para ello, echamos una buena cantidad de
aceite de oliva en la sartén y la ponemos en el fuego. Nota: si se desea, pueden no freirse y hacerlo al
horno. En ese caso, nuestros buñuelos de calabaza al horno se hacen colocando la masa en papel de horno
precalentado 10 min y por unos 10-12 minutos a 190º hasta que estén doraditos.
Con ayuda de una cuchara cogemos pedacitos de la masa y le damos forma redondeada. Presionamos con
un dedo para hacerle un agujero en el centro, que es la forma típica de los buñuelos y que se asemeja a los
donuts. También se llama a esto boladillos.
Cuando el aceite esté muy caliente echamos los buñuelos y freímos hasta que estén dorados y crujientes.
Puede que sea necesario darles la vuelta.
Por último, los colocamos en un plato y espolvoreamos con azúcar por encima. Ya hemos acabado nuestros
exquisitos Buñuelos de calabaza, un postre tradicional que puedes disfrutar en Navidad o cualquier otra
época del año. ¡Buen provecho!
La calabaza tiene un sabor neutro que combina a la perfección con platos tanto dulces como salados y su
textura fina es ideal para todo tipo de pastas y cremas. Además, es un alimento muy nutritivo que destaca
por su alto aporte de fibra y su capacidad para fortalecer el sistema inmunológico. Está compuesta casi en
su totalidad por agua, por lo que apenas engorda y es perfecta para dietas sanas y equilibradas.
No solo eso. La calabaza favorece los procesos intestinales, previene el estreñimiento, evita la retención de
líquidos, impulsa la producción de glóbulos rojos y es un poderoso antioxidante. También posee carotenos
que le proporcionan ese color característico y ayudan a la regeneración de las células. Es diurética y limpia
las sustancias tóxicas que con el paso del tiempo se acumulan en el organismo.
Los buñuelos son típicos de la cocina mediterránea y también eran conocidos por las culturas
mesoamericanas. En la actualidad son unos dulces que pueden disfrutarse en casi cualquier lugar del
planeta y en algunos países como España, Colombia, México o Ecuador tienen un lugar destacado en la
cena de Navidad.
Ingredientes
1 huevo.
Nuez moscada.
Opcional: azúcar o edulcorante al gusto. Otra opción es no añadirle nada y luego servir con nata o helado.
Luego picar la calabaza en cubos y ponerla en una olla o cazo con agua y sal. Se deja cocinar durante 10
minutos o hasta que quede tierna. Una vez lista, se escurre y se tritura con un tenedor para obtener un
puré, es necesario dejar que se enfríe por completo.
Cuando la calabaza esté a temperatura ambiente, se mezcla con ¾ del queso rallado, todo el queso crema y
el huevo, también se puede condimentar con un poco de sal y pimienta, incluso en este punto se puede
añadir la nuez moscada.
Una vez lista toda la mezcla se vierte sobre el disco y se cubre con el resto del queso rallado.
Llevar al horno durante un lapso de 40 minutos, la masa debe quedar dorada y el relleno con consistencia
firme.
Cuando se retire la tarta del molde, es importante dejarla reposar para servir. Cualquier momento es
perfecto para disfrutar de la tarta, puede ser como postre luego del almuerzo o a media tarde en compañía
de un café, té o infusión.
Pan de calabaza
El pan suele ser uno de los alimentos más apreciados, en esta ocasión queremos explicar cómo prepararlo
en una de sus versiones más saludables, se trata del pan de calabaza. Se caracteriza por una masa ligera y
suave, la cual es nutritiva, además, su elaboración es bastante sencilla. Además, como hemos dicho, las
propiedades de la calabaza cocida son muy interesantes.
Ingredientes
500 gramos de calabaza. Si la has comprado entera, puedes conservar para comer luego las semillas de
calabaza del interior.
2 cucharadas de sal.
Poner a hervir agua con un poco de sal, una vez comience la ebullición agregar la calabaza picada y dejar
cocinar durante 20 minutos con el fuego bajo, se debe dejar hasta que quede blanda. Una vez lista se
escurre y se reserva el agua.
Seguidamente triturar la calabaza, puede ser con un tenedor, machacador de cocina o de forma más
práctica con una batidora eléctrica, el objetivo es obtener un puré que se debe dejar enfriar.
A continuación mezclar la levadura con 60 ml del agua utilizada para la cocción, se deja reposar durante 5
minutos hasta que se disuelva, cuando esto haya ocurrido añadir la miel y revolver.
En un recipiente mezclar la harina y la sal, cuando estén mezcladas, hacer un agujero en el centro, agregar
allí el agua con la levadura seguida de la calabaza.
Poco a poco se debe ir mezclando todo, el resultado debe ser una masa espesa y pegajosa.
Ya con la masa lista, se pone sobre una superficie lisa y cubierta de harina, se amasa alrededor de 10
minutos o hasta que la masa se torne homogénea y elástica.
Luego, ponerla en un recipiente y taparla con papel film o en su defecto un paño de cocina. Es necesario
dejarla reposar durante 1 hora y media para que aumente su tamaño. Luego de este tiempo, amasar otros
minutos y darle una forma circular. Si se desean hacer panecillos o bollos de calabaza, solo habría que
separar la masa en bolitas del tamaño deseado y seguir igual los pasos de la receta.
Poner sobre una bandeja para horno que debe estar previamente cubierta con aceite y se deja reposar una
vez más durante 1 hora.
Llevar al horno precalentado a 220º C hasta que el pan se torne de color dorado, esto toma
aproximadamente 40 minutos.
Luego se deja enfriar sobre una rejilla, en cuanto a la decoración se pueden poner semillas de calabaza o
frutos secos por encima, también se puede hacer un glaseado con una yema de huevo y una cucharada de
leche.
Sin duda una receta para quitarte el gusanillo a chocolate y postre, disfrutando de lo saludable de la
calabaza y las propiedades de las nueces y el chocolate.
Ingredientes:
200 gramos de calabaza. Si te sobra calabaza puedes probar a hacer una receta de buñuelos de calabaza
para chuparse los dedos.
4 huevos medianos
75 mililitros de aceite de girasol para la masa y un poco más para engrasar el molde
1 pizca de sal
Vamos a poner el horno a precalentar a 160 grados. Mientras tanto, pelamos y rallamos la calabaza y la
reservamos. En un recipiente adecuado batimos los huevos junto con el azúcar hasta obtener una textura
algo esponjosa. En este momento añadimos la calabaza rallada y el aceite de girasol y removemos
suavemente.
Ahora vamos a mezclar la harina con la levadura y a añadirla al resto de los ingredientes. Seguimos
removiendo. El último paso para la masa de nuestro bizcocho de Chocolate y Calabaza es incorporar la
cucharada de canela, un puñado de nueces y una pizca de sal. Podemos reservar algunas nueces (y de paso
algo de calabaza rallada) para la decoración final.
Engrasamos el molde con un chorrito de aceite y vertemos nuestra mezcla. Horneamos a 160 grados
durante 1 hora, lo hacemos así para que se cocine lentamente y quede muy tierno y esponjoso por dentro.
Cuando pase este tiempo comprobamos si está listo pinchando su centro con un palito. Si sale seco, lo
sacamos del horno y lo dejamos enfriar.
Mientras esperamos vamos a trabajar en nuestra cobertura de chocolate. Necesitamos fundir la tableta en
el microondas o si lo prefieres al baño maría. Luego untamos el chocolate con la ayuda de una cuchara por
encima del bizcocho y lo adornamos con algunos trocitos de nueces y calabaza rallada.
El resultado:
Una explosión de sabor para nuestro paladar y según el tipo de chocolate que elijamos, con un toque más
dulce o amargo. A cada bocado notarás las distintas texturas, la esponjosidad del bizcocho, la cobertura de
chocolate, los trocitos de nueces… Pura tentación. Disfruta este sano bizcocho de calabaza con chocolate.
Bizcocho de Calabaza y Coco
En el mundo de la repostería se pueden encontrar una inmensa cantidad de combinaciones y recetas en lo
referente a la preparación de bizcochos, el límite de estas combinaciones es la imaginación de cada persona
para encontrar nuevos sabores.
Es recomendable tener a la mano todos los ingredientes necesarios para preparar este rico postre para que
quede perfecto.
Ingredientes
3 huevos
Un pizca de sal
1 sobre de levadura química royal. La levadura es lo que hace en parte que salga un bizcocho de calabaza
esponjoso.
100 gramos de coco (rallado o triturado) para la receta. Reservar un poco más para decorar (opcional)
Coco abierto
Poner a precalentar el horno a 200°C mientras se realizan los pasos previos al horneado. Pelar la calabaza,
quitarle las semillas y cortarla en trozos pequeños.
Colocar los trozos de calabaza en un recipiente para microondas, taparlo y meterlo al microondas de 10 a
15 minutos para cocerlos logrando así una consistencia blanda. Verificar si los trozos de calabaza están bien
cocidos con un tenedor, de no ser así volver a meter al microondas un par de minutos más hasta que estén
bien blandos
Con la calabaza bien cocida se procede a agregar el aceite de oliva y con la ayuda de una batidora eléctrica
se mezclan bien el aceite con la calabaza.
Posteriormente se muda la calabaza batida a otro recipiente donde se tiene previamente dispuestos la
harina, el azúcar, la levadura y el coco. Añadir los tres huevos y se debe batir muy bien la mezcla hasta
lograr una crema homogénea.
Preparar un recipiente colocándole un papel para hornear en el fondo lo cual permitirá que el proceso de
desmoldado sea mucho más fácil de realizar.
Para verificar si está listo el bizcocho se debe pinchar con un palillo el cual debe salir seco. En el caso de que
el palillo salga húmedo se debe meter al horno el bizcocho por 5 minutos más y repetir el proceso de
verificación. Con el bizcocho en su punto esperar a que se enfrié para proceder a desmoldar.
Una vez desmoldado el bizcocho de coco y calabaza se puede agregar azúcar glas para decorar si se desea o
coco rallado.
Ingredientes
1 yogur natural.
¼ kg de harina.
4 huevos.
100 ml de aceite.
Un bizcocho esponjoso y suave es el que se prepara con el yogur, este ingrediente le da un toque
espléndido que le da un giro total al pastel tradicional. Los pasos para prepararlo son:
El primer paso es obtener el puré de calabaza, solo hace falta pelarla, picarla y cocerla hasta que esté
tierna, luego se escurre y se tritura hasta que se transforme en puré.
A continuación, batir los huevos con el azúcar, la mezcla tendrá un color blanco, una vez se vea de esta
forma se agrega el puré de calabaza y se bate hasta obtener una masa.
Seguidamente, añadir el yogur, la levadura y el aceite y batir muy bien. Luego, se comienza a sumar la
harina pero poco a poco y sin dejar de batir hasta tener una mezcla homogénea.
Verter la mezcla en el molde asegurándose quede de forma uniforme, se hornea durante 40 minutos.