OBJETIVOS:
- Identificar y describir los procesos cognitivos fundamentales, reconociendo su
funcionamiento integrado en el comportamiento humano.
- Reconocer en sí mismos y en otras personas la manifestación de los procesos
estudiados y aplicar en forma inicial, pero adecuada, los conceptos y distinciones
fundamentales sobre percepción, y atención.
LA PERCEPCIÓN
1. Naturaleza de la Percepción.
“En 1690, el filósofo John Locke propuso el siguiente experimento. Tenemos tres recipientes con
agua. El primero contiene agua fría, el segundo tibia y el tercero caliente. Ponemos una mano en el
recipiente de agua fría y la otra en el de agua caliente. Pasado un rato, notaremos cómo la diferencia
de temperatura entre las dos manos va desapareciendo. Cuando creamos que las dos manos están
en la misma temperatura, las ponemos a la vez dentro del recipiente con agua tibia. Aunque no nos lo
podamos creer, parece que el agua del recipiente tiene dos temperaturas: caliente para una mano y
fría para la otra.
Con esta demostración, Locke razonaba sobre la visión objetiva y subjetiva de la realidad. Las
calidades aparentes de los objetos (como la temperatura) no se encuentran en los propios objetos sino
en la mente de las personas que los perciben. El objeto no está caliente, decía Locke, tan sólo posee
la capacidad de despertar en nosotros la idea de calor. Si no, no se podría explicar por qué un mismo
objeto puede parecernos en el mismo momento frío y caliente. En el fondo, en relación con lo que nos
interesa aquí, la distinción clave se encuentra entre el hecho de captar una sensación (en este caso
resultado del proceso de adaptación térmica de la piel de la mano) y la percepción de la temperatura
(calor-frío) que provoca una determinada experiencia ambiental. Esta experiencia parte, efectivamente,
de las sensaciones, pero va más allá convirtiéndose en un proceso más complejo” 1.
“¿Por qué se ven las cosas como se ven? ¿Por qué son lo que son? No, Porque somos lo que somos”2.
“Hay una gran diferencia entre lo que existe en el mundo exterior (que estudia la física) y lo que
sentimos que hay a nuestro alrededor (que, entre otras cosas, estudia la psicología)” 3.
Sin duda, podríamos decir que el hombre tiene un mundo porque es capaz de percibirlo y tomar
conciencia de que existe. Este mundo está lleno de sentido. Este sentido se lo hemos dado tanto
subjetiva como consensualmente (intersubjetiva).
Podemos definir la Percepción como la manera como se interpreta y se entiende la información que
se ha recibido por medio de los sentidos, de forma organizada y significante. No tendríamos ningún
conocimiento del mundo, si no fuera por la información que nuestros sentidos nos entregan de los
estímulos del medio.
Pero el concepto de percepción sobrepasa lo que puede ser captado por los órganos sensoriales: la
percepción (visual, auditiva, táctil, gustativa, olfativa o propioceptiva, etc.) se basa en la información de
los sentidos, pero para que haya percepción tiene que darse una experiencia del fenómeno percibido;
es decir, es necesario que la información sensorial se organice de una forma coherente y con un
significado para la persona que percibe.
Por lo tanto la percepción es en parte objetiva, ya que depende de la aprehensión que hagamos de
elementos objetivos del mundo; pero es, a la vez, subjetiva, porque en ella se ven involucrados
elementos subjetivos de quien construye su conocimiento y significado del mundo que lo rodea.
Podríamos decir que hay tres características que distinguen a la percepción: es Selectiva, ya que no
podemos percibir todo el mundo, sino que sólo nos fijamos en una parte seleccionada de él. Es
Constructiva, ya que agrupamos los diferentes aspectos de una información sensorial para poder
determinar lo que representan (como un rompecabezas interior). Es Interpretativa, pues combinamos
estos datos con nuestros conocimientos previos, relacionamos; de forma que sean comprensibles y
tengan un significado para nosotros y esto depende de nuestras expectativas, esperanzas, miedos,
1
Valera, S.; Pol, E. y Vidal, T. Psicología Ambiental, Elementos básicos. Departamento de Psicología Social, Universitat de
Barcelona, España. Recuperado en Junio 2016 de: http://www.ub.edu/psicologia_ambiental/uni2/2210a.htm,
2
Hurvich y Jameson, 1975, Pág. 88.
3
Cf.: Davidorf, Linda L. Introducción a la Psicología. McGraw-Hill. México, 1989. Pág. 144.
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III° Medios.
necesidades, recuerdos, experiencias y todo lo que compone nuestro “mundo interno” y nuestras
cargas significativas.
2. Tipos de Percepción.
Distinguimos tres tipos de percepción:
a) La percepción real o percepción de un objeto físico (por ejemplo, de un lápiz, de una mesa, etc.).
b) La percepción personal o de una persona, en donde el objeto percibido es, a la vez, un sujeto
perceptor (ejemplo, la percepción de Jaime, de María, etc.).
c) La percepción social o la percepción de grupos o realidades sociales (por ejemplo, la percepción
de inmigrantes, la percepción de tal partido político, etc.).
3. Componentes de la Percepción.
En el proceso de percibir intervienen tres componentes estrechamente asociados (no se dan por
separado), estos son:
a) El proceso sensorial: “nada llega a nuestro conocimiento si no pasa por nuestros sentidos”. El
primer contacto con nuestro entorno se produce a través de las sensaciones. Esto se produce cuando
el órgano de un sentido (receptor) es estimulado por una energía física (calor, olor, ruido, etc.). El
órgano capta la energía y la transmite a través de los nervios mediante conexiones sinápticas.
Los seres humanos recibimos información a través de los sentidos. Entre los más destacados están:
- Tenemos los conocidos cinco sentidos (exteroceptores) que usamos para recibir la información del
mundo exterior: vista, oído, gusto, olfato y tacto.
-Tenemos otros que reciben información procedente del interior de nuestros órganos (interoceptores),
sentidos orgánicos que provienen de células viscerales.
-Por último, los propioceptores nos advierten del movimiento, nos permiten sentir nuestros músculos
y articulaciones. Aquí reconocemos al sentido cinestésico como aquel que informa con respecto a la
posición relativa de las partes del cuerpo durante el movimiento y hace posible advertir de manera
constante lo que hace cada una. El sentido vestibular, por su parte, es el sentido de orientación o de
equilibrio, proporciona información del movimiento y orientación de la cabeza y el cuerpo con respecto
a la tierra cuando se desplazan las personas por sí mismas o son impulsadas por un vehículo; esto
permite una posición erguida y ajustada al movimiento.
La estimulación sensorial es un proceso no sólo pasivo, sino también activo. Hoy se sabe que las
personas no sólo reciben estimulación, sino que también la buscan.
b) El proceso simbólico: la percepción requiere una estructuración de la realidad, es decir, se debe
interpretar y organizar la información recibida a través de los sentidos. Los objetos percibidos son
‘simbolizados’, es decir, cada cosa se asocia a un determinado ‘concepto’.
c) El proceso afectivo: Para entender nuestras relaciones con el mundo que nos rodea no podemos
olvidarnos de nuestra forma de ser, así como de las experiencias que hemos tenido anteriormente con
las cosas. En el proceso de percepción está implicada toda nuestra persona. Por ejemplo, la
percepción de una cosa puede ser agradable o desagradable, según como haya sido la experiencia
anterior con ella.
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Objetividad: carácter de lo que es objetivo, es decir, relativo al objeto en sí y no al modo de sentir o de pensar del sujeto u
observador. Generalmente se considera como objetivo a todo aquello que existe en la realidad, externo al individuo.
Actualmente, sobre todo en ciencias sociales, el concepto de objetividad ha sido criticado y se postula que es más preciso
utilizar el término ‘intersubjetivo’, esto se entiende como el parecer consensual entre muchos o todos los sujetos o, como
planteaba el filósofo alemán Emmanuel Kant en su “Crítica de la Razón Pura”: “Lo objetivo es aquello que es válido por la
voluntad de cualquier ser razonable”.
Por su parte, Subjetividad es el carácter de lo que es subjetivo, es decir, propio del modo de sentir o de pensar del sujeto y
no del objeto en sí. El individuo subjetivo considera al objeto (lo externo) sólo a través de su conciencia. Como lo diría
también E. Kant: “Los principios prácticos son subjetivos cuando lo que prescriben no es considerado por el sujeto como
válido más que para su propia voluntad”. Lo subjetivo en filosofía puede conducir a un cierto relativismo, concepto según
el cual cada individuo posee su propia verdad. Justamente esto es lo critica la ciencia al proponerse a sí misma como objetiva,
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III° Medios.
- Ley de la continuidad: Aquellos estímulos que poseen una continuidad de forma son
percibidos como si formaran parte de la misma figura. Es la tendencia a considerar como
unidos elementos que constituyen líneas rectas o curvas.
sus métodos de investigación, experimentación y análisis deben ser totalmente independientes de quien investiga,
experimenta y analiza, para que así sean válidos.
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III° Medios.
b) Factores subjetivos de la Percepción.
Por lo que respecta a los factores o las condiciones subjetivas, hacen referencia a los diversos
factores o aspectos que no son compartidos por todos, sino que dependen de cada uno, de cuestiones
como su personalidad, su actitud, su atención, su cultura, etc. Esto hace que unas personas se fijen
en aspectos que a otras les pasan desapercibidos. Un factor muy importante es la atención, puesto
que en función de nuestro interés u otros factores similares elegimos los parámetros de la observación.
Factores subjetivos hay muchos, dado que nuestra subjetividad es compleja y se halla impregnada de
experiencias, valores, intereses, actitudes, etc. Y es en el marco de esta subjetividad que toma
acomodo lo que percibimos. Por eso dos personas ante una misma situación pueden fijarse, prestar
atención, en aspectos opuestos: porque sus intereses lo son. En lo que sigue se señalan algunos
factores importantes (no son los únicos) que condicionan el acto perceptivo. La mejor manera de
entender estos factores es mediante ejemplos.
- Presión de grupo: Los experimentos han demostrado que una persona termina viendo iguales dos
líneas que son desiguales si un grupo de gente las ve como iguales. Basta ponerse de acuerdo
previamente y el único discrepante se sentirá tan incómodo que se verá inclinado hacia lo que piensa
la mayoría.
- Credibilidad: un experimento de la ciudad de N. York en la que una serie de individuos tenía que
castigar a otros que no acertaban ciertas preguntas con descargas eléctricas, comprobó
sorprendentemente que la mayoría llegaba al máximo de estas descargas produciendo un gran
sufrimiento en quien se equivoca. El argumento que dieron era que creían ciegamente en la ciencia y
en la universidad. ¿Qué significa esto? Que si otorgamos credibilidad a algo o alguien, sea o no
justificado (pues algo que se entrega o se da), puede hacer lo que quiera con el grupo. Otro ejemplo
son los casos que se han dado de líderes religiosos o políticos que manipulan a su antojo a sus fieles
seguidores.
- Ideología: Individuos con distinta ideología política (o de otro tipo) pueden ver las cosas de distinto
modo. Por ejemplo: ideología política (no alineados / OTAN), religiosa (los cismas, las sectas), moral
(aborto / vida, Matrimonio / divorcio), jurídica (jueces o jurados juzgando un caso polémico), social
(lucha de clases) o incluso científica (geocentrismo / heliocentrismo).
- Personalidad: Pensemos en quien ha sufrido tortura y su reacción ante algo que le recuerde su
trauma; o la diferencia que puede existir entre una persona extrovertida y un introvertida a la hora de
ver las cosas o hacer frente a una situación. Y así muchos otros ejemplos.
- Cultura: factores como los pares campo-ciudad, oriente-occidente, norte-sur, etc., ponen de
manifiesto la existencia de patrones culturales implicados en la visión del entorno. Las costumbres y
creencias de cada pueblo nos hacen ver las cosas de distinta manera.
- Conocimiento: Son muchos los ejemplos que se pueden poner, pero bastara con uno: hay una gran
diferencia en lo que ve un especialista al mirar por un microscopio y lo que ve una persona no
entrenada.
- Hábito: la percepción según la costumbre, lo que se ha visto o vivido puede ser significativo a la hora
de prestar atención a elementos de nuestro entorno o, por el contrario, puede ser rutinario al
acostumbrarnos a ver siempre lo mismo.
- Expectativas: Este es un factor muy importante, pues los individuos nos acercamos a nuestro
entorno con ciertas ideas o esquemas previos en base a lo que buscamos y esperamos. Por ejemplo,
en aquellos casos que buscamos unos lentes o unas tijeras y no las encontramos estando delante de
nosotros, es probable que las buscáramos cerradas y a lo mejor sin darnos cuenta las abrimos. Pero
no las buscamos abiertas sino cerradas.
- Intereses: Es uno de los factores más abundantes. Baste pensar en actividades como el fútbol, donde
parece que sólo se ven los penales de un equipo y no los de otro.
- Necesidades: Nada mejor que tener una verdadera necesidad para que nuestra busque con ansia
lo que necesita. Esto explica porque los que tienen hambre reducen su realidad a comestible y los que
tienen sed a lo que es bebestible o no.
- Instrucciones: Las instrucciones previas pueden influir en el estado perceptivo.
- Contexto: Influye de manera decisiva en nuestra percepciones. Si un estímulo aparece en un
contexto que no es habitual, el reconocimiento tiende a ser más lento. Por ejemplo, si viésemos a una
monja, que siempre ha vestido con hábito, vestida con ropa de calle, nos resultaría mucho más difícil
reconocerla.
5.- Trastornos de la Percepción.
Los trastornos de la percepción más importantes son las llamadas pseudo-percepciones, que
consisten en percibir objetos que en realidad no existen, o existen con una apariencia impropia de
ellos. Entre estas pseudopercepciones encontramos:
FILOSOFÍA Y PSICOLOGÍA
Formación General (Plan Común).
III° Medios.
a) Alucinaciones: Es la percepción sin objeto, es decir, no
existe el objeto que el sujeto cree percibir (ejemplo: oír
voces, ver imágenes, oler sustancias, etc.), por lo tanto, son
percepciones erróneas y, a pesar que son percibidas como
una auténtica realidad, no tienen ninguna base. El sujeto
vive las alucinaciones como algo externo a él, lo vive como
algo extraño, pero no puede evitarlo y pasa a formar parte
central de su vida. Posee una fuerza de convencimiento
que para él es irresistible y las sigue ciegamente.
b) Alucinosis: El sujeto percibe un objeto que no existe en
la realidad, pero es capaz de reconocer la falsedad de lo
que le está pasando, considerando que es algo anormal.
c) Pareidolias: Se caracteriza por una deformación de los objetos reales, pero esta deformación se
hace por imaginación. Por tanto, hay componentes imaginativos en esta patología. Se suele detectar
en niños (ver figuras en las nubes). La Persona que lo padece mantiene el juicio de la realidad y es
conciente de que se ha producido una deformación.
d) Ilusiones: Esta patología se caracteriza porque existe el objeto en la realidad, pero este es percibido
en forma deformada, distorsionada o distinta a como es. Por tanto, las ilusiones son percepciones
falsas debido a determinadas características del estímulo o bien limitaciones de nuestros órganos
sensoriales.
LA ATENCIÓN
1.- Concepto de Atención.
Muchas veces cuesta diferenciar qué es la atención y qué es la percepción.
Para algunos la atención es la focalización de la conciencia, es decir, ‘la capacidad de dirigir la
conciencia hacía un estímulo que la requiera, concentrando sobre él toda la actividad conciente’. Por
ejemplo, en un recital los estímulos para nuestros sentidos son ilimitados. Sin embargo, nos concentramos
sólo en unos pocos.
ACTIVIDAD N° 1: Cuestionario.
b) ¿Por qué podemos decir que la percepción es tanto objetiva como subjetiva?