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Trabajo monográfico de DSi: “El

bien común y la Argentina de hoy”

Alumna: María Cabales.

Año: 5°”A”.

Asignatura: Doctrina Social de la Iglesia.

Profesor: Martin Poladian.


Instituto Nuestra Señora de la Misericordia

Primera parte

Actualmente la Argentina está transitando un momento difícil debido a las políticas tomadas

por el presidente actual. Las cuales perjudican a los sectores vulnerables provocando de esta

manera más pobreza, lo que conlleva a más desigualdad, inseguridad y a la violencia.

Esto nos demuestra que la economía, la política y la sociedad están fuertemente relacionados ,

ya que sus decisiones afectan al bien común y cada ciudadano a través de su participación

política, influye (indirectamente) en el bien común.

La situación social de la Argentina hoy en día.

La tasa de interés en el país es del 60%, lo que lleva al endeudamiento de muchos argentinos,

y en la mayoría de los casos a la pobreza. La pobreza subió al 32% a fines de 2018. Incluso la

pobreza podría aumentar, junto con la aceleración de la inflación y de la baja creación de

empleo. Uno de los datos que más impacta en este contexto es que casi la mitad de los niños

son pobres, el 46,8% de los jóvenes hasta los 14 años se encuentran en esa condición. Por otro

lado el 9% de los adultos mayores a los 65 años es pobre. Otro dato que atormenta a los

ciudadanos argentinos es que la indigencia subió a 6,7%.

Sin reducción de la inflación es imposible pensar que la pobreza podrá bajar únicamente

enfocándose en la modificación de las políticas sociales.

El voto democrático es condicionado por las condiciones socioeconómicas y las expectativas

de futuro y la solución de los problemas. Si un individuo decide abstenerse al voto, su posición

se considera egoísta ya que lesiona el bien común.

Buenos Aires, Mayo, 2019.

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Para que el proyecto del presidente, “pobreza cero”, fuera llevado a cabo, se necesitaría un

presupuesto que excede a los ingresos monetarios. Por ende para poder atender este asunto es

necesario que se atiendan los ámbitos de la educación, salud, vivienda, entre otros.

La desigualdad en la distribución de ingresos tiene un papel significativo en esta problemática.

Esto efectivamente va en contra del bien común debido a que atenta contra la dignidad humana,

ya que al estar desempleado se produce una situación de pobreza en ese individuo, haciendo

que este tenga que rebajarse y eso es atentar contra la vida humana, un atropello hacia la misma.

Los hogares pobres requieren de políticas que implican más que la generación de ingresos. En

este sentido, la pobreza contempla tres aspectos básicos: la educación, la salud y la calidad de

vida.

La educación.

Si prestamos atención, la pobreza se concentra entre los niños menores de 14 años de edad.

Además el nivel educativo de estos niños es muchisimo inferior a la de los que viven en familia

con mayor nivel socioeconómico. La manera más funcional de lograr que estos niños puedan

salir de la pobreza en su adultez, es brindarle estudios de calidad, es decir una educación digna.

Cada vez que una escuela cierra se les cierran las posibilidades a los niños con bajos recursos

de conseguir un empleo digno , en un mundo globalizado en el cual la competencia laboral es

muy fuerte y al igual que el peso de títulos universitarios.

Si le negamos este derecho a los niños estamos fomentando la pobreza y sobre todo y aún peor

la exclusión social. Este derecho es un bien común de todo ser humano, que en Argentina se

ve violado por la falta de recursos que este precisa.

La salud.

Buenos Aires, Mayo, 2019.

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En la Argentina existen desigualdades que son propias del sistema de salud. Si bien la población

tiene la posibilidad de acceder a los servicios ofrecidos por el sector público, estos tienen

problemas en cuanto a su calidad.

El sistema de salud en Argentina está fragmentado y segmentado. Está compuesto por los

sectores público, privado y del seguro social. La mayoría de los argentinos cuenta solo con el

primero, la red de hospitales y centros de salud que prestan atención gratuita a toda persona

que lo necesite. El privado incluye empresas de medicina prepaga. Por último, el seguro social

obligatorio son las obras sociales, nacionales y provinciales, esta es una cobertura adicional

para los registrados en ella.

Toda persona que habita en el territorio argentino tiene el derecho de atenderse en un hospital

público, pero esto no garantiza que su calidad sea buena. Además existen abruptas diferencias

entre los servicios de las ciudades importantes y las provincias con menos recursos.

Una sobredemanda del sector público es lo que se observa en los servicios públicos de salud

en Argentina, ya que estos fueron pensados para una menor cantidad de habitantes, ya que

fueron creados en tiempos que la población era mucho menor.

“La falta de acceso a medicamentos, los tiempos de espera para acceder a una cirugía, las

dificultades para acceder a algún tipo de tratamiento oncológico, son todas formas en las que

se manifiesta la inequidad”.

recuperar y poner los hospitales provinciales en condiciones, será necesario sostener la

inversión durante por los menos ocho años, lo cual subraya la importancia de contar con

programas de inversión permanente”. En el caso de la salud, es un bien que si está a disposición

de todos los ciudadanos, sin embargo no en su totalidad debido a la baja calidad de este.

Calidad de vida.

Buenos Aires, Mayo, 2019.

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Este aspecto es una relación de todos los derechos que tenemos como ciudadanos argentinos.

sean tanto del ámbito de la salud, la educación, la política y hasta la sociología. Si alguno de

estos factores no se cumplen en su totalidad, se podría afirmar que la dignidad del hombre está

siendo vulnerada debido a que no se está respetando al hombre.

En la actualidad como ya mencionamos anteriormente, la calidad de vida bajó abruptamente,

es decir que gran parte de la población argentina vive en condiciones paupérrimas, rebajando

todo tipo de dignidad humana, siendo explotados con el fin de conseguir algún ingreso para

poder mantenerse a uno mismo o a su familia.

Una vez explicado las condiciones en las cuales se encuentra la Argentina actualmente,

relacionar estrechamente está situación con el principio de la DSI, destino universal de los

bienes. Este principio sostiene que todos los bienes del mundo tienen razón de ser para

satisfacer las necesidades humanas, es decir que están a disposición de estas. En el contexto

previamente explicado podemos observar que los bienes no están a disposición nuestro, sino

que escasean o son manejados de una manera inadecuada que no permite la satisfacción del

hombre.

Con este panorama ya planteado podemos pasar al punto en el cual la DSI sostiene que tomar

algo que no es de uno para saciar las necesidades básicas, no es punible, sancionado. Esto nos

lleva directamente a tratar el tema de la inseguridad que se produce debido a la creciente

pobreza del país. La pobreza provoca que las personas no puedan satisfacer sus necesidades

básicas por ende, buscan en las propiedades ajenas bienes que puedan cubrirlas.

Buenos Aires, Mayo, 2019.

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Segunda parte

La fe cristiana, desde su perspectiva da posibles soluciones a realizar por parte del Estado, de

los temas que afectan actualmente a las sociedades. En este caso trataremos con dos en

particular: el bien común y la destino universal de los bienes.

Para que el Estado cumpla con el bien común la iglesia católica propone los siguientes

enunciados:

● Para lograr el bien común el Estado debe encargarse de la creación de instituciones

políticas, para que estas puedan garantizar y facilitar la accesibilidad a los bienes

necesarios para gozar de una vida puramente humana

● Otro deber del Estado es el de mantener la armonía entre los diferentes intereses

sociales. Además debe tener en cuenta la opinión no solo de la mayoría sino tambíen

debe tener en cuenta las opiniones de las minorías.

Para que el Estado cumpla con el destino universal de los bienes y la propiedad privada la

iglesia católica propone los siguientes enunciados:

● La propiedad privad asegura al hombre un espacio propio necesario para la autonomía

personal y familiar, constituyen una de las condiciones de las libertades civiles.

● Al mismo tiempo el cristianismo no acepta la propiedad privada absoluta e intocable.

Por lo tanto la propiedad privada es un medio y no un fin.

● Para la Iglesia Católica el hombre no debe poseer sus propiedades privadas como

exclusivamente suyas, sino que deben ser comunes a la vez, para que puedan ser

aprovechadas por los demás.


Buenos Aires, Mayo, 2019.

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Buenos Aires, Mayo, 2019.

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