el sistema de salud se encamina hacia un mercado cada vez mas exigente, en el que se genera
valor con mayor eficiencia y con la diferencia marcada por imponentes ventajas competitivas.
Esta exigencia, crea una fuerte presión de demanda, asociada a la alta competitividad y
escasez de recursos esto lleva a un perfeccionamiento de los procesos de atención, y en
consecuencia del espacio físico. El recurso físico para la prestación de servicios de salud asume
gran importancia por la contribución de la recuperación y también el tratamiento de los
pacientes.
El espacio físico influye en el cuidado médico a partir de aspectos ergonómicos que pueden
facilitar le nivel de mejoría y de salud de un paciente.
Para poder atender todos los objetivos del healing environment se realizo un estudio en una
universidad de Inglaterra en el cual se recomienda que la arquitectura de los equipamientos de
salud, debe estar adecuada técnica y funcionalmente a la adecuada atención de salud,
proporcionar privacidad, confort, opciones de control en el uso del espacio, acceso al
ambiente externo, variedad de experiencias, accesibilidad y comunicación.
La tercera es disenar un edificio que permita tanto a los pacientes como a los visitantes y
trabajadores contacto con la naturaleza.
Y el ultimo y sexto método seria utilizar arte para animar el espacio hospitalario.
Los gestores del espacio físico necesitan de este tipo de evaluación del espacio para la toma de
decisiones en la búsqueda de excelencia de los edificios para la prestación de salud.
Referencias Bibliograficas.
Rubin HR, Owens Aj e Golden G (1998)an investigation to determine whether the built
environment affects patient’s medical outcomes center or health desing ,Martinez,California
USA.
Russ Coile’s health trends (2001) healing environment:progress toward evidence-based. USA.
Scher P(1996) patient-focused architecture for health care, arts of health- Manchester
Metropolitan University UK.
EL PACIENTE COMO
CENTRO DE LA
ARQUITECTURA DE
SALUD:
LUISALBERTOMONGEARQUITECTO
Laboratorio de Arquitectura + Ciudad (Ar+CiLAB
http://monarqui.blogspot.com/2017/10/el-paciente-como-centro-de-la.html
“La arquitectura sólo se considera completa con la intervención del ser humano que la
experimenta.”
Tadao Ando
Indistintamente si son públicos o privados, los variados sistemas de salud alrededor del mundo
están enfocados en generar valor, pero con una mayor eficiencia y productividad.
Principalmente debido a la presión que implica la fuerte competitividad, pero también al alto
costo y a la escasez de algunos recursos necesarios para el funcionamiento de los hospitales.
Por lo tanto actualmente los edificios en los que se prestan servicios médicos han desechado
las soluciones tradicionales, en búsqueda de un nuevo paradigma arquitectónico, más holístico
y enfocado en el paciente. Se puede evidenciar esta tendencia en los vestíbulos amplios de
doble altura, habitaciones más cómodas e individuales, en el uso de materiales más cálidos o
más color y la mayor presencia de la naturaleza.
Lo holístico prioriza el estudio del todo y no sólo de las partes, o sea aplica una visión más
integral que la simple suma de sus componentes. Sobre este tema hay muchas ideas sin
sustento científico que deben ser descartadas, pues el diseño y especialmente el Hospitalario,
debe ser basado en evidencia no en misticismo[1].
Tal como se puede intuir el término Arquitectura Holística, encierra una visión integral en
cuanto a la armonización de los espacios basado en el impacto positivo que tiene el diseño en
el comportamiento, su efecto en las emociones, el desarrollo, la salud e incluso la felicidad.
Este abordaje holístico, plantea que las necesidades del paciente se resuelven desde diferentes
enfoques (algunos no necesariamente médicos).
Si se entiende a la arquitectura como una disciplina que por medio del espacio modifica las
conductas humanas, se contradicen las ideas tradicionales de espacio neutro y de edificio
como un simple contenedor de servicios de salud. Por eso actualmente se visualiza la
arquitectura de centros de salud como un colaborador de las actividades y tratamientos que se
realizan en el interior de los edificios.
Diferentes estudios alrededor del mundo han evidenciado los positivos efectos terapéuticos y
tranquilizadores que el diseño tiene sobre la recuperación de los pacientes hospitalarios.[2] En
este sentido para el Arquitecto Miguel Sartori “la búsqueda de la humanización de la atención
sanitaria, se enrola en el concepto que plantea que no hay enfermedades, sino enfermos, que
los tratamientos médicos son más exitosos si son personalizados” (Sartori, 2014)
Además estudios del Center of Health Design, evidencian también que la arquitectura puede
reducir costos de tratamiento, disminuyendo el tiempo de permanencia, el uso de
medicamentos compensatorios y los tiempos de trabajo de enfermería por paciente, entre
otros ahorros directamente influenciados por el diseño, además significa una mayor
satisfacción del paciente, y un mejor índice de percepción de la calidad. (Guelli, 2013)
La arquitecta Sonia Cedrés considera que el concepto de humanización no significa otra cosa
sino que el usuario (paciente) debe estar en el centro de cada decisión de diseño, “no solo
como un productor de requerimientos funcionales, sino como una expresión de los valores
humanos que deben ser considerados en la arquitectura de los centros de salud”. (Cedrés,
2000)
Relacionado con esto, la arquitecta Moema Loures[3], considera que los ambientes sanadores
“son aquellos que reducen la agitación y la ansiedad y también incrementan las relaciones
sociales”. Por lo tanto el objetivo más importante de la arquitectura sería la creación de una
atmósfera adentro y afuera del edificio que ayude al paciente a recuperarse lo más rápido
posible, y a hacer de su estancia lo más placentera posible, porque “creemos que la
arquitectura puede reducir los niveles de estrés de un hospital, los errores médicos y las
infecciones hospitalarias”.
Bibliografía
Sartori, M. Á. (2014). ¿Puede un buen diseño ayudar a los enfermos a curarse? Anuario
AADAIH, 8-10.
hospital
http://aadaih.org.ar/get/ANUARIOS/ANUARIO%20AADAIH%202011.pdf
La influencia de la arquitectura en la
recuperación del paciente
https://esnoticia.co/noticia-4078-la-influencia-de-la-arquitectura-en-la-recuperacion-del-
paciente
El espacio físico influye en el cuidado médico a partir de aspectos ergonómicos, que pueden
facilitar la actividad y el nivel de salud, fortaleciendo al paciente y la causa misma de la
enfermedad, al protegerlo o exponerlo a contagios e infecciones.
Un equipamiento de salud, debe por lo tanto atender a las necesidades técnicas y funcionales
comprometidas en el cuidado integral de la salud. Además de esto, una necesidad que debe
ser considerada en la búsqueda de la excelencia en la atención, y que recientemente ha
cobrado gran relevancia, es el valor de la percepción subjetiva del espacio físico y su influencia
sobre el paciente, el cuerpo profesional y los acompañantes o visitantes. Este concepto, que es
llamado "Healing Enviroment", propone la optimización del entorno del cuidado del paciente,
no sólo como un ambiente que le proporcione satisfacción y posibilidad de control sobre el
entorno inmediato, sino que también disponga de un sistema de soporte social, que incluye el
apoyo a los pacientes, la recepción de información de parte del paciente y la comunicación
adecuada de su situación médica.
Para atender los objetivos del "Healing Environment", un estudio realizado en Inglaterra por la
Facultad de Arte y Diseño de la Universidad Metropolitana de Manchester, recomienda que la
arquitectura de los equipamientos de salud, cuando se enfoca a la percepción y necesidades
de los pacientes debe, además de estar adecuada técnica y funcionalmente a la adecuada
atención de la salud, proporcionar privacidad, soporte social, confort, opciones de control en
el uso del espacio, acceso al ambiente externo, variedad de experiencias, accesibilidad y
comunicación.
Los principios básicos arquitectónicos en los que se basa el Healing Enviroment son:
1. Proyectar espacios que proporcionen privacidad, dignidad y compañía, permitiendo que los
pacientes estén solos o con otras personas según su deseo, controlando el nivel de privacidad
tanto alrededor de la cama del paciente como en las áreas de espera.
2. Posibilidad de vista al exterior del edificio para los pacientes. Hay consenso en que el
paciente que espera ansiosamente los resultados de un diagnóstico, se tranquiliza al poder
distraerse contemplando una vista exterior. Igualmente, en un proceso en el que el
tratamiento es más prolongado, exigiendo más larga permanencia, el proceso puede ser
estimulado por la posibilidad de tener una vista lejana.
3. Diseñar un edificio que permita a los pacientes contacto con la naturaleza. De forma ideal y
si el clima lo permite, este contacto puede ser físico y no sólo visual, debido a su efectivo
resultado terapéutico.
4. Proporcionar confort a los ocupantes en sus espacios cotidianos y aún más importantes, que
tengan control sobre algunos elementos definidores del espacio, tales como la iluminación y el
sonido.
5. Crear espacios que tengan legibilidad espacial. Esto quiere decir que las personas puedan
comprender el espacio y, por ejemplo, encontrar fácilmente su camino y moverse por el
edificio casi que utilizando únicamente su 'mapa mental'. El diseño debe determinar la
jerarquía de los espacios en la que las áreas de uso común y de uso privado estén claramente
definidas, de manera que las entradas y salidas sean obvias y para que los diferentes espacios
del edificio tengan diferentes identidades visuales.
6. Utilizar arte para agradar y animar a los usuarios del espacio hospitalario. Puede ser una
pintura en la pared, una escultura o incluso elementos naturales trasformados en el paisaje o
incluidos en los espacios interiores.