com/2013/04/16/90-preguntas-sobre-la-infidelidad-
matrimonial-una-de-las-causas-principales-de-los-divorcios/
El posible perdón matrimonial, tiene que estar soportado por la Paz, la Piedad y la Justicia.
No existe la Paz sin la Justicia, no hay Justicia sin Piedad y no hay Perdón sin
Arrepentimiento. Siempre es mejor un mal matrimonio, que un buen divorcio, salvo
excepciones muy contadas. Sobre todo teniendo en cuenta, el derecho de los hijos, si los
hubiera. La infidelidad quebranta los derechos, del otro cónyuge y de la familia completa.
Hay que perdonar desde lo profundo del corazón, al 100%. Los perdones a medias, no
sirven. Hay que dejar bien claro, que será una sola vez. Que no habrá lugar para engaños o
repeticiones, porque no se puede volver a tolerar o aceptar algo semejante, ya sería dejar la
puerta abierta, a que se transforme en un hábito del cónyuge o del matrimonio.