Un situación particular que vivo casi a diario, es que soy una estudiante
de pregrado que estudia dos carreras y además estoy inscrita en varios
proyectos esto me mantiene muy ocupada y con un estrés medio alto.
Amo lo que hago y todas las situaciones negativas que vivo las utilizo a
mi favor, por ejemplo cuando vamos a realizar alguna actividad en grupo
y hay alguien que no cumple con su parte me produce mucha ira pero
respiro profundo y buscamos una solución de la mejor manera posible,
ya que quejarse o no hacer la actividad será peor, también cuando
realizo mis notas finales y me bien siento mucha alegría y orgullo ya que
gracias a mis esfuerzos se ven los resultados.
Por otro lado, el que nos sucedan cosas malas o que no nos gusten
provocan sentimientos negativos, como el desaliento, ira, culpa y demás;
para estas situaciones siempre trato de ser paciente ya sea conmigo o
con los demás, esto ayuda a mucho a disipar los sentimientos negativos
a tal punto de desaparecerlos y atraer la alegría y el entusiasmo.
Todo esto implica entender lo que sucede a nivel emocional, ser
consientes de las consecuencias que generan los cambios emocionales.
Vivir en armonía y por medio de estas experiencias convertirnos en
personas maduras, equilibradas, y felices. Esto exige reconocer y
percibir nuestros sentimientos de manera apropiada y precisa, es decir,
entender, asimilar y comprender adecuadamente las emociones en el
momento en que éstas se presentan.