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IV. Ciencia y tecnología

ENll\E LOS SIGLOS XVI y XVIII la ciencia registró un extraordina­


rio avance. En el transcurso de las tres centurias del Primer
Orden Mundial se sentaron la fundaciones del método científi­
co moderno y de las principales ramas del conocimiento: mate­
mática, cálculo, astronomía, óptica, física, magnetismo, electri­
cidad y medicina. Recién en el siglo XX, con los avances en la
física nuclear y en la biología, emergen contribuciones de tras­
cendencia comparable.
En aquel período se establecieron también las bases de la
actividad y la cooperación científicas. La creación de universi­
•''

dades, laboratorios, sociedades y bibliotecas multiplicaron las


vías de difusión de la información y los contactos entre los crea­
dores de conocimiento. Desde su mismo inicio, la ciencia y los
científicos fueron auténticamente europeos. Los mayores erra­
dores, investigaron y difundieron sus ideas en los principales
centros de excelencia de Italia, el espacio gernÜn1co, Inglaterra,
Francia y los Países Bajos. Sólo a fines del siglo XVIII se incorpo­
rJ una figura relevante de la periferia pero también de raíces
euroreas: el norteamericano Benjamín Franklin.
El conocimientu acumulado a lo largo de l o s siglos por ltls
sabios y tccnúlogos chinos, 6.L1bes, persas e indios fue transferi­
do sin regalí�1s ni patentes a los pueblos cristianos de Eurora.
Esta transferenci�l fue una de las bases fundacionales del Ren�1-
cimiento. Desde entonces, la ciencia y la tecnología europeas

97
fRONTERA� DH CON
OCIMIENTO'
98 E\JROI'Ao LAS NUFVAS
1, C!,ENCIA Y· TECNOLOGIA 99

e iniciaron
de las otras civilizaciones
dejaron de ser tributarias miento militar y naval. Leonardo. da Vinci ( 1452-1519) expresa
su despegue autónomo. el espíritu universal del hornbre del Renacimiento y su vocación
ción de
iento científico a la produc
La aplicación del conocim de cdmbinar todas las ·rap1as del saber en una comprensión
er Ord en Mu ndial,
tres siglos del Prim
bienes y servicios en los oló­ abarcativa del mundo r'eal y del hombre. De esos aportes emer­
rrol lo tecn
. Sin embargo, el desa
fue relativamente modesta les: gieron deducciones sobre las leyes de comportamiento del mun­
dam enta
decisiva en tres áreas fun
gico cumplió una función do físico que influyeron decisiv<lmente en los posteriores avan­
navegac ión.
ón cultural, la guerra y la
la difusión de la revoluci ces de la ciencia.
ava nce s tecn ológicos que pro­
straron
En los tres campos se regi Pero fueron, en primer lugar, los británicos quienes gestaron
y posi�
del poder dentro de Europa
movieron la redistribución la primera interacción sistémica y trascendente entre los hombres
cristianos.
ultramar de los pueblos
hilitaron la expansión de prácticos {navegantes, herreros, forjadores, artesanos, ingenie­
a con pólv ora y los
renta, la artillerí
Esos avances fueron la imp ros, agricultores) y los creadores de teorías científicas. En Inglate­
otro s terrenos,
ientos marinos. E n los
nuevos navíos y conocim rra, Francis Bacon (1561-1626), lord canciller bajo Jacobo I, era
a sólo a partir
y tecnología fue removid
la brecha entre ciencia filósofo antes que científico. Sin embargo, fue de los primeros
ustrial.
acto de la Revolución ind
del siglo XIX, bajo el imp pensadores en comprender el papel histórico de la ciencia y su
importancia para el hombre. Sus aportes fundaron el método
experimental apoyado en la vinculación entre los investigadores,
La Revolución científica ingenieros y los artesanos, es decir "el verdadero enlace entre las
capacidades empírims y racionales, cuya desgraciada separación
o durante el
del conocimiento científic
El extraordinario avance ha provocado tanta confusión en la familia humana" .1 Bacon
ciclos de des­
procedió en dos grandes
Primer Orden Mundial identificó la interdependencia de la reflexión teórica y de la tec­
sobre el mun­
n de nuevas concepciones
cubrimientos y formació nología. Este enfoque provocó un impacto profundo durante el
iados del
primero abarca desd med
e
do físico y el hombre. El Primer Orden Mundial pero alcanzaría una trascendencia revo­
de esta última
s del XVII. El segundo, des
siglo XVI hasta mediado lucionaria sólo a partir de la Revolución industrial.
o XVlll.
época hasta fines del sigl .La visión de Bacon era esencialmente experimental e in­
amplia­
a científicos y filósofos que
Eltnimcr ciclo. Abarca ductiva. Este enfoque sentó una de las grandes tradiciones dd
dar on las bas es del mé­
ocimiento y fun
ron las fronteras del con método científico. La otra se apoya en las contribuciones Jd
ron en el norte
s pioneros se registra
todo científico. Los avance ica­ francés René Descartes ( 1596-1650). En contraposición con el én­
arquitectos e ingenier os técn
Je Italia en donde actuaban los o­ fasis en los datos empíricos, Descartes privilegió el método
ron el mét
de Europa. Ellos combina
mente más competentes deductivo y matemático. . A prin�·ipios del siglo XV[! la matem<Í-
resolver
ental con la matemática para
do cuantitativo y experim
de pala cios y cate drales
la construcción
problemas pr;1cticos de
alez as y equipa- 1 Citado en ). F. 1\lason, A fhstuty o{ the Sáenas, Nueva York, Collicr
ento de proyectiles, fort
y, también, del lanzami Books, 1962, p. 141. TraJ. es¡l .. l:/¡�ton;¡ de las ciencias, Madrid, Al.anza.
1 01) FliROPA, LAS r'UFVAS FIWNTrRAS DEL CON��'i:I�liENTO
CIENCIA Y iECNOLOGIA 101

rica bahía consolidado su importancia comri. instrumento de


análisis. Sus aplicaciones fueron en .\a m�d.Júca antes que en restante rechazaron la concepción jerárquica y geocéntrica del
la astronomía. universo y se empeñaron en compatibilizar los nuevos conoci­
La ampliación de las fronteras del conocirniento y de la li­ mientos con la creencia en Dios y los fundamentos del cris-tia­
bertad influyeron, en primer lugar, en i);-¡cony en Descartes. En nismo. La ausencia de la Inquisición en los países en que se
aquél, para fundamentar su método experiil1ental. En éste, p�ra difundió la Reforma protestante eliminó o, por lo menos, debi­
enfatizar la reflexión deductiva y el papel de la matemática en litó las restricciones impuestas a la investigación por el Jogma­
la investigación de las leyes del mundo físico. A mediados del tismo religioso. Según Mason,2 el predominio de los cienríficos
siglo XVI! estaba definitivamente consolidada b convergencia de credo protestante sobre los católicos en el período obedeció
de ambos enfoques como fundamentos del método científico a tres causas principales, a saber: la compatibilidad entre las
del mundo moderno. posturas iniciales del protestantismo con la actitud científica, el
El debate metodológico se proyectó.a la investigación cu­ empleo de la ciencia para alcanzar objetivos religiosos y la con­
yas tres figuras dominantes en el período �on Kepler, Galileo y vergencia de la concepción cósmica de la teología protestante
1-brvey. El astrónomo y matemáticp ak1i1á.n .Johann Kepler á' con los hallazgos de Copérnico, Kepler y Galileo.
�.+;
(1571-1630), profesor de las universidades .de Tuhingia y Pra­ .;:,
En los primeros tiempos de la Reforma los protestantes ale­
ga, procuró conciliar la tradición, teológica con la teoría manes y suizos predicaron el rechazo de la autoridad de los
copernicma sobre el sistema solar y el lug�r d,e la Tierra en el sacerdotes católicos y la búsqueda de la verdad espiritual en la
mismo. Kepler clarificó la configuración yspacial del sistema so­ propia experiencia religiosa. El mensaje de la Biblia debía ser
lar y abrió las fronteras para la comprensión del universq en �-!•" interpretado por cada uno y la verdad encontrada en la propia
términos del equilibrio dinámico de fuerzas mecánicas. Galileo experiencia empírica. En la historia de la Royal Society inglesa,
Galilei ( 1564-1642), profesor de las universidades de I?adua, Pisa publicada en 1667 por Thomas Sprat, se destacaba el "acuerdo
y Florencia, aplicó la matemática para investigar las fuerzas de que existe entre los objetivos de la Royal Society y los princi­
',i,� '
gravedad, el comportamiento de los cuerpos celestes y la balísti­ r pios fundacionales de nuestra Iglesia" (anglicana).
'-¿,
ca. Empleando las nuevas lentes desarroll:, 1da� por artesanos ho­ A principios del siglo XVl, en medicina y biología el enfoque
landeses, aplicó la óptica para la observación astronómica. Las espiritualista y romántico alemán ejercía considerable influen­
contribuciones de Kepler y Galileo terminaron por demoler la !
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cia. La fuerza vital que se expresaba en la actividad de la mente
trauición cosmológica ptolomeica y de consolidar definitivamen­ humana, penetraba también el mundo físico. Según este enf()­
'

te la teoría copernicana. Las sanciones de la Inquisición contra que no existe la materia inerte y cada cuerpo deriva su compor­
Galileo revelaron el conflicto profundo entre el pensamiento tamiento de su fuerza viral interna no de fuentes externas de
teológico y el mundo real. Esta pugn;:¡ contribuye a explicar la energía. El médico y químico suizo Paracelso ( 149 3-1541) inte­
Reforma y el alzamiento contra la autoridad de la Iglesia. gró la alquimia heredada del Medioevo con los nuevos conocí-
Los pioneros de la Revolución científica y la Reforma pro-
1Ibid.,p.175.

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) 02 EUROPA: LAS NUEVAS FRONTERAS DEL CONOCIMIENTO

CIENCIA Y TECNOLOGlA 103


:
nueva discipli-
1

mientos químicos y la medicina para fundar una ,


. El carácter mÍstic o y precier\tífico presa era i mprescindible, t arnbién, mejorar los instrumentos y
na denominada iatroquímica
de este enfoque convergió con el vitalism
o y roman ticismo ale­ �
medi s de la navegación..La convergencia de la curiosidad desata­
dores fundados da por el Renacimiento con los desafíos planteados por la expan­
mán y desembocó, más tarde, en aportes innova
logía y la teoría de sión planetaria de los pueblos' cristianos 'de Europa provocó
en el estudio de los anima les vivos, su morfo
recién a partir de una explosión de genio y:creatividad en la ciencia y en todos los
la célula. Pero estos avances tendrían lugar
planos de la cultura europea.· .
fines del siglo
.. .
XVIII.
ó desde el El segundo ciclo. Éste 'fue tanto o más trascendente que el
Mientras tanto, la actitud indagadora se esparci
na. La aplicac ión de primero. Los paradigmas dominantes de la ciencia moderna y
mundo físico hacia la biología y la medici
rasgo domin ante las leyes que gobiernan el mundo físico terminaron de configu­
los métodos de una disciplina a la otra fue un
n la estre­ rarse entre mediados del siglo y fines del Las leyes de
del desarrollo científico del período. Así como tambié
XVII XVIII.

entre los investi gadore s de las diversa s discipli­ la gravitación universal y la mecánica, el cálculo infinitesimal,
cha interacción
o. El nuevo enfoqu e confiri ó al el magnetismo, la electricidad, la embriología, la química orgá­
nas en todo el ámbito europe
ante en el cuerpo human o nica e inorgánica fueron investigados y descubiertos en ese pe­
corazón y la sangre la posición domin
Los aporte s de ríodo.
que el Sol ejercía en el sistema heliocéntrico.
Harvey El centro de gravedad de la investigación científica se fue
médicos y biólogos culminaron con el inglés William
( 1578-1657), médico de Carlos I de Inglaterra, que incorporó a desplazando desde sus primeras localizaciones en Alemania y el
estableció la norte de Italia hacia las potencias atlánticas que estaban
la medicina el enfoque sistémico de la mecánica y
En su concepc ión, el cora­ liderando la formación del Primer Orden Mundial: Holanda,
teoría de la circulación de la sangre.
un sistema mecánico Francia e Inglaterra. Ellas asumieron el liderazgo de la investi­
zón, las venas y las arterias constituían
gación científica y de sus aplicaciones tecnológicas. La investiga­
para el transporte de la sangre.
pri­ ción dejó de ser predominantemente una ocupación de investiga­
Es comprensible que las mayores contribuciones de este
ción científic a del Primer Orden Mundia l dores profesionales y profesores universitarios. Fue incorporan­
mer ciclo de la Revolu
ca. En to­ do, también, a funcionarios, empresarios, políticos y miembros
se verificaran en la astronomía, la óptica y la mecáni
r de los pueblos cris­ de la nobleza. Es decir, la cienc,ia recibió nuevo impulso de hom­
dos estos terrenos, la expansión de ultrama
podían ser resuel­ bres prácticos y p�nsado�es ocupados en ampliar los conoci­
tianos de Europa planteaba desafíos que no
lica y mientos y, sobre todo, apl Ú ::arlos a la resolución de problemas
tos con los enfoques fundados en la tradición aristoté
un cono­ concretos. Esta vinculación entre ciencia y tecnología, funda­
ptolomeica heredada del Medioevo. Era indispensable
de la Tierra y el universo, del régimen de los da en los p rincipios proinovidos por Francis Bacon, se constitu­
cimiento certero
s para aventur arse a los hori­ yó en un nuevo y formidable factor endógeno del desarrollo y,
vientos y de las corrientes marina
zontes inexplorados del mundo que se abría a los mercad eres, :
consecuentemente, eri ün coniponente intangible de poder de
te em- creciente importancia.
marinos y aventureros europeos. Para abordar semejan
·

Es comprensible que �stc contrapunto creativo ciencia-tec-

1,

1
ERAS DFJ.CONOCIMIENTO CIENCIA Y TECNOLOGÍA
104 EUROPA, LAS NUEVAS FRONT lOS

en
desarrollara principalmente hombre, sino en dar respuesta a las incógnitas fundam
nología-producción-(Jo/ítica se enralc�
nte.
difundido la Reforma protesta de la condición humana. Esta actitud confiere a las
las regiones en qÚe se había mayores
ante s apun tado s. Al figuras del p eríodo una proyección humanística
ideolúgicos
Influían no sólo los factores que no e�t<Í
e de Fran cia se presente en fases posteriores, m:1s especializadas,
Inglaterra y part
mismo tiempo, en Holanda, del desarro­
polí ticas y
ores transformaciones llo científico.
estaban verificando las may
, la ad­
la agricultura, la industria En Francia, la física newtoniana fue difundida
los desarrollos de frontera en y profundi­

la navegación. A·partir de la decl zada con el empleo del cálculo por Jean le Rond
ministración del territorio y D'Aiamhen
ha­
aquellas:potencias atlánticas (1717- 1 783 ), Joseph Luis Lagrange ( 1736-1 783) y Pierre Simon
nación de Portugal y España,
n plan etari a de los pue­ Laplace ( 1 749-1827). Otro científico francés, Antoin
la expansió
bían asumido el liderazgo de e Lavoisier
s euro peos . ( 174.3-1794 ), sentó las bases de la química moderna y el
blos cristiano ale­
ndo ciclo está dominado por mán Caspar Friedrich Wolff (1738-1794) de
El desarrollo científico del segu la embriología.
esor
Newton (164 2.-1727). El prof Hacia fines del Primer Orden Mundial estaba
la gigantesca figu ra de Isaac consolidado el
e estab leció los para digln as do­ paradigma de la ciencia moderna en las princip
de la Universidad de Cambrig ales ramas del
itaci ón univ ersa l, conocimiento. Todos los principales investigadores
erna en la ·grav
minantes de la ciencia mod eran euro­
ía. En los
ca, cálculo y �stronom peos con una excepción importante.
mecánica, óptica, matemáti
ron los hallazgos de sus predece­ Era la del norteamericano Benjamín Franklin
aportes de New.ton convergie (1706-1790)
un
hallazgos formaron parte de cuyas investigaciones sobre la electricidad y el magnet
sores y contemporáneos. Sus ismo y su
idad d� inve stiga dore s form a­ invención del pararrayos lo habían convertido en
período de extraordinaria activ una celebri­
busca de r�s· p uest as a los mis- dad en las cortes de Gran Bretaña y Francia y
dos en las mismas fuentes y en en los medios
científicos europeos. En la mejor rradición británic
mos problemas. ' .· · a, coexistían
investigación de Europa se en él la actitud analítica y experimental con
En los principales centros de la capacidad de
s
estaba produciendo una Revo
lución ci,entífica. Sus principale aplicación práctica de los descubrimientos y de difundi
rlos por
chas relaciones de colaboración diversos medios, incluyendo su célebre almana
protagonistas mantenían estre que Poor Ri­
a una agria disputa sobre la chard. Su ocupación como imprentero y publicista
o competencia. Esto dio lugar no iba en
íficos como la controversia zaga de su actividad científica. La notoriedad
precedencia en los hallazgos cient de Franklin era
Leibnitz ( 1646-1716) sobre premonitoria de la emergencia de los futuros Estado
entre Newton y Gottfried Wilhem s Unidos de
infinitesimal.
la ¡1recedencia en el descubrimiento del cálculo América como nueva potencia mundial. Sobre la
base de trans­
ades de Mainz, París, Londres formaciones gestadas durante el período colonia
LL·ihnitz profesó en la' universid l convergieron
litud de intereses de los gran­ en ese país la expansión territorial y el aumento de
y 1-lannover, y ejemplific1 l a amp la población
Leibnitz coexisten el filósofo, con fuerzas endógenas del desarrollo, entre las cuales,
Lks pensadores del período. En los apor�
ia, no s<'1lo interesado en am­ tes científicos y tecnológicos de Franklin eran un
el te<'1lngo y el hombre de cienc ejemplo, Esta

�1¡
pliar las fronteras del cono
cimiento del mundo físico y
del �: combinación de factores tangibles e intangibles del
poder, en el

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106 EllF OPA: LAS NUEVAS rRONlTRAS DEL CONOCIMIENl·o


. ÓENClA Y TECNOLOG(A 107

creciente espacio norteamericano, comenzó a ganar impulso


más la imitación de lo que est�ba sucediendo en las dos poten­
desde fines del Primer Orden Mundial.
cias atlánticas líderes, Gran Bretaña y Francia, que la densidad
y trascendencia de la actividad científica de Prusia y Rusia. La
mayor parte de los científicos y directivos de ambas acade­
El desarrollo institucional de la cienc�a
mias erari extranjeros y en la de Berlín el idioma oficial era el
francés,
n Económico Mundial,
Durante los tres siglos del Primer Orde Fue en Gran Bretaña y Francia en donde se produjo·un desa­
s científicas estuvo localiza­
la formación de grupos y sociedade rrollo institucional de la ciencia fundado en las comunidades
. Como en otros cam­
da en los principales centros de excelencia científicas de cada país y en la estrecha asociación entre él po­
fuero n pione ros también en el
pos de la cultura, los italianos der político, la actividad económica y los creadores de conoci­
cient ífica. Las academias
desarrollo institucional de la actividad miento. En Gran Bretafia, el clérigo puritano John Wilkins
das en 1531, 1601 y 1657
de Nápoles, Roma y Florencia, funda (1614-1672) lideró el nucleamiento de jóvenes investigadores
instituciones de esa natu­
respectivamente, fuemn las primeras en el Philosophical College que se reunió regularmente a partir
nazgo de personajes de la
raleza. Su creación contó con el patro de 1644, inicialmente en Bull Head Tavern en Cheapside y, más
emia de Florencia. Fueron
nobleza, como los Médici en la Acad tarde, en el Gresham College en Bishopsgate. Wilkings popula­
ipales sabios y científicos ita­
miembros de las mismas los princ rizó la visión copernicana del universo y procuró compa­
ciflliento. Galileo, por ejem­
lianos en todos los campos del cono tibilizada con la teología c;alvinista. Formaron parte del colegio
d� Roma. Sin embargo, la
plo, formó parte de la Academia los científicos británicos más significativos de la época. La gue­
es fue relativamente efímera.
existencia de las nuevas institucion
rra civil y la disputa entre puritanos y anglicanos, entre par­
ante era incompatible con el
El dogmatismo religioso predomin
lamentaristas y monárquicos, perturbó pero no interrumpió el
ífica. Sometidas al rechazo
desarrollo de la investigación cient desarrollo institucional de la ciencia en las islas británicas. El
universo y, en algunos casos,
de la concepción copernicana del conflicto se propagó a los dos grandes centros de excelencia, las
on por disolverse. Hacia
bajo denuncias de brujería, concluyer universidades de Oxford y Cambridge. Varios de los principa­
ífica en Italia.
1670 no subsistía ninguna academia cient les científicos fueron expulsados de sus cátedras por sus adhe­
y Altdorf (1672), se crea­
En Alemania, en Rostock (1622) rencias religiosas y políticas. Primero los de filiación monárqui­
de varios científicos sociedades
ron por la iniciativa individual ca y anglicana bajo el régimen de Cromwell, más tarde, con la
a sus fundadores. Recién en
y colegios que no sobrevivieron restauración monárquica, los puritanos y republicanos.
el respaldo del elector
1700, por iniciativa de Leibnitz y con En 1660, con la restauración de Carlos II, Londres reasumió
emia de Ciencias de Berlín.
Federico l de Prusia, se creó la Acad el liderazgo. La creciente .actividad científica y el rélajamiento
rador ruso Pedro el Grande, .
Poco después, en 1724, el empe del conflicto religioso culminó en 1662 con la creación de la
cias de San Petersburgo. Pero en
estableció la Academia de Cien Sociedad Real para el Avance del Conocimiento Natural. Con
instituciones académicas reflejó
ambos casos la creación de esas altibajos, el número de miembros de la Royal Society aumentó
1 OS FliiH li'A: LAS NliFVAS FRON.I ER,\S OFL CONOCIMIENTO

CIENCIA Y TI:C:NOI.OC;!A
10�
de 100, al tiempo de la fundación, a 500 en 1800, Formaron
des de la Royal Socicty, aún desp
parte de la misma los científicos más destacados., políticos, co­ ués de que la transformaciún
productiva del país ampliara la
merciantes y personas, como el mis¡no jl)hrl 'Wilkins, que éran gama Je problemas prácticos :1
, resolver. Inicialmente el tema dom
auténticos administradores de la ciencia'. inante de la actividad comer­
cial se refería a las artes de la nave
Desde su creación, la Royal Society se orientó a la investiga­ gación. Más tarde, se incor­
poraron las cuestiones de tecno
ción pura y aplicada. Su numen eran las ideas d e Francis Bacon logía aplicada a las manufactu­
ras, artesanías y agricultura. El víncu
que quedaron plasmadas en los estatutos de la entidad, redacta­ lo entre el sector productivo
y la comunidad científica quedó reflej
dos por su curador, Robert Hooke, en 1 Ei63. ,Pice un pasaje de ado en las actividades de la
Royal Society desde su fundación
los estatutos: "La tarea y el objetivo de la Royal Society es am­ y a lo largo de su historia. A su
vez, las relaciones de la Sociedad,
pliar el conocimiento de las cosas naturales y de todas las artes como polo productivo-científi­
co, con el poder político movilizaro
útiles, manufacturas, prácticas mecánicas, motores, inventos y n factores endógenos del creci­
miento británico que sustentaron
experimentos. La Sociedad procurará, asimismo, rescatar todas nuevos componentes intangibles
del poder. Radica aquí una causa
las artes e inventos que están ahora peraidos; examinar todos los principal del papel hegemónico
que alcanzó Gran Bretaña hacia finale
sistemas, teorías, principios, hipótesis,·elementos, historias y ex­ s del Primer Orden EconQmi­
co Mundial y su protagonismo dura
perimentos de las cosas naturales, matemáticas y mecánicas, in­ nte la Revolución industrial.
La estabilidad institucional cons
ventadas, registradas o practicadas por todo autor importante, truida a partir de la guerra
civil se proyectó al terreno cient
antiguo o moderno. Se trata de compilar un sólido sistema filosó­ ífico. La ciencia moderna y la
religión del Estado eran compatib
fico para explicar todo fenómeno producido por la naturaleza o les. Con la Restauración, los
científicos no anglicanos aceptaro
arte y de registrar la causa racional de las cosas. No es el objetivo �i, n el credo oficial. Incluso John
j¡!: Wilkins, puritano y cuñado de
de la Royal Society ocuparse de cuestiones divinas, metafísica, Cromwell, concluyó sus días

1"¡1
como· obispo de la Iglesia Angl
moral, política, gramática, retórica o lógica". icana en Chester. La prudencia
T. confesional de los científicos no
La gravitación relativa de las investigaciones puras y de las i' anglicanos, como Newton y
·; ' John Locke que eran unitarios,
aplicaciones tecnológicas cambió con el correr del tiempo. En ' y la tolerancia de la Corona
crearon el clima adecuado para
los primeros, años la influencia de Bacon �e reflejó en el pre­ -1,�!. el desarrollo científico-tecnoló­
gico. Incluso disidentes cuáquero
dominio del estudio de cuestiones prácticas. Con la incorpora­ s y bautistas, excluidos de los
puestos oficiales en las universid
ción de Newton, en 1671, ganaron peso las cuestiones teóricas, ades, pudieron crear sus pro­
pias instituciones académicas. A trav
la matemática y la investigación pura. Estas tendencias queda­ ':J.¡ 1 és de las mismas ejercieron
11
una considerable influencia en el
ron reflejadas en los artículos publicados en las Philosophical desarrollo científico-tecnoló
Transactíons, editadas por la Royal Society. A lo largo del
�.� gico del reino.
­

.En el continente, el desarrollo insti


siglo XVIll, volvió a prevalecer la investigación aplicada sobre tucional de la ciencia nüs
importante tuvo lugar en Francia.
problemas prácticos. Probablemente influidos por
las diferentes dimensiones del
Los mercaderes ejercieron una gr.an influencia en las activida- territorio y la población de Fran
­
cia y Gran Bretai'ía, la actividad
�··!· ; ..
cit;nrífic:.� y los desarrollos insti-

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110 EUROPA: LAS NUEVAS fRONTFRAS DEL CONOCIMIENTO CIENCIA� Ú:CNOLOGIA 111

!
tucionales pioneros estuvieron menos concentrados en París que catálogo ·de máquinas e inv'entps
. Se abocó también a resolver
en Londres. En 1518, a pesar de la oposición de los directivos problemas prácticos, co�o la deter
mmación de la longitud de
de la Universidad de París, Francisco I creó el College de Fran­ los navíos en altamar. Posteriorm
ente, la influencia de Descar­
ce, para el desarrollo de las disciplinas humanistas. Posterior­ tes promovió el desplazami�nto desd
e los aspectos prácticos de
mente, miembros del College fueron destacados 'investigado- la ciencia hacia los literarios y filos
óficos.
' res científicos. Hacia 1620 el primer grupo de científicos notables Durante el siglo XVII y principio
s del XVIII en diversas ciuda­
comenzó a reunirse en Aix, en la casa de Claude de Peiresc des francesas se establecieron cerc
a de 40 academias científicas
(1580-1637).Miembros de este grupo se trasladaron a París,en vinculadas a la de París. Estas
academias de alcances regionale
s
donde la celda de un fraile minorita, Marin Mersenne (1588- realizaron significativos aportes
al desarrollo científico-tecno­
1648), se convirtió en centro de reunión y de correspondencia lógico. Su importancia declinó
con la Revolución,a partir de
la
con los mayores sabios europeos de la época, entre ellos Gali­ cual.la actividad se concentró
en París. Hacia la misma époc
a
leo, Hobbes y Descartes.En 1654,en la �asa de un consejero de en Gran Bretaña se registraba,
en cambio; un proceso inverso
Estado, Habert de Montmor (1600�1679),laneuniones cientí­ con la emergencia de nuevo,s cent
ros de importancia, fuera de
ficas conformaron de hecho una academia qúe no logró sobre­ Londres, en vario s puntos del reirio
.
vivir. Pero estos pioneros lograron convencer a �olbert de la Otra diferencia impO'I't,ante �ntr
e el desarrollo institucional
importancia de la ciencia y la tecnología para el desarrollo de de la ciencia en las dos poter¡,c,ia
s atlánticas hegemónicas se vin­
la industria y del comercio de Francia.. cula a la cuestión religios , Eo
¡t .Gran Bretaña, durante la Res­
En 1666 se creó la Academia de Ciencias de París cuyos pri­ tauración, se acentuó la toler
ancia religiosa y el clima prop
icio
meros veinte miembros fueron funcionarios a sueldo de la Co­ para el trabajo de, invesriga<;Jore
s de diversos credos. En Fran
­
rona. Este fue un rasgo distintivo de esta Academia respecto de cia, en cambio, la revoc�tori¡:I
del Edicto de Nantes (1685) pro­
la Royal Society: su fuerte dependencia del patronazgo público vocó la pérdida de destacados
científicos hugonotes que emig
ra­
y la relación más débil con el sector privado. La Academia de ron, principalmente, haci� Suiz
a y Gran Bretaña. Estas difer
en­
París era un cuerpo de científicos profesionales que trabajaban cias en el marco institucional
y político de los dos países cont
ri­
sobre. problemas que le planteaban los ministros de Estado y buye a explicar el liderazgo
de Gran Bretaña en el desa
rrollo
tenía una estructura jerárquica dispuesta por los delegados de científico-tecnológico del Prim
er Orden Económico Mundial
y
la Corona. La entidad mantuvo estas características hasta la su posterior protagonismo dura
nte la Revolución industrial.
Revolución.
Inicialmente, la. Academia estuvo fuertemente influida por
las ideas de Francis Bacon. Dedicó buena parte de su actividad La tecnología
a compilar historias de los fenómenos naturales y de los proce­
sos productivos. De este modo formó equipos de investigadores El desarrollo de la imprenta y
la divulgación del libro tuvo un
para elalmrar una historia natural de plantas y animales, y un pape l decisivo en la difusión
de la ciencia y de la técnica. La

1;
112 EUROPA, LAS NUEVAS FRONTERAS DEL C:ONDCIMIENrO CIENCIA Y TEC:NOL()(;(A 1 1)

:�parición de la prensa periódica forma p3rte'del mismo pro­ posteriores. La construcción de c:utas marítimas exigía repre­
ceso. Los primeros periódicos aparecieron en Londres en el sentar la esfera terrestre en un planisferio. El flamenco, cons­

siglo XVII y, a mediados del siguiente, la _ventq total de periódicos tructor de instrumentos, agrimensor y dibujante de mapas,
en Europa había alcanzado más de siete millones de ejemplares.3
'
' Gerard Mercator ( 1592-1594 ), resol viú el problema. En 15 6�
El segundo desarrollo tecnológico de vasto :�!canee se refiere publicó un planisferio con una proyección de b esfera terrestre
a la artillería con pólvora. Los portugueses fueron los primeros en un plano. La otra cuestión crucial era la determinación de la
en reconocer que, en la lucha naval, lo decisivo era el poder de longitud de los navíos en altamar. El problema de la Lnitud
fuego y no el abordaje. Los primeros enfrentamientos navales . respecto de la línea del Ecuador estaba resuelto por la observa­
en que se utilizó la artillería tuvieron lugar e� el océano Índico. ción del Sol y de la Estrella Polar. Pero el de la longitud estaba
Los combates entre los navíos portugueses y los del Islam san­ aún pendiente a mediados del siglo XVIII.
cionaron la supremacía de la nueva tecnología en la guerra na­ El tema era una cuestión de Estado. Felipe 11 en 1598 esta­
val. La batalla de Lepanto ( 1571 ) , entre el Imperio otomano y bleció un premio de mil coronas para quien resolviera la deter­
las fuerzas cristianas coaligadas bajo el liderazgo español, fue minación de la longitud y, en la misma época, los holandeses
la última en que el abordaje jugó un papel importante. Poco otro semejante de 10 mil florines. En Gran Bretaña se tomó una
después ( 1588), en el océano Atlántico, frente a las costas in­ decisión más importante: la creación en 1675-1676 del obser­
glesas, la artillería fue el factor decisivo de la destrucción de la vatorio de Greenwich. Diversos métodos fueron intentados
armada invencibl� de Felipe II por la escuadra de Isabel 1 de como el de determinar la posición de la Luna respecto de las
Inglaterra. estrellas, el de Galileo de observar los eclipses de las lunas de
El tercer cambio tecnológico trascendental se refiere a los Júpiter y el del comportamiento de la aguja magnética. El más
conocimientos disponibles para la navegación y a la industria simple era medir la diferencia de tiempo, determinada por la
naval. La expansión de ultramar hacia Oriente y el Nuevo Mun­ rotación de la tierra, entre dos lugares. El problema práctico
do, confrontó a los navegantes europeos con problemas inédi­ era, sin embargo, disponer de cronómetros marinos capaces de
tos. Hasta principios del siglo XV, la navegación se realizaba medir el tiempo respecto de un punto de referencia, como el
normalmente con la costa a la vista. Los viajes a Oriente circun­ meridiano de Greenwich.
navegando África y hacia el Nuevo Mundo,; obligaron a nave� Fueron los ingleses y los franceses los que dieron los pasos
gar en altamar cada vez más lejos de las costas. Esto planteó el decisivos para resolver el problema de la determinación de la
problema de la determinación de la posición de los navíos y el longitud. En 1714, d gobierno.bricínico estableció una Junta
registro de las rutas seguidas para 'inforinación de los viajes de Longitud y premios sustantivos y, dos años después, la coro­
'
na francesa 'hizo otro- ranto. La cuestión fue finalmente resuelta

.l W. Minchinton, "Tipos y estructura de la dqnanJa ( 1500-1700)", en:


con la cons'trucci()n de cronómetros marinos por el relojero de
C l\1. Cipolla (ed.), Histciria económica de E�ropa . (IT), �'iiglos XVI y XVII, Yorkshire, John H:mison (1693-1776), y el relojero del Rey de
Barcelona, Aricl, 1987, p. 86.
Francia, Pierre Le Roy (17'17-1785). A mediados del siglo XVIII
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j j4 EURUI'Ao LA' N\ lEVAS fRONTERAS DEL CONOCIMIENTO


.
CIEN CIA Y Tj:CNOLOGIA liS

estaban definitivamente resueltos todos los problemas princi­ ' \

pales de la cartografía marítima y de la determinación de la con su uso como combustible. En Gran Bretaña, entre 1500 y
p�)sición de los navíos en altamar. 1640 el precio de la leña, deflaCionado por el nivel general de
La creciente import;:mcia de la guerra naval y el aumento del precios, aumentó cerca de 200%. Con�ecuentemente, el aumento
comercio internacional y de las distancias a recorrer promovió de la demanda de combustibles se desplazó hacia el carbón y su
ir�1portante� mejoras en la industria naval. Para aumentar la producción desde los bosques del sur hacia las minas del centro
rapidez, capacidad de carga, maniobrabilidad y seguridad de y norte de Gran Bretaña. La resolución de los problemas técni­
los navíos se introdujeron avances en la construcción y en el cos de la explotación de l�s minas se convirtió en una cuestión
disei1o de los cascos y los aparejos. En todos estos terrenos, crucial. Entre mediados det siglo XVI y XVII alrededor del 75%
hasta principios del siglo XVIII, los holandeses fueron los pione­ de las patentes otorgadas en Gran Bretaña se referían directa o
ros. El célebre fluit fue el navío más eficaz a lo largo de todo el indirectamente a la minería del carbón.
siglo XVIJ. Podía navegar contra el viento y era el más rápido y A medida que aumentaba la profundidad de los yacimientos
maniobrable de su tiempo. El fluit fue una de las causas del en explotación, el problema de la inundación de las minas era
predominio marítimo de Holanda cuya flota, en 1700, totaliza­ cada vez más grave. Su solución dependía de contar con una
ba 900 mil toneladas y era igual o aun mayor que las de Fran­ fuente de energía mecánica de bajo costo para operar las bom­
cia, Inglaterra, España y Portugal combinadas.4 bas de drenaje. Este fue un problema técnico crucial cuya reso­
El progreso técnico en la minería, la industria y la agricultu­ lución impactó, primero, en la minéría del carbón y, luego, en
ra provocaron un efecto modesto sobre el incremento de la pro­ otras actividades productivas.
ducción y la productividad a lo largo de los tres siglos del Pri­ El empleo del calo� y del vapor de agua como fuente de
,
mer Orden Económico Mundial. Sin embargo, particularmente energía en pequeña esqlii era oonocido desde tiempos remo­
en el siglo XVIII, se registraron innovaciones que sentaron las tos. Su empleo en gran ..escala para desagotar las minas de
bases de la Revolución industrial y el vertiginoso desarrollo tec­ carbón planteaba problemas técnicos inéditos. Ingenieros ita­
nológico registrado en el siglo XIX. En la producción de bienes, lianos, franceses e ingleses �pdrtiu:on diversas soluciones par­
los mayores avances técnicos del período se refieren a la mine­ ciales pero de alto costo. Finalmente, el herrero de Dartmouth,
ría del carbón, la generación de energía mecánica y la industria Thomas Newcomen ( 1663-1729) desarrolló una caldera at­
textil. mosférica que fue el prÚ n e� :qrtefacto que transformó el gas en
Los problemas técnicos de la producción carbonífera se acre­ energía mecánica en gran escala. La nueva máquina de vapor
centaron en el siglo XVlll. La demanda de madera para la indus­ fue rápidamente empleada en el drenaje de las minas de car­
tria naval y de la construcción crecía rápidamente y competía bón y otros minerales, y comenzó a exportarse a partir de
1720. La invención de N ewcomen fue un ejemplo de la signifi­
cación de los artesanos en el desarrollo tecnológico y de su
� W. Minchinton, thid., p. 131. participación en la aplicación de desarrollos teóricos a la tec­
nología y la producció�.
11 h Flii\UPA: LAS NUEVAS Fl\\lNTFI\A'i DEL C:.UNOC\�1\ENTO
CIFNUA Y TECNOLOGIA 117

Los desarrollos posteriores de b mvenC!(>n ele Newcomen


los tejidos y prendas de algodón representaban el 7% del pro­
culminaron con James Wart ( 1736-1819), fal�ricante de instru­
ducto tot;JI de la economía británica y casi un tercio del produc­
mentos para la Universidad de Gbsgow. Watt introdujo en la
to agregado de la industria manufacturera, la minería y la cons­
invención de Newcomen importantes innovaciones referidas a
trucción. En la misma época era el principal producto de expor�
h preservación del calor y el movimiento rotatorio. A partir de \:.·,
ración del reino líder en la economía mundial y en un rubro, el
1776 se asoció con el industrial metalúrgico de Birmingham
textil, que representaba ;-¡!rededor del 20% de las exportaciones
Marhew Bnulron (1729-1 !108) para producir la m::íquina de va­
mundiales. La transform;-¡ción del mercado de tr;-¡h;-¡jo impuesto
por en gran escala. Su urilizaci<'m se expandió rápidamente des-
por la innovación de Hargreaves y Arkwright anticipó la con­
·

de la minería del carbón a otras actividades.


moción sociJI y políticJ que, poco después, provocaría la ex­
La industria textil era en la época la principal actividad fa­
plosión tecnológica de la Revolución industrial.
bril y sus exportaciones (fundamentalmente tapicería, paños y
En el transcurso del Primer Orden Económico Mundial se
tejidos de lujo de ;Jito valor unitario) representaban alreuedor
produjeron otras innovaciones import;Jntes p;-¡rticularmente en
de dos tercios del comercio internacional de manufacturas. El
la producción de hierro y acero, y en la agricultura. La fundi­
hilado de algodón para las telas de consumo masivo era una
ción del primer cañón se produjo en 1509. En el siglo XVII se
actividad hogareña realizada por mujeres. En la segunda mi­
introdujeron innovaciones en el laminado de lingotes, el em­
tad del siglo XVIII, un humilde barbero de Bolton, Richard
pleo del coke en la fundición y nuevas aleaciones, y el empleo
Arkwright (1732-1792) perfeccionó la hiladora de ;-¡lgodón de­
del alto horno. La aplicación de la máquina de vapor en la
sarrollada inici;-¡lmente por un carpintero de. Lankshire, J;-¡mes
metalurgia fue un ejempio de difusión tecnológica entre secto­
Hargre;-¡ves. Arkwright empleó un relojero 'para construir las
res. En la producción agropecuaria británica se produjeron tam­
partes de la hiladora, la patentó en 1769 ·e in
' staló su primer.
bién innovaciones importantes, par�icul;-¡rmente en la rotación
pbnta de hilado de algodón, movida inicialmente con tracción
de cultivos y en la selección genética en la ganadería. El impac­
·

a sangre, en Nottingharn en 1768. LJ segui)cla 'planta en mayor


to de estas inpovaciones en el rendimiento de los suelos fue
escala, con la participación en el fina'nciamien�o de varios in­
sustahcial y un. apqrte crítico en el despegue de la Revolución
versores y rmp leando energía hid•raulic:;¡t," se in'staiÓ en
. industrial en Gran Bretaña. La producción agrícola ele las islas
Cromford, Derbyshire, tres aíios después.· '
aumentó a cerca del 1,5% anu;-¡l enrre 1780 y 1830.5
'

Fl imp;-¡cto de la hilador;-¡ de algodón sobre los costos 'fue


Los avances tecnológicos durante el Primer Orden Económi­
cspect;-¡cular. Eliminó el hilado ;-¡ cargo de las mujeres el'l lo's
co Mundial sugieren varias conclusiones imporrantes. En pri­
hog;-¡res, convirtió la hilandería en una ;-¡stividad industrial y
' mer lugar la importancia del aprendizaje y la capacit;-¡ción de
redujo los costos de mano de c;br;-¡ en el 90'Y�. Entre 1770 y
los recursos humanos. "El libro h;-¡bla sólo a los que saben ya el
1 ROO, la producción de hilado de algodón aumentó veinte ve­
ces. Con la dr::ístic;-¡ baja de sus precios, los tejidos de algodón
5 R. Da vis, The Rise of the i\tlantic Eéwwmies, Irhaca, Cornell Ulllversiry
se convirtieron en un ;Jrtículo de consumo m:1sivo. l-J;-¡cia 1800
Press, 1973, p. 315.

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CIENCIA Y TECNOL.OGIA 119


11 H EIIROPA, LAS NUEVAS fRONTERAS DEL CONOCIMIENTO

1
s
tipo de co�a que esp ran de ély, por consiguiente, cómo inter­ piar-adaptar-innovar. Esta secuencia predomina desde la Alta

pretarlo. "6 De este ;nodo, el aprendizaje fue adquiriendo un Edad Media (cuando Europa incorporó el conocimiento cientí­
\
papel decisivo en la i Korporación de tecnologíayen el proceso fico y la tecnología de los árabes, chinos, indios y persas) hasta
innovativo. Como dice Cipolla: "a primera vista, el problema la circulación planetaria de la tecnología de la actualidad.
1

1
de trasplantar una innovación a un entorno extraño puede pare- En segundo término, la importancia de la cooperación de los
cer que se reduce a ii�troducir nuevos métodos de producción y operadores prácticos (artesanos, ingenieros, navegantes, comer­
los instrumentos, herramientas o máquinas apropiados para ellos. ciantes) con los científicos. El progreso de la teoríaylos contac­
Pero de lo que realmente se trata es de una condición particular y· tos estrechos de los hombres prácticos con los investigadores
más profunda que sólo puede ser entendida en términos huma- impulsaron las innovaciones ,técnicas. Pero las iniciativas sur­
gían básicamente de los primeros, La excepción más importan­
'

nosysociales".
:
Refiriéndose a la experiencia de la industria de punta de la te fue la de la invención de la máquina de vapor en donde exis­
época, la construcción naval, el holandés Nicolaes Witsen decía tió una interacción decisiva entre el análisis de los problemas
en su Tratado de Navegación de 1671 lo siguiente: "es sorpren­ teóricos de los gases, de la conservación del calor y del vacío, y
dente que los extranjeros, aunque hayan estudiado los funda­ las fuerzas de la gravedad.
mentos de la construcción barata en los astilleros de este país, En tercer lugar, el respaldo del Estado, especialmente en
nunca puedan practicarla en su propia tierra [... ]. De lo que se Holanda, Gran Bretaña y Francia, para inducir a investigadores
sigue que incluso si un extranjero tuviera todas las reglas de la y artesanos a resolver los problemas técnicos más urgentes de la
construcción en su cabeza no le servirían a menos que hubieran época. El Triángulo de Sábato, vale decir la interface científi·
aprendido por su propia experiencia".7 No bastaba, pues, con cos-productores-gobierno, es ob� �rvable desde el mismo inicio
el libroy los manuales técnicos ni con el trasplante de tecnolo­ de la expansión europea.·
gía incorporada en equipos yprocesos productivos para difun­ Finalmente, merece insisti¡1se �n la gigantesca brecha entre
dir la tecnología e incorporarla en el tejido productivo de una el espectacular avance de la fro'ntera del conocimiento científico
sociedad. y las aplicaciones tecnológi¿as. Elpúmeroy jerarquía de los in­
Los requisitos del :cambio tecnológico y del desarrollo eco­ . ente inferior al de
ventores y tecnólogos del pqíod�, es claram
nómico se pbnteaban entonces en términos semejantes � los los científicos, cuya nómina \n¿luye las gigantescas figuras
actuales. La capacidad de comprender y desagregar en sus di­ de Galileo y 'Newton. Co.mpara'9 üs''�on los avances técnicos pro­
versos componentes la técnica que se incorpora al proceso pro­ ducidos durante la Revolució� in{iustrial,
' .:' !
� .
las innovaciones del
1 • '

ductivo era esencial, entonces corno ahora, en las' secuencia co- Primer Orden Económic.oMundial fueron relativamente mo-
l
destas.

" ( :. 1\1. Cipolla, Historia ccorlómica de la Europa prcindustria/, Madr· 1,


Alianza Universidad, 1989, p. 195.
7 llnd.

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