La educación de los niños corrió a cargo de la madre. Su crianza le fue confiada a Luisa de Mijares y
más tarde a la negra Hipólita.Cursó estudios con maestros como Andrés Bello y Simón Rodríguez.
A los 15 años Bolívar ya era huérfano de padre y madre. Su tío y tutor Don Carlos Palacios, le hizo
trasladar a Madrid para continuar con sus estudios.Con tan solo 19 años de edad, el 26 de mayo
de 1802, contrajo matrimonio con María Teresa del Toro y Alayza, regresando a Caracas para
dedicarse a la agricultura en las haciendas heredadas. El 22 de enero de 1803 su esposa falleció de
fiebre amarilla. Por entonces tuvo amoríos con Anita Lemoit, natural de Salamina. Simón Bolívar
regresó a España y amplia sus estudios con la orientación del marqués Gerónimo de Ustáriz, quien
le introdujo en la lectura de los clásicos antiguos y modernos, de los filósofos y de los grandes
pensadores. Recorre España, Francia e Italia. En el Monte Sacro, en Roma, juró libertar a su patria
(15 de agosto de 1805). En París tuvo como amante a Fanny de Villar.
De vuelta en Caracas en junio de 1807, conspiró contra el régimen realista. El 19 de abril de 1810
los criollos destituyeron al gobernador y capitán general Vicente Emparán, integrando una Junta
Conservadora de los Derechos de Fernando VII, eufemismo tras el que se ocultaban verdaderas
intenciones de independencia política. Con el grado de coronel, fue en misión diplomática a
Londres, donde consiguió inclinar las simpatías del gobierno británico hacia la revolución
venezolana. En la misma capital inglesa, se entrevistó con Francisco de Miranda y lo invitó a
regresar a Venezuela.
Cuando ya se perdió la primera República, debido al fracaso militar del Marqués del Toro, primero,
y luego de Francisco de Miranda, quien capituló en San Mateo (25 de julio de 1812), los principales
dirigentes tuvieron que abandonar el país como exiliados. Le concedieron el pasaporte para
Curazao, desde donde viajó a Cartagena de Indias. Fue allí donde publicó el Manifiesto de
Cartagena (2 de noviembre de 1812), en el que criticaba la irresoluta actuación de Miranda, que le
condujo a la capitulación; y, en la Memoria a los ciudadanos de Nueva Granada (15 de diciembre
de 1812), les invitaba a acompañarlo a libertar Venezuela, tras explicarles cuáles fueron las causas
del fracaso republicano, enumerando entre estas la adopción del sistema tolerante, la disipación
de las rentas públicas y el sistema federal. Comenzó una campaña fulgurante a lo largo del río
Magdalena hasta llegar a Cúcuta. Desde ahí emprende la denominada 'Campaña admirable' (14 de
mayo de 1813), que le llevó triunfante hasta Caracas (6 de agosto), tras reconquistar las ciudades a
su paso. En Trujillo dictó la proclama de "Guerra a muerte". Cuando la capital ya estaba
reconquistada, Simón Bolívar gobernó mediante tres Secretarías de Estado, pero no se estacionó
en Caracas, sino que combatió en Bárbula (30 de septiembre) y en Las Trincheras (3 de octubre).
La Municipalidad de Caracas le proclamó capitán general de los Ejércitos de Venezuela, con el
título de Libertador (14 de octubre). El 10 de noviembre de 1813 fue derrotado en Barquisimeto,
aunque, a pesar de todo, pudo vencer en Vigirima (25 de noviembre) y en Araure (5 de diciembre).
Venció dos veces al realista José Tomás Boves en San Mateo (28 de febrero y 25 de marzo), y
sobre Cagigal en la primera batalla de Carabobo (28 de mayo), triunfos que no lograron consolidar
el ejército de Bolívar. Presionado este por Boves, emigró a Oriente al frente de 20.000 caraqueños
(7 de julio). En Aragua de Barcelona Bolívar y Bermúdez perdieron frente a Morales la batalla más
sangrienta de la guerra independentista (17 de agosto). Proscritos Bolívar y Santiago Mariño por
los propios patriotas, partieron hacia Cartagena de Indias, luego que el Libertador dictara su
célebre Manifiesto de Carúpano (7 de septiembre). A finales de 1814 Boves falleció y los patriotas
fueron derrotados en Urica (5 de diciembre). Ante las disensiones internas de los neogranadinos,
Simón Bolívar renunció y se embarcó con destino a Jamaica (10 de mayo de 1815), donde dio a
conocer su famosa Carta de Jamaica (6 de septiembre), considerada profética por los alcances
visionarios que contenía en lo relativo a la política futura de los países hispanoamericanos. De
Jamaica pasó a Haití, donde los exiliados venezolanos le nombraron jefe supremo, y con este
carácter organizó la llamada 'Expedición de Los Cayos' con los buques y pertrechos facilitados por
el presidente haitiano Alexandre Petion. Al frente de dicha expedición, desembarcó Bolívar en
Juan Griego, isla de Margarita (2 de mayo de 1816), después de haber librado el día anterior el
combate naval cerca de Los Frailes. Fracasada esta parte de la campaña, pese a haber avanzado
hasta Ocumare de la Costa, regresa a Haití, y con una segunda expedición desembarca en Juan
Griego (28 de diciembre), extendiendo la acción patriota a otros puntos de Oriente y Sur. El 11 de
abril de 1817 tuvo lugar la batalla de San Félix, en la que el general Manuel Piar se alzó con la
victoria, puso a disposición de los patriotas los inmensos recursos de Guayana y la importante vía
fluvial del río Orinoco. En Angostura (actual Ciudad Bolívar) se asentaron los poderes públicos.
Nació en cumana 3 de febrero 1795, llamado El Gran Mariscal de Ayacucho, fue un político y
militar venezolano, prócer de la independencia americana, así como un diplomático y estadista,
presidente de Bolivia, Gobernador del Perú, General en Jefe del Ejército de la Gran Colombia,
Comandante del Ejército del Sur y Gran Mariscal de Ayacucho. Era hijo de una familia acomodada
de tradición militar, siendo su padre coronel del Ejército Patriota. Es considerado como uno de los
militares más completos entre los próceres de la independencia sudamericana. Perdió a su madre
a los siete años de edad. Aún adolescente fue enviado a Caracas al cuidado de su padrino el
arcediano de la catedral, presbítero Antonio Patricio de Alcalá, para iniciar estudios de ingeniería
militar en la Escuela de José Mires. En 1809, con su hermano Pedro y otros jóvenes, integró como
cadete la compañía de Húsares Nobles de Fernando VII, en Cumaná, unidad organizada por Juan
Manuel de Cajigal y Niño, gobernador de la provincia de Cumaná. La familia de Sucre sufrió
bastante durante el proceso independentista; de hecho, Antonio perdió tres hermanos a manos
de los realistas. Siendo muy joven asume labores de responsabilidad cada vez mayor. Era una
década difícil, y los conflictos internos entre los generales patriotas puso a Sucre en la posición de
decidir qué mando seguir. El joven oficial considera que debe seguirse un mando unitario,
llegando a trabajar en 1817 en Angostura, siguiendo las directrices de Simón Bolívar.
Acontecimientos destacados
Sucre asciende a General de Brigada, y cumple un excelente papel, no sólo en lo militar, sino
también en lo diplomático. Redactó, por ejemplo, el Armisticio de Santa Ana, documento que
buscaba suavizar las hostilidades entre realistas y patriotas, y que fue firmado en 1820 por Pablo
Morillo y Simón Bolívar. Lo más destacable del tratado tiene que ver con el trato humanitario que
establecía para los prisioneros. Sucre rápidamente se mostró como uno de los militares de
formación más sólida y carácter más noble, a pesar de las vicisitudes que su familia vivió a manos
de los realistas. Trabó una gran amistad con Bolívar, que lo tenía en la más alta estima. Defensor
del proyecto de la creación de la Gran Colombia, se convirtió en el líder de los campos de batalla
para el Ejército Libertador. Tuvo una exitosa campaña para la liberación de Ecuador, decidida en la
Batalla de Pichincha, en 1822. La campaña en Perú fue más compleja: aunque José de San Martín
ya había declarado el territorio como independiente, lo cierto es que aún subsistía allí un reducto
del virreinato. Dos batallas fueron decisivas para la independencia del Perú: la Batalla de Junín,
que tuvo lugar en agosto de 1824, y la Batalla de Ayacucho, en diciembre del mismo año. Por esta
victoria se le concedió a Sucre el grado de Gran Mariscal, siendo por eso que se le reconoce
históricamente como Gran Mariscal de Ayacucho. Últimos años Sucre llegó al Alto Perú con la idea
de ser garante del proceso de independencia que se estaba dando allí, ya que en la práctica los
españoles ya no tenían injerencia en hispanoamérica. El verdadero conflicto radicaba en que los
habitantes del territorio no habían decidido si formaban una nación uniéndose a Perú, o
uniéndose al Río de la Plata. Finalmente, se decidió formar una nueva nación que se llamaría
Bolivia, en homenaje al Libertador. La independencia de Bolivia se consolidó en 1825, y aunque le
fue ofrecida a Bolívar la presidencia, éste declinó la oferta, que recayó en Sucre. Aunque el Gran
Mariscal trabajó duro para darle al país un marco legal sólido, pronto las intrigas constantes en el
país derivarían en un atentado contra su persona, lo que provocó la renuncia de Sucre.
Posteriormente se casó con Mariana Carcelén, una joven de la nobleza mantuana de Quito. Sucre
decidió radicarse en Ecuador, manteniéndose entre este país y Colombia. Debido al prestigio que
tenía, era más que probable que optase por la Presidencia de Quito. Se cree que por este motivo
se urdió una conspiración que terminaría en el asesinato del Mariscal, el 4 de junio de 1830. En
vida, Sucre había manifestado el deseo de ser sepultado en Quito, por lo que sus restos reposaron
en el Convento del Carmen Bajo, y en el siglo XX fueron trasladados a la Catedral Metropolitana de
Quito.
Legado
El trato dispensado a Sucre en Bolivia, y su posterior asesinato, se pueden ver como señales de los
conflictos que se agitaban entre las fuerzas políticas de las jóvenes naciones americanas por el
ejercicio del poder. A pesar del prestigio del que gozaba, sucumbió víctima de las ambiciones de
los hombres de la época. Varios lugares, entre ellos la ciudad capital de Bolivia y el estado natal del
Gran Mariscal, ostentan su nombre, así como la unidad monetaria que usó Ecuador.
José Antonio Páez
Nació el 13 de junio de 1790 en Curpa, cerca de Acarigua. Hijo de Juan Victorio Páez y María
Violante Herrera. A los ocho años entra en la escuela de doña Gregoria Díaz, en la población de
Guama. A los 17 años, su madre lo envía a una importante misión en Patio Grande, cerca de
Cabudare. Llevaba una espada vieja, un par de pistolas de bronce, bastante deterioradas y
doscientos pesos para gastos personales. De regreso de su misión, cuando pasaba por Mayurupí lo
asaltaron cuatro forajidos, disparó su arma y mató de un tiro al que parecía el jefe. Escapa de la
justicia ocultándose en una hacienda donde trabajó de peón.
Después fue jefe absoluto del departamento de Venezuela, integrante de la República de la Gran
Colombia. En 1826 fue destituido por el Senado y se vio obligado a entregar el mando el 29 de
abril. Al día siguiente estalló el movimiento llamado 'la Cosiata', Páez retomó el poder. Simón
Bolívar viajó desde el Perú y en Puerto Cabello (1 de enero de 1827) decretó una amnistía total y
lo confirmó en su cargo.
En 1848 se levantó en armas contra José Tadeo Monagas y fue derrotado. Invadió el país en el año
siguiente, pero otra vez fue vencido, detenido y más tarde desterrado. En septiembre de 1861
regresó a Venezuela y estableció un régimen dictatorial.
Firmó el Tratado de Coche en 1863, y viajó a Nueva York (Estados Unidos), ciudad en la que
falleció el 6 de mayo de 1873. Sus restos fueron repatriados y sepultados en el Panteón Nacional,
el 19 de abril de 1888.