Anda di halaman 1dari 104

trastornos

de la conducta
alimentaria:
cómo actuar desde la familia
Claves para prevenir y
tratar trastornos
alimentarios como la
anorexia y la bulimia
desde la familia.
la familia cuenta
Trastornos
de la conducta
alimentaria:
cómo actuar
desde
la familia
Claves para prevenir y tratar trastornos alimentarios
como la anorexia y la bulimia desde la familia
Autores
Rosa Calvo Sagardoy (Dra. Psicología Clínica)
Rodrigo Puente (Psiquiatra)
Pilar Vilariño (Psicóloga Clínica)

Equipo de la Unidad de Tratamiento


de los Trastornos de la Conducta Alimentaria.
Hospital Universitario Santa Cristina.

Mi Querido Watson.

Coordinación
Dirección General de la Familia y el Menor

Dirección Creativa
Mi Querido Watson. / equipocreativo.

Fotografías
Laura Algibez.

Edita
Dirección General de la Familia y el Menor
Imprime: B.O.C.M.
Tirada: 5.000
Edición: Reimpresión 2016

Deposito Legal: M-33.279-2008


Índice

Introducción 6

Definición y tipos 14
Anorexia nerviosa. 15
Bulimia nerviosa. 18
Factores comunes a ambos trastornos. 21
Otros trastornos alimentarios asociados. 25

La familia y los trastornos de la conducta alimentaria 30

Factores determinantes de los TCA 36


Factores socioculturales. 37
Factores personales. 39
Factores genético-biológicos. 43
Factores familiares. 44
Factores desencadenantes. 46

Inicio del problema y detección precoz 50


Anorexia nerviosa. 51
Bulimia nerviosa. 54

Tratamiento-intervención 60
Evaluación y diagnóstico. 66
Intervención. 66
Formas de intervención más adecuadas. 88
Duración del tratamiento. 91
Prevención. 92

Anexo 1 94
Clasificaciones diagnósticas. 94

Anexo 2 97
Complicaciones médicas en los TCA. 97

Bibliografía 102

Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
6/103

Introducción.

Introducción.
Autores: Rosa Calvo Sagardoy (Dra. Psicología Clínica),
Rodrigo Puente (Psiquiatra), Pilar Vilariño (Psicóloga Clínica)
Equipo de la Unidad de Tratamiento de los Trastornos de la
Conducta Alimentaria. Hospital Universitario Santa Cristina.

Un grupo cada vez más numeroso


continúa en el empeño de controlar
su comida hasta alterar los
mecanismos de autorregulación
alimentaria.

6 Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
7/103

Trastornos de la conducta alimentaria: cómo actuar desde la familia.

Cada año, varios cientos de per- de la alimentación de las personas


sonas en nuestro país, no sólo que padecen los trastornos, des-
chicas jóvenes, sino también mu- cuidando los aspectos personales
jeres y varones de distintas edades y familiares implicados. Sin embar-
-desde la prepubertad (9-11 años) go, tales aspectos son ineludibles
hasta la edad madura (50 años en el contexto terapéutico para
o más)-, deciden hacer dietas, lograr una recuperación estable de
y restringen su alimentación de las/los pacientes.
forma deliberada para perder pe-
so. Buscan salud, belleza, “clase”, Los trastornos de la conducta
éxito social y/o laboral, autoestima, alimentaria no son sólo signo de
etc. Afortunadamente, no todas problemas con la comida, sino que
ellas desarrollan un trastorno ali- son, primordialmente, los síntomas
mentario, bien porque desisten de de la forma en que algunas per-
hacer dieta, bien porque aprenden sonas (cada vez más numerosas)
a comer adecuadamente (sin res- afrontan la vida. La comida se uti-
tricciones o carencias nutricio- liza para sentir cierto control ante
nales). Un grupo cada vez más la sensación de descontrol hacia
numeroso continúa en el empeño situaciones y emociones que no
de controlar su comida hasta alte- domina. Así, la persona que desa-
rar los mecanismos de autorregu- rrolla una anorexia nerviosa, en-
lación alimentaria, y terminan por cuentra su libertad y autoestima
desarrollar alguno de los siguien- en el dominio/restricción de su
tes trastornos: anorexia o bulimia comida y su peso. Su libertad,
nerviosa, atracones, sobrepeso, porque debido a su deseo de
obsesión por la comida sana, etc. complacer a los demás, nunca
antes expresó ni cubrió sus nece-
Es quizás por esta razón que sidades y deseos. Su autoestima,
la opinión predominante en la porque el control de la comida
sociedad actual respecto a los compensa su sensación de fra-
Trastornos de la Conducta Alimen- caso perpetuo generado por la
taria (TCA) se apoya en la creencia búsqueda de una perfección irreal
de que las personas que los pade- e inalcanzable. Además, al contro-
cen tienen un problema con la co- lar su dieta suaviza su tensión, su
mida debido a su deseo de estar ira y su ansiedad.
delgadas. Esta opinión, aunque
cierta, es muy incompleta y, en “Una de mis mayores dificul-
ocasiones, ha contribuido a tri- tades es la falta de conanza en
vializar la gravedad de la patología, mí misma y en mi capacidad
ya que no tiene en cuenta que para sacar las cosas adelante y
el excesivo control o el descontrol arreglar mis problemas. Creo
de la comida está más asociado que me aislé y me metí en los
con la búsqueda de métodos para desarreglos de la alimentación
calmar la ansiedad, llenar un vacío para evitar enfrentarme a algu-
o sentirse seguro que con el ham- nos de mis problemas. Reco-
bre biológica. Un punto de partida nozco que, cada vez que se me
tan limitado respecto a los TCA presenta algún inconveniente en
genera tratamientos sesgados en mi trabajo, me siento inferior al
los que, habitualmente, se realiza resto, se me mete en la cabeza
el control (más o menos voluntario) la idea de que no sirvo para lo

Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
7
8/103

Introducción.

que estoy trabajando. No me para poder bloquear sus pensa-


entra en la cabeza pensar que, mientos, emociones y sentimientos
como toda persona, soy limi- que perciben como amenazantes
tada y no tengo por qué tener para su estabilidad psíquica.
todos los conocimientos nece-
sarios, sino que me debo per- Una vez instaurado el control o
mitir el hecho de preguntar a los el descontrol alimentario, las per-
demás sin que esto sea una sonas que padecen un TCA em-
derrota para mí.” piezan a realizar cambios en su
forma de pensar, sentir y compor-
“He aprendido últimamente a tarse. Estas trasformaciones com-
no ser tan dura conmigo mis- portamentales, emocionales y re-
ma, porque yo nunca me he lacionales que sufren, junto con
felicitado por mis propios logros la salud precaria generada por
por grandes que fueran y, sin sus conductas patológicas (dietas
embargo, en cuanto cometía extremas, atracones, purgaciones,
un fallo, aunque fuera muy pe- ejercicio excesivo) producen un
queño, me he estado torturan- gran dolor en el entorno familiar.
do y llamándome de todo por
haberlo hecho”.

Por su parte, la persona que


desarrolla una bulimia nerviosa
se siente muy insegura acerca
de su valía personal y la busca
únicamente en su apariencia. Pre-
cisa una aprobación y admiración
permanentes de los demás. Para
calmar su malestar interior busca
la comida que, temporalmente, le
alivia y reconforta. Las conductas
purgativas que realiza, no sólo
tienen como objetivo prevenir una
ganancia de peso debida a los
atracones, sino obtener un cierto
control de su impulsividad suavi-
zando así su ansiedad y estrés.

Muchas personas con


sobrepeso encuentran en “Aunque no sé si lo recuerdo
la comida el ansiolítico que o me lo han dicho, yo era una
necesitan, sin ser conscientes niña vitalista, muy activa, con
de la relación establecida mucha ilusión por conocer, sa-
entre ansiedad y comida. ber, vivir ¿será que poco a poco
según fui creciendo comenzó a
darme miedo la vida? Me sien-
Ambos grupos -anoréxicas/os y to perdida, presionada, aban-
bulímicas/os- enfocan su atención donaba, agobiada, angustiada,
en las calorías y/o el ejercicio físico obsesiva. Cuántas veces he que-

8 Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
9/103

Trastornos de la conducta alimentaria: cómo actuar desde la familia.

rido gritar a pleno pulmón y no perfeccionistas y nunca se sentían


lo he hecho, la impotencia es seguras de poder alcanzar el ideal
una de mis emociones y mis propuesto.
sentimientos más constantes.
Pasé de ser formal, alegre, in-
quieta, diligente, sana, sensible, Hoy se sabe que esas
buena, a ser mala, fuerte, des- características conductuales,
conada, y enferma.”
típicas de las personas
anoréxicas, pueden no ser
Los familiares no comprenden causa, sino consecuencia
como su hija/o, anteriormente tan del ayuno prolongado y que
bien adaptada/o y tan sana/o, es se dan en todas aquellas
ahora una persona difícil, testaru- personas que, por diversas
da a la que no le importa arriesgar
razones, han realizado un
su vida. La mayoría de las familias
se verán desbordadas, se sentirán
ayuno voluntario aunque
impotentes, frustradas, desgracia- no estén obsesionadas por
das, y no tendrán mas remedio su apariencia externa.
que aprender nuevas formas de
relacionarse con sus hijas/os o
esposas/os esperando que ello Durante el siglo XIX se produce
facilite una recuperación que, fre- un creciente interés científico por
cuentemente, será ardua y lenta. la anorexia que culmina a finales
de siglo con la convicción de que
La aparente modernidad de los las personas que se abstienen de
TCA, sustentada en el notable in- comer son enfermas y necesitan
cremento de su incidencia y preva- tratamiento. Es la época victoria-
lencia en el último cuarto del siglo na, y la moda por la delgadez se
XX, harán pensar a muchas fami- impone entre las jóvenes. Marcé
lias que se trata de patologías “ac- (1828-1864) es el primer autor que
tuales”, de las que todavía se sabe publica un artículo describiendo
muy poco como para que sea el trastorno y destacando que el
posible la mejoría. Sin embargo, rechazo a comer se presenta fun-
las referencias históricas nos indi- damentalmente en chicas que ini-
can que, en otras épocas, hubo cian la pubertad, atribuyendo su
personas que buscaron la del- causa a factores mentales y no
gadez y presentaron trastornos físicos. Unos años más tarde,
similares a los actuales TCA. Por Laségue y Gull, considerados los
ejemplo, el ayuno que se im- autores pioneros en la descripción
pusieron algunas santas como una del trastorno y de sus recomenda-
forma de ascetismo para alcanzar ciones terapéuticas, publican, casi
la santidad es una de las primeras de forma paralela, sendos artícu-
referencias de comportamiento los sobre la Anorexia. Gull (1868)
anoréxico. Ellas dedicaron parte de recalcó la importancia de realizar
su vida a alimentar a los demás, un diagnóstico diferencial y de
restringiendo su dieta de forma buscar explicaciones causales al-
muy severa. Padecieron ameno- ternativas a los síntomas. Laségue
rrea, estreñimiento, dificultades (1873) que describe el trastorno
para conciliar el sueño y tuvieron tal y como lo conocemos actual-
una vida hiperactiva; eran muy mente, destaca que las medicinas

Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid 9
10/103

Introducción.

y los estimulantes del apetito son la proporción de pacientes entre


ineficaces para ayudar a su recu- 12-13 años fue la más frecuente
peración, y señala la situación de surgió el mito de que la anorexia
indefensión en que se encuentran era característica de chicas blan-
las familias debido a las manipula- cas, muy inteligentes, pertenecien-
ciones de las pacientes. Este autor tes a clase social alta o media alta
entendió que para poder recuper- y que estaban iniciando su ado-
arlas era fundamental introducir lescencia. Desgraciadamente, este
cambios en las relaciones que es- mito infundió al trastorno un gla-
tablecían con sus familiares y alle- mour que derivó en el consiguiente
gados. Sus descripciones y suge- deseo de “ser anoréxica” espe-
rencias de tratamiento permitieron cialmente para las chicas mas vul-
actuaciones que aún en la actuali- nerables a la presión del entorno
dad siguen vigentes. social.

Respecto a la Bulimia Nerviosa, En la actualidad se considera


las descripciones fueron muy es- que los trastornos de la
casas hasta los años 70 y todas
conducta alimentaria no son
se sitúan en el siglo XX. Es espe-
cialmente conocida la descrip-
exclusivos de ninguna edad,
ción del trastorno realizado por el sexo, nivel intelectual, raza
Dr. Russell en 1979, momento en o grupo social.
que acuña el nombre de bulimia
nerviosa para referirse a una pau- Aunque el desarrollo de la ano-
ta de comportamiento alimentario rexia es mas frecuente en el inicio
caracterizada por el consumo de de la pubertad y el comienzo de
grandes cantidades de comida la bulimia es mas frecuente en la
seguidas de una purgación. No juventud, los trastornos pueden
podemos, sin embargo, obviar la ocurrir en la infancia y en la edad
presencia de trastornos bulímicos adulta. Igualmente, no son sólo
en otras épocas. La similitud de las mujeres quienes presentan al-
las conductas bulímicas con las teraciones de la conducta alimen-
comilonas y purgaciones propias taria, ya que actualmente el nú-
de las culturas en decadencia co- mero de hombres ha crecido de
mo la romana, pone en evidencia forma paulatina debido a las exi-
la existencia de esta patología des- gencias sociales para lograr un
de tiempos muy remotos. Actual- cuerpo musculoso y sin grasa.
mente, es el trastorno mas fre- Aparecen, así mismo, en todos
cuente y se maniesta, en muchos los estratos sociales y en cual-
casos, con una impulsividad aso- quier raza o condición. La supues-
ciada a otros comportamientos ta inteligencia superior basada
de riesgo -alcohol, compras, caos- en resultados académicos brillan-
característicos de un trastorno de tes está más relacionada con ho-
personalidad. ras de estudios que con la dota-
ción de un Cociente Intelectual
Los años 80 destacan por el incre- extraordinario.
mento exponencial de pacientes
con patología alimentaria, espe- A partir de los años 60-70 apare-
cialmente anorexia nerviosa, en cen diversas formas de tratamiento
países “desarrollados”. Dado que -enfoque dinámico, cognitivo-con-

10 Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
11/103

Trastornos de la conducta alimentaria: cómo actuar desde la familia.

ductual, sistémico- que se com- De los estudios y reexiones efec-


plementan mutuamente. Unos au- tuados en los últimos treinta años
tores destacan la necesidad de acerca de la contribución de las
cambiar la excesiva protección de familias de las/los pacientes a la
los padres hacia la hija/o; otros, la evolución de los trastornos de la
necesidad de buscar refuerzos al- conducta alimentaria, se ha llega-
ternativos a la comida; el fomento do a ciertas conclusiones innega-
de la expresión emocional y/o una bles. Parece que las familias de
interacción asertiva. pacientes con anorexia nerviosa
presentan un funcionamiento muy
organizado con tendencia a un
Todos los modelos terapéuticos control rígido, en tanto que las
coinciden en dar una gran familias de pacientes con bulimia
importancia al papel que cumple nerviosa presentan un funciona-
la familia en su recuperación, miento más caótico y crítico. A su
especialmente si cambia la vez, se ha observado un mayor
forma en la que sus miembros riesgo en familias que muestran
se relacionan. una excesiva preocupación por
el peso y el aspecto corporal con
tendencia a realizar dietas alimen-
Aunque ningún enfoque terapéu- tarias, en familias en las que los
tico sobre los TCA considera a hijos expresan un gran malestar
los padres y/o allegados culpables en el momento de discutir o solven-
de la patología, la mayoría se sien- tar sus problemas con los padres,
ten responsables y se preguntan y en familias de inmigrantes con
“¿qué hemos hecho mal?, ¿cómo un deseo imperioso de adapta-
es posible que no nos hayamos ción a los valores de la sociedad
dado cuenta antes de que empe- occidental.
zaba a tener problemas con la co-
mida?, ¿cómo es posible que no
hayamos sido capaces de evitar
que desarrolle el trastorno?,
¿por qué me empeñe
en que adelgazara...?”
Se preocupan recor-
dando lo sucedido, y
se inculpan por su for-
ma de educar, por los
valores que han infun-
dido a sus hijas/os o
por sus propios problemas
con la comida. La sensación
de culpa puede incrementarse si
conocen que investigadores y clíni- En las familias en que ambos pro-
cos han encontrado patrones rela- genitores animan a sus hijos a
cionales similares (sin que ello sig- controlar su peso, magnicando la
nique que estaban en el origen de presión cultural hacia el atractivo
la enfermedad) en algunas familias físico -delgadez- la probabilidad
de pacientes con anorexia y buli- de patología se dispara. Esta pe-
mia nerviosa. tición transmitida de padres a hijos

Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
11
12/103

Introducción.

parece considerar el peso y, por transitorias, que presentan mu-


extensión, el atractivo corporal, chas/os jóvenes, y cada vez más
como sujetos al control voluntario, adultos, a consecuencia de la mo-
lo que aumenta la probabilidad da actual de las dietas. Además,
de que los jóvenes inicien regí- desea contribuir con consejos e-
menes alimentarios restrictivos, caces acerca de cuál es la mejor
principal situación de riesgo para manera para los padres de abor-
padecer un trastorno de la con- dar el problema con su hija/o, para
ducta alimentaria. favorecer que reconozca sus di-
ficultades y pueda pedir ayuda
La presente guía está especial- cuanto antes. Debido al incremen-
mente dirigida a las personas que to de personas mayores con TCA
padecen un trastorno alimentario se ha tenido en cuenta que al-
y a sus familias puesto que, en gunos familiares del/la paciente
el camino de la liberación de su son su cónyuge e hijos y necesitan
patología, necesitarán una cola- información y apoyo adaptados a
boración mutua y estrecha, tanto su situación especíca.
en el cumplimiento de las estrate-
gias sugeridas por sus psicotera- Debido a las dificultades inheren-
peutas y médicos, como en el tes al manejo de las/los pacientes
entendimiento del signicado pro- que desarrollan una anorexia o
fundo de lo acaecido. una bulimia se pretende, asimismo,
proporcionar una información con-
Su objetivo prioritario es ofrecer la cisa y práctica acerca de:
información de que disponemos
para que puedan corregirse algu- Características esenciales de los
nas ideas inexactas acerca de TCA.
la naturaleza de los trastornos, su
evolución y tratamiento. Conocer Identificación de los primeros
las características de los trastornos síntomas.
y los modelos de dinámica familiar
predominantes permite plantearse Afrontamiento del problema en
maneras alternativas y más salu- sus inicios.
dables de relación en las familias
de forma que se favorezca la recu- Tratamientos posibles.
peración de sus familiares. Sin em-
bargo, es fundamental aclarar que Pautas relacionales más con-
aunque estas observaciones se venientes en el entorno familiar y
han hecho sobre multitud de fami- social.
lias no tienen por qué ajustarse a
la de quienes lean esta guía. Proceso de recuperación.

Puesto que los inicios de los tras- A lo largo de los capítulos se su-
tornos son difíciles de percibir, la gieren ciertas transformaciones en
información aportada en esta las relaciones personales y fami-
guía pretende contribuir a la de- liares de las/los pacientes y sus
tección precoz de los primeros familias, a la vez que se quiere
síntomas del trastorno, diferen- subrayar que, en ningún caso, es-
ciándolos de aquellas conductas tas recomendaciones sustituyen el
alimentarias problemáticas, pero trabajo profesional y presencial del

12 Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
13/103

Trastornos de la conducta alimentaria: cómo actuar desde la familia.

tratamiento. Únicamente preten- a una recuperación efectiva y es-


den completar el trabajo clínico table de cada una/o de los afecta-
realizado en la consulta y contribuir dos por los trastornos.

Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
13
14/103

Definición y tipos.

Definición y tipos.

Quienes padecen anorexia nerviosa


presentan un miedo intenso a ser
obesos y un deseo pertinaz de perder
peso, por lo que se enrolan
en comportamientos dirigidos a
conseguir dicho fin.

14 Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
15/103

Trastornos de la conducta alimentaria: cómo actuar desde la familia.

Anorexia nerviosa masa corporal igual o inferior a


17.5. Para poder hacer el diagnos-
La anorexia nerviosa ha sido quizá tico de anorexia es preciso des-
la enfermedad paradigmática entre cartar que esta pérdida de peso
los trastornos de la conducta ali- dependa de enfermedades físicas
mentaria y la de mayor dificultad (cáncer u otras patologías) o psí-
de comprensión. Es una patología quicas (depresión, delirio de enve-
severa, potencialmente mortal, con nenamiento, etc.)
un inicio próximo a la adolescen-
cia, fundamentalmente en torno Aunque el termino anorexia
a la pubertad, y caracterizada por significa perdida de apetito,
el ayuno, un temor irrefrenable a esta característica no es
la ganancia de peso y una exce- propia del trastorno ya que
siva pérdida de éste, con las con- la persona anoréxica tiene
secuencias somáticas y psíquicas
mucho hambre debido a
que ello acarrea. Se manifiesta
de manera más frecuente en mu-
su restricción alimentaria.
jeres que en varones, siendo la Y sólo en estadios tardíos
proporción aproximada entre am- llega a perder la sensación
bos sexos de unas diez mujeres de apetito.
por cada varón.
En las mujeres ya desarrolladas
Quienes padecen anorexia nervio- se pierde el periodo o se tienen
sa presentan un miedo intenso trastornos menstruales. Si es una
a ser obesos y un deseo pertinaz niña no desarrolla la menstrua-
de perder peso, por lo que se en- ción en su momento o sólo apa-
rolan en comportamientos dirigidos rece de forma esporádica. En los
a conseguir dicho fin. Estos son, hombres los niveles de hormona
entre otros, la privación o la se- sexual descienden.
lección restrictiva de determinados
alimentos hasta la malnutrición, la La/el paciente anoréxica/o puede
práctica de un ejercicio extenuante conseguir sus objetivos a través
como medio para quemar calorías, de diferentes métodos, que sirven
la inducción del vómito o el uso para clasificar la anorexia en sub-
de otras medidas purgativas para grupos distintos:
“librarse” de la comida ingerida,
el consumo de fármacos “adel- Anorexia restrictiva: la pérdida
gazantes” u otras conductas que de peso se realiza a través de
supuestamente conducen a la no una restricción de su dieta. No se
asimilación, eliminación o compen- utilizan métodos purgativos y no
sación de las calorías aportadas. tienen, al menos durante mucho
tiempo, episodios de descontrol.
Para poder considerar que una Esta restricción se complementa,
persona tiene anorexia, tiene que en la mayoría, por la realización
existir la auto-imposición de man- de ejercicio excesivo y por una
tener su peso por debajo del nor- hiperactividad en las tareas que
mal. El criterio mínimo utilizado ha efectúan.
sido un peso por debajo del 85%
del peso esperado para su edad Cuando el método predominante
y su altura, o tener un índice de para perder peso es el ejercicio

Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
15
16/103

Definición y tipos.

excesivo y obsesivo, mucho más requiere que el médico aconseje


allá de lo que es necesario para tomar algún tipo de laxantes y
mantenerse “sano”, se considera favorecer la ingesta de una dieta
una variante del subgrupo anterior rica en fibra. Aún así es posible
y recibe el nombre de anorexia que tengan muchas dificultades
atlética. El ejercicio va consumien- para solventarlo y se produzca una
do tiempo y espacio a cualquier adicción. El estreñimiento no sólo
otra actividad de la persona es físico ni se refiere únicamente
trabajo, estudios, familia, ocio. La a la imposibilidad de evacuación
valoración personal se realiza a de la comida. Durante el trastorno
través de la resistencia y la su- la/el paciente tiene igualmente
peración continua de los logros un “estreñimiento mental” manifes-
en la actividad deportiva. Parale- tado en un descenso de fluidez
lamente con el ejercicio suele de ideas, dificultades para des-
darse un fanatismo por la comida prenderse de cualquier objeto,
“sana”. siendo especialmente “agarradas”
con su dinero que procuran no
Anorexia purgativa: además de gastar.
hacer dietas y/o ejercicio exce-
sivo, utilizan métodos purga-
tivos para eliminar la comida
ingerida. La purgación puede
darse después de una can-
tidad mínima de comida, de
cualquier ingesta, o después de
un atracón. Aproximadamente la
mitad de las/los anoréxicas/os
presentan atracones en algún
momento de la evolución del
trastorno.

Los vómitos de la/el paciente


anoréxica/o se inician por dos ra-
zones principales: el miedo a la
gordura y la culpa por haber cedi- Los dos subgrupos rechazan nu-
do a su hambre. La purgación les merosas comidas por insanas y
apacigua la ansiedad producida “grasosas” ya que consideran la
por comer esa mínima cantidad de grasa como algo desagradable y
comida, cuyos posibles efectos repugnante que debe eliminar-
en el cuerpo, su pensamiento dis- se a toda costa; incluso aunque su
torsiona; y a la vez purgan la culpa eliminación de la dieta afecte
de ceder a la tentación y haber gravemente su salud. Clasican el
comido más de lo que se habían peso corporal en términos mo-
programado. rales: la gordura se juzga como
algo moralmente reprobable y
La mayoría de las/los pacientes la delgadez como algo que les
utilizan laxantes porque el trastor- otorga superioridad moral. El in-
no anoréxico cursa con un estre- cremento de peso o la pérdida
ñimiento pertinaz. La intensidad de control sobre la comida gene-
de este estreñimiento permanente ran una autocrítica extremada

16 Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
17/103

Trastornos de la conducta alimentaria: cómo actuar desde la familia.

que se asocia a sentimientos de-


Instaurado el trastorno
presivos y de auto-desprecio. La
pérdida de peso y el control de la se producen una serie de
ingesta les llevan a una sensación cambios que pueden dificultar
de triunfo y euforia. Estos cambios la relación con la persona
emocionales se dan únicamente que padece la anorexia.
asociados a la comida y el peso,
mientras que otros acontecimien- La malnutrición repercute de ma-
tos vitales problemáticos parecen nera significativa en la mente,
dejarles indiferentes. causando alteraciones bioquímicas
que afectan el modo de pensar,
Es muy posible que en el inicio de sentir y de comportarse del/la
del trastorno la/el paciente defina paciente desnutrido/a. A medida
su estado de ánimo como eufóri- que el estado nutricional empeora
co demostrándose a sí mismo que la persona se muestra más irrita-
sus dicultades se solucionan me- ble y apática, testaruda y negativa.
diante las estrategias asumidas en Finalmente, la depresión hace su
el control de la alimentación. Con aparición, reemplazando la previa
la euforia aparece una sensación sensación de euforia. El temor a
de control, puede que por prime- perder el control que con tanto
ra vez en su vida. Siente que es esfuerzo ha conseguido es apa-
capaz de controlar algo, aunque bullante, ya que supone que su
sea tan básico como lo que come. pérdida irá acompañada de todo
Cuanto más peso pierde más tipo de exceso y caos, la vida
poderoso se siente, más fuerte. perderá su sentido. Fuera de esa
Para ser igual que los demás, con- rigidez sólo habrá desamparo y
tradictoriamente, se obliga a ser vacío.
mejor que los demás; ante el sen-
timiento de no ser lo suficiente- La negación o minimización de las
mente buena/o aspira a ser la/el sensaciones corporales es otra
mejor. Se crea así un ideal rígido de las consecuencias que acom-
y desproporcionado, inalcanzable. pañan a la malnutrición. Las sen-
Aparece entonces el miedo a per- saciones de hambre, de frío, de
der lo conseguido, endureciendo debilidad y cansancio se eliminan
las reglas que se impone como de la mente mediante pensamien-
medio de asegurar lo conquistado. tos auto-inducidos apropiados: “no
siento hambre, no necesito comer,
Ocasionalmente, la/el paciente que así es como estoy bien… no siento
restringe su alimentación se verá frío, no siento nada” o con una
impelida/o a consumir grandes actividad extenuante que le impi-
cantidades de comida -de forma da pensar.
objetiva o subjetiva para el dis-
torsionado entendimiento del/la Las personas que padecen una
paciente- como respuesta de su anorexia están necesitadas de aten-
organismo a la desnutrición. Cuan- ción y la buscan de forma deses-
do esto ocurre, la pretensión es perada a través del sometimiento
compensar lo sucedido mediante y los síntomas. Debido a la nula
el vómito, el uso de laxantes, un valoración de sí mismas como
ejercicio extenuante o por otros personas y a su sentimiento de
medios. inferioridad e indefensión, subor-

Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
17
18/103

Definición y tipos.

dinan sus necesidades a las del El reconocimiento de las personas


otro pensando que así no les aban- con bulimia nerviosa no se puede
donan. Su falta de autoestima le fundamentar en el peso como su-
impide quejarse, expresar sus opi- cede con las que padecen ano-
niones y discrepancias. Al creerse rexia ya que su peso puede estar
sin derechos, acepta los abusos incrementado, reducido o ser el
verbales, físicos y/o sexuales casi adecuado respecto del idóneo
como algo merecido. para su edad, talla y sexo. Lo que
sí es frecuente es la aparición de
“Es cierto que la persona que fluctuaciones rápidas en el peso
inicia una anorexia busca -prác- como resultado de los hábitos
ticamente de continuo- la valo- alimentarios caóticos que, al co-
ración, el reconocimiento y la mienzo, pasan desapercibidos.
aceptación de los demás que
viven a su alrededor. Vienen a Como norma general puede de-
ser las vitaminas necesarias cirse que la comida realizada por
para su mente y su espíritu. el/la paciente delante de otros
No sé si esto forma parte de suele ser normal e incluso abun-
la personalidad de uno o es dante, aunque algunos días ayune
sólo una consecuencia de la o realice una dieta muy restrictiva.
enfermedad; lo que si es bien En las reuniones y celebraciones,
cierto es que te dejas la piel los amigos y allegados le/la ven
en esa especie de reclamo comer normal o en exceso y a
emocional. En muchas ocasio- todos sorprende el buen tipo que
nes me he sentido como al- tiene en comparación con lo
guien adaptable y moldeable que come. Tras esta apariencia
a los intereses de los demás.” de normalidad alimentaria se ha-
llan escondidos sus atracones y
su comida excesiva, que realiza de
Bulimia nerviosa forma secreta.

Habitualmente, la bulimia nerviosa A consecuencia de la privación


se inicia de una manera parecida de determinados alimentos y
a la anorexia nerviosa, reduciendo de periodos de ayuno ocultos,
la cantidad de comida ingerida o el deseo de comer se hace
eliminando determinados alimen-
imparable y la impulsividad
tos de la dieta habitual, pero en
lugar de continuar con un ayuno
sin freno domina a la persona
mantenido, las/los pacientes co- que restringe su comida.
mienzan a darse atracones y
presentan conductas purgativas Cuando esto ocurre no hay comi-
o compensatorias. Algunos estu- da que se resista. El/la paciente
dios han señalado que cinco de consumirá de forma descomunal
cada cien mujeres padecerían bu- leche, cereales, bollos, galletas,
limia nerviosa en los países occi- chocolate. A continuación engullirá
dentales, y ya hay numerosos va- todo lo que encuentre en la casa:
rones que presentan atracones a el queso y los ambres, la cena de
consecuencia de la manipulación toda la familia; la comida del día
de su alimentación para obtener, siguiente; los alimentos y chuces
supuestamente, estar en forma. que él/ella mismo/a se haya com-

18 Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
19/103

Trastornos de la conducta alimentaria: cómo actuar desde la familia.

prado; finalmente, en el extremo cesidad imperiosa de purgarse


más grave del trastorno bulími- (usualmente a escondidas), ya sea
co, la comida de los atracones por la culpa que genera, el temor
será cualquier cosa comestible, lle- a ganar peso, las sensaciones
gando a comer los restos de la de malestar abdominal, etc. Las
basura, la comida congelada o conductas de purga y compen-
la comida de los animales de sación de la ingesta son diversas:
compañía. vómitos, uso de laxantes o diu-
réticos, empleo inadecuado de
Sin embargo, algunos familiares fármacos, ejercicio extenuante o
se sienten confusos cuando su nuevos períodos de ayuno. Lo que
allegado/a enfermo/a les dice que diferencia a la bulimia nerviosa de
se ha dado un atracón, ya que la la anorexia nerviosa, atendiendo a
cantidad ingerida no es excesiva. la conducta alimentaria, no es la
Ello se debe a la diferencia exis- presencia de conductas purgati-
tente entre el atracón objetivo y vas, sino la existencia de un patrón
subjetivo. cíclico de atracón-purga-atracón.

Una vez que el impulso de comer


Un atracón es objetivo cuando aparece, no existe posibilidad de
la cantidad de alimento ingerida control (sin un largo tratamiento),
es mucho mayor de la habitual sea la hora que sea, se esté en
y se come en un período de el lugar que se esté o se realice
tiempo breve para esa cuantía cualquier actividad por muy de-
de comida. Acompañando seada que sea. La evitación del
al atracón tiene que aparecer desayuno o la comida prepara un
un sentimiento de pérdida de atracón que puede aparecer en
control sobre el comportamiento minutos u horas. Reducir la inges-
alimentario. ta del día a la cena predispone
para el surgimiento del atracón
Un atracón es subjetivo cuando nocturno que le perturbará el
la sensación de falta de control sueño ya que tendrá que levan-
está asociada a una cantidad tarse de forma imperiosa para
de comida poco cuantiosa o, comer. Por la mañana se sentirá
en ocasiones, extremadamente agotado/a y le costará levantarse,
pequeña. iniciando un absentismo escolar o
laboral progresivo. El caos horario
se puede extender a toda su vida
hasta que el día se trasforma
en una sucesión de atra-
cones y de vómitos.

Algunas de las con-


ductas desarrolladas
por las/los pacien-
tes bulímicas/os adop-
tan rasgos más propios de las
adicciones, dado que conducen a
El atracón tanto objetivo como estados de placer y sentimientos
subjetivo es seguido de una ne- agradables y reconfortantes que

Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
19
20/103

Definición y tipos.

actúan como elementos reforzan- frutar de una especie de éxtasis


tes de nuevos episodios. Por ello, cuando abandonan el deseo de
la bulimia ha sido comparada con control y se “rinden” ante el atra-
las adicciones a otras sustancias o cón. Este se vive con una sen-
conductas (juego, compras com- sación agradable y desagradable
pulsivas). Unos autores han sugeri- al mismo tiempo. Agradable mien-
do que la adicción es a la comida, tras empiezan a comer y comen.
otros, a las conductas purgativas; Desagradable cuando terminan de
la mayoría piensa que la adición es comer y se dan cuenta tanto de lo
a ambas. La comida excesiva se mucho que han comido como de
utiliza para calmar una sensación la manera incorrecta en que han
de hambre irrefrenable y la pur- comido.
gación para evitar la ganancia de
peso. En uno y otro caso, la con- A pesar de la imagen que pre-
ducta realizada está unida al alivio tenden transmitir (y que de hecho
de sentimientos no deseados y/o la transmiten en sus relaciones me-
descarga de tensión. Puesto que el nos estrechas) es muy probable
alivio del malestar corporal y la an- que se sientan solos/as y atemo-
siedad es uno de los refuerzos mas rizados/as ante la posibilidad de
potentes para la persona y la comi- que “su secreto” sea revelado. Fi-
da o la purgación tiene efectos in- nalmente, conducirse de forma
mediatos, el organismo aprende a impulsiva ante la comidas, acom-
utilizarlos (como en cualquier otra pañada de sentimientos de pér-
adicción) sin tener en cuenta que dida de control, se asocia a un
tales beneficios son transitorios y sentimiento de desamparo, de in-
cada vez se necesita mayor canti- suciencia para gobernar la propia
dad para obtener el mismo alivio. vida, que conducen, en la mayoría
de estas personas, a la depresión.
Cuando el ciclo atracón-purga se
establece y estas conductas apa- En la/el paciente con bulimia ner-
recen con frecuencia, la/el paciente viosa no es tan frecuente la obser-
con bulimia nerviosa tiene la sen- vación de la irritabilidad, la nega-
sación de que su vida gira en torno ción y la testarudez propias del/la
a la comida, y alrededor de ella paciente anoréxica/o. Aún así, es
parece organizar la actividad diaria. posible encontrar episodios de
irritabilidad, inquietud, ansiedad,
La comida es vivida como ene- angustia e incluso agitación por
migo y a amigo la vez: la perso- diversos motivos. Son también fre-
na con bulimia nerviosa necesita cuentes las uctuaciones bruscas
saber que dispone de comida, que en el ánimo, muchas de ellas en-
está ahí a su alcance (ansía co- tendidas como compensaciones a
mer), aunque se prohíbe tocarla los sentimientos de tristeza.
(teme descontrolarse), en una con-
tinua contención de su deseo de Al contrario que las pacientes
comer. En este caso el temor es el con anorexia nerviosa, graticadas
de no poder parar de comer una ante su rechazo de adquirir un
vez que se ha iniciado el proceso. cuerpo femenino adulto median-
te la supresión de las menstrua-
Al contrario que en la anorexia, ciones y el mantenimiento de un
estas/os pacientes parecen dis- cuerpo de características infan-

20 Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
21/103

Trastornos de la conducta alimentaria: cómo actuar desde la familia.

tiles, las mujeres con bulimia ner- “A pesar de restringir la comida,


viosa parecen confusas respecto como enseguida empezaron
de su ideal de feminidad. Convi- a darme el “coñazo”, a vigilar-
ven en ellas el deseo de indepen- me, a controlarme, desde el
dencia y autonomía, por un lado, principio empecé a vomitar.
y la necesidad de establecer rela- ¡Que increíble!, ningún control,
ciones cercanas y ser aceptadas y cuando había que comer con
por los demás. Esta confusión acer- la familia vomitaba y se acabó.
ca de lo que signica para ellas su Apareció un chico en mi vida
feminidad les coloca en ocasiones con la consiguiente oposición
en circunstancias difíciles, incluso de mis padres y yo cada vez
viéndose arrastradas hacia com- más agobiada por el control
portamientos promiscuos. propio y ajeno. El alcohol en-
tró en mi vida al mismo tiempo
que la comida, de hecho nunca
había bebido ni una sola cer-
veza. Para mí la comida y la
bebida son lo mismo, un medio
de evasión, un respiro, un dejar
de pensar.”

Factores comunes
a ambos trastornos
La anorexia y la bulimia nervio-
sa están clasicadas en los manua-
les cientícos como dos entidades
diagnosticas diferentes y durante
la manifestación de su patología
muestran varias conductas dis-
tintas. Sin embargo, el trabajo clíni-
co pone de maniesto que los bor-
des de ambos trastornos no están
nunca claros. Presentan algunos
aspectos cognitivos, emocionales
y conductuales comunes y ade-
Es frecuente también que las/los más muchas/os pacientes ano-
pacientes bulímicas/os abusen de réxicas/os desembocan en un
sustancias tóxicas como alcohol, trastorno bulímico y muchas/os
ansiolíticos, anfetaminas y cocaína, pacientes bulímicas/os tienen pe-
algunos de ellos (estos dos últi- riodos de ayuno continuado; e
mos) empleados en ocasiones incluso, durante algunos periodos,
como métodos purgativos. En cual- presentan todas las particulari-
quier caso, estos hábitos com- dades de una anorexia.
plican el tratamiento y pueden
actuar como perpetuadores del Las características que ambos tras-
trastorno alimentario, al margen de tornos (anorexia y bulimia nerviosa)
las complicaciones que generan comparten según las descripcio-
por sí mismos. nes actuales son el miedo al so-

Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid 21
22/103

Definición y tipos.

brepeso, los problemas referidos a c.Comportamiento. Conductas


la imagen corporal, la búsqueda como el ayuno, los vómitos auto-
del adelgazamiento como forma inducidos, el ejercicio extenuante
de obtener su autoestima y la exis- y los atracones están basados, al
tencia de numerosos sesgos cog- menos parcialmente, en los dos
nitivos y creencias irracionales. componentes anteriores, percep-
ción y actitud.
De los aspectos comunes a ambos
trastornos, los más importantes son:

Imagen corporal y la confusión


de sensaciones corporales
El termino “imagen corporal” se
refiere a las percepciones,
sentimientos y actitudes que
muestra la persona ante su
propio cuerpo, o cómo esa
persona experimenta psi-
cológicamente su pro-
pio cuerpo. Su for-
mación depende del
interés, cuidado, respeto
e importancia que los padres y
otras personas importantes del en-
torno hayan concedido a su cuer-
po en su crianza. Los mensajes de los medios ayu-
dan a crear un contexto en el
A partir de los estudios realizados que las personas aprenden a va-
por los expertos se ha llegado a la lorar de forma exagerada el ta-
conclusión de que los problemas maño y la silueta de su cuerpo
en la imagen corporal incluyen tres aunque no causan directamente
componentes principales: los trastornos.

a. Percepción. Se refiere a la Los comportamientos


imagen que uno ve cuando se alimentarios patológicos
mira al espejo. La percepción de observados en las personas
su imagen corporal puede estar, o
que padecen anorexia o bulimia
no, distorsionada, pero en cual-
nerviosas, se producen a causa
quier caso su cuerpo puede no
ser de su agrado si ha adoptado de las tentativas que hacen para
metas no realistas o si se exige ser cambiar su imagen corporal.
perfecta.
Debido al deseo de todos de
b. Actitud. Es el signicado que tener una forma de ser atractiva,
se otorga a su percepción, refle- y en la medida en que anuncios
jo de la auto-valía depositada en y programas incluyen “modelos” y
la apariencia. Esta actitud hacia “famosos” que definen su valía (y
la imagen percibida determina la su forma de ganarse la vida) por
manera en que uno se siente y su apariencia corporal, la imitación
actúa. de tales valores será extrema-

22 Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
23/103

Trastornos de la conducta alimentaria: cómo actuar desde la familia.

damente fuerte y perniciosa. No tario. Esta situación no se producirá


podemos olvidar que los medios de forma inversa: si únicamente
son la mayor fuente de información forzamos a comer o a suspender el
sobre salud y alimentación de ejercicio, no conseguiremos resul-
los adolescentes “sanos”. Estudios tados estables a largo plazo y las
recientes estiman que las chicas conductas vuelven a aparecer cuan-
adolescentes leen, al menos, una do la persona se enfrenta a situacio-
revista de moda de forma habitual, nes en las que se siente vulnerable.
y que estas revistas tienen un por-
centaje más alto de anuncios y Estilo cognitivo
artículos que promueven dietas y creencias irracionales
y formas para perder peso. La persona que padece un tras-
torno alimentario tiende a presen-
Los padres con actitudes más ne- tar ciertas actitudes, reflejo de un
gativas hacia la gura corporal de estilo cognitivo extremadamente
sus hijos contribuyen a que estos polarizado. Su pensamiento se ex-
presenten conductas restrictivas presa de forma dicotómica, en tér-
más severas, mayor incidencia de minos de todo-nada, sin un punto
comportamientos bulímicos y una medio, lo que les hace adoptar
pobre imagen de sí mismos. Si, co- reglas muy rígidas e inflexibles.
mo se ha demostrado en este y Este estilo cognitivo se observa
otros temas, la preocupación an- tanto con respecto a la comida y el
siosa hacia un aspecto de la vida ejercicio físico como al resto de los
distorsiona su percepción (las per- ámbitos de su vida.
sonas con claustrofobia distorsio-
nan el aparato de resonancia y lo La polarización y el pensamien-
perciben cerrado por uno de sus to todo-nada lleva al paciente
extremos, aunque está abierto por a necesitar, en todo momento y
ambos), se comprenderá cómo situación, dar la “talla”, exigiéndose
muchas personas que se obsesio- metas extremas. La intolerancia a
nan con su imagen corporal la dis- los fallos, las metas inasequibles
torsionan percibiendo defectos y que ella misma se exige y que le
gordura que otros no ven. Ellas ven han creado una sensación perma-
en el espejo una proyección de los nente de incompetencia se refleja
miedos que sienten por dentro. Al- en su obligación de dar el do de
gunas personas en mayor riesgo pecho.
de devenir enfermas no distorsio-
nan su imagen pero están mucho A su vez, mantienen una serie de
más insatisfechas con ella que el creencias irracionales reejadas en
resto y la rechazan por no cumplir comportamientos o en sus ideas
los requisitos de perfección que que intereren en su recuperación.
ellas exigen. Tienen un pensamiento supersti-
cioso o mágico que supone una
Dado que las conductas patológi- relación causa-efecto entre dos
cas con la comida son secundarias acontecimientos o resultados que
al deseo de modicar el cuerpo, si no están relacionados, pero que
conseguimos cambios en la per- ellos/as creen sin ninguna duda.
cepción y la actitud hacia la imagen
corporal, podemos conseguir cam- Dentro de este pensamiento su-
bios en el comportamiento alimen- persticioso se incluye la ya men-

Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid 23
24/103

Definición y tipos.

cionada relación entre culpa y con- en el tratamiento no le cuidaban


secuencias de las acciones y lo suciente.
viceversa. Las/los pacientes creen
que no les va a pasar nada por Exceso de obligaciones
lo que están haciendo si pueden “Debo de, tengo que”: son expre-
demostrar que ellas/los no son siones características de aquellas
responsables, sino que lo que ha- personas que guían su existencia
cen depende de circunstancias motivándose con obligaciones e
ajenas a su voluntad. Los familiares imponiéndose lo que hacen sin
pueden escuchar, por ejemplo, considerar ninguna otra necesidad
que dicen: “no he podido comer o posibilidad. Puede observar-
porque tenía clase, yo no tengo se este estilo cognitivo por la
la culpa”, “no tengo hambre, no rigidez de sus horarios, la ausencia
necesito comer; estoy llena de to- de descanso y solaz y la culpa que
do lo que hago; yo quiero comer les ocasiona no haber cumplido
pero no puedo”, “me sentía muy todos los objetivos propuestos. En
llena y he tenido que vomitar”. Ob- muchas ocasiones esta creencia
viamente, el cuerpo se desgasta y está asociada a otro error cog-
no sobrevive si no se le alimenta, o nitivo muy dañino: descansar es
si se le purga en exceso, sea cual sinónimo de vagancia.
sea la razón por la que no se come
o se vomita. Constricción emocional
Las/los pacientes no suelen de-
La consecuencia directa de esta mostrar sus emociones y senti-
conexión mágica es la elusión de mientos negativos tales como la
la responsabilidad en su cuidado. agresividad o la tristeza. Ocultan
Las/los pacientes no consideran cualquier tipo de decepción ocu-
que las complicaciones físicas rrido en sus relaciones interper-
producidas por la desnutrición o sonales y se niegan a sí mismas/os
las conductas purgativas sean de su resentimiento o rebeldía. Les
su incumbencia; ni se cuidan, ni es especialmente difícil reconocer
consideran que deben hacer algo y exponer sus necesidades y de-
para solucionar lo que les pasa. Si seos. Demuestran con dificultad
les preocupa algo de lo que les las emociones y sentimientos po-
ocurre, lo proyectan en los demás sitivos de forma que los demás no
para que sean ellos los que se se aperciben de que necesitan de
lo solucionen. su afecto y atención. Este control
férreo de las emociones procede
“Se me cae la dentadura”, dijo del desconocimiento y el miedo.
en el grupo de terapia J.... pa- Creen que si sienten, la sensación
ciente anoréxico restrictivo de va a ser tan intensa que les inun-
32 años. Este hecho no le llevó dará. Imaginan que los sentimien-
a considerar que tenía que in- tos negativos no se van nunca, ni
crementar su comida, ni acu- nadie puede hacer algo al respec-
dir al dentista. Con esa queja to. El miedo al dolor y al sufrimien-
en voz alta trataba de que el to les impide dar los pasos nece-
terapeuta asumiera la respon- sarios para buscar soluciones
sabilidad de solucionárselo; la alternativas y aliviar su malestar.
queja era también una forma Para manejar las emociones uti-
indirecta de quejarse de que lizan dos formas predominan-

24 Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
25/103

Trastornos de la conducta alimentaria: cómo actuar desde la familia.

tes, dependiendo si están en una problemas para conciliar el sueño,


posición anoréxica o bulímica. En falta de interés en la vida y pre-
el primer caso, acallan sus emo- sencia de pensamientos auto-de-
ciones con el frío y el dolor que les spreciativos. En ocasiones todos
ininge su dieta despiadada. En el estos sentimientos se expresan sin
segundo, utilizan la comida para palabras, a través de un compor-
dejar de pensar y sentir. tamiento agresivo, sin razón
aparente para el que le ve desde
Estas dificultades emocionales fuera.
propias, contrastan con la capaci-
dad que tienen para percibir los “Últimamente no hago más que
sentimientos de los demás, hecho llorar, bueno eso me parece.
que puede confundir a los que les Durante más de ocho años no
conocen. Extremadamente sensi- he sido capaz de derramar una
tivos a las inuencias externas, ven sola lágrima. Quiero superar
lo de fuera y se pierden lo de den- todo esto, lo que sea. No se si
tro. Una vez que logren saber lo será demasiado doloroso cono-
que está sintiendo su madre o ha cer cuál es el principio de todos
percibido con claridad lo que sen- mis males pero quiero superar-
tía la vecina, la halagará para con- lo ya. Quiero dejar de sentirme
seguir su aprobación, sin jamás perdida y atormentada. Trato
saber o a veces sabiendo y callan- de sumergirme en mi memoria
do, lo que sienten ellas/los. y mis recuerdos, pero no lo
consigo, sólo encuentro confu-
sión. Últimamente me despier-
to sobresaltada y con una
sensación de desasosiego y
amargura exagerada”.

Otros trastornos
alimentarios
asociados
Trastorno de la Conducta
Alimentaria No Especificado
Para determinar clínicamente una
anorexia o bulimia nerviosas, de-
ben concurrir en el/a paciente
todos los signos y síntomas exigi-
dos por los estándares interna-
cionales (Ver Anexo). Sin embargo,
en la práctica diaria, este conjun-
to de características no aparece
Paralelamente a ello, se detectan siempre al completo, lo cual no
trastornos afectivos expresados significa que no exista una pa-
en su desanimo, bajos niveles de tología alimentaria que necesite
energía, tristeza y abatimiento. tratamiento. Cuando se dan varias
Además, es posible que tengan características patológicas, pero

Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid 25
26/103

Definición y tipos.

no están todas, se dice que la per- Si el trastorno de la conducta ali-


sona tiene un síndrome parcial, mentaria no especificado no de-
identificado como trastorno de la semboca en un trastorno comple-
conducta alimentaria no especi- to, los pacientes suelen ser de
ficado (TCANE). Las situaciones menor gravedad y la patología
más frecuentes son: evoluciona favorablemente con
un tratamiento de duración limita-
Pacientes que cumplen todos da en régimen ambulatorio.
los criterios de anorexia nervio-
sa pero no han perdido la mens- Trastorno por Atracón
truación. El trastorno por atracón se define
por la existencia de una comida
Pacientes que cumplen todos excesiva en un período discreto
los criterios de anorexia nervio- de tiempo -no más de dos horas-
sa pero su pérdida de peso está sobre la que la persona siente
dentro del rango normal. que no puede ejercer ningún
control para pararla, a la que no
Pacientes que tienen atracones le siguen conductas purgativas
o se purgan menos de dos veces compensatorias. La ausencia de
por semana, no cumpliendo los conductas compensatorias hace
requisitos de frecuencia impuestos que las personas que lo pade-
para diagnosticar bulimia nerviosa. cen presenten un exceso de peso
que les hace sentirse muy des-
Pacientes que se purgan des- graciados. La comida se ingiere
pués de ingerir pequeñas canti- de forma compulsiva a cualquier
dades de comida y su pérdida hora del día y produce una gran
de peso no llega al 15% nece- vergüenza y sentimientos de culpa.
sario para ser calificados como Como en el caso de los pacientes
anoréxicos. bulímicos, el atracón ayuda a la
persona a sobrellevar los esta-
Pacientes que escupen o tiran dos de estrés, calma el males-
la comida sin tragarla, para evitar tar emocional y permite eludir los
la ingesta de calorías. problemas cotidianos.

En ocasiones, estos cuadros in- Las personas que presentan


completos no son tales, sino una un trastorno por atracón
etapa inicial del trastorno en la que tienden a atribuir cualquier
aún no ha terminado de expresarse fracaso laboral o sentimental
toda la patología. Este puede ser el
a su peso, sin pensar que
caso de los pacientes muy jóvenes,
resultando conveniente estar alerta
puedan tener otras
a la evolución de los síntomas y no deficiencias psicológicas
minusvalorar la importancia de con- que deberían corregir.
ductas alteradas primerizas. Otras
veces, el cuadro parece incompleto Eso les hace fantasear con la idea
porque el paciente ha mejorado en de que cuando adelgacen resol-
algunos aspectos pero, como en el verán todos sus problemas y serán
caso anterior, no se debe desesti- unas personas felices. En conse-
mar la gravedad de lo que queda cuencia, presentan una gran insa-
por recuperar. tisfacción por su imagen corporal,

26 Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
27/103

Trastornos de la conducta alimentaria: cómo actuar desde la familia.

pero nunca llegan a distorsionar malestar psíquico, especialmente


la percepción del peso o volumen la ansiedad, acabará tranquilizán-
de su cuerpo. dose con comida.

Es un trastorno muy frecuente en


niños con obesidad, en pacientes
que por algún tipo de enfermedad
física han tenido que hacer dietas
especiales (como, por ejemplo, pa-
cientes adolescentes con dia-
betes) o en algunos padres
varones de pacientes ano-
réxicas o bulímicas, aunque
su conducta nunca se ha-
ya percibido como “problemá-
tica”. Los intentos que hacen los
familiares para restringir su ingesta
suelen ser vanos y nocivos, espe- Al tormento psicológico que acom-
cialmente si se trata de niños/as paña a este trastorno se le va
o adolescentes. Lo máximo que sumando la aparición progresiva
consiguen es que mientan. Es re- de complicaciones físicas, como
lativamente frecuente que dedi- el desarrollo de una diabetes o una
quen su dinero a comprar comida hipertensión arterial, consecuencia
cuando están fuera de casa e de una alimentación desequilibra-
incluso pueden robar comida del da y un peso excesivo. Por eso,
colegio, las tiendas o de la casa muchos pacientes buscan ayuda
de otros. para su obesidad más que para el
trastorno alimentario en sí mismo.
Sus relaciones sociales pueden es- Las dietas que se les prescri-
tar muy limitadas, tienen pocos ben ayudan temporalmente pero,
amigos y en su interior sienten que si no se tratan los aspectos emo-
es muy difícil vivir en esta sociedad cionales, terminan fracasando.
donde se rechaza tanto cualquier
mínimo sobrepeso. Al sufrimien- El trastorno por atracón suele pre-
to por la comida descontrolada se sentar asociado a trastornos del
une el producido por las vejaciones estado del ánimo, experimentando
infligidas socialmente al conside- a lo largo de su vida numerosos
rarlos glotones/as, vagos/as, sin episodios depresivos. La depresión
fuerza de voluntad y sin capacidad les hace comer más y moverse
de autocontrol. Esto les hace re- menos, por lo que la obesidad se
traerse y aislarse pero, en su ais- dispara aumentando la sensación
lamiento, la única alternativa que de ser personas “non gratas” a
les queda es comer más. Las pau- la vista de los demás.
tas destructivas de comportamien-
to se perpetúan porque la persona Dado que el trastorno por atracón
que tiene un trastorno por atracón tiene enormes similitudes con el
no ha aprendido alternativas para trastorno bulímico, excepto porque
afrontar su deseo compulsivo de no se realizan conductas purga-
comer, ni a conar en que sus sen- tivas compensatorias, muchos de
timientos se pasen. Ante cualquier los aspectos del tratamiento de

Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid 27
28/103

Definición y tipos.

la bulimia nerviosa pueden bene- nivel de descontrol alcanzado. Las


ciar a las personas que sufren un personas con este síndrome, prin-
trastorno por atracón. Especial- cipalmente pacientes bulímicas/os,
mente ecaz es la combinación de con trastornos por atracón y obe-
terapia cognitivo-conductual para sos, experimentan vergüenza, cul-
los problemas alimentarios, terapia pa y ansiedad por comer así, pues
interpersonal para los problemas lo interpretan como una forma
de aislamiento y medicación anti- de “vicio” y glotonería. Por ello tien-
depresiva para mejorar los estados den a ocultarlo a los demás y difí-
de ánimo. cilmente piden ayuda.

Síndrome de comida nocturna El tratamiento requiere fijar unas


Aunque este síndrome no se pautas de organización alimentaria
recoge como tal en los manuales y posiblemente, una comprensión
diagnósticos, es un trastorno que profunda de por qué se produce
aparece con frecuencia en la prác- esta necesidad de comer por la
tica clínica. Las personas que lo noche. No es infrecuente que el
padecen presentan una forma de deseo de atracón esté ligado al
alimentación que se caracteriza despertarse por la noche o de la
por no comer nada durante la siesta, por lo que encuentran una
mañana (desayuno, almuerzo, in- asociación sugestiva con el mun-
cluso comida) y empezar a hacerlo do de los sueños.
al atardecer, pudiéndose prolongar
la ingesta hasta la madrugada.

Los personas que lo padecen


tienen problemas para conciliar el
sueño, que puede verse perturba-
do por episodios de apnea (dicul-
tades respiratorias y pausas res-
piratorias prolongadas mientras
se duerme) debidos, en parte, a la
acumulación de comida sin digerir
en el estómago. En consecuencia,
pueden presentar episodios de
somnolencia durante el día. Algu-
nos pacientes llegan a comer de
forma descontrolada en fases de Ortorexia
sonambulismo. Este atracón noc- Las personas que padecen este
támbulo se recuerda de forma trastorno obsesivo se preocupan
muy confusa e incluso se produce de manera excesiva por nutrirse
sobre patrones totalmente incons- de forma sana e ingerir exclusiva-
cientes, pudiendo llegar a quemar- mente alimentos “naturales”. Si en
se por intentar cocinar o calentar el trastorno anoréxico y bulímico la
comida. Si los familiares enfrentan obsesión ha sido la cantidad de
al paciente con la realidad de lo la comida que se ingiere, en el
ocurrido, a éste le cuesta creerlo, trastorno ortoréxico, la obsesión
y si se despierta mientras está es la calidad de la comida y la
comiendo, suele sentir una gran búsqueda de lo “sano”. La preo-
ansiedad cuando se da cuenta del cupación por la salud, la fijación

28 Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
29/103

Trastornos de la conducta alimentaria: cómo actuar desde la familia.

por comer una dieta sana llega a sentan un interés, igualmente des-
tal extremo que prefieren pasar medido por el ejercicio físico que
hambre antes que comer algún realizan con el supuesto objetivo
alimento del que no están seguros de “estar en forma”. Es una moda
tenga la calidad debida. muy común entre los actores de
Hollywood.
El deseo por comer de forma
saludable y las recomendaciones Muy cercano a los trastornos hipo-
médicas acerca de los alimentos y condríacos, la sociedad difícilmen-
dietas sanas siempre han existido, te conceptúa la ortorexia como
pero actualmente esta preocu- patológica, bien al contrario, quie-
pación tiene visos de desbordarse, nes detentan el trastorno llegan
especialmente en determinados a creerse superiores en inteligencia
círculos que creen haber encon- y conocimiento que el resto de los
trado la panacea para evitar algo mortales. Sin embargo, el exceso
inherente a nuestra condición hu- de inquietud por la comida sana
mana: nuestra fragilidad física y puede llegar a dañar la salud
la existencia de enfermedades. El de aquel que queda atrapado en
trastorno ha florecido a partir de la consecución de la perfección
la moda alimentaria impuesta por alimentaria. En ocasiones, el tras-
aquellos cuyo objetivo primordial torno es un preámbulo de la
en la vida es cuidar su cuerpo, anorexia nerviosa o un factor de-
por lo que la ortorexia suele darse sencadenante de atracones de
asociada a las personas que pre- comida “no sana”, pero sabrosa.

Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid 29
30/103

La familia y los trastornos de la conducta alimentaria.

La familia
y los trastornos de la
conducta alimentaria.

Un hecho incuestionable es que


durante el transcurso de la anorexia,
las relaciones creadas en las
familias presentan algunos
patrones comunes.

30 Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
31/103

Trastornos de la conducta alimentaria: cómo actuar desde la familia.

¿En qué medida influye la familia que los límites se pierden. Los
en lo que le pasa al hijo/a/miembro roles se difuminan, confunden e
que padece un trastorno alimenta- intercambian siendo muy difícil
rio? Esta es siempre la cuestión establecer con claridad quién ejer-
que subyace cuando se afronta ce determinados papeles en la
la existencia de ciertas constela- familia. En muchas ocasiones los
ciones familiares asociadas a los hijos hacen el rol de los padres y
trastornos y que se repiten a lo los padres asumen actitudes más
largo de todos los grupos, inde- propias de sus hijos. Además, los
pendientemente del país, clase so- padres intentan que sus hijos dis-
cial o condición en los que surgen. fruten de la infancia que ellos no
Todos los autores arman que no, tuvieron o del futuro que desearon
pero inmediatamente claman por para ellos mismos, lo que acarrea
la necesidad de cambiar algunas una excesiva implicación en el
pautas relacionales en la familia, desarrollo de su descendencia.
pues de esta manera se incremen-
ta la probabilidad de mejoría. El La individualidad y la autonomía de
dilema queda sin resolver, pues los integrantes de estas familias
nadie puede afirmar que las rela- son inhibidas; desaparece la pri-
ciones familiares observadas du- vacidad y todos los espacios, ilu-
rante los trastornos sean las mis- siones, objetivos y emociones se
mas que las existentes antes de comparten. Todos los miembros
la patología. Y aunque de cara al de la familia se sienten con el dere-
tratamiento no importa si fueron cho (y el deber) de participar en las
antes o después -pues lo primor- emociones, decisiones, etc. de los
dial es cambiarlas-, sí convendría demás; y ninguno se siente legiti-
llegar a conocer, en orden a con- mado para defender su privacidad.
seguir una mejor prevención, cuá-
les son las relaciones familiares Es posible que establezcan re-
tempranas que debemos corregir laciones más cercanas entre al-
para no incrementar la vulnerabili- guno de los hijos y uno de los
dad a los trastornos. padres, presentando un frente
común hacia el otro progenitor. Y
Relaciones familiares que la comunicación entre dos
del/la paciente anoréxico/a personas tenga lugar a través de
Bien sea porque las relaciones una tercera, en vez de producirse
familiares fueron siempre similares de forma directa. Estos patrones
a las que vamos a describir, o de comportamiento pueden per-
porque el trastorno anoréxico ge- petuarse sin que nadie en la fami-
nera tanta tensión en el seno fami- lia esté al tanto de que se están
liar que las relaciones cambian, el conduciendo en esta manera.
hecho incuestionable es que du-
rante el transcurso de la anorexia, Sobreprotección: Es caracte-
las relaciones creadas en las fami- rístico de algunas familias de pa-
lias presentan algunos patrones cientes con anorexia un desvelo
comunes contraproducentes: mutuo y continuo entre sus miem-
bros, no sólo hacia el hijo enfermo,
Amalgama: Describe una ma- que responde a un cariño genuino,
nera extremadamente estrecha e presente tiempo antes de que la
intensa de relación familiar en la anorexia se iniciase. Sin embargo,

Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
31
32/103

La familia y los trastornos de la conducta alimentaria.

la sobreprotección cuando los hi- desde el exterior (de la familia), lo


jos/as crecen refuerza la idea de que realmente consigue es limitar
que el mundo es un lugar inseguro las posibilidades de adaptación a
y la vida una situación plagada estos.
de posibles catástrofes. Cualquier
vivencia fuera de la red familiar Evitación del conflicto: Cual-
se tiende a interpretar como un quier realidad conictiva es sentida
riesgo gratuito e innecesario, inclu- de forma amenazante hacia la ar-
so como un acto de traición a la monía familiar y, por tanto, se de-
unidad y bienestar familiares. saprueba. Impera entonces la ley
del silencio. Los problemas se nie-
Cada cual tiene la sensación de gan o minimizan. Es habitual que
que el cuidado de los restan- ante sentimientos de malestar la
tes miembros de la familia es res- respuesta de los padres sea del
ponsabilidad suya, dejando a los tipo “no hay por qué preocuparse,
demás a cargo de su propio cui- ya verás como todo se soluciona,
dado personal. Los hijos son así siempre lo has hecho”. El mensaje
ignorantes de su propia realidad y implícito es que los padres espe-
negligentes de su propio cuidado. ran que su hijo sea capaz de re-
solver sus dicultades (aparece en-
J.: “Recuerdo una situación an- tonces el temor a fracasar, a fallar
tigua entre mi hija I… y su her- a los padres) sin el ofrecimiento de
mana... Hubo un momento tan un apoyo al respecto.
difícil en la relación de ambas
que I... le decía a su hermana Implicación de los hijos en
qué alimentos debía o no inge- el conflicto paterno: En ocasio-
rir. Incluso la hermana fue al nes, las/los pacientes con anorexia
médico para pedirle un certi- son condentes de alguno de sus
cado de los alimentos que po- padres, forzando una alianza con
día consumir; el médico le indi- uno de los padres frente al otro
co que lo que tenía que hacer o se convierten en mediadores
era enfrentarse a la hermana. del problema de los padres. Cuan-
Pero yo en aquella situación re- do la anorexia nerviosa aparece,
cuerdo haber sentido un sufri- los padres parecen olvidar o igno-
miento terrible, y que la situa- rar sus crisis maritales, absortos
ción crecía como una bola de como están en la protección y
nieve, y yo no sabía qué ha- cuidado del hijo/a enfermo/a.
cer.....no supe defenderla.” Tienen así un motivo válido para
unirse y olvidar sus cuitas perso-
Rigidez: En algunas de estas nales. Así, los síntomas se con-
familias cualquier cambio es vivido vierten en un elemento determi-
como amenazante e indeseable, nante de estabilidad o inestabilidad
dado que pone en riesgo el sen- familiar.
timiento de seguridad que ofrece
una búsqueda continua de control. Estas constelaciones relacionales
La supuesta seguridad que aporta señaladas pueden impedir, no só-
limita tremendamente la libertad lo el proceso de maduración per-
y autonomía de sus miembros sonal del hijo/a más “dócil” y por
y, aunque pretende proteger de tanto convertirse en un factor de
los cambios que puedan venir vulnerabilidad para el trastorno,

32 Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
33/103

Trastornos de la conducta alimentaria: cómo actuar desde la familia.

sino también mantener la patología rrollo de objetivos intelectuales o


e impedir su recuperación (como los aspectos religioso-morales. Así
veremos en capítulos posteriores). mismo, se han observado dificul-
tades de cohesión, muy baja tole-
Relaciones familiares rancia a la frustración y una falta
del/la paciente bulímico/a de límites entre sus miembros. Es-
Los estudios recientes sobre el tas familias se perciben a si mis-
medio familiar de los/as pacientes mas como disgregadas, caóticas,
bulímicos/as han revelado aspec- con poca conexión emocional y,
tos consistentes en la interacción simultáneamente, con una relación
entre sus miembros, de forma si- amalgamada e intrusa.
milar a lo descrito en el caso de la
anorexia nerviosa. Identificar una Conceder una importancia exce-
pauta especifica de relación fami- siva a los logros académicos, la
liar como factor de riesgo de pa- apariencia perfecta y no dar nin-
tología bulímica es extremada- guna importancia a la autonomía
mente útil porque permite detectar personal ni a la expresión asertiva,
la situación de vulnerabilidad del genera que la relación se establez-
sistema familiar para el desarrollo ca desde la corrección continua
del trastorno y corregirla con pron- del más mínimo error. Cada miem-
titud. Y aunque la investigación no bro opina del otro y de lo que hace
ha dibujado un cuadro completo de forma negativa predominando
de todas las características fami- el desacuerdo y la tensión en el
liares, sí se han detectado algunos seno familiar. Es posible que las
rasgos típicos de la relación familiar conductas y formas que se corri-
sin que ello signifique que los fa- jan estén equivocadas y se tenga
miliares sean los causantes del razón en lo que se recrimina, pero
trastorno. la ausencia de márgenes para el
error en la vida nos coloca en
una situación de fracaso per-
petuo, devastador para el
aanzamiento de la auto-
estima.

La dificultad de
separación impi-
de el establecimiento de
unos límites que diferencien, sin
perder la relación afectuosa que
necesitan. La falta de límites se
pone de maniesto en numerosas
situaciones, especialmente en las
Muchas familias en las que emerge provisiones alimentarias, ya que los
un trastorno bulímico comparten atracones suelen incluir la comida
un funcionamiento que trasluce de toda la familia. La relación entre
una orientación excesiva de sus hermanos se resiente por la uti-
intereses hacia los logros académi- lización mutua de sus espacios y
cos y laborales, mientras que se pertenencias sin permiso (ropa,
le da poca importancia a los as- objetos de aseo y maquillaje, ma-
pectos culturales, el ocio, el desa- terial de escritorio, ordenador, etc.)

Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
33
34/103

La familia y los trastornos de la conducta alimentaria.

sin permiso. Puesto que la privaci- servada en familias sin individuos


dad no suele valorarse en la fami- con bulimia nerviosa). En nume-
lia, esta situación puede persistir rosas ocasiones alguno o ambos
incluso cuando desde el tratamien- padres presentan obesidad, pro-
to se sugiere la necesidad de es- blemas con alcohol e impulsividad
tablecer límites y diferenciar las asociada a conductas explosivas.
características individuales de ca-
da miembro familiar. La gravedad de la bulimia se ha
asociado a la inconsistencia del
A… relata las múltiples veces afecto materno ya que las uctua-
que su hermana entra en la ciones de su expresión amorosa
habitación quitándole las za- suelen ser excesivas; unos días da
patillas de deporte, los jerséis, muestras de mucho cariño y otros
los lápices, los folios, el telé- días manifiesta un rechazo total.
fono móvil que utiliza cuando Se ha visto, a su vez, muy negati-
le parece o dinero. Cuando se va la tendencia de algunas madres
queja a sus padres de estos de culpar a sus hijas por los pro-
hechos, ellos le dicen que es blemas familiares, negando su pro-
una rara, que las hermanas pio papel en el malestar familiar.
deben compartir todo y que ella Por lo que respecta al padre varón,
también usa cosas de G... la relación más destacada y nega-
tiva es la negligencia. Debido a un
El manejo de las situaciones an- nivel de ansiedad muy elevado, los
gustiosas es muy decitario ya que padres se distancian y no apoyan
las emociones que emergen ante al/la hijo/a con problemas, negan-
la angustia son la irritabilidad, la ira, do su existencia o su gravedad. En
la hostilidad. Ello hace que la co- su papel de maridos suelen ser
municación derive hacia los gritos inconscientes de los problemas
y la culpa. La angustia ante la ad- matrimoniales que ocurren y del
versidad, vivida como insoluble, es sufrimiento de su pareja.
también la causa del aparente
desinterés que muestran algunos Esta caracterización no tiene
padres hacia los síntomas de la por qué ser permanente o
enfermedad del/la paciente. inherente a la propia familia,
sino que puede ser la reacción
Estas emociones negativas no adaptada del grupo familiar
son producto de falta de cariño a circunstancias externas o
entre hijos y progenitores, sino la internas. No podemos olvidar
expresión de un desbordamiento que la presencia de un miembro
emocional inmanejable que con un trastorno bulímico
suele cubrir síntomas de supone un importante impacto
depresión o rasgos depresivos en la salud y bienestar de las
subyacentes. familias, además de incrementar
su gasto monetario.
Son además frecuentes los com-
portamientos impulsivos y las con- De hecho, muchas de los aspec-
ductas adictivas (insistimos, no pre- tos emocionales descritos se en-
sentes en todas las familias, sino cuentran en familias depresivas
con una frecuencia mayor a la ob- con un estrés excesivo que dejan

34 Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
35/103

Trastornos de la conducta alimentaria: cómo actuar desde la familia.

a los hijos vulnerables a cualquier


patología mental. Si a ello se
une una excesiva impor-
tancia a la apariencia, al
que dirán; y se busca
la identidad familiar en
el logro profesional y el
éxito, se ha creado el clima
ideal para el desarrollo del
trastorno bulímico.

Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
35
36/103

Factores determinantes de los TCA.

Factores determinantes
de los TCA.

Al identificar delgadez con éxito


profesional o sentimental, belleza,
juventud, buena salud y fuerza de
voluntad, nuestra cultura ha ido
gestando un cambio profundo del
concepto de ideal físico al que se
debe aspirar.

36 Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
37/103

Trastornos de la conducta alimentaria: cómo actuar desde la familia.

Los trastornos de la conducta La delgadez como ideal de belleza


alimentaria -Anorexia Nerviosa y ha sufrido diversos vaivenes a lo
Bulimia Nerviosa- son trastornos largo de la historia hasta mediados
multidimensionales y complejos del siglo XX en que este ideal se
que emergen debido a la conuen- estabilizó de manera permanente
cia de varios factores: sociocultu- hasta nuestros días. Desde el siglo
rales, biológicos, psicológicos e XIII al XIX, la gordura era conside-
interpersonales. rada atractiva, indicativa de mayor
status social. A partir de la segun-
da década del siglo XX, debido
Factores a una mayor disponibilidad de
socioculturales alimentos, este ideal comienza a
cambiar hasta la consideración ac-
Uno de los factores más importan- tual de la delgadez como un signo
tes en la creación de vulnerabilidad de superioridad social. Al mismo
es la presión social que induce a tiempo, empieza a popularizarse la
considerar el atractivo físico como realización de ejercicio físico y la
el valor personal predominante. ropa que se utiliza para estos nes
Los mensajes de nuestra cultura es cada vez más ajustada, permi-
que equiparan belleza y atracción tiendo mostrar más el cuerpo.
con delgadez han creado el con-
texto necesario para que muchas Al identificar delgadez con éxito
mujeres y muchos hombres se profesional y sentimental, belleza,
sientan insatisfechos con su cuer- juventud, buena salud y fuerza de
po. Buscan su autoestima en la voluntad, nuestra cultura ha ido
modicación de su apariencia cor- gestando, a través de los men-
poral tratando de asemejarse a los sajes trasmitidos por los medios
cánones de belleza impuestos. de comunicación de masas, un
cambio profundo del concepto de
ideal físico al que se debe aspirar.
Pretender conseguir una Este cambio en los patrones de
imagen corporal perfecta belleza y la reducción de la valo-
produce tal inseguridad en ración personal con forma corpo-
nuestra sociedad que muchas ral ha supuesto, en un comienzo,
personas deciden alcanzar este un enorme perjuicio para las mu-
objetivo imposible a cualquier jeres ya que se les trasmite que,
precio. La forma más habitual para ser queridas, valoradas, exi-
es reducir su comida y/o utilizar tosas, necesitan tener un cuerpo
métodos purgativos o ejercicio irrealmente perfecto. Actualmente,
físico excesivo. Aquellas la preocupación se ha extendido a
personas que realizan estos los varones, que han visto como
comportamientos de forma en los últimos años del siglo XX y
más asidua tienen mayor primeros del actual, se les exige un
probabilidad de desembocar incremento progresivo de la masa
muscular para ser considerados
en un trastorno alimentario.
sanos, fuertes y exitosos. Patrones
corporales como éstos están pro-
Contexto social tóxico vocando una baja autoestima en-
El deseo de adelgazar no siempre tre la mayoría de los chicos, que,
ha estado presente en la sociedad. por comparación, se sienten en-

Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
37
38/103

Factores determinantes de los TCA.

clenques e insignicantes. Su inse- se niegan a comer, buscando ya


guridad está siendo capitalizada en la apariencia delgada la solu-
para promocionar el ejercicio físico ción a sus problemas escolares y
abusivo, el empleo de dietas de- afectivos.
sequilibradas y el consumo de es-
teroides anabolizantes.

El impacto de los medios


Un buen reejo de esta trans-
formación se encuentra en el
cambio espectacular de los
patrones de belleza femeni-
na y masculina de los anun-
cios y las revistas de moda.
Hombres y mujeres se ven
desbordados por mensajes
publicitarios que generan
una inseguridad desmedida
ante la posibilidad de que el
cuerpo adquiera una forma y/o
un peso por encima de los
cánones impuestos. Niñas/os y
adolescentes han dejado de ver
una variedad de formas corporales
normales con las que sí podrían El trabajo realizado
identificarse, y se encuentran con actualmente para que los
un ideal inalcanzable incluso para medios presenten imágenes
las propias modelos que lo encar- reales y diversas de personas
nan. La industria del cine también que están sanas y muestran
ha contribuido a potenciar el ideal una buena autoestima basada
de delgadez al elegir estrellas cada en sus cualidades, ayuda a
vez más delgadas para compensar incrementar el numero de
el hecho de que las cámaras tien- personas que se sienten bien
den a “engordar”. Por su parte, los como son y reduce
diseñadores eligen, para lucir sus potencialmente el desarrollo
prendas, a modelos extremada- de TCA.
mente delgadas por considerarlas
más elegantes. Incluso las muñe-
cas exhiben cuerpos de delgadez
extrema. Control, control, control
Si a ello se une que nuestra so-
El contagio de los anuncios tele- ciedad da un gran valor a ser una
visivos y los comentarios que persona con control, la incitación
otan en el ambiente llegan a tales para que muchos jóvenes inse-
niveles que instan a obsesionar- guros intenten conseguirlo median-
se por la gordura en unas edades te la eliminación de cualquier con-
y con una intensidad completa- ducta espontánea y la supresión
mente impensable hasta ahora. del deseo, está servida. El adoles-
Existen niñas y niños de seis cente, que necesita para su desa-
años que dicen estar gordos y rrollo -como forma de aprendizaje

38 Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
39/103

Trastornos de la conducta alimentaria: cómo actuar desde la familia.

básico- experimentar y cometer La comida como evasión


errores, se constriñe evitando el Por otro lado, la sociedad oc-
desenvolvimiento de su sentido de cidental que se caracteriza por
responsabilidad. El sometimiento a la superabundancia de alimentos
los patrones propuestos por los concede una excesiva importancia
adultos genera una doble vulnera- a la comida como respuesta, no
bilidad a los TCA: sólo al hambre física, sino también
al hambre espiritual y relacional,
El/la joven anoréxica logra “in- resultado de planteamientos exis-
dependizarse” del control externo tenciales constreñidos y super-
de su espontaneidad mediante el ciales.
control férreo, pero decidido por
él/ella, de la comida. Esta circunstancia ha hecho que
muchas personas que tienen un
El aburrimiento de una vida desarrollo deficitario de las habi-
monótona, de la que no se espera lidades asertivas y de resolución
la mínima sorpresa, se compensa de problemas (emocionales/rela-
con el sabor de la comida en el cionales), sin ser conscientes de
descontrol temporal y secreto de ello, utilicen la comida para ma-
la dieta. nejar los estados anímicos nega-
tivos y el estrés relacional. La acul-
Discriminación por el peso turación alimentaria, producto de
La predisposición hacia el desa- la copia de formas de vida supues-
rrollo de un trastorno alimentario tamente más prestigiosas, genera
aumenta si el chico o la chica han nuevos hábitos alimentarios incor-
recibido un trato vejatorio por su rectos, especialmente si se desea
aspecto corporal. La sociedad seguir una dieta rígida y drástica-
“sana” proyecta una gran crueldad mente restrictiva para controlar el
hacia los individuos con sobre- peso y asemejarse corporalmente
peso o cualquier otra diferencia a los modelos impuestos.
corporal o étnica, dejándolos sin
capacidad para alimentar su auto-
estima. Cuando una chica o un Factores
chico han sido insultados, se han personales
reído de ellos o han recibido motes
por el peso o volumen que tenían Ahora bien, dado que no todas
en su infancia y/o pubertad, se las personas expuestas a este
ocasiona una impronta tan intensa contexto social tóxico desarrollan
en su mente, que estas burlas le una patología alimentaria, es nece-
acompañarán posteriormente en saria la confluencia e interacción
todas las situaciones de la vida. con otros factores personales psi-
cológico-familiares. Las personas
La inseguridad por su aspecto con mayor sensación de inecacia
aparecerá en entrevistas de traba- y malestar en las relaciones inter-
jo, citas con el otro sexo, excur- personales; aquellas que depen-
siones a la playa, etc. Interiormen- den en exceso de las opiniones
te se odiará, odiará su cuerpo y externas y que eliminan toda suer-
su vida. Y se aislará o buscará en te de emociones e imperfecciones,
la consecución de la delgadez la son las más vulnerables. Otros fac-
autoestima deseada. tores como la obesidad familiar, la

Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
39
40/103

Factores determinantes de los TCA.

impulsividad y las alteraciones del quedan impregnadas de toda esta


estado de ánimo, favorecen igual- ideología. La chica que adelgaza
mente esta interacción. se siente mejor, entre otras cosas,
porque logra de todas las que le
Adolescencia rodean (compañeras, amigas y
y desarrollo personal allegadas) su admiración y su aten-
Los adolescentes, que por su ción, pero también su envidia. El
edad tienen una imagen corporal refuerzo social que obtiene en
aún poco denida e inestable, son los primeros momentos es tan in-
la población más sensible a la menso (a la apreciación estética de
manipulación social al tratar de la delgadez conseguida se añaden
establecer su identidad personal. los valores positivos que se supo-
Son proclives a definirse compa- nen propios de esa condición), que
rando su apariencia física con la de por sí sólo propicia el desarrollo de
los otros, y no poseen los recursos los trastornos alimentarios.
psíquicos necesarios para defen-
derse de tamañas cciones publi- Durante un tiempo, a esta joven
citarias. La mera exposición a la que adelgaza y logra mantener la
lectura de una revista de moda o el delgadez se le recubre con las
hecho de escuchar comentarios cualidades más deseables en esta
sobre lo guapas que son las mo- nuestra cultura del éxito y la com-
delos, o el tipazo del chico del petición. Se le supone poseedora
anuncio de bebidas, dispara el de un nivel de inteligencia elevado,
proceso de comparación, en el de una gran autodisciplina y de
que, todavía débiles, siempre salen la capacidad de acceder a los
mal parados. Esto influye negati- atributos de la clase social alta. Es-
vamente en su auto-imagen, en su to ha generado una actitud trá-
estado de ánimo e, incluso, provo- gicamente favorable al trastorno
ca distorsiones en la percepción anoréxico e impide crear un es-
de su volumen corporal. La som- pacio social que favorezca tan-
bra del trastorno aparece en el to la acción preventiva como la
horizonte mental de la chica cuan- curativa.
do una idea salta casi instantá-
nea como una forma de contra- Identidad personal
rrestar esos sentimientos: “Tengo Parte de la predisposición a los
que adelgazar”. En el chico, la trastornos alimentarios se genera
sombra del trastorno se deja ver y adquiere en la infancia cuando
en este mismo deseo de estar las necesidades físicas y emo-
delgado o por contrario, cuando cionales no han sido satisfechas
se propone llegar a tener unos de forma apropiada. La crianza y
músculos inalcanzables. el proceso de socialización reci-
bidos determinan una fragilidad
La exaltación de la delgadez como psíquica en el niño/a que hará
el principal valor relacional anula más fácil el desarrollo futuro de
los aspectos más sustanciales de cualquier tipo de patología.
la persona fomentando, no solo
la importancia de la apariencia ex- Se sabe, por ejemplo, que los
terna en el desarrollo personal, padres excesivamente protectores
sino también la competitividad. Las dificultan el desarrollo de la con-
relaciones de amistad entre chicas ciencia interoceptiva (percepción

40 Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
41/103

Trastornos de la conducta alimentaria: cómo actuar desde la familia.

de las señales corporales) de sus nales y físicas, o esperan demasia-


hijos, siendo ésta necesaria para do para atenderlas. Sin saberlo,
discriminar sus sensaciones, pen- exhortan a la niña a no escuchar
samientos y emociones, e integrar ni tomar en consideración las
adecuadamente su imagen corpo- señales que le llegan de su interior
ral, componentes básicos de su y la inducen a considerarse alguien
identidad futura. En la pubertad, insignificante y sin valor. La fragi-
esta chica que se encuentra con lidad psíquica adquirida limitará
sensaciones, deseos y retos exter- sus posibilidades de maduración,
nos desconocidos que la hacen dificultando un tránsito adecuado
sentirse indefensa, frena, mediante a la adolescencia y la edad adulta.
la restricción alimentaria, su desa-
rrollo corporal, y encuentra en la En este entorno decitario, por ex-
enfermedad anoréxica la sensación ceso o por defecto, a algunas chi-
de control y seguridad que nece- cas el control de la dieta les sirve
sita frente a un futuro incierto que para paliar las deficiencias de au-
no sabe cómo abordar. Por eso, torregulación interna y les propor-
el trastorno ha sido denominado, ciona la estructura que necesitan
por algunos autores, “Síndrome de desarrollando un trastorno anoré-
Peter Pan”. xico. A otras, la comida les propor-
ciona la sensación afecto y cariño
de la que han carecido y desarro-
llaran un trastorno bulímico.

Cambios corporales
durante la pubertad
Algunas niñas inician el trastorno
al no poder asumir los cambios
corporales de la pubertad, espe-
cialmente si aparecen de forma
prematura. Y algunos varones
inician el trastorno si los cambios
corporales -crecimiento, aumen-
to de la musculatura- tardan en
aparecer.

Personalidad
Algunos rasgos de personalidad
hacen vulnerable al desarrollo de la
anorexia porque el trastorno facilita
la evitación de situaciones vitales
y sociales angustiosas. A las per-
La posición opuesta predispo- sonas con anorexia se las ha
ne, igualmente, a la patología. Por definido como introvertidas, tími-
ejemplo, algunos padres estable- das, emocionalmente inmaduras,
cen una relación emocionalmente irritables, hostiles, manipuladoras,
distante con sus hijos, pensando socialmente ansiosas, excesiva-
que así favorecen su fortaleza mente dependientes de la fami-
psíquica, y no atienden suciente- lia, con una enorme necesidad de
mente sus necesidades emocio- aprobación externa, competitivas,

Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid 41
42/103

Factores determinantes de los TCA.

autocríticas. Algunas de estas ca- tivos suelen ser globales y habi-


racterísticas estaban antes del tualmente de carácter negativo:
trastorno: necesidad de aproba- “soy una perdedora”.
ción, tendencia a la conformidad,
obsesiones, falta de responsabili- Filtrado de lo negativo: todo
dad hacia las necesidades inter- aquello que pueda ser considera-
nas, control y disciplina escolar do positivo es relegado a un plano
y posiblemente, aunque atenua- de menor importancia, minimizado
das, persistan después de su re- o negado, destacando lo negativo:
cuperación. “no importa que yo sea simpática
e inteligente, lo único que importa
Aspectos cognitivos es el tamaño de mis caderas”.
Las peculiaridades en la forma de
pensar ya sean leves o severas, Personalización: se considera
pueden ser un factor de riesgo que las reacciones de los demás,
para el desarrollo de alguno de los sus estados de ánimo, lo que
trastornos de la conducta alimen- dicen, están determinados por el
taria, por su intervención en la que personaliza: “cómo no van
maduración emocional y física, la a dejarme si soy una gorda”, “mi
creación y mantenimiento de rela- padre estaba ayer muy triste, yo sé
ciones interpersonales, el senti- que era por mí, porque hace días
miento de autonomía y una apro- discutí con él”.
piada autoestima.
Generalización: se establecen
Algunas de las características del conclusiones globales a partir de
estilo cognitivo personal son dis- observaciones o acontecimientos
torsionadas y afectan la manera de únicos: “el otro día lo pase mal con
sentir y actuar. En las personas mi amiga, ya nunca volveré a lle-
que padecen un TCA se han ob- varme bien con ella”, “si hoy no he
servado algunas creencias irra- podido controlar mi hambre, siem-
cionales consistentes que instan a pre será de la misma manera”.
realizar las conductas patológicas
e intereren el proceso de cambio. Catastrofismo: Se exageran los
Algunas han sido mencionadas en aspectos negativos de un acon-
el capítulo anterior, otras son las tecimiento o circunstancia, sin con-
que indicamos a continuación: templar otras alternativas. “He au-
mentado 300 gramos de peso, la
Pensar con los propios sen- vida ya no merece la pena”.
timientos: se puede pensar que
algo es cierto porque el sentimien- Comparaciones injustas o par-
to es muy intenso, ignorando las ciales: mediante la comparación
pruebas que orientan hacia una con el más alto estándar de lo
realidad contraria. Las emociones comparado, la persona se siente
son convertidas en pruebas de siempre inferior. “Nunca podré ser
realidad: “me siento gorda, así que como las modelos de las revistas”,
debo serlo”. “quisiera tener el pecho de fula-
nita, las caderas de menganita, el
Uso de etiquetas: Una persona dinero de tal y la cultura de cual,
puede atribuirse un calificativo e nunca podré tenerlo todo, no val-
identicarse con él. Estos calica- go nada”.

42 Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
43/103

Trastornos de la conducta alimentaria: cómo actuar desde la familia.

Desde el punto de vista del proce- la conducta alimentaria, entre otros


samiento de la información, vuelve aquellos que participan en la codi-
a una forma de pensar infantil, con cación de mediadores de la regu-
una capacidad de abstracción muy lación del equilibrio nutricional o
mermada. en la presentación de determina-
dos rasgos temperamentales. Los
Factores datos al respecto son todavía in-
ciertos para exponerlos con se-
genéticos-biológicos guridad.

Los modelos de vulnerabilidad a


los TCA actuales integran los
factores genéticos y las
experiencias tempranas
de la vida con los as-
pectos sociales y perso-
nales. Se supone que
estos factores generan
una determinada suscep-
tibilidad para mostrar una
respuesta inadaptada al
estrés crónico. Esta res-
puesta está mediada, entre
otros fenómenos, por un
incorrecto funcionamiento del eje
hipotálamo-hipófisis-adrenal. En
presencia de determinados fac-
tores de estrés, la respuesta de Las dietas
afrontamiento realizada por este Hacer dieta predispone a padecer
eje es errática lo que determina un TCA, tanto más cuanto mayor
una pérdida del equilibrio nutri- sea su duración e intensidad, de-
cional. bido al impacto que tiene en los
procesos de regulación biológica
Predisposición genética de nuestro organismo:
Los estudios familiares y gemela-
res parecen indicar que existe un Se elimina la percepción de
riesgo incrementado de padecer hambre y saciedad. Seguir una
anorexia o bulimia si tienen fami- dieta supone aprender a no hacer
liares que padecen estas enferme- caso a las señales internas del
dades. organismo, generando confusión
y miedo a excederse en la inges-
No existe ningún gen único que ta, lo que lleva a reforzar el control
sea responsable del surgimiento sobre lo que se come.
de una anorexia o una bulimia, más
bien, serían múltiples los genes Altera la sincronía de las es-
que contribuirían a la transmisión tructuras cerebrales encargadas
genética de determinadas carac- del control de la ingesta y del man-
terísticas que participarían en sus- tenimiento del peso corporal en
citar una mayor vulnerabilidad al torno a un valor de referencia
padecimiento de los trastornos de llamado “punto de ajuste”. Este

Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid 43
44/103

Factores determinantes de los TCA.

mantiene el peso corporal estable ocupa un lugar privilegiado y el


pero con una variabilidad total- buen aspecto externo se ha con-
mente normal. vertido en sinónimo de superio-
ridad. Los recursos psíquicos y
Si la restricción en el consumo económicos de estas familias se
equilibrado de alimentos se man- dedican a conseguir que los
tiene en exceso, puede producir una demás les vean siempre bien y les
desorganización general del indivi- admiren, sin pararse a pensar si
duo generando alteraciones físicas, realmente se sienten bien o mal.
cognitivas y emocionales: trastor- Por ello, y probablemente sin darse
nos gastrointestinales, incremento demasiada cuenta, realizan comen-
del sueño, sensación de estar ma- tarios muy negativos ante cual-
reada, dolor de cabeza, aumento quier mínimo “defecto” corporal
de la sensibilidad al ruido y a la luz, de las personas. Un clima familiar
descenso del control motor, pérdi- semejante genera que los hijos
da de fuerza, pérdida de pelo, into- crezcan con un miedo a engordar
lerancia al frío, manos y pies hela- muy intenso. Al llegar a la pu-
dos, edemas. Cambios en la grasa bertad, este miedo entorpece la
corporal y en la musculatura; preo- aceptación del aumento de peso
cupación obsesiva por la comida, consustancial a esta etapa, que es
pérdida de interés por otras activi- un ingrediente básico para el cre-
dades, dicultades de concen- cimiento posterior.
tración y descenso de la compren-
sión y el juicio; tristeza, apatía,
aislamiento social, labilidad afectiva Los padres que han
con irritabilidad y episodios de agre- generado esta vulnerabilidad
sividad. en el seno familiar deben
entender estos procesos
La restricción alimentaria es pero no por ello sentirse
el factor de riesgo inmediato más
culpables, sino víctimas
evidente en la anorexia nerviosa.
Aunque ignorado de forma siste-
de los valores sociales
mática por los/las pacientes, ésta dominantes.
puede conducir también a un tras-
torno bulímico o, al menos, a la
aparición de síntomas bulímicos. Tomar conciencia de sus actitudes
hacia el cuerpo será el primer pa-
so para promover la prevención
Factores familiares de los trastornos o la recuperación.

Además de las relaciones fami- Aculturación alimentaria


liares relatadas en el capítulo an- Aspectos tradicionales, como sen-
terior, existen otros factores en tarse a la mesa para comer o ce-
el ambiente familiar que propi- nar en familia y el uso de la dieta
cian la aparición de los trastornos mediterránea están desaparecien-
alimentarios. do de las casas españolas. El cam-
bio en los hábitos familiares ha
Importancia de la favorecido la utilización inapropia-
apariencia en la familia da de la comida y el desarrollo de
En muchas familias la apariencia trastornos bulímicos. La ausencia

44 Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
45/103

Trastornos de la conducta alimentaria: cómo actuar desde la familia.

de una persona que se respon- socializada que le llene el cuerpo


sabilice de los horarios de comida y el espíritu. La merienda se re-
(un papel tradicionalmente atribui- duce a una mera ingesta física en
do a la madre y ahora muy desdi- soledad, con la única compañía
bujado y sin claras alternativas), de la nevera.
dificulta que en muchos casos se
adquieran unos hábitos de alimen- En estos casos, la vulnerabilidad
tación adecuados. a la anorexia o la bulimia vienen
tanto de la ausencia de una ali-
Conciliación de vida mentación estructurada, como de
laboral y familiar la ausencia de un afecto relacional
En íntima relación con el punto an- expresado. El niño/a, el adoles-
terior se encuentra la vulnerabilidad cente, no aprende la importancia
producida por jornadas laborales que tiene comer para rendir bien
largas y extenuantes. Debido a su en el colegio o aprende a sustituir
horario laboral, los padres van la ausencia de sus padres por la
siempre con prisa, salen temprano comida, y ambas circunstancias
y llegan muy tarde, sin tiempo para propician el riesgo de desarrollar
estar en casa. Las consecuencias un trastorno alimentario. Además,
más negativas de esta situación con esta forma de vida, los padres
son que se prescinde de preparar pierden la posibilidad de observar
el desayuno de los niños y de y detectar qué están haciendo sus
acompañarles mientras lo toman, hijos con la alimentación y para
y que no pueden recibirlos cuando cuando se quieren dar cuenta, el
vuelven por la tarde del colegio trastorno está instaurado.
o del instituto. Muchos suelen ir
a clase habiendo tomado un de- Problemas alimentarios
sayuno irrisorio y solitario o bien de allegados y amigos
van al colegio sin desayunar, con el Que las personas muy cercanas
encargo de comprarse algo por ahí a el/la niña o adolescente estén a
para comerlo luego. régimen o hagan dietas especiales,
es uno de los mayores factores
de riesgo para el desarrollo de un
trastorno alimentario, debido a
su efecto de contagio.
Esto no significa que
si un familiar tiene
sobrepeso deba se-
guir con él, pero
tiene que con-
siderar muy cui-
dadosamente
cual será la
mejor mane-
ra de afron-
Después, la prolongación de las tarlo sin perjudicar a los de su
horas de trabajo hace que estén alrededor. No debe olvidar que su
ausentes cuando el/la hija vuelve hija/sobrina/nieta ve lo que hacen
del colegio y que ésta carezca sus familiares, toman buena nota
de la posibilidad de una comida de ello y les imitan.

Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid 45
46/103

Factores determinantes de los TCA.

bulencia de su conflicto interior


En ocasiones, la obsesión desarrollando una bulimia.
de la madre por adelgazar
es tan intensa que insta
a la hija a realizar Factores
una dieta a dúo con ella. desencadenantes
Los cambios
Algunas madres/padres siempre Los trastornos de la conducta
tienen a dieta a la familia, bajo la alimentaria suelen iniciarse en el
excusa de que hay que comer contexto de un cambio vital: cam-
sano -ortorexia-; exige o atormen- bio de colegio, instituto; inicio de
ta a los hijos para que coman lo la universidad o de la vida laboral;
que ella/él dice. La comida sabro- cambios en el domicilio; de ami-
sa, bien cocinada, los caprichos gos; separación de pareja… esto
alimentarios, las chucherías, son es, situaciones que suponen una
extras que raramente se permiten. mayor responsabilidad o un nivel
Negar de forma rígida los compo- de madurez que la persona no
nentes no nutricionales de los ali- tiene. El cambio más común es la
mentos, produce unas carencias pubertad, que implica hacer frente
gustativas y olfativas que necesi- a una serie de cambios corporales
tarán satisfacerse en el futuro, ge- y se producen los primeros acer-
neralmente en forma de comida camientos sexuales.
compulsiva y excesiva.

Eliminación/fingimiento
de emociones negativas
En aquellas familias en las que se
teme el surgimiento y la expresión
de emociones negativas, ya que
suelen ser percibidas como una
amenaza para la integridad mental,
los hijos crecen carentes de recur-
sos expresivos y pueden buscar
en cualquier sustancia -alcohol,
drogas, comida- una forma de
anular/dominar lo que sienten. La
hija que desarrolla una anorexia
es la que ha cumplido esta inhibi-
ción emocional a rajatabla. Cree
que para que se la quiera tiene
que sentir y actuar de acuerdo a lo
que se espera de ella, aunque esto
implique anular o fingir sus emo-
ciones y hacer lo que no le ape-
tece. La niña o joven que se ve Además, existen otros cambios
desbordada por sus emociones, que sitúan a algunas personas
busca en la comida una forma de en situación de riesgo: el estrés
derivar el descontrol a otro terreno producido por el cambio de vida
más inicuo y así, templar la tur- y las nuevas responsabilidades de

46 Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
47/103

Trastornos de la conducta alimentaria: cómo actuar desde la familia.

la joven que contrae matrimonio mo consecuencia de un cuerpo


puede desencadenar un TCA si con el más ligero sobrepeso.
tuvieron ciertas dicultades con la
comida durante su adolescencia; La operación “Bikini”: los comen-
pero no fueron lo suficientemente tarios sobre el cuerpo y la ropa
graves como para desembocar en cuando se acerca la temporada
un cuadro clínico. primavera-verano y las conversa-
ciones sobre cómo van a eliminar
La soledad del ama de casa cuan- la celulitis; la exaltación de las in-
do los hijos se hacen mayores tervenciones quirúrgicas; inducen
puede desencadenar trastornos a muchas personas a iniciar dietas
alimentarios si tiende a usar la “milagrosas”.
comida como entretenimiento y
evasión. En la mayoría de los La influencia de los compañeros:
casos, la situación se ha ido ges- contagio escolar-seguridad
tando durante años de vida se- relacional
dentaria que le han producido La presión para hacer dieta, de las
un exceso de peso. Algunas de compañeras del colegio o de algún
estas amas de casa pueden en- equipo de deporte, es una situa-
contrarse con que llevar pautas ción de alto riesgo en una etapa
de vida más saludables que in- -inicio de la adolescencia- en la
cluyan adelgazar, iniciar activi- que la influencia de los iguales
dades fuera y aumentar el ejerci- adquiere un gran peso en la toma
cio físico les llena la vida, lo que de decisiones. En esta etapa sue-
termina en obsesión. len existir en los colegios algunas
chicas perversas que inducen a
Personas de mediana edad, entre otras chicas -las más vulnerables-
los 35-60 años, inician dietas para a hacer dietas que ellas nunca
perder peso pensando que así harán. Se apuestan conductas res-
adquieren un aspecto más joven. trictivas: “no comer la merienda”,
En este objetivo encuentran algo “no desayunar”, y se desprecia a
con que llenar ilusoriamente el las que parecen no lograrlo. La in-
vacío de una existencia que se les ductora miente y no restringe, la
ha escapado y creen que así po- vulnerable, que desea ser acepta-
drán recuperar. da por la prestigiosa, lo consigue y
desarrolla el trastorno.
Comentarios
de personas relevantes Las informaciones supuestamen-
Son factores muy perjudiciales te preventivas de ciertas charlas
e inducen a muchas chicas a ini- escolares sobre alimentación sana,
ciar el trastorno, los comentarios pueden inducir a eliminar la grasa
de los entrenadores físicos -gim- de la comida familiar. Esta informa-
nasia, patinaje, natación, ballet, ción, adquirida sin filtro, puede
etc.- acerca de la necesidad de ser interpretada de forma excesi-
tener un cuerpo delgado para vamente radical y al comparar lo
destacar, triunfar o vencer en las aconsejado con lo que comen
pruebas de competición o exhibi- habitualmente en su casa, llegar a
ciones artísticas. O los comenta- la conclusión de que no es una
rios opuestos acerca de la falta de comida sana, decidiendo cumplir a
habilidades de alguna alumna co- rajatabla lo aprendido.

Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid 47
48/103

Factores determinantes de los TCA.

Situaciones de evaluación Haber sido víctima de abusos


Los exámenes. El estrés que pro- Haber tenido experiencias sexuales
duce la evaluación y la perpe- no placenteras. Algunas personas
tua sensación de ineficacia de tras una experiencia sexual no
las personas vulnerables, hace que deseada inician un trastorno pur-
bastantes casos de anorexia y gativo que puede desembocar en
bulimia nerviosa surjan en época una anorexia o en una bulimia.
de exámenes. Además, muchas Otras sienten tanto asco hacia
jóvenes inician sus atracones pre- su cuerpo y sus sensaciones, que
parando exámenes al utilizar la tratan de eliminarlo, castigarlo,
comida como gratificación com- como forma de olvidar la situación
pensatoria. de abuso vivida.

48 Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
49/103

Trastornos de la conducta alimentaria: cómo actuar desde la familia.

Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
49
50/103

Inicio del problema y detección precoz.

Inicio del problema


y detección precoz.

No todas las preocupaciones referidas


al peso y las dietas son suficientes
para diagnosticar la presencia de una
anorexia nerviosa.

50 Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
51/103

Trastornos de la conducta alimentaria: cómo actuar desde la familia.

Para que un trastorno de la con- torno anoréxico aparecen en el


ducta alimentaria no se asiente de ámbito de lo personal. La entrega
forma permanente es primordial y perfección que siempre ha tenido
detectarlo con prontitud. Sin em- la/el hija/o más obediente y dócil
bargo, la posición persecutoria, aumentan llegando a convertirse
fruto de una ansiedad extrema, en el miembro ideal de la familia:
puede ser aún más perjudicial todo lo hace bien, es disciplina-
que la tardanza en percibirlo pues da/o, correcta/o, obediente, sensi-
genera en el potencial paciente un ble. De forma simultánea el ren-
afán de lucha que le hace muy dimiento académico se torna más
refractario al tratamiento. Por ello, brillante, si es que eso es posible
los familiares y allegados debe- y los resultados académicos, ya
rán adquirir el conocimiento de los de por si muy buenos, se hacen
primeros síntomas para detectar la extraordinarios. Estos logros le
patología rápidamente pero tam- generan las alabanzas de todo su
bién tendrán que aprender la mejor entorno familiar y escolar, adqui-
forma de abordar estos proble- riendo fama de persona muy tra-
mas, evitando una confrontación bajadora y “formal”. Para no perder
en la que ellos, si no lo hacen bien, este refuerzo, ocupa gran parte de
siempre acabarán vencidos. su tiempo estudiando y disminuye
su tiempo de ocio y descanso.

Anorexia nerviosa Dietas


Paralelamente, aunque aún puede
La anorexia nerviosa no se presen- pasar inadvertida, la persona que
ta con la misma gravedad en to- desarrolla una anorexia toma la
das/os las/los pacientes. Ni todas determinación de perder peso e
las preocupaciones referidas al inicia una dieta. La restricción pue-
peso y las dietas son suficientes de parecer similar a la que realizan
para diagnosticar la presencia de muchas otras personas normales
una anorexia nerviosa. La identi- preocupadas por el peso, pero una
ficación temprana no siempre es visión en profundidad resalta al-
fácil ya que algunas preocupacio- gunas particulares que ayudan a
nes características de la anorexia diferenciarlas.
son muy frecuentes en nuestra so-
ciedad y no todas las particula- Diferencias entre las dietas de
ridades de la patología se manifi- una persona normal y de una per-
estan en el inicio del trastorno. sona con riesgo de desarrollar una
anorexia nerviosa:
¿Cómo pueden, los familiares sa-
ber si deberían pedir ayuda profe- A. Es poco probable que una
sional? Proporcionar a la familia persona desarrolle una anorexia
ciertas claves para facilitar la de- nerviosa, a pesar de que quiera
tección precoz y una intervención perder unos kilos para entrar en
terapéutica temprana requiere la el bañador o esté algunos días
conjunción de conocimientos y comiendo menos pan o se niegue
actitudes. a comer dulces, si:

Perfección extrema a. Trata de hacer dietas y las


Los primeros signos de un tras- abandona a los pocos días.

Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
51
52/103

Inicio del problema y detección precoz.

b. Es capaz de descansar Es especialmente signicativo que


y “pierde el tiempo” con las se ausente de la comida familiar
amigas. con diversas razones, todas ellas
aparentemente coherentes: “cene
c. Sabe exponer sus ideas fuera”, “me tomé un pincho en
discrepantes o protestar ante clase”…; y, niegue su delgadez:
lo que le parece injusto, sin “estas perdiendo peso… pues yo
que esto le ocasione una culpa como”.
excesiva.
Los cambios más habituales res-
B. Es muy probable que ya haya pecto a la comida se describen en
sido atrapada por el trastorno si: la tabla siguiente:

a. Hace una dieta de manera


implacable que no rompe ante Colecciona y almacena toda
ningún evento o situación: cum- clase de alimentos.
pleaños, Navidad, Fiesta de fin
de curso, etc. Dedica períodos largos de
tiempo a leer libros de cocina y
b. La dieta se hace más estricta la sección dedicada a dietas
a pesar de que ya ha perdido de las revistas.
los kilos que se había propuesto
al comenzar a restringir. Consigue (recortar, coleccionar
etc.) dietas en libros y revistas
c. Al perder peso la admiran por y las atesora.
su delgadez y ella adquiere un
aspecto triunfante. Presta atención/vigilancia a lo
que se va a comer en la casa.
d. Deja de exhibir su delgadez
porque alguien le ha comenta- Supervisa la necesidad de
do que está excesivamente del- alimentos de la casa: despensa
gada y ella se enfada y lo niega. o nevera.

e. A partir de ese momento co- Programa, decide y realiza


mienza a enmascarar su cuerpo la compra de la familia.
vistiendo ropas anchas y super-
puestas. Prepara la comida familiar.

Cocina comidas “especiales”:


Cambios en la forma de comer tartas, bizcochos…, que
Según va teniendo éxito en su nunca prueba.
dieta, limita los alimentos que in-
giere -pan, dulces, fritos-, y la Cuida la alimentación de
forma de comer cambia. Come otros miembros de la familia:
lentamente, trocea la comida en padre, hermanos, animales
pequeños pedacitos y la espar- de compañía.
ce por el plato; la aplasta sobre el
plato, mueve las comidas de un Elige alimentos bajos en calorías
sitio otro en el plato, deja comida excluyendo cualquier otro.
en los bordes, etc.

52 Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
53/103

Trastornos de la conducta alimentaria: cómo actuar desde la familia.

Entra con la familia en Realiza una ingesta excesiva


pastelerías aparentando desear o una restricción total de
comer. El acompañante come y líquidos. (bebe mucho agua
ella sale sin haber comido nada. o no bebe agua).

Se levanta de la mesa durante Bebe muchas bebidas


la comida. Va muchas veces a bajas en calorías.
la cocina. Sustituye a la madre
para ir a por los otros platos. Preere comer sola. Evita
comer con otros diciendo
Lava la comida en el grifo; seca que lo hará luego.
la grasa con servilletas o papel
de cocina. Es incapaz de tolerar
acontecimientos no planicados
Oculta la comida debajo de la que impliquen comida.
mesa, del plato, en los bolsillos.

Si tiene que comer en la mesa Con el objetivo de conseguir la


con todos, la comida se le cae, pérdida de peso deseada y man-
estropea, estruja. tenerlo bajo su control la persona
que ha desarrollado una anorexia
Tira comida por el “servicio” realiza otras conductas típicas:
o por la ventana o aparece en
la basura.
Se pesa varias veces al día, o
Come de pie. después de cualquier comida.
Utiliza muchas especias y
Hace ejercicio excesivo,
toda clase de condimentos.
especialmente después de
Guarda comida en lugares comer: pasear, correr, subir
inapropiados: armarios, debajo escaleras, nadar, bicicleta, etc.
de la cama, cajones.
Realiza movimientos continuos:
Reacciona con irritación exiones de piernas, bicicleta,
cuando se cambia la hora de mientras está sentada.
las comidas, aunque sean unos
pocos minutos más temprano Hace cosas que impliquen
o más tarde de lo habitual. ejercicio: tareas de casa, deporte;
o está de pie en situaciones
Reacciona con malestar y inhabitúales para ello: tareas del
discusiones por pequeñísimas colegio, ver TV, leer, comer.
cantidades de comida.
Desarrolla rutinas diarias muy
Consume chicles de forma rígidas: horarios, planes, sin
excesiva y continuada. posibilidad de introducir ningún
cambio, para sentirse segura.
La duración de los tiempos
de comida son muy largos y Se viste con ropa muy amplia
come muy lentamente. para ocultar la delgadez.

Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
53
54/103

Inicio del problema y detección precoz.

lidad aparentes, sin expresar sus


Utiliza muchas ropas, unas verdaderas opiniones.
encima de otras para
preservarse del frío.

Incrementa las actividades


extraescolares: estudio de varios
idiomas, danza, gimnasia…

Tiene dicultades para conciliar


el sueño y/o se despierta muy
temprano.

A estas conductas hay que añadir


las trasformaciones psicológicas
ya que son esenciales para el
diagnostico del trastorno, espe-
cialmente la llamada “actitud ano-
réxica”, que implica la necesidad
de control y coherencia con sus
conductas patológicas. Para man- Bulimia nerviosa
tener su control adopta una acti-
tud perfeccionista, debiendo ha- Los primeros momentos del tras-
cer todo al pie de la letra. Valora torno bulímico son difíciles de apre-
las virtudes asociadas al “asce- ciar ya que tanto la comida que
tismo”, fuerza de voluntad, estar realiza delante de los demás como
en forma. Desarrolla rituales y ob- la apariencia corporal del/la pa-
sesiones en otras áreas tales co- ciente son “normales”. Debido a
mo la limpieza. Para conseguir sus conductas purgativas presenta
esta coherencia se niega a si mis- durante un largo periodo de tiem-
ma y a los demás el hambre que po un aspecto corporal delgado e
pasa, la fatiga que siente o las inmejorable, a pesar de que come
complicaciones físicas secunda- en abundancia. No obstante, co-
rias al trastorno. Su delgadez ex- mienzan a surgir algunos signos en
trema le hace sentir una alegría y la casa que permiten detectar que
sensación de fuerza ficticia que algo no marcha bien. En especial,
no logra mejorar la opinión real que en relación al consumo de alimen-
tiene de sí misma, aislándose de la tos y al uso del servicio. La des-
gente. Pronto este aislamiento se pensa y la nevera se vacían
extiende a todos los ámbitos de su rápidamente. Se “esfuman” las
vida: evita salidas, celebraciones, comidas preparadas para algún
estas y pierde sus amistades. miembro de la familia o para todos.
Desaparecen los paquetes de ga-
Debido a la culpa que le ocasio- lletas, los cereales y la leche. Otros
na lo que hace, intenta ayudar a comportamientos relacionados se
otros: ayuda a otras personas en- detallan en la tabla siguiente.
fermas, voluntariado; incrementa el
interés hacia temas del hambre del
La comida con otros es normal
tercer mundo y se relaciona me-
e incluso algo excesiva.
diante el sometimiento y una doci-

54 Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
55/103

Trastornos de la conducta alimentaria: cómo actuar desde la familia.

Come enormes cantidades de La factura del agua aumenta


manzanas y queso fresco, de forma exagerada.
desnatado o semi-desnatado.
Usa laxantes, (diarreas
Come muchas “chucherías”, frecuentes) y/o supresores
caramelos y chicles. del apetito.

Aparecen envases de laxantes Usa diuréticos (consumo agua


y envoltorios de “chuches” excesiva/diuresis muy frecuente)
o comidas preparadas en la Aumenta excesivamente sus
basura o en su habitación. gastos.

Sale de forma extemporánea Dispendio del dinero propio


sin razón aparente para los y ajeno: se queda enseguida
demás, para comprar comida. sin dinero y pide prestamos
(generalmente al padre), que
Se levanta por la noche a comer no suele devolver.
y los familiares la encuentran en
la cocina a horas intempestivas. Realiza robos de comida
y/o dinero.
Se queja de tener pesadillas
y sueños de comida. Empiezan a faltar objetos de
valor en la casa.
Enmascaramiento y soledad:
desaparece sin que la familia Gasta demasiado en cremas
sepa a donde ha ido o se reductoras y masajes.
cierra en su cuarto durante
largo tiempo. Apariencia corporal normal
o excelente.
Con objeto de eliminar la comida
excesiva, el/la paciente bulímico/a Oscilaciones muy bruscas del
realiza comportamientos purgati- aspecto corporal, de gorda a
vos que afectan de forma directa delgada.
a su salud y la ponen en riesgo.
Estos comportamientos se reejan Tiene ropa de muchas tallas.
en conductas, acontecimientos en
la casa y uctuaciones de su apa- Invierte muchas horas en el
riencia corporal. gimnasio y le preocupa en
exceso el modelo de ropa que va
a llevar para hacer sus ejercicios.
Va al baño nada más comer.
Compite con las compañeras
Se producen atascos en las para llegar a ser la más perfecta
cañerías. (Vómitos en lavabo, en su imagen y su rendimiento.
bañera, ducha)
Tiene una agenda llena de
Abre innecesariamente grifos compromisos, pero tiende
de la ducha, baño, lavabo, o tira a cambiar de pareja con
frecuentemente de la cadena. frecuencia.

Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
55
56/103

Inicio del problema y detección precoz.

Surge el caos: su conducta Empeoramiento del trastorno


desemboca en un descontrol en los periodos vacacionales
de horarios, de relaciones o y nes de semana.
actividades. Empieza cosas y
no las termina. Enmascara su sufrimiento
ocultando sus pensamientos
Abandona sus responsabilidades: negativos con el ciclo
trabajo, citas, exámenes, clases atracón-purgación, ya que éste
Promiscuidad sexual. Riesgo en le impide pensar y además le
el sexo. (embarazo, Sida) ocupa la mayor parte de su
tiempo.
Conductas auto-lesivas:
cortes, golpes contra la pared, Cambios del estado de ánimo,
quemaduras. incluyendo depresión, tristeza,
culpa y odio hacia sí misma.
Dependencias: abuso de
alcohol, otras drogas. “Sociabilidad” excesiva: cambios
muy frecuentes de amigos.

La persona que padece una bu- Inestabilidad sentimental.


limia sufre igualmente en los ám- (Cambia de novios con
bitos cognitivo y emocional. Al ser mucha frecuencia).
muy insegura necesita la apro-
bación y admiración de los otros Peleas y problemas por
por lo que se comporta de forma conductas de riesgo: accidentes
complaciente aunque sus verda- Ansiedad inespecíca.
deros sentimientos no sean esos.
Atormentada por sus hábitos ali- Competitividad en todo lo
mentarios, siente tambalear su que hace.
valía que se determina por el con-
trol y la forma corporal. De esta Actitud de superación continua.
forma, la báscula se convierte en
un elemento fundamental y decide
si el día que se inicia va a ser
“bueno” o “malo”. Debido a la crí- Aspectos comunes
tica exacerbada de su silueta, trata a ambos trastornos
de cambiar una o varias partes en la detección precoz
de su cuerpo -nalgas, muslos- Las familias pueden percatarse
no sólo tratando de controlar su de estas alteraciones de la ima-
comida sino también mediante gen corporal -especialmente en
cremas o cirugía. las hijas- por algunos de estos
indicios:

Utiliza la bulimia como excusa a. La excesiva frecuencia con


para eludir responsabilidades la que comenta lo gorda que está;
y compromisos: “no puedo, los comentarios negativos que
tengo bulimia”. reejen odio a su cuerpo, el deseo
de no tener cuerpo, o que tiene
Quejas sobre aburrimiento. miedo a su cuerpo. Puede comen-
tar que sus muslos son deformes

56 Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
57/103

Trastornos de la conducta alimentaria: cómo actuar desde la familia.

o desproporcionados, que quiere gorda”. Al mirarse en el espejo


cortarse las cartucheras o las busca directamente ciertas zonas
nalgas por verlas muy grandes, de su cuerpo para evaluar su
que tiene las carnes fofas, caídas; supuesta gordura.
que le es imprescindible eliminar d. Se la ve llorar, ponerse muy
su celulitis. nerviosa o muy agresiva después
de mirarse al espejo. Se la ve pe-
b. La atención que prestan a llizcarse zonas del cuerpo para
los anuncios de televisión de comprobar si tiene grasa. Se sien-
productos adelgazantes. Si la ta apretando el estómago y no so-
observan que expresa deseos de porta que se le hagan arrugas en
adelgazar después de ver u oír un la ropa que pueda sugerir la posi-
anuncio dedicado a productos bilidad de tener barriga, estómago
adelgazantes. Si ve una película y o “michelines”. Es posible que pon-
comenta lo gruesas o delgadas ga las manos encima de su vientre
que están las actrices. Comenta- y estómago o se estire el jersey,
rios que reflejan la envidia que con el fin de tapar esa zona del
siente al ver a las modelos en des- cuerpo.
files o anuncios. Percibir que le
resultan más atractivas y simpáti- e. La forma y el tiempo dedi-
cas las personas delgadas o co- cado a vestir. La persona puede
menta que las delgadas son más dedicar varias horas en decidir lo
aceptadas y tienen más oportu- que se pone, quitándose y ponién-
nidades laborales. dose diferentes prendas. Algunos
días se ve tan mal que decide
c. Los comportamientos de no vestirse y se queda en casa.
chequeo hacia su cuerpo: los pa- Muchas compran ropa compulsi-
dres pueden encontrarla mirán- vamente y otras tienen tanto miedo
dose la tripa y los muslos en el a verse como están, que se niegan
espejo o en los cristales de ven- a ir de compras, a entrar en las
tanas y escaparates, principal- tiendas o a probarse la ropa.
mente después de haber comido. Cuando se sienten mal ven su
Esta tendencia a chequear su cuerpo deforme y pueden enmas-
cuerpo en el espejo también se cararlo con ropas excesivamente
desencadena después de haber anchas, sin que se marquen las
mirado una revista con modelos formas, lo que puede darles un
delgadas; debido a la forma en aspecto de desaliño o sobre-
que alguien le está mirando; peso.
porque se esté hablando de
otra persona y se refieran a ella f. Elige y se pone esa ropa
como gordita o rellenita; porque muy holgada u oscura, que no le
le dicen que está mejor o tiene gusta y a la que considera “ropa
buen aspecto; después de haber de gorda”, pensando que así no
obedecido y callado cuando de- se nota el volumen que ella siente
seaba expresar su opinión; des- tener. Se niega a ponerse pan-
pués de haberse comportado de talones estrechos, cortos, minifal-
manera excesivamente compla- das, bañador o prendas ajusta-
ciente o haberse sometido, ya que das para hacer deporte (mallas
todos estos comportamientos les y “bodys”). En ocasiones, si han
hacen sentirse “psíquicamente perdido peso y se sienten bien se

Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
57
58/103

Inicio del problema y detección precoz.

acicalan en exceso, poniéndose su dinero. Muchas expresan el


las prendas y los complementos deseo de hacerse intervenciones
totalmente conjuntados, sin faltar de cirugía plástica, llegando a
detalle. realizarse la liposucción, especial-
mente de los muslos.
g. Aislamiento del entorno so-
cial: cuando la paciente siente que
tiene un físico esplendoroso, es
muy proclive a las salidas excesi-
vas. Por el contrario, si ve su cuer-
po con el más mínimo fallo, evita
cualquier actividad social que exi-
ja “vestirse” o en el que exista la
posibilidad de compararse con
gente. En esta situación le resulta
imposible pasar por la calle delante
de gente joven, entrar en una
cafetería o arriesgarse a encon-
trarse con alguien conocido. Evita i. Conductas auto-lesivas. Algu-
ir al gimnasio porque le da ver- nas pacientes se sienten tan mal
güenza utilizar ropa ajustada o cuando ven reflejado en el espejo
tener que utilizar las duchas co- su cuerpo y no les gusta, que lle-
munes. Evita ir a la piscina o la gan a maltratarse verbal y física-
playa para no ponerse en bañador. mente. La familia puede observar
Si se lo logra poner se queda sen- que al mirar alguna foto, visionar
tada o se pone una toalla si se le- un video, en los que a ella le
vanta. No se atreve a pasear en parece que está mas gorda de
bañador delante de gente, sobre- lo que le gustaría verse o si percibe
todo si es gente joven. el más mínimo “defecto” en su
cuerpo, se reeja en su cara el dis-
h. Gastos excesivos en pro- gusto y el rechazo hacia ella con
ductos cosméticos y tratamientos tal intensidad que puede lesionarse
para moldear el cuerpo. Las pa- dándose golpes o haciéndose
cientes compran toda clase de quemaduras. Estos comporta-
cremas reductoras y rearmantes. mientos se exacerban ante un
Gastan en masajes y técnicas cambio de talla, situación de ries-
de “esculpir” el cuerpo casi todo go que conviene ayudar a manejar.

58 Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
59/103

Trastornos de la conducta alimentaria: cómo actuar desde la familia.

Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
59
60/103

Tratamiento-intervención.

Tratamiento-intervención.

Dependiendo del tipo de trastorno y


del carácter de la persona, la respuesta
puede ser diferente, pero la mayoría
tiende a negar lo que ocurre.

60 Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
61/103

Trastornos de la conducta alimentaria: cómo actuar desde la familia.

las comidas principales, 1/2 hora


El objetivo global del para desayunos y 15-20 minutos
tratamiento puede resumirse para los tentempié). En cuanto a
en la máxima siguiente: es la forma, atañe especialmente al
necesario colocar la comida cambio en la manera en que los
en su sitio tanto física como pacientes se enfrentan a su comi-
psíquicamente. Este enunciado da. Tendrán que comprometerse a
implica numerosas no trocear la comida en exceso; ni
intervenciones terapéuticas dejarla en los bordes, ni tirarla fuera
pero su sencillez puede del plato, ni echar agua, ni quitar la
ayudar a guiar el proceso grasa con servilletas, etc.
de recuperación de las
personas con TCA y sus Situar la comida en su sitio
familiares, sin perderse. psíquicamente implica desco-
nectar las asociaciones entre pen-
samientos, sensaciones corpora-
Situar la comida en su sitio les, emociones y sentimientos y la
físicamente implica aprender a comida; bien sea porque decidan
comer en cantidad, variedad, lugar, restringirla ante ideas de gordura
tiempo, ritmo y forma. Tanto la/el supuestamente presente o futura;
paciente como sus familiares ten- bien sea porque deseen comer en
drán que establecer un horario, re- exceso y se den un atracón o pi-
lativamente flexible, para realizar coteen sin parar. Igualmente, ten-
sus comidas potenciando que se drán que desconectar las asocia-
efectúe alguna comida familiar en ciones entre emociones negativas
la que todos puedan estar relaja- tales como sometimiento, frustra-
dos y en comunicación positiva. ción o ira y la sensación de gordu-
Los adultos responsables de la ra, y ésta con comportamientos
alimentación (padre, madre o am- compensatorios -ejercicio excesi-
bos) tienen que ofrecer una comi- vo y conductas purgativas-. Para
da suficiente, variada y bien co- conseguir estas desconexiones es
cinada, para que los alimentos necesario saber que cada emoción
ingeridos les proporcionen no produce cambios en la percepción
sólo los nutrientes necesarios, sino que tenemos de nuestra imagen
también sabores y texturas que corporal. La sensación de gordu-
cubran el deseo de olor, sabor y ra tiene poco que ver con estar
percepción (degustación). El lugar gordo/a y mucho con el manejo de
donde se realice la comida tiene las emociones internas. Los sen-
que ser, en la medida de lo posi- timientos negativos generan ten-
ble, especíco; o al menos que no sión corporal, malestar en la zona
se coma en el sofá delante de la del abdomen, percepción de gor-
TV o en situaciones semejantes. dura y sensación de alivio inmedia-
Es necesario dejar un intervalo de to (aunque sea transitorio) con las
tiempo entre comidas para que los purgaciones. Por tanto, las difi-
miembros de la familia lleguen a cultades de la familia para aceptar
sentir hambre. Conviene marcar la imagen corporal están relacio-
un intervalo de tiempo que no fo- nadas con los conflictos para ex-
mente una comida excesivamente presar sentimientos. Para solven-
rápida o lenta (se sugiere un tiem- tar estos problemas en la familia
po máximo de 3/4 de hora para será necesario que los progeni-

Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid 61
62/103

Tratamiento-intervención.

tores resuelvan antes los suyos ciertas líneas de actuación que


propios. No pueden ayudar si potencian la aceptación de ayuda
no saben expresar su propia vida más fácilmente.
emocional que, en demasiadas
ocasiones, ha sido suprimida, dis- Actitud de las familias
torsionada o descontrolada. Una ante el descubrimiento de
vez generado en casa un clima de un trastorno alimentario
aceptación del mundo emocional Cuando una familia se da cuenta
de cada uno, sin que ello signique de la existencia de un trastorno
crítica, traición o riesgo de aban- alimentario en uno de sus miem-
dono, los hijos podrán expresar su bros, puede adoptar diferentes
soledad, dolor, miedo, sin tener posiciones: muchos padres niegan
que recurrir a la comida. Además, o minimizan el problema o espe-
ya que la excesiva importancia que ran que este se arregle solo, sin
ha podido darse a la delgadez se hacer nada. Otros preeren pensar
ha debido, en gran parte, a la que el problema es solamente físi-
presión social directa o indirecta, la co, que sólo necesita ganar peso.
familia tendrá que trabajar su pro- Algunos son resistentes a la idea
pia independencia del medio y de una psicoterapia y se sienten
apostar por valores más huma- avergonzados o con sensación
nos de aceptación, consideración de que han fracasado en su tarea
y respeto hacia todos los seres de lograr que su hijo sea sano y
humanos más allá de su forma feliz.
corporal.

Sin embargo, estos objetivos que


parecen claros y sencillos, son
complicados de obtener porque
la mayoría de los pacientes no
quieren ser tratados por miedo
a perder el control, engordar,
aceptar aspectos de su forma
de actuar que no les agrada ver,
o simplemente asumir que se
equivocaron en su decisión de
controlar su cuerpo y su comida.
Por otra parte, la excesiva sensi-
bilidad de las personas que pade-
cen un trastorno alimentario les
hace muy susceptibles a lo que
se les dice y, por tanto, indicarles
que necesitan ayuda suele ser
una tarea muy estresante y difícil. En general, ante un TCA en la
Este primer acercamiento a la per- familia, se pasa por diferentes
sona enferma es tan relevante que estadios emocionales que son
puede determinar el desarrollo del similares a los atravesados en
trastorno y la posibilidad o no de un duelo:
tratamiento. Exponemos a conti-
nuación algunas de las respuestas 1. Negación: se minimiza o nie-
más comunes de las familias y ga que exista un problema.

62 Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
63/103

Trastornos de la conducta alimentaria: cómo actuar desde la familia.

2. Enfado: se vive como una estén separados). Ambos deben


decisión voluntaria cuya razón no transmitir su preocupación y se-
aciertan a comprender: ¿por qué ñalarle que están abiertos a cual-
haces esto? quier cosa que quiera decirles y
mostrar su disposición a ayudarle.
3. Negociación: puesto que el
trastorno se supone voluntario, se b. No es recomendable iniciar
le proponen beneficios si aban- la conversación a la hora de las
dona su determinación: si dejas de comidas. Hay que esperar el mo-
vomitar, te llevo a “Disney”. mento adecuado en el que el/ella
esté en disposición de escuchar,
4. Depresión: trascurrido un tiem- el clima emocional no esté sobre-
po sin que sus esfuerzos hayan cargado y no estén otras personas
servido para algo, surgen emo- presentes, es decir, preservando
ciones de depresión y fracaso: su intimidad.
“¿por qué no se pone bien?”
c. El tema debe ser planteado
5. Aceptación: se acepta que de forma directa y clara explican-
no pueden solucionar el problema do los síntomas o actitudes que
sin ayuda y que la capacidad de han observado, por ejemplo: “te
recuperación y decisión de tra- hemos escuchado vomitar des-
bajar en ello es de el/la paciente. pués de las comidas” en lugar de
“pasas mucho tiempo en el baño”
Confrontación con el hijo/a y sin juzgar sus sentimientos (“de-
Durante estos estados y debido a bes sentirte muy infeliz para hacer
la gran angustia que produce el esto que haces”).
descubrimiento de lo que sucede,
la forma de hablar al hijo/a puede d. Escuchar atentamente su
ser totalmente inadecuada. Unas punto de vista sin rebatirlo ni entrar
veces la desesperación lleva a los en confrontaciones directas o dis-
gritos y las peleas, otras al llanto y cusiones violentas. Si la conver-
las lamentaciones. En ocasiones sación sube de tono e incluso se
ambos padres, afortunadamente, pasa a cualquier forma de agresión
se ponen de acuerdo antes de verbal o física, es aconsejable fi-
hablar para ver qué y cómo le van nalizar la conversación y pospo-
a decir lo que observan. Pero, nerla para otro momento cuando
muchas otras, padre y madre se se pueda hablar con calma.
enfrentan, piensan cosas distintas
e inician ellos mismos una pelea. e. Evitar dejarse manipular o
Las sugerencias propuestas a convencer por el/la paciente así
continuación ayudarán a paliar las como realizar acusaciones o insul-
dicultades: tos, porque necesita el apoyo de
su familia.
a. Cuando los padres tienen
sospechas de un trastorno alimen- f. Evitar poner normas (tienes
tario deben mantener una conver- que comerte lo que mamá te
sación con la/el chica/o actuando pone) o tratar de conseguir pro-
de forma coordinada y con un cri- mesas que no van a poder cum-
terio uniforme que previamente plirse (prométeme que no vas a
han consensuado (incluso aunque volver a vomitar).

Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid 63
64/103

Tratamiento-intervención.

g. Proponer la necesidad de y que deben hacer dieta para


ponerse en tratamiento. Puede perder peso, es decir, no suelen
hacerse una aproximación inicial reconocer la necesidad de ayuda
de darle alguna información sobre porque además, la malnutrición
TCA. Si lo rechaza, se le puede afecta a su capacidad de pensar
plantear que acuda a la consulta y sentir. Otras pueden aceptar de
para que todos se queden tranqui- buen grado ir al médico por no dis-
los y que un profesional les ase- gustar a sus padres pero sin que
gure que está bien. El tratamiento esto signique necesariamente que
es más efectivo cuando lo decide acepten el compromiso de ganar
el/ella. Otra opción es que acudan peso.
los miembros de la familia aunque
no vaya el/la paciente ya que esto Las personas que padecen
puede despertar la necesidad de un trastorno bulímico o comida
ir a defender su punto de vista. compulsiva, a pesar de que los
síntomas pueden permanecer años
h. En caso de resistencia, tam- ocultos, tiene menos dicultad para
bién puede negociarse un plan que reconozcan su problema pero
para lograr la conducta más acep- a la vez que reconocen la necesi-
table: “vale, hacemos un trato: ac- dad de ayuda pueden resistirse a
cedo a que no vayas a consulta si abandonar sus ciclos de atracón-
te comprometes a incrementar lo purga.
que comes en las próximas dos
semanas, eso sí, si finalizado ese
plazo observamos tu incapaci-
dad para cumplir el objetivo,
acudirás a la consulta ¿de
acuerdo?”

i. Si el riesgo es
elevado porque esta
muy delgada/o o pierde
peso muy rápidamente o
hay mucha sintomatología
activa, autolesiones, ideación au-
tolítica o autolesiva, promiscuidad,
es necesario pedir ayuda, incluso
tramitando un ingreso judicial.
A pesar de esta negación, la fami-
Anticipando su respuesta lia debe de buscar ayuda, pedir
Dependiendo del tipo de trastorno consulta y forzar para que se
y del carácter de la persona, la res- acuda a la sesión. A veces esto se
puesta puede ser diferente, pero la facilita si la primera entrevista se
mayoría tiende a negar lo que le realiza para toda la familia. Es po-
ocurre: sible que la persona con el tras-
torno anoréxico se ponga agresiva
Las personas que padecen un e insulte. Los familiares no deben
trastorno anoréxico de inicio tem- darse por aludidos ni enfadarse,
prano niegan tener algún proble- sino comprender que está asus-
ma, consideran que están gordas tada y trata de defender su lugar

64 Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
65/103

Trastornos de la conducta alimentaria: cómo actuar desde la familia.

en la vida. Cree rmemente que no 6. Terminación: Incorpora los


le pasa nada, que está mejor que cambios a su vida y desaparece el
nunca y no comprende cómo sus problema.
familiares la ven enferma.
Todo tratamiento tiene que tener
El proceso de cambio: en cuenta los estadios anteriores
estadios y procesos y evaluar en qué estadio de moti-
La posición negadora tiene re- vación está el/la paciente para se-
lación con el estadio de cambio en leccionar aquellas estrategias que
el que se encuentra toda perso- sean más efectivas. Por ejemplo,
na que quiere o necesita cambiar. de poco sirve dar estrategias de
Para que una persona pueda dar manejo de vómitos a un/a paciente
un cambio tiene que prepararse que aún no tiene conciencia de
para ello, pues éste no ocurre por tener un problema, es decir que
el solo hecho de desearlo. En el está pre-contemplativo/a, porque
proceso de preparación se atra- no las iba a utilizar. En este caso,
viesan diferentes estadios que lo oportuno es dar información
a su vez requieren diferentes in- y trabajar la toma de conciencia
tervenciones terapéuticas ajus- del trastorno. A veces el uso de
tadas a cada etapa. El cambio se estrategias erróneas se genera
produce de forma progresiva, es debido a la precipitación en la
decir, se tiene que pasar por los búsqueda de resultados. Si la fa-
diferentes estadios preparatorios milia y el/la paciente quieren mejo-
hasta que se llega a la acción rar rápidamente pueden presionar
trasformadora. Si se desestima el al equipo y derivar en acciones
momento de cambio o se utilizan compulsivas carentes de resulta-
técnicas inadecuadas para el nivel dos positivos estables que garan-
correspondiente se corre el riesgo ticen la recuperación a largo plazo.
de atribuir la falta de mejoría a la
cronicidad del trastorno y no a la Existen otras variables
utilización inoportuna de consejos que influyen en la recuperación
y técnicas para ese determinado Si el/la paciente habla y expre-
momento. sa, tiene capacidad de introspec-
ción, es abierto/a a nuevas ideas
1. Pre-contemplación: No re- o conductas, se arriesga a probar
conoce que tiene un problema. nuevos caminos, se ha logrado el
40% del tratamiento. Si además es
2. Contemplación: Empieza a capaz de tener esperanza y con-
aceptar que tiene un problema. anza en el proceso que se inicia,
se le añade un 15% más de posi-
3. Preparación: Considera la bilidades de éxito.
posibilidad de cambiar y analiza los
pros y contras de vivir con el pro- La capacidad del terapeuta para
blema. lograr empatía, apoyar sin enjui-
ciar y poseer conocimiento clínico,
4. Acción: Comienza a dar pa- suponen un 30% en la posibilidad
sos para cambiar. de recuperación. Las estrategias
empleadas y el momento en que
5. Mantenimiento: Trata de man- se aplican dan cuenta del 15%
tener los cambios logrados. restante.

Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid 65
66/103

Tratamiento-intervención.

Evaluación que cuidar su cuerpo, su mente y


su espíritu. El tratamiento integral
y diagnóstico debe incluir:

La evaluación de un pro-
blema alimentario debe
abarcar aspectos médi-
cos, nutricionales y psi-
cológicos.

El primer contacto pue-


de ser con el médico de
cabecera o pediatra para
que haga una primera va-
loración del estado físico
del paciente que determi-
ne, en base a estos datos y
a las actitudes y conductas
que la familia ha observado,
si realmente se trata de un
problema de alimentación, si es 1. Una fase de cuidados y pro-
necesario o no derivarle a Salud tección.
Mental o si el estado físico es alar-
mante puede tomar incluso la de- 2. Una fase de cooperación en
cisión de ingreso hospitalario. la que el/la paciente se implica de
manera activa.
Una vez determinado que el
problema es un trastorno alimen- 3. Una fase de prevención de
tario, el tratamiento tendrá que in- recaídas y conclusión.
cluir la acción médica, nutricional,
psicológica y psiquiátrica. Además Los límites entre las tres fases no
de los síntomas físicos del tras- están nunca totalmente definidos
torno es necesario examinar las ya que determinadas acciones de
diferentes áreas de la vida del pa- la segunda fase pueden iniciarse
ciente (familia, amigos, trabajo, rela- en la primera y algunos síntomas
ciones con otro sexo, etc.) con pueden alargarse durante la fase
el fin de detectar las deficiencias segunda e incluso en la tercera. La
de funcionamiento que la persona tercera fase debe considerarse un
con TCA puede estar intentando entrenamiento en prevención de
resolver con los síntomas. E igual- recaídas y utiliza muchas de las
mente, debe explorarse el nivel de estrategias propias de la fase se-
conciencia del trastorno y su ca- gunda e, incluso, de la primera.
pacidad de colaboración activa en
la recuperación.
Intervención
En base a esta evaluación global
se determinará la forma de in- PRIMERA FASE
tervención más oportuna, aunque
siempre considerando al paciente Recuperar la salud
como un ser integral en el que hay Los primeros esfuerzos del equipo

66 Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
67/103

Trastornos de la conducta alimentaria: cómo actuar desde la familia.

se dedican a identicar los proble- cesidad de ingreso o la realización


mas, establecer objetivos y lograr del tratamiento en régimen ambu-
cierta mejoría en la reducción de latorio. Este, a su vez, puede ser
los síntomas físicos: peso, purgas, intensivo y en ese caso se reali-
atracones, ejercicio excesivo. Con- za en formato de Hospital de Día
seguir recuperar un mínimo de o puede no necesitar tanta inten-
salud requiere que el/la paciente sidad, y en ese caso se hace de
cambie su forma de comer, dis- forma ambulatoria en los centros
minuya sus atracones, descienda de Salud Mental. Los criterios de
o elimine sus comportamientos ingreso se han establecido por
purgativos y sitúe su ejercicio físi- los expertos y nunca pueden de-
co en un nivel saludable. pender del deseo de los familiares.
Por ello, aunque el/la paciente sea
La forma en cómo se consigan es- menor de edad, es obligatorio evi-
tas metas va a depender de la tar amenazas del estilo: “como no
gravedad de la situación física, de comas te vamos a ingresar”; si
la colaboración voluntaria del/la vomitas te ingreso” etc. pues ha-
paciente y de la capacidad de la cen creer a la persona enferma
familia para iniciar algunos cambios que la decisión depende del enfa-
en sus rutinas y su estilo relacional. do familiar y no de su gravedad
En ocasiones, es necesaria la apli- física y/o psíquica.
cación de un programa de apren-
dizaje operante que estructure un En algunos/as pacientes menos
medio terapéutico, tanto en su graves y en estadios iniciales pue-
casa como en el hospital, si es de ser sucientemente terapéutico
necesario un ingreso. Este progra- dar información sobre los efectos
ma operante tiene como finalidad de la dieta, características de TCA
conseguir los objetivos médicos y sus consecuencias; y proseguir
necesarios para salvar la vida del pa- el tratamiento de forma ambulato-
ciente, restituir su salud y recupe- ria. En estos casos sería erróneo
rar el mínimo nivel nutricional que utilizar técnicas más rmes o intro-
le permita vivir sin tanto peligro. ducirles en grupos donde se con-
taminan de comportamientos más
Programa operante: para incen- patológicos. Este tratamiento am-
tivar el cumplimiento de las pre- bulatorio tiene la ventaja de com-
scripciones médicas se estable- patibilizar el proceso de recupe-
ce un sistema de refuerzos y un ración con la vida familiar y social
“coste de respuesta”. Los refuer- y con la actividad escolar o pro-
zos son sucesos u objetos que la fesional.
persona desea. Se debe controlar
y facilitar el acceso a ellos asocián- Si el/la paciente presenta patología
dolos al logro de una conducta- asociada como, por ejemplo, de-
objetivo, necesaria para la sa- presión o abuso de sustancias hay
lud del/la paciente. El “coste de que tratar también estos síntomas,
respuesta” son sucesos u objetos incluso antes de abordar el TCA.
que el paciente perderá si no se
cumplen esos objetivos. En pacientes que padecen una
anorexia el objetivo primordial es
El grado de afectación de la salud restablecer el nivel nutricional y el
del/la paciente va a marcar la ne- índice de masa corporal hasta los

Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid 67
68/103

Tratamiento-intervención.

limites saludables. Este restableci- la ganancia de peso tendrá que


miento puede requerir el incremen- ser muy paulatina y limitada. En
to de peso hasta un nivel adecua- ocasiones, la duración y gravedad
do, pero nunca debe identificarse han sido tan grandes que los ob-
con “engordar”. De hecho, tiene jetivos serán incrementar su ca-
que garantizarse, dentro de la ca- lidad de vida -en aquellas áreas
pacidad de predicción humana, donde presentan deciencias bien
que se le va a enseñar a prevenir la sea en el ámbito relacional, laboral
comida excesiva y los atracones u otras- y mantener un nivel de
de forma que el peso no siga in- salud precario que le permita rea-
crementándose una vez adquirido lizar su vida de forma ambulato-
su punto de ajuste biológico. ria. En caso de descompensación,
tendrá que aceptar el ingreso.

En esta fase, el equipo tiene que


resolver el dilema generado por
la divergencia entre el esta-
do físico y el psicológico.
Físicamente, el/la paciente
no se encuentra bien, pero
psicológicamente sí, puesto
que tiene la fantasía de que
los síntomas son la forma de
solventar todos los problemas
que se le presentan y se sienten
con más sensación de control y
En personas anoréxicas prea- poder. Aceptar ayuda es admitir
dolescentes o de inicio temprano, que su mente le ha engañado; que
interesa ir directamente a eliminar hizo una elección equivocada; Y
los síntomas como primera elec- para ellos/as, esta aceptación es el
ción -mejoría en su salud, aspec- fracaso total de su existencia. Es
tos nutricionales, peso, reducción renunciar a todo aquello que les
del ejercicio físico excesivo- ya que dio sentido y autoestima en su
para poder trabajar los aspectos vida. Su resistencia se manifiesta
psicológicos es necesario tener a través de emociones negati-
unos mínimos de salud físicos. vas muy intensas: enfado, desafío
Paralelamente, se trabaja con la fa- y paranoia. El momento es muy
milia que debe establecer nume- complicado y la familia tiene que
rosos cambios en la forma de rela- resistir la presión que ejerce sobre
cionarse; especialmente a través ellos para abandonar la terapia. Es
del trastorno. muy frecuente que se atribuya al
equipo el supuesto empeoramien-
En el caso de pacientes de más to psicológico y se calique a uno
edad que durante años han tenido o todos sus componentes de ig-
un peso inferior al ideal y la enfer- norantes o malos.
medad es un estilo de vida, es ne-
cesaria la terapia individual con En pacientes que padecen una
soporte familiar. Para estos pa- bulimia el ingreso viene determi-
cientes el primer objetivo será una nado por la gravedad de su salud
re-nutrición progresiva en la que a causa de sus conductas purga-

68 Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
69/103

Trastornos de la conducta alimentaria: cómo actuar desde la familia.

tivas y/o por la imposibilidad de realiza mediante un conjunto de


reestablecer algún control en su técnicas, siendo las más eficaces
comida. El ingreso puede estar mo- el aumento de la autoconciencia
tivado también por cuadros psico- corporal y la realización de auto-
patológicos agudos, por ejemplo, registros. Esta tarea puede iniciar-
ideación auto-lítica o auto-lesiva, se incluso durante el ingreso hos-
impulsividad descontrolada, etc. pitalario.

Puesto que en estos/as pacientes Aprender a comer


bulímicos/as también puede haber Tanto los/as pacientes con anore-
una ambivalencia respecto a li- xia como con bulimia tienen que
berarse de los síntomas (quieren aceptar la normalización de su
y no quieren), conviene insistir en dieta. Los primeros porque deben
que los síntomas son respuestas corregir su desnutrición y malnutri-
a situaciones angustiosas y estre- ción de forma que recuperen su
santes y que pueden aprender nue- peso adecuado y/o corrijan exce-
vas alternativas de solución que no sos o defectos en su dieta (por
pasen por comer o purgarse. ejemplo, el consumo de demasia-
dos lácteos o frutas, y la ausencia
Ahora bien, dado que alguno/as o disminución de proteínas o hidra-
pacientes bulímico/as se dan el tos de carbono).
atracón en un estado de semi-in-
consciencia, especialmente los que El peso adecuado depende
ocurren por la noche, precisan in- de la constitución corporal,
crementar su conciencia antes de estatura e incluso de la edad.
realizar algún cambio intencional. Es decir, no hay un peso ideal
Algunos, incluso, tienen una am-
que sea saludable para todas
nesia total de los hechos y no pue-
las personas que tienen la
den recordar lo que ha pasado.
Otros lo perciben cuando ha pasa- misma edad o estatura.
do, pero no mientras les estaba Además es un valor que fluctúa,
sucediendo. no es algo estático.

Para conseguir que los hechos Las personas con bulimia porque
adquieran nuevamente relieve en tienen que estabilizarse en una
su conciencia, se debe focalizar la dieta equilibrada y ordenada que
atención sobre uno mismo hasta les permita superar su caos y dis-
lograr darse cuenta de lo que se minuir los atracones.
hace. La percepción de sus ac-
ciones, pensamientos, sentimien- Nutricionista y dietista se encargan
tos y sensaciones corporales, le de esta tarea en el equipo. Ayudan
avisan de lo que necesita hacer a corregir errores o deshacer ta-
para curarse. Ser consciente de búes nutricionales, a tener una
los comportamientos inadecuados, relación más sana con la comida y
no sólo es observar las cantidades a mantener un peso saludable sin
o clases de comidas que se come, recurrir a conductas compensato-
lo que se vomita o las flexiones rias. Enseñan al paciente que no
que realiza, sino las razones por hay alimentos buenos y malos, to-
las que está comportándose de das las comidas tienen calorías, la
esa forma. Esta discriminación se ganancia de peso depende de in-

Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
69
70/103

Tratamiento-intervención.

gerir más calorías de las que se entre el facultativo y el/la paciente.


gasta, provengan de donde pro- Realizar esta tarea es propia de los
vengan. También enseñan a es- psicólogos ya que ellos conocen
tructurar la comida incidiendo en la los mecanismos de resistencia al
necesidad de comer de todo, en cambio, las estrategias para incre-
cantidad adecuada y repartida en mentar la motivación, las fases del
5 ingestas pues esto reduce las aprendizaje de nuevas conductas
posibilidades de atracarse y ayu- y las etapas de descondiciona-
da a tener una mayor estabilidad miento de las asociaciones con-
anímica. ductuales y emocionales erróneas.
En ocasiones tienen que recurrir
En algunos casos, puede ser útil al establecimiento de un progra-
establecer un plan semanal de ma de refuerzos que sirvan de in-
comidas que se irá variando de centivo para obtener la meta pro-
forma progresiva para ir incremen- puesta.
tando la cantidad y variedad de
alimentos. Si el déficit nutricional El acuerdo entre el nutricionista, el
es importante será necesario im- psicólogo y el/la paciente necesita
plementar la dieta con suplemen- ser ampliado a la familia que debe
tos nutricionales de forma que se saber cómo organizar las comi-
cubran los mínimos aportes calóri- das del hogar, incluyendo aspectos
cos requeridos. tales como: cuánto debería comer
cada vez que se sienta; cuánto de-
bería durar el tiempo de estar en la
mesa; dónde debería ser la comi-
da; quién debería estar allí y dónde
debería sentarse; quién debería
proporcionar apoyo y cómo; de
qué hablar y cómo evitar temas y
miradas perjudiciales.

En ocasiones, antes de iniciar la


normalización en el domicilio, los
tratamientos ambulatorios se pue-
den beneficiar si se complemen-
tan, durante un periodo limitado,
con un comedor terapéutico. Este
tipo de comedor proporciona a
Conseguir normalizar las comidas el/la paciente una de las comidas
requiere un acuerdo acerca de có- del día de forma estructurada. La
mo lograr que el/la paciente coma comida debe contemplar todos
de forma conveniente. Dada su re- los aspectos necesarios para que
sistencia, y en función de la gra- su realización continuada devenga
vedad y premura para mejorar su en comida normal. La participación
salud, las posiciones adoptadas de una comida socializada con los
por los equipos varían desde una otros pacientes facilita el evitar su
aproximación coercitiva en un ex- aislamiento. Se aconseja la comi-
tremo, hasta una posición laxa en da del mediodía en los pacientes
que la toma de decisiones des- anoréxicos y la cena en los pa-
cansa en el compromiso pactado cientes bulímicos.

70 Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
71/103

Trastornos de la conducta alimentaria: cómo actuar desde la familia.

La familia y el/la paciente tienen estructura hay que disciplinarse y


que saber que después de haber estabilizarla el tiempo suficiente
restringido la ingesta de comida se (meses o años) hasta conseguir la
tarda un tiempo en recuperar las comida normal que ya depende
sensaciones de hambre y sa- del hambre y la saciedad.
ciedad o al menos en aprender a
reconocerlas de nuevo. Conse- Estas acciones llevan a la elimina-
guirlo requiere práctica, regularidad ción de los atracones dependien-
de horarios y comer adecuada- tes de los aspectos biológicos
mente sin espaciar demasiado las de la comida. Sin embargo, otros
comidas. También hay que tener atracones dependen de la aso-
en cuenta que las digestiones du- ciación entre los aspectos cogni-
rante un tiempo son más lentas de tivos, emocionales y relacionales
lo normal. Con el tiempo y la prác- con el hecho de comer, y necesi-
tica de los consejos recibidos la tan un tratamiento psicológico es-
tendencia del organismo es comer pecíco. Se necesitan investigar las
normal. Ello incluye aspectos co- asociaciones correspondientes y
mo: comer cuando se tiene ham- aprender respuestas alternativas
bre y parar cuando se está lleno, sustitutivas. Estas son algunas de
comer de todo, darse algún capri- las acciones que incrementan las
cho y algún exceso de vez en probabilidades de éxito:
cuando, e incluso en algunas oca-
siones comer porque se está con- 1. Identicar los “precipitantes”
tento o aburrido. del atracón: pensamientos y emo-
ciones que dan lugar a los atra-
Prevenir atracones cones. También puede favorecer
El primer paso para eliminar los su aparición el cocinar, tener co-
atracones y el picoteo de forma mida tentadora o estar mucho
progresiva es estructurar la comi- tiempo solo. Si se conoce qué los
da, tanto en horario como en can- precipita, puede intervenirse de an-
tidad y variedad. Hacer 5 comidas temano sobre ellos.
al día: desayuno, media mañana,
comida, merienda y cena. 2. Convertir la comida en un
momento agradable, relajado. Mi-
Cuando se saltan comidas rar, oler, saborear la comida. No
o se prohíben alimentos, se ver la televisión, ni realizar otras
incrementan las posibilidades actividades mientras se come.
Comer acompañado y charlar dis-
de darse atracones y comer
tendidamente. Planicar las comi-
en exceso en forma de das de antemano y plantearse una
picoteo continuo. actividad divertida para después
de comer y así evitar seguir co-
En ocasiones el caos es tan inten- miendo. Disfrutar de una alimen-
so que la estructuración requiere tación variada, no prohibirse ali-
metas intermedias: por ejemplo, mentos ni establecer categorías
estabilizando primero el desayuno, de alimentos buenos/malos. Lle-
posteriormente las comidas de los varse un tentempié si se va a estar
domingos o las cenas de los fuera para no picar cualquier cosa
martes, etc., hasta llegar a la meta ni dejar pasar muchas horas sin
final. Una vez que se consigue la comer.

Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
71
72/103

Tratamiento-intervención.

3. Evitar estar en casa en las morar este bocado 20 minutos


horas de máximo riesgo de atra- en los que se ha llamado a
cón: salir a clases; visitar a un ami- un amigo, se ha hecho la cama,
go, evitar estar solo. Buscar apoyo se ha tomado un baño, etc. o
en los seres queridos y amigos; bien observar qué pensamien-
evitar el alcohol y las drogas por- tos y sensaciones le impulsan
que al disminuir la inhibición fa- a seguir.
vorecen el atracón.
e. Practicar actividades de re-
4. Cuando se tengan deseos de lajación: yoga, masaje, medita-
atracarse: ción, darse un baño relajante,
recurrir a autoafirmaciones po-
a. Salir del entorno del atracón: sitivas tales como “no voy a de-
pasear acompañado, buscar jarme arrastrar por el impulso”
compañía, llamar a alguien que y/o a actividades manuales co-
se sepa estará dispuesto a mo alternativas al atracón. Es-
escuchar; iniciar actividades tas acciones dificultan más el
que no tengan que ver con la atracón que si se realizan ac-
comida. ciones pasivas como ver la TV.

b. Investigar los atracones y 5. No dejarse llevar por el im-


las circunstancias en las que se pulso a seguir por el hecho de ha-
producen para detectar situa- berse pasado comiendo.
ciones de riesgo y poder buscar
alternativas o variar las circuns- 6. Si uno se da un atracón, no
tancias. Ante la idea de darse sirve de nada culpabilizarse o cas-
un atracón, preguntarse ¿real- tigarse sino entender por qué se lo
mente me quiero atracar? ha dado y así prepararse para pre-
venir próximos atracones.
c. Planificar algunos atracones
para reducir la ansiedad que Disminuir
genera la negación y lucha co- las conductas purgativas
rrespondiente entre el sí y el no; Los/as pacientes deben recibir
entre el deseo de comer y el información acerca de la incapaci-
temor al descontrol y la gordu- dad de las conductas purgativas
ra. Decidir cuándo, qué alimen- (vómitos, laxantes, diuréticos), para
tos se van a comer y en qué conseguir un cambio real y esta-
situación va a suceder. ble de peso y los riesgos de salud
que corren al usarlas. Su manejo
d. Aprender estrategias de de- requiere de ciertas técnicas tera-
mora y división del atracón: péuticas:
Comer a poca velocidad. Dividir
todo lo que se va a comer en Observación de los antecedentes
porciones pequeñas y meter un inmediatos: miedo a la gordura por
mínimo de tiempo entre porción la comida ingerida; experiencias
y porción. El tiempo se puede negativas de sometimiento, agre-
alargar realizando alguna acti- sividad, cansancio, aburrimiento.
vidad. Desde dar dos peque-
ños golpecitos a la mesa, antes Observación de las consecuen-
del siguiente bocado, hasta de- cias inmediatas: sensación de lim-

72 Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
73/103

Trastornos de la conducta alimentaria: cómo actuar desde la familia.

pieza, pureza, ligereza, atención, Una de las técnicas empleadas


castigo a las guras de autoridad. para animarles a moderar su ejer-
cicio es señalar el efecto colateral
Inicio de soluciones alternativas del ejercicio físico excesivo: que le
para obtener las mismas conse- convierte en un método inútil para
cuencias deseadas a través de obtener una delgadez permanen-
conductas positivas. te. Existen diversas razones por
las que ninguna persona puede
Afrontamiento directo de los vó- mantener un nivel de ejercicio muy
mitos mediante exposición y pre- exagerado por mucho tiempo. La
vención de respuesta. El terapeuta primera razón, es que toda activi-
le expone a los alimentos “peligro- dad realizada en exceso produce
sos”, los come y tiene que contro- una saturación que nalmente lle-
lar el impulso de vomitar. va al rechazo. Además, las circuns-
tancias de la vida, lo imprevisto, las
Cambiar el vómito por un ejerci- lesiones, rompen los planes y uno
cio físico no excesivo pero sí su- ya no puede volver a reestructurar
ciente para que las sensaciones su vida como quisiera. Entonces
y pensamientos adversos dismi- surgen las consecuencias del ex-
nuyan. Para facilitar que se ha- ceso. La persona que abandona el
ga se les aconseja que coman gimnasio, el deporte o cualquier
ya con las zapatillas de deportes otro tipo de ejercicio que realiza-
puestas, pues tener que cambiar- ba -y no ha cambiado cognitiva
se después de comer, puede im- y emocionalmente- engorda de
pedir la salida. manera exagerada y su cuerpo
adquiere un aspecto “blando” en
Reducir cuanto se detiene. La supuesta
el ejercicio físico excesivo elasticidad conseguida se pierde
El ejercicio excesivo es muy común con prontitud y pronto aparece la
durante el transcurso de los tras- acidez. Sólo cuando la elasticidad
tornos: no debe eliminarse pues del cuerpo se nutre de una mente
la prohibición tiende a incrementar exible, los músculos adquieren esa
su realización a escondidas. Es cualidad cimbreante. Y desde lue-
mucho más realista pactar con go, este logro estará matizado siem-
el/la paciente la reducción progre- pre por la edad de la persona.
siva hasta situarlo en una intensi-
dad y frecuencia saludables. Reducir la ansiedad
y la sintomatología depresiva
Tratamiento farmacológico: Los fár-
macos antidepresivos, sobre todo
los inhibidores de la recaptac-
ción de serotonina, son indi-
cados para ayudar a re-
ducir los episodios de
atracón/purga y para tra-
tar la patología asociada
de tipo depresivo, obsesivo
o crisis de pánico. General-
mente, las dosis dirigidas a reducir
la sintomatología alimentaria, por

Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
73
74/103

Tratamiento-intervención.

ejemplo, en la uoxetina, son ma- los conictos familiares porque es-


yores que las utilizadas para tratar tos afectan al/la paciente buscan-
depresión o ansiedad. También do alternativas de solución. Estos
pueden utilizarse otros estabili- conictos pueden ser entre padres
zadores del ánimo como el topi- e hijos, entre hermanos, de pareja,
ramato y ansiolíticos. etc. También se trabaja la forma
de comunicarse para que sea di-
Otros fármacos utilizados son los recta y asertiva; el establecimiento
neurolépticos atípicos con el n de de límites y roles claros; asumir las
lograr reducir la ansiedad e idea- responsabilidades propias de cada
ción obsesiva. La medicación debe uno; no hacerse cargo de aquellos
combinarse con terapia y, si bien conictos que no tienen que ver de
los fármacos se ha visto que pue- forma directa, por ejemplo, si hay
den ser ecaces en bulimia, la e- un problema de pareja este com-
cacia de los fármacos en anorexia pete al marido y a la esposa, no
es más limitada. a los hijos.

Proporcionar El/la paciente reconoce, progresi-


información a la familia vamente, que los síntomas son un
Psico-educación: Durante este pe- modo de comunicar aquello que
ríodo los familiares deben recibir no se dice con palabras, y le sirven
información acerca de las caracte- para afrontar un cúmulo de situa-
rísticas del trastorno que padece su ciones de malestar. En ocasiones,
hijo/a, esposa/o, de ciertas formas incluso sirven para manejar a los
de relación entre ellos que ayuden demás y tenerlos bajo su control.
a obtener la voluntariedad del tra- Por ello, la terapia debe ayudar
tamiento y de las intervenciones a poner palabras a lo que sienten
esenciales en el tratamiento. y piensan; buscar estrategias al-
ternativas para afrontar el malestar;
encontrar nuevas soluciones a los
SEGUNDA FASE conflictos emocionales y relacio-
nales; disminuir la sensación de
Cooperación ineficacia, subsanar las dificulta-
El/la paciente se implica, obser- des en la resolución de problemas,
va, incrementa la autoconciencia, aumentar la capacidad para mani-
aprende y utiliza estrategias de festar quejas o poner limites a los
cambio. Empieza a existir concor- demás; resolver problemas rela-
dancia entre la mejoría física y la cionados con la sexualidad, etc.
psicológica. Todas las acciones de
la primera fase continúan y amplían En resumen, la terapia va
hasta integrar todos los elementos dirigida esencialmente a que
terapéuticos y conseguir el trata- el/la paciente descubra su
miento global. propia ruta más que
predeterminarle una sin
Manteniendo los cuidados y el
trabajo con los síntomas, la acción
que él/ella participe en las
terapéutica se enfoca hacia los decisiones.
problemas psicológicos que inhi-
ben el crecimiento cognitivo y emo- Esto lleva tiempo, y como es un
cional de la persona. Se abordan camino cargado de dudas puede

74 Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
75/103

Trastornos de la conducta alimentaria: cómo actuar desde la familia.

producir cierta desconfianza que Si no se tiene tiempo probable-


deberá ser disipada por el equipo. mente se están haciendo de-
masiadas cosas: reducir algu-
Reducción del estrés nas y usar el tiempo sobrante
El estrés es un componente pre- con relajación, meditación, mú-
dominante en la toma de deci- sica u otras actividades tranqui-
sión de la restricción, los atraco- lizadoras y graticantes; masajes,
nes y las conductas purgativas. La dar paseos, tomar un baño re-
ruptura del círculo tensiones-sín- lajante, yoga, llamar a un amigo,
tomas-tensiones es un objetivo contacto con la naturaleza, esti-
básico. ramientos. Dedicar unos minu-
tos al día para hacer ejercicio
sin abusar.

Si el trabajo absorbe demasia-


do: intentar delegar tareas.

Cuidar las necesidades básicas:


dormir por lo menos 7 horas;
alimentarse adecuadamente; li-
mitar sustancias estimulantes
como la cafeína.

Establecimiento de
pensamientos y actitudes
positivas y flexibles
Los/as pacientes tienen que cam-
biar su forma de pensar por otra
nueva ya que los procesos cog-
nitivos influyen en el comporta-
miento de tal manera que lo que
Para reducir el estrés hay que: la persona piensa inuye en lo que
siente y determina su conducta.
Reconocer sus signos físicos;
tensión muscular, fatiga, presión de El estilo predominante es el
dientes y mandíbulas, sentimientos pensamiento dicotómico que no
de ansiedad, enfado e irritabilidad, contempla resultados interme-
nerviosismo, presión en estómago, dios. Los pensamientos se expre-
dolor de cabeza, dolor de espalda, san en frases negativas cargadas
debilidad, vértigos. de expresiones tales como “siem-
pre”, “nunca”, ”todo”; que deben
Poner en relación los signos reemplazarse por otros más ajus-
de estrés con las circunstancias y tados: por ejemplo, la más pe-
situaciones que rodean a la per- queña cantidad de comida por
sona que lo padece: ¿Qué me encima de lo planicado es un des-
pasa? ¿Con qué está relacionado? control: reemplazar “esta tarde ya
no ceno” por ”ha sido una pequeña
Utilizar técnicas que lo dismi- cantidad, no voy a empezar a res-
nuyan: tringir de nuevo.”

Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid 75
76/103

Tratamiento-intervención.

Corregir el pensamiento sensi- la esclavitud que supone intentar


tivo y emocional. Las distorsiones lograr una imagen idealizada de
acerca de su imaginaria gordura perfección.
son producto de este estilo cogni-
tivo que interpreta como realidad Crecer, madurar y tener un
lo que se siente, sin esperar a co- funcionamiento adulto; impedir que
rroborar su opinión con los hechos. sean los demás quienes tomen
Tiene que aprender que cuando, las decisiones sobre su vida o
al terminar de comer sienta haber acciones.
engordado, la sensación no signi-
fica gordura sino tensión: “no he Cambios de conducta
engordado sino que he comido Seguir trabajando en la disminu-
apretando los músculos y los sien- ción de las conductas patológicas:
to estallar.” dejar de vomitar, atracarse y res-
tringir con pequeños cambios ha-
Instaurar el error como el mé- cia la meta nal.
todo básico de aprendizaje. Acep-
tar que nadie es perfecto -por
mucho que se esfuerce en
conseguirlo- y que todos
tenemos límites insalva-
bles, sin que ello lleve al
desánimo y la apatía.

Sustentar la autovalía
en factores humanos que
no dependan del aspecto
externo como el peso, gura
o delgadez, sino de cualidades
como inteligencia, generosidad,
creatividad o empatía. Sin que ello
signifique que haya que ser “gor- Algunas sugerencias complemen-
do”, sucio y desaliñado. tarias a las propuestas en la pri-
mera fase pueden ayudar:
Aceptar el derecho a querer y
ser querido como persona y no a. Realizar auto-registros alimen-
como trozo de carne. tarios. Registrar lo que se come
y las circunstancias asociadas: en
Expresar los sentimientos y pen- qué situación, qué se pensaba y
samientos cualesquiera que sean qué se sentía.
siempre que no ofendan la digni-
dad del otro. Pedir ser escuchado b. Plantearse como objetivo ol-
con respeto y empatía; estar libre vidarse de las dietas para siempre.
de abusos verbales, físicos o se- No se puede curar sino se come
xuales y buscar la felicidad mientras adecuadamente y si se mantienen
se mantiene el derecho de estar los métodos de control de peso.
triste a veces. Hay que darse permiso para co-
mer todo tipo de alimentos, sin cla-
Realizar actividades lúdicas; ves- sificarlos en bueno/malo, engor-
tirse como a uno le gusta; alejar da/no engorda. Cuando el cuerpo

76 Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
77/103

Trastornos de la conducta alimentaria: cómo actuar desde la familia.

se asegura de que va a satisfa- Aceptación


cer el hambre de modo habitual, de la imagen corporal
no tiene la necesidad de ingerir Para aceptar la apariencia perso-
comida en exceso. Esto supo- nal es esencial el desarrollo de una
ne “escuchar” las sensaciones de autovaloración personal basada
hambre y saciedad que se esta- en cualidades internas como inteli-
blecen mediante una comida no gencia, creatividad, generosidad,
manipulada que tenga un ritmo en empatía; y aminorar la importancia
el tiempo suciente para conseguir de la apariencia corporal y la com-
automatizarse. petitividad académico/profesional
en el concepto que desarrolle de
c. Intentar no juzgar ni juzgarse sí mismo/a.
por la apariencia; valorar el interior.
No hacer comentarios despectivos Si la alteración de la imagen
sobre el propio cuerpo y aceptar el corporal es producida por la in-
peso y gura naturales puesto que satisfacción hacia el cuerpo, los
forzar al cuerpo para que se ase- pacientes bulímicos superan con-
meje a otros, suele devenir en de- siderablemente la insatisfacción
sastre. Si uno no se plantea usar encontrada en la población ge-
tres tallas menos de zapatos, ¿Por neral, expresando un rechazo del
qué se plantea reducir la talla de 85-95% de su cuerpo, frente al
su ropa? El valor de un perfume 35-50% del grupo de personas sin
está en su esencia, no en el frasco. trastornos. Les ayudará: eliminar
El valor de un ser humano no está las calificaciones negativas que le
en su apariencia sino en su interior. dedican, hablar acerca del cuerpo
de forma neutra o positiva, conver-
d. Hablarse con frases o arma- tirlo en un amigo que les permite
ciones positivas sobre uno mismo, expresar su vida; escuchar sus ne-
aunque al principio no parezcan cesidades, cuidarlo y pedirle discul-
ciertas, terminan por serlo: “soy pas por el trato que se le ha dado.
una persona capaz, fuerte, valiosa
y una de mis metas en esta vida Para disminuir la distorsión deben
es llegar a realizarlo”; “lo bueno recibir información objetiva que les
siempre es auténtico, cualquier permita ir corrigiendo los defectos
imitación es mala”, “no necesito o “gordura” irreales. Esto puede
ser delgada o tener otro cuerpo hacerse comparando su índice de
para encontrar la felicidad.” masa corporal real con el imagina-
do; confrontarle con otras/os com-
e. Arriesgarse a vivir: tomar de- pañeras/os; confrontarle con un
cisiones, asumir responsabilidades, instrumento que mide la silueta
expresar opiniones, necesidades y corporal, con el espejo o con un
deseos en lugar de esperar que vídeo, cotejando sus apreciacio-
los demás las adivinen; aprender a nes y las apreciaciones exter-
decir que no a las propuestas in- nas. El proceso de cambio de la
convenientes; buscar soluciones imagen corporal debe ser lento,
en vez de buscar culpables; alcan- porque la mente no acepta cam-
zar la moderación en vez de los bios bruscos. Realizar una rees-
extremos; disfrutar de las peque- tructuración cognitiva explicando
ñas cosas; asumir las emociones por qué se ven gordos en su mente,
positivas y negativas, etc. aunque no lo estén (la mente ha -

Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
77
78/103

Tratamiento-intervención.

jado una imagen: la suya en otro neficiarán del establecimiento de


momento o la que teme, que le actividades en las que la competitivi-
permite justificarse lo que está dad no juegue un papel primordial.
haciendo. Estoy gordo/a, tengo
que…)

Además, la mayoría necesitarán


apoyo para superar el aislamiento
causado por las alteraciones
de la imagen corporal. Es
muy importante tratar el
miedo a enfrentarse al es-
pejo; la fobia a salir a la
calle y que le vean; la an-
siedad ante la posibilidad de
comprar ropa; hacer deporte,
ponerse un bañador, etc.
Profundizar
Mejorar en la comprensión
las relaciones interpersonales del trastorno
En algunas/os pacientes la difi- Es importante que el/la paciente y
cultad en las relaciones interper- sus familiares entienda qué es lo
sonales ha sido el factor determi- que obtiene de su delgadez.
nante del trastorno alimentario. La
timidez, caracterizada por la pre- 1. Habitualmente, además de
ocupación y ansiedad ante la opi- una auto-estima efímera, lo que
nión y la crítica de los otros, causa sí consigue es mayor atención de
la evitación de relaciones sociales la que nunca había recibido. La
y el aislamiento del/la anoréxica. atención funciona como refuerzo:
En pacientes bulímicas/os las di- aquello a lo que se presta aten-
cultades de relación provienen de ción, crece. Esto no supone que
la desconsideración hacia los de- no se deba prestar atención, pero
más con los que sólo establecen no debe hacerse a los compor-
relaciones pragmáticas. tamientos patológicos. Paradóji-
camente, para ayudar a superar
La/el paciente anoréxica/o necesi- la enfermedad hay que prestarle
ta incluirse a sí mismo en las rela- menos atención a ésta, y más a la
ciones con los demás, benecián- persona en sí misma. Será impor-
dose tanto de la expresión afectiva tante asegurarle atención y cariño
de sus familiares y amigos, como por ser quien es, así como mos-
de la expresión de sus ideas y emo- trarle nuevas maneras de cómo
ciones. El/la paciente bulímica/o sentirse útil y realizada.
necesita incluir a los demás en sus
relaciones con otros. El reconoci- 2. Los pacientes rechazarán el
miento de que el otro no siempre abandono de sus síntomas hasta
es un competidor ni quiere aniqui- que tengan cierta certeza de que
larle psíquicamente, le ayudará poseen otros medios con los que
a vincularse afectiva y solidaria- manejar las adversidades. El estilo
mente. Este alimento “espiritual”, de afrontamiento de problemas
disminuirá su hambre física. Se be- es, por tanto, una cuestión deter-

78 Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
79/103

Trastornos de la conducta alimentaria: cómo actuar desde la familia.

minante en el mantenimiento de las posibilidades de recuperación.


los trastornos de la conducta ali- El clima familiar se beneficia de la
mentaria. Los problemas siempre mejora en la comunicación. Las
existirán, y es más provechoso sugerencias siguientes pueden fa-
aprender estrategias de manejo al- cilitar el cambio:
ternativas ecaces para las dicul-
tades, en vez de manejarlas con a. Comunicarse de forma abier-
la comida. ta, franca y directa con los hijos;
expresar las emociones y animar la
Cambio del clima familiar expresión de sentimientos dentro
La participación de la familia en el de la familia. Demostrar física y ver-
tratamiento tiene sentido puesto balmente el afecto.
que el problema surge dentro del
contexto familiar, produce altera- b. Evitar inconsistencias o in-
ciones en su funcionamiento y en congruencias en la comunicación:
las relaciones que se establecen “si… pero”; “vete de paseo, no me
entre ellos; y, además su colabo- importa, yo me quedo leyendo es-
ración aumenta la efectividad del tas revistas del año pasado (tono
tratamiento. lastimoso)”

Un trastorno alimentario convier- c. Escuchar con calma, sin juz-


te a quien lo padece en alguien irri- gar; no entrar en confrontación
table, terco/a, manipulador/a que ni discutir acerca de los síntomas
no se deja ayudar. El ambiente en (si come o no come, si vomita o
casa se enrarece, se vuelve tenso no…).
y todos los miembros de la familia
se resienten. Los/as hermanos/as d. No chantajear ni relacionar
se sientes desplazados, sin aten- afecto y mejoría; expresiones tales
ción suficiente lo que favorece como: “si nos quisieras comerí-
el transito de una posición ini- as…”; “no hagas sufrir a mamá y
cial de ayuda y cooperación a una deja los vómitos”, son totalmente
situación de resentimiento y rabia. negativas y deberían anularse de
Sienten que se les piden respon- las conversaciones.
sabilidades que escapan a sus
posibilidades reales como por ejem- e. No ponerse a la defensiva
plo, controlar al/la paciente o brin- cuando culpe a los demás de sus
dar apoyo emocional a los padres. problemas. Aceptar que es su
Todo ello propicia el surgimiento de punto de vista y que es su forma
síntomas de ansiedad, depresión de recordar las cosas aunque se
en alguno de los familiares, e in- vean de otra manera. El/ella, co-
cluso problemas físicos (insomnio, mo parte de su proceso terapéu-
apetito, problemas de estómago, tico, tendrá que aprender a per-
etc.) o mentales. También pue- donar a quienes le han hecho
den tener dicultades en el trabajo daño. Por otra parte, que los
debido a la necesidad de ausen- padres se disculpen ante sus hijos
tarse para ir a las consultas y/o de sus errores y fallos les permite
por la dicultad de estar centrado. a éstos asumir que las equivoca-
ciones forman parte de la vida y
Cuando la familia contribuye a cam- que no pasa nada si uno no es
biar este ambiente, se potencian perfecto.

Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
79
80/103

Tratamiento-intervención.

f. Comprender que el/la pacien- surgen peleas, tendrán que apren-


te experimenta dos mensajes o vo- der a no darles demasiada impor-
ces internas conictivas. La prime- tancia.
ra voz que es la predominante
durante la enfermedad, les dice que Ajustar roles y límites
está gordo, feo y debería restringir, La mayoría de las familias en las
la segunda habitualmente una voz que existe un trastorno alimenta-
más baja y presente en menos oca- rio presentan algún tipo de conic-
siones, le dice que él/ella está en- to en los límites y roles entre sus
fermo, flaco y debería comer. Los miembros. Es especialmente im-
padres deben evitar la confron- portante el rol que ejerce la madre
tación con la voz anoréxica. Esa y los límites que establece, bien
voz representa la enfermedad, la sea por exceso o por defecto. No
falta de lógica y por lo tanto no se le pide que haga todo perfecto,
puede razonarse con ella. Es más sino que dé cercanía, apoyo, amis-
útil hablar con la parte sana cuan- tad, confort, protección, modelo,
do ésta se deja ver. dirección y aceptación. Y, a la vez,
que considere que cada pelea, pre-
g. Evitar culpar al hijo/a por gunta, fallo o victoria es una opor-
su problema alimentario. Si bien tunidad de trasformación para la
es lógico y comprensible que los madre y la/el hija/o. El TCA puede
padres se sientan preocupados, ser una llamada a la madre para
frustrados e impotentes y que de que se plantee la necesidad de un
vez en cuando expresen esta frus- cambio. Tiene que creer que es la
tración en voz alta, es conveniente madre adecuada para su hija, pero
que no sea una constante en su aprender a relajarse, a escuchar.
actuación.
El rol materno se ha clasificado
h. Los padres pueden comen- según 4 posiciones, todas positi-
tar sus experiencias respecto a su vas o negativas según la edad del
adolescencia o a sus preocupa- hijo/a y del extremismo con el que
ciones de entonces, esto favorece se ejerce:
el acercamiento; pero con cuidado
porque el/la hijo/a también necesi- 1ª posición: “Por encima de”.
ta sentir que sus experiencias son La madre que se sitúa por encima
únicas y genuinas. de su hija/o proporciona confort,
enseñanzas, corrección y conse-
i. Atender a lo positivo en vez jos. Ve su rol como sinónimo de
de a lo negativo; percibir lo que dar reglas y normas, proporcionar
hace bien en vez de lo que hace instrucción, formar un miembro
mal. productivo de la sociedad. Se apo-
ya en su experiencia, conocimiento
j. Aceptar discrepancias y dis- y autoridad. Es un estilo especial-
cusiones. Todas las familias tienen mente ecaz durante los primeros
discrepancias y problemas; negar- años de vida de la hija/o, que se
se a hablar de las cosas que les sentiría sin cariño si no existiera es-
angustia para eliminar las discu- ta rmeza y tales límites. Las forta-
siones, no las soluciona. Es nece- lezas de este estilo materno son
sario que los conflictos salgan a la consistencia, la estructura y la
la luz. Si a consecuencia de ello dirección.

80 Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
81/103

Trastornos de la conducta alimentaria: cómo actuar desde la familia.

Sin embargo, si esta postura con- y no desarrolla su propia vida. Una


tinúa en la adolescencia puede lle- madre que elimina todas las difi-
var a una relación de dependencia cultades y le falta confianza en sí
que impide a sus hijos/as desa- misma no puede ayudar a que sus
rrollarse. Su miedo: “si yo no con- hijos/as se fortalezcan y afronten
trolo, todo irá mal”. Su respuesta a sus propias dificultades. Puesto
los sentimientos: “No sientes eso”, que su meta es proporcionar a su
“para de quejarte”, “ayer estabas hija/o una vida mejor que la que
bien, ¿Qué te pasa hoy?”. Su res- ella ha vivido, vive con el temor de
puesta a las conductas es: regla- sus fallos pues estos signican su
mentar, prohibir, dar consejos, cas- propio fracaso. Los sentimientos la
tigar. Su frase favorita: “sé lo que superan: “por favor, no digas eso”,
es mejor para ti”. Respuesta de la “no puedo resistir que tú sufras”.
hija/o: luchar para ganar el pulso y Su frase favorita es: “haz que me
tener poder. sienta orgullosa de ti”. Su hija/o
crecerá con la sensación de que
Las familias que sólo ponen lími- tiene que triunfar a toda costa y
tes y reglas a través de manda- con el miedo de decepcionar a su
tos, tienden a amargarse y hacer familia. El TCA será el intento de
comentarios sarcásticos muy ne- conseguir el triunfo que necesita.
gativos, y cuando fallan tienden al
castigo. Los adolescentes respon- 3ª posición: La madre que se
den a estos métodos con irres- distancia de la hija/o se siente
ponsabilidad, resistencia y rebelión. bien cuando observa que su hija/o
La estructura de reglas y sus con- realiza sus propias actividades. Ve
secuencias pueden llevar a la frus- su rol como la forma de propor-
tración y la inexibilidad. Cuando el cionar las necesidades básicas
adolescente busca más indepen- de su hija/o, pues esta/e tiene que
dencia y se enfrenta a la inflexibi- encontrar su camino por sí mis-
lidad, lo resuelve tomando algún ma/o. Su fortaleza reside en facili-
poder y eso puede ser a través de tar la independencia y auto-con-
un TCA. Si la familia continua con anza de sus hijos/as. Ahora bien,
este estilo de imponerse durante esa distancia puede percibirse co-
el trastorno, se enterrará en una mo abandono, dejando al hijo/a sin
batalla de poder que finalmente sentir el apoyo afectivo que nece-
perderá. sita. La posición no suele provenir
de falta de cariño, sino del miedo
2ª posición: “Por debajo de”. a que su implicación activa sea
La madre que se sitúa por deba- perjudicial. Su frase favorita: “com-
jo de el/la hijo/a se siente bien pórtate como corresponde a tu
cuando sirve a los demás y se edad”. Y la respuesta: “déjame en
pone a ella misma en último térmi- paz, hago lo que me parece”.
no. Ve su papel como sinónimo de
dar todo lo necesario a su hija/o 4ª posición: La madre que ago-
para que tenga lo mejor que ella bia a su hija/o se siente mejor
no tuvo. Se apoya en lo que a ella cuando le ve feliz y contento. Con-
le ha faltado como fuente de moti- sidera que su rol es eliminar todas
vación para guiarse. Su fuerza re- sus desdichas, resolver sus pro-
side en su dedicación; su debili- blemas y mantenerle contento. Su-
dad, que vive a través de la hija/o primir todo el dolor y malestar eli-

Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid 81
82/103

Tratamiento-intervención.

mina el contexto necesario para expectativas, sus amistades. Co-


que el hijo/a crezca y encuentre nocer su cultura: libros, música,
sus fuentes internas para enfrentar películas, revistas que le gustan a
las dicultades. También implica la él/ella y sus amigos, viéndolos con
descalificación de las emociones curiosidad y sentido del humor.
negativas: “siempre animando” y el Merece especial atención el en-
ocultamiento de los problemas. Su foque de los sentimientos nega-
miedo proviene de creerse res- tivos y positivos hacia su cuerpo.
ponsable de todo lo que le pase Hay que entender que, especial-
a su hija/o si le ayuda con sus mente la chica, se encuentra de
problemas. Su frase favorita: “por repente más grande, con más pe-
favor, no te enfades”. La respues- so, extraña con su cuerpo y más
ta de la hija será la eliminación de consciente de su apariencia. De-
sus responsabilidades. sea una nueva forma de peinar-
se, vestir, ponerse pendientes, etc.
La forma mejor de plantearse la Teme lo que dicen los compañeros
relación con un/a hijo/a con TCA sobre su cuerpo.
es combinar equilibradamente las
cuatro posiciones. “Mírame mamá. Pregúntame
porque quiero enseñarte mis
cosas y busco tu atención”… le
Para conseguir este dijo A… a su madre, para co-
equilibrio se precisa cambiar mentar a continuación: “Mi ma-
al unísono. Porque tratar dre se cree que sabe todas las
de que el/la hijo/a cambie respuestas y ni siquiera sabe las
sin que cambien los padres preguntas”
no funciona.
Al conversar surgirán conflictos
que podrán convertirse en una nue-
Necesitan conocerse mutua- va oportunidad de conectar y ob-
mente: saber lo que sienten y servar la capacidad de control,
saber los errores que hacen; com- introspección y comunicación que
partir condencias según su grado se ha desarrollado. Por ejemplo:
de madurez y su edad. Compren- en vez de negar o minimizar las
der que el/la hijo/a busca su lugar preocupaciones con el cuerpo, hay
en el mundo. Quiere ser único/a. que escuchar los temas que le
Necesita expresar sus opiniones y preocupan, ya que la insatisfacción
probar sus ideas. Tiene que hacer corporal es una norma entre los
decisiones apropiadas para su adolescentes.
edad y expresar sus discrepancias.
Percibir que alguien le ve, conoce, Sin embargo, antes habrán de re-
apoya, estimula, recuerda, cree en solver los propios problemas con
él/ella y le comprende. el cuerpo ya que en los hogares en
los que las madres comentan que
¿Cómo empezar? se sienten gordas y deciden hacer
Entrar en ese mundo requiere co- dietas, el 81% de las hijas se sien-
raje, curiosidad, respeto y no asu- ten también gordas. Nunca será
mir que como padres ya saben tarde para redimir las actitudes
todo de ellos. Hay que preguntar y experiencias destructivas hacia
por las cosas que le estresan, sus el propio cuerpo.

82 Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
83/103

Trastornos de la conducta alimentaria: cómo actuar desde la familia.

Otro aspecto fundamental es el el/la hijo/a, sometiéndose a sus


establecimiento de unos límites dictados.
tanto personales como en el espa-
cio físico de la casa. Los consejos 4. No implicar a los hijos en con-
siguientes pueden guiar la forma flictos de pareja ni responsabili-
de establecer estos límites: zar a los hermanos del cuidado del
paciente, ni desatender a estos.
1. La misión de los padres es
marcar unos límites claros pero 5. Las normas las ponen los
que se adapten a la edad, la mi- padres y deben ser flexibles, no
sión del adolescente es tratar de excesivas y adaptadas a la edad
transgredir estas normas como de los hijos/as.
una forma de luchar por su indi-
vidualidad. Los padres deben 6. La posición de control o rol
asumir que hay determinadas policial resulta desagradable pa-
elecciones del adolescente que ra los padres y además provoca
pueden no ser de nuestro agrado conictos y tensiones en la familia.
pero que implican una forma de Además, no funciona.
expresar esta individualidad y
por lo tanto debemos respetarlos. 7. Enseñar que la clave de
Por ejemplo, el tipo de música que funcionamiento “normal” está en la
escuchan, la forma de vestir, cómo moderación en todo lo que uno
decoran su habitación… (siempre hace, no en el “todo o nada”.
y cuando se cumplan unas condi-
ciones de higiene y consideración 8. Respetar la privacidad: no
por los demás). leer su diario, respetar sus espa-
cios… y no hablar de él/ella con
2. Los padres deben actuar otros familiares o amigos sin su
de forma coordinada, es decir, no permiso.
tener criterios dispares en las de-
cisiones que atañen a los hijos. Si Los padres deben plantearse tan-
los padres quieren tener éxito ayu- to a sí mismos como al resto de
dando su hijo/a a recuperarse, de- familiares y amigos, la inconve-
ben de trabajar juntos y en coordi- niencia de realizar comentarios so-
nación con el equipo terapéutico. bre la comida o apariencia del/la
paciente.
3. No permitir que el/la
hijo/a determine lo que se
come o se compra en casa
o cómo se deben preparar
los alimentos; ni prepararle
comida “especial”. Esta es
una tendencia muy común
en chicas con anorexia que
acaban por adueñarse del rol
de gobernante de la casa
ya que la madre, por no discu-
tir o bajo la idea de que al
menos come eso que compra,
acaba por ceder el poder a

Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid 83
84/103

Tratamiento-intervención.

Normalización tante saber que sus padres tiene


de la vida familiar su propia vida.
Un trastorno alimentario desba-
rata la vida familiar. Se rompen ruti- d. No hay que conceder privi-
nas, se encrespan los ánimos, sur- legios especiales por el hecho de
gen las obsesiones por la salud del estar enfermo/a, ni eximirle de to-
hijo/a afectado/a, se hacen gastos das las responsabilidades tratán-
extraordinarios, se desatiende a los dole como si fuese un bebe.
hermanos, etc. Estos desequili-
brios no ayudan a mejorar la si- e. No aislarse socialmente co-
tuación, por lo que es conveniente mo familia pero respetando la vo-
que las familias hagan esfuerzos luntad del /la paciente de no acu-
para normalizar su vida. Se deta- dir a eventos que impliquen comer
llan a continuación algunos conse- (Por ejemplo, comidas familiares).
jos que pueden contribuir a lograr
la normalización en la casa: Apoyar su criterio
Puesto que uno de los factores
a. No cambiar las rutinas fami- que mas contribuyen a la mejoría
liares respecto a la alimentación: es la madurez y la toma de deci-
tipo de comida, compras... No con- siones personales, existen otras
vertir las horas de las comidas en acciones que ayudan en el proce-
un clima de gritos y tensiones. In- so de recuperación:
vitar al paciente a sentarse con
todos a la mesa, aunque no coma; a. A medida que el/la chico/a
de forma que se palie su aisla- se va haciendo más independien-
miento y les haga compañía; si no te y maduro/a, sus padres deben
quiere, no insistir sólo decir que se respetar sus elecciones brindando
le echa de menos. su apoyo y cuidado pero no desde
el control, así el/ella se siente más
b. No evitar comprar ciertos ali- libre y acepta mejor la ayuda.
mentos por temor a que se atra-
que. Aunque tampoco conviene b. Saber que ellos no pueden
dejarlos como cebo o esconderlos. curar a su hijo/a, ni forzar su cam-
Es cierto que al inicio del trata- bio, ni hacerle feliz, su misión es
miento el paciente puede pedir apoyarle y darle el soporte emo-
como ayuda que no se acumule cional suficiente para favorecer
demasiada comida tentadora. Es- que cambie, promover su autono-
to puede ser objeto de un com- mía y que encuentre su propio ca-
promiso familiar pero en una fami- mino para ser feliz. Apoyarle pero
lia, no puede sacrificarse al resto no resolverle la vida.
de los miembros por uno de ellos.
c. Que el árbol no impida ver
c. No desatender sus necesi- el bosque, es decir, no olvidar los
dades propias, de pareja o de los aspectos positivos y saludables
otros hijos, es decir, que el tras- que tiene el/la chico/a. Cuanta más
torno no sea el eje sobre el que atención reciban estos aspectos,
gira toda la vida familiar. Los pa- más se favorece la recuperación.
dres no pueden vivir de forma vi-
caria a través de los/as hijos/as; d. Tolerar sus emociones ne-
para estos/as también es impor- gativas que son más frecuentes

84 Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
85/103

Trastornos de la conducta alimentaria: cómo actuar desde la familia.

antes de la comida (ansiedad, ten- personas. Tampoco es convenien-


sión, irritabilidad) y después de las te hacer dietas.
comidas (culpa, tristeza) incluso
expresiones tan dolorosas para b. Entender que el hecho de
unos padres como cuando les dice que su hijo/a tenga un trastorno
que no los quiere o que le están no significa que ellos son malos
haciendo la vida imposible. Hay padres o que han fracasado.
que manifestar que reprobamos
su conducta no sus sentimientos, c. Hacerse cargo de los propios
expresarle amor y afecto porque problemas, no culpar al hijo/a de
necesita saber que se le quiere todo lo que les pasa ni ponerle
y que la lucha no es contra él/ella, como tapadera para evitar aque-
sino contra la enfermedad. llas situaciones que no quieren
afrontar.
e. Negociar conductas acepta- d. Valorar los pequeños cam-
bles. Por ejemplo, que no ocupe bios que se vayan produciendo y
durante mucho tiempo el baño tener paciencia, no apurar y pre-
cuando el resto de la familia está tender la inmediatez de la solución
esperando para entrar, o que se del trastorno. No es lo mismo no
responsabilice de sus cosas. comer nada que comer algo, dar-
se 8 atracones a darse 20, etc.
f. Hacerle responsable de su
conducta: si se come la comida e. No culparse. El TCA es re-
de todos en un atracón, debe res- sultado de muchos factores, la cul-
ponsabilizarse de su acción y re- pa nos paraliza, hay que poner la
poner esa comida con su dinero, energía en acciones positivas.
igualmente si vomita en el baño de
casa, debe limpiarlo. Si hace ejer- f. Cuando los padres se sientan
cicio de noche debe cuidar no des- desbordados por la situación con-
pertar a los demás con ruidos. Debe viene que pidan ayuda a un tera-
haber un respeto del/la paciente peuta distinto al que trata a el/la
hacia los demás y viceversa. hijo/a.

Otras actitudes g. Las familias deben confron-


que facilitan tar de forma positiva pero sincera
el tratamiento cuestiones sobre su aceptación
a. Los padres deben ser un corporal, su historia, miedos y limi-
modelo para sus hijos en lo que taciones.
respecta al cuidado de la propia
salud y necesidades. Asimis-
mo, es importante revisar
el papel que los padres
dan a la apariencia cor-
poral y las actitudes que
estos sostienen res-
pecto a la alimentación.
No es conveniente abusar
de comentarios acerca de
pesos, tallas o imagen corpo-
ral tanto de uno como de otras

Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
85
86/103

Tratamiento-intervención.

¿Qué no conviene hacer? b. Dar apoyo, comprensión, em-


a. Negociar o usar tácticas para patía y capacidad de escucha.
asustarle: “si comes bien, te llevo
de viaje” “como vuelvas a vomitar, c. Evitar hacer o decir cosas
te vas a enterar”. Estas técnicas de que exacerben el trastorno, así co-
control externo, a lo sumo reducen mo las mentiras o la inconsis-
temporalmente los síntomas, pero tencia.
al no haber cambio interno, estos
reaparecen. Además, estas tácti- d. Colaborar en el tratamiento.
cas producen un incremento del re-
sentimiento y su deseo de control. e. Cuidar la salud y bienestar
de la familia, es decir, no olvidar a
b. Avergonzarle por su conduc- los otros miembros.
ta. Él/ella ya tiene una auto-imagen
devaluada y esto no favorece que En denitiva, el objetivo a plantear-
mejore, al contrario, le hace sen- se con la familia es que se desen-
tirse más culpable y encerrarse ganche del problema y que deje
más. que el/la chico/a asuma las rien-
das, esto no es sencillo, ya que el
c. Tenerle pena: también pue- instinto paterno lleva a tomar el
de dañar su autoestima, porque control de la situación para inten-
él/ella ya cree que es incapaz tar que se ponga bien; pero cuan-
de tener una vida normal; por eso to más se ocupan los padres,
es bueno darle oportunidades de menos se ocupa el/ella de hacer-
asumir responsabilidades y ser más se cargo de su situación. Puesto
independiente. que una de las razones que le
lleva al TCA es sentir que controla
d. Usar el dinero para intentar algo de su vida, cuanto más se
controlar su conducta alimentaria. intenta dirigir la situación más em-
Es otro modo de control externo. peora el/la paciente. Desengan-
charse signica asumir que uno no
e. Manipularle diciendo que se puede curar o resolver el proble-
hace algo por él/ella cuando en ma, la responsabilidad de salir del
realidad se está haciendo para uno trastorno es de el/la paciente y no
mismo. saldrá hasta que lo decida. Por
eso, no sirven las súplicas, las ame-
f. Decirle lo delgado/a que está nazas, los gritos y los intentos para
o elogiarle cuando coge peso. convencerle de que coma; hay
que dejar de focalizar todo en la
g. Intentar ser su terapeuta. comida y empezar a ayudarle a
Cuando plantee temas relaciona- asumir la responsabilidad de sus
dos con los síntomas lo mejor es acciones, ya no es un/a niño/a
remitirle a su terapeuta y derivar y debe aprender que sus actos
la conversación a otros términos. tienen consecuencias. Mientras es-
to no ocurra es difícil que progrese.
Responsabilidades de los
padres durante el tratamiento Desengancharse no es que dé igual
a. Proveer una alimentación sa- lo que le pase, ni tampoco olvidar-
na, sabrosa, suciente y ordenada se de el/ella, simplemente es no
a toda la familia. entrar en batalla respecto a la con-

86 Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
87/103

Trastornos de la conducta alimentaria: cómo actuar desde la familia.

ducta alimentaria. Si se ve que no tán los niños, es decir, si presentan


puede pensarse en otra cosa o que alguna dicultad, tienen dudas sin
se buscan de continuo evidencias resolver o están asumiendo fun-
sobre los síntomas, se tiene que ciones parentales.
pedir ayuda porque tal vez la foca-
lización en el problema de el/la b. Ver factores desencadenan-
hijo/a es un modo de evitar en- tes de síntomas en el hogar, espe-
frentar los propios problemas. cialmente la elusión de las respon-
sabilidades.
Finalmente, recae en la familia la
responsabilidad de proporcionar a c. Interacción de la pareja: al
sus hijos valores alternativos a los realizar la consulta puede ponerse
que la sociedad parece imponer y de maniesto la existencia, no sólo
frente a los que son especialmente del problema alimentario de el/la
sensibles los adolescentes. paciente, sino también de su so-
ledad por un posible exceso de
Personas con TCA casadas trabajo del marido/mujer. Ambas
o que conviven en pareja cosas deberán cambiar. Si los dos
Si el/la paciente está casado/a o necesitan ayuda es más fácil que
vive de forma estable con una el/la paciente acepte ponerse en
pareja, el cónyuge debe expresar tratamiento.
lo que está sufriendo e inuir para
que su marido/mujer se ponga en d. Poner de maniesto los roles
tratamiento, estableciendo para la que desempeñan cada uno, por
convivencia condiciones similares ejemplo, ver si el marido hace de
a las ya especicadas a los padres. padre o terapeuta de la paciente,
Es un momento muy delicado para o viceversa. Detectar si se ha re-
la estabilidad matrimonial ya que fugiado en el trabajo o tiene otra
los comportamientos anoréxicos o relación. También observar cómo
bulímicos pueden estropear cual- reacciona el cónyuge ante las pér-
quier relación. El matrimonio puede didas de control de el/la paciente.
fracasar y el/la paciente tendrá que Cuando se produce una mejoría
decidir si quiere terminar la rela- del trastorno, suelen surgir conic-
ción o trabajar conjuntamente para tos porque a la pareja le cuesta
salvar el matrimonio. encajar los cambios.

El tratamiento personal incluye los e. Relaciones sexuales, suele


aspectos relatados para el resto de haber dificultades que aparecen
los/as pacientes. Sin embargo, la cuando mejora el TCA o el tras-
intervención familiar se dirige al torno disociativo. En ocasiones,
cónyuge e hijos, destacando la im- cuando mejora el/la paciente se
portancia de su recuperación co- destapa un problema sexual de
mo forma de afrontar su libertad la pareja que había estado oculto.
y su responsabilidad como madre/
padre (en caso de que hubiera hijos). En personas que no aceptan su
trastorno y no reconocen su nece-
a. Ofrecer psico-educación so- sidad de cambiar, puede optarse
bre el TCA a la pareja y los hijos, si por un grupo de enfoque motiva-
son lo suficientemente mayores. cional cuyo objetivo es ayudar a
También se trata de ver como es- percibir qué mejoría se produci-

Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
87
88/103

Tratamiento-intervención.

ría en las diferentes áreas de su del paciente no debe depender de


vida si solucionara el problema ver a un terapeuta determinado, es
alimentario. decir, el paciente debe asumir su
mejoría sin condicionarla al hecho
de que le vea un profesional en
TERCERA FASE concreto. No obstante, este pro-
ceso es largo y conseguir hacer
La prevención de recaídas y con- una atribución interna de la misma
clusión de la terapia debe hacerse en lugar de condicionarla a lo ex-
de forma muy paulatina y progre- terno exigirá mucho trabajo a lo
siva espaciando las consultas, es largo del tratamiento. En el trans-
decir, no establecer un corte brus- curso de este cambio, es posi-
co. El alta no depende sólo de que ble que se generen situaciones de
hayan mejorado los síntomas sino enfrentamiento entre los diferen-
que también se considera que la tes profesionales del equipo. Nada
persona tiene suficientes estrate- grave, es algo esperable que todo
gias de manejo para hacer frente terapeuta conoce y maneja. Las
a las dicultades que le vayan sur- reuniones entre ellos ayudan a pa-
giendo, es decir, no concluye en liar estas estrategias rompedoras.
cuanto come, recupera peso y no
vomita.

Las recaídas forman parte del pro-


ceso, es decir, nos indican que
hay situaciones críticas que aún no
se saben enfrentar; son señales
de alarma de que algo no funciona
bien y que debemos investigar de
qué se trata.

Ante una recaída, es importante


pensar que no significa una vuel-
ta al inicio y que simplemente es
el momento de pedir ayuda para
remontar o solventar la situación
que la ha precipitado. Las recaídas
suelen producirse cuando tiene
lugar alguna situación de crisis o
eventos estresantes como rupturas
de pareja, cambios en la familia,
trabajo o entorno, conictos fami- Además de la unión en la diver-
liares, exámenes, etc. gencia y conuencia de pareceres,
en todo proceso de tratamiento el
equipo tiene que incluir sesiones
individuales y sesiones de grupo.
Formas de Sesiones familiares. Grupos de
intervención más padres.
adecuadas
La relación individual permite es-
Para que sea efectiva la mejoría tablecer una conexión que facilite

88 Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
89/103

Trastornos de la conducta alimentaria: cómo actuar desde la familia.

el compromiso de el/la paciente a ayuda a los pacientes a hacerse


permanecer en el tratamiento, y a cargo de su enfermedad y dejar
colaborar con honestidad en él. de negarla disociándose.
La individualidad facilita analizar,
comprender y tratar los factores La terapia familiar es útil y nece-
psicológicos asociados a las con- saria tanto en pacientes jóvenes
ductas anoréxicas y bulímicas. El como adultos. Implica, además de
tratamiento individual trata por tan- dar información sobre el trastorno,
to de conseguir que el/la paciente intervenir sobre el tipo de relacio-
se implique y coopere en el esfuer- nes entre los miembros de la fami-
zo para desarrollar nuevas estra- lia, abordar la distribución de los
tegias de resolución de problemas roles que ocupan cada uno y los
más ecaces. límites que se establecen. Puede
incluir a todos los integrantes de
El tratamiento en grupo se consi- la familia o trabajar sólo con algu-
dera un complemento útil y nos de ellos.
económico de la terapia individual,
pero nunca su sustituto. General- El modelo de intervención suele
mente se manejan problemas ser integrador bien simultaneando
de relación interpersonal, entre- modelos, bien de forma sucesiva,
namiento en habilidades que con- especialmente en las últimas eta-
trarresten su sometimiento, acep- pas de la recuperación. Se utili-
tación de la imagen corporal, za: Terapia Cognitivo-conductual,
desarrollo de habilidades para Terapia interpersonal, Terapia fa-
afrontar el estrés y los miedos que miliar sistémica, Terapia Ocupa-
paralizan la mejoría y la utilización cional y Terapia Dinámica. Otras
del tiempo libre y de ocio de forma intervenciones ayudan a comple-
constructiva. mentar a las anteriores: relajación,
meditación, imaginación guiada,
La realización de un grupo etc.
en que se comparte con
todos los que sufren la misma Consideraciones
sobre los psicoterapeutas:
patología, les alivia de su
A la hora de seleccionar un tera-
aislamiento y les permite
peuta, además de su experiencia
superar sus sentimientos de profesional, lo más importante es
vergüenza y secretismo. que resulte alguien conable y que
conecte con el/la paciente. No es
En el grupo se pueden compartir conveniente andar cambiando de
experiencias que nunca antes terapeuta porque esto obstaculiza
habían contado. A veces, es más la evolución de la terapia al tener
fácil aceptar algo si te lo dice un que volver a contar toda la histo-
igual. El tratamiento de grupo ria a otra persona. Si no estamos
puede proporcionar un apoyo de acuerdo con algún aspecto, es
mientras se incrementa la fuerza mejor hablarlo directamente con
necesaria para realizar interven- el profesional antes de abandonar
ciones terapéuticas individuales el tratamiento. También hay que
que impliquen una mayor con- tener en cuenta que en ocasio-
frontación y presión al cambio. nes el terapeuta tendrá que hacer
Compartir experiencias en grupo, determinados señalamientos que

Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid 89
90/103

Tratamiento-intervención.

pueden resultar molestos para el/la vas formas de responder a los sín-
paciente y, ante tales confronta- tomas y favorecer así el proceso
ciones, se siente molesto/a y quie- de recuperación. En cuanto al pa-
re abandonar. ciente, suele sentirse ambivalente
ante la idea de ingresar, puede en-
¿Qué puede esperarse fadarse, hacerle sentir culpable o
durante la terapia? avergonzado, pero por otro lado
En algunos casos, al poco de em- también le hace sentirse protegido.
pezar la terapia se produce un em-
peoramiento sintomatológico que Una paradoja que podemos en-
debe ser entendido como el temor contrarnos en estos tratamientos,
a abandonar algo que le ha acom- es que el paciente puede estar
pañado durante mucho tiempo, mejor respecto a los síntomas pe-
sería algo así como los últimos ro esto no le hace sentirse feliz
coletazos de la patología antes de puesto que aun no dispone de las
abandonar los síntomas. estrategias suficientes para hacer
frente a las nuevas emociones que
En personas anoréxicas que siem- experimenta y que antes solven-
pre han sido complacientes pue- taba a través de los síntomas. Por
de ocurrir que al avanzar la terapia eso se considera que el proceso
estén más hoscas, contestonas o de tratamiento es complejo y largo.
irritables. Esto no es signo de que
estén peor sino que empiezan a
manifestar su malestar de otra ma-
nera, y también porque se sienten
obligadas a incrementar peso y a
ser conscientes de sentimientos
que mantenían ocultos.

En algunas personas bulímicas o


comedoras compulsivas se da una
reducción importante de los sín-
tomas al iniciarse la terapia pero
esto es un falso signo de progre-
so porque cuando se empieza a
indagar en las fuentes de estrés
emocional, los síntomas regresan
para hacer frente a estas emo-
ciones, sobre todo si llevan años
ocultándolas. En estos casos, esas
recaídas aparentes indican que la
terapia está resultando efectiva.

En algunos casos, y debido a su


salud, durante el tratamiento es Cuando se ha concluido la tera-
necesario ingresar al paciente sin pia y el paciente se enfrenta a una
que esto implique un fracaso del situación de crisis vital: divorcio,
mismo o un abandono. Este es- cambio de trabajo, perdidas… pue-
pacio puede ser una oportunidad de producirse una recaída. En este
para que la familia aprenda nue- caso lo mejor es retomar el con-

90 Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
91/103

Trastornos de la conducta alimentaria: cómo actuar desde la familia.

tacto con el equipo terapéutico se frustra y es más fácil pensar en


para que le ayude a superar la tirar la toalla.
situación.
La duración depende de varios
Posibles resultados factores:
del tratamiento
De forma general puede decirse Tiempo de evolución del tras-
que la mayoría de los equipos de torno. Como norma general puede
tratamiento que tienen una solven- armarse que un/a paciente con
cia profesional en estos trastornos, una evolución corta, necesitará me-
consiguen que los dos tercios de nos tiempo que un/a paciente cuyo
los pacientes salgan adelante y se trastorno lleve instaurado ya varios
recuperan de forma estable. Man- años. Es probable que un trata-
tienen su peso en un nivel normal, miento de un adolescente de 13
recuperan la menstruación, dejan años que lleva 8 meses de evolu-
de preocuparse por el peso, acep- ción, sea más corto que el trata-
tan su cuerpo e incrementan su miento de una persona de 29 años
conanza y autoestima. La mayoría que lleva 9 años de evolución.
del tercio restante, se recupera de
forma parcial. Pueden recuperar su La gravedad del problema. Sin
peso pero mantienen una comida embargo, si el/la paciente joven
muy repetitiva, o con prohibiciones. debuta con una patología muy
Mantienen su preocupación por su grave, el tratamiento puede durar
peso y el deseo de controlar no les tantos años como el de el/la pa-
abandona. Un grupo muy peque- ciente de larga evolución. En los
ño no se recupera nunca. Man- casos más complicados, la mejoría
tienen los síntomas como el primer puede lograrse tras más de 7 años
día y su salud se deteriora progre- de tratamiento. No es del todo in-
sivamente. Eventualmente pueden frecuente encontrar que una per-
morir por emaciación o a causa de sona comience su mejoría tras va-
las conductas purgativas. rios años y diversos intentos de
tratamiento, sobretodo si es por de-
cisión propia. Entonces, algo que
parecía imposible sucede, y la/el
Duración del paciente inicia su auténtica recu-
tratamiento peración.

En general, la resolución de un TCA Los factores psicológicos im-


es una tarea ardua y costosa. Si plicados, ya que necesitan tiempo
un/a paciente joven no se ha re- para modificarse de forma esta-
cuperado en los dos primeros años ble. Algunas personas anoréxicas
de tratamiento, cabe esperar que a las que se les ha dado un alta
la resolución del trastorno se pro- prematura, han desarrollado a pos-
longue cinco o más años de tra- teriori un trastorno bulímico, o un
tamiento, por eso es fundamental TOC (Trastorno Obsesivo-Compul-
tener paciencia y saber que los sivo) más grave que la patología
cambios no se producen de un día anoréxica. No se las había pre-
para otro, sino que han de ser pro- parado para afrontar las posibles
gresivos. Si alguien se plantea el situaciones de descontrol ante el
cambio como inmediato, fracasa y estrés y las adversidades.

Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
91
92/103

Tratamiento-intervención.

La intensidad de la negación de sencia de límites, el caos, la falta


la patología. de expresión de emociones, el/la
paciente sigue careciendo de in-
a) La interpretación de las con- dividualidad propia; se conforma
ductas patológicas como forma con una individualidad referencial
de ser impide la colaboración y o reejada.
retrasa el inicio del proceso de
tratamiento. Este periodo de ne- Frecuencia ideal
gación puede durar varios años. de las sesiones
En ocasiones no se logra pasar La frecuencia de las sesiones
de esta etapa y el/la paciente depende de la gravedad del tras-
permanece sin recuperarse. torno y de la etapa de tratamiento.
A mayor gravedad, mayor número
b) La vergüenza de los compor- de sesiones en semana, aunque
tamientos realizados impide la si son excesivas impiden la asimi-
petición de ayuda. lación por parte del/la paciente. La
segunda etapa exige una o dos
La experiencia en las primeras sesiones semanales en régimen
consultas marcan diferencias. Si la ambulatorio y en la tercera etapa
experiencia terapéutica es negati- de prevención de recaídas, las se-
va la persona puede cerrarse y en- siones se distancia hasta llegar
quistarse el trastorno. al alta. Los padres deberían verse
con una frecuencia que no fuera
La presencia de otros trastor- inferior a una vez al mes. Cada dos
nos psíquicos. La existencia de o tres semanas sería una frecuen-
otras adicciones como el alcohol y cia óptima. Esta intensidad se re-
otras drogas u otros problemas ere al primer tramo del tratamien-
psicológicos, o una conflictividad to, quizás el primer año, luego las
familiar extrema, pueden añadir consultas se distancian, siempre
complicaciones y alargar el tiempo que la evolución de el/la paciente
que se necesite en llevar a cabo lo permita.
el tratamiento.

La implicación excesiva. Si la Prevención


familia se implica demasiado en la
recuperación del trastorno, puede La mejor manera de ayudar a un
interferir para que el/la paciente hijo/a a evitar un TCA es ayudarle
asuma su responsabilidad en los a que no lo empiece. Aun así, si la
cambios que únicamente él/ ella hija/o pide realizar una dieta por-
puede hacer. Un signo de esta que tiene un sobrepeso importante
excesiva implicación es cuando el habrá que considerar como hacer-
estado de ánimo de la casa gira lo pues la realización de dietas
en torno a el/la hijo/a y las cosas tiene algunas implicaciones peli-
que les suceden a los hermanos, a grosas ya comentadas previa-
los mismos padres, dejan de tener mente en esta guía.
sentido.
Para valorar la adecuación de esta
La incapacidad de cambio en decisión conviene que los padres
las relaciones familiares. Si se man- examinen cuál es su posición ante
tienen los mismos roles, la au- la comida y el peso. Algunos pa-

92 Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
93/103

Trastornos de la conducta alimentaria: cómo actuar desde la familia.

dres, especialmente si uno de ellos Los expertos en salud mental y fí-


tiene sobrepeso, queriendo hacer sica recomiendan conseguir que
aquello que consideran óptimo todos los miembros de la familia
para evitar que sus hijos puedan mantengan unos hábitos de vida
padecer problemas de salud o su- saludables, tanto en alimentación
frir la discriminación social por su como en actividad física, manejo
peso que ellos han experimentado de emociones, empleo del tiempo
(o imaginan puede acaecer), pue- libre y ocio e intereses espirituales.
den actuar de manera impulsiva. Si a todo esto se le añade una
Su deseo protector les impide va- comunicación abierta y sincera y
lorar con precisión si la petición de un afecto independientemente de
pérdida de peso refleja una ver- sus logros, errores o apariencias,
dadera necesidad de salud o es las probabilidades de desarrollar
la forma (ilusoria) en la que sus hi- el trastorno disminuyen, incluso
jos/as tratan de afrontar todas las aunque durante un tiempo tengan
cuestiones de su vida (identidad, que realizar una dieta.
éxito, etc.). No puede olvidarse
que la sociedad actual ha llevado
a muchas personas al extremo de
creer que lo que uno pesa signifi-
ca más que lo que uno es, y que
estar delgado, incluso de forma
enfermiza, es reflejo de éxito, be-
lleza y felicidad. Además, al evaluar
las propias dicultades para afron-
tar su cuerpo que seguramente ha
perdido juventud y formas, tienen
la oportunidad de buscar la au-
toestima en otros valores perso-
nales que ayudan a soportar la
presión social.

Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
93
94/103

Anexo 1.

Anexo 1

Clasicaciones alimentaria cuya descripción no


encaja claramente en las catego-
diagnósticas rías diagnósticas de anorexia ner-
viosa, bulimia nerviosa o trastorno
El diagnóstico de una enfermedad por atracón.
mental cualquiera se fundamenta
en el cumplimiento de una serie de Criterios DSM-IV TR
criterios descriptivos específicos, para el diagnóstico de
que pretenden identificar a todos Anorexia Nerviosa
lo sujetos que padecen ese tras- A. Rechazo a mantener el peso
torno concreto y diferenciarlos, a corporal igual o por encima del va-
su vez, de aquellos que presentan lor mínimo normal considerando la
otras enfermedades distintas. Es- edad y la talla (por ejemplo, pérdi-
ta situación ideal no se da prácti- da de peso que da lugar a un pe-
camente con ninguna enfermedad so inferior al 85 % del esperable, o
mental, pero en el caso particular fracaso en conseguir el aumento
de los trastornos de la conducta de peso normal durante el período
alimentaria las clasicaciones diag- de crecimiento, dando como resul-
nósticas actuales distan mucho de tado un peso corporal inferior al
aproximarse a este patrón. Uno de 85 % del peso esperable).
los motivos que dan cuenta de es-
tas deficiencias es el descono- B. Miedo intenso a ganar pe-
cimiento riguroso de las causas y so o a convertirse en obeso, inclu-
los mecanismos que intervienen en so estando por debajo del peso
la génesis y desarrollo de las en- normal.
fermedades a las que aquí nos
referimos, por lo que sólo pode- C. Alteración de la percepción
mos clasicarlas de modo descrip- del peso o la silueta corporales,
tivo por su presentación clínica, es exageración de su importancia en
decir, por los síntomas y signos la auto-evaluación o negación del
que provocan. Otro de los motivos, peligro que comporta el bajo peso
consecuencia del anterior, es que corporal.
muchos de estos síntomas y sig-
nos son compartidos por varias D. En las mujeres pospube-
enfermedades y son la expresión rales, presencia de amenorrea,
resultante de problemas distintos, ausencia de al menos tres ciclos
con lo que pueden ser poco dis- menstruales consecutivos. (Se con-
criminantes. Una de las soluciones sidera que una mujer presenta
que se han aplicado es la creación amenorrea cuando sus menstrua-
del diagnóstico de “trastornos de ciones aparecen únicamente con
la conducta alimentaria no especi- tratamientos hormonales, por ejem-
ficados”, que recoge todas aque- plo, con la administración de es-
llas enfermedades de la conducta trógenos).

94 Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
95/103

Trastornos de la conducta alimentaria: cómo actuar desde la familia.

Tipos de Anorexia: C. Los atracones y las con-


ductas compensatorias inapropia-
Tipo restrictivo: durante el epi- das tienen lugar, como promedio,
sodio de anorexia nerviosa, la al menos dos veces a la semana
persona no recurre regularmen- durante un período de 3 meses.
te a atracones o a purgas (por
ejemplo, provocación del vómi- D. La auto-evaluación está exa-
to o uso excesivo de laxantes, geradamente influida por el peso
diuréticos o enemas). y la silueta corporales.
Tipo compulsivo/purgativo: du- E. La alteración no aparece ex-
rante el episodio de anorexia clusivamente en el transcurso de
nerviosa, el individuo recurre re- la anorexia nerviosa.
gularmente a atracones o pur-
gas (por ejemplo, provocación Tipos de Bulimia:
del vómito o uso excesivo de
laxantes, diuréticos o enemas). Tipo purgativo: durante el episo-
dio de bulimia nerviosa, el indi-
viduo se provoca regularmente
Criterios DSM-IV TR el vómito o usa laxantes, diuré-
para el diagnóstico de ticos o enemas en exceso.
Bulimia Nerviosa
A. Presencia de atracones re- Tipo no purgativo: durante el
currentes. Un atracón se caracte- episodio de bulimia nerviosa, el
riza por: individuo emplea otras conduc-
tas compensatorias inapropia-
1. Ingesta de alimento en un das, como el ayuno o el ejer-
corto espacio de tiempo (por cicio intenso, pero no recurre
ejemplo, en un período de 2 regularmente a provocarse el
horas) en cantidad superior a vómito ni usa laxantes, diuréti-
la que la mayoría de las per- cos o enemas en exceso.
sonas ingerirían en un período
de tiempo similar y en las mis-
mas circunstancias.
Criterios DSM-IV TR
2. Sensación de pérdida de para el diagnóstico de Trastorno
control sobre la ingesta del ali- de la Conducta Alimentaria
mento (por ejemplo, sensación No Especificado
de no poder parar de comer o La categoría trastorno de la con-
no poder controlar el tipo o la ducta alimentaria no especificado
cantidad de comida que se es- se refiere a los trastornos de la
tá ingiriendo). conducta alimentaria que no cum-
plen los criterios para ningún tras-
b. Conductas compensatorias torno de la conducta alimentaria
inapropiadas, de manera repetida, especíca. Algunos ejemplos son:
con el n de no ganar peso, como
son provocación del vómito; uso En mujeres se cumplen todos
excesivo de laxantes, diuréticos, los criterios diagnósticos para la
enemas u otros fármacos; ayuno y anorexia nerviosa, pero las mens-
ejercicio excesivo. truaciones son regulares.

Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
95
96/103

Anexo 1.

Se cumplen todos los criterios mida denitivamente superior a


diagnósticos para la anorexia ner- la que la mayoría de la gente
viosa excepto que, a pesar de podría consumir en el mismo
existir una pérdida de peso sig- tiempo y bajo circunstancias
nificativa, el peso del individuo se similares.
encuentra dentro de los límites de
la normalidad. 2. Sensación de pérdida de
control sobre la ingesta durante
Se cumplen todos los criterios el episodio (por ejemplo, sensa-
diagnósticos para la bulimia ner- ción de que uno no puede parar
viosa, con la excepción de que los de comer o controlar qué o
atracones y las conductas com- cuánto está comiendo).
pensatorias inapropiadas aparecen
menos de 2 veces por semana o B. Los episodios por atracón se
durante menos de 3 meses. asocian a tres (o más) de los si-
guientes síntomas:
Empleo regular de conductas
compensatorias inapropiadas des- 1. Ingesta mucho más rápida
pués de ingerir pequeñas canti- de lo habitual.
dades de comida por parte de
un individuo de peso normal (por 2. Comer hasta sentirse desa-
ejemplo, provocación del vómito gradablemente lleno.
después de haber comido dos ga-
lletas). 3. Ingesta de grandes cantida-
des de comida a pesar de no
Masticar y expulsar, pero no tener hambre.
tragar, cantidades importantes de
comida. 4. Comer a solas para esconder
su voracidad.
Trastorno compulsivo: se carac-
teriza por atracones recurrentes 5. Sentirse a disgusto con uno
en ausencia de la conducta com- mismo, depresión, o gran cul-
pensatoria inapropiada típica de la pabilidad después del atracón.
bulimia nerviosa. También llamado
trastorno por atracón. C. Profundo malestar al recor-
dar los atracones.

Criterios DSM-IV TR D. Los atracones tienen lugar,


para el diagnóstico de como media, al menos dos días a
Trastorno por atracón la semana durante 6 meses.
A. Episodios recurrentes de atra-
cones. Un episodio de atracón se El atracón no se asocia a estra-
caracteriza por las dos condiciones tegias compensatorias inadecua-
siguientes: das (por ej., purgas, ayuno, ejerci-
cio físico excesivo) y no aparecen
1. Ingesta, en un corto periodo exclusivamente en el transcurso de
de tiempo (por ejemplo, en 2 una anorexia nerviosa o una buli-
horas), de una cantidad de co- mia nerviosa.

96 Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
97/103

Trastornos de la conducta alimentaria: cómo actuar desde la familia.

Anexo 2

Complicaciones “la analítica” apareciese alterada.


Muchos padres, y desde luego los
médicas en los TCA pacientes, pueden convencerse
desconcertados de que sus hijos
La mayoría de las personas no tenían razón cuando negaban la
conocen las posibles consecuen- presencia de algo “enfermizo”, re-
cias que pueden resultar de los trasando de este modo una inter-
trastornos de la conducta alimen- vención precoz.
taria, ni la severidad que estas
pueden alcanzar, por una simpli- Las complicaciones médicas que
cación excesiva al valorar estas pueden surgir durante la evolución
enfermedades como caprichos de los trastornos del comporta-
propios de una actitud infantil. miento alimentario pueden presen-
tarse de un modo relativamente
A esta percepción contribuyen, brusco (agudas) o instaurarse de
entre otros factores: la magnífi- forma insidiosa (crónicas). Cada
ca capacidad del organismo para una de ellas requerirá abordajes
adaptarse al estado de malnutri- terapéuticos diferentes y específi-
ción, que compensará las caren- cos, con intervenciones inmediatas
cias de un modo silente, sin ma- y breves, o que deben ser mante-
nifestaciones observables ante un nidas a medio y largo plazo.
examen supercial; la elevada ac-
tividad física de algunos pacientes, 1. Bajo peso y malnutrición
fundamentalmente quienes pade- Si bien el bajo peso no aparece en
cen anorexia nerviosa, que puede todos los trastornos del compor-
propiciar el convencimiento de que tamiento alimentario es una carac-
nada serio puede estar sucedien- terística fundamental de algunos
do; la negación y el ocultamiento de ellos, con especial relevancia en
por parte de los pacientes y sus la anorexia nerviosa. Es importante
allegados de algunos síntomas, e a su vez señalar que la malnutri-
incluso la constatación de una ción se acompaña de una modifi-
disminución en la frecuencia de cación en la composición corporal,
resfriados o cuadros febriles; y la a expensas esencialmente de los
ausencia de hallazgos significati- compartimentos graso y muscular
vos en las exploraciones analíticas del organismo, lo que determina
y otras pruebas diagnósticas, con- un aspecto más o menos ema-
secuencia de la extraordinaria ca- ciado en estos pacientes, incluso
pacidad de adaptación a la que esquelético.
antes hacíamos referencia.
Y, aunque pudiera parecer (por
Por estos motivos podría ser un los frecuentes mensajes que recibi-
error negociar con el/la paciente mos en este sentido) que la elimi-
que se iniciará un tratamiento si nación de la grasa corporal redun-

Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
97
98/103

Anexo 2.

da en una mayor salud, esta con- nutridos: dificultades para la con-


cepción así entendida se aleja de centración, inestabilidad emocio-
la realidad. nal, cambios en el razonamiento
lógico y el pensamiento abstracto.
Cada componente de nuestro 3. Inestabilidad cardiovascular
organismo (incluyendo la El sistema cardiovascular -que
grasa) desempeña una función incluiría el corazón, el árbol circu-
necesaria, y todos ellos, en latorio y sus distintas funciones-
su debida proporción, son puede verse comprometido en los
cruciales para mantener un trastornos de la conducta alimen-
estado de salud. taria de diversas formas.

Al igual que sucede con los mús-


La grasa corporal está estrecha- culos del aparato locomotor, el
mente ligada a la producción hor- músculo cardiaco también puede
monal estrogénica, determinante verse afectado, presentando con
para el desarrollo de los caracteres frecuencia una pared muscular
sexuales secundarios femeninos; más adelgazada de lo normal. Es-
de hecho, para que pueda darse ta afectación (entre otras) podría
una adecuada función ovulatoria y dar lugar a un fracaso o una insu-
una condición fértil, el cuerpo fe- ficiencia en la función propulsora
menino necesita un volumen cor- del corazón, comprometiendo la
poral graso que suponga entre un distribución de la sangre de forma
18 y un 30% del peso corporal eficiente a todos los órganos del
total. cuerpo.

Independientemente de la anor- Algunas manifestaciones meno-


mal composición corporal, el bajo res de esta incapacidad serían los
peso por sí mismo es origen de frecuentes mareos, e incluso des-
algunas complicaciones. Así, por vanecimientos, que experimentan
ejemplo, la frecuencia cardiaca, la estos pacientes con actividades
temperatura corporal o el funcio- más intensas de lo habitual.
namiento cerebral disminuyen su
actividad/valores habituales en con- 4. Alteraciones electrolíticas
diciones de malnutrición. Todos es- Las alteraciones significativas en
tos cambios suponen una adap- la concentración de estos iones
tación forzada ante una situación pueden causar arritmias cardiacas
adversa, alcanzando un equilibrio (ritmos anormales en la conduc-
precario que deja expuesto al or- ción eléctrica cardiaca que pue-
ganismo con una capacidad de den resultar en alteraciones de su
reacción disminuida ante posibles función), debilidad y lisis muscular,
adversidades. calambres, temblores, crisis comi-
ciales, confusión, coma e incluso
2. Cambios cerebrales la muerte.
Los estados de malnutrición pue-
den acompañarse de cambios es- Las alteraciones más frecuentes
tructurales en el cerebro, que ex- del equilibrio electrolítico son: bajas
plican parte de la sintomatología concentraciones de potasio, bajas
observable en los pacientes mal- o elevadas concentraciones de

98 Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
99/103

Trastornos de la conducta alimentaria: cómo actuar desde la familia.

sodio, y concentraciones bajas de ciente y el abuso de laxantes y


calcio, magnesio y fósforo. otros fármacos. Es habitual la pre-
sencia de saciedad precoz, que se
Es común que los pacientes pue- traduce en una sensación de ple-
dan despertarse hinchados, hasta nitud gástrica y náuseas, motivada,
el punto de que no puedan calzar- entre otras razones, por un lento
se o la ropa quede muy ajustada. vaciamiento del contenido gástri-
Esta retención de líquidos fuera de co. Esta sintomatología encontra-
sus lugares habituales (denomi- rá un alivio progresivo a medida
nada edema) responde a múltiples que progresa una realimentación
causas de entre las descritas (al- adecuada.
teración renal, cardiaca, malnutri-
ción proteica…). Señalamos aquí Entre otras complicaciones no tan
el efecto “rebote” por el uso y abu- usuales pero potencialmente gra-
so de laxantes o diuréticos. ves nombramos algunas: diarreas,
alteraciones del hígado debido a
5. Alteraciones en el control la malnutrición, inflamación de la
de la temperatura corporal mucosa esofágica o gástrica y los
Es habitual observar una baja tem- sangrados digestivos por abuso
peratura corporal o la incapacidad de enemas o laxantes.
para mantener una temperatura
corporal normal ante cambios en 7. Alteraciones
la temperatura ambiental en pa- del metabolismo óseo
cientes malnutridos. Es frecuente que pacientes con
anorexia nerviosa u otros trastor-
La frialdad en las extremidades nos de la conducta alimentaria
(manos, pies…), acompañada de presenten una baja densidad ósea,
una coloración violácea, encontra- lo que supone unos huesos con
da en estos pacientes responde a una fragilidad mayor de la habi-
problemas circulatorios (aunque tual y con predisposición a frac-
guarda también relación con los turas, incluso patológicas, es decir,
procesos que intervienen en el sin que medie traumatismo exter-
mantenimiento de la temperatura no alguno.
corporal).
El uso de tratamientos hormona-
6. Problemas digestivos les con estrógenos no parece
Como resultado de una menor beneficiar la resolución de estas
motilidad (peristaltismo) intestinal, alteraciones, por lo que el trata-
es muy frecuente que los pacien- miento más oportuno incluye la
tes con trastornos del comporta- realimentación y el aporte de can-
miento alimentario presenten es- tidades suficientes de calcio y vi-
treñimiento y atulencia, así como tamina D.
hinchazón del vientre (lo que deri-
va en un tormento para la mayoría 8. Alteraciones de las células
de ellos). Algunos de los factores sanguíneas y de la inmunología
que intervienen en esta habitual y Puede aparecer anemia, que po-
molesta complicación son la pérdi- dríamos definir como una dismi-
da de masa corporal, una inade- nución de la hemoglobina, que es
cuada ingesta de alimentos ricos una proteína encargada de trans-
en fibra, la ingesta líquida insufi- portar el oxígeno contenido en la

Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid 99
100/103

Anexo 2.

sangre hacia los órganos del cuer- pacientes que padecen trastornos
po. Esto disminuye el aporte efi- de la conducta alimentaria son si-
ciente de oxígeno a los tejidos cor- milares a las de las niñas que no
porales, sumándose a los efectos han alcanzado la pubertad.
perniciosos de las también reduci-
das frecuencia cardiaca y tensión Algunas pacientes pueden quedar-
arterial. Sus manifestaciones con- se embarazadas (a pesar de tener
tribuyen en la expresión de sínto- un peso muy bajo y un patrón
mas como cansancio, somnolen- menstrual irregular o ausente) ante
cia, debilidad, irritabilidad… la sorpresa de familiares, del per-
sonal encargado del tratamiento
9. Retraso del crecimiento y habitualmente de la propia pa-
Una de las características dife- ciente. Es importante notar que el
renciales de los trastornos de la riesgo de padecer abortos espon-
conducta alimentaria en niños y táneos o de que los bebés nazcan
adolescentes respecto de los más con bajo peso es muy elevado.
mayores es la repercusión que
opera sobre su crecimiento. Si un 11. Alteraciones dermatológicas
niño o adolescente no ingiere lo En numerosas ocasiones se ob-
suficiente para satisfacer sus de- servan determinados estigmas en
mandas nutricionales, su estatura la piel, uñas y pelo de los pacien-
se verá afectada. Más allá de tes con trastornos de la conducta
un determinado momento en la alimentaria, algunos frecuentes,
adolescencia no se producirá un como la piel seca y un cabello ralo
mayor crecimiento, por lo que el y quebradizo, o la presencia de
retraso en el crecimiento puede rágades (boqueras) si los vómitos
conducir a un freno definitivo del son frecuentes. Algunos pacien-
crecimiento en estatura. tes pueden presentar una colora-
ción anaranjado-amarillenta en las
10. Alteraciones menstruales palmas de las manos y alrede-
La ausencia de menstruaciones, dor de la boca y el mentón. Otro
situación clínica denominada ame- hallazgo signicativo es la presen-
norrea, es una de las característi- cia de lanugo, que es un vello no
cas clásicas de la anorexia ner- y corto característico de enfermos
viosa. La amenorrea se define con desnutrición importante, que
como primaria si se produce en aparece con mayor frecuencia en
niñas que nunca han tenido mens- cuello, espalda y sienes (parece
truaciones cuando debieran haber- responder a un intento del orga-
las iniciado; y secundaria, cuando nismo para perder menos calor
habiendo presentado menstrua- corporal). También puede apare-
ciones normales, dejan de mens- cer un pelo más duro en áreas
truar durante un período de al insólitas para las mujeres que
menos tres meses. Muy pocas pa- recuerda al bello del varón, debido
cientes se quejan de la supresión a alteraciones en las hormonas
de las menstruaciones, incluso sexuales.
pueden vivirlo como una liberación.
Más raro es encontrar callos en
Estas manifestaciones clínicas es- el dorso de la mano (signo de
tán en relación con los niveles de Russell) como resultado de la pro-
hormonas sexuales, que en las vocación del vómito por presión

100 Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
101/103

Trastornos de la conducta alimentaria: cómo actuar desde la familia.

de los dedos sobre la garganta y sivos y caninos superiores. Es muy


el roce de los dientes sobre la piel común la aparición de numerosas
de la mano. caries y la inflamación e infección
de las encías, pudiendo llegar a
Es observable a simple vista la la pérdida de piezas dentarias.
inflamación de las glándulas sali- Existe una mayor sensibilidad de
vales, fundamentalmente por tume- los dientes al frío y al calor.
facción parotídea en ambos lados
de la cara, simétrica e indolora, lo 13. Cambios en el estado de
que da un aspecto de cara de ánimo y en el comportamiento
luna llena o mejillas abultadas, ha- Cuando se hace dieta, se piensa
bitualmente de forma secundaria a más en comida, menús y recetas
la presencia de vómitos frecuentes e incluso es más probable que se
o por la misma desnutrición. Suele sueñe con comida. Si la dieta se
revertir, aunque no siempre de for- mantiene por un largo período de
ma inmediata, tras el cese de los tiempo aparecen signos depresi-
hábitos purgativos. Esta tumefac- vos, baja la autoestima, sentimien-
ción de la cara suele ser interpre- tos de soledad y la obsesión por
tada como “gordura”, mantenien- la comida es cada vez mayor.
do los ciclos restricción-atracón
-vómito, que no harán sino em- Estos cambios pueden modificar
peorar la situación. dramáticamente la personalidad
de los pacientes y su funciona-
12. Alteraciones miento habitual. Algunos autores
de las piezas dentales han descrito estos cambios como
La erosión del esmalte dental el resultado de un intenso miedo,
es debida al contenido ácido de tristeza o un sentimiento de de-
los vómitos autoprovocados. Las samparo. Así entenderemos mejor
zonas más vulnerables correspon- la testarudez y la irritabilidad e
den a la cara posterior de los inci- incluso la agresividad.

Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid 101
102/103

Bibliografía

Bibliografía
Ardell, Maureen and Corry-Ann. Collipp, Platon J., M.D., ed.
Portrait of an Anorexic: A Mother Childhood obesity.
and Daughter’s Story. New York: Warner Books, 1986.
Vancouver: Flight Press, 1985.
Friedman Sandra Susan.
Bullitt-Jones, Margaret. When girls feel fat.
Holy Hunger. Toronto, Canada:
New York: Knopf, 1999. Firey books, 2000.

Bruch, Hilde, M.D. García-Camba, Eduardo.


Eating Disorders: Obesity, Avances en Trastornos de la
Anorexia Nervosa and the conducta Alimentaria. Anorexia
Person Within. Nerviosa, Bulimia Nerviosa,
New York: Basic books, 1973. Obesidad.
Masson, 2001.
Brumberg, Joan Jacobs.
Fasting Girls: The History of Germaine Marcia.
Anorexia Nervosa. Hutchinson, Love the
New American Library, 1988 body you have.
Freedom, Calif.:
Byrne, Catherine. The Crossing Press, 1985.
A parent’s Guide to Anorexia
and Bulimia. Gottlieb Lori.
New York: Henry Holt, 1987 I Had an Eating Disorder and
Didn’t Even Know It.
Calvo Sagardoy, Rosa. Cosmo-Girl, April 2001.
Anorexia y bulimia.
Guía para padres, educadores Minuchin, Salvador, Bernice L.
y terapeutas. Rosman, and Lester Baker.
Planeta Práctico. 2002. Psychosomatic Families:
Anorexia Nervosa in Context.
Caparros, Nicolás. Cambridge: Harvard University
La Anorexia, una Locura Press, 1978.
del Cuerpo.
Biblioteca Nueva, 2004. Moe Barbara.
Coping with Eating Disorders.
Chinchilla Moreno, Alfonso. New York:
Trastornos de la Conducta Rosen Publishing. 1991.
Alimentaria. Anorexia y
Bulimia Nerviosas, Obesidad Nardone, Giorgio.
y Atracones. Más allá de la Anorexia
Masson, 2003. y la Bulimia.
Paidós Ibérica. 2004.
Claude-Pierre Peggy.
The Secret Language of Eating O’Neill, Cherry.
Disorders. Starving for Attention.
New York: Random House, 1997. New York: Continuum, 1982.

102 Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid
103/103

Trastornos de la conducta alimentaria: cómo actuar desde la familia.

Orbach, Susie. Toro Trallero, Joseph.


Hunger Strike: The Anorectis´s Riesgo y causas de
Struggle as a Metaphor la Anorexia Nerviosa.
for Our Age. Ariel, 2004.
New York and London:
W.W. Norton, 1986. Valette, Bett.
A Parent’s Guide to Eating
Pipher, Mary. Disorders.
Reviving Ophelia. New York:
New York: Avon Books, 1988.
Ballantine books, 1994.
Waterhouse, Debra.
Roth, Geneen. Like Mother, Like Daughter.
When Food is Love: Exploring New York: Hyperion, 1997.
the Relationship between Eating
and Intimacy. Wolf, Naomi.
New York: Plume, 1993. The Beauty Myth.
New York: Morrow, 1991.
Toro Trallero, Joseph.
El cuerpo como delito. Anorexia, Zerbe Kathryn, M.D.
Bulimia, Cultura y Sociedad. The Body Betrayed.
Ariel, 2003 Carlsbad, Calif. Gürze, 1995

Dirección General de la Familia y el Menor


Consejería de Políticas Sociales y Familia-Comunidad de Madrid 103
Una guía sencilla para ayudar a nuestros hijos e hijas
en el desarrollo de su personalidad.

más información

dgfamiliaymenor@madrid.org

Comunidad de Madrid
CONSEJERÍA DE POLÍTICAS SOCIALES Y FAMILIA
Dirección General de la Familia y el Menor

Anda mungkin juga menyukai