Las fuentes de energía alternativas

Las fuentes de energía actuales de las que se abastece la sociedad se agotan o se encarecen
drásticamente, por eso es que la manera de satisfacer la demanda creciente de energía son las
fuentes energía renovables, ya que pueden remediar el daño que provocan las fuentes de energía
actuales, por su menor efecto contaminante y fundamentalmente por su posibilidad de
renovación.

Las diversas fuentes posibles son:

Energía nuclear: es cuando se obtiene energía a partir de un proceso llamado fisión nuclear, la cuál
se obtiene bombardeando los núcleos de los átomos pesados, con neutrones que provocan una
reacción en cadena. Sí la energía liberada no se controla puede desencadenar una explosión
atómica, por eso es que no hay muchas aunque sea una fuente de energía barata y limpia.

Energía solar: hace referencia a la radiación solar que llega a la Tierra en forma de luz, calor o
rayos ultravioletas, con los que se puede generar calor y electricidad para cubrir las necesidades
de la población.

Existen dos tipos de captadores solares, los pasivos y los activos, los cuales hacen referencia a la
forma en que la energía es capturada, convertida y utilizada.

1) Los captadores solares pasivos: consisten en arquitecturas bioclimática, es decir, que se

construyen edificios o casas preparadas para captar la energía solar y aprovecharla, por
ejemplo con las ventanas cuando la luz solar atraviesa el vidrio, la energía es absorbida por
los objetos de la habitación y el calor calienta el aire. De esa manera se reducen los costos
de calefacción.
2) Los captadores solares activos: hacen referencia a dos maneras de recolectar energía,
mediante la conversión fotovoltaica y la conversión térmica.
La fotovoltaica es aquella que aprovecha la radiación solar para convertirla en energía
eléctrica. Este proceso se lleva a cabo, por ejemplo, por medio de paneles solares.
La térmica es aquella que transforma la energía solar en energía térmica, es decir que,
aprovecha el calor del Sol para producir, por ejemplo, agua caliente.

Energía eólica: es un tipo de energía cinética, la cual se produce a causa del movimiento que
depende de la velocidad del viento y la masa que tiene el aire, proceso por el cual se produce
energía.

Las turbinas eléctricas con energía eólica generan electricidad para los hogares, los negocios, entre
otros. Es necesario que la velocidad mínima, del viento, sea de 21 km/h para una buena
producción energética, si la velocidad es menor, aunque sea mínima la diferencia, es una gran
diferencia en la producción, por ese motivo es que este tipo de energía funciona, dependiendo del
viento de la zona.

Energía hidroeléctrica: se utiliza para generar energía eléctrica, por medio de las caídas de agua
que impulsan por medio de energía mecánica ruedas hidráulicas para alimentar molinos y otras
maquinarias. Esto se produce en grandes presas que permiten el control del flujo de agua, eso es
una forma de almacenar la energía que se puede liberar en cualquier momento. Esas presas tienen
un tiempo limitado porque el agua proviene del río y estos transportan sedimentos que se va
acumulando atrás de la presa hasta que llena por completo el embalse.

Energía geotérmica: esta energía proviene de depósitos subterráneos naturales de vapor y agua
caliente, que aparecen en lugares donde las temperaturas bajo la superficie son elevadas porque
hay actividad volcánica un poco reciente y se utiliza de dos maneras:

1) El vapor y el agua caliente se utilizan para calentar, por ejemplo se usa como calefacción.
2) El vapor y el agua caliente se utilizan para generar electricidad, por ejemplo de 250 plantas
de energía, se usa para proporcionar electricidad, a 60 millones de personas.

Energía mareal: consiste en utilizar los mares como una fuente energía, pero aunque se utilizó con
anterioridad durante siglos, no tienen la capacidad de abastecer la energía eléctrica que se utiliza y
es cada vez mayor. Eso sucede porque la energía mareal se aprovecha construyendo una presa a
través de la boca de una bahía en un área costera que tenga gran intervalo mareal. Esa
construcción deja una estrecha apertura que produce un fuerte flujo de entrada y salida de agua
cuando suben y bajan las mareas, por eso es que la energía sólo se produce cuando hay una
diferencia agua-altura suficiente entre la bahía y el océano.