Las plantas industriales, por lo tanto, son las fábricas donde se elaboran diversos
productos. Se trata de aquellas instalaciones que disponen de todos los medios necesarios
para desarrollar un proceso de fabricación. Por ejemplo: “Este es un distrito lleno de
plantas industriales ya que es zona libre de impuestos”, “Explosión en una planta
industrial de San Gabriel: tres heridos”, “En la planta industrial producimos los teléfonos
que se venden en todo el continente”.
Una planta industrial está formada por el edificio en sí mismo, las instalaciones
específicas (como la climatización, el saneamiento, etc.) y las maquinarias. A la hora de
elegir un lugar para construir una planta industrial, suelen tenerse en cuenta diversos
factores externos, como los medios de transporte que pasan por la zona.
En el día a día de una planta industrial intervienen diversas ciencias y disciplinas, como la
seguridad industrial (el área multidisciplinaria que se encarga de minimizar los riesgos
de accidentes) y la higiene industrial (los procedimientos que buscan controlar los
factores ambientales que pueden afectar la salud de los trabajadores y de los vecinos).
La función de las plantas industriales es combinar el trabajo humano con las máquinas que
se encuentran en sus instalaciones para transformar las materias primas y la energía,
siguiendo un proceso que se define previamente. Para que los equipos sean aprovechados al
máximo, los operadores deben seguir ciertas reglas, que varían según el tipo de planta
industrial y la organización; en la producción masiva no hay espacio para la improvisación.
Cuando se escoge una zona geográfica para la ubicación de una planta industrial se toman
en cuentan diversos factores, como las características de sus alrededores, el grado de
comunicación que presente con el exterior, el tipo de terreno y, no menos importantes, las
potenciales necesidades futuras de la empresa.
* Proceso repetitivo: la modalidad del tratamiento que se realiza sobre los productos es
por lotes.
* Proceso intermitente: estas plantas organizan su trabajo para satisfacer las demandas
específicas de sus clientes de uno u otro producto o servicio.
Dentro de este grupo, las plantas industriales más comunes suelen ser la maderera, la
petrolera, la carboquímica y la petroquímica.
Los principales tipos de plantas industriales desde este punto de vista son la alimenticia,
la textil, la farmacéutica y la del cemento, la química, la metalúrgica, la siderúrgica, etc