Introducción
Una vez identificados los problemas se establecer relaciones causa efecto a través de un análisis
estructural; las causas determinan los objetivos y los efectos los impactos que se esperan alcanzar
una vez logrado los objetivos. Para medir el logro de objetivos e impactos se construyen
indicadores de proceso y resultado (impacto) que permiten ir midiendo los avances conseguidos
con la implementación del plan.
La ventaja de desarrollar un plan bajo esta metodología, consiste en disponer de una descripción
gráfica sobre las relaciones de dependencia entre los objetivos, esta forma gráfica se denomina
Mapa Estratégico y representa la hipótesis de planificación de la organización. La prueba de esta
hipótesis se obtiene por medio de los indicadores de resultado, con los cuales se va verificando
que las relaciones causa efecto son consistentes, cuando esta condición no se obtiene
(inconsistencia) es señal para revisar y modificar, en lo pertinente, el plan de desarrollo lo que lo
convierte en un instrumento dinámico que da cuenta de los cambios del entorno, tanto social,
económico, político u otro.
El Cuadro de Mando Integral (CMI) es una síntesis de los modelos de contabilidad financiera,
basada en los registros históricos, y de los modelos de creación de ventajas competitivas, en que
se reúne el análisis económico de corto plazo y el análisis estratégico de las variables que
condicionan la actuación de una organización en el largo plazo.
Esta herramienta busca alinear el comportamiento de los miembros de la organización con los
objetivos estratégicos que se desprenden de la visión a largo plazo de tal organización. Esta
finalidad, supone al CMI como un sistema de información que comunica la estrategia en términos
claros y de fácil comprensión, ya que cuando los objetivos estratégicos son poco entendibles,
entonces también son poco comunicables y los resultados a obtener difieren de los objetivos
inicialmente planteados.
¿Qué hacer dentro de la institución para cumplir con las expectativas de los clientes? Los
Procesos de la institución deben estudiarse y evaluarse para conseguir la satisfacción de
los clientes.
La competencia es feroz en este nuevo milenio, por ello la institución debe ser apta para
innovar y mejorar. Los productos y servicios cumplen su ciclo de vida y es necesario
disponer de unos nuevos, con capacidades mayores para los clientes.
Si bien esta herramienta utiliza un lenguaje empresarial, es posible realizar una analogía con una
empresa privada considerando los tres tipos de actores involucrados:
Para estos actores se plantean las siguientes equivalencias con una organización pública:
- Accionistas = Electores.
- Clientes = Usuarios, comunidad.
- Empleados = Funcionarios.
De esta manera el modelo de valor se puede aplicar a un servicio público en los siguientes
términos:
Valor del Servicio (cuya administración ha sido delegada por los electores):
- Oportunidades de desarrollo.
- Clima laboral.
- Reconocimiento y responsabilidades.
- Uso de nuevas habilidades y competencias.
Estos aspectos permiten enfrentar con calidad la gestión de los Servicios Municipales, dando una
respuesta eficaz y eficiente a la comunidad.
Para la identificación de problemas se deben tener presente que los problemas se planteen como
estado negativo que admite más de una alternativa de solución. Estos problemas deben tener un
sustento verificable, no es suficiente la mera percepción, debe existir objetividad en su
identificación.
Para estos efectos, lo problemas deben ser individualizados en fichas que contengan la siguiente
información:
TÍTULO DEL PROBLEMA (Identificar el problema que agrupa las ideas anteriores)
VERIFICADOR (Identifique fuentes primarias y/o secundarias que dan cuenta del
problema)
c. Con los problemas definidos desde las etapas anteriores, se procede a la construcción de
una matriz de influencia y dependencia, la cual es una matriz cuadrada donde la totalidad
de los problemas identificados se colocan en la primera fila y en la primera columna de
dicha matriz (ver figura 1). El propósito de esto es identificar el grado de influencia que
ejerce un problema sobre otro, estableciéndose así una relación de tipo causa efecto.
Dicha relación se obtiene al plantearse la pregunta:
Para dar respuesta se analizan las influencias directas entre los problemas tomados por
pares, detectando la existencia de influencias y evaluando su intensidad por medio de
apreciaciones cualitativas. Si la influencia directa es fuerte se califica con el valor 3, si la
influencia es media con valor 2, si la influencia es baja con el valor 1, y si no hay una
influencia directa se califica con valor 0. Por convención, la diagonal de la matriz queda
con valor cero.
Figura 1.
Al sumar todos los valores situados en una fila se obtiene una “suma activa”, mientras que
a la suma de los valores situados en una misma columna se denomina “suma pasiva”.
Cada problema queda caracterizado por un par ordenado, donde el primer elemento es la
suma activa y el segundo elemento la suma pasiva. El producto de ambas suma será un
indicador del potencial total del problema, lo que permitirá establecer su importancia en
el conjunto de éstos y definir la priorización para abordar su solución.
Esto permite visualizar todos los problemas del sistema en un gráfico de percepción (o
plano de influencia – dependencia, según lo anteriormente dicho). Según esta forma de
percepción, cada problema se presenta como un círculo cuyo diámetro está en función de
su respectiva jerarquía. En un plano cartesiano, el eje de la abscisa corresponde a la suma
activa y el eje de las ordenadas la suma pasiva. Para efectos de graficar los puntos en un
sistema axial, ambas sumas se estandarizan a su forma normal (suma activa estándar y
suma pasiva estándar).
Mayor Dependencia
Menor Dependencia
Problemas Causas: Son todos muy influyentes y poco dependientes. La mayor parte del sistema
depende entonces de estas variables, ubicadas en el cuadro inferior derecho del gráfico de
percepción. Los problemas causales son los elementos más cruciales ya que pueden actuar sobre
el sistema dependiendo de cuánto podamos controlarlas como un factor clave de inercia o de
movimiento. También se consideran como variables de entrada en el sistema.
Problemas Críticos: Son al mismo tiempo muy influyentes y muy dependientes. Estos problemas
ubicados en el cuadro superior derecho del gráfico son, por naturaleza, factores de inestabilidad
puesto que cualquier acción sobre ellos tiene consecuencias sobre los otros problemas. Este factor
de criticidad en el sistema los lleva a identificar como los principales (o centrales) problemas que
deben ser enfrentados y se constituyen en los posibles objetivos centrales para el sistema en su
totalidad.
Problemas efectos: Estos problemas, situadas en el cuadro superior izquierdo del gráfico, son al
mismo tiempo poco influyentes y muy dependientes. Por consiguiente, son especialmente
sensibles a la evolución de los problemas causa y críticos. Son variables de salida del sistema.
Problemas neutros: Son al mismo tiempo poco influyentes y poco dependientes. Estos problemas
están ubicados en el cuadro inferior izquierdo, y parecieran en gran medida no coincidir con el
sistema ya que por un lado no detienen la evolución del sistema, pero tampoco permiten obtener
ninguna ventaja del mismo. Son problemas con evolución autónoma que pueden ser más
influyentes que dependientes, en general pueden ser utilizadas como variables secundarias o
como puntos de aplicación para posibles medidas adicionales.
Problema(s) central(es)
Problemas
neutros Problema Problema Problema
causa 1 causa 2 causa i
Mapa Estratégico
Este mapa se construye al convertir el árbol de problemas en un árbol de soluciones, para los cual
las causas pasan a ser los medios que orientan lo objetivos tácticos del plan, el problema central se
transforma en el objetivo estratégico y los efectos en los fines o impactos esperados. Se mantiene
la misma relación gráfica y se revisa la consistencia objetivo – impacto.
Objetivo Estratégico
El mapa estratégico se construye como una relación causa – efecto entre los objetivos estratégicos
clasificados en las cuatros perspectivas del Cuadro de Mando Integral.
Un indicador es un instrumento que mide objetivamente los cambios que se producen en una
variable, producto de actividades intencionadas, esta definición conlleva identificar las
dimensiones en que se presentan los cambios que producen las actividades del plan. Estas
dimensiones son:
Estas dimensiones permiten medir dos ámbitos del desempeño organizacional: procesos y
resultados (o impactos). Los procesos se refieren al desarrollo de las actividades vinculadas con la
forma en que se realiza un determinado trabajo; un proceso es una acción repetitiva que recibe
insumos y entrega productos con un cierto valor para quien los recibe. Los resultados o impactos,
son los cambios en el comportamiento, estado o actitud de quienes recibieron los resultados de
las actividades; los impactos se caracterizan por tener implícita una dimensión temporal, pueden
ser de corto, mediano o largo plazo.
Los indicadores, independiente de su tipo, deben reunir los siguientes seis atributos:
Luego, se debe verificar el costo (en tiempo o dinero) que significa, por una parte, obtener los
datos para alimentar las variables ¿están disponibles o hay que recopilarlos? y por otra, cuánto
cuesta construir la metodología de cálculo.
Nombre Indicador
Metodología de
cálculo (fórmula)