El Instituto Nacional para la Seguridad y la Salud Ocupacional define la
violencia en el trabajo como: Cualquier asalto físico, conducta amenazadora, o el abuso verbal que ocurre en el ámbito laboral. Esto incluye, pero no se limita a, las palizas, apuñalamientos, tiroteos, suicidios violaciones, intentos de suicidio, traumas psicológicos, tales como amenazas, llamadas telefónicas obscenas, presencia intimidante, y el acoso de cualquier naturaleza, como ser seguido, insultado, o tratado con gritos. En Estados unidos los organismos encargados de fiscalizar y regular las normas son: La OSHA (Administración de Seguridad y Salud Ocupacional) crea y hace cumplir las regulaciones de seguridad laboral. NIOSH (Instituto Nacional para la Seguridad y Salud Ocupacional) investiga las formas de prevenir los riesgos laborales.
En Perú los organismos encargados de fiscalizar y regular las normas son:
Ministro de Trabajo y Promoción del Empleo
Superintendencia Nacional de Fiscalización Laboral (Perú)
El hostigamiento sexual se encuentra regulado por la Ley No. 27942,
Ley de Prevención y Sanción de Hostigamiento Sexual. Por su parte, la definición de hostilidad laboral está prevista en el Texto Único Ordenado de la Ley de Productividad y Competitividad Laboral.
REDUCCION DE LA VIOLENCIA EN EL LUGAR DE TRABAJO
Los especialistas en prevención de la violencia recomiendan que los empleadores tomen medidas específicas para reducir la violencia en los lugares de trabajo. En primer lugar, se recomienda que las organizaciones investiguen minuciosamente a los aspirantes al puesto para detectar antecedentes de propensión a la violencia. Los empleadores pequeños pueden contratar investigadores externos para que verifiquen los antecedentes a cambio de honorarios muy bajos. (Recuerde, los empleadores pueden ser acusados de negligencia en sus prácticas de contratación ante la ley por no investigar a fondo a los aspirantes. Un empleado puede demandar a un empleador por negligencia si puede demostrar que éste sabía, o debería haber sabido, que la persona no era apta y aun así la contrató y la retuvo). En segundo lugar, se puede capacitar a los gerentes y a los supervisores para que reconozcan indicadores de violencia. INDICADORES DE VIOLENCIA Las conductas siguientes deben ser tomadas en cuenta para evaluar situaciones de posible violencia: • Cambios evidentes de humor o de comportamiento; desaliento. • Destrucción deliberada del equipo del lugar de trabajo; sabotaje. • Comportamiento agresivo o declaraciones de intimidación. • Tensión grave, problemas legales o financieros en la vida personal. • Violencia contra un miembro de la familia. • Abuso de sustancias. • Insubordinación y fuerte reacción a las críticas.
La OSHA ha emitido cinco recomendaciones para prevenir la
violencia en el lugar de trabajo: 1. Compromiso de la administración en la prevención de actos de violencia y participación de los empleados en dicha prevención. 2. Análisis del lugar de trabajo para descubrir áreas de posible violencia. 3. Prevención y control de la violencia diseñando lugares y prácticas de trabajo seguras. 4. Capacitación para la prevención de la violencia en toda la organización. 5. Evaluación de la efectividad del programa sobre violencia.
EMERGENCIAS EN EL LUGAR DE TRABAJO
Debido a que el departamento de recursos humanos de una organización trata con todos los empleados, se encuentra en una posición ideal para encabezar el esfuerzo de planificación para casos de emergencia, tratar con ellos y después prestar asistencia a los empleados. Según la OSHA, una emergencia en el lugar de trabajo es una situación imprevista que pone en peligro a los empleados, clientes o público en general: interrumpe o cierra operaciones, que causan daño físico o ambiental. Las emergencias pueden ser naturales o provocadas por el hombre. Ademas de la violencia en el lugar de trabajo, se pueden incluir los siguientes: Inundaciones Huracanes Tornados Incendios Emisiones de gases toxicos Derrames de productos químicos Accidentes radiológicos Explosiones Disturbios civiles y el terrorismo La OSHA requiere que las empresas tengan planes de acción de emergencia para hacer frente a incidentes como estos. Plan de acción de emergencia Pian que una organización desarrolla y que contiene paso a paso los procedimientos para hacer frente a diversas situaciones de emergencia. La OSHA requiere que las empresas tengan planes de acción de emergencia para hacer frente a incidentes como estos. Un plan de acción de emergencia debe incluir, entre otras cosas, los procedimientos para informar de un incendio u otra emergencia, evacuación de un centro y contabilizar a los empleados después de una evacuación. El plan también debe incluir procedimientos para los empleados que deben permanecer instalaciones para garantizar que las operaciones críticas de la planta sigan, así como los procedimientos para los trabajadores que realizan tareas de rescate y médicos Una copia del plan de acción de emergencia debe ser proporcionada a los empleados o mantenerse en un lugar conveniente donde los empleados pueden acceder a él. Equipos de manejo de crisis Estos equipos, integrados por empleados por hora y gerentes, dirigen encuestas sobre evaluación de riesgos de conducta inicial, desarrollan planes de acción para responder a situaciones violentas y, lo que es más importante, realizan intervenciones de crisis durante encuentros violentos o que pueden ser violentos. Por ejemplo, un equipo de manejo de crisis investigaría una amenaza reportada por un empleado. La orden del equipo sería reunir hechos sobre la amenaza, decidir si la organización debe intervenir y, si es así, determinar el método más apropiado para hacerlo. De vez en cuando se llamará a un miembro del equipo o a un gerente para intervenir y calmar a un empleado enfadado. Cuando suceden incidentes violentos en el trabajo, como la muerte de un compañero, los empleados pueden experimentar un estado de conmoción, culpabilidad, pena, apatía, resentimiento, cinismo y una serie de emociones. Después de un incidente de violencia los empleados se asustan y es posible que no quieran volver al trabajo. Tales incidentes pueden exigir que el equipo de manejo de crisis realice una intervención por medio de técnicas de asesoramiento.