OBTURACIÓN

Objetivo:
Mantener aislada la preparación de los conductos del resto del organismo de una manera hermética, de igual
manera manteniendo un buen sellado apical evitando que se introduzcan bacterias y esto ocasione una inflamación.

TÉCNICA DE CONDENSACIÓN LATERAL

1. Calibrado de la zona apical del conducto: La lima apical maestra indica el calibre de la zona más apical del
conducto, se debe medir con una lima manual.
2. Elección del espaciador: Con una longitud de menos de 1-2 mm de la longitud de trabajo, para un buen
sellado apical.
3. Elección de punta maestra: Se selecciona del mismo calibre de la lima maestra obtenida, se coloca dentro
del conducto húmedo mediante una pinza, si queda muy corta se tiene que probar con una de un calibre
menor o, por el contrario, si sobrepasa del límite se tendrá que elegir una de un calibre mayor.
4. Secado del conducto: Se realiza con puntas de papel del mismo calibre que la lima maestra obtenida, hasta
obtener una punta de papel completamente seca al introducirla en el conducto.
5. Introducción del sellador: Se introduce en el conducto seco, impregnando la lima apical maestra hasta la
longitud total del conducto, o también utilizando la punta de gutapercha.
6. Introducción de la punta principal: Se introduce la punta impregnada de sellador.
7. Condensación de puntas accesorias: Se introduce el espaciador elegido y se aplica una fuerza no excesiva
hacia apical, se deja en esa posición de 1-2 segundos, para retirarlo se realizan movimientos rotatorios en
sentido horario y antihorario, se coloca punta accesoria de preferencia de menor calibre y se repite la
secuencia hasta que el espaciador no pueda penetrar de 1-2 mm en el conducto.
Se recorta el excedente de punta con un instrumento al rojo vivo a 1 mm por debajo del conducto y se
condensa verticalmente.
8. Cuidados finales: Preferentemente colocar una obturación provisional para evitar una microfiltración
bacteriana.