Anda di halaman 1dari 72

CONCEPTOS Y BASES GENERALES DE LA PLANEACIÓN DEL USO DE LA TIERRA.

La planificación del uso de la tierra se define como: el proceso mediante el cual se señalan
formas óptimas de uso y manejo de la tierra, considerando las condiciones biofísicas,
tecnológicas, sociales, económicas y políticas de un territorio en particular.

El objetivo de la planificación del uso de la tierra es el influir, controlar o dirigir cambios en


el uso de esta, de tal forma que se dedique al uso más beneficioso, mientras que se
mantiene la calidad del ambiente y se promueve la conservación de los recursos.

El diagnóstico territorial y la generación de alternativas de manejo y de protección


ambiental para la planificación del uso de la tierra producen el conocimiento necesario
indispensable para la formulación de las políticas de uso contribuyendo a la búsqueda de
actividades y sistemas productivos y extractivos competitivos y sostenibles.

El proceso metodológico de planificación del uso de la tierra, contribuye

a: orientar la localización de las actividades económicas y sociales respecto a la aptitud


de la tierra y aportar soluciones a conflictos de uso; indicar la base de recursos naturales
que deben permanecer y las áreas protegidas; señalar las áreas expuestas a amenazas
naturales y su manejo; identificar las actividades y sistemas productivos y extractivos
sostenibles; orientar la planificación de los usos del suelo e indicar las áreas que requieren
de proyectos de adecuación o recuperación de tierras.

El paisaje es la expresión y el resultado de la combinación dinámica, por lo tanto inestable,


de elementos físicos, biológicos y antrópicos que interactúan dialécticamente unos sobre
los otros y hacen del mismo un conjunto único e indisociable en continua evolución.

"Respecto a la síntesis del paisaje, hay que tener presente que las delimitaciones
geográficas son arbitrarias y es difícil encontrar un sistema categórico espacial por ahora,
que respete los límites propios a cada orden de fenómenos. No obstante, se puede
considerar una categorización de los paisajes con criterios físicos dominantes, si se
establecen de antemano las limitaciones" (Bertrand, 1968).

La zonificación no debe ser considerada como el fin en sí, sino solamente como un medio
de aproximación con relación a la realidad geográfica. En lugar de imponer categorías
preestablecidas se trata de buscar las discontinuidades del paisaje.

El sistema de categorías (taxonomía) debe permitir una profundización (nivel) de los


paisajes en función de su escala.

1
Para cada orden de fenómenos existen umbrales de manifestación y de "extinción" que por sí
solos pueden justificar la diferenciación sistemática de los paisajes en unidades jerarquizadas.
Esto es lo mismo que decir que la definición de un paisaje es función de la escala.

En el seno de un sistema de categorías los elementos climáticos y estructurales dominan dentro


de las unidades superiores y los elementos biogeográficos y antrópicos en las unidades
inferiores.

ANÁLISIS INTEGRADO DEL PAISAJE

La teoría de la ecología del paisaje constituye una alternativa apropiada para el estudio integrado
del paisaje o zonificación ecológica. Aporta fases para el análisis de la dimensión espacial y
temporal en el estudio de las características estructurales y funcionales de los ecosistemas y
contribuye a presentar la dinámica de los procesos ecológicos.

La Ecología del Paisaje permite combinar la aproximación horizontal del análisis espacial de los
fenómenos naturales empleados por los geógrafos (análisis de relaciones espaciales entre los
diferentes elementos que conforman el paisaje), con la aproximación vertical del análisis de los
biólogos (estructuras y funciones de los seres en un espacio determinado).

El paisaje es definido como una porción de la superficie terrestre con patrones de


"homogeneidad", consistente en un complejo de sistemas conformados por la actividad de las
rocas, el agua, el aire, las plantas, los animales y el hombre, que por su fisonomía es una entidad
reconocible y diferenciable de otras vecinas.

El paisaje es la expresión y el resultado de la combinación dinámica, por lo tanto inestable, de


elementos físicos, biológicos y antrópicos que interactúan dialécticamente unos sobre los otros
y hacen del mismo un conjunto único e indisociable en continua evolución. La dialéctica es el
fundamento mismo del método de investigación.

La escala es determinante e inseparable del estudio del paisaje. Las diferentes disciplinas
especializadas en el estudio de un aspecto del paisaje se apoyan sobre un sistema de
clasificación sistemático y jerarquizado, formado por unidades homogéneas en razón de la
escala (clasificaciones fisiográficas, climáticas, pedológicas, biogeográficas, fitogeográficas,
etc.).

Las unidades homogéneas clasificadas y jerarquizadas por las diferentes disciplinas son
unidades específicas. Estas unidades se pueden calificar como "elementales" frente al complejo
formado por el paisaje, por lo tanto en el análisis de éste, deben tenerse en cuenta aquellas
unidades que presentan un interés significativo, desde el punto de vista de la categorización
(taxonomía) de los paisajes (adaptado de Tricart y Brunet).

Los biogeógrafos modernos definieron el "ecosistema", estableciendo el énfasis sobre las


cadenas y redes tróficas (Dauvigneaud y Tanghe7). El ecosistema no tiene escala, ni soporte
espacial definido (puede ser el océano o una charca), no es por lo tanto un concepto geográfico.
En este sentido es mejor no reajustar o adecuar la taxonomía biogeográfica. Mejor, escoger
libremente unidades globales adaptadas al estudio de los paisajes. Varias tentativas se han
realizado en este sentido.

2
El paisaje concebido como una entidad "holística" debe analizarse, sintetizarse y especializarse
como tal.

Manejo de Cuencas

Un proceso importante al inicio de la planificación es identificar el objetivo del manejo de la


Cuenca, Sub-cuenca o Microcuenca. Esta información se obtiene del diagnóstico.

La efectividad de la planificación como proceso es amplia y diversa, se ha elaborado planes de


manejo para diferentes propósitos, con diversos enfoques, componentes y necesidades de
recursos. Muchos han involucrado grandes áreas y el detalle del diseño a veces no ha logrado
ser muy específico. El proceso tradicional ha sido normativo, ordenador, bajo criterios técnicos
y con poca base social.

Plan global y plan de Microcuenca

Usos del suelo


El uso del suelo comprende "las acciones, actividades e intervenciones que realizan las personas
sobre un determinado tipo de superficie para producir, modificarla o mantenerla" (FAO, 1997a;
FAO/UNEP, 1999).1
El uso del suelo abarca la gestión y modificación del medio ambiente natural para convertirlo en
terreno agrícola: campos cultivables, pastizales; o asentamientos humanos. El término uso del
suelo también se utiliza para referirse a los distintos usos del terreno en zonificaciones.
Las prácticas de uso del suelo varían de manera considerable en diferentes partes del mundo.
La División de Desarrollo del Agua de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación
y la Agricultura explica que "El uso del suelo comprende los productos y/o beneficios que se
obtienen del uso de la tierra como también las acciones de gestión del suelo (actividades) realizadas
por los humanos para producir dichos productos y beneficios." A comienzos de la década de 1990,
aproximadamente el 13% de la superficie de la Tierra era considerada tierra arable, con 26% de
pastos, 32% de bosques, y 1,5% de zonas urbanas.
Tal como indicó Albert Guttenberg (1959), "'El uso del suelo' es un término clave en el lenguaje de
la planificación de ciudades." Por lo general, las jurisdicciones políticas realizan la planificación
sobre el uso del suelo y lo regulan en un intento de evitar conflictos. Los planes de uso del suelo

3
son implementados mediante la división del suelo y regulaciones sobre su uso, tales como su
zonificación. Las empresas de consultoría de gestión y las Organizaciones no
gubernamentales intentan influir sobre estas regulaciones antes de ser aprobadas y promulgadas.

Factores Sociales
El hombre, desde la prehistoria, ha actuado sobre la naturaleza con el fin de dominarla y
explotarla (transformarla, depredarla y destruirla). Con el desarrollo de la inteligencia, ha llegado
a controlar incluso varios de sus procesos fundamentales.
El medio ambiente natural, es la base físico-espacial donde se desarrolla la sociedad y donde
se llevan a cabo las relaciones de ésta con otras sociedades. Estas relaciones constituyen
sistemas abiertos que componen un todo, a su vez, las comunidades urbanas, se ubican en
espacios geofísicos que componen ecosistemas.
El vínculo entre sociedad y la naturaleza se encuentra en la relación recíproca en que influyen
ambos factores entre sí, es decir, tanto la naturaleza tiene influencia en la sociedad, como la
sociedad sobre la naturaleza. Esta relación se da sobre dos hechos principales: el primero que
se refiere a las acciones que el hombre realiza y que inciden en la naturaleza. El segundo se
refiere a los efectos ecológicos que se generan en la naturaleza y que influyen en la sociedad
humana. Dentro de este proceso, intervienen otros elementos, los cuales desde la perspectiva
de la sociedad son: 1. los sujetos que realizan las acciones, es decir, los seres humanos, ya sea
a través de nuestras acciones directas o a través de nuestras diferentes actividades laborales;
2. las razones que los motivan a realizarlas, se encuentran las diferentes actividades laborales
que llevamos a cabo; 3. los sujetos sobre los que inciden dichas acciones, el medio ambiente
constituido por el aire, el suelo, el subsuelo y el agua; y 4. la manera como inciden los efectos
de las acciones en la sociedad.

Factores Económicos

En cuanto a lo económico, la sociedad a lo largo de la historia ha dependido de la producción


económica a través del trabajo social. Este trabajo social, no se limita a las relaciones hombre-
naturaleza, sino que también se da entre individuos y entre grupos de individuos. Al mismo
tiempo, este trabajo se va desarrollando en el ámbito individual como en lo colectivo. Encuentra
su expresión en las llamadas fuerzas productivas y en la intensidad de la firmeza humana sobre
la naturaleza. En aras de la producción económica y el desarrollo, el individuo transforma la
naturaleza de acuerdo con sus necesidades y posibilidades. Una parte esencial de las fuerzas
productivas es el ecosistema

Factores Culturales

Es necesario construir nuevos modelos que ayuden a definir nuevamente el desarrollo con una
visión más conciliadora con la naturaleza. Sin embargo, para que esto se llegue a dar se necesita
un cambio profundo que se lleve a cabo desde el ser humano hacia afuera, es decir, que se
refleje en la sociedad y en las formas superiores de organización. Lo anterior se puede lograr a
través de un cambio cultural, ya que hasta nuestros días, la actitud del ser humano ha sido
transformar el medio en lugar de cambiar al hombre, lo que es un reflejo de la cultura tecnocrática
y economicista, que tendrá que superarse para dar paso a un nuevo tipo de desarrollo.

Factores Políticos

Los conflictos socioeconómicos y políticos, las críticas y propuestas de la ecología, la influencia


y las presiones de los movimientos ecologistas, fuerzan a los Estados, principalmente a los
desarrollados, a crear políticas nacionales y acuerdos internacionales. Pero al elaborar estas
4
estrategias se reflejan conflictos de intereses, el Estado se va convirtiendo en propietario de la
naturaleza, de los bienes y espacios públicos. “... la naturaleza es vista y tratada como objeto
programado para la explotación irrestricta; las tierras agrícolas como simples espacios de
producción; los bosques como fuentes de madera; los lagos y ríos como reservas de agua; y las
personas como unidades productivas y consumidoras.”

Evaluación del aspecto legal y ambiental que determinan el uso de la tierra.

El propósito de la evaluación ambiental es asegurar, al planificador, que las opciones de


desarrollo bajo consideración sean ambientalmente adecuadas y sustentables, y que toda
consecuencia ambiental sea reconocida pronto en el ciclo del proyecto y tomada en cuenta para el
diseño del mismo. Es de vital importancia que el planificador tenga en cuenta el conjunto de
elementos del sistema ambiental, que le permitan un análisis holístico de la situación a evaluar,
tomando en cuenta las potencialidades y oportunidades con que cuenta.
La evaluación ambiental identifica maneras de mejorar ambientalmente los proyectos y minimizar,
atenuar, o compensar los impactos adversos. Alertan pronto a los diseñadores del proyecto, las
agencias ejecutoras, y su personal, sobre la existencia de problemas, por lo que las evaluaciones
ambientales:

 Posibilitan tratar los problemas ambientales de manera oportuna y práctica;


 Reducen la necesidad de imponer limitaciones al proyecto, porque se puede tomar los pasos
apropiados con anticipación o incorporarlos dentro del diseño del proyecto; y,
 Ayudan a evitar costos y demoras en la implementación producidos por problemas
ambientales no anticipados.
Así mismo la evaluación ambiental permite ponderar las oportunidades de mejoramiento en la
calidad y equilibrio de un sistema en función del factor antrópico que se ve afectado positiva o
negativamente pero de manera directa.
Las evaluaciones ambientales también proporcionan un mecanismo formal para la coordinación
interinstitucional, y para tratar las preocupaciones de los grupos afectados y organizaciones no
gubernamentales locales. Además, pueden desempeñar un papel central en el fortalecimiento de
la capacidad ambiental del país, de este modo el proceso que se lleva a cabo en la evaluación
ambiental y en las evaluaciones ambientales permiten identificar las potencialidade del país no solo
en términos ecológicos, sino también en relación con la capacidad de transformación que tienen
las mismas comunidades o grupos humanos.
Al igual que los análisis económicos, financieros, institucionales y de ingeniería, la evaluación
ambiental forma parte de la preparación de un proyecto, y por tanto es responsabilidad del
prestatario. La evaluación ambiental se encuentra íntimamente ligada a otros aspectos de la
preparación del proyecto, lo cual garantiza que:

 Las consideraciones ambientales cobren su debida importancia durante la toma de


decisiones referentes a la selección, ubicación y diseño del proyecto; y,
 Su realización no retrase indebidamente el procesamiento del proyecto. Así mismo es
importante que no todos los desequilibrios de un sistema ecológico puede considerarse una
problemática ambiental, pues dicho desequilibrio puede devenir precisamente de alguna alteración
natural en las cadenas tróficas de los organismos que se encuentran involucrados.

5
Tipos de análisis ambiental
Evaluaciones ambientales para proyectos específicos
Las evaluaciones ambientales para proyectos específicos sirven para analizar justamente estos
proyectos específicos de inversión (p.ej. represas, fábricas, sistemas de riego), que presentan
problemas ambientales significativos. El detalle y la sofisticación del análisis deben ser en función
a los impactos anticipados.
Una evaluación ambiental para un proyecto específico debe normalmente abarcar:

 Las actuales condiciones ambientales de "base"; es decir que la construcción de la línea


base ha de ser el principal punto de partida para la posterior emisión de un concepto al rededor del
sistema ambiental.
 Los potenciales impactos ambientales directos e indirectos, incluyendo oportunidades para
mejorar el medio ambiente; sin que se provoque detrimento de ninguno de los demás componentes
del sistema ambiental.
 La sistemática comparación ambiental entre las alternativas para inversión, ubicación,
tecnología y diseño; buscando siempre la conservación del recurso y la maximización del mismo
pero con un alto sentido de responsabilidad social y sostenibilidad.
 Las medidas preventivas, atenuantes y compensatorias, generalmente en forma de un plan
de acción; que necesariamente incluyan el criterio de la población que se ve directa e
indirectamente afectada, para que con base en su participación, sean medidas de compensación
consensuadas y no impuestas.
 La administración y capacitación ambiental; y,
 El seguimiento a cada uno de los pasos del proceso.
En lo posible, deben ser cuantificados el capital y los costos periódicos, los requerimientos de
selección, capacitación y monitoreo del personal ambiental, y los beneficios de las alternativas y
medidas atenuantes propuestas. Debran también indicarse las cargas energéticas e intercambios
que se producirán como parte del proyecto a implementar partiendo de la presente evaluación
ambiental.

Las evaluaciones ambientales regionales y sectoriales

Se emplean las evaluaciones ambientales Regionales cuando varias actividades significativas de


desarrollo, cuyos impactos son potencialmente acumulativos, son planificadas para un área
relativamente reducida. En tales casos, generalmente son más eficientes que una serie de
evaluaciones para proyectos específicos, y pueden identificar problemas que éstos últimos podrían
pasar por alto (p.ej. la interacción entre desechos, o la competencia para el uso del agua o la tierra).
Las evaluaciones regionales comparan los escenarios alternativos de desarrollo, recolectando
información diagnostica sobre el conjunto de potencialidades naturales y humanas en el marco de
los planes de ordenamiento del territorio y recomendando tasas de crecimiento y modelos y políticas
ambientalmente sustentables para el uso de la tierra. El área del estudio es normalmente definida
a partir de consideraciones físicas o biológicas (p.ej. área climática, tipo de hábitat, cuenca de un
río), y puede, a veces cruzar las fronteras nacionales; sin embargo, las evaluaciones ambientales
regionales con enfoque institucional podrían regirse más bien por fronteras administrativas y que
contemplan en análisis de emplzamiento de las poblaciones y el área de influencia y de acción en
el radio de la zona a afectar o intervenir mediante el proyecto para el cual se realizará la evaluación
ambiental.

6
La evaluación ambiental sectorial es empleada en el diseño de programas de inversiones
sectoriales. Es particularmente adecuado para estudiar:

 Las alternativas de inversión sectorial;


 El efecto de los cambios en la política sectorial;
 Las capacidades instalada y de capital humano así como los requisitos institucionales para
el estudio, implementación y monitoreo ambiental a nivel sectorial; y,
 Los impactos acumulados de muchas inversiones similares y, relativamente, pequeñas que
no ameritan evaluaciones ambientales individuales para proyectos específicos. es decir que deben
tenerse en cuenta los proyectos que precedieron la propuesta para la cual se está levantando la
línea base y construyendo la evaluación ambiental.
En algunos casos, las evaluaciones ambientales regionales o sectoriales cumplen con todos los
requisitos normales de evaluaciones ambientales para proyectos específicos. Con mayor
frecuencia, aún son necesarias, estas últimas, para importantes inversiones, pero las evaluaciones
ambientales regionales o sectoriales habrán identificado los problemas pertinentes, recolectado
gran parte de los datos y, en general, reduciendo notablemente el trabajo necesario para las
evaluaciones de impactos ambientales de proyectos específicos.

Caracterización y diagnóstico del uso de la tierra

La caracterización1 está dirigida a cuantificar las variables que tipifican a la cuenca con el fin de
establecer la vocación, posibilidades y limitaciones de sus recursos naturales y el ambiente, así
como las condiciones socioeconómicas de las comunidades que la habitan. En el proceso de
manejo de cuencas, la caracterización cumple tres funciones fundamentales: 1) describir y
tipificar las características principales de la cuenca; 2) sirve de información básica para definir y
cuantificar el conjunto de indicadores que servirán de línea base para el seguimiento, monitoreo
y evaluación de resultados e impactos de los programas y proyectos de manejo de cuencas; y
finalmente 3) sirve de base para el diagnóstico, donde se identifican y priorizan los principales
problemas de la cuenca se identifican sus causas, consecuencias (efectos) y alternativas de
soluciones (Jiménez 2007).

Por lo tanto, la caracterización constituye para el presente estudio el componente base sobre el
cual se edifica la planificación e implementación del Plan de Manejo, identificado desde una
perspectiva biofísica, económica, social y política administrativa. Los componentes y variables
que se incorporan en la caracterización de la cuenca se agrupan en tres grandes temas: 1)
ubicación, morfometría e hidrología; 2) caracterización biofísica; y 3) caracterización
socioeconómica, que se detallan a continuamente.

ELABORACIÓN DE MAPAS DE USO DE LA TIERRA


La metodología a seguir en la realización de mapas usos del suelo ha variado a lo largo de la
historia. En un principio la parte básica del proceso se sustentaba en el trabajo en campo, siendo
una fase posterior el volcado en planos o mapas de la información así adquirida en los llamados
“Inventarios Agronómicos”. Actualmente el trabajo de campo sigue siendo insustituible aunque
ha variado en su concepción como consecuencia del desarrollo de herramientas cartográficas
que permiten el trabajo “ex situ”. El uso de Sistemas de Información Geográfica (SIG), imágenes
de satélite, fotos aéreas, etc., traslada el reconocimiento de campo al proceso de validación;
además este tipo de herramientas posibilitan la elaboración de un Mapa de Cultivos y
Aprovechamientos más preciso y, al reducir los tiempos de elaboración, más “ágil”.

Esquematización de los pasos a seguir para la elaboración de un mapa de usos de suelo


7
1. Establecer la escala sobre la que se quiere trabajar
2. Identificar las diferentes Unidades Cartográficas homogéneas.
3. Definir las clases de cultivos a representar
4. Definir colores representativos de las clases
5. Definir las sobrecargas y códigos
6. Relacionar las Unidades Cartográficas con clases de cultivos y asignarles el color
correspondiente
7. Añadir a cada Unidad Cartográfica su sobrecarga (si corresponde) y códigos.
8. Elaborar la leyenda y publicar el mapa.

Elección de la escala de trabajo

La elección de la escala de trabajo (Paso 1) queda supeditada a la extensión de la zona de


estudio. En España la cartografía topográfica base sobre la que se realizan los mapas temáticos
es a escala 1/50.000.

Identificación de las unidades cartografiables

Tras la elección de la escala y con datos reales sobre los usos y aprovechamientos del suelo
(obtenidos bien sea por trabajo de campo, imágenes de satélite, fotos aéreas o cualquier otra
fuente de información), pasamos a definir Unidades Cartografiables en atención a la
homogeneidad de los usos. (Figura nº 1)

Aplicación de las metodologías de clasificación de tierras para la planeación del uso de la tierra.

Un Tipo de Utilización de la Tierra puede cubrir un cierto número de especies producidas en un


ambiente socioeconómico particular usando insumos y operaciones que están a menudo
relacionadas, mientras que un sistema de producción se refiere a los productos obtenidos de un
solo cultivo o de la producción animal así como a las operaciones necesarias para producirlos.
Conceptualmente, un Tipo de Utilización de la Tierra se puede referir también a los usos de la
tierra tales como parques nacionales o reservas forestales, que no son necesariamente
considerados sistemas de producción.
8
Un gran número de sistemas de producción potenciales pueden emerger de las numerosas
combinaciones teóricas de los productos, el manejo y los insumos. Es importante limitar esas a un
número que se pueda manejar y elegir las modificaciones de los sistemas de producción existentes
que sean realistas y de acuerdo con los objetivos de los interesados.

Una lista de los requerimientos de cada sistema de producción o Tipo de Utilización de la Tierra
debería considerar que los requerimientos dependen en gran medida del método analítico usado
para la evaluación de la tierra.

Tanto para la evaluación de la tierra como para la posterior planificación del uso de la tierra, el
análisis de los datos puede ser facilitado si los datos recolectados de fuentes secundarias,
encuestas de campo y valoraciones participativas rurales y valoraciones rápidas rurales son
almacenadas sistemáticamente en un formato ordenado de fácil clasificación y recuperación.
Aunque el acceso a los ordenadores no es esencial para las actividades de planificación del uso de
la tierra, la disponibilidad de ordenadores simples y de programas de bases de datos pueden ayudar
en esas operaciones.

A nivel de comunidad, donde los ordenadores pueden no estar disponibles, la organización y


disponibilidad de la información continuará a ser, sin embargo, un punto crítico.

Las bases de datos pueden ser construidas a partir de programas comerciales o de bases de datos
específicas.

Evaluaciones para fines específicos. Esquema de evaluación FAO.

The FAO Framework forLandEvaluation

El esquema para la Evaluación de Tierras de la FAO (1976 y posteriores guías: es considerado


como un sistema estándar de referencia en todo el mundo, y ha sido aplicado tanto en países
desarrollados como en zonas del tercer mundo.
Este sistema no constituye un método completo sino sólo un esquema, un armazón común sobre
el que se desarrollan los sistemas para cada uso concreto del suelo. El sistema se basa en los
siguientes conceptos:

i) Se califica la tierra no sólo el suelo.


ii) La evaluación ha de ser definida para un uso específico de la tierra (cultivo y manejo).
iii) La evaluación ha de tener en cuenta tanto las condiciones físicas como las económicas.
iv) El concepto de Evaluación de Tierras es esencialmente económico, social y político.
v) La evaluación requiere una comparación entre dos o más alternativas de uso.
vi) La Evaluación de Tierras ha de proponer un uso que sea sostenible.
vii) a Evaluación de Tierras requiere de un estudio multidisciplinar.

No obstante, según lo que se expuso en el primer tema de evaluación, nosotros a la hora de aplicar
este esquema de Evaluación de Tierras solo haremos la parte del estudio que se refiere a la
Evaluación de Suelos.

En el esquema se reconocen cuatro categorías. La más alta categoría es el Orden que refleja, a
grandes rasgos, si un suelo es apto o no para un uso concreto. Se reconocen dos órdenes:

9
S = Si apta (Suitable). Tierras en las que los beneficios superan costos y el uso sostenido de la
tierra no la incapacita en un período de tiempo suficientemente largo.

N = No apta (Notsuitable). Las tierras pueden clasificarse como no aptas para un uso determinado
por una diversidad de razones. Puede ocurrir que el uso propuesto sea técnicamente impracticable,
tal como el riego de tierras rocosas escarpadas, o que provoque una grave degradación ambiental,
como el cultivo en laderas escarpadas. Frecuentemente, sin embargo, la razón es de tipo
económico: el valor de los beneficios esperados no justifica los costos de los insumos que
serían necesarios. La segunda categoría es la Clase que refleja grados de aptitud dentro del orden.
Se enumeran de un modo consecutivo, mediante cifras arábigas.

Para el Orden S se consideran tres clases:

S1 = Altamente apta. Sin limitaciones para el uso sostenido o limitaciones de menor cuantía que
no afectan la productividad ni aumentan considerablemente los costos.
S2 = Moderadamente apta. Limitaciones moderadamente graves que reducen los beneficios, o
implican riesgos de degradación en el empleo sostenido del suelo.S3 = Marginalmente apta. Las
limitaciones para el uso sostenido son graves y la balanza entre costos y beneficios hace que su
utilización solo se justifique de forma marginal. Su empleo se justifica, normalmente, por razones
distintas a las económicas.

En el Orden N se reconocen también tres clases:


N1 = No apta actualmente. Tierras cuyas limitaciones podrían eliminarse con medios técnicos o
insumos, pero que estas modificaciones en la actualidad son impensables.

N2 = No apta permanentemente. Limitaciones graves, de índole generalmente física, que se


suponen insalvables a largo plazo.

X = Tierras para conservación. No apta para su explotación, tierras de especial protección, debido
a su conservación, vida silvestre, de especial interés científico ecológico o de interés social (como
parques, reservas, o zonas de recreo).

Los límites entre los órdenes (S y N) y entre las diferentes clases (S1, S2, S3 y N1, N2) se
establecen por la presencia de factores limitantes. Un factor limitante es una característica del suelo
que dificulta su empleo, reduce la productividad, aumenta los costos e implica riesgos de
degradación, o todo a la vez.

Los factores limitantes se usan para definir la tercera categoría del sistema que es la Subclase, que
representa el tipo o tipos de limitación principales. El número de limitaciones que figuren en el
símbolo de cada subclase debe ser el mínimo para que el resultado sea manejable. Una, o rara
vez, dos letras bastarán normalmente. Las limitaciones propuestas: t, pendiente; e, riesgo de
erosión; p, profundidad; s, salinidad; d, drenaje; c, deficiencia bioclimática; r, rocosidad /
pedregosidad; i, riesgo de inundación, pero pueden ser modificadas en función de las necesidades
de cada evaluación.

Por último, la cuarta categoría es la Unidad que establece las diferencias dentro de las subclases
en función del uso deseable. Todas las unidades dentro de una subclase (S2rA, S2rM, ...) tienen el
mismo grado de aptitud a nivel de clase (S2) y características análogas de limitación a nivel de
subclase (r), pero con diferente manejo (A o M, en el ejemplo). Las unidades difieren entre sí en
sus características de producción o en aspectos secundarios de sus exigencias de ordenación. Su

10
reconocimiento permite una interpretación detallada a nivel de planificación de la explotación. Las
unidades se distinguen mediante letras mayúsculas que se colocan al final. No hay límite alguno
para el número de unidades reconocidas dentro de una subclase. Las definidas, en un principio
son: A, intensificación en el uso agrícola sin necesidad de grandes mejoras; M, intensificación en
el uso agrícola con necesidad de mejoras importantes (riego, etc); P, dedicación a pastos para uso
ganadero; F, repoblación forestal.

La nomenclatura quedaría así:

USDA

El Proyecto de Evaluación de Suelos y Valoración de Sitios se inició en 1990 con financiamiento


del Servicio de Conservación de Recursos Naturales del USDA (entonces el Servicio de
Conservación de Suelos). El propósito del proyecto fue inventariar el uso de ESVS en Estados
Unidos y evaluar los sistemas ESVS en estudios de caso seleccionados. Los principales
investigadores fueron Frederick Steiner de la Universidad Estatal de Arizona, Robert Coughlin,
Coughlin, Keene y Asociados y James Peace, de la Universidad Estatal de Oregon. Los
productos obtenidos de este proyecto incluyen: la Conferencia Nacional ESVS; el artículo Status
of State and Local LESA (LandEvaluation and SiteAssessment) Programs, publicado en Journal
of Soil and WaterConservation (1994); AgriculturalLandEvaluation and SiteAssessment: Status
of State and Local Programs (1991), el cual resume los resultados de una encuesta nacional y
describe mas de 200 sistemas ESVS estatales y locales; el libro A Decadewith LESA:
TheEvolution of LandEvaluation and SiteAssessment (1994), que corresponde a una colección
editada de artículos de investigación acerca de varios aspectos de ESVS; y finalmente esta Guía.
Los participantes de la conferencia nacional ESVS mencionaron la necesidad de un nuevo
manual ESVS donde poder incorporar nuevas experiencias acumuladas desde la publicación del
Manual ESVS original en 1983. Este proyecto no habría podido ser llevado a cabo sin el soporte
11
y orientación de Lloyd Wright, Director de la oficina de Conservación y Protección de
Ecosistemas del Servicio de Conservación de Recursos Naturales en Washington. Lloyd escribió
la versión original del Manual ESVS y ha sido un fuerte defensor de una visión sistemática hacia
la evaluación y protección de suelos agrícolas.

INAB

La tierra es un recurso limitado y no renovable y el crecimiento de la población humana determina


la existencia de conflictos en torno a su aprovechamiento. Es urgente armonizar los diversos
tipos de tierras con el aprovechamiento más racional posible, a fin de optimizar la producción
sostenible y satisfacer diversas necesidades de la sociedad, conservando al mismo tiempo, los
ecosistemas frágiles y la herencia genética (FAO 1994). Esta armonización de tipos de tierras
con tipos de usos es posible con la planificación del uso, partiendo de la evaluación sistemática
del potencial de la tierra y del agua, de las alternativas de su aprovechamiento, y de las
condiciones económicas y sociales que orientan la selección y adopción de las mejores opciones
(FAO 1985, 1994). Dentro de la planificación del uso de la tierra una etapa importante es la
determinación de la aptitud de la misma. Un primer acercamiento a una evaluación de la aptitud
de tierras es la determinación de su capacidad de uso en términos biofísicos, basado en un
sistema de clasificación. Las clasificaciones en la actualidad se diferencian de las evaluaciones
en su carácter relativamente estable y en su propósito de ordenar por clases o categorías; por
otro lado, las evaluaciones asignan y calculan valores a la tierra dentro de una connotación de
aptitud física y económica (Celada 1993; Ritchers 1995). La limitante de las evaluaciones lo
constituye el hecho de que requieren sistemas de información con respecto a las tierras y/o los
tipos de uso que muchas veces, países como Guatemala no los poseen…
Las categorías de capacidad de uso que se emplean en la metodología, se ordenan en forma
decreciente en cuanto a la intensidad de uso soportable sin poner en riesgo la estabilidad -física-
del suelo, se presentan a continuación. No se incluyen criterios de fertilidad de suelos, ni
aspectos ligados a la producción (acceso, mercados y costos), por lo que son categorías
indicativas de usos mayores en términos de la protección que ofrecen a las capas superiores del
suelo.

SHENG

En propiedades rurales de uso agropecuario, la capacidad de uso de las tierras determina la


utilización más adecuada y menos agresiva con el entorno medioambiental, en función de las
propiedades intrínsecas que caracterizan los recursos biofísicos de un espacio determinado
(Año, et. al, 1997). La consecución de este fin varía en función de los planteamientos
metodológicos iniciales y el proceso culmina con la evaluación de la idoneidad o aptitud de la
tierra para favorecer ciertos usos o sistemas de gestión específicos, a lo que algunos autores le
han llamado el mejor y mayor uso (American Society of Farm Managers and Rural Appraisers.
2000). A pesar de plantear objetivos teóricamente bien definidos, los procedimientos
metodológicos para la determinación de la capacidad de uso de las tierras son muy variados y
diversos de acuerdo con su noción conceptual USBR, (1951); Klingebiel y Montgomery, (1961);
FAO, (1978), Sánchez et al, (1982); ejemplos con buenos resultados en países del área son
reportados como es el caso de Costa Rica que cuenta con una metodología aprobada por el
Organismo Legislativo para tal efecto (MAG-MIRENEM, 1994).
El método propuesto por el Instituto Nacional de Bosques de Guatemala INAB (2000), se basa
en propiedades físicas del suelo y reúne conceptos y procedimientos de otros sistemas (Sheng,
1974)

12
4. Mecánica de la Erosión con enfoque de manejo de cuencas

Erosión
La erosión es el desgaste o denudación de suelos y rocas que producen distintos procesos en
la superficie de la Tierra. La erosión implica movimiento, transporte del material, en contraste
con la alteración y disgregación de las rocas, fenómeno conocido como meteorización y es uno
de los principales factores del ciclo geográfico. Entre los agentes erosivos están la circulación
de agua o hielo, el viento, o los cambios térmicos. La erosión produce el relieve de los valles,
gargantas, cañones, cavernas y mesas, y puede ser incrementada por actividades humanas.
Tipos de erosión
Erosión hídrica

 Erosión marina

Por ejemplo, la formación de un acantilado o


una rasa mareal.

 Erosión fluvial
Llevada a cabo por aguas superficiales en los
continentes.

 Erosión glaciar
Producida por el movimiento de masas de hielo.

 Erosión por cambios de fase.


Fractura de la roca producidas por congelación del agua en grietas, debido a su aumento de
volumen.

METODOLOGÍA DE LOS CLAVOS DE EROSIÓN PARA LA EVALUACIÓN CUANTITATIVA


DE LA EROSIÓN HÍDRICA SUPERFICIAL

Es un método que consiste en parcelas rectangulares a las cuales se les instalan “clavos” que
marcan la línea inicial del suelo, cuya medición se efectúa luego de ocurrida la tormenta con el
objetivo de evaluar la erosión o sedimentación producida. Lo anterior permite establecer un
balance entre pérdidas y entradas de suelo para realizar estimaciones más reales. En el mismo
sentido es importante señalar que este método es aplicable solo en suelos desnudos (sin
vegetación), dado que la presencia de vegetación entorpece la medición.

13
Transecto de Cárcavas

Las cárcavas son la máxima expresión de la erosión de


suelos por el agua. Se originan por la socavación del
agua de escorrentía en el terreno originando su
ensanchamiento y profundización. Su efecto en los
terrenos agrícolas puede originar el abandono de las
tierras por las dimensiones que alcanza. El método del
transecto de cárcava permite evaluar la evolución de la
extensión y ampliación de cárcavas durante un período
de tiempo y cuantificar la pérdida de suelo por medio de
la interpretación de la diferencia de la sección transversal
de las huellas de erosión. Con el método se puede
cuantificar la pérdida de suelos en la trayectoria de la
cárcava y establecer el crecimiento de sus dimensiones. El costo de implementar el método es muy
bajo, así como los cálculos son sencillas aplicaciones de
fórmulas geométricas. Se requiere de un equipo de 2 a 3
personas (no necesitan preparación académica) para
monitorear una longitud de 150 m lineales de cárcava por
día.

Prácticas agronómicas

El uso, manejo y conservación de suelos y agua


comprende una serie de actividades enfocadas a la
gestión integral y sustentable de la misma, es decir,
trasciende más allá de los trabajos del conocimiento del
suelo en la naturaleza, por lo cual es predominante la
comprensión del entorno social, cultural y político para dar
el impulso a medidas prácticas de nivel local como por
ejemplo el control de la erosión.

En este sentido, las prácticas agronómicas de conservación buscan prevenir la erosión del suelo
mediante modificaciones en el método de cultivo de diversos rubros. Se debe realizar un manejo
integral de la fertilidad del suelo y de las labores de siembra, mientras las prácticas físicas de
conservación, buscan controlar el flujo de agua fuera de las parcelas agrícolas mediante la
construcción de obras físicas como canales de desviación, barreras de piedra y reservorios, para
disminuir la erosión del suelo directa y así mejorar la productividad del suelo.

Condiciones del suelo más adecuadas para el desarrollo de los cultivos


 No hay déficit ni exceso de nutrientes necesarios para el desarrollo del cultivo.
 Suficiente humedad.
 Existe una capa profunda para el crecimiento radicular.
 Mantiene una temperatura adecuada.
 No existen sustancias tóxicas que afecten el desarrollo del cultivo.

Funciones para la conservación de suelos y agua


 Crecimiento de la producción agrícola impulsada por el Ejecutivo Nacional.
 Deforestación de áreas para la siembra.
14
 Implementación de la rotación de cultivos
 Construcción de cortinas rompe vientos con barreras vivas.
 Reducción de la utilización de agroquímicos mediante la implementación de biofertilizantes
e insecticidas biológicos.
 Disminución de la mecanización en las áreas de siembra.

Manejo del suelo


Se realiza el manejo del suelo para prevenir la erosión y crear un medio adecuado en el suelo
parala germinación y desarrollo de los cultivos. Para prevenir la erosión del suelo, lo más importante
desde elpunto de vista del manejo del suelo es promover la formación de agregados con base en
materia orgánicay mejorar la capacidad de infiltración, de retención de la humedad, de aireación, la
facilidad en ellaboreo y la resistencia a la erosión.

La erosión de los suelos, es un proceso natural producto de la acción de los agentes atmosféricos,
que se potencia con las actividades humanas. Durante el proceso de erosión se arrancan y
transportan las capas superficiales de la tierra vegetal.

José Leal, Ingeniero Agrónomo, señaló que el mejoramiento del suelo con base en materia orgánica
se desarrolla en suelos cuyo nivel de fertilidad es muy bajo. “Los suelos presentan problemas como
bajo contenido de materia orgánica, fuentes de materia orgánica escasas, poca utilización de pastos
y poca cultura de elaboración de materia orgánica”.

Efectos de la materia orgánica en los cultivos


 Mejoramiento de las características físicas del suelo: se mejora la capacidad de aireación,
de infiltración y de retención de humedad del suelo mediante la formación de agregados resistentes
al agua.
 Mejoramiento de las características químicas del suelo: hay aporte de nutrientes debido a
la descomposición de la materia orgánica.
 Mejoramiento de la flora microbiana: disminuye la incidencia de plagas y enfermedades del
suelo, se promueve el crecimiento de las raíces.

Gestión de riegos
Los últimos años han estado marcados por un importante desarrollo de tecnologías dirigidas a
mejorar el manejo del agua en la agricultura. Así, la tecnificación del riego sumado a la
incorporación de herramientas como sensores o sistemas de telemetría, entre otros, han permitido
mejorar esta labor, llegando a niveles impensados.
Esto, a su vez, ha llevado a que hoy sea posible cultivar en lugares donde existen condiciones poco
propicias para el desarrollo de la agricultura o en aquellos donde el contexto ha tendido a variar.
Ese es el caso de Ovalle, donde hace 25 años los productores aplicaban entre 12 mil y 14 mil m3/ha
de agua al año en sus parrones. Hoy, con la sequía en curso, esa situación ha cambiado. De hecho,
los volúmenes que se manejan no superan los 8 mil m3/ha.
“Incluso hay productores que con 5 mil m3/ha al año cosechan la misma cantidad y calidad que
cuando aplicaban 14 mil e incluso 15 mil m3/ha”, explica Luis Leris Garay, transferencista y
encargado de la oficina técnica del INIA.

15
Todo esto, según el experto, ha sido fruto de la incorporación de diferentes tecnologías de humedad
de suelo, lo que a su vez les ha permitido a los agricultores hacer un uso más responsable del agua
y mejorar las condiciones físicas, químicas e hidrológicas del suelo.
“De cara al futuro, esto es muy importante. En esta zona es normal que caigan entre 90 y 100 mm
de agua. Pero de aquí al 2030, se estima que caerán entre 60 a 70 mm. Esto se podría prologar a
las regiones sexta y séptima”, advierte Luis Leris Garay.
Para Alejandro Antúnez, ingeniero agrónomo del INIA La Platina, gracias a la tecnificación de los
últimos años se ha producido un cambio relevante respecto de la forma en que se riega en la
agricultura. Así, sistemas de goteo y microaspersión han comenzado a reemplazar a los clásicos
métodos de riego superficial, especialmente en frutales y hortalizas.
“Hay un ritmo de tecnificación importante. Unas 8 mil a 10 mil hectáreas al año están pasando a
riego localizado, es decir, microaspersión y riego por goteo”, indica.
No obstante, todo esto ha tenido un costo.
“El costo de tecnificar una hectárea de riego, ya sea a través de mecanismos de goteo o
microaspersión, es de un millón de pesos en condiciones planas”, sostiene Alejandro Antúnez.
Telemetría y seguimiento en el riego y suelo
El proceso de modernización del riego contempla, además, la implementación de herramientas
como la telemetría, la cual consiste en programar el riego desde un ordenador o una aplicación en
un teléfono, en función de estaciones meteorológicas u otros elementos técnicos.
Pero programar es sólo una parte del proceso. De acuerdo a Luis Leris Garay, existen mecanismos
como los sensores de humedad en el suelo que, al ser conectados a un datalogger (registrador de
datos) y vinculados a un celular o computador, permiten transmitir información referente a cómo se
mueve el agua en el suelo.
Entre las opciones de mayor complejidad, existen tecnologías que permiten controlar y sistematizar
la agricultura a través del monitoreo y control de riego, sondas de humedad de suelo, estaciones
meteorológicas, válvulas inalámbricas, pozos, gestión y control de heladas, entre otras
herramientas.
“Estos sistemas se apoyan en la telemetría con inversiones que van desde los US$100 por hectárea
y que puede incluir sólo el monitoreo de riego. Y en el caso de soluciones más completas, como lo
sería la adición de sensores de humedad de suelo o estaciones meteorológicas y control de riego
con válvulas inalámbricas, la inversión puede llegar a los US$ 300 por hectárea”, explica Tomás
Vicente, gerente comercial de WiseConn.
Etapas de los Eventos Adversos y Conceptos Relacionados con la Gestión de Riesgos.
Existe una gran variedad de eventos adversos que podrían ocasionar desastre en un país. Ante
la inminencia de un desastre se pueden tomar medidas en tres diferentes etapas: antes, durante
y después.

La etapa de Antes involucra actividades que se deben realizar antes que ocurran los eventos
adversos. Estas actividades son: Prevención, mitigación, preparación, alerta y evacuación.

La etapa de Durante son actividades que se realizan inmediatamente después de ocurrir el


evento o el desastre. Las acciones que se realizan son la búsqueda, rescate, atención
extrahospitalaria de todas las víctimas afectadas, y otras actividades que se realizan cuando la
comunidad está desorganizada y los servicios básicos no funcionan.

16
La etapa Después se lleva a cabo después de los sucesos; es el proceso de recuperación y
rehabilitación, en donde se reestablecen los servicios necesarios a corto plazo, reconstrucción
de las infraestructuras dañadas por los eventos, y se restaura el sistema de producción como
era entes del desastre.

Podemos definir de manera más precisa las etapas de los eventos adversos como sigue:

PREVENCIÓN. Son acciones que impiden o evitan que los sucesos naturales o que las
actividades humanas sean causantes de desastres………..

Los fenómenos que no son posibles intervenirlos pueden ser de origen natural, tales como:
terremotos, volcanes, y maremotos; de origen antrópico, o mixto. Algunos se pueden intervenir
pero a costos elevados, ya que para ello se requiere estudios minuciosos sobre las
características de los fenómenos. Es necesario realizar un análisis detallado para proteger y
controlar por medio de obras de protección fenómenos y desastres naturales tales como:
inundaciones, explosiones, sequías, deslizamientos, escape de gases tóxicos y otros.

Las medidas de prevención más eficaces deben incluirse en:


1. Planes de desarrollo sobre espacios geográficos, ya sea urbanos, regionales y nacionales,
incluyendo programas de inversión y asignación de presupuestos sectoriales por ciudades y
regiones.
2. Planificación física de la ubicación de las fábricas e infraestructura.
3. Programas de intervención de fenómenos específicos, tales como: inundaciones, sequías y
deslizamientos.

MITIGACIÓN. Es una intervención para reducir los riesgos y daños y tomar medidas o acciones
para modificar determinadas circunstancias. Cuando se refiere a desastres, se toma una acción
para modificar la característica de una amenaza ayudando a un sistema biológico, físico o social
a reducir su vulnerabilidad.
El objetivo de la Mitigación es la reducción de los riesgos y de los daños que causa sobre la vida
y los bienes un desastre.

Los métodos de mitigación pueden ser activos y pasivos. Los activos, son el contacto directo
entre las personas involucradas, el fortalecimiento institucional, la organización, la capacitación,
la información pública, la participación comunitaria, etc. Esto no requiere de abundantes recursos
económicos por lo que resulta muy útil y factible para consolidar los procesos de mitigación en
los países de desarrollo.

Los pasivos se relacionan con la legislación y planificación, tales como: los códigos de
construcción, reglamentos de uso del suelo, estímulos fiscales y financieros, intervención de la
vulnerabilidad física y la reubicación de asentamientos de alto riesgo.

PREPARACIÓN

Es un conjunto de medidas y acciones que se usan para reducir la muerte y otros daños y
organizan de manera eficiente la recuperación y rehabilitación. No se puede garantizar que un
desastre no ocurra mediante las acciones de la prevención y mitigación, aunque si es mínima la
probabilidad de que el fenómeno se manifieste y produzca daños.

17
La preparación considera aspectos tales como la predicción de los eventos, la educación, la
capacitación de la población, el entrenamiento de los organismos de socorro y la organización y
coordinación para la respuesta. La preparación se fundamenta en la planificación, la
organización interinstitucional y el ejercicio en simulaciones y simulacros para el entrenamiento
y evaluación de la capacidad de respuesta de la comunidad e instituciones.

ALERTA.

Es un anuncio declarado para tomar precauciones específicas por la probabilidad de un evento


adverso. Los organismos de socorro harán uso de los procedimientos preestablecidos y la
población debe tomar las precauciones específicas para el evento previsible. Los estados de
alerta se declaran para que la población e instituciones tomen una medida específica.

Predecir un evento es determinar con certidumbre cuando y donde ocurrirá y de que magnitud
será, pero los estados de alerta no se pueden declarar para todos los eventos. Algunos
fenómenos sí se pueden detectar, como por ejemplo los huracanes, las erupciones volcánicas,
los tsunamis de origen lejano y los deslizamientos, en cambio otros eventos tardan en
manifestarse.

RESPUESTA

Las respuestas son todas las acciones que se realizan para salvar las vidas, reducir el
sufrimiento y evitar las pérdidas ocasionadas por los eventos adversos. La respuesta es dar una
atención inmediata y oportuna a la población, esto incluye las búsquedas, el rescate y la
asistencia de la vida.

REHABILITACIÓN
Es la reparación del daño físico, social y económico, es decir, recuperar en forma rápida los
servicios básicos. La primera etapa es la atención, luego esta la rehabilitación, el proceso de
recuperación y desarrollo. Se inicia con los servicios básicos de abastecimiento de alimentos,
agua, energía, vías de comunicación y salud.

RECONSTRUCCIÓN
Es cuando se reparan los daños causados por los eventos adversos; estos pueden ser a corto
o largo plazo. Existen dos tipos de pérdidas: directas e indirectas
Las directas son las pérdidas humanas, la disminución de los ingresos y el patrimonio. Las
indirectas son las pérdidas en el comercio y la industria como resultado de la reducción de la
producción, la desmotivación de la inversión y los gastos de recuperación; los efectos sociales
como la interrupción de las actividades cotidianas, del transporte, de los servicios públicos y de
los medios de información; así como la desfavorable imagen que toma la región con respecto a
otras.

Además de conocer sobre los eventos adversos, se hace necesario tratar conceptos
relacionados con éstos. A continuación se define una serie de términos comúnmente utilizados
en el análisis cuantitativo de amenaza y riesgo por deslizamientos:

AMENAZA (“hazard”)
Es un factor externo de riesgo que puede ser de origen natural o generado por la actividad del
hombre, el cual se manifiesta en un lugar específico, con una intensidad y duración determinada.
Es una condición con el potencial de causar una consecuencia indeseable. Una amenaza natural
es la probabilidad de ocurrencia de un fenómeno potencialmente destructor, en un área
18
específica dentro de un determinado período de tiempo. (Varnes–1984). Alternativamente, la
amenaza es la probabilidad de que ocurra un deslizamiento particular en un determinado tiempo.

DESASTRE
Son los daños producidos continuamente a las personas, bienes, servicios, poblaciones y al
ambiente, debidos a circunstancias naturales o generadas por la actividad humana que ponen
en peligro el bienestar del ser humano y el medio ambiente.

PELIGRO
Es el deslizamiento geométrica y mecánicamente caracterizado.

Peligrosidad
Es la probabilidad de ocurrencia de un fenómeno potencialmente perjudicial dentro de un período
de tiempo determinado y en un área específica. La peligrosidad en un talud es la probabilidad
de ocurrencia de una rotura de determinada magnitud.

RIESGO (“risk”)
El riesgo puede definirse como la probabilidad de que ocurra un peligro y cause pérdidas (vidas
humanas, heridos, pérdidas económicas directas e indirectas, daños cuantificables a edificios o
estructuras, etc.). El riesgo incorpora consideraciones socio-económicas, definiéndose como las
pérdidas potenciales debidas a un fenómeno natural determinado. Es una medida de la
probabilidad y severidad de un efecto adverso a la vida, la salud, la propiedad o el ambiente. Se
mide en vidas humanas y propiedades en riesgo. El riesgo generalmente se le estima como el
producto de probabilidad x consecuencias.

Elementos en riesgo

Se incluyen la población, edificios, obras de infraestructura, actividades económicas y servicios


públicos en el área potencialmente afectada por los deslizamientos.

Riesgo Específico

Es el grado de pérdida esperado debido a un fenómeno natural y se expresa como el producto


de la peligrosidad por la vulnerabilidad.

Riesgo Total
Corresponde al número de vidas perdidas, daños a la propiedad y a las personas, etc., debidas
a un fenómeno natural concreto. El riesgo total se define como el producto del riesgo específico
y de los elementos bajo riesgo, como se describe en la siguiente expresión:

RT = E * RS = E * P * V

Donde:

RT = Riesgo Total

E = Elementos bajo riesgo


RS = Riesgo específico
P = Peligrosidad
V = Vulnerabilidad

19
Análisis de Riesgo Es el uso de la información disponible para estimar el riesgo a individuos o
población, propiedades o el ambiente debido a las amenazas. El análisis de riesgo generalmente
comprende tres pasos: definición del alcance, identificación de la amenaza y la estimación de
riesgo.

Evaluación del Riesgo Es la etapa en la cual los juicios y valores entran en el proceso de
decisiones, explícita o implícitamente, incluyendo consideraciones de la importancia de los
riesgos estimados y las consecuencias sociales, ambientales y económicas asociadas, con el
propósito de identificar un rango de alternativas para el manejo de los riesgos.

Valoración del Riesgo Es el proceso del análisis de riesgo y evaluación de riesgo.

Manejo de Riesgo El proceso completo de evaluación del riesgo y control de riesgo.

SUSCEPTIBILIDAD
La susceptibilidad expresa la facilidad con que un fenómeno puede ocurrir sobre la base de las
condiciones locales del terreno. El término susceptibilidad hace referencia a la predisposición
del terreno a la ocurrencia de deslizamientos y no implica el aspecto temporal del fenómeno, por
lo que la probabilidad de ocurrencia de un factor detonante como una lluvia o un sismo no se
considera en un análisis de susceptibilidad.

VULNERABILIDAD
Es el grado de probabilidad de pérdida de un determinado elemento o grupo de elementos dentro
del área afectada por el deslizamiento. Se expresa en una escala de 0 (ninguna pérdida) a 1
(pérdida total).

La vulnerabilidad también se puede definir como fragilidad. Una sociedad es vulnerable cuando
está o queda expuesta a los efectos de un fenómeno de origen natural, socio-natural o humano,
sin tener la capacidad de recuperarse por sí misma de los efectos de éste.

20
TALUDES

Se conoce con el nombre genérico de talud a cualquier superficie con pendiente o cambios de
altura significativos que haya de adoptar permanentemente la masa de tierra. Cuando el talud
se produce en forma natural, sin intervención humana, se denomina ladera natural o
simplemente ladera.

Cuando los taludes son el resultado de una acción antrópica se denominan cortes o taludes
artificiales, según sea la génesis de su formación; en el corte, se realiza una excavación en una
formación térrea natural, en tanto que los taludes artificiales son los lados inclinados de los
terraplenes.

Los taludes se deben construir con la mayor inclinación posible garantizando su estabilidad, y
aprovechando al máximo el espacio.

Nomenclatura de un Talud.

Los taludes y laderas están constituidos por los siguientes elementos (Ver fig. 2.1):

1. Altura Es la distancia vertical entre el pie y la cabeza; esta se presenta claramente definida
en taludes artificiales pero es complicada de cuantificar en las laderas, debido a que el pie y la
cabeza no son accidentes topográficos bien marcados.

2. Pie Corresponde al sitio de cambio brusco de pendiente en la parte inferior.

3. Cabeza o escarpe Se refiere al sitio de cambio brusco de pendiente en la parte superior.

4. Altura de nivel freático Distancia vertical desde el pie del talud o ladera hasta el nivel de agua
medido debajo de la cabeza.

5. Pendiente Es la medida de la inclinación del talud o ladera. Puede medirse en grados, en


porcentaje o en relación m/1, en la cual m es la distancia horizontal que corresponde a una
unidad de distancia vertical. Ejemplo: Pendiente: 45º, 100%, o 1H:1V.

Tipos de Materiales que Conforman losTaludes.

21
La naturaleza intrínseca del material mantiene una estrecha relación con el tipo de
inestabilidad que puede producirse, condicionando y pudiendo estimarse de antemano la
susceptibilidad de cada material a que se desarrolle un movimiento determinado.
Los terrenos en los que se producen los movimientos, pueden dividirse en tresgrupos:

 Rocas
 Suelos
 Materiales deRelleno
ROCAS

Se denomina “Roca” a la roca dura y firme que estaba intacta en su lugar antes de la iniciación
del movimiento. La distinta naturaleza de las rocas que forman los macizos rocosos implica una
problemática determinada en su comportamiento ante la estabilidad de los taludes

El comportamiento de un macizo rocoso generalmente depende de las características delas


discontinuidades (estratificación, diaclasas, fallas,esquistosidad, líneas de debilidad, etc.) que
presenta, así como de la litología de la roca matriz y su historia evolutiva. En las
discontinuidades ha de considerarse el tipo y origen, distribución espacial, tamaño y
continuidad, espacio, rugosidad, naturaleza del relleno y presencia de agua. De la roca matriz
debe conocerse su naturaleza, características resistentes, meteorización,alterabilidad,
etc.

Generalmente los diferentes tipos de rotura que se producen en los medios rocosos siguen
superficies preexistentes, aunque cuando los macizos están fuertemente fracturados, pueden
desarrollarse nuevas superficies de corte similares a las producidas en suelos.
SUELOS.

Estos pueden ser de dos tipos, atendiendo a su composición granulométrica:


 Residuales, Derrubios oDetritos
 Tierra oSuelo
Se denomina con el nombre de Residuales, Derrubios o Detritos a los suelos de composición
granulométrica gruesa, es decir, constituidos predominantemente(en peso) por gravas y
bloques. Se considera que si el porcentaje en peso del material mayor de 2 milímetros de
diámetro equivalente se encuentra entre el20 y 80% es considerado como residual oderrubio.

Se denomina tierra o suelo, al material que contiene más del 80% de las partículas menores
de 2 milímetros. Se incluyen los materiales desde arenas a arcillas muy plásticas. Cuando el
contenido de limo y arcilla es el mayoritario de la fracción fina, se le puede denominar
comobarro.

Lasdiferenciasdecomportamientoquepresentanestosmaterialesfrentealosrocosos,sededucendesu
definicióncomo:conjuntodepartículassólidas,sueltasopococementadas,másomenosconsolidadas,d
enaturalezamineral,fragmentosderocas,materiaorgánica,etc.,confluidointersticialrellenandohuecos
y que han podido sufrir transporte o desarrollarse in situ.
Elcomportamientodelasmasasdesueloseasemejaaldeunmediocontinuoyhomogéneo; las
superficies de rotura se desarrollan en su interior, sin seguir una dirección preexistente.

Estos materiales suelen diferenciarse atendiendo a su génesis:


22
 Transportados: coluviones, aluviales, glacis,etc.
 Desarrollados in situ:eluviales.
La dinámica de estos materiales depende de las propiedades y características de sus agregados,
por lo que además se debe considerar:

 Tamaño, forma y grado de redondez de las partículas másgruesas.


 Proporción del contenido de arenas y/o arcilla.
 Contenido de agua en el suelo y situación del nivel freático,etc.
MATERIALES DERELLENO

Se agrupan bajo esta denominación todos aquellos depósitos artificiales,


realizadosporlademandadeciertasactividades,talescomo:construcciónde obras civiles
(terraplenes, presas de tierra, vertederos, etc.) o bien como acumulación demateriales
de desecho, sobrantes, estériles, etc.Las consideraciones técnicas del comportamiento
de estos rellenos tienen una gran semejanza con los materiales tipo suelo.

TIPOS DE MOVIMIENTOS EN TALUDES YLADERAS.

Lainestabilidaddetaludesyladerassetraduceenunaseriedemovimientosque pueden ser clasificados


sobre la base de distintos criterios, por lo tanto se
presentanacontinuaciónlostiposdemovimientosqueseoriginanconmayor frecuencia de acuerdo con
los mecanismos que se producen en diferentes materiales y los intervalos de tiempo en que tienen
lugar.
Desprendimientos, Caídas(Falls)

Estosdesprendimientoscorrespondenamovimientosextremadamenterápidosde porciones de
terreno o de una masa separada de un talud de granpendienteo acantilado, rocoso o no, en forma
de bloques aislados o masivamente que en una gran parte de sus trayectorias descienden por el
aire en caída libre, volviendo a entrar en contacto con la topografía, donde se producen saltos,
rebotes y rodaduras, lo que ocasiona movimientos de terreno con resultados
catastróficos.Estetipodemovimientoporlogeneralpresentasuperficiesdecorte pequeñas del material.
(Ver fig. 2.2 y 2.3).

Estos fenómenos suelen producirse en zonas constituidas geológicamente por alternancias


sedimentarias de capas resistentes y débiles. Los mecanismos que pueden conducir a estas
inestabilidades, generalmente sucesivos y complementarios, son: meteorización o extrusión
de capas blandas, concentración de presiones en el borde y rotura por flexo-tracción.

23
Desprendimiento

24
DesprendimientosdeBloquesporGravedad

Los desprendimientos suelen clasificarse en los siguientes tipos:

Desprendimiento por Gelifracción: es un desprendimiento favorecido por la acción de cuñas


de agua, al helarse, en las grietas existentes en las rocas y que provocan la propagación de
lasmismas.

Desprendimiento por Reblandecimiento delPie

Desprendimiento por Descalce: es debido a la erosión de un material blando del pie y por
socavaciónlateral.

Vuelcos(Topples)

Estos movimientos describen una rotación hacia delante y hacia el exterior de una ladera e
implican una rotación de unidades con forma de columna
obloquesobreunabasebajolaaccióndelagravedadyfuerzasejercidasporunidades adyacentes o
por inclusión de agua en las discontinuidades. Este tipo demovimientos puede
culminar enotros tipos como desprendimientos,deslizamientos, etc.
dependiendo de los aspectos geométricos del material involucrado según la distribución de las
discontinuidades.

Los vuelcos se pueden considerar exclusivos de medios rocosos, condicionados por la


disposición estructural de los estratos, hacia el interior del talud y unsistema de
discontinuidades bien desarrollado.

Existen variedades de estos movimientos como:

Vuelco Por Flexión (FlexuralToppling)

Tiene determinadas características que le confieren cierta singularidad entre los vuelcos. Este
mecanismo tiene lugar en rocas con un sistema preferente de discontinuidades, formando
columnas semicontinuas en voladizo. Las columnas continuas cuando se doblan hacia delante
se rompen por flexión, así como se muestra en la fig. 2.4.

Cuando se desencadena el movimiento por transmisión de la carga en el pie del talud, el


mecanismo progresa hacia el interior del macizo rocoso, originando grietas de tracción con
profundidad y anchura variables.

25
Figura 2.4 - Vuelco Por Flexión

Vuelco deBloques.

Es característico de aquellos macizos rocosos que contienen sistemas dediscontinuidades


ortogonales dando lugar a una geometría de columnas divididas en bloques (ver fig. 2.5).

Lapartedesplazadacaeconunmovimientodegiro,almenosinicial,apoyadoensubaseexterna.Siunavez
iniciadoelmovimiento,elapoyodelaaristainferior se deshace, el vuelco de bloques se combina con
un movimiento vertical de colapso. Estos movimientos se producen enaludes muy inclinados de
materiales rocosos o de suelos areno-arcillosos compactados.

Figura 2.5 – Vuelco de Bloques.

Deslizamientos(Slides)

Los deslizamientos se definen como desplazamientos ladera abajo de masas de terreno, en


estado sólido, por efecto de la gravedad y a favor de niveles de despegue o superficies de
falla. La masa se desplaza rígidamente, y aunque puede llegar a fragmentarse, se considera
que lo hace como un bloque único. Las superficies de falla pueden estar determinadas por
capas ricas en arcillas, que actúan como lubricantes cuando aumentan su plasticidad o por
fracturas. A lo largo y ancho de la masa desplazada, es posible que se originen grietas y
movimientos de asentamiento en rocas fracturadas. (Ver figura 2.6).

El movimiento puede ser progresivo, es decir, que no se inicia simultáneamente a lo largo de


toda la superficie de falla. Los deslizamientos pueden ser de una sola masa que se mueve o
comprender varias masasemi-independientes y pueden obedecer a procesos naturales o a
desestabilización de masas de tierrapor el efecto de cortes, rellenos, deforestación, etc. (Ver
también Secciones 3.3y 3.4)
26
Figura 2.6. Deslizamientos en Suelos Blandos

Expansiones Laterales (LateralSpreads)


Según Varnes (1978) se pueden distinguir dos tipos de expansiones laterales:

La fracturación y extensión de material compacto (tanto suelo comoroca)debido a la licuefacción


del material subyacente. Este mecanismo es característico de sedimentos arcillosos (arcillas
sensibles) depositados en mares poco profundos y lagos situados alrededor de los antiguos
casquetes de hielo en Noruega, Canadá y Alaska. Este movimiento puede ser iniciado por un
deslizamiento rotacional o una sacudida sísmica, lo que remoldea la arcilla de forma casi
instantánea, convirtiéndola en un
líquidodensoarrastrandobloquesdematerialsobrepuesto.Elmovimiento progresa retrogresivamente
con gran rapidez. Algunos autores (Hutchinson 1988) consideran este mecanismo como una
variante de los deslizamientos traslacionales. (Ver fig.2.7):

Figura 2.7. Fluencia y extrusión del material por licuefacción.

Los movimientos afectan al conjunto de formación sin que se identifiquen zonas basales de
cizalla o flujo plástico, o no están bien definidas. Estos suelen afectar a litologías blandas y
deformables que se encuentran por debajo de materiales resistentes y densos, lo que por lo
general ocurre cuando una capa de arcilla húmeda y reblandecida extruye lateralmente por el
peso de las capas superiores. (Ver fig.2.8).

27
FIGURA 2.8. Fluencia y extrusióndel material subyacente.

Flujos(Flows)

Son movimientos espacialmente continuos en los que las superficies de cizalla tienen corta
vida, se encuentran muy próximas y generalmente no se conservan. Los flujos pueden ser
lentos o rápidos (Ver fig. 2.9), así como secos o húmedos y los puede haber de roca, de suelos
residuales o desuelo.

La distribución de velocidades en la masa desplazada se parece a la que se presenta en un


fluido viscoso, por este motivo la masa movida no conserva la forma en su movimiento
descendente, adoptando a menudo formas lobuladascuando se dan en materiales cohesivos,
y desparramándose por la ladera o formando conos de deyección cuando se dan en materiales
granulares.

Los flujos muy lentos o extremadamente lentos pueden asimilarse en ocasiones, a los
fenómenos de reptación y la diferencia consiste en que en los flujos
existeunasuperficiefácilmenteidentificabledeseparaciónentreelmaterialquesemueveyelsubyac
ente,mientrasenlareptaciónlavelocidaddelmovimientodisminuye al profundizarse en el perfil,
sin que exista una superficie definida de rotura.

28
Figura 2.9. Flujos de diferentes velocidades

La ocurrencia de flujos está generalmente relacionada con la saturación de los materiales sub
superficiales. Algunos suelos absorben agua muy fácilmente cuando son alterados,
fracturados o agrietados por un deslizamiento inicial y esta saturación conduce a la formación
de un flujo. Algunos flujos pueden resultar de la alteración de suelos muy sensitivos tales como
sedimentos no consolidados.

Los flujos pueden clasificarse de acuerdo al material en que se producen de la siguiente


manera:

Flujo enroca

Los movimientos de flujo en roca comprenden las deformaciones que se distribuyen a lo largo
de muchas fracturas grandes y pequeñas. La distribución de velocidades puede simular la de
líquidos viscosos. Este tipo de movimiento ocurre con mucha frecuencia en zonas tropicales
de alta montaña y poca vegetación.

Se observa la relación de estos flujos con perfiles de meteorización poco profundos, en los
cuales las fallas están generalmente relacionadas con cambiosde esfuerzos y lixiviación,
ocasionados por la filtración momentánea del agua en las primeras horas después de una
lluvia fuerte. Las pendientes de estos taludes son comúnmente muy empinadas (más de 45°).
Su ocurrencia es mayor en rocas ígneas y metamórficas muy fracturadas y pueden estar
precedidos por fenómenos de inclinación. Estos flujos tienden a ser ligeramente húmedos y su
velocidad tiende a ser rápida a muy rápida.

Flujo de suelos residuales (Detritos o Derrubios)

Por lo general, un flujo de rocas termina en uno de suelos residuales (debrisflows). Los
materiales se van triturando por el mismo proceso de flujo y se puede observar una diferencia
importante de tamaños entre la cabeza y el pie del movimiento.

El movimiento de los flujos de detritos puede ser activado por las lluvias, debidoa la pérdida de
resistencia por la disminución de la succión al saturarse el material o por el desarrollo de fuerzas
debidas al movimiento del agua subterránea.
Los daños causados por los flujos de detritos abarcan áreas relativamentegrandes. El flujo típico
de detritos es una honda larga de materiales sólidos y líquidos mezclados entre sí, que se mueve
en forma constante a través de un canal con algunas ondas menores superimpuestas que se
mueven a velocidades superiores a aquellas del flujo mismo.
29
Flujo desuelo

Los flujos de suelo (earth flows) son más secos y lentos de acuerdo a la humedad y pendiente de la
zona de ocurrencia. En zonas de alta montaña y desérticas ocurren flujos muy secos, por lo general
pequeños, pero de velocidades altas.

Flujos de lodo

Dentro de los flujos de tierra están los “flujos de lodo” o “mudflows”, en los cuales los materiales
de suelo son muy finos y las humedades muy altas y ya se puede hablar de viscosidad
propiamente dicha, llegándose al punto de suelos suspendidos en agua. Los flujos de lodo
poseen fuerzas destructoras grandes que dependen de su caudal y velocidad.
Un flujo de lodo posee tres unidades morfológicas: un origen que generalmente es un
deslizamiento, un camino o canal de flujo y finalmente una zona de acumulación. El origen
consiste en una serie de escarpes de falla o deslizamientos de rotación o traslación, el camino
o canal es generalmente un área estrecha, recta o una serie de canales a través del cual fluye
el material viscoso, el ancho, profundidad y pendiente del camino del flujo varía de acuerdo a
las condiciones topográficas y morfológicas.

Solifluxión (Solifluction)

La solifluxión es un movimiento, relativamente rápido, donde toman identidad la presión del agua
intersticial y la plasticidad de los materiales. La solifluxión suele desarrollarse en depósitos de
acumulación (coluviones, piedemontes, y otros), en depósitos de alteración, sobre todo en
formaciones margosas, de esquistos o de pizarras, y en formaciones arcillosas y limosas
susceptibles a deformarse. Las coladas de barro son solifluxiones en materiales limo-arcillosos,
que dejan cicatrices cóncavas en las áreas de cabecera. (Ver fig.2.10).

Figura 2.10. Solifluxión

Reptación (Creep)

La reptación consiste en movimientos superficiales muy lentos del suelo sin una superficie de
falla definida. Generalmente, el movimiento es de unos pocos centímetros al año. Este tipo de
movimiento afecta a grandes áreas de terreno y por lo general se le atribuye a las alteraciones
climáticas relacionadas con los procesos de humedecimiento y se cado en suelos, usualmente,
muy blandos o alterados, como materiales ricos en arcillas que, con una cierta periodicidad, se
embeben de agua. (Ver fig. 2.11). La reptación puede preceder a movimientos más rápidos
como los flujos o deslizamientos.

30
Figura 2.11. Esquema de un proceso de reptación.

Avalanchas o Aludes. (Avalanches, Sturstroms)

Las avalanchas son movimientos súbitos al ras del suelo generados a partir de un gran aporte
de materiales de uno o varios deslizamientos o flujos combinados con un volumen importante
de agua, los cuales forman una masa de comportamiento de líquido viscoso que puede lograr
velocidades muy altas con un gran poder destructivo y que corresponden, generalmente, a
fenómenos regionales dentro de una cuenca de drenaje. Las avalanchas pueden alcanzar
velocidades de más de 50 metros por segundo en algunos casos.

En las avalanchas la falla progresiva es muy rápida y el flujo desciende formando una especie
de “ríos de roca y suelo” (Ver figura 2.12). Estos flujos comúnmente se relacionan con lluvias
ocasionales de índices pluviométricos excepcionales muy altos, deshielo de nevados o
movimientos sísmicos en zonas de alta montaña y la ausencia de vegetación; aunque este
último es un factor M influyente, no es un prerrequisito para que ocurran.

Figura 2.12. Avalancha en cauce de río por acumulación de materiales producto de una
gran cantidad de deslizamientos ocurridos en el momento de un sismo.
Deformaciones sin Rotura o Previa sala Rotura

En ocasiones, las deformaciones de la ladera no dan lugar al despegue de la masa movida ni a la


31
formación de superficies de roturas continuas en todo el conjunto. Se trata por tanto, de
deformaciones de corta extensión, aunque en los grandes movimientos pueden ser de algunos
metros. Estas deformaciones pueden acelerarse hasta la rotura, reactivarse periódicamente o dejar
de producirse.
Reptación Por Fluencia (Pre-Failure Creep)

Son desplazamientos, inicialmente muy lentos, que se aceleran progresivamente y que preceden a
la rotura de la ladera. En términos físicos, estos desplazamientos son el reflejo indudable del
desarrollo de una rotura progresiva. La medida de las de formaciones en el tiempo puede ser
utilizada para predecir el instante de rotura y para establecer sistemas de alerta.

 Cabeceo (ChevronToppling)

Se desarrolla en la parte superficial de las laderas constituidas por formaciones rocosas


intensamente fracturadas (esquistos, filitas, pizarras) presentando un marcado buzamiento hacia el
interior del macizo. Los primeros metros superficiales suelen encontrarse descomprimidos y
alterados, condición suficienteparaquesiseerosionalaparteinferiordelaladeraelconjuntoalterado
tienda a girar hacia abajo. El cambio de inclinación da lugar a la formación de una superficie de
discontinuidad que, a menudo, se convierte en una superficie potencial de deslizamiento
(Verfig.2.13).Para algunos autores, el cabeceo se trata simplemente de procesos de alteración
química y física de los macizos rocosos.

Figura 2.13. Esquema de cabeceo.


Comba dura y Pan de o en Valle (CamberingandBulging)

Las combaduras aparecen asociadas con el abombamiento de los fondos de un valle. Es


característico de valles excavados en estratos casi horizontales con un nivel rocoso fisurado por
encima de las arcillitas, limolitas, o margas que, a su vez, reposan sobre un substrato más
competente.
Las principales características del movimiento es la combadura del nivel rocoso superior hacia el
valle, dando lugar al ensanchamiento de las fisuras(Verfig.2.14). El nivel arcilloso inferior muestra
un marcado adelgazamiento hacia el valle y un plegamiento monoclinal intenso. Las partes
superiores de estos pliegues suelen coincidir con el levantamiento o pandeo (bulging) del fondo del
valle.

32
Figura 2.14. Esquema de una combadura.

Fallas Superficiales en Taludes y Laderas.

Las fallas superficiales, en función de la profundidad en la que se presentan (consideradas hasta 1-


2 m) a las que los taludes y laderas comúnmente se ven sometidos están relacionadas, directa o
indirectamente, con el esfuerzo cortante de los suelos y con la capacidad de carga del terreno de
cimentación, y se pueden definir como sigue:

Fallas por Licuación

Las fallas por licuación se presentan en arcillas extra sensitivas y en arenas finas poco compactas.
Ocurren por la pérdida rápida de resistencia al esfuerzo cortante. Las causas de la pérdida de
resistencia son, por una parte, el incremento de los esfuerzos cortantes actuantes con el
desarrollo correspondiente de la presión de poros; y por otra, el desarrollo rápido de elevadas
presiones en el agua intersticial, como consecuencia de una explosión o un sismo.

Los suelos granulares más susceptibles a la licuación son las arenas finas y uniformes y los suelos
finos no plásticos y sus mezclas, que se encuentran sueltos y saturados. Las arenas sueltas con
D10<0.1 mm y coeficiente de uniformidad Cu < 5 y los limos con índice de plasticidad IP< 6 son los
Materiales más peligrosos, ya sea formando parte del cuerpo del talud, como en el terreno de
cimentación.

En los suelos arcillosos, esta falla se presenta por disminución de la cohesión del material al
aumentar su humedad y por la pérdida de resistencia a causa de la deformación bajo esfuerzo
cortante, o por cualquier degradación estructural que ocurra, aun sin cambiar el contenido de agua.

Fallas por Erosión

Las fallas por erosión son de tipo superficial y se presentan en materiales no cohesivos, tipo
limooloess, que son susceptibles a la erosión causada por el viento y el agua (lluvia o escurrimiento
superficial). Son frecuentes en terraplenes y cortes; se manifiestan con irregularidades, socavones
y canal es sobre el talud. A mayor pendiente del talud, el fenómeno es más notorio.

Fallas por Tubificación

Las fallas por tubificación se originan cuando hay arrastre de partículas de suelo en el interior del
talud, por efecto de las fuerzas de filtración generadas por el flujo de agua. Una vez que las
partículas comienzan a ser removidas, van quedando en el suelo pequeños canales, por los que el
agua circula a mayor velocidad, con mayor poder de arrastre, de manera que el fenómeno
de tubificación tiende a crecer continuamente una vez que comienza, aumentando siempre el
diámetro de los canales que se van formando en el interior del terraplén o relleno. Un factor que
contribuye mucho a este tipo de fallas es la insuficiencia de compactación.

33
Fallas en Taludes de Tierra Blanca.

Este tipo de material, debido a las características particulares que posee, presenta un mecanismo
de falla diferente a los mencionados anteriormente, ya que podría decirse que falla por exfoliación.
Para el estudio de los procesos desestabilizadores en taludes compuestos por este tipo de material
se hace necesario estudiar las siguientes propiedades:

Intemperismo Físico

Sobre la tierra blanca operan los procesos de meteorización física de la matriz de las ignimbritas, lo
cual da paso a la exfoliación, que es el mecanismo que genera discontinuidades formadas por
planos de origen mecánico con direcciones preferenciales, que se forman debido a las
contracciones y expansiones diferenciales producidas por la acción térmica diaria del sol y se
caracterizan por tener superficies que separan en bloques el talud.

Así también, los depósitos de flujos piroclásticos en el área metropolitana de San Salvador, se
caracterizan por ser masivos e isótropos. Están compuestos por una matriz fina de cenizas, clara,
de composición rio lítica, que contiene fragmentos de pómez diseminados y líticos de tamaños
variados. El espesor de estos flujos es variable pero por lo general son superiores a los 5m.

Las observaciones de varios taludes dentro y fuera del área metropolitana, donde afloran los
depósitos de flujos piroclásticos de tierra blanca joven, muestran el aparecimiento de
discontinuidades con cierta frecuencia. Estas discontinuidades que inicialmente surgen bajo la
forma de fisuras, progresan a fracturas y luego a grietas, aparecen en los taludes dispuestas de
manera regular dependiendo de la granulometría de la matriz. A partir de la parte más externa de
la cara del talud, se comienza a formar una fisura o discontinuidad, la cual progresa paralela a la
cara del talud (Fotografía 2.1). La fisura se abre lentamente debido a varios factores como la
variación diurna de la temperatura, a la acción de las lluvias, la actividad biológica por parte del
emplazamiento y desarrollo de raíces en su interior, a las vibraciones y a las sacudidas producidas
por los sismos. Todos estos factores operan conjuntamente para el desarrollo de las grietas.

Fotografía 2.1. Se señalan las fisuras generadas por la exfoliación en un talud de tierra blanca
Como este proceso es contínuo, se produce la aparición de otra fisura hacia el interior de la cara
del talud en forma sucesiva, hasta que aproximadamente a 1 a 1.5m de la cara del talud y sobre la
superficie del terreno ya no se observan grietas ni fisuras porque dichos factores ya no tienen
incidencia. Cuando se trata de flujos piroclásticos gruesos ricos en pómez, “pumiceflow”, las
discontinuidades transversalmente muestran secciones en formas de cuñas alargadas, las que
llegan a derrumbarse ante un disparo por lluvias y/o sismos fuertes. Los derrumbes resultantes en
ambos casos corresponden a rebanadas, y los volúmenes involucrados son pequeños a
moderados, en función de la altura del talud.
34
Efecto de la lluvia

El agua dentro de las grietas produce un aumento de la presión de poro, así como una erosión
diferencial por impacto de las gotas de lluvias, lavado de las aristas de las grietas por parte de las
corrientes de agua y ensanchamiento de las grietas. Este proceso repetitivo a lo largo de varios
años contribuye para que la grieta se abra, facilitando la circulación del agua, la penetración y
desarrollo de raíces. En estas condiciones y ante la presencia de una lluvia torrencial, la sección
formada por la discontinuidad se cae al aumentar el esfuerzo cortante por el aumento de peso del
agua intersticial, venciendo así las fuerzas resistentes. Los derrumbes de los taludes de tierra blanca
joven (TBJ) ocurren más frecuentemente en los meses de agosto y septiembre, que es cuando ya
hay una significativa acumulación de agua en el suelo.

El proceso erosivo en materiales poco consolidados es muy grande. La erosión se ve acrecentada


cuando no existe una cobertura vegetal, rasgo muy común en estos taludes, en la cual la ejecución
de proyectos habitacionales acelera el proceso erosivo. Con las prácticas muy arraigadas de
remoción de toda la cubierta vegetal y de la construcción de sistemas de terrazas sin un adecuado
sistema de drenaje durante el proceso constructivo, se ha facilitado y acelerado. Otra práctica que
ha inducido la erosión está relacionada con las empresas lotificadoras en cuyos proyectos en el
pasado pusieron en venta parcelas de terrenos “lotes”, sin servicios básicos, y que en el proceso
de construcción de las viviendas, se fueron generando situaciones de alta erosión y de amenazas
por derrumbes a las viviendas.

Efecto de la vegetación

Las raíces se desarrollan más fácilmente penetrando a lo largo de las fisuras y grietas de los taludes.
Cuando las raíces se tornan más gruesas producen una presión lateral en el interior de esas
discontinuidades, siendo la porción más débil y más externa del talud la que se separa de la porción
más fija, permitiendo que la discontinuidad que demás abierta y facilitando la infiltración del agua
meteórica.

Efecto sísmico

Las ondas generadas por los sismos al propagarse desde sus fuentes generadoras pueden ser
amplificadas o atenuadas, lo cual dependerá de las características de los materiales que se
encuentren en su trayectoria de propagación. El paso de una onda sísmica de un medio más duro
a otro sin consolidación, como es el caso de los depósitos de tierra blanca (TBJ), produce una
disminución de la velocidad de la onda al pasar por esos materiales, tal cambio de velocidad es
acompañado por una amplificación de la onda sísmica en dichos materiales; teniéndose como
resultado vibraciones del suelo más fuertes, lo que eventualmente llega a acentuarla abertura de
las discontinuidades.

De acuerdo al Departamento de Sismología del SNET, mensualmente se reportan de entre 5 y 10


sismos percibidos por la población salvadoreña; tal frecuencia de sismos ofrece una idea de las
vibraciones a las que los taludes son sometidos, lo cual, contribuye al desarrollo de las
discontinuidades. Cuando un sismo es muy fuerte puede producir desprendimientos de la porción
más externa de la cara del talud, apareciendo una nueva cara en la que se repetirá este proceso.
El proceso del establecimiento de la exfoliación en las tierras blancas, se presenta
esquemáticamente en la figura 2.15, en la cual inciden todos los factores antes mencionados.

35
Figura 2.15. Mecanismo de ruptura (exfoliación) en taludes de tierra blanca.

Cohesión

Del análisis de las partículas de la distribución granulométricas, se dice que los productos
piroclásticos de TBJ son no cohesivos y en este caso, c= 0, ya que están compuestos
dominantemente por limos arenosos o arenas limosas (SM) y limos (ML). Estos suelos no poseen
plasticidad, por tanto la cohesión es nula. Esa aseveración es correcta cuando se refiere a depósitos
sedimentarios con esas características granulométricas, pero cuando se trata de suelos volcánicos,
hay otros elementos que influyen para que las partículas de los suelos se mantengan unidas.
Después del estudio de varias unidades de la TBJ, se ha encontrado que existen ciertas
propiedades como la microfábrica, la succión y la cementación, las que se estudiarán a
continuación, las cuales operan de manera conjunta en suelos volcánicos. Cada una de esas
propiedades individualmente tiene su propia influencia en esos depósitos, dependiendo del proceso
eruptivo involucrado, es decir, en un tipo de suelo opera mejor una propiedad que otra.

Microfábrica

Las partículas de TBJ constituidas principalmente por vidrio volcánico, poseen formas muy
particulares llamadas trizas o esquirlas vítreas (glassshard), cuyas formas son angulares, alargadas,
muy irregulares y arqueadas(Véase figura a), las formas geométricas provienen únicamente de los
cristales que son escasos. Estas partículas cuando se entremezclan con fragmentos de variados
tamaños en pómez vesicular (Figura 2.16 b), cenizas tamaño arena, limo y arcilla y hasta partículas
coloidales de sílice, todas se entrelazan y se amarran entre sí manteniéndose unidas, constituyendo
lo que se denomina microfábrica. Esa variedad de formas y tamaños de partículas vítreas hacen del
conjunto algo complejo y es una característica muy importante, sobre todo en los suelos que
componen las ignimbritas de la TBJ. Las partículas coloidales y/o geles de sílice juegan un papel
importante en estos suelos volcánicos parcialmente saturados, mejorando la unión entre las
partículas en presencia de humedad al producir una débil cementación. Los suelos como los
depósitos de caída de TBJ desde el punto de vista geotécnico son descritos como mal graduados
(SP), por lo que producen taludes inestables y la cohesión por la microfábrica es muy baja, debido
a que tienden a ser suelos relativamente uniformes y cuando están lejos del centro de emisión no
poseen cementación por silicatos de calcio y sulfatos de calcio.
36
Fuente: Hart, W. y Steen-McIntyre, V.1983.
Figura 2.16. Fragmentos piroclásticos de vidrio volcánico, tamaño arena fina, colocados en
base de aceite y vistas a través del microscopio. A) Trizas de vidrio alargadas, curvadas y
plaquitas con puntas. B) Fragmento de pómez vesicular.

En la microfábrica están relacionadas la distribución granulométrica, la forma de los granos,


orientación, presencia o no de cemento y su empaquetadura. La empaquetadura de casi todos los
suelos de TBJ no es compacta, característica que se refleja en la porosidad alta y densidad del
suelo relativamente baja, lo que causa que sean fácilmente erosionables. La microfábrica está
relacionada con cierta cohesión que presentan los materiales de TBJ y a eso se refirieron Guzmán
y Melara (1996), quienes la relacionaron con la verticalidad que presentan los taludes de TBJ.
Succión

La microfábrica produce cierta cohesión la que es aún mejorada por la humedad natural en este
tipo de suelos parcialmente saturados. Bommer et al. (1998,2001) y Rolo et al. (2003), estudiaron
las propiedades mecánicas como la succión y han llevado a cabo mediciones para conocer la fuerza
que opera en ella en las unidades superiores de la TBJ. El agua se encuentra formando meniscos
entre los fragmentos piroclásticos produciendo fuerzas capilares que mantienen unidas las
partículas tan finas como los limos y arcillas y gruesas como las gravas y bloques de pómez.

La succión es una fuerza activa que participa en el mantenimiento de los taludes verticales estables
mientras no lleguen al punto de saturación, de lo contrario la succión desaparece por pérdida de los
meniscos, los taludes entran en inestabilidad y el derrumbe puede ocurrir por el aumento de peso
debido al agua. Este mismo comportamiento se esperaría en el caso de la pérdida de agua por
desecación, por pérdida de los meniscos (Bommer, et al. 1998), lo cual frecuentemente ocurre en
los depósitos de caída cuando no están cementados. Sin embargo en la zona cercana al Aeropuerto
de Ilopango los taludes se encuentran verticales, aun cuando han perdido totalmente la humedad
por evaporación, sin embargo se produce cierta exfoliación. Otro factor que contribuye a la
verticalidad de taludes de TBJ a lo largo del tiempo y a pesar de sismos y fuertes precipitaciones es
el asociado al proceso post-de posicional, conocido como cementación secundaria que se da en las
cercanías al centro eruptivo.

37
Cementación

Durante la fase eruptiva, el volátil dióxido de azufre (S02) en la zona de difusión reacciona con el
hidróxido (OH) catalizado por la energía solar, para dar lugar al ácido sulfúrico (H2SO4). Otro gas
importante es el ácido clorhídrico (HCl) que reacciona con agua (H2O) para formar un ácido diluido.
Ambos ácidos entran en contacto con los depósitos piro clásticos a los cuales atacan e intercambian
iones, principalmente con los minerales (piroxenos, ánfíboles, plagioclasas y magnetita). De ese
intercambio iónico surgen los primeros compuestos que posteriormente precipitan formando
minerales sulfatados que cristalizan entre los poros de los suelos volcánicos, produciendo la
cementación de los mismos. Los ácidos también reaccionan con las partículas de vidrio volcánico
más finas como las arcillas y los coloides para formar minerales silicatados, que también producen
un sellado de los poros donde estos se forman, dando más firmeza a los suelos.

Tipos de Deslizamientos

Los deslizamientos son uno de los problemas que más preocupan a los salvadoreños, ya que cada
año con la llegada de la época lluviosa los efectos destructivos que éstos producen se ven
incrementados, causando pérdidas humanas y materiales de gran magnitud.

Considerando lo anterior, en este capítulo se trata de manera más específica la temática de


deslizamientos. Posteriormente se describen las diferentes partes que conforman un deslizamiento
y la clasificación de los diferentes tipos de deslizamientos en base a su mecanismo de falla:
rotacionales y traslacionales. Finalmente se exponen los diversos factores que influyen en la
ocurrencia de los deslizamientos, pudiéndose clasificar en condicionantes y desencadenantes.

NOMENCLATURA DE UN DESLIZAMIENTO.
Los deslizamientos son movimientos que se producen al superarse la resistencia al corte del
material y tienen lugar a lo largo de una o varias superficies o a través de una franja relativamente
estrecha del material; generalmente las superficies de deslizamientos son visibles o pueden
deducirse razonablemente; la velocidad con que se desarrollan estos movimientos es variable,
dependiendo de la clase de material involucrado en el mismo. (Ver también sección 2.4.4)

38
En la figura 3.1 se muestra un deslizamiento o movimiento en masa típico, con sus diversas partes
cuya nomenclatura es la siguiente:
1. Escarpe principal
Corresponde a una superficie muy inclinada a lo largo de la periferia del área en movimiento,
causado por el desplazamiento del material fuera del terreno original. La continuación de la
superficie del escarpe dentro del material forma la superficie de falla.

2. Escarpe secundario
Es una superficie muy inclinada producida por desplazamientos diferenciales dentro de la masa que
se mueve.

3. Cabeza
Las partes superiores del material que se mueve a lo largo del contacto entre el material perturbado
y el escarpe principal.
4. Corona
Es el material que se encuentra en el sitio, prácticamente inalterado y adyacente a la parte más alta
del escarpe principal.
5. Superficie de falla
Corresponde al área debajo del movimiento que delimita el volumen de material desplazado. El
volumen de suelo debajo de la superficie de falla no se mueve.
6. Pie de la superficie de falla
Es la línea (algunas veces oculta) donde se intercepta la parte inferior de la superficie de rotura y la
superficie original del terreno.
7. Base
Es el área cubierta por el material perturbado abajo del pie de la superficie de falla.

8. Pie
Es el punto de la base que se encuentra a mayor distancia de la corona.
9. Costado o flanco
Un lado (perfil lateral) del movimiento.

10. Superficie original del terreno


La superficie que existía antes de que se presentara el movimiento.

TIPOS DE DESLIZAMIENTOS (Según el Tipo de Falla)

Las fallas por deslizamientos son típicas de los taludes artificiales y se presentan con superficies de
falla que en unos casos, penetran profundamente las masas de suelo que constituyen el talud,
originadas por movimientos bruscos.

Estos deslizamientos se pueden dividir en dos subtipos denominados deslizamientos rotacionales


y traslacionales o planares. Esta diferenciación es importante porque puede definir el sistema de
análisis y estabilización a emplearse.

Deslizamientos Rotacionales

39
Los deslizamientos estrictamente rotacionales ocurren usualmente, en suelos homogéneos, sean
naturales o artificiales y por su facilidad de análisis son el tipo de deslizamiento más estudiado en
la literatura. Frecuentemente la forma y localización de la superficie de falla está influenciada por
las discontinuidades, juntas y planos de estratificación. El efecto de estas discontinuidades debe
tenerse muy en cuenta en el momento que se haga el análisis de estabilidad.

En los deslizamientos rotacionales, el movimiento ocurre a lo largo de una superficie de falla curva
que se desarrolla en el interior del cuerpo del talud, afectando o no, al terreno de cimentación.
Dichas fallas se originan cuando los esfuerzos cortantes actuantes sobrepasan la resistencia del
material. (Ver figura 3.2).

Figura 3.2. Deslizamiento rotacional típico.

En los deslizamientos rotacionales pueden presentarse las llamadas fallas locales, que ocurren en
el cuerpo del talud afectando zonas relativamente superficiales (fig. 3.3.a). Además, se presentan
también pasando la superficie de falla por el pie del talud, sin interesar el terreno de cimentación
(fig. 3.3.b) o pasando delante del pie, afectando el terreno en el cual el talud se apoya. (fig.
3.3.c)

Figura 3.3. Tipos de fallas en deslizamientos rotacionales

En zonas tropicales este tipo de suelos no es común y cuando existe rotación, la superficie de falla
es usualmente curva pero no circular; sin embargo, en zonas de meteorización muy profunda y en
rellenos de altura significativa algunas superficies de falla pueden asimilarse a círculos.

Dentro del deslizamiento comúnmente, ocurren otros desplazamientos curvos que forman escarpes
secundarios y ocasionalmente ocurren varios deslizamientos sucesivos en su origen pero que
conforman una zona de deslizamientos rotacionales independientes.

40
3.4.2. Deslizamientos Traslacionales

En el deslizamiento de traslación el movimiento de la masa se desplaza hacia fuera o hacia abajo,


a lo largo de una superficie más o menos plana o ligeramente ondulada y tiene muy poco o nada
de movimiento de rotación o volteo (Ver figura 3.4).

Figura 3.4. Deslizamiento Traslacional.

La diferencia importante entre los movimientos de rotación y traslación está principalmente, en la


aplicabilidad o no de los diversos sistemas de estabilización, sin embargo, un movimiento de
rotación trata de auto estabilizarse, mientras que uno de traslación puede progresar indefinidamente
a lo largo de la ladera hacia abajo. Por su forma de falla también se pueden diferenciar en que en
un deslizamiento rotacional la masa de material se separa de la superficie de falla, en cambio en un
deslizamiento traslacional la masa de material se desplaza hacia abajo sobre la superficie de falla.
Los movimientos de traslación son comúnmente controlados por superficies de debilidad tales como
fallas, juntas, fracturas, planos de estratificación y zonas de cambio de estado de meteorización que
corresponden en términos cuantitativos a cambios en la resistencia al corte de los materiales o por
el contacto entre la roca y materiales blandos o coluviones. En muchos
deslizamientos de traslación la masa se deforma y/o rompe y puede convertirse en flujo.

Los deslizamientos sobre discontinuidades sencillas en roca se les denomina deslizamientos de


bloque, cuando ocurren a lo largo de dos discontinuidades se le conoce como deslizamiento de
cuña y cuando se presentan sobre varios niveles de una familia de discontinuidades se le puede
denominar falla en escalera.

3.5 FACTORES INFLUYENTES EN LOS DESLIZAMIENTOS.

La estabilidad de un talud está determinada por factores geométricos (altura e inclinación),


geológicos (que condicionan la presencia de planos y zonas de debilidad en el talud),
hidrogeológicos (presencia de agua) y geotécnicos o relacionados con el comportamiento mecánico
del terreno (resistencia y de formabilidad).

La combinación de los factores citados anteriormente puede determinar la condición de rotura a lo


largo de una o varias superficies, y que sea cinemáticamente posible el movimiento de un cierto
volumen de masa de suelo o roca. Estos factores los podemos clasificar como condicionantes y
desencadenantes.

Los factores condicionantes (o pasivos) son intrínsecos a los materiales naturales del talud; éstos
son parámetros no susceptibles de cambiar rápidamente y que constituyen las predisposiciones
naturales de las pendientes a presentar inestabilidades. Dentro de ellos están: la litología,
41
estructura, cobertura de terrenos blandos, pendiente, etc. Para el caso de suelos, los factores que
determinan las propiedades resistentes y el comportamiento del talud son la litología, estratigrafía y
las condiciones geológicas. En el caso de rocas, el principal factor condicionante es la estructura
geológica: la disposición y frecuencia de las superficies de discontinuidad y el grado de fracturación.
En el caso de materiales blandos como pizarras o lutitas, los factores predominantes son la litología
y el grado de alteración.

Los factores desencadenantes están relacionados a las variaciones de las precipitaciones y de la


temperatura a medio y largo plazo, a la alteración de suelos y rocas, a la erosión fluviátil, a las
fluctuaciones de las capas freáticas, o a las acciones antrópicas (ejemplos de esto serían la
deforestación y la explotación intensiva de suelos). Estos parámetros provocan la reducción
progresiva o rápida del factor de seguridad hasta un valor próximo a 1 y llevan las pendientes a un
estado potencialmente inestable y en algunos casos provocan la rotura.

Estos son factores externos que actúan sobre los suelos o sobre los macizos rocosos, modificando
sus características, propiedades y condiciones de equilibrio del talud e iniciando el movimiento,
haciendo pasar una pendiente de un estado de equilibrio precario a la ruptura (cuando el factor de
seguridad es menor que

1). Los factores más representativos de este tipo son esencialmente acontecimientos
meteorológicos de corta duración, tales como fuertes precipitaciones diarias o mensuales,
alternancia de congelamiento- descongelamiento del suelo (considerado solamente en regiones de
clima frío), las actividades antrópicas, tales como excavaciones en el pie del talud, sobrecarga en
la cabecera, etc., o vibraciones debidas a sismos o explosiones.

Factores Condicionantes

Estratigrafía y Litología

La naturaleza del material que forma un talud está íntimamente relacionada con el tipo de
inestabilidad que éste puede sufrir, presentando las diferentes litologías distinto grado de
susceptibilidad potencial ante la ocurrencia de deslizamientos o roturas. Las propiedades físicas y
resistentes de cada tipo de material, junto con la presencia de agua, gobiernan su comportamiento
tenso- de formacional y por tanto su estabilidad.
Aspectos como la alternancia de materiales de diferente litología, competencia y grado de
alteración, o la presencia de capas de material blando o de estratos duros, controlan los tipos y la
disposición de las superficies de rotura. En los suelos, que generalmente se pueden considerar
homogéneos en comparación con los materiales rocosos, las diferencias en el grado de
compactación, cementación o granulometría predisponen zonas de debilidad y de circulación de
agua, que pueden generar inestabilidades. En los macizos rocosos, la existencia de capas o
estratos de diferente competencia implica también un diferente grado de fracturación en los
materiales, lo que complica la caracterización y el análisis del comportamiento del talud.

1. Estructura geológica y discontinuidades

La estructura geológica juega un papel definitivo en las condiciones de estabilidad de los taludes en
macizos rocosos. La combinación de los elementos estructurales con los parámetros geométricos
del talud, altura e inclinación, y su orientación, define los problemas de estabilidad que se pueden
presentar. La estructura del macizo queda definida por la distribución espacial de los sistemas de
discontinuidades, que individualizan bloques más o menos competentes de matriz rocosa que se

42
mantienen unidos entre sí por las características y propiedades existentes de las discontinuidades.
La presencia de estos planos de debilidad (como superficies de estratificación, diaclasas, fallas,
etc.) buzando hacia el frente del talud supone la existencia de planos de rotura y deslizamiento
potenciales, y su orientación y disposición condiciona los tipos, modelos y mecanismos de
inestabilidad.
La influencia de la estructura geológica va más allá del condicionamiento geométrico de las roturas,
pudiendo afectar a la estabilidad de los taludes a causa de las modificaciones inducidas por la
excavación por ejemplo, en estructuras de tipo compresivo o distensivo. La existencia de esfuerzos
tectónicos residuales puede inducir procesos desestabilizadores.

Condiciones hidrogeológicas y comportamiento hidrogeológico de los materiales.

La mayor parte de las roturas se producen por lo efectos del agua en el terreno, así como la
generación de presiones intersticiales, o los arrastres y erosión, superficial o interna, de los
materiales que forman el talud. En general, puede decirse que el agua constituye el agente natural
de mayor incidencia como factor condicionante y desencadenante en la aparición de inestabilidades.

La presencia de agua en un talud reduce su estabilidad al disminuir la resistencia del terreno y


aumenta las fuerzas tendientes a la inestabilidad. Sus efectos más importantes son:
1. Reducción de la resistencia al corte de los planos de rotura al disminuir la tensión normal
efectiva
2. La presión ejercida sobre las grietas de tracción aumenta las fuerzas que tienden al
deslizamiento.
3. Aumento del peso del material por saturación
4. Erosión interna por flujo sub superficial o subterráneo.
5. Meteorización y cambios en la composición mineralógica de los materiales.

La forma de la superficie freática en un talud depende de diferentes factores, entre los que se
encuentran: la permeabilidad de los materiales, la geometría o forma del talud y las condiciones de
contorno.

El nivel freático puede sufrir cambios, ya sea por las estaciones o como consecuencia de dilatados
períodos lluviosos o de sequía. Si bien la modificación del nivel freático obedece generalmente a
cambios lentos y períodos largos, en el caso de materiales muy permeables puede llegar a
producirse unas censo relativamente rápido como consecuencia de precipitaciones intensas.

Además del agua en el interior del terreno, hay que considerar el papel de la gua superficial (por
precipitación, escorrentía, etc.), que puede causar problemas importantes de estabilidad al crearse
altas presiones en las discontinuidades y grietas por las que se introduce, y en la zona más
superficial del terreno; de hecho, las roturas en taludes conformados por suelos son más frecuentes
en períodos de lluvias intensas. Los fenómenos de erosión y lavado en materiales blandos o poco
consistentes aparecen asimismo asociados a la presencia de agua superficial.

La influencia del agua en las propiedades de los materiales depende de su comportamiento


hidrogeológico. El efecto más importante es la presión ejercida, definida por la altura del nivel pie
zométrico.

43
Los aspectos más importantes que deben conocerse para evaluar la magnitud y la distribución de
las presiones intersticiales en el talud y los efectos de laguason:

Comportamiento hidrogeológico de los materiales.

 Presencia de niveles freáticos y piezométricos.


 Flujo de agua en el talud.
 Parámetros hidrogeológicos de interés: coeficiente de permeabilidad o conductividad
hidráulica, gradiente hidráulico, transmisividad y coeficiente de almacenamiento.

Las presiones intersticiales actuando en el interior de un talud pueden medirse directamente con
piezómetros. Estas medidas proporcionan el valor de la presión que ejerce el agua en un punto en
el interior de un sondeo, o el nivel piezo métrico de las capas o formación es interceptadas por la
tubería (si son varias, el nivel medido corresponderá al de la formación con mayor altura pie
zométrica).

Propiedades Físicas, Resistentes y Deformacionales

La posible rotura de un talud a favor de una determinada superficie depende de la resistencia al


corte de la misma. En primera instancia, esta resistencia depende de los parámetros resistentes del
material: cohesión y rozamiento interno.

La influencia de la naturaleza de los suelos en sus propiedades mecánicas, implica que la selección
de los parámetros resistentes representativos de la resistencia al corte, debe ser realizada teniendo
en cuenta la historia geológica del material.
En macizos rocosos, son las propiedades resistentes de las discontinuidades y de la matriz rocosa
las que controlan el comportamiento mecánico. En función de las características y estructura del
macizo, de su red de fracturación y de la naturaleza de los materiales y de las discontinuidades, la
resistencia vendrá controlada por las propiedades de las discontinuidades, por las propiedades de
la matriz rocosa o por ambas.
El comportamiento de un macizo rocoso competente depende, generalmente, de las características
de las discontinuidades, además de su litología e historia geológica evolutiva. La resistencia al corte
de planos de debilidad depende de su naturaleza y origen, continuidad, espaciado, rugosidad, tipo
y espesor de relleno, presencia de agua, etc., y es el aspecto importante para determinar la
estabilidad del macizo rocoso.
Tensiones Naturales y Estado Tenso - Deformacional

Las tensiones naturales pueden jugar un papel importante en la estabilidad de los taludes rocosos.
La liberación de tensiones que puede suponer la excavación de un talud puede originar tal
descompresión que el material se transforma y fragmenta por las zonas más débiles y pasa a
comportarse como un suelo.

El estado tensional de un talud depende de su configuración geométrica y del estado detensiones


del macizo rocoso previo a la excavación. En la figura. Se presenta un ejemplo de la distribución de
los esfuerzos litostáticos después de realizar una excavación. En excavaciones profundas, las
elevadas tensiones que se generan en zonas singulares como el pie del talud pueden dar lugar a
condiciones de desequilibrio, llegando incluso a producirse deformaciones plásticas.También en la
cabecera del talud se generan estados tensionales anisótropos con componentes traccionales que
provocan la apertura de grietas verticales.
44
Figura. 3.5 Modificación de las trayectorias de los esfuerzos horizontales originales como
con secuencia de una excavación.

Si un macizo rocoso está sometido a tensiones de tipo tectónico, al realizarse una excavación tiene
lugar la liberación y redistribución de las mismas. Esta modificación del estado tensional previo
contribuye a la pérdida de resistencia del material.

Factores Desencadenantes

Deforestación

El desarrollo de los países incluye un conjunto de actuaciones adecuadas a crear una infraestructura
que permita el progreso de los mismos. Debido a esto, las personas tienen que hacer un mayor uso
de los recursos naturales para cubrir sus necesidades, lo que genera una exigencia mayor de
materia prima y espacio, lo que conlleva a la deforestación.

La deforestación de ciertos taludes incide adversamente en el régimen de agua en las capas más
superficiales, contribuyendo a la actuación de otros factores desestabilizadores.

Lluvia.

Las variaciones de la lluvia constituyen un factor desencadenante de las inestabilidades,


contribuyendo a aumentar la acción de diversos factores condicionantes tales como: la
meteorización, la acción de aguas subterráneas, etc. Este fenómeno se ve incrementado cuando
las precipitaciones se dan por un período de tiempo prolongado, lo que produce la saturación de los
suelos.

45
El impacto de las gotas de lluvia sobre los suelos produce salpicaduras que levantan y dejan caer
las partículas, tendiendo a transportarlas a niveles inferiores de la vertiente. Consecuentemente
se origina una removilización superficial de los suelos, que puede disminuirla capacidad de
infiltración del mismo, ya que las partículas desplazadas tienden a taponar las aberturas naturales
de éste.

Subsidencia Regional.

Diversos estudios y evidencias han puesto de manifiesto los movimientos que existen en la corteza
terrestre, en orden a establecer un equilibrio de la misma. Uno de los reflejos de estos movimientos
es la subsidencia, la cual tiene cierta importancia en la estabilidad de taludes debido a que produce
ciertas fluctuaciones en las capas freáticas. Esta actúa como un factor que interfiere gradualmente
en la estabilidad de los taludes y desencadena movimientos, cuando está asociada a fenómenos
sismo-tectónicos.

Se consideran como subsidencias regionales, los desplazamientos verticales que se producen en


los niveles del mar y de la tierra en grandes áreas de la corteza terrestre. También existen
subsidencias estrechamente relacionadas con grandes accidentes tectónicos y otras que
acompañan a movimientos más violentos y que constituyen acciones de reajuste posterior. Estas
tienen un carácter local.

Las subsidencias tienen una desigual distribución espacial y se desarrollan deforma gradual y muy
lenta, prácticamente imperceptibles, salvo las que acompañan a seísmos. El efecto que causa es
un progresivo aumento del ángulo del talud, que contribuye a la aparición de algunos
deslizamientos. Esto produce un cambio de los esfuerzos existentes en el interior del terreno,
alterando las condiciones de equilibrio por un aumento del esfuerzo de corte. Es necesario que el
talud esté próximo a las condiciones de equilibrio límite para que este pequeño y lento movimiento
tenga efectosnotables.

Meteorización

En determinados tipos de suelos o macizos rocosos blandos, los procesos de meteorización juegan
un papel importante en la reducción de sus propiedades resistentes, dando lugar a una alteración y
degradación intensas al ser expuestos los materiales a las condiciones ambientales como
consecuencia de una excavación. Esta pérdida de resistencia puede dar lugar a la caída del material
superficial y, si afecta a zonas críticas del talud, como su pie, puede generar roturas generales,
sobre todo en condiciones de presencia de agua.

Sobrecargas Estáticas

Las sobrecargas estáticas que se ejercen sobre los taludes modifican la distribución de las fuerzas
y pueden generar condiciones de inestabilidad. Estas sobrecargas son un factor condicionante de
los movimientos que modifican el entorno natural en el que se produce dicha acción.

Las sobrecargas estáticas son el resultado del incremento del peso debido a diversos tipos de
construcciones sobre el terreno natural, tales como rellenos y terraplenes, estructuras o edificios,
paso de vehículos pesados, acopio de materiales de diversa índole, etc. También puede producirse
por el peso del agua infiltrada en el terreno como consecuencia de fugas en conducciones,
alcantarillado, canales, depósitos, etc.

46
El efecto producido es generalmente un incremento del esfuerzo de corte del terreno, y cuando se
trata de suelos con alto contenido de arcilla se origina un aumento de la presión intersticial. De esta
forma se modifican las condiciones de equilibrio existentes en el terreno, pudiendo darse diferentes
tipos de movimientos.

1. Cargas Dinámicas

Las cargas dinámicas se deben, principalmente, a los movimientos sísmicos y a vibraciones


producidas por voladuras cercanas al talud. El principal efecto en los macizos rocosos fracturados
es la apertura de las discontinuidades preexistentes, con la consiguiente reducción de su
resistencia al corte, y la individualización y caída de bloques rocosos. En casos de fuertes
movimientos sísmicos, las fuerzas aplicadas de forma instantánea pueden producir la rotura general
del talud si existen condiciones previas favorables a la inestabilidad.

 Sismos

Cuando ocurre un sismo se genera una serie de vibraciones que se propagan como ondas de
diferentes frecuencias. La aceleración horizontal y vertical asociada a esas ondas origina una
fluctuación del estado de esfuerzos en el interior del terreno afectando el equilibrio de los taludes.
Así se puede producir una perturbación de la trabazón inter granular de los materiales,
disminuyendo su cohesión. Esta acción sísmica es compleja y origina unos fenómenos de
formacionales que pueden ser de tipo sismotectónicoo sismogravitacional. El primer tipo es
manifestación de los movimientos que se producen en la corteza a lo largo de fallas, plegamientos,
etc., producidos durante terremotos de intensidad mayor de 6.5 (Escala de Mercalli). Las
características de la deformación dependen de la naturaleza de los esfuerzos con independencia
de las fuerzas gravitacionales.
Los fenómenos deformacionales de tipo sismo-gravitacional tienen una dinámica específica. Los
materiales movilizados se extienden sobre áreas mucho mayores que los movimientos debidos a la
gravedad, particularmente si ha habido vibraciones de larga duración. Estos originan grandes
deslizamientos, avalanchas, desprendimientos y coladas.
El factor sísmico de mayor incidencia en los movimientos de los taludes es la intensidad de la
sacudida, a partir de 6.5 (en escala de Mercalli) y en menor medida su duración. Un sismo de una
intensidad igual o superior a VIIMSK (magnitud 5 de Richter) puede ya activar movimientos de
terrenos si las condiciones intrínsecas y los factores agravantes han llevado las pendientes a un
equilibrio precario. En las regiones sísmicamente activas como la nuestra, los terremotos son la
causa predominante de los movimientos de taludes.

 Voladuras y Explosiones.

Los efectos inmediatos de las voladuras son los derivados de las características de la onda que se
propaga y de los gases que se originan. Pueden actuar como desencadenantes de los movimientos,
condicionando Y disminuyéndola estabilidad de los macizos rocosos.

El comportamiento del terreno, como medio transmisor, depende principalmente de sus


características resistentes a la tracción, existencia de discontinuidades que supongan superficies
de reflexión de la onda, contenido de agua, etc. La onda de compresión origina la apertura de grietas
radiales alrededor de la carga y la de tracción fragmenta el material. También se pueden producir
plastificaciones del mismo.

47
Las vibraciones producidas actúan como pequeños sismos y pueden darse proyecciones de
diversos tamaños de material. Como consecuencia se amplía la red de fracturación preexistente en
el terreno, creando nuevas superficies potenciales de deslizamiento.

2. Vulcanismo

Los volcanes en actividad llevan asociados movimientos sísmicos de características específicas en


cuanto a su intensidad, frecuencia, etc. Originan modificaciones en las laderas que forman sus
conos y en los materiales depositados sobre los mismos (hielo, nieve, derrubios, etc).
El campo de esfuerzos existente en los conos volcánicos puede modificarse como resultado de una
dilatación de las cámaras magmáticas, cambios en el nivel del magma de los mismos y aumento en
los temblores armónicos que continuamente se dan. Dichos fenómenos alteran el equilibrio de los
taludes que rodean a los cráteres, produciendo generalmente fallas y colapsos.

3. Cambios en las Condiciones Hidrogeológicas

Entre estos cambios se pueden mencionar:

 Modificación de las condiciones naturales del agua superficial por medio de canales, zanjas,
represas, etc.
 Modificación de las condiciones naturales del agua subterránea por medio de pozos de
bombeo, concentración de las infiltraciones, etc.
 Infiltración de ductos de agua, especialmente acueductos y
alcantarillados.
 Aceleración de infiltración por la presencia de depósitos de basura y residuos sobre el talud.
 Negligencia en el drenaje superficial y subterráneo.

 Cambio general en el régimen de aguas superficiales.

4. Factores Climáticos

Las precipitaciones y el régimen climático influyen en la estabilidad de los taludes al modificar el


contenido de agua del terreno. La alternancia de períodos de sequía y lluvia produce cambios en la
estructura de los suelos que dan lugar a pérdidas de resistencia. Se pueden establecer criterios de
riesgo de inestabilidad de taludes en función de la pluviometría.

Las condiciones meteorológicas susceptibles de activar los movimientos de terrenos varían


fuertemente en función de los tipos de inestabilidades. Por ejemplo, un acontecimiento único de
fuertes precipitaciones (P>50 mm en un día) provoca siempre deslizamientos superficiales o
coladas de escombros pero no engendran sistemáticamente otros fenómenos de inestabilidades.
Los deslizamientos profundos necesitan períodos prolongados (de algunos días o varios meses) de
fuertes precipitaciones para sufrir aceleraciones sensibles de los movimientos.

5. Variaciones en la geometría.

La modificación de la topografía del terreno mediante cortes o rellenos en un talud puede producir
la activación de un deslizamiento, ya que al realizarlos se producen varios cambios sustanciales en
el estado de la formación residual, rompiendo el equilibrio natural existente en la masa de suelo.

6. Cambios en la Cobertura Vegetal


48
Cuando se producen cambios en la estructura y condiciones de la capa superficial de suelo por
prácticas de agricultura, pastoreo, tala de bosques, etc., o si hay una modificación del uso del suelo
el riesgo por deslizamientos puede verse incrementado.

TÉCNICAS DE MITIGACIÓN DE DESLIZAMIENTOS

GRÁFICO4.1:CLASIFICACIÓNDELASTÉCNICASDEMITIGACIÓN.
(En función del trabajo que realizan en el material aserestabilizado)

Remocióndematerialesenlacabecer
a

4.1 DESCRIPCIÓN DE LAS TÉCNICAS DE MITIGACIÓN

4.2.1 REDUCCIÓN DE FUERZAS ACTUANTES

Es el procedimiento por medio del cual se tiende a lograr el equilibrio de las masas del talud,
reduciendo las fuerzas desestabilizadoras que producen el movimiento.

a. MODIFICACIÓN DE LA GEOMETRÍA DEL TALUD


49
Mediante la modificación de la geometría de los taludes se logra redistribuir las fuerzas debidas al
peso de los materiales, obteniéndose una nueva configuración más estable.
a.1 Abatimiento o cambio de pendiente de Taludes.

El abatimiento de taludes es la modificación de su pendiente con el fin de lograr que esta sea menor
para aumentar su estabilidad; este método puede ser aplicado tanto a taludes de corte como de
relleno.

Este método funciona tanto para materiales sueltos como rocosos, aunque resulta más efectivo en
suelos friccionantes. Su uso no es recomendado para taludes de gran altura debido al elevado costo
que esto implicaría.

Figura 4. 1. Esquema de proyección de cambio de pendiente de un talud.

Al disminuirla pendiente del talud, el círculo crítico de falla se hace más largo y más profundo para
el caso de un talud estable, aumentándose en esta forma el factor de seguridad.

Cuando su aplicación sea en taludes de relleno el objeto del trabajo será:

a. Aumentar la estabilidad del relleno.

b. Alejar de la corona el pie del talud, disminuyendo el peligro de la erosión al reducir la


velocidad de escurrimiento del agua.

 Abatimiento en taludes por relleno.

El abatimiento de la pendiente del talud es económicamente posible en taludes de poca altura, pero
no ocurre lo mismo en taludes de gran altura, debido al aumento exagerado de volumen de tierra
de corte con el aumento de la altura, y en ocasiones el abatimiento por relleno no es posible por
falta de espacio en el pie del talud.
Uso de los sistemas de información geográfico en la planeación del uso de la tierra

1. LAS APLICACIONES DE LOS SISTEMAS DE INFORMACIÓN GEOGRÁFICA

Los sistemas de información geográfica (para una definición detallada de esta herramienta
se puede consultar el libro de Bosque Sendra, 1997, p. 21-
24) se han convertido en una herramienta para el análisis geográfico de gran difusión. La
50
causa principal de esto reside en la multitud de actividades en las que pueden ser útiles, las
podríamos clasificar en dos grandes grupos:

A) Gestión y descripción del territorio: Es decir se trata de contestar a preguntas del tipo:
¿DÓNDE ESTÁN LAS "COSAS"? Por ejemplo: 1.° El mantenimiento, cartografía y control de
grandes infraestructuras (redes de abastecimiento y evacuación de aguas, red telefónica,...),
es decir los denominados sistemas AM/FM. 2.° El control y gestión de datos catastrales, los
sistemas LIS/SIC. 3.° La gestión urbana y municipal.

B) Ordenación y planificación del territorio: En este caso se trata de responder a cuestiones


del tipo: ¿DÓNDE DEBEN ESTAR LAS "COSAS"? Por ejemplo: 1.° Las tareas de planificación
urbana. 2.° La Ordenación del territorio y la Planificación ambiental. 3.° El análisis y
preparación de políticas sobre el transporte: flujo de tráfico, delimitación de áreas de
influencia, cálculo de rutas óptimas. Ayuda a la conducción. 4.° El Geo marketing y/o la Geo
demografía.

En cada uno de estos dos grandes tipos de aplicaciones los SIG realizan tareas diferentes y,
por lo tanto, se utilizan distintas capacidades y funciones. En concreto, en la Gestión y
descripción del territorio las funciones más empleadas son las siguientes: a) Las de "Entrada
de datos", necesarias para construir las importantes bases de datos imprescindibles para esta
actividad (digitalización espacial, integración de los aspectos temáticos, etc.). b) Las
relacionadas con la organización y gestión adecuada de esta importante y compleja base de
datos. c) La Cartografía y presentación de resultados. d) Finalmente, la búsqueda selectiva de
información.

En resumen, en este caso principalmente se utilizan las funciones básicas, las más
semejantes a las existentes en otros tipos de herramientas: programas de cartografía asistida
por ordenador, bases de datos, etc.

Por el contrario, en las actividades relacionadas con la ordenación y planificación del


territorio las funciones más empleadas son otras, principal- mente las siguientes: a) Búsqueda
selectiva de información. b) Exploración y descripción de los datos. c) Generación de modelos
explicativos y su confirmación con la información preexistente. d) Manipulación de la
información: superposición, cambio de tipo de elemento geográfico, etc.

A partir de este momento nuestra atención se centra exclusivamente en las aplicaciones


de los SIG a la Ordenación del territorio y la planificación ambiental.

2. FASES DE LA PLANIFICACIÓN TERRITORIAL

Entendemos por planificación territorial las actividades, realizadas por cualquier agente
público o privado, para establecer políticas que deben ser seguidas por la población y otros
agentes económicos en cuanto al uso de los recursos naturales, la protección del medio
ambiente y la localización óptima de las diferentes actividades.

Desde un punto de vista geográfico, el que nos interesa en este trabajo, la planificación
territorial supone, principalmente, el establecimiento de los usos más apropiados para cada
porción del territorio. La decisión sobre cuáles son estos usos depende, entre otros factores,
51
de razones y criterios derivados de la conservación del ambiente natural y debe tener en
cuenta tanto la vocación "intrínseca" de cada punto del territorio, determinada por su aptitud
para cada uso o actividad, como el impacto potencial que tendrá sobre el medio ambiente la
realización de una determinada actividad en ese punto del territorio.

Un aspecto importante de nuestro planteamiento es la distinción entre dos momentos o


fases que se pueden establecer en la ordenación del territorio y la planificación ambiental:

La primera fase (que no tiene carácter geográfico): establece los objetivos territoriales a
alcanzar, por ejemplo: superficies dedicadas a cada tipo de ocupación, longitud de las
carreteras a construir, cantidad de instalaciones y equipamientos a edificar, etc. En esta etapa
inciden profundamente las disponibilidades económicas existentes y los objetivos políticos e
intereses de la Administración y de los agentes sociales implicados.

• En una segunda fase (de base geográfica) la finalidad es la asignación "óptima" de la


posición espacial para las ocupaciones antes seleccionadas, de las carreteras a construir, de
los equipamientos, etc. Es en este momento donde una serie de nuevas herramientas de
análisis y planificación territorial, que vamos a discutir en este trabajo, tienen su aplicación,
entre estas herramientas destacan los Sistemas de información geográfica.

No obstante, es evidente que los resultados alcanzados en segunda fase pueden afectar
a la definición de los objetivos de la primera, de modo que existe algún tipo de ciclo de
"realimentación" en todo el proceso. Y, por lo tanto, las citadas herramientas inciden,
finalmente, en todos los momentos de la planificación.

El objetivo principal de este texto no es una discusión teórica sobre el significado real de
la planificación territorial (sobre ello consultar, por ejemplo, Otero, 1993, pp. 11-20), sino el
planteamiento, mucho más específico y limitado, de las funciones que las nuevas
herramientas geográficas, los ya mencionados Sistemas de Información Geográfica, pueden
cumplir en la difícil tarea de desarrollar una útil planificación delterritorio.

3. PAPEL DE LOS SIGS EN LA PLANIFICACIÓN AMBIENTAL Y LA ORDENACIÓN


DEL TERRITORIO

En estas actividades los nuevos instrumentos de análisis geográfico pue- den cumplir
diferentes funciones en las distintas etapas en que se suele dividir un proceso de planificación
(Arentze, Borgers y Timmerman, 1996).
1.° En la fase de Identificación del problema, previa a la planificación propiamente dicha, los
SIG son muy útiles por su capacidad de analizar los datos geográficos que definen el problema
a tratar y a resolver con la planificación territorial y ambiental. Facilitan la Cartografía de los
diferentes aspectos que inciden en la cuestión a conocer; permiten, mediante la superposición
y otras formas de manipulación de la información, combinar datos y observar algunas de sus
interrelaciones. No obstante, sería necesaria una importante ampliación de las capacidades
exploratorias de los SIG actuales para mejorar su uso en este sentido (Bosque Sendra, 1996).
Ya hace algún tiempo que se ha ido insistiendo en la grave insuficiencia de las técnicas
habitualmente integradas en los programas SIG actuales para permitir una descripción en
profundidad de las características espaciales y temáticas de los datos integrados en un SIG.
El objetivo futuro sería la integración dentro de los programas SIG de funciones potentes de
análisis estadístico, en especial de su enfoque exploratorio (Hoaglin y Mosteller, 1983; Hoaglin,
52
Mosteller y Tukey1985). Igualmente, están en desarrollo nuevos tipos de procedimientos de
exploracióndondesecombinaelanálisissimultaneoeinteractivodelosaspectos temáticos y
espaciales (Bailey y Gatrell, 1995; Densham, 1996; Haslett, Wills y Unwin, 1990).
2.° La etapa de Especificación de los objetivos es fundamental en la planificación
territorial. Ya hemos indicado que esta tarea responde a la con- sideración de los criterios
económicos y políticos generales y, por lo tanto, los SIG ocupan un papel secundario en esta
fase. Normalmente, los SIG existentes en el mercado no disponen de capacidades para la
visualización simultanea de diferentes objetivos y de las interrelaciones entre ellos, por lo que
su empleo en esta tarea no es habitual. En cualquier caso, las posibilidades de visualización
y cartografía existentes en los SIG siempre constituyen una ayuda para estas actividades.
3.° La fase de Generación de alternativas: esta actividad está basa- da en la
combinación de los diferentes datos existentes sobre el problema y en el uso de técnicas y
modelos que permitan generar diferentes soluciones a la cuestión. Los SIG están
especialmente bien preparados para estas actividades, debido a sus capacidades para
superponer y combinar estratos temáticos diferentes. Aún así es importante ampliar estas
posibilidades, muy en especial integrando o relacionando los SIG con nuevos tipos de
modelos matemáticos, en concreto los que intentan explicar problemas detipo ambiental o
social y económico. La literatura sobre todo ello es cada vez más abundante, un buen y amplio
resumen se puede encontrar en Good- child, Parks y Steyaert (1993) y Goodchild, Steyaert y
Parks (1996), dos extensos volúmenes con buenos ejemplos de la variedad de trabajos
existentes sobre eltema.
4.° Etapa de Evaluación de las alternativas frente a los objetivos. Una vez disponibles
las diferentes soluciones al problema, resultado de la faseanterior, es necesario contrastar
cada una de ellas con los objetivos establecidos en la segunda etapa. Para ello, por un lado,
es necesario reunir y manejar nueva información, en lo cual un SIG puede ayudar
ampliamente, y, por otro, es fundamental establecer una evaluación precisa de cómo cada
alternativa obtenida cubre los objetivos pretendidos. Esta evaluación, para que sea adecuada
a la complejidad de los problemas territoriales, requiere el uso de técnicas muy elaboradas,
entre ellas destacan las de evaluación multicriterio (Barba-Romero y Pomerol, 1997; Barredo,
1996). Por ello, es importante, la integración de estos instrumentos con los SIG, más adelante
comentamos con más detalle la cuestión.
5.° La fase de Organización del plan. Establecimiento de un programa coherente y
sistemático donde se integren las distintas alternativas seleccionadas que la puesta en
práctica del plan supone. En este caso el uso de los SIG es difícil, ya que estos instrumentos
no tienen capacidades para esta actividad, más adecuado resulta la utilización de
procedimientos de planificación de tareas como el PERT y otros semejantes.

6.° Finalmente, la etapa de Control de la aplicación del plan. Si un plan de ordenación


territorial quiere tener éxito, es necesario establecer mecanismos que permitan su control y el
rápido establecimiento de las diferencias entre lo que realmente ocurre y lo que el plan había
determinado. Para ello, nuevamente, los SIG pueden ser una interesante herramienta, dada
su capacidad de comparar dos realidades espaciales, la que había imaginado el plan, y la que
realmente se está produciendo, utilizando para ello las funciones de superposición y
combinación de diferentes estratos temáticos.

Como vemos los SIG son útiles en bastantes momentos del proceso de planificación, por
ello parece cada vez más necesario su uso en estas tareas. No obstante, también son ciertas
las mencionadas insuficiencias de los SIG actuales para resolver las complejas necesidades
de la planificación territorial. Una tendencia importante es la del uso combinado de SIG y
Técnicas de Evaluación Multicriterio para la más completa evaluación cuantitativa de las
53
alternativas disponibles y para la formulación de planes coherentes de ordenación del
territorio.

De acuerdo con todo lo indicado el uso más habitual de los SIG en la Ordenación territorial
se corresponde con la selección del lugar o lugares más adecuados para situar alguna de las
actividades humanas. Utilizando para ello gran número de criterios que se pueden considerar
incidentes en la validez y adecuación de la decisión.

La variedad de problemas donde esta idea general se puede concretar es muy grande, los
podemos clasificar de muchas formas, una de ellas es en función del tipo geométrico de los
elementos a localizar. Esta clasificación responde, evidentemente, al papel de los SIG como
herramientas de apoyo a la Ordenación del territorio, ya que en un programa SIG existen
notables diferencias en las técnicas para analizar datos puntuales frente a las empleadas para
datos lineales o poligonales, no obstante, dado el enfoque de este trabajo, en el cual nos
interesa estudiar el papel de los citados instrumentos en la planificación, nos parece que
resulta adecuado emplear esta clasificación de los problemas de la Ordenación territorial. De
este modo tenemos tres tipos de cuestiones: a) localización óptima de instalaciones puntuales,
b) trazado de infraestructuras lineales y c) asignación espacial de los usos del suelo
poligonales. A continuación se estudia cada uno de ellos más en detalle.

4. LOCALIZACIÓN ÓPTIMA DE ELEMENTOS PUNTUALES

En este caso se trata de la localización "óptima" de instalaciones con reducida extensión


superficial, tales como escuelas, hospitales, comercios, vertederos, etc. En este caso, la
insistencia principal reside en conseguir posiciones de los equipamientos e instalaciones que
maximicen la eficacia y la justicia espacial derivadas de su empleo por la población, las cuales
están estrechamente relacionadas con el volumen y distribución de las distancias recorridas
para utilizar estos equipamientos, y que, al mismo tiempo, reduzcan los posibles impactos
ambientales.
La cuestión principal es, por lo tanto, la optimización (minimización o maximización, según
el tipo de instalación) de las distancias que el conjunto de la población tiene que recorrer para
utilizar alguna de las instalaciones planteadas y que, al mismo tiempo, no exista un
desequilibrio demasiado intenso entre las distancias que unas personas tienen que atravesar
frente a las que otras deben viajar. En este sentido los modelos de localización asignación son
una herramienta fundamental, en los últimos años se están desarrollando numerosos intentos
para integrarlos dentro de los programas SIG comerciales (Bosque y Moreno,1990).
Existe una amplia literatura que trata todos estos temas, en Bosque y otros (2000) se
puede encontrar un amplio resumen de la cuestión; en Fernández y Bosque (1991) se muestra
un ejemplo de análisis aplicado a los equipamientos sanitarios; en el artículo de Bosque y
Franco (1995) se plantea el caso de las instalaciones no deseables; Joerin y Musy (1995)
discuten el uso de técnicas de evaluación multicriterio en estas cuestiones; finalmente en
Moreno (1988, 1987 y 1992) se detallan diversos aspectos metodológicos y técnicos del tema.

5. LOCALIZACIÓN ÓPTIMA DE ELEMENTOS GEOGRÁFICOS DE TIPO LINEAL

En esta ocasión el problema reside, por ejemplo, en la posición "óptima" del trazado de
carreteras, caminos, líneas férreas, canales, y en general, todo tipo de infraestructuras
lineales.

54
Como en el caso anterior aquí también se deben considerar criterios de diverso tipo:
económicos (minimización de los costes de construcción) y ambientales (reducción de los
impactos negativos que el trazado de la infra- estructura produce).

En numerosos trabajos se han planteado estas cuestiones, entre ellos se pueden


mencionar los siguientes: Brainard, Lovett, y Parfitt, 1996; Gómez y otros, 1996; Monzon,
Gomar y Rey, 1992; Otero, 1993, pp. 165-191.

Existen diversos tipos de problemas sobre la localización óptima de elementos lineales: a)


Localización de caminos/rutas óptimas sobre redes de transporte ya existentes. Ejemplo:
establecer por donde debe viajar un repartidor de productos (leche, pan, etc.) de manera que
el coste del viaje (o el tiempo de recorrido, etc.) sea mínimo. Clásico problema del viajante. b)
Determinación del nuevo trazado de carreteras u otro tipo de infraestructuras lineales.
También en este caso se pueden plantear dos modalidades: 1.° Se dan por encontrados varios
trazados diferentes a una nueva ruta. Es necesario evaluar cuál es el más adecuado. Cada ruta
se evalúa por separado y se elige la que sea más corta o barata de construir. 2.° Se emplea un
procedimiento de búsqueda exnovo de un recorrido óptimo teniendo en cuenta los criterios
necesarios que miden lo adecuado que es el paso por cada punto del territorio.

La ruta óptima encontrada debe maximizar la adecuación o, lo que es lo mismo, minimizar los
inconvenientes totales del trazado. Es posible emplear diversos tipos de criterios para determinar
la localización óptima de una nueva infraestructura lineal: a) Económicos: establecen el coste de
construir la ruta o las ventajas que su trazado supondrá para los usuarios o para las zonas
servidas. b) Ambientales: se mide en cada punto del trazado el efecto negativo de la ruta para el
medio ambiente.
Se trata de una versión del modelo aptitud/impacto (ventajas/inconvenientes de la ruta) que se
estudiará más abajo.

Soluciones para el problema de determinar una ruta/trazado óptimo sobre una red existente

Existen diversos algoritmos matemáticos que resuelven el problema. El más conocido es el de


Dijkstra, que usualmente está disponible en los programas de análisis de redes integrados en un
SIG. En Daskin (1995, pp. 41-
53) se puede encontrar una descripción de un algoritmo de este tipo. Por ejemplo, en el módulo
Network de ARC/INFO se puede emplear la orden Route para llevar a cabo este proceso. En el
caso de un SIG ráster (como IDRISI) la solución se puede esquematizar en lo siguiente (Gómez y
Bosque, 2000): 1.° Establecer un mapa de fricciones unitarias, con valores desde 1 al máximo en
las rutas ya existentes (fricción con valores en proporción inversa a la velocidad máxima en cada
una de las rutas), en el exterior de las rutas valor –1 (imposibilidad de paso). 2.° Calcular el mapa
de costos de recorrido acumulados hasta uno de los extremos de la ruta deseada, usando para
ello el algoritmo COSTGROW (el cual no permite pasar por pixels con fricción de
–1). 3.° Sobre este mapa de costes acumulados usar la orden PATHWAY con el otro extremo
de la ruta como origen del camino. El resultado es una trayectoria que minimiza los costes
acumulados de ir desde un extremo al otro de la ruta. El resultado difiere y es algo peor (más largo
y más costoso) que el obtenido con ROUTE de ARC/INFO.

Soluciones para el problema de determinar una nueva ruta de trazado óptimo sin una red
existente

55
Para la variante del problema que consiste en evaluar trazados diferentes ya establecidos de
una nueva ruta (Monzón, Gomar y Rey, 1992), el procedimiento sería el siguiente: a) Crear
estratos temáticos de cada uno de los criterios que valoran la adecuación de que la nueva
ruta pase por un punto del territorio, en estos mapas cada punto del territorio se valora en
cuanto a su adecuación para recibir la ruta. b) Superponer cada trazado sobre los diversos
criterios y extraer los valores de adecuación del paso de la ruta por cada punto. c) Combinar
los valores de adecuación extraídos en cada trazado para construir un único valor de medida
de adecuación. Se pueden usar métodos de evaluación multicriterio para llevar a cabo esa
combinación. d) Elegir el trazado con el mayor valor de adecuación.

En la segunda variante del problema, la búsqueda de un recorrido óptimo para la nueva ruta,
la solución se puede esquematizar así (Gómez y otros, 1996): a) Se crean estratos temáticos
con los criterios de adecuación. b) Los criterios se convierten a valores de fricción unitaria o
dificultad de paso de la ruta por cada punto. c) Se combinan las fricciones unitarias
consideradas en un solo mapa de fricción unitaria, en este mapa el valor existente en cada
punto del territorio mide lo costoso que resulta que la nueva ruta pase por ese lugar. d) Se
obtiene una superficie de costes acumulados de ir hasta uno de los extremos de la ruta, el
origen de ella, usando para ello la orden COST- PUSH de IDRISI. e) El algoritmo de búsqueda
determina, en la anterior superficie de costos, por donde pasa la ruta de manera que se
minimice el costo acumulado, se emplea para esto la orden PATHWAY. El algoritmo utilizado
por PATHWAY es el de la máxima pendiente sobre la superficie de costos, es decir a partir del
otro extremo de la ruta, el destino, se va buscan- do una trayectoria que discurra bajando
siempre por la máxima pendiente en la superficie de costos hasta el origen de la nueva ruta.
Esa es la ruta más adecuada.

Este tipo de problema, buscar exnovouna nueva localización para una ruta, es más
pertinente para su resolución con un SIG raster, por el contrario, como ya se ha indicado, el
problema de la trayectoria óptima en un red de carreteras preexistente es más propicio para
su estudio con un SIG vectorial.

6. LOCALIZACIÓN ÓPTIMA DE POLÍGONOS

Es decir de los usos del suelo que se extienden por grandes porciones del territorio, se trata,
por tanto, de la asignación "óptima" de las ocupaciones del suelo: urbano-residenciales,
industriales, agrarias, protección natural, etc. Se trata de una tarea muy habitual en los planes
de ordenación urbana o territorial.

Existen numerosas modalidades para resolver el tema, una de la más conocida es la de


establecer la capacidad de acogida de cada punto del terreno para recibir una actividad
(Gómez Orea, 1992 a y b; 1994).

La capacidad de acogida en un punto del territorio depende de su aptitud intrínseca para


soportar tal tipo de uso y del impacto ambiental que la localización allí de ese uso genera en
ese lugar y su entorno.
Determinadas las capacidades de acogida de todas las actividades previstas se puede
elegir aquella donde, comparativamente, sea máxima la capacidad de acogida. En Barredo
(1996) se puede encontrar una muy amplia discusión de toda la problemática del tema y en
Eastman y otros (1993 a y b, 1995) el pormenor de su inclusión en un programa SIG concreto:
IDRISI para WINDOWS.

56
Una metodología para la asignación óptima de usos del suelo usando un SIG

El objetivo de este proceso es situar en el lugar más adecuado cada una de las actividades
previstas en la ordenación del territorio: uso residencial, cultivos, industria, etc.

En la fase no geográfica del proceso de planificación se deben establecer las metas de


superficie que tienen que alcanzar, en la región en estudio, cada uno de estos usos del suelo.
Es decir determinar la cantidad de superficie que en la región se debe destinar, para cubrir los
objetivos pretendidos, a nuevo uso residencial, o a un nuevo uso industrial, etc.

Para poder llevar a cabo, de manera lo más correcta posible, estos objetivos, se calcula la
capacidad de acogida de cada "punto" del territorio para cada una de las actividades
anteriores. El concepto de "punto" del territorio varía en función del tipo de representación
digital que se esté empleando en el proceso, es equivalente al pixel en un SIG raster o a un
polígono en un SIG vectorial.

La capacidad de acogida en cada punto depende, como ya hemos mencionado, de dos


cuestiones: a) La aptitud intrínseca del territorio (en ese punto) para recibir esa actividad. b)
El impacto potencial que se puede producir en ese punto del territorio al situar allí esa
actividad.

Por su parte la aptitud y el impacto pueden depender de varios criterios que modifican
ambas cuestiones. Los criterios son hechos territoriales que, a su vez, se pueden expresar
como factores, medidos en términos cuantitativos (que aumentan o disminuyen la aptitud o el
impacto) y restricciones, expresados en una variable binaria (1/0: lugares aptos/no aptos).

Por ejemplo: la aptitud residencial puede depender de 3 factores: a) Geotecnia del terreno,
que mide lo barato o fácil que resulta construir en cada punto del territorio. b) Distancia a
lugares donde existen empleos, muy diferente según los lugares y que hace más o menos
atractivo cada lugar para edificar una zona residencial. c) Calidad visual alrededor de cada
punto, también muy distinta y que se convierte, igualmente, en un elemento de atracción para
viviendas. Y de 1 restricción: zonas inundables, los lugares que pueden ser inundados por los
ríos no son edificables.

Por su parte, el impacto potencial de la actividad residencial se puede hacer depender, por
ejemplo, de un factor: capacidad de uso agrario de la tierra, que cuantifica la posibilidad de llevar
a cabo cultivos más o menos rentables y que, por lo tanto, hace aumentar o disminuir el impacto
que la construcción de residencias ocasiona en cada lugar. Y de 1 restricción: zonas de
protección ambiental (por la ley), en estos lugares está prohibido la edificación.

Una vez seleccionados los criterios que se consideran inciden en cada una de las dos
magnitudes anteriores: aptitud e impacto, es necesario establecer el valor cuantitativo de
aptitud/impacto de las categorías de los criterios que se van a considerar factores, y,
simultáneamente, indicar las categorías que impiden la actividad (valor 0) en los criterios que
se consideran restricciones. Existen diversos procedimientos para establecer esta valoración
cuantitativa de la aptitud y el impacto, en Malczewski (1999, pp. 116-135) se puede encontrar
una lista de muchos de ellos. Uno de los más empleados es el denominado "Comparación
entre pares de categorías" formulado por Saaty y descrito en detalle en Barredo (1996, pp.

57
125-129). De esta manera se asigna un conjunto de valoraciode aptitud o de impacto a cada
punto del territorio en función de los distintosfactores.
El siguiente paso es combinar los criterios para hallar un único valor de aptitud y un único
valor de impacto para cada punto del territorio: para ello se realiza una evaluación multicriterio
y mono objetivo. En este caso es posible emplear alguna regla de decisión que permita
combinar las valoraciones realizadas por los distintos factores y restricciones en un único
valor, entre estas reglas podemos mencionar dos (Barredo, 1996, pp. 64-65; Barba y Pomerol,
1997, pp. 167-170 y 243-252): a) La suma lineal (ponderada). y b) El análisis del punto ideal.
Establecidos los mapas de aptitud y de impacto se puede pasar a la obtención del valor de
capacidad de acogida de cada uso, para ello se combinan los valores de aptitud e impacto
anteriores, realizando una nueva evaluación multicriterio y mono objetivo. En ella es posible
volver a utilizar cualquiera de las dos reglas de decisión antes mencionadas: Suma lineal
ponderada y análisis del punto ideal.
Con esto se ha generado un mapa de capacidad de acogida para cada uso del suelo, en dicho
mapa cada punto del territorio contiene una puntuación cuantitativa de la capacidad que ese
punto tiene de recibir ese uso del suelo concreto. Ahora se puede proceder, finalmente, a la
asignación óptima de una única actividades/uso del suelo a cada punto del territorio, partiendo
de los mapas de capacidad de acogida para cada actividad obtenidos en la fase ante- rior.
Esto se lleva a cabo mediante una evaluación multi objetivo. Para ello se emplea el Análisis
del punto ideal adaptado a varios puntos ideales (Barredo, 1996, cap. 4; Bosque y García,
1999). La figura 1 muestra un ejemplo del funcionamiento de este proceso. La idea es, asignar
cada punto del territorio, al uso del suelo de cuyo punto ideal este más próximo, repitiendo el
proceso hasta que se haya alcanzado la meta de superficie establecida para ese uso. En
resumen, como salida final de todo el proceso se obtiene un mapa de usos del suelo, donde
cada uno de ellos se encontrará en la posición que mejor capacidad de acogida relativa tenga
frente a los otros que se han considerado en el proceso de asignación.

7. UN EJEMPLO DE ORDENACIÓN DEL TERRITORIO USANDO SIG Y TÉCNICAS


EVALUACIÓN MULTICRITERIO

Los objetivos de este estudio venían dados por los planteamientos desarrollados por el Ministerio del
Ambiente y de los Recursos Naturales Renovables (MARNR) para esta región, descritos en MARNR
(1991a, pp. 29-32 y 1991b, Cap. 1, p. 47 y 1992). En estos textos se fijaban unas necesidades de
nuevos tipos de usos en la región, en función del crecimiento galopante de la población y de la
actividad industrial y de las necesidades de des- congestionar y racionalizar el uso del territorio. De
este modo, se establecieron las metas de superficie de diversos usos, tal y como se indican en la
tabla 1, tomadas del mapa objetivo contenido en el citado documento del MARNR (1991a, pp. 29-32).

58
Tabla 1
Niveles jerárquicos relativos a los usos prioritarios

Nivel jerárquico Tipo de uso Meta de superficie % de cubrimiento


1 Agrícola 21.097,35 19,08
2 Res. alta densidad 77.026,39 69,67
3 Industrial 149,31 (*) 0,13
4 Uso turístico recreac. 12.271,36 11,10
Fuente: Cálculos propios.
(*) Ésta es la superficie que fue digitalizada del mapa del MARNR, pero se adoptó una meta de 1.000
ha que no repercuten espacialmente y es más operacional para la representación de los resultados.
Según el orden indicado, para la Cuenca del Río Tuy en primer lugar, la prioridad de uso se inicia por
el ordenamiento de la zonas agrícolas, luego las residenciales de alta densidad, el uso industrial y
finalmente el uso turístico. Como puede observarse en la tabla anterior, dentro del área de estudio la
mayor superficie a ordenar corresponde con el uso urbano que constituye una zona de alto conflicto
por el crecimiento urbano incontrolado, que afecta a las zonas dedicadas a la agricultura. En tercer
lugar, el uso industrial que no se pretende fomentar más allá de los actuales polígonos industriales y
finalmente, el uso turístico recreacional, al cual se le otorga un poco más de superficie a la ocupada
con respecto al valor digitalizado.

Para cada uno de los usos del suelo mencionados se establecieron una serie de criterios que miden
la aptitud y el impacto potencial en cada punto del territorio de la cuenca del río Tuy. Los criterios que
pudieron ser establecidos finalmente fueron los siguientes.

Tabla 2
Resumen de los criterios de aptitud e impacto seleccionados
A) CAPACIDAD DE ACOGIDA PARA USO RESIDENCIAL DE ALTA DENSIDAD

1. Selección de los criterios de aptitud (entre paréntesis su ponderación para la


combinación posterior)
Capacidad Portante del suelo para uso urbano (0.2795). Estabilidad de taludes (0.2795).
Rangos de Pendientes (0.2018). Accesibilidad a la vialidad (0.079). Accesibilidad a zonas
urbanas (0.0512). Tierras con régimen de propiedad adecuado para urbanizar (0.1089)

2. Selección de criterios de impacto


Clases agrológicas del suelo potencialmente productivas (0.5396). Tipos de formación
vegetal (0.297). Áreas agrícolas existentes (0.1634)
3. Restricciones: Centros urbanos existentes. Zonas cubiertas por parques nacionales.
Zonas de preservación en torno a cursos de agua. Cuerpos de agua. Áreas industriales
existentes. Zonas de conservación paisajística.
B) CAPACIDAD DE ACOGIDA PARA DESARROLLO DE ZONAS AGRÍCOLAS

1. Selección de los criterios de aptitud

59
Clases agrológicas potencialmente productivas (0.482). Accesibilidad a la viali- dad
(0.2404). Accesibilidad a cursos de agua (0.1851). Tierras con régimen de propiedad
adecuado para uso agrícola (0.1163).
2. Selección de criterios de impacto
Tipos de formación vegetal (0.6667). Estabilidad de taludes (0.3333)
3.Restricciones: Zonas cubiertas por parques nacionales. Zonas de preservación en torno a
cursos de agua. Cuerpos de agua. Áreas industriales existentes. Centros urbanos
existentes. Zonas de conservación paisajística. Zonas agrícolas existentes.
CAPACIDAD DE ACOGIDA PARA INSTALACIÓN DE INDUSTRIA PESADA
1. Selección de los criterios de aptitud
Capacidad Portante del suelo para uso industrial (0.2742). Estabilidad de taludes (0.2742).
Rangos de Pendientes (0.1982). Accesibilidad a la vialidad (0.1047). Accesibilidad a zonas
industriales (0.0829). Tierras con régimen de propiedad adecuado para uso industrial

(0.0657).
2. Selección de criterios de impacto
Clases agrológicas del suelo potencialmente productivas (0.3397). Tipos de formación
vegetal (0.2390). Cercanía a cuerpos de agua (0.2808). Áreas agrícolas existentes

(0.1404)
3. Restricciones: Zona Protectora de Caracas. Zonas cubiertas por parques nacionales.
Zonas de preservación en torno a cursos de agua. Cuerpos de agua. Áreas industriales
existentes.
C) CAPACIDAD DE ACOGIDA PARA ZONAS DE DESARROLLO TURÍSTICO-
RECREACIONAL
1. Selección de los criterios de aptitud
Paisaje con valor escénico (0.5286). Estabilidad de taludes (0.333). Accesibilidad a la
vialidad (0.1384).
2. Selección de criterios de impacto
Clases agrológicas del suelo potencialmente productivas (0.6667). Áreas agrícolas
existentes (0.3333).
3. Restricciones: Zonas urbanas presentes. Zonas cubiertas por parques nacionales. Zonas de
preservación en torno a cursos de agua. Cuerpos de agua. Áreas industriales existentes.
Zonas de vegetación de carácter singular.

Combinando, por separado, los criterios de cada uso se obtuvo un mapa de


capacidad de acogida para cada una de las cuatro actividades menciona- das. A partir
de los cuatro mapas de capacidad de acogida, operando con la regla de decisión del
análisis del punto ideal, se generó un mapa que contenía en cada punto del terreno el
uso más adecuado a sus condiciones, consiguiendo que, al mismo tiempo, se
alcanzasen las metas de superficie fijadas anteriormente. La comparación de este
mapa con el generado por el MARNR con otros procedimientos, muestra notables
diferencias entre los dos, evidente mente debidas a las muy diferentes metodologías
utilizadas en cada caso, sin embargo, el resultado obtenido con el uso de SIG ofrece
algunas ventajas sobre los conseguidos con otros medios, por ejemplo, se consideran
de forma explícita las interacciones entre los diversos usos y su competencia por el
terreno, aspecto que no es tan fácil de considerar en otros procedimientos.

60
CONCLUSIONES

De acuerdo con lo planteado podríamos resumir en dos los problemas para el


uso adecuado de un SIG en la planificación ambiental.
1. ° La insuficiencia de los instrumentos disponibles en los SIG para la
generación de alternativas y soluciones que se integren al proceso de
planificación para resolver un problema.
2. ° Las dificultades e insuficiencias de la evaluación precisa y completa de las
alternativas establecidas en relación a los objetivos definidos.
El primer problema se tiene que solucionar integrando en los SIG nuevas
funciones de análisis y, más en concreto para la planificación ambiental,
relacionando los SIG con el modelado ambiental. Las alternativas saldrán del uso
de estos modelos ambientales, integrados o relacionados de alguna manera con
los SIG.
La segunda cuestión se puede resolver combinando el uso de SIG con los
procedimientos de evaluación multicriterio, que permiten comparar de modo
preciso las diferentes soluciones y escoger alguna de ellas como la más
conveniente. La integración de este tipo de técnicas en los SIG es posible y ya
existen numerosas aplicaciones concretas.

Con estos dos desarrollos se pueden esperar mejoras sustanciales en la


planificación ambiental y en el tratamiento de los graves problemas ambientales
que ahora afectan a nuestro mundo.

Ordenamiento Territorial
Con la denominación de Planificación Territorial, Ordenación del Territorio u
Ordenamiento Territorial, se conoce a la Ciencia Interdisciplinaria que es a su vez Ciencia
Aplicada, Política y Técnica Administrativa, concebida con un enfoque interdisciplinario y
global, que analiza, desarrolla y gestiona los procesos de planificación y desarrollo de
los espacios geográficos y territorios, tanto Urbanos como Rurales, a menudo regiones
administrativas determinadas de escala local, regional o nacional, según sus posibilidades
ambientales, económicas y sociales, propiciando su desarrollo sostenible. La ciencia que
más ha aportado al desarrollo de la planificación territorial es la Geografía, debido a su
visión integradora de todos los elementos físicos o naturales, económicos, políticos y
culturales que coexisten en el territorio.
La disciplina se imparte en algunas Universidades como estudio independiente, del campo
de la Geografía; en otras es impartida como una especialización de la licenciatura
en Geografía, Arquitectura, Ingeniería civil, Urbanismo, Geomática o ingeniería en
Cartografía y Geodesia. La Planificación Territorial suele ser responsabilidad de
la Administración Pública en sus distintos niveles (Local, Regional, Nacional y
Supranacional).
Mientras en España también se utiliza el término ordenación territorial para denominar a
la disciplina, en algunos países hispanoamericanos prefieren el término ordenamiento
territorial. Otro concepto sinónimo o estrechamente relacionado es Planificación
Regional (Regional Planning).
La Planificación Territorial es sinónimo de las prácticas de Planeamiento Urbanístico en los
Estados Unidos, pero a escalas más grandes y el término se utiliza a menudo en referencia
a los esfuerzos de planificación en los países europeos. Las disciplinas profesionales que
están implicadas en la Planificación Territorial incluyen la Planificación del Uso del suelo, la

61
Planificación Urbana o Planeamiento Urbanístico, la Planificación Regional, la Gestión
Ambiental, la Geografía Humana y la Economía.[1]. El objetivo supremo de la Planificación
Territorial es el desarrollo sostenible en distintas escalas, como ser el Desarrollo local,
el Desarrollo Regional, etc., y a menudo resulta en la creación de un Plan Territorial de
Ordenamiento y Desarrollo o Plan de Ordenamiento Territorial.

IMPORTANCIA DEL ORDENAMIENTO TERRITORIAL


El ordenamiento territorial posibilita un conocimiento general de las características del
territorio, valorando los recursos naturales con el fin de orientar sus posibles usos,
estableciendo áreas de oferta y prioridades, de modo que el uso del territorio sea el más
adecuado a sus características.

Además, el ordenamiento territorial permite contar con un diagnóstico espacial que da


contexto y mejora las planificaciones sectoriales, incorpora procedimientos formales de
participación legitimando la toma de decisiones, explica los objetivos territoriales
sectoriales previendo los potenciales conflictos y coordina las diferentes demandas
territoriales.

El ordenamiento territorial aclara las dinámicas del desarrollo y las interdependencias de


los sectores entre sí y con el territorio, constituye una herramienta integral para lograr un
desarrollo territorial armónico y es una carta de navegación para las inversiones públicas
y privadas.

OBJETIVOS

El ordenamiento territorial busca:


El desarrollo socioeconómico equilibrado de las regiones.
El mejoramiento de la calidad de vida.
La gestión responsable de los recursos naturales.
La protección del medioambiente.
La utilización racional del territorio.

INSTRUMENTO DEL ORDENAMIENTO TERRITORIAL

62
El principal instrumento es el Marco Orientador de Consenso para el Ordenamiento
Territorial (Mocot), que representa un sistema de información que documenta la toma de
decisiones sobre:

El Sistema de asentamientos humanos.


El Sistema vial y ejes de desarrollo.
El Sistema socio-productivo.
El Sistema físico-ambiental.

EL ORDENAMIENTO TERRITORIAL EN AMÉRICA LATINA

América Latina se caracteriza por un escenario de mayor estabilidad debido a la


disminución del crecimiento demográfico. Se aprecia un proceso generalizado de
renovación del tema del Ordenamiento Territorial integrando las áreas rurales, los
sistemas ecológicos y la escala regional.

Se desarrollan nuevos cambios en la planificación territorial, en el contexto de la ciudad


que se construye a sí misma, privilegiando el desarrollo cualitativo y afrontando los
grandes problemas de la ciudad metropolitana.

Existen importantes esfuerzos para la participación de todos los actores sociales y la


utilización eficiente de los recursos.

Los planes de ordenamiento territorial se caracterizan por la implementación de


componentes estratégicos y flexibles, integrados a una base estructural heredada de la
planificación tradicional. La participación se constituye en el componente de soporte y
legitimación de la flexibilidad.

Planificación estratégica del uso de la tierra.

La planificación del uso de la tierra es esencialmente un proceso de decisiones lógicas en


el cual los recursos son evaluados en el contexto de los objetivos y las opciones
potenciales son identificadas para ser implementadas por el usuario de la tierra. El uso de
la planificación se basa en la premisa que los recursos de la tierra varían y que las
propiedades y las características de cada área establecen los límites de las posibles
opciones de uso. Es necesario un conjunto de procedimientos técnicos sistemáticos para
evaluar los recursos y para guiar la elección de aquellas opciones sostenibles y que
satisfagan los objetivos de los usuarios de la tierra. Los mercados, la infraestructura y otros
factores externos, así como las preferencias personales también son considerados en la
toma final de decisiones.

La naturaleza y el detalle del análisis y los métodos usados dependen de los objetivos y de
los planes de uso de la tierra y de los recursos disponibles. En muchos casos un plan amplio
no se prepara en una sola operación, pero sus componentes, definidos ya sea por lugar o
por sector, son enfrentados individualmente de acuerdo a la urgencia relativa y a la
disponibilidad de recursos. Por ejemplo, si las tierras de pastoreo de una zona estuvieran
severamente degradadas, se deberían tomar medidas correctivas sin necesidad de un plan
de uso de la tierra para toda la zona; más adelante, cuando los recursos estén disponibles,

63
puede ser desarrollada otra área de la zona, por ejemplo, con un esquema de irrigación en
pequeña escala. Si bien tal planificación sectorial no es la solución ideal, puede presentar
un avance en circunstancias en que los recursos son limitados o la coordinación es difícil.
El desarrollo de un sector debe tomar cuenta de los logros del pasado; de las actividades
en marcha y de las actividades planificadas en otros sectores y de sus posibles
interacciones -por ejemplo, cultivos-ganadería, ganadería-vida silvestre y otras.

La secuencia es reiterativa y necesita un ajuste constante ya que los distintos elementos,


especialmente las condiciones económicas o financieras, tienden a ser variables o aún
inestables. Si el plan o la política final no son aceptados por todos los participantes o si los
primeros resultados del plan no son satisfactorios, el procedimiento de planificación debe
ser revisado para corregir los errores e inserir los elementos que puedan haberse omitido.
Un sistema paralelo de supervisión y evaluación facilitará sin duda el éxito de este proceso.

Existe un amplio rango de métodos de planificación del uso de la tierra que pueden ser
apropiados a diferentes escalas y niveles de detalle, cuyo valor comparativo puede variar
en distintos ambientes físicos, socioeconómicos y políticos. Si bien la planificación integrada
para el manejo sostenible de los recursos de la tierra remarca la participación activa de los
interesados y el papel de los grupos de Manejo de los Recursos de la Tierra en las
actividades de coordinación de la planificación, en general es necesaria asistencia técnica
para completar el plan; esto no implica necesariamente la contribución de consultores
externos. La planificación integrada para el manejo sostenible de los recursos de la tierra
enfatiza la autoestima y el desarrollo de capacidades técnicas apropiadas por parte de los
profesionales nacionales de la planificación del uso de la tierra y de los extensionistas. A
nivel nacional y sub-nacional, tal tipo de asistencia podrá ser proporcionada por los
planificadores profesionales del uso de la tierra, pero a nivel de aldea la asistencia técnica
necesaria podría ser ofrecida por extensionistas adecuadamente capacitados, trabajando
tanto para el gobierno como para el sector privado o para organizaciones no
gubernamentales.

La presentación está dirigida sobre todo a profesionales que trabajan en la planificación del
uso de la tierra así como a quienes establecen las líneas políticas y toman las decisiones.
Para su mejor comprensión, en varios Recuadros se encuentran ejemplos de algunas de
sus aplicaciones.

64
LA METODOLOGÍA DE LA PLANIFICACIÓN

Identificación de los Problemas y Formulación del Objetivo

Para una implementación exitosa del plan se requiere que los objetivos a ser satisfechos
sean claramente formulados. Un objetivo puede ser propuesto como una respuesta a un
problema identificado que debe ser solucionado o a una necesidad de cambio o a un
desarrollo posterior de la sociedad. Cuanto más claro sea formulado un objetivo, más
detallados serán los elementos del plan en lo que hace a los objetivos secundarios,
resultados y actividades.

Agroforestería

65
La agroforestería o agrosilvicultura es un sistema productivo que integra árboles,
ganado y pastos o follaje, en una misma unidad productiva. Este sistema está orientado a
mejorar la productividad de las tierras y al mismo tiempo ser ecológicamente sustentable.
Entre los principales beneficios se pueden enumerar la protección física del suelo, los
efectos sobre el microclima, el reciclaje de nutrientes y la diversificación de la producción.
Dicho sistema combina la tecnología de la silvicultura y agricultura que permite un uso de
la tierra más diverso, integrado, productivo, provechoso, saludable y sostenible. El sistema
puede ser integrado en forma espacial o en secuencia temporal. Las dehesas ibéricas
(montados en portugués) son un ejemplo milenario todavía existente de este tipo de
explotación.

Sistemas agroforestales. En los últimos años los sistemas agroforestales han tenido el
éxito de ser ampliamente aceptados en muchos países del trópico. La razón principal de
esta aceptación ha sido su alta adaptabilidad a diferentes condiciones ambientales y
socioeconómicas, una flexibilidad de estrategias y prácticas y su orientación directa hacia
la solución de los problemas. En el caso de Cuba los sistemas agroforestales constituyen
alternativas viables para el escenario rural, con vistas a satisfacer de forma sostenida las
necesidades elementales de alimentación y las condiciones de vida de la población,
mediante diferentes formas de adopción según las características propias del ecosistema
donde se implanten.

Clasificación de los sistemas agroforestales

66
Sistema agroforestal
La clasificación de los sistemas agroforestales es necesaria con el fin de proveer un marco
conceptual que permita evaluarlos y desarrollar planes de acción para su mejoramiento.
Los sistemas agroforestales han sido clasificados de diferentes maneras: según su
estructura en el espacio, su diseño a través del tiempo, la importancia relativa y la función
de los diferentes componentes, los objetivos de la producción y las características sociales
y económicas prevalecientes.

La clasificación se basa también en los productos que se pueden obtener y el tipo de


combinación entre los componentes. Otras clasificaciones se sustentan en la escala y en
los objetivos de la producción: sistemas comerciales, de subsistencia e intermedios.
Se recomienda una clasificación en la que se toma en cuenta los aspectos estructurales y
funcionales como base para agrupar los sistemas en cuatro grandes grupos:

Sistemas agrosilviculturales (árboles con cultivos)

 Cultivo en callejones (alleycropping)


 Árboles de sombra sobre cultivos perennes
 Huertos caseros
 Barbechos mejorados
 Rompevientos y cercas de protección
 Sistemas Taungya
 Mezcla de perennes con otros cultivos
 Agroforestería para la producción de leña

Sistemas silvopastoriles (árboles con ganadería)

 Cercas vivas
 Pastos con árboles
 Bancos de proteína
 Integración de animales con producción de madera

Sistemas agrosilvopastoriles (árboles con cultivos y ganadería)

 Huertos caseros con animales


 Hileras de arbustos para alimentar animales, conservación del suelo y abono
 Producción integrada de cultivos, madera y animales

Otras clasificaciones
Existe una clasificación basada en el tipo de componente incluido y la asociación entre los
componentes. De ese modo, los sistemas agroforestales descritos son:
1. Sistemas agroforestales secuenciales, donde se da una relación cronológica entre las
cosechas anuales y los productos arbóreos, o sea, que los cultivos y las plantaciones de
árboles se suceden en el tiempo. Estos incluyen:

 Formas de agricultura migratoria con intervención o manejo de barbechos.


 Sistemas Taungya.

67
2. Sistemas agroforestales simultáneos, los que consisten en la integración simultánea y
continua de cultivos anuales o perennes, árboles maderables, frutales o de uso múltiple y/o
ganadería. Estos abarcan:

 Asociaciones de árboles con cultivos anuales o perennes.


 Huertos caseros mixtos.
 Sistemas agrosilvopastoriles.

3. Sistemas agroforestales de cercas vivas y cortinas rompevientos.

Estos consisten en hileras de árboles que determinan una propiedad o sirven de protección
para otros componentes o sistemas.
De acuerdo con el tipo de cultivo asociado, la función principal del componente forestal y
su distribución en el espacio y el tiempo, se llega a un arreglo múltiple y complicado de los
sistemas agroforestales, los cuales incluyen;

A. Sistemas silvo-agrícolas

1. Sistemas Taungya o agrosilvicultura


2. Arboles de valor en los cultivos
3. Árboles frutales en los cultivos
4. Arboles productores de sombra en los cultivos y/o mejoradores de la fertilidad del
suelo
5. Cercas vivas
6. Cortinas rompevientos
7. Cultivos en fajas o callejones
8. Sistemas agroforestales múltiples
9. Huertos caseros

B. Sistemas agrosilvopastoriles

1. Cultivos y ganadería simultánea en plantaciones.


2. Árboles asociados a los cultivos y ganadería.
3. Cercas vivas alrededor de comunidades rurales.

C. Sistemas silvopastoriles

1. Pastoreo (o producción de forraje) en las plantaciones forestales.


2. Pastoreo (o producción de forraje) en bosques secundarios.
3. Arboles maderables en los pastizales.
4. Arboles de servicios en los pastizales.
5. Árboles frutales en los pastizales.
6. Arboles forrajeros.
7. Cercas vivas.
8. Cortinas rompevientos.

Por su importancia y generalización a nivel mundial aparecen en casi todas las


clasificaciones anteriores: los sistemas Taungya, los huertos caseros mixtos o tradicionales,
los cultivos en callejones, los árboles de sombra sobre cultivos perennes y la agricultura
migratoria con manejo de barbechos.

68
Sistemas Taungya
Este sistema se basa en plantaciones forestales asociadas con rotaciones de cultivos
temporales, cuyo objetivo es la producción de madera en su etapa final. El cultivo agrícola
se limita a un corto período (1-4 años) hasta que los árboles plantados cierran su dosel.
Tiene su origen en Birmania a partir de las reformas implantadas por el botánico alemán,
Dr. Dietrich Brandis, al sistema de tumba y quema que existía en las plantaciones de teca
(Tectonagrandis) de ese país. De esta forma, el sistema de agricultura migratoria que
aplicaba la tala y la quema se convirtió en una herramienta de transformación de los
bosques en plantaciones forestales.
El sistema Taungya se llevó de Birmania a otras colonias inglesas y europeas en Asia, de
donde pasó al Africa. A pesar de los estudios realizados en América Central desde los años
60 de este siglo, el sistema todavía no ha sido adoptado notablemente en la región.

Huertos caseros mixtos o tradicionales


Los huertos caseros mixtos tropicales ocupan un lugar muy singular en los sistemas
agroforestales. Ningún otro es tan diverso en cantidad de especies y variedades, complejo
y variado en estructuras y posibles asociaciones, ni tan completo en sus funciones como el
huerto casero.
Se trata de un complejo de plantas perennes o semiperennes que se encuentran en los
alrededores de las casas de los finqueros o agricultores, integrado a la producción agrícola
(tubérculos, fibras, hortalizas, frutas, estimulantes), ganadera (animales menores, inclusive
abejas) y forestal (madera, leña, postes) e incluye generalmente plantas medicinales y
ornamentales.

Los huertos caseros son muy comunes en todos los países y regiones tropicales y
subtropicales y su tamaño es generalmente pequeño, menor que una hectárea.
Estos sistemas se utilizan para cubrir las necesidades básicas de familias o comunidades
pequeñas y ocasionalmente se venden algunos excedentes de producción.
Se definen como “una asociación interna de árboles y/o arbustos de uso múltiple con
cultivos anuales y perennes y animales en las parcelas de hogares individuales. El sistema
es manejado por mano de obra familiar”.
El huerto casero está compuesto por varias estructuras que se encuentran en él a partir de
la división de su espacio en diferentes áreas de manejo.
Parecen ser universales en los huertos caseros las siguientes características de forma
(estructura horizontal y vertical):
1. Un huerto bien desarrollado es una imitación del bosque tropical.
Este postulado se basa en que la semejanza del huerto casero con el bosque tropical está
en el efecto de la forma del primero, la creación de nichos específicos, los diferentes niveles
verticales y la competencia por la luz, así como en las funciones agroecológicas asociadas.
2. El huerto casero es una composición de diferentes áreas de manejo.
Se caracterizan los huertos de acuerdo con su espacio libre y cultivado; en cada área hay
una estructura horizontal y vertical propia, así como una combinación de especies y
variedades de vegetación única.
3. La prevalencia de la sombra.

69
Como consecuencia del número de especies arbóreas muchos de los huertos tropicales
tradicionales están más sombreados que las fincas. Esto implica un microclima agradable
y una preferencia de los campesinos por los cultivos resistentes a la sombra, que requieran
poca inversión de mano de obra, cuando estos están destinados al autoconsumo.
4. Los límites del huerto casero se definen por medio de una mezcla de factores geofísicos,
biofísicos y sociales.
A veces el huerto tiene límites geofísicamente claros cuando colinda con una carretera o
camino, con el huerto vecino, etc.; otras veces el límite es biológico, como son los cambios
de vegetación (termina el pasto y comienzan los cultivos en varios estratos), y por último el
huerto casero se delimita por el uso de la mano de obra familiar y no muy intensiva; mientras
que en la finca se contrata periódicamente.

Árboles en asociación con cultivos perennes


Los sistemas de explotación comercial con cocoteros, caucho o palma en asociación con
cultivos y las plantaciones de árboles maderables con café y cacao pertenecen a esta
categoría.
En estas asociaciones se tiende a optimizar el uso de los recursos y aumentar la
productividad por unidad de terreno; las condiciones de mercado son determinantes para
el éxito.
Generalmente, con los cultivos a pleno sol se logran cosechas más elevadas; sin embargo,
las necesidades ecológicas son más altas, especialmente en fertilizantes. Estos sistemas
representan una alternativa, ya que con la introducción de los árboles para sombra se puede
llegar a suplir parte de las necesidades nutricionales del cultivo. La sombra reduce la
fotosíntesis, la transpiración, el metabolismo y el crecimiento; por consiguiente, decrece
también la demanda de nutrimentos del suelo y así “se capacita” a un cultivo para que se
mantenga en suelos de baja fertilidad.
Los árboles de sombra para cultivos perennes deben reunir una serie de características,
entre las que resaltan:

 Compatibilidad con el cultivo.


 Sistema radical fuerte y resistente a los vientos.
 Habilidad de propagación vegetativa por medio de estacas.
 Habilidad para fijar nitrógeno.
 Posesión de una copa rala.
 Ramas y tallos no quebradizos y libres de espinas.
 Tolerancia a la poda.
 Alta producción de biomasa, con residuos vegetales de fácil descomposición.
 Alta velocidad de rebrote.
 Presencia de hojas pequeñas.
 Producción de madera, frutos u otro producto de apreciable valor.
 Resistencia a las plagas y las enfermedades.

Agricultura migratoria con intervención o manejo de barbechos mejorados


La agricultura migratoria es un sistema en el cual el bosque se corta y se quema y la tierra
se cultiva durante pocos años; después del período de cultivo continúa una fase de
barbecho. Esta fase es bastante más larga que la del cultivo (5-20 años de barbecho y 2-3

70
años de cultivo). En estos sistemas de uso transitorio de la tierra se realiza una rotación de
parcelas en lugar de una rotación de cultivos.
La agricultura migratoria constituye el sistema de producción más extendido en las regiones
tropicales. Existen muchas variedades de estos sistemas, desde los métodos practicados
por tribus nómadas hasta las prácticas más complejas de poblaciones más estables.
El barbecho mejorado se considera como una fase intermedia entre la
agricultura migratoria y la agricultura sedentaria, con rotaciones más cortas.
Se hace una distinción entre el barbecho económicamente mejorado, donde los árboles son
introducidos por su valor económico, y el barbecho biológicamente mejorado, donde las
plantas son introducidas por su capacidad de mejorar la fertilidad del suelo o deprimir el
crecimiento de malezas.
¿Por qué se hace necesario el período de barbecho?
Después de la tumba y quema, los cultivos que se introducen mantienen una productividad
elevada, ya que disminuye la acidez del suelo y aumenta su fertilidad. Después de 2-3 años
de cultivo, al aumentar las poblaciones de plagas y malezas, crece la demanda por el uso
de nutrimentos, se empobrecen los suelos, aumentan los costos de desmalezado y
disminuye la productividad de los cultivos. A partir de estas condiciones los agricultores
abandonan las parcelas y comienza el período de barbecho, donde se restablece el
reciclaje de nutrimentos, al ser invadidas las parcelas por la vegetación secundaria. Al
transcurrir el tiempo las propiedades del suelo vuelven a ser adecuadas para el cultivo.
Este tipo de agricultura puede ser una forma ecológica y económicamente racional del uso
de recursos, cuando la densidad y la presión de la población sobre el uso de la tierra son
bajas y los períodos de barbecho son lo suficientemente largos como para restablecer la
fertilidad del suelo.
Habitualmente se practica en condiciones en que la mano de obra es más escasa que la
tierra, el capital disponible escaso y el nivel de tecnología bajo.

Árboles en asociación con cultivos anuales


Estos sistemas presentan las mismas interacciones entre los cultivos y los árboles que las
asociaciones de árboles con cultivos perennes; sin embargo, para el caso particular de los
sistemas de cultivos de callejones también se pueden utilizar especies que no son
tolerantes a la sombra.
En estos se incluyen cultivos tales como maíz, frijol, guisantes, soya, maní, tubérculos y
raíces en asociación con árboles, que en la mayoría de los casos son fijadores de nitrógeno.
Los cultivos en callejones son prácticas agroforestales en las que los cultivos anuales son
sembrados en los espacios que quedan entre las líneas de una especie leñosa,
generalmente leguminosa, que es podadas a intervalos regulares para evitar la
competencia y proveer un “mantillo” o “mulch”. Este mulch sirve para controlar las malezas
y a su vez proveer nutrimentos al suelo. Alternativamente, el material podado puede ser
utilizado como leña o alimento para el ganado.
Los beneficios potenciales de este sistema son los siguientes:

1. Las prácticas de cultivo y barbecho se realizan simultáneamente.


2. Se aumenta el período de cultivo y la intensidad del uso de la tierra.
3. Se logra una regeneración efectiva de la fertilidad del suelo con especies más
eficientes para este propósito.

71
4. Requerimientos bajos de insumos externos.
5. El sistema es de escala neutral y lo suficientemente flexible para su uso por
agricultores pequeños y para la producción mecanizada a gran escala.

Para el establecimiento de cultivos en callejones generalmente se utilizan leguminosas


arbóreas, pues muchas de estas presentan un rápido crecimiento, alta producción de
biomasa de fácil descomposición, respuesta a las podas, alta capacidad de rebrote y
capacidad de fijar el nitrógeno atmosférico.
Su establecimiento se puede realizar por semillas o de forma asexual, aunque
generalmente se utiliza el segundo método, con estacas de aproximadamente 1,5 m de
largo y un diámetro mínimo de 4-8 cm.
Una vez establecidos los árboles, la decisión de establecer un programa de podas es lo
más importante. El momento de la poda lo determina el cultivo agrícola, ya que del árbol se
obtiene el aporte de nutrimentos, pero a la vez se debe minimizar la competencia por la luz,
el agua y los nutrimentos que este pudiera ejercer sobre el cultivo. Se debe podar en mayo
para permitir la siembra y el desarrollo de los cultivos durante 90-120 días de las lluvias y
luego practicar una poda en septiembre u octubre, la cual puede continuarse con barbechos
o siembra de nuevos cultivos según las condiciones agroecológicas del lugar.

72

Anda mungkin juga menyukai