DALMIRO LORA
III SEMESTRE
UNIVERSIDAD DE CARTAGENA
12/08/19
¿EL ARTE, ACÁDEMICO?
En las clases de Historia del arte, y Apreciación Artística, la cual cursé como electiva en el
primer semestre, reconocí la importancia artística que tiene por naturaleza, la educación en
ciencias humanas. A pesar de las pocas influencias estructurales de la institución,
refiriéndome a la inexistencia de variables representaciones estéticas y culturales en los
espacios Universitarios, las pocas expresiones artísticas apoyadas por la administración, y
por supuesto, el limitado interés que esta demuestra ante su desarrollo, actividades como la
ruta académica hacía el Museo de arte en la ciudad de Barranquilla, los conversatorios con
artistas reconocidos en la ciudad de Cartagena, y la visita a la galería de arte en la misma,
demuestran que el arte sobresale en cualquier circunstancia.
La galería NH, ubicada en el centro histórico, ha sido la primera que visité en mi vida, de
hecho, ignoraba que había alguna galería en la ciudad. A pesar de no visitarla junto con mis
compañeros, tuve el privilegio de visitarla tiempo después, y sin duda, fue una experiencia
gratificante.
La motivación que generó en mí, la presencia y las historias, contadas cómicamente por el
artista, me incitaron a comprender la satisfacción que provoca ser reconocido por hacer
aquello que apasiona. Reflexión que permanecerá, en el proceso que llevaré a cabo, hasta
lograr el propósito, experimentar la misma satisfacción.
Lo anterior, exige una respuesta concreta a una simple pregunta, la presencia de artistas, la
visita a instituciones culturales, galerías, museos, al momento de estudiar historia del arte en
la vida universitaria, ¿Es importante o necesario? ¿Acaso podríamos categorizarlo en un solo
carácter, excluyendo al otro? Sin duda, el interés, el conocimiento, la práctica, y la
preocupación por la buena calidad educativa en cuanto al arte, es una problemática
IMPORTANTE Y NECESARIA, el conocimiento científico, matemático, literario conlleva un
constante interés de mejoría, ¿Por qué el arte no podría tener el mismo interés? ¿O la misma
necesidad de ser inculcado? Las instituciones educativas, deben cumplir con una función
específica, la formación personal del estudiante, el constante crecimiento integral, del
pensamiento y las emociones, la creatividad, el aprovechamiento de la capacidad innata que
poseemos, el privilegio de poder crear y transformar.
Todos sentimos la necesidad de expresar las ideas que se adormecen en medio de la
cotidianidad. Las mismas que deben ser expuestas en medio de un espacio artístico, que no
sea valorado por calificaciones, o funciones sociales. He allí el motivo de los eventos
culturales, improvisados la mayoría de las veces, los bailes tradicionales, los grafitis
revolucionarios, la fotografía poco convencional. El ser, más allá del estudiante, exige ser
escuchado, a través del mismo ingenio.
El arte debe ser expuesto, por un interés que sobresale de lo formalmente regido, se debe
reconocer en las calles, en los muros, en la naturaleza, en los libros, en el baile, en la cultura,
por supuesto, en la academia. El arte, se debe encontrar, siempre, en el alma misma.
IMÁGENES: OBRAS EXPUESTAS POR ‘’Aguaslimpias’’ en Biblioteca Fernández Madrid.
https://www.cultura.gob.cl/wp-content/uploads/2016/02/cuaderno1_web.pdf