Sociología de la Educación
La Educación es una de las actividades más importantes en una sociedad. Educar sirve para
sobrevivir y cohesionar a la especie humana. La educación es un factor de integración social
básico que nos sirve para socializarnos y reproducir los sistemas sociales.
Desde las escuelas se tiende a ajustar los requisitos académicos al origen social de los
estudiantes, contribuyendo así a perpetuar la desigualdad social. Las sociedades están
estratificadas de una manera u otra: siguiendo lógicas diferentes, basándose en conceptos
clasificadores distintos. En las sociedades capitalistas dicha estratificación sigue una lógica
predominantemente económica al estar centrada en la producción. Así pues, aunque nos
empeñemos en negar la existencia de clases sociales, difícilmente podremos negarla. Nos basta
con dar un paseo por cualquier ciudad capitalista para ver los efectos materiales de la misma.
De esta manera encontramos barrios pobres y barrios ricos; personas que tienen que trabajar
12 horas diarias para sobrevivir, y personas que se bastan con firmar unos papeles a la semana
para vivir cómodamente. Las sociedades capitalistas en las que vivimos están estratificadas, y al
estarlo, es útil para la persona que se embarca en el análisis social establecer unas categorías
analíticas que permitan agrupar a personas con similares características.
Esto se puede ver en la población escolar que es como una pirámide. Compuesta en su
base por el ciclo primario donde forman parte todos los niños de las diferentes clases sociales
(niños de padres que trabajan las 24 horas del día y padres con un buen pasar económico). En
la parte intermedia de la pirámide se va haciendo más estrecha, la secundaria abarca jóvenes
de diferentes estratos sociales. Concurren jóvenes que tuvieron posibilidades de tener acceso,
ya que muchos estudiantes abandonan sus estudios por el factor económico. Por último se llega
a la cúspide donde están los futuros profesionales, los que pudieron pasar por estos niveles y es
donde se observan como las clases populares quedan excluidas.
Una frase que me atrajo es: “la base real sobre la que funciona la escuela. Esta base es
la división de la sociedad en dos clases antagónicas y la dominación de la burguesía sobre el
proletariado”. Si bien el discurso de la escuela es de la unión, su verdadera función es la división
del trabajo formal y del trabajo manual. La escuela se limita a reproducir y a prolongar las
desigualdades sociales que existen desde hace tiempo y que seguirá existiendo a medida que
nos reproduzcamos.