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348 EL INFINITO ~N EL PENSAMIENTO UE tA ANTIGÜEDAD CLÁSICA
l.A ESFEIlA INfiNITA: J>ARMí~NIDES, EMPÉDOCLES, ZENÓN 349
(C01110 bien lo expresa Calogero) ~ "no podr;t tener sino tina founa su avanzar", por lodos lados hacia distancias siempre iguales del centro,
que e#xc!uya para loda part.e de su figura ctlal<Iuicrrninoridad de ser: privándole radical }T cOJnpletatnente de aquella fuerza para la luchá,
y la unlca f oftna (lue se presenta a la intuición len icndo lal<:s atribulos ((UC dcbería siclnpre tnoslrarse igual en todas partes a partir del cen-
lro. Por estas ctJnsideraciones créOlne en la obligación de coincidir
es aquélla de la es~~;~~~ no ~~:~~L~~~ _.~!_~ .. ~~.'~~~_~<?_. f.ig~,ra y~ ..,cerrada
plcnalnenleworccslel;unto con las conclusiones de ,Calogero, qtie
~.~. ,de u~la p:rJfert~ cIlJe la circunscriba, excluyendo loda ultertor
eX~~!:~~I.<?_~_~~~~ .....~~.~~_ .Ií~~lI~~- ~~_~~~~?o. 'j)'ó.~.'_}.~ tni~J~a "superficic, sino
considero oportuno referit1nIegralnente: t'la visión parmenlde-á .es-toda:
c!la - tnásque estárica~iñañiica:-é¡ ente silllilar a la masa esteClca - es
el~__<:':lan~? ,~ª~~l .r.?~.~b~l_ra~d. de exte~sión e~ toda_dirección: igual a
lo largo de cualqUIer radiO trazado desde el centro, en confrontación 'lJ1essótbel1 bisOPdlés ]Miirei,-Io cual no significa. ya: tjgua14 en todas
con. cu~lquier otro. radio; pero igual tan1bién en todo punto de tOtlo partes a partir del centro' (que no tendría sentido, puesto que aquí se
radiO s~ngular e~ la confrontación con cualquier olro punto del tnis- habla no de la superficie sino del todo), sino más .bien que, a partir
mo radto. :ll~S Sl al radio se le asignase un punto lenninal, es evidenle del cenlro, avanza en cada una de sus partes con igual energía;er;'
que .este ultImo. presentaría condiciones muy diferenles de aquellas f~ci'l(álld~~-~l~]~;iera:-~O:Ciite'.ü-"Otio-.eiiEe-{ quc-
¡ 'oopuecleri,"-porque
relahvas a cualqUIer otro punto, respecto de la posibilidad de exten- ni siquiera existen!), quc quisiese' in1pedirlo, detenerlo, hacerlo cesar
derse d~l ser. a 10 largo del radio tnislno, oponiendo a tal posibilidad (/Jálloi) en este igual avance hacia un lÍlnite por todas partes igual,
una reSistencIa absoluta, definitiva e insuperable. ' en esle biknei.obai eis bOJlJÓl1. ACJuí el cnte no es tanto un ser esfera
A~ora bien, que en el pensatniento de Pannénides sea viva y ope;. cuanlo un infinito alnpliarse en la {ornla homogénearnente finita de
la esfera, o si se quiere, no tanto es una esfera dada cuanto participa
r~e la pr:o;~pación d:~ :~:~_,_.~~~~~,_~!~.~Chl' 'cñtre alglJflOS
l~ntos .(p~rerrcos o termInales) y t~~<?~_lqs otros,' resulta liarto' evi- de a(lucl1a idca de la esfera por la cual ella es forma definida, aun
<!t;~~. en los versos 2~-:5. y 44-48 d~l fragmei;to8~Tj¡cCi-'10s prime- tuando se la piense cOlno figura que se acrecienta eternamente respecto
ros. (el ser) #no es diVIsIble, porque es todo igual; ni en parle alguna dc su centro; donde el hecho, que nada pueda intervenir a obstaculizar
h.ay algo de mas, que sea obSlácll~o n su continuidad, ni algo de tncnos, y por consiAuiente n diferenciar, en cualquier punto, este su infinito
SUIO qt~e lodo está pleno de ser. Por esto es lodo continuo; por()uc el avanzar, irllplica al 1l1islnO ticrnpo que nada puede haber que la de ..
~ tl'uga y detcrtnine en una Jada posición y dirnensión. Parméni~es no
-,1
s,er esta en contacto con el ser".' Y agregan los olros: "y posee igual
fuerza para la lucha en todas pílrles, a partir del centro; ya ()UC da las dirnl'llsiolll's de su esfera y es de creer que si se 10 hubiesen
Hx)uerido, o bien habría sonreído, o bien habría pennal?-ecido sutna-
no puede ser ni tntÍs fuerte ni 'll,ís débil ac]uí que allá. Puesto que ni
se da no-ser que lo detenga en su avanzar hacia iguales (distancias. del Inenle pensativo".ó
y a he.nos rccordado, a propósito de la infinitud temporal en Par-
centro); ni se da ser de manera que tenga aqlt~ lnás y allrt Jnenos
In~nides, córno, en su pcnsalniento, la unitotalidad del ser (/JonJo!; pan:
ser, puesto que es todo absolutamente inviolable".3
"loJo juntalnente tt
, o bien /Já11Jpal1 peléllai: "ser todo") significando
~stas condi~~ones del ser no son conciliables con una supuesta peri-
ser sólo existente (111011110ge'1lés) y tener todo en sí, se traducía en la
{erra, la cual sea obstáculo a su' continuidad", y presente un ser que carencia dc lodo lí.nite, tanto tetnporal (otro ser o no.ser antecedente
del lado externo no está nlás en contacto con el ser, y "lo detenga en o sucesivo) co.no c5pacial (otro ser o no-ser coexistente). y por esto,
2 Su,di J"I/' elea/iJlJ1o, 26. el ~er en su totalidad (o/ílol1) :ra .declarado por Parménides atéles/o,,:
3 DIELS , 184 -- 2S!J II 8 . 1 •
" V. 22 y slgs.; y v. 44 y slgs. 2
Todo esto esc~p~ha
.• Aquí, quiz:ís por un /a!1jf/J (a/ami, CAJ.OGERO no transcribe en su genuini-
com~Jetafnen~e .a C??MPERZ (G1fecb. Del1ke,., J, 1", (~p. 2, ~ IV) (u~ndo, p~r~
dad la habitual tr~ducción (cfr. por eje.nplo DJES, en TANNERY', 253) "jgual-
explJca~ la "~l1t~clon d,c .un unIverso que no adrnite nad~ fuera de sr, tc(urd~
l)lcnte dist~nte", que lcvela (on In~yor evidencia su absurdidez.
~l sentido plasttco hefenJCo, a la t~bla flitag<lri(:l de Jos opuestos (ililnitado~
unper{ccto) y a la redondez de la esfera celeste. ~ SllIdi JII/J'elcaIÍJmo, P.27.
EL INFINITO EN EL PENSAMIENTO DE LA ANTIGÜEDAD CLÁSICA LA ESfERA INfINITA: PARMÉNIDES, EMPÉDOCLES, ZENÓN 351
"infinitot~,!.~ con una expresión de significado equívoco entre ternpo- y sin etl1bargo en Ernpédocles esta concepción de esfera infinita
ral«Ia<IY espacialidad, porque cornprendía a arnbas. Cicrtatllcntc, conlO tropezaba con la dificultad de suponer excluida y expulsada fuera de
observa Calogero con toda justici-'!J Partnénides concret;~~d~~~" i orilla la Blisll1a a la fuerza disgregadora (l1eikos), considcradajgualtnente
de."la e~fe~~~1g~n¿[a--déh ig~ald;d--p;;i~~t:';"¡i'~I-"ser'--ell-'iodás .sus extensa y corpórea, y supuesta probabletnente, en éste su exilio, dispues-
p~rtes, "venía a lilnifaral-cii[c' .(On ....cl . íñisilio .• il0tivO . idcal de su la cOlno corona envolvente en torno a la esfera misma. Pero como en
homog~exteñsTon-aimTlaJ~~7-'-y-'.de'-' ~sta-.'sltcrte era conducid~ < en la representación de la fase cóstnica de la esfera, el lnotivo de la infi-
eVidente contraste con éf-aJeli'.r7¡Úi: ttinfinito" ya usado) a declararlo nitud contradecía aquél de la lilnitac'ión, así también no sólo en la
ollk ate/él/teton: "no inculnplido" y tatnbién leleleJlnénOl1 Pdl1lólbel1: representación de la opucsta fase, de la expulsión de la pbilía: "atrac-
"cumplido en toda parte", y a fijarle un H.nite extreJno (péiras /Ji1JJet.
ciertos puntos, abandonarse a la tentación de eludir las dificultades, explicando
tOI1) y a encerrarlo dentro de los vínculos del lí.nite (/Jéirdlos en deJIlloi- detta~ contradicciones como oscilaciones, .nás o nlenos inconscientes, de una
sin):8 a raíz de lo cual Jnás larde Arislülelcs pudo considerarlo en f anlnsfn l'(}élic~; pel'O, COIllO ya para JClllH anes, se les puedc hallar talnbién
antítesis resuelta con Melisa en lo relativo a la extensión del ente, de- una solución, a condición de plantear prilnerarnente su problema.
clarado por Pannénides peIJel'tt..fIJlé11011 (finito), y por lvlcliso (í/Jeíroll Así por cjemplo hay cn I~mpédocJes un problema relativo al espacio. Algunos
(infinito) .1) de sus fragl11clitos (DII~tS, D 13 Y 14) niegan Ja existencia del vacío en el
universo: .'no existe nada vacío en eJ todo".3 Pero cuando, por' influencia órfica,
~ero la excesivatnente franca defini.ciQQ_ aristotélica tniraba en este él hace al (OSlnos abollado en (onna de huevo (cfr. AECIO, 11, 31, 4; en DIELS,
caso sólo a la externa apariencia y no al íntit~~.;~tivo '-~í;-'ia"conccpción 214 == 311\ A, 50) , ¿qué resulta deJespacio otra vez todo igualnlente Heno de
annenidea, motivo que era sin -emf5áfgo tafi--fuetlé"cii 'sí ínlStll0 'P"~le la ejfe,.a infinita? TANNEnv (o/J. cit., 21) cd., 327) dice que allí se ha colocado
el l1eíkoJ (odio) cxpulsado del COS'll0S: l'lcro esta expulsión se efectúa en cambio
poco espués Etnpédocles, retornando de Pannénides y haciendo suya
en el período de la esfera y no en el del huevo. Y este huevo o cos.nos o
la concepción de la es/era, igual en cada una de sus partes y sola existen- cielo, sabenlos por ARISTÓTELES (De coe/o, 1I, 13, 295 a) que es hecho rodar
te, era . llevado a declararla explícitatnente "infinita en cada parte": féípidatnentc (lo que irnpide precisarnentc la caída de Ja tierra); ¿pero su ro ..
"Pero la Esfera, redonda, igual consigo tnistna en todas sus partes tación no supone rtcaso un espacio en e~ cual cutnpJirse, tanto ,nás debido
y absoll1ta1Jlel1/e infinita goza de su soledad en toJo su alrededor." b 10 ~1 la irrcgula.ri<.1a<.1de la {orina? Nos responde FILÓN, de pI'ot!id., JI, 60, p.86
(en DIELS, 21" == 31!1 A, 49): "coelurn fortnahun quod io latissimo spatio cir.
6 Cfr. DI~tS, ) S4 == 2St; B, frag. R, v. 4. curnfetclxttut": (el ricio fOl"ln:1llo, que era llevado en rotación en el espacio
7 Stlldi 1111/' eJeliJ1JlO, p. 28. alllplísirno); donde sería reproducida enteranlente la representación órfica del
8 Frag. 8, vv, 31 sigo y 42 sigo hucvo rotlante en la inllH.'nsidrt<.l de la vor.tgine. Y por otra parte, cuando en
o FÍJica, 1, 2, 185; IHela/ÍJicd, 1, 5, 986. la lucha entrc /J/;ilíc1 y ,uikoJ una de Jas dos fuerzas es vencida, resulta expul-
10 Cfr. DIELS, 21 == 31& B, 28. TANNERY (1'0"" I'IJÍJI. de la JCiel1Ce IJel/ene,' sada de la .naS,l de los elerllcntos (dija Ión: frag. 17, v. 19); y no erróneamente
4
129) afirma que tanto Par'nénides COlno Etnpédoclcs habían negado la infini- BIGNONE (Eml'cdocle, pp. 223,236 Y 405) supone que llegue a formar una corona
tud: el primero con un preciso desarrollo de la tesis; el segundo bajo un velo esférica en torno a la IlHtSa de los elernentos lnismos, por unidos o separados que
de fórrnuJas poéticas (en las cuales tornaría parte tatnhién el uso del término est('n entre sí. A all,íloga representación recúrría ya TANNERY, cuando decía del
a/Jeirona, cuyo sentido seda en él tan V3g0 cuanto Jo era en I-Io.ncro) tan os. l1cik.oJ: "on ne peut des lors se le représenter que comme enveloppant ceJui-ci (Je
curo, que arrastr6 a engaño tarnbién .a Aristóteles; l)cro en. realidad E.npédoclcs ~pherus) d'uf1e couche vidc de tout élément corporel't (p. 319); pero al decir
habla considerado Ja cuestión ya definida por Patnlénides. (~lIe est~ opinj6n, esto y :tI asegurar quc este en\'olvilniento debe ser finito, pues Empédocles no
aceptada plcnatnentc por CovorJ'l (Le leo,.ie dcllo J/Jdzio ece., 23) Y en buella l"otlceb':t espado illfinitct, Tanllcry olvida ya las negaciones etnpcdodeanas del
parte tatnbién por DURNET (Eady Greek l'bi/OJo/J!Jy, ~ 106), exij~ rcservas y vado, ya la nfirmacibtl de la es( cra inf ini/tl. De todos Ill()dos es cierto que para
revisiones, ya lo he'Dos visto eolo que respecta a Pannénides. Pero t~,nbién adrllilir que la fucrza expulsada llegue a constituir una esfera envolvente, es
para EmpédocJes se procede de.nasiado de prisa al declarado sintnás corno un rllcncster admitir talllhién tina exten5ión espacial externa a su disposición, tanto'
asertor de la limitaci6n, no sólo del COSI110S,sino de toda la realidad universal. rlltÍs cuanto que a estas fucrzas les es atribuída naturaleza corpórea y extensión.
Hay en la cosrnología. de Ernpédocles toda una serie de ptoh1crl1as cuya soluci6n Ahora hien, en lo que rc~pccta a éstrt, es sin crnbargo dudoso si las expresiones
no puede ser tan fácil y excnta de cautela ctítica. Poddase, sin etnba •.go, sobre t'lllpcdodcanas sobre su jguald;ld (cfr. frrtg. 17, vv. '9 - 20 Y 26), que apare.
I
EL lNrJNITO EN El. PENSAMH~NTO DE LA ANTIGÜEDAD CLÁSICA
LA nSrfRA INFINITA: PARMÉNIDES, EMPÉDOCLES, '~ENÓN 353
(IOn", no podía sjno ocurrir olro tanto; sino tIUc la'l1bién tl1 las fases
·
debía halla rsc SICfl1pre frente. a un reSll· t uo,
. . sIn• e 1 cual no podía alcanzar
intcnncdjas donde Elnpédoclcs colocaba la existcncia del COSU10S tll
a 1)ollerle lírnilc alguno. El ili.nitado li,nilantc, d~l cual habJ~ban 10 5
lonna de huevo, tlloviéndose en rápida rOlación, la litnibtci(')f) y el .no- « l SICln).. ,.' 1 re en. el seno mismo. b.'(e1
vitniento de este cosmos suponían sicIllpre fuera dc él atltl (l()lIella ,"litag{)ricos, resurgc '. por conslgulen'c
•
esfuerzo de cerrarla c01l1plelatnente en un lénllino conclusivo, la menle no eran" del lodo exentos de fundamcnto los testimonl~s de los oxo-
~rafos que haccn de Zenón, conjuntamcnte .co~ MelISO, un asert~~
dan oscuras aún para ARIST(')TELfS (De gene,.. (Ofrll/'I., 11, 6, 333 a), quieran
J l. · f.
<te a Jn Inl un't. J del
. S.
er-. Pues Zenón ha contribuido, al. menos, 1.a p. ,
significar que estas fuerzas tengan cada una de ellas dirnensioncs iguales a la
masa de cada uno de los eJenlentos, o de su stt.na, o iguales s610entre una ncr cn claro los dos procesos por os 1 cuales
, se obtiene la conc
, dUSlond'
y otra fuerza (y la expresión aplicada a la arnistad, luego, "igual en I"rofundilJall de la in finita extensión, ya por vía de a.gregados e ya por vl,a de 11-
y atnpJitud",
siones propias);
podría ta.nbi<:n signHknr sola'llcnte equilibrio tlltrc sus di,nen.
pero, en todo <:aso, para ser expu IsaJas f tH.'ta de la ,"asa es
visilÍn.d ta infinita ~randeza por {IVISlon 1. · ., apa rece en la aporta• e u-a id'
cual ya sc ha hablado a prop{¡sito del cauce dado por Zenol~ a .esc
preciso tener donde colorar su extensión corp{>tca. 'Y <luiz,ís el posterior reingreso
progresivo de la fuerza expulsada pueda explicar el uso dc la palabra ,.,.e(ió bri,nicnlo dc lo infinitesilllal, en aquella parte de la antlnotnt~ de
(éllxelhe), aplicada al lHo<.:eso cós.nico (cfr. frag. 17, v. 16, 32). Para hacer la . infinita
. . ..
grandeza-Inrllllta ~ d c lo múltiple
pequenez . .'.. que ITIUcstra como,r
concordar entre sí a estos puntos discordantes no hay .n.ís <]ue recurrir a Jos para admitir la multiplicidad en el ser, es nccesano atnhUl; a sus p~.
testitnonios de AECIO, J, 5, 2 en DIELS, 21" == 31~ A, 47) corroborados por FII.ÓN. tcs wandeza y espesor, al mismo tiempo que destacarlas. as una~ e
de '/JrotJid., 1, 22 (en Doxogr. gr., 291 ).Dice AnClO: "Ernpédocles admite un
]r1~ altas.' y 1"lor esta raZ(')ll, conferirle realidad, es deCJr gran ez~,
solo Inundo, que no es el todo, sino sólo una p<:quefia parte del todo: el leslo (1." ( • , 1 • • P ede repetir
es materia no utilizada" (a,.gel1: BIGNONE, de quien saco la traducción, traduce espesor y relieve latnbién al intervalo diVisor, e que se u
i1Je1'le por afinidad con la expresión filoniana: "reliquurn vero inertes Jnatcriac'.).
. • . 1 ue dice Calogero tiene
Por consiguiente el JlJu'ndo finito no es todo: f llera de él hay otro espacio, 12S,,,di J,'¡/'('/c,t'ÍJmo, p. 57. ~fl (~,n~entllnlento ~, o ~neral "el razonamiento
pero en este espacio, frente al cual el Inundo es sin elllbargo para Elllpédoclcs un Ií'llitc en la rc~('r\'n que hngo relativa a la expre~lon g, . 1 Y (ons
pequeña cosa, hay aún Jnateria y no vacío. ¿Pefo no es ésta, todavía y sic.npre, (/o~o.r) nfltiguo", ni cunl Cafogeto atri.buye (Onl0 C3.c act er. Unne.lsve~:moresu1t~
la concepción milesiana y pitagórica' del tÍ/Jeil'Ol1 /Jeriéiol1, que es inJudablclnentc tMlte aqucllo que pertenece so, f° a a 19unas . de sus manl r es tactO ,
espacio, JllaS no puro vado, sino Inás bien todo pleno de 11lateria jndifcrcnciada de todo In que hemos venido diciendo. , p ,.¿ t 28 b. "ha
todavía o J11,lSsutil? 1:l Que ~elt ohr:t ,uvenl
. .1 d e Z'.enon, r esulta
~. de PI: A'fON
.. ' M r es, d' \ I abetla
at'1'Zelll .
11 Cfr. la nota pfccet1ente. !'iJo e~(tita por rn[ cuando joven"; 4 por consiguiente e ISO po la 1
conocido.
I
-. --(\o - .
~~ .
, • ~~"'I I •• ••
354 EL INFINITO EN EL PENSAMIENTO DE lA ANTIGÜEDAD CJ.ÁStCA
<lue esto conduzca a la disolucj{)t1 del clcatislllo, tic no <Iucrer alribuir b aAA' 8' yE 1lÚVTOOe:V io'oc; <Éoi> Kat 1TÓlJ1TaV <ÍTf£ípwv
la mislna condición y {unción talnbién a l\tleliso, por el hecho Je haber Lq>oipoC; KUKAOTEP~c; J-lovílll 1TEptllyÉt yaíwv.
detnostracIo talnbién él, que el atributo de la infinitud resulta necesa- e anElpov KOTCx 1Tpóo8EOIV.
riamente intrínseco a la unidad del ente elerno. d KOTCx olaipEolv.
La argutllenlación zenoniana disuelve precisatnenle la finitud de Jo e nav yap av EV TIVI 'TO OE EV TIVI Kat lv ,.ónCt'.
Ka, TOUTO Én' anElpov. .
uno, mostrando la ineluctabilidad del proceso infinito de superación
de todo lín1ite: ineluctabilidad que se presenta en el acto .niSI110 en el
cual se intente fijar el lítnite y dentro de él encerrar al cnte.
NOTAS
Pero se ha visto talnbién que' tal dinarnismo estaba i.nplícito ya en
Parménides; y de él «(01110 ya hemos señalado al hablar de la infinihHl
1 OUOE OIOIPETÓV ÉUT'V, EnEI nCxv ÉUTIV o JlOlov.
tetnporal) totna su curso l\1eliso, sobre el cual puJo tanlbién, por otra
ovó€. TI Tí] f.IO:Aj,ov, TÓ KEV dpyOl IlIV OUVÉX~080I,
parte, haber ejercido una acción estitnuladora la poléJnica juvenil de
otiBÉ. TI .XElpÓTEPOV, 1Tav o' ÉJlTTAEÓV laTIV ÉOVTOc;.
Zenón, con los problcJnas que planteaba y con las soluciones <IuC para
ellos venía it~directaJl1cnle a exigir. nav tOTIV' ÉOV yap ÉÓVTt nEAá~EI~
TWI OUVEXEc;
2 I1Eooó8EV IOOlTOAEC:;lTá~T'11. TO ,yap oún:~ 'fl" JlE~~OV
OÜ1"ETI 60lÓTEPOV 1TEAEvat XPEOV laTl T'1t 11 :'1t•
OÚTE yap OUK ÉOV EUTI, TÓ KEV iTOÚOI Jl'V lKve:to8at
(ir QUÓV OÚT' ÉÓV Éu,.,v onwc; Elll KEV lÓVTOc;
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'T~I JlO:AAOV 'T~I fY ~UUOV, ÉTfEI nav ÉU'T1V oou OVo